ESPECTACULOS

Viernes 8 de julio de 2011

POR JUAN GARFF

Doña Disparate y Bambuco COMEDIA MUSICAL

TEATRO

((((( MUY BUENA

Gianola y Calvo, junto a las piruetas poéticas de María Elena Walsh L AUTORA: MARIA ELENA WALSH L DIRECCION: JUAN BAUTISTA CARRERAS L COREOGRAFIA: CAROLINA PUJAL L ESCENOGRAFIA: CECILIA ERRACHU L INTERPRETES: FABIAN GIANOLA, JULIA CALVO, ANALIA RIAMONDE, ADRIAN KISS, PABLO GRAIB, ESTEBAN FIOCCA, VIOLETA MATORRAS, ARIADNA ARGOITIA, DEMIAN CANDAL, JULIETA ORIOL, MARTIN PASSALENTI L SALA: 25 DE MAYO, TRIUNVIRATO 4444 L FUNCIONES: SABADOS Y DOMINGOS, A LAS 15. A PARTIR DEL 16, DE MARTES A DOMINGOS, A LAS 15 Y 17.

El fortuito encuentro de Disparate y Bambuco comienza una amistad duradera. Juntos atraviesan un mundo de nuevas realidades, en el que nadan los pájaros y vuelan los peces. Es el universo creado por las letras y canciones de María Elena Walsh, en el que todo es posible, con la lógica implacable de los niños y los artistas. Como que un gatopato se case con, claro está, una gatapata. La puesta en escena de Doña Disparate y Bambuco retoma la irreverencia de los textos, pero a la vez tiene el gran mérito de plasmar ese espíritu de subversión del pensamiento y lenguaje común en códigos visuales y de movimiento. El Teatro 25 de Mayo refuerza con esta obra su propuesta cultural para los chicos, iniciada con el popular ciclo musical de las mañanas domingueras. Una troupe impecable de actores-acróbatas acompaña a Fabián Gianola y Julia Calvo, los protagonistas, creando un clima de festiva algarabía de saltimbanquis multicolores. Las piruetas poéticas de María Elena Walsh se replican sobre el escenario en saltos de métrica precisa, en malabares cargados de misterio, en la parodia que trazan los clowns sobre la sensatez cotidiana. Gianola derrocha simpatía y Calvo sostiene con potencia el hilo musical. Pero el fuerte está en ese cuadro de con-

junto, siempre cercano al vértigo, pero nunca al desborde. El director Juan Bautista Carreras permanece de este modo fiel a la estética planteada la temporada pasada en Descubriendo el país de Nomeacuerdo, que a su vez retomaba la versión de la misma Doña Disparate que estrenara hace dos años con la dupla protagónica Anita Martínez-Diego Ramos. En esta ocasión pesan un poco más las escenas de texto, fluye por momentos apenas un poco menos la impronta circense. Pero basta con dejarse llevar por los detalles y el conjunto para que se vuelva a amalgamar la alegre y

sutil comparsa entre Disparate y Bambuco y los personajes de su destino compartido. No cabe duda de que las obras de María Elena pasaron al repertorio de los clásicos. Tanto puede dar pie a versiones que no hacen más que apoyarse en la popularidad de sus canciones como generar lecturas escénicas que aportan nuevos valores agregados al espectador, que le permiten redescubrir en el mismo estribillo tarareado mil y una veces, imágenes renovadas, pensamientos hasta entonces nunca imaginados.

PIEDRA LIBRE DESDE GALICIA

Para ver con los oídos

las 17; $ 40. AMIGOS EN BANDA

Un arbusto autóctono busca la amistad de una hoja. La historia de La Berenguela, por María Inés Cuadrado y un cuarteto de clarinetes. Ultima función, hoy, a las 15, en el Cervantes, Libertad 815; $ 35.

Entre rock y reggaetón

BUENAS NOCHES

CUENTOS

La hora de (no) dormir aborda con humor uno de los momentos más difíciles de la familia. Con coreografía de Diego Jaraz y dirección de Anahí Berneri. En El Tinglado, Mario Bravo 948, mañana a

Mañana será la única función de Atrapacuentos, el primer espectáculo de narraciones de Fernanda Gómez. En el Teatro del Pasillo, Colombres 35, a las 17; $ 25.

Un cuento de nunca acabar

Salsa, rock, pop, twist y reggaetón en el estreno de Nati musical, el show para chicos de Natalia Presa. En el Auditorio Cendas, Bulnes 1350, sábados a las 17; $ 38.

Como sueños

TEATRO

((((( BUENA

COMEDIA DRAMATICA

Spaghetti

Héctor Bidonde, como Leonardo da Vinci, en una obra que evoca al Renacimiento

L SPAGHETTI: DE MARIANO COSSA Y GABRIEL PASQUINI L ELENCO: ALEJANDRA BALADO, HECTOR BIDONDE, MARIANO GLADIC Y FEDERICO BARROSO LELOUCHE L DISEÑO DE ESCENOGRAFIA Y VESTUARIO: RENE DIVIU L DISEÑO DE ILUMINACION: LEANDRO

RODRIGUEZ L MUSICA ORIGINAL: MARIANO COSSA L DIRECCION: RUBENS CORREA L SALA: TEATRO DEL PUEBLO L DURACION: 95 MINUTOS

Si hubo un hombre emblemático del Renacimiento, como expresión de una época de renovación pujante de la cultura, el arte y las letras europeas, ese fue Leonardo da Vinci (1452-1519), quien vivió toda su existencia dentro del período que es habitual asignarle como comienzo y final aproximados de ese movimiento: 1450 y 1570. La personalidad de este artista desborda incluso los propios límites de sus contemporáneos porque, aun compartiendo la infinita sed de conocimiento que era el signo de ese tiempo, su capacidad inventiva adelantó descubrimientos y previsiones que sólo el futuro confirmaría plenamente. La acción de esta obra que lo tiene como protagonista transcurre durante el último año de su vida, cuando se halla bajo la protección del rey Francisco I de Francia. En esos días, el creador de La Ultima Cena está abocado a distintas investigaciones, cuyos resultados vuelca obsesivamente en distintos papeles, escritos incluso al revés para que nadie pueda conocer su contenido. Entre esos papeles está la secreta fórmula de los spaghetti, que el monarca francés intenta conseguir y Leonardo, con un gesto de rebeldía bastante típico, al parecer, en las relaciones con sus mecenas, le niega. Hombre de múltiples intereses y curiosidades, el artista, además de apasionarse por las invenciones en esa coyuntura, se dedica también a pintar retratos y prepara, como un gourmet vocacional al que ningún misterio de la cocina le es inaccesible, exquisitos platos para la corte.

Un destacado trabajo de arte Entre abundantes datos históricos y toques de genuino humor, la pieza va presentando el perfil de un Leonardo algo excéntrico, bastante desconfiado y no poco mal talante, que concluye sus días en una tensa relación con el poder, con su propio asistente y secretario personal (Francesco Melzi, que está lejos de comprender la profundidad de los estudios de su maestro) e incluso con su propio presente, que lo deja insatisfecho pues su etapa histórica no está en condiciones de aprovechar los frutos de su inteligencia y su imaginación, que fueron de una riqueza única. El texto es sólido; está escrito con vuelo, pero en ocasiones peca de un exceso de información que lo torna fatigoso. Los personajes están bien delineados y cada uno es congruente con su conflicto o su función en la obra. El elenco combina actores de una larga trayectoria con gente más

joven. Todos se desempeñan en un nivel de mucha idoneidad, en especial Héctor Bidonde, como un Leonardo bastante parecido al que nos ha transmitido el conocido autorretrato del creador renacentista, y Alejandra Balado, en el sugestivo papel de la cocinera, que en la vida real llevó el nombre de Battista di Villussis. La escenografía, configurando ese ámbito mezcla de taller, laboratorio y cocina medieval que pide el texto, es excelente. Del mismo modo, la iluminación con su difusa luz de época y la música muy inspirada contribuyen a los climas adecuados. Se sobreentiende que todas estas virtudes no hubieran podido concretarse a fondo ni plasmarse en un espectáculo armonioso sin la talentosa conducción de Rubens Correa, que se anota con esta versión un galardón más a su larga lista de aciertos artísticos.

Alberto Catena

HERNAN ZENTENO

PLATEA INFANTIL

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