Cosas que pasan. Alberto: A Jesús: J Lorena: L Compradora: C La situaciones (escenas) que van precedidas por un "0." transcurren en el presente. El resto, es decir, la trama central, tiene lugar en el pasado, en forma de relato que el personaje principal, Alberto, va relatando a una posible compradora del piso. Situación #0.1 [Alberto, sentado en una mesa, delante de un café, contándole esta historia a una chica, posible compradora, sentada enfrente de él.] A: Pues sí, la verdad es que en este piso han ocurrido cosas muy interesantes y divertidas, y precisamente por ello me cuesta ponerlo en venta, pero el trabajo es el trabajo, y no puedo rechazar la plaza que me han concedido en Valencia. C: Interesantes y divertidas... Si no te importa y tienes tiempo, ¿me podrías contar alguna? Para ir empezando a coger cariño al piso... A: Sí, claro. Hace unos meses viviamos dos personas aquí, Jesús, mi mejor amigo y yo. Lo que te voy a contar es la razón del porque desde entonces vivo solo.No le he vuelto a ver. C: Vaya, ¿Tan fuerte fue? ¿Que pasó? A: Verás, un día, estábamos en casa los dos... Situación #1 [Alberto, viendo la televisión embobado, sin prestar atención a nada más. Se muestra un video musical bastante picante. Se escucha el timbre, coge su cerveza, la da un trago generoso y va a abrir la puerta. Al otro la de la puerta hay una chica bonita, sensual. Parece ser un amiga o algo así. Viste de manera provocativa.] A: ¿Hola, eres Lorena verdad? ¿Qué quieres? L: Sí, soy yo. Tu debes de ser Alberto. A: Si, así es, encantado. L: Igualmente. ¿Está por aquí Jesús? A: Pues la verdad es que no, ha salido hace un rato ya. L: ¿A donde ha ido, lo sabes? A: Creo que me dijo que a leer un rato al parque... [Flashback.1. Jesús cerca de la puerta de entrada, cogiendo su cartera y las llaves del recibidor. Alberto le observa unos pasos más atrás. J: Entonces, ¿No te vienes? A: No me apetece, empiezo a cansarme de ir siempre al mismo sitio. J: Si es por el dinero no te preocupes, yo invito. A: Que no, que no. J: Venga hombre, lo pasaremos bien, ya lo sabes. A: Tio, acabo de llegar de trabajar, estoy cansado. J: ¡Venga! No me vengas con escusas a estas alturas. A: ¡Que no me voy ahora de putas, cojones! J: No hace falta ni que te muevas si estás cansado, le pides una mamada y solucionado el problema, solo tienes que sentarte y disfrutar. Y además; me saldría más barato que un completo. A: Nada, nada, yo me quedaré viendo la tele. Paso. J: Pues nada tio, tu mismo. ¿De verdad que no...? A: Diviertete. J: Eso no lo dudes, nos vemos. Cierra la puerta y sale. Fin de Flashback.1. Y continúa la conversación] A: ...está mañana ha recibido un libro que encargó hace tiempo ya...

L: Vaya... esperaba pasar un rato con él esta tarde. A: Lo siento. L: No pasa nada. Olle... A: Dime. L: ¿Tu tienes planes? A: Ninguno más allá de ver la tele, beberme un par de cervezas y estar tirado en el sofá. L: Suena bien. ¿Te importa si te acompaño? A: De puta madre, claro, quedate. Situación #2 [Se muestra la mesa donde reposaba la cerveza de Alberto, esta vez repleta de latas y botellas vacías. Por el pasillo, aparecen Alberto y Lorena, en un estado de becerrismo total, sobandose, besandose contra la pared, quitandose ropa, y dirigiendose hacia una habitación.] Situación #3 Ambos, en la cama, cada uno de ellos con un cigarrillo, compartiendo un mismo cenicero. Con la espalda apoyada en el cabezal, él; sin camiseta. Ella en sujetador, con el pelo absolutamente revuelto. A: Te juro que es la primera vez que me pasa. L: Pues no si creermelo o no, pero la verdad es que me da completamente igual. Por que despues de lo que me has hecho... A: Mujer... L: ¡Trece orgasmos en seis horas! No sé si será la primera vez que te pasa, pero espero que haya una segunda. [Flashbak.2. Alberto diciendo a la posible compradora: En realidad esto no ocurrió así, de hecho dudo que jamás consiga una proeza semejante, pero lo que es cierto es que fue un polvo cojonudo, y ya que cuento la historia... pues su decora. Fin del Flashback.2.] A: Ha sido fanstastico, pero has de recordar que eres la novia de mi mejor amigo, que por cierto, mucho está tardando... L: Las cosas, al igual que empiezan, acaban, ¿No crees? Y de todos modos nuestras relación no está funcionando muy bien que digamos... A: Escucha Lorena, si hemos estado follando bastante tiempo, más el tiempo que ha transcurrido desde tu llegada a casa, ¿No crees que está tardando demasiado Jesús? L: Estamos un poco distantes el uno del otro, precisamente había venido con la intención de hablar claramente con él... A: ¿Me quieres escuchar? Te digo que hace más de cinco horas que Jesús se fue de putas... ... L: ... Porque las cosas si no se hablan, acaban empeorando... ¡¿Qué?! ¡¿Qué coño has dicho?! A: Nada, tranquila joder, era para captar tu atención. L: Joder Alberto, no me hagas eso. No soportaría la idea de que Jesús... ¡Por Dios que asco! A: Tranquila, nos contamos todo, y te puedo asegurar que no haría algo así. Voy a ducharme, en un momento estoy de vuelta. [Alberto sale de la habitación, y queda en la cama Lorena. Se escucha la puerta de la entrada, Jesús ha entrado. Lorena se levanta y comienza a vestirse desesperadamente. Alberto está en la ducha sin escuchar nada. En esta escena se va intercalando planos de Jesús, en la cocina buscando algo en la nevera, y a Lorena en la habitación, vistiendose, escuchando sorprendida y dolida, y hablando para si misma. J: ¡Ya estoy aqui Alberto! J: ¡Tio, tenías que haberte venido! ¡Que polvo, en mi vida! ¡Habían dos Ucranianas! ¡Ostia puta como se movían! (Lorena dolida y nerviosa, se va vistiendo rápidamente) J: ¡Enserio Jesús! ¡Que 150 euros tan bien invertidos! ¡Ojalá Lorena supiese hacer lo que me han hecho las dos gemelas éstas! ¡Sería el hombre más feliz del mundo!

L: Muy bien, tu sigue capullo, tu sigue hablando... Que vas a flipar... J: ¡Olle Alberto! ¡No estarás durmiendo! L: Sí, durmiendo estaba... exactamente eso haciamos, dormir... J: ¡Alberto! Aparece Lorena en la cocina y dice: Serás cerdo, hiijo de puta...] Situación #4 J: ¡Que coño haces tu aquí! Me cago en mi vida... L: ¿Que qué hago aquí? Me parece que él que tiene que dar respuestas eres tú. J: Escucha cariño... L: No me llames cariño, cabronazo. ¿Con que dos Ucranianas, eh? J: Lorena, te puedo... L: ¿Qué pasa, que ya es habitual o qué? ¿Ya no te soy suficiente, eh? ¿Tan mahcote eres? ¡150 euros, por Dios! J: ¡Joder, dejame explicarte un momento, tranquilizate! L: ¡150 euros! ¡Normal que siempre tenga que pagar yo el cine, y las cenas, y los cafés... hijo de puta...! J: Lo siento, mi vida.... [Desde lejos se escucha] A: ¡Lorenaaaa! ¡Ya estoy listo para otro polvazo como el de antes! A: ¡Preparate que voy para allá, a la carga otra vez! [Caras apropiadas para la situación, de culpabilidad y flipada general, respectivamente] J: ¿Alberto? ¿Pero qué cojones...?

Situación #0.2 C: ¡No me jodas, que pillada! A: Pues si, fue una situación bastante jodida. Una mezcla de vergüenza, culpabilidad, tensión, incertidumbre, y la sensación de que apartir de entonces ya nada sería igual... C: Es que, no me jodas. La verdad es que no se cual de los tres actuasteis peor... A: En cierto modo fue divertido ver como los tres buscábamos escusas cada vez más disparatadas con el fin de justificarnos. Situación #5 [Mismo contexto y ambiente que en la última escena.] A: Joder, ibamos borrachos perdidos. Ya sabes que cuando vas así, no piensas como debes y no tienes en cuenta cosas que deberías tener. J: Nadie te obliga a beber, ¿verdad? A: No, pero hay veces que apetece, ademas, lo dices como si tu nunca bebieses, y dime ¿Cada vez que bebes lo haces por probar suerte a ver si follas? ¿a que no? Pues yo tampoco tenía pensado acabar acostandome con Lorena, pero el puto alcohol... J: Mira, eso hasta puedo entenderlo, aunque no te resta responsabilidad. Pero tio, digo yo que despues de haber follado y haberte duchado, no seguirías ciego. Y desde aquí he escuchado como le proponías repetir a Lorena. ¿Qué me dices a eso? A: ¡Joder, una vez cometido un error... el daño ya estaba hecho. Pues al menos habría que pasarlo bien! J: ¡Ah claro, muy práctico eres tu! L: Eh, eh. Tu frena un poco que no te veo encima de la cabeza ningun aro de Santo. J: ¡No me jodas, si te has encargado tu de ponerme un par de cuernos! L: Lo mismo te digo. Y con dos prostitutas, nada menos. Por Dios que asco. J: Quería pillar experiencia para que tu disfrutases más. A: Jajaja. L: Venga... ¡No me jodas! Pues una cosa te digo: si querías que yo lo pasase mejor, haberme presentado antes a Alberto. J: Mi gran y leal amigo, Alberto... ¿Por eso no querías venirte verdad? A: Te aseguro que no sabía que iba a aparecer tu novia...

L: Ex-novia. A: De hehco ya sabes que yo ni la conocía. J: ¿Me tengo que creer eso despues de lo que aquí ha pasado? Situación #0.3 C: Vaya tela. ¿Y así acabó todo? A: Pues sí, no hemos vuelto a vernos ninguno de los tres. Jesús desapareció esa misma noche. Oí que está viviendo de alquiler por Alicante. C: ¿Y que pasó Lorena? ¿No acabasteís juntos ni nada? A: Pues no, dijo que no podía confiar en mí, que le había engañado y ocultado que Jesús solía ir de putas, y que no podría estar con alguien así, que si culpaba al alcohol, que me aproveché de su estado... C: En eso lleva razón... A: Si bueno, ¿Y yo podría salir y confiar en alguien que se folla a los amigos de su novio? C: La verdad es que no. No pareceís gente de fiar... A: Hombre... tampoco es eso. Pero bueno, hablemos de la compra del piso, ahora que ya has empezado a cogerle cariño y te vas familiarizando. C: ¿Después de lo que me has contado? A saber el estado real del piso, su valor real... ¿Como voy a fiarme de tí? Lo siento pero no, no hay compra, y dicho ésto me voy en busca de pisos más... fiables. Adiós y gracias por el café. [Desaparece de la sala. Alberto queda solo] A: Mierda, es la tercera persona que se va sin comprar, y todo por mi puta bocaza. A ver por qué cojones siempre les cuento esa historia, supongo que para parecer más interesante y no confesarles mi triste soledad. Maldita historia, si al menos fuese real... Le FiN