CRÍTICA DE LIBROS
TEATRO. TOMO 2 POR JAVIER DAULTE CORREGIDOR 400 PÁGINAS $ 36
TEATRO
Corrimiento hacia lo inesperado E
n su texto teórico Contra el teatro de tesis, una tesis, el autor y director Javier Daulte afirmaba que “solo es posible la reflexión acerca del teatro haciendo teatro. Cualquier intento reflexivo por fuera de su práctica es una perversión”. La reflexión se impone como inevitable, sin embargo, después de leer las cinco piezas incluidas en el Tomo 2 de su Obra Completa. Es que los textos de las ya estrenadas y exitosísimas Gore, Fuera de cuadro, Bésame mucho, ¿Estás ahí? y Nunca estuviste tan adorable son más que una invitación a repensar casi todos los presupuestos sobre el vínculo entre realidad y ficción. Entrañan una compulsión. Las cinco piezas pueden leerse con independencia de las puestas en escena de la que fueron causa o consecuencia. Esas lecturas provocan a la vez disfrute y perplejidad, ya que al tiempo que el lector se enfrenta con personajes, situaciones y diálogos de la más cotidiana verosimilitud, todo exhibe de manera casi casual un ligero corrimiento hacia lo inesperado, cierta migración inquietante pero válida hacia una suerte de “transrealidad”. La trama de Gore remite en términos
Javier Daulte FACUNDO BASAVILBASO
amplios a la ciencia ficción difundida por el cine de clase B. El título mismo alude a esas imágenes abundantes en desbordes sangrientos y vísceras expuestas. No hay muertos o heridos en escena, pero sí una fuerte carga paródica en las situaciones en las que los personajes hablan sin comprenderse o en la progresiva evidencia de que son extraterrestres los que llegan a una suerte de conventillo habitado por lúmpenes y okupas. Pero el devenir de los acontecimientos termina exhibiendo que lo verdaderamente extravagante es tomar lo usual como normal y no advertir que
los monstruos anidan en la apatía y la trivialidad de los hábitos cotidianos. En Fuera de cuadro, el desajuste y la negación de toda coherencia se produce en el interior de cada personaje. Cuatro mujeres y un hombre de clase media urbana viven en permanente y arbitraria fractura entre sus utopías privadas, sus necesidades y sus argumentaciones. Se aferran a lugares comunes y fetichismos de moda que circulan bajo los rótulos del psicoanálisis, el turismo cultural o el feminismo. Y en busca de ser otros terminan por no ser nadie. Bésame mucho pone el foco en los vínculos interpersonales entre los agentes de una dependencia policial. La jerga de oficina pública se superpone con la más pesada de los organismos represivos y con los códigos de cierto autoritarismo que suele incorporar el chantaje, el apriete y la corrupción como estrategias operativas. En ese marco, las pulsiones primarias de los personajes (el amor, los celos, la crueldad, la ambición) se liberan o se someten en ostensible contradicción con los criterios de disciplina de una “fuerza del orden” que,
Caracoles y recuerdos l temor, la confianza, los recuerdos son cuestiones complejas, íntimas, elusivas. ¿Cómo estudiarlas a partir de modelos simples, como los que se centran en las células nerviosas? Es un desafío que la ciencia del siglo XX encaró y está cada vez más cerca de resolver. Uno de los protagonistas de esta historia es Eric R. Kandel, premio Nobel de Medicina en 2000 junto a Arvind Carlsson y Paul Greengard, reconocido como uno de los expertos que descifraron de qué manera se fijan o se borran los recuerdos en el cerebro. En busca de la memoria. El nacimiento de una nueva ciencia de la mente es un libro sobre neurociencias, pero también una autobiografía. Cuando Kandel busca explicar el origen de su vocación y, en 26 I adn I Sábado 8 de septiembre de 2007
Olga Cosentino © LA NACION
EN BUSCA DE LA MEMORIA
CIENCIA
E
por serlo, termina haciendo del caos y del delito su naturaleza constitutiva. La obra que cierra la selección, Nunca estuviste tan adorable, es la más autobiográfica. Escrita para el ciclo Biodrama que condujo la directora Vivi Tellas en el Complejo Teatral de Buenos Aires, se trata de la historia de la familia materna de Daulte, en el período que se extiende entre mediados de los años 50 y principios de los 70. Es imposible que la dramaturgia de Javier Daulte no nos induzca a reflexionar acerca del lenguaje con que creemos comunicarnos, pero que ha perdido su sentido unívoco. Daulte expone esa desintegración. La distancia paródica entre realidad y ficción se agiganta o desaparece en estos textos y cancela toda ilusión de normatividad. Ideología y banalidad se asocian hasta desembocar en la parodia y el escepticismo. Y el teatro recupera, con Daulte, su eficacia lúdica –¿regreso a la infancia o sabiduría?– con lo que logra hacer menos brutal la pérdida definitiva de la inocencia.
particular, la elección del tema al que dedicó gran parte de su vida, lo personal se cruza explícitamente con la historia: “Después del Holocausto, uno de los lemas de los judíos fue: ‘no olvidar jamás’, exhortación a las futuras generaciones para que mantengan la vigilancia contra el antisemitismo, el racismo, el odio (...) Mi trabajo científico está dedicado a investigar los fundamentos biológicos de ese lema: los procesos cerebrales que nos permiten recordar”. Apenas desembarcado en Nueva York, embargado de un sentimiento de liberación, Kandel cambió su nombre: el exótico Erich se convirtió en Eric. En pocos meses aprendió inglés y con los años se convirtió en un estudiante aventajado. Primero estudió historia en Harvard,
becado entre más de mil aspirantes. Se recibió con una tesis sobre la actitud ante el nazismo de tres escritores alemanes: Carl Zuckmayer, Hans Carossa y Ernst Jünger. Después se volcó a la medicina y se graduó en la New York University. Cada decisión de su carrera tiene algún componente de su vida privada. Cree que se dedica a la ciencia porque el padre de su esposa Denise, antes de morir, le aconsejó que se casara “con un intelectual pobretón”, pensando –supone Kandel– que un hombre así se esforzaría por lograr una carrera. Kandel es conocido por haber trabajado con enfoques bien básicos y por haber encontrado, en 1962, las primeras evidencias sobre una forma elemental de memoria en el modo como dos neuronas se comunican, la sinapsis.
POR ERIC R. KANDEL KATZ TRAD.: ELENA MARENGO 568 PÁGINAS $ 65
En este tipo de abordaje, es fundamental la elección del organismo modelo. En su caso fue un caracol, la aplisa, donde observó comportamientos simples para explicar tres procesos de aprendizaje: la habituación, la sensibilización y el condicionamiento. Esta especie casi se integró a la familia. En un estilo cándido pero no ingenuo, simple sin perder precisión, En busca de la memoria nos cuenta una vida, una carrera y el desarrollo de un área científica. Tiene todo para convertirse en un clásico de la divulgación. Ana María Vara © LA NACION