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ESPECTACULOS
I
Jueves 15 de marzo de 2012
((((( BUENA
((((( MUY BUENA
CINE
CINE
Los efectos digitales puestos al servicio del cine experimental GITANO FILMS
DRAMA
Enter the Void ENTER THE VOID (FRANCIA , ALEMANIA, ITALIA, CANADA/2009) L DIRECCION:
L
DISTRIBUTION COMPANY
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Simon Baker y Demi Moore, entre las estelares figuras que encabezan este elenco DRAMA
El precio de la codicia Un guión inteligente sobre los excesos y los abusos de las corporaciones financieras
Realizada con un presupuesto irrisorio (poco más de tres millones de dólares) para los actuales estándares del cine norteamericano, esta ópera prima del guionista y director J. C. Chandor contó con un elenco impresionante: Kevin Spacey, Jeremy Irons, Paul Bettany, Zachary Quinto, Stanley Tucci, Demi Moore, Simon Baker y Mary McDonnell. Los salarios habituales de estas figuras multiplicarían por cinco o por diez el costo final de la producción, pero todos ellos apostaron al proyecto cobrando cifras simbólicas. Queda claro, entonces, que para sus actores era una película “im-
portante” y –más allá del costado de corrección política que tiene esta historia que denuncia los excesos y abusos de las corporaciones financieras durante la crisis de 2008– se entiende semejante entusiasmo. Estrenada en la competencia oficial del Festival de Berlín del año último, tuvo varios meses después una recompensa inesperada: una nominación al Oscar al mejor guión original. Toda una proeza para un escritor y realizador casi sin antecedentes en la industria. El precio de la codicia narra 24 horas cruciales en las actividades de una poderosa corporación
financiera –bastante parecida a Lehman Brothers– que está al borde del colapso y cómo sus empleados deben afrontar (y ser parte de) una acción desesperada por parte de los dueños para salvarla de la quiebra, sin importar las consecuencias que desaten en el sistema tras el inevitable efecto dominó. En este sentido, el film no sólo expone con crudeza la operatoria salvaje de estos grupos económicos sino también sus implicancias humanas y hasta morales. Entre un clásico como Wall Street y el cine de David Mamet (los filosos diálogos remiten, por ejemplo, a films
como El precio de la ambición), la película de Chandor se sostiene en buena parte gracias a la ductilidad y convicción de sus actores y a la tensión que le imprime el director, quien construye con paciencia y rigor una estructura de thriller, aunque en algunos pasajes asoma el subrayado a la hora de exponer la falta de escrúpulos y el cinismo que imperan en el sector. Más allá de esos desniveles o de ciertas caracterizaciones un poco obvias (el ejecutivo desalmado que ama a su perro hasta el final), El precio de la codicia resulta una bienvenida rareza. Una película que desnuda con inteligencia y valentía, sin jamás degradar a la historia ni al espectador, las contradicciones y miserias de estos tiempos.
Diego Batlle
Con sus dos películas anteriores, Solo contra todos e Irreversible, el director franco-argentino Gaspar Noé nos demostró que lo suyo no son las sutilezas, ni las medias tintas, que su cine es indivisible de la provocación que generan sus relatos que tarde o temprano probarán los límites de lo tolerable para el espectador. Claro que más allá de la impresión que puedan causar algunas de sus imágenes –aquí un repetitivo pasaje dónde se ve en detalle dos cuerpos destrozados por un accidente automovilístico–, Noé también impresiona por su capacidad para transformar un film en una experiencia sensorial bastante alejada del cine convencional. De hecho, Enter the Void poco tiene de narrativa tradicional, apenas un par de apuntes sobre la historia de Oscar (Nathaniel Brown), un joven dealer que vive en Tokio junto a su hermana Linda (Paz de la Huerta), y con el que el espectador compartirá el punto de vista desde el comienzo de los, por momentos, tortuosos 161 minutos de película. Todo empieza con una escena de títulos fascinante, atractiva hasta lo hipnótico, un bombardeo de imágenes y música que apelan a un estado de consciencia alterado que se derramará por todo el film.
Una imaginería alucinante y alucinada creada gracias a unos efectos digitales que separan al film de la media. Lo mismo que la insistencia en la perspectiva subjetiva de la cámara que oculta al protagonista, ese que busca drogas como negocio y para su consumo personal por unas calles de Tokio que parecen –a veces son– maquetas imaginadas por un arquitecto en pleno viaje provocado por los mismos alucinógenos químicos que Oscar codicia. Obsesionado con el Libro de los muertos tibetano, suerte de guía para los muertos en su camino a la reencarnación, el personaje central emprenderá un recorrido en el que el pasado, el presente y los futuros posibles se superpondrán para crear una percepción tan artificial como visualmente atractiva. Los vuelos rasantes de la cámara sobre un Tokio estallado de neón hablan del virtuoso ojo del director que se regodea tanto en ellos como en las explícitas imágenes de un aborto filmado en sanguinoliento detalle. El sexo, la marginalidad, la familia y la espiritualidad comparten el espacio no apto para los impresionables que crea Noé. Una obra entre lo experimental y lo repulsivo, dos cuestiones que el director parece no querer distinguir.
Natalia Trzenko
((((( REGULAR CINE
Agentes secretos enamoradizos
FOX
EL PRECIO DE LA CODICIA: (MARGIN CALL, ESTADOS UNIDOS 2011) L GUION Y DIRECCION: J. C. CHANDOR LFOTOGRAFIA: FRANK DEMARCO LMUSICA: NATHAN LARSON LEDICION: PETE BEAUDREAU L DISEÑO DE PRODUCCION: JOHN PAINO L ELENCO: KEVIN SPACEY, PAUL BETTANY, JEREMY IRONS, ZACHARY QUINTO, DEMI MOORE, STANLEY TUCCI, SIMON BAKER, MARY MCDONNELL L DISTRIBUIDORA: DISTRIBUTION COMPANY L DURACIÓN: 107 MINUTOS LCALIFICACIÓN: APTA PARA MAYORES DE 13 AÑOS L
GASPAR NOE L GUION: GASPAR NOE Y LUCILE HADZIHALILOVIC.L FOTOGRAFIA: BENOÎT DEBIE. L EDICION: MARC BOUCROT, GASPAR NOE Y JÉRÔME PESNEL L ELENCO: NATHANIEL BROWN, PAZ DE LA HUERTA Y CYRIL ROY L DISTRIBUIDORA: GITANO FILMS L DURACION: 161 MINUTOS L CALIFICACION: APTA PARA MAYORES DE 18 AÑOS CON RESERVAS
ACCION
Esto es guerra Dos amigos agentes de la CIA, tras la conquista de la misma mujer ESTO ES GUERRA (THIS MEANS WAR, EE.UU./2012, HABLADA EN INGLES) L DIRECCION: MCG L GUION: TIMOTHY DOWLING Y SIMON KINBERG, SOBRE UN ARGUMENTO DE DOWLING Y MARCUS GAUTESEN L ELENCO: REESE WITHERSPOON, CHRIS PINE, TOM HARDY, TIL SCHWEIGER, ANGELA BASSETT, CHELSEA HANDLER. L DISTRIBUDORA: FOX L DURACION: 96 MINUTOS L CALIFICACION: APTA PARA MAYORES DE 13 AÑOS
L
En Esto es guerra, Rheese Witherspoon, tal vez el mayor atractivo de la película para la porción de público que la encuentra irresistiblemente simpática, evalúa la calidad de todo tipo de productos (de hornos a teléfonos celulares) para una publicación de defensa del consumidor, tarea que desempeña en directo contacto con los presuntos compradores, que prueban y cuestionan personalmente defectos y carencias de los artefactos. Mucho le hubiera convenido al propio film contar con sus servicios antes de ser lanzado al mercado. De haberle aplicado sus conocimientos, difícilmente habría contado con el ok final. Primero, habría advertido que se trataba de vender un artículo de segunda mano –una historia mil veces contada– que no sólo fracasaba al querer disimular con el packaging la gastada y repetida fórmula, sino que tampoco proponía alguna ligera variación sobre la base de ingenio, frescura o brío, salvo que se considere como novedoso el hecho de que los dos galanes y amigos que
–otra vez– luchan entre sí para conquistar a la misma mujer, sean agentes secretos y que en la guerra en la que sin proponérselo se ven envueltos utilicen recursos propios de su profesión. El planteo es más o menos así; toda la habilidad que la chica emplea para desempeñar su profesión le falta para su vida sentimental: invariablemente elige el candidato equivocado. Por fortuna para ella (y no tanto para el film, que gana poco con la incorporación de Chelsea Handler) tiene una amiga tan fogosa como metereta que la inscribe en un programa de búsqueda de parejas en Internet, como consecuencia del cual iniciará no una sino dos relaciones paralelas, por supuesto con los dos amigos en cuestión. En principio todo va bien, porque ambos ignoran que la mujer de la que se han enamorado es la misma. Cuando lo descubren, pasan del dudoso pacto de caballeros al espionaje mutuo y más tarde a la guerra declarada. Ella es, claro, la última en enterarse: no es la inteligencia el rasgo que más subrayan en
las mujeres las comedias norteamericanas recientes. Mientras tanto, muy de vez en cuando, el film se acuerda de que Chris Pine y Tom Hardy son agentes de la CIA e intercala alguna escena de acción, con malvado incluido; mala idea, teniendo en cuenta las escasas condiciones que el director McG (el mismo de Los ángeles de Charlie) expone para esos menesteres. El cotejo entre los dos galanes (y las zancadillas que cada uno le tiende al otro) sirven para probar que la química de Witherspoon con uno y otro está igualmente ausente. Casi tan ausente como el encanto que los libretistas y el director buscaron extraer de una materia visiblemente escasa de ideas y de humor. Algunos chistes y algunas de las travesuras que ellos imaginaron apenas compensan. De lo demás sólo vale mencionar el brillo de la sonrisa de Witherspoon, la afectación de Pine y la sobriedad de Hardy. Muy poco.
Fernando López