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POLITICA
I
Domingo 18 de abril de 2010
INVESTIGACION s EL PATRIMONIO DEL EX SECRETARIO DE TRANSPORTE
Dos abogados que no les temen a las polémicas
Jaime: el avión está en Florida Continuación de la Pág. 1, Col. 1 fiscal de Investigaciones Administrativas Manuel Garrido lo denunció por viajar dentro y fuera del país en aeronaves alquiladas, pagadas por empresas de transporte a las que debía controlar. Hay una causa judicial abierta por esto, en la que el juez federal Claudio Bonadío analiza procesar esta semana a Jaime. LA NACION reveló en marzo del año pasado que el ex secretario de Transporte viajaba con frecuencia entre Buenos Aires y Córdoba en el Lear Jet 31 A y que lo usaba como si fuera de él. El fiscal Carlos Róvilo y el juez Oyarbide investigaron el avión, que fue adquirido en Miami. La compra la hizo la empresa Pegasus Equity Investments, a través de Elckrest, financiados por el Banco de Utah. Pegasus tiene sede en Costa Rica. En los papeles, su presidente es un obrero que gana 400 dólares por mes. Se trata de Edgar Antonio Rosales Rodríguez, según confirmó él mismo cuando LA NACION lo ubicó por teléfono. Pero el abogado de Pegasus, Ignacio Esquivel Seevers, explicó que la empresa pertenece a un grupo europeo que es dueño de la empresa Celularstar. Esa firma opera en distintos países de América latina, incluida la Argentina. Sería Cyaes, cuyo “presidente internacional” es Manuel Vázquez, el ex asesor de Jaime en la Secretaría de Transporte de la Nación. “En el momento de la venta de la sociedad [por Pegasus], los nuevos dueños [por Celularstar] nombran como apoderados generalísimos sin límite de suma a los señores Julián Vázquez y Marta Margarita Domínguez, vecinos de Buenos Aires. Posteriormente, proceden a adquirir un avión Lear Jet”, expuso. Julián Vázquez es el hijo de Manuel Vázquez. El correo electrónico de Pegasus es
[email protected]. ar y está a nombre de Marta Vázquez, que vive en Acassuso, supuestamente la esposa del ex asesor de Jaime. Manuel Vázquez es un ciudadano español ligado a una empresa de ese país dedicada a la comercialización de tecnología de comunicaciones. Fueron Julián y Manuel Vázquez quienes trajeron la aeronave a la Argentina el 7 de febrero de 2009, alquilaron el hangar, se ocuparon del mantenimiento, les pagaron a los pilotos que condujeron la aeronave hasta aquí y hasta se hicieron cargo del combustible. El aparato, cuando estalló el escándalo, voló a Montevideo, donde estuvo hasta que se venció el plazo legal de estada en el aeropuerto de Carrasco. Estuvo a punto de ser embargado la noche del 25 de septiembre de 2009. La aeronave estaba en un hangar de mantenimiento de la Fuerza Aérea, por el que pagaba 1500 dólares por mes de alquiler. Había llegado por primera vez a Uruguay el 1° de marzo de 2009, pero luego tuvo otros cinco vuelos durante el año fuera de Uruguay. Su último viaje había sido el 5 de agosto del año pasado y el plan de vuelo era Montevideo-San Pablo-Montevideo. Al filo del plazo vencido, el avión decoló hacia Río de Janeiro, sólo con la tripulación, y luego viajó a los Estados Unidos, donde lo encontró LA NACION la semana pasada. La aeronave está radicada en los Estados Unidos y ése fue un problema para explotarla comercialmente como taxi aéreo en la Argentina, porque sólo podía estar en el país un tiempo, gozando de un permiso de ingreso temporario. Vázquez, para el juez Oyarbide, está vinculado con la empresa Delome, que para el juzgado está ligada a allegados a Jaime o es de su propiedad. Por eso el juez entendió que la aeronave debía ser incautada.
Son Marutian y Brito, defensores de Jaime
Ricardo Jaime eligió a dos abogados acostumbrados a las polémicas para que lo representen en las dos causas judiciales mas calientes que tiene en los tribunales federales de Comodoro Py 2002, en Retiro. Su abogado histórico de la Secretaría de Transporte y de mayor confianza es Andrés Marutian, un penalista que fue defensor del ex general Roberto Viola durante el juicio a las juntas militares. Allí, en 1985, se le escucharon definiciones como “en la guerra no existe represión, sino combate; el que no mata muere y el que no pelea, fenece”. Viola fue condenado y luego indultado, cuando Marutian era funcionario del gobierno de quien firmó ese indulto: Carlos Menem. Se desempeñó en el Ministerio de Justicia, donde estuvo a cargo de la Secretaría de Asuntos Legislativos y luego de la Secretaría de Política Penitenciaria, durante la gestión de Elías Jassan. El ministro se tuvo que ir cuando la prensa reveló sus contactos con el empresario Alfredo Yabrán. Hoy recuerda a Menem con numerosas fotos del ex presidente en su estudio. En 1996, Marutian pasó a la Secretaría de Transporte, donde sobrevivió el menemismo. Su socio es Armando Canosa, que fue secretario del área. Ambos se dedicaron a aconsejar a Ricardo Jaime cuando llegó al cargo con Néstor Kirchner. Ahora, comparte estudio con su hijo y con Canosa. Entre sus clientes se cuentan Antonio Mata, el empresario que condujo Aerolíneas Argentinas y fundó Air Pampas, que está a la espera de autorización para volar.
Mediático
Para reforzar su equipo de abogados, Jaime eligió un profesional de su pago: el cordobés Marcelo Brito, un penalista muy conocido por su fama de asumir casos pesados que terminan siempre demasiado enredados. Su último cliente fue el ex juez federal de Zárate-Campana Federico Faggionatto Márquez, que se mantuvo en su cargo protegido por el kirchnerismo, hasta que fue destituido en un juicio político el 25 de marzo pasado. Brito, cuyos servicios se hacen valer, no les teme a las causas mediáticas: asumió la representación de Facundo Macarrón y de su padre, Marcelo, nada menos que por el crimen de su esposa Nora Dalmasso, asesinada en un country de Córdoba. El asesinato está sumergido en un profundo misterio y padre e hijo están en libertad. Brito, con estudio frente al Superior Tribunal de Justicia de Córdoba, fue fiscal general de la provincia durante la gestión de Juan Manuel de la Sota.
FOTOS DE ZAYRA MO
El hangar 2, de la firma Precision Jet Service, en el aeropuerto de Stuart, Florida, aloja el Lear Jet que usaba Ricardo Jaime
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Por la puerta del hangar puede apreciarse la matrícula del avión: N786YA
Delome SA, la empresa del misterio El juez no puede ubicar a la firma vinculada al ex funcionario y que participa en medios de Córdoba MARCELO VENERANDA LA NACION La empresa Delome SA estuvo en todos lados y no está en ninguna parte. Pagó vuelos al exterior del ex secretario de Transporte Ricardo Jaime, le compró un departamento a su mujer, Silvia Reyss –para luego cedérselo a su hija–, y tiene a su nombre la cédula verde de un vehículo que se le atribuye al ex funcionario, al igual que la radio LV2 de Córdoba, que adquirió antes de las últimas elecciones. Pero ni el juez federal Norberto Oyarbide, que investiga el crecimiento patrimonial de Jaime, ni la jueza cordobesa Verónica Martínez de Petrazzini, que entiende en la quiebra de LV2, pudieron ubicar un domicilio real de Delome o de su presidente, Ignacio Julián Soba Rojo. Tampoco lo consiguió el secretario de Trabajo de Córdoba, Omar Sereno, que en febrero amagó con obligar a comparecer al directivo con la fuerza pública. Las citaciones judiciales se amon-
tonan en el buzón del departamento 9, segundo piso, de Medrano 651, donde Delome fijó su domicilio social en Buenos Aires. Pero allí habita una mujer que dijo no saber nada de la empresa. “Hace ocho años que recibimos citaciones, pero acá nunca existió Delome”, sostuvo el encargado del edificio. “Hace más de 15 años que el ingeniero Soba no pisa por acá”, se sorprendieron en el 8° piso de Cerrito 260, donde Soba Rojo y Oscar Katz radicaron una vieja sociedad, Olifants. Antiguos vecinos recordaron que junto con ellos trabajó Juan Carlos Delconte, administrador nacional de Aduanas durante la gestión alfonsinista, que fue condenado a prisión por contrabando agravado. En el lugar todavía se conservan facturas telefónicas impagas y cuentas del banco Velox. Los oficios enviados por el gobierno de Córdoba se perdieron en el 8° piso de Santa Fe 1443, donde Soba Rojo declaró su domicilio particular. Pero hace más de un año que el ingeniero se mudó a un departamento
del 9° piso de Paraná 1045. Queda a sólo unos metros de su viejo hogar, pero lejos de las molestas citaciones judiciales. También dejó de frecuentar la parroquia San Nicolás de Bari, en Santa Fe 1352, donde dirigía y animaba el Grupo Círculo Bíblico, según consta en la pagina web de la institución. “Ya no pasa por aquí, quizás empiecen a juntarse más adelante”, indicó la secretaria parroquial.
Emprendedor octogenario LA NACION intentó comunicarse durante toda la semana con Soba Rojo y le dejó mensajes en su nuevo domicilio. No son pocas las conexiones sin explicar entre Delome y Jaime. Por caso, la empresa pagó vuelos que el ex secretario realizó al exterior a través de la firma Mac Air y figura como titular de la cédula verde de un Toyota Corolla, secuestrada en el departamento de la Avenida del Libertador 654, piso 12, que alquila el ex funcionario. Además de la adquisición de la radio LV2 AM 970 al Grupo Uno en
marzo de 2009, Delome le compró a la mujer de Jaime un departamento en Córdoba, pero lo cedió a su hija, Agostina Jayo, que todavía figura como titular de la escritura en el contrato de alquiler. Para Oyarbide no sólo se trataría de una venta simulada, sino que Delome sería utilizada por Jaime o su entorno “como pantalla para ocultar la verdadera propiedad de sus bienes”. Bajo reserva, fuentes vinculadas con la empresa indicaron que sus únicos socios son Soba Rojo y Katz, aunque no pudieron explicar el interés de los empresarios por los vuelos de Jaime o los medios cordobeses. “Jaime no tiene nada que ver con Delome”, sostuvo, por su parte, el abogado Marcelo Guitman, que aseguró haber sido contratado personalmente por Soba Rojo para atender el expediente de la quiebra de LV2. Con todo, consignó que recibe sus instrucciones a través de correos electrónicos y mensajes de celular. Pero no aclaró si se los envía Soba Rojo, que tiene 82 años.
“No le respondo al periodismo” El ex funcionario Ricardo Jaime insistió ayer en su denuncia de una persecución mediática y se negó a responder sobre su patrimonio, en un reportaje con radio Rivadavia: “La Justicia no me ha requerido sobre qué bienes yo tengo que responder. Si hablo, le estaría respondiendo al periodismo”, dijo.
