La pasión como motor de creatividad en los negocios. Sección: Somos Big Bang Subsección: Nuestra inspiración Palabras claves utilizadas: emprendimiento, creatividad

Generalmente se entiende por Creatividad como la capacidad o facilidad para inventar y crear. En este aspecto se puede citar a Osborn, quien afirmaba que la creatividad es la “aptitud para representar, prever y conducir ideas”. Muchas personas relacionan la Creatividad con el arte. Para Ausubel, una persona creativa puede distinguir a un individuo por la originalidad de sus aportes a la ciencia, al arte, a la filosofía, a los negocios y al mundo. La creatividad aplicada en los negocios nos brinda la oportunidad de destacar nuestro emprendimiento de la competencia, así como también nos permite transitar el camino hacia el éxito en los negocios. Para que se desarrolle la creatividad es importante un motor, el cual es la pasión por todo lo que uno hace. Cuando hablamos de pasión, nos referimos a un sentimiento fuerte hacia un pasatiempo o afición a una actividad. Muchas veces creemos que “pasión” es sinónimo de “fanatismo”, lo cual connota a lo negativo. Pero no debería ser así. La pasión es una sensación de libertad, la cual le permite al individuo luchar día a día para lograr sus objetivos y alcanzar su bienestar. En el ámbito laboral, la pasión actúa como motor de la creatividad en los negocios. Se ha visto que los problemas laborales requieren de soluciones alternativas para resolverlos. La pasión por lo que uno hace es el que le permite al emprendedor desarrollarse profesional y personalmente para satisfacer las necesidades de los clientes de forma profesional y creativa.

Existe una frase, atribuida a Confucio, que dice: “Escoge un trabajo que te guste y nunca tendrás que trabajar ni un solo día de tu vida”. Esta frase suena utópica para muchos, pero para un emprendedor con sentimientos de pasión, es una realidad. Soluciones creativas a los problemas de emprendedores

Para Howard Garner, una persona creativa es aquella que resuelve problemas, elabora productos o define preguntas sobre cualquier tema relacionado a su emprendimiento. Siguiendo con el concepto, se puede hablar sobre las soluciones creativas a los problemas, que se dan cuando las personas se dedican a una actividad por placer y no por el hecho de recibir una recompensa. En este aspecto, se puede decir que las soluciones creativas se conforman por tres elementos: El primero es el individuo, el que se asume está seguro de sí mismo. El segundo es el trabajo, que alude a las disciplinas en las cuales el individuo trabaja. Y por último está el entorno, es decir todas las personas que interactúan con el individuo y sirven para generar respuestas a los problemas de cada emprendimiento. En el ámbito de los negocios, las soluciones creativas deben contemplar estos escenarios para plantear diversos conflictos, desde cómo atraer potenciales clientes hasta cómo avanzar con un emprendimiento. Así, al ser resuelto los problemas, generan resultados positivos.

Motivaciones para emprender La aplicación de la creatividad se ha enfocado desde diversas perspectivas, dirigiéndose principalmente en el individuo y su manera de resolver problemas. Para Robert J. Stenberg, un creativo está fuertemente ligado a la motivación intrínseca por la actividad. Es decir, es el motivo interno que todo emprendedor siente por su emprendimiento.

Tanto Stenberg como otros teóricos de la creatividad, la motivación surgida del interior, es la que influenciará de forma positiva en el proceso creativo de cualquier emprendimiento. Ésta se conforma por muchos factores, como el conocimiento sobre el tema, las habilidades técnicas, las habilidades cognitivas innatas, la actitud hacia las tareas, entre otros. Todo emprendimiento inicia con una motivación interna. Tal es el caso de Whole Mackey, creador de la empresa de alimentos “Whole Foods”. Para él, su motivación fue el de ayudar a las personas a llevar una alimentación más saludable. Esto lo llevó a proponer opciones saludables a los ya conocidos locales de comida rápida, así como la pasión por el cuidado del medio ambiente y el mejoramiento de la salud. Gracias a esa motivación, su negocio prosperó y actualmente cuenta con más de 270 sucursales en EEUU, Canadá e Inglaterra.

Los componentes básicos de la creatividad La psicóloga Teresa Amabile, en base a los estudios de Garner y Stenberg, menciona tres componentes básicos de la creatividad. La primera es la destreza relevante para el campo, el cual se refiere al manejo y dominio de aquello que nos tildan de profesionales. Este componente incluye conocimiento, habilidades técnicas y “talento” especial en el emprendedor. Para que la destreza sea posible, es necesario que se desarrollen las habilidades cognitivas innatas y la pasión por el estudio y capacitación constante. La segunda es la destreza relevante para la creatividad, que resalta la habilidad de estrategia. Esto incluye un estilo cognitivo apropiado, el conocimiento implícito o explícito para la generación de nuevas ideas y el estilo de trabajo conducente. Para lograr esta destreza, el emprendedor requiere de entrenamiento, experiencia en generación de ideas y mucha personalidad. La tercera es la motivación para la tarea, el cual pueden ser intrínsecas y extrínsecas. Esto incluye la actitud que el emprendedor tiene hacia las tareas y las percepciones sobre la propia motivación para emprender dicha tarea. Para alimentar la motivación se requiere de habilidades cognitivas individuales para minimizar los constreñimientos externos. Cada emprendimiento suele generarse en base a estos tres componentes. Si se tiene conocimiento sobre el funcionamiento de cada negocio, se puede analizar cuál es el nicho del mercado de una zona con potencial económico. Así como también ofrecer alternativas creativas a lo ya popularmente conocido.

La pasión por emprender

Trabajar en tu vocación es posible. Se requiere de mucha perseverancia y amor a la profesión. Todo emprendimiento requiere de tiempo y dinero, por lo que al inicio puede generar sentimientos de frustración por no obtener los resultados esperados. Para eliminar dichos sentimientos, lo ideal es elaborar una buena estrategia para mejorar la imagen del emprendedor. Y ahí es cuando toma relevancia el papel del diseñador, quien realiza el estudio de una empresa o profesional independiente y, en base a eso, desarrolla estrategias para solucionar problemas e incentivar la creatividad en los negocios. El diseñador posee las habilidades necesarias para lograr un gran impacto en la marca del producto o servicio. Pero antes debe investigar sobre el problema de la marca. ¿Cómo revelar su identidad? ¿Qué imagen desean reflejar a los clientes? ¿Confianza? ¿Innovación? ¿Desean transmitir un mensaje positivo a la audiencia? Para tener una idea de cómo algunos emprendimientos lograron un gran impacto con su marca, les invitamos a visitar nuestra galería Una vez realizada la investigación, queda el proceso creativo de la identidad de la marca. En este proceso realiza diferentes caminos, diseña varias propuestas y, a través de consensos, llega al producto final. Se vale del estudio del color, forma, composición y lenguaje visual. Para que esto sea posible, es necesario seguir unos pasos que ayuden a que el emprendimiento logre destacar de la competencia. Si desea saber cómo trabajamos, haz clic aquí En el aspecto psicológico, una marca puede decir mucho del profesional o la empresa. Cada uno posee su propia visión y está orientado a cierto rubro, por lo que requiere de un trabajo multidisciplinario. De esta forma, en Big Bang Logo nos aseguramos de generar propuestas originales y de gran calidad, así como versatilidad en nuestros servicios y propuestas.