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EXTERIOR

Sábado 10 de julio de 2010

PROTESTA SIN PRECEDENTE CONTRA LA LEY MORDAZA

El “apagón informativo” dejó a Italia sin noticias Diarios, radios, canales y sitios de Internet adhirieron a la medida ELISABETTA PIQUE CORRESPONSAL EN ITALIA ROMA.– Fue un país sin noticias ayer Italia, donde tuvo un enorme impacto el “apagón” informativo convocado por los periodistas del país para protestar en forma “extrema” contra la denominada ley mordaza, que limita las escuchas telefónicas y su publicación. Tal como se esperaba, de acuerdo con sus editores, los principales diarios de la península –el Corriere della Sera, La Repubblica, La Stampa, Il Sole 24 Ore, L’Unità, Avvenire, etcétera– no salieron a la calle. Y sólo Il Giornale, diario propiedad de la familia de Silvio Berlusconi, Libero e Il Tempo, periódicos afines a la derecha, aparecieron en los quioscos. La huelga convocada por la Federación Nacional de la Prensa Italiana, el principal sindicato de periodistas, tuvo un acatamiento masivo tanto en los medios gráficos como en las radios, los canales de televisión y la mayoría de los sitios web, que no actualizaron sus páginas de noticias durante toda la jornada. Para dar una idea de lo compacta que fue la protesta –la primera de este tipo en contra de una ley impulsada por el gobierno–, incluso los noticieros de Mediaset, la red televisiva de la que es dueño Berlusconi, se sumaron al silencio informativo en rechazo a la polémica norma. “Es una ley que niega a los ciudadanos el derecho a ser informados”, según explicaron los pocos periodistas que aparecieron para leer brevísimos boletines informativos. El canal Sky TG24, que transmite las 24 horas noticias, del magnate Rupert Murdoch, también se sumó a la huelga y pasó paquetes pregrabados y documentales a lo largo de toda la jornada. También quedó muda la agencia estatal de noticias ANSA, la mayor usina de noticias del país. Y los sitios de Internet de los principales diarios nunca se actualizaron, sino que se limitaron a explicar en detalle de qué se trata la ley sobre interceptaciones y por qué había que hacer algo “ruidoso”

AFP

Un quiosco sin diarios, en el centro de Roma en su contra. “El silencio puede parecer una contradicción ante una ley que limita la libertad de información, pero en realidad es un gesto de responsabilidad de los periodistas italianos para denunciar al gobierno”, indicó el diario La Repubblica, de centroizquierda, que desde hace meses encabeza la protesta contra la ley mordaza. La Repubblica ha lanzado la campaña del “post-it”, el papelito amarillo con la leyenda “la ley mordaza niega a los ciudadanos el derecho a ser informados”, que fue apareciendo al lado de todos los artículos que no podrían ser publicados de aprobarse la ley y que salió en su famosa portada vacía del 11 de junio último, al día siguiente de la aprobación del proyecto de ley por parte del Senado.

Prisión y multa La polémica norma prevé hasta dos meses de prisión para los periodistas y una multa que puede llegar a 464.700 euros (588.000 dólares) para los editores de diarios y medios audiovisuales que difundan escuchas telefónicas o grabaciones durante un proceso judicial. Además, limita el

uso de las escuchas telefónicas a un máximo de 75 días, prorrogables de tres en tres, una medida que para la magistratura italiana podría llegar a afectar dramáticamente la lucha contra la mafia y la corrupción. La ley de interceptaciones se ha convertido en una verdadera obsesión para Berlusconi. Hace exactamente un año se vio envuelto en un escándalo por haber pasado noches de fiesta con prostitutas que grabaron conversaciones de contenidos sexuales que, de aprobarse la ley mordaza, no podrían ser publicadas. El Cavaliere alega que se trata de una ley para defender la privacidad de los ciudadanos. Para la oposición, juristas, periodistas, editores, intelectuales y constitucionalistas, en cambio, se trata de un estratagema para acallar a la prensa y ocultar información comprometedora, en momentos en que los escándalos de personas del entorno de Berlusconi están a la orden del día. El gobierno pretende que Diputados comience a discutir el texto de la ley a fin de mes. Criticado incluso adentro de la coalición de gobierno, el proyecto podría sufrir cambios. Y, de aprobarse, podría ser vetado por el presidente, Giorgio Napolitano.