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el mundo
| Viernes 6 de diciembre de 2013
NELSON MANDELA | las reacciones más allá de sudáfrica
Desde EE.UU. hasta Israel y Brasil, elogios para “un héroe”
El mundo recordó su legado Figuras de la política, la cultura y el deporte elogiaron a Mandela
Emocionados, muchos líderes mundiales mostraron su admiración por el ex presidente; “Logró más que cualquier otro hombre”, expresó Obama JOHANNESBURGO.– Los elogios fueron unánimes y comenzaron a llegar, desde todos los rincones del mundo, apenas el presidente sudafricano, Jacob Zuma, anunció la muerte de Madiba. Conmocionados, los líderes mundiales lamentaron ayer la muerte de Nelson Mandela y, además de destacar el trabajo del ex presidente sudafricano en la lucha contra el apartheid, mostraron su admiración personal por Madiba. “El héroe de nuestros tiempos”, “un campeón de la justicia”, “el líder que cambio la historia”, “la mayor personalidad del siglo XX”, fueron algunas de las alabanzas que pronunciaron los líderes de todo el mundo. Uno de los primeros en hablar, luego de conocerse la muerte del líder de 95 años, fue el presidente norteamericano, Barack Obama, quien confesó en varias oportunidades su admiración por Mandela. “Él logró más de lo que puede esperarse de cualquier otro hombre”, dijo Obama, emocionado, en un breve discurso en la Casa Blanca. “Soy uno de los innumerables millones que recibieron inspiración de la vida de Nelson Mandela”, agregó el primer presidente negro de Estados Unidos. La mayoría de los líderes mundiales optaron primero por expresar
sus mensajes de dolor y admiración a través de Twitter y luego enviaron comunicados oficiales. Pese a que la salud de Mandela había estado muy frágil por casi un año– debido a una infección pulmonar–, el anuncio de Zuma sobre la muerte del ganador del premio Nobel de la Paz sacudió a los líderes de todo el mundo. Señales de luto El primer ministro británico, David Cameron, fue uno de los primeros en enviar su mensaje. “El mundo ha perdido a una gran luz. Nelson Mandela fue un héroe de nuestro tiempo”, escribió en Twitter. El presidente anunció, además, que la bandera que se encuentra en su residencia de Downing Street estará a media asta en señal de luto y homenaje. También en Twitter, la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, dijo que “el ejemplo del combate de Mandela se transformó en un paradigma para todos los que luchan por la justicia, la libertad y la igualdad”. La presidenta brasileña opinó, además, en un comunicado que Mandela es la mayor personalidad del siglo XX y que supo conducir con inteligencia en su país uno de los más importantes procesos de emancipa-
ción del ser humano en la historia contemporánea. El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) estaba sesionando cuando los embajadores recibieron la noticia. Los representantes detuvieron la reunión y realizaron un minuto de silencio. Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, destacó la vida “ejemplar” del líder sudafricano y su “determinación” y “compromiso” por hacer posible un mundo mejor. “Estoy profundamente apenado por la muerte de Nelson Mandela, un campeón por la justicia. Nadie como él hizo tanto por los valores y aspiraciones de Naciones Unidas”, dijo Ban ante la prensa. Desde Francia, el mandatario François Hollande emitió un comunicado en el que reivindicó el “coraje, obstinación y perseverancia” que demostró Madiba a lo largo de su vida y su lucha política. “Pese a las humillaciones interminables de una detención que duró 27 años, pudo no sólo derrocar un régimen abyecto, sino reconciliar a los sudafricanos y hacer prevalecer la democracia”, recordó Hollande. En la misma línea, la canciller alemana, Angela Merkel, destacó que el tiempo que pasó Mandela en la cárcel no lo desvió de su mensaje de recon-
ciliación. “Los muchos años que pasó en la cárcel no doblegaron a Nelson Mandela. De su mensaje por la reconciliación surgió una Sudáfrica nueva y mejor”, señaló Merkel en un comunicado. “El ejemplo de Mandela y su legado político a favor de la libertad y la no violencia, así como su repudio a cualquier tipo de racismo quedarán como una inspiración para el mundo entero y por mucho tiempo”, añadió. Por su parte, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, destacó la trayectoria de Mandela y su ejemplo de paz. “Nelson Mandela fue de las figuras más honorables de nuestra época. Fue un padre para su pueblo, un hombre de visión y un luchador por la libertad que rechazó la violencia”, dijo. En Venezuela, Nicolás Maduro decretó ayer tres días de duelo. “En homenaje al gigante Mandela decidí decretar tres días de duelo en toda la Patria de [Simón] Bolívar y de [Hugo] Chávez!”, escribió en Twitter. También eligió esa red social el presidente de México, Enrique Peña Nieto, que calificó al ex mandatario sudafricano como “un luchador incansable en favor de la paz, la libertad y la igualdad”.ß
barack obama presidente de ee.uu.
“Logró más de lo que puede esperarse de cualquier hombre [...] y nosotros perdimos a uno de los seres humanos más influyentes, valientes y profundamente buenos con el que cualquiera de nosotros haya estado en este mundo” “El mundo ha perdido a una gran luz. Nelson Mandela fue un héroe de nuestro tiempo. Una gran luz se apagó en el mundo”
david cameron priMer Ministro británico
Agencias Reuters, AP, EFE y DPA
“Mandela partió, pero no se fue. Permanece su testimonio de vida y los principios que asumió para la lucha por la vida y la dignidad de los pueblos” adolfo pérez eSQUivel preMio nobeL de LA pAZ
bill clinton ex presidente de ee.uu.
Decenas de personas se acercaron anoche hasta la casa de Mandela, en Johannesburgo
Cerró, en pleno invierno de 2010, el Mundial; nunca más estuvo frente a una multitud Nicolás Balinotti LA NACION
“Madiba, Madiba, Madiba...”, no se cansó de rugir el inmenso estadio Soccer City. Ese instante eterno fue más emocionante y conmovedor que el momento de la consagración de España como campeón mundial de fútbol. El cántico bajó con fuerza desde las tribunas mientras el hombre que inspiró al mundo era paseado en un carrito por el centro del campo de juego. Fue el 11 de julio de 2010. Aquella gélida noche de Johannesburgo resultó ser la última aparición pública de Nelson Mandela. Fue justo allí, en los suburbios del barrio de Soweto, donde había dado su primer discurso masivo después de la liberación. Su esposa, Graca Machel, le sostenía la mano derecha en alto, en
otro gesto victorioso que simbolizó la reconciliación étnica por la que Mandela había dado su vida. Aunque casi no oía ni caminaba, y la memoria de corto plazo ya lo traicionaba, comprendió el contexto y entregó una sonrisa auténtica a la multitud que lo vivaba emocionada por su apodo. Mandela estaba enfundado en un tapado negro, llevaba guantes de cuero y un gorro cubría su cabeza. Su rostro estaba surcado por ceños de satisfacción y emotividad, como si se hubiera predispuesto a regalar esa imagen al mundo. Aquella noche de julio la luna estaba pálida y redonda. Hacía frío. Mandela estaba a un puñado de días de cumplir los 92 años. Así y todo, salió de su enclaustramiento por unas horas para protagonizar un momento histórico y escenificar el primer Mundial de fútbol en África con el retrato que a la copa le faltaba. Una tragedia familiar –la muerte de su bisnieta Zenani– le había impedido asistir a la gala de inauguración, en la que los organizadores de
la gran industria del fútbol anhelaban que diera el puntapié inicial. Eso ya era realmente imposible porque, desde hacía meses, Mandela ya no caminaba y su estado de salud mantenía en vilo a toda una nación y al resto del mundo. Su familia denunció, por entonces, que la FIFA había ejercido presión para que el ex presidente asistiera a la ceremonia de cierre en el Soccer City. Pero lo cierto es que Mandela cumplió, como pudo, con todos los compromisos del Mundial. Grabó un mensaje para el sorteo y recibió el trofeo cuando aterrizó en el país. Bendijo a la selección de su país y hasta se calzó la camiseta amarilla y verde de “los Bafana Bafana”. Desde lo político, habilitó al Congreso Nacional Africano, su partido, para que facilitara el ingreso de los millones de dólares de la industria del fútbol a un continente desfavorecido. Previo a la final del Mundial, su anterior aparición pública había sido el 10 de febrero de ese mismo año, cuando se lo vio sonriente y lúcido
“Nelson Mandela le deja a la humanidad un mensaje de misericordia y convivencia”
efe
Su última aparición, un instante eterno que conmovió al mundo desde un estadio de fútbol en la conmemoración de las dos décadas de su liberación tras 27 años en la cárcel. Fue uno de los tantos homenajes en vida que tuvo por su rol pacificador y su gesta para combatir la segregación racial. Como otras veces, un acontecimiento deportivo ocupó un capítulo trascendente en la vida de Mandela. En 1995, con el apartheid aún vivo en las calles sudafricanas, fue el Mundial de rugby el que dejó una huella profunda en la memoria. El saludo –convertido en leyenda– con François Pienaar, el capitán de los Springboks, llegó hasta Hollywood de la mano de Clint Eastwood. Bajo el mismo cielo y en la misma tierra, pero 15 años después, Mandela cerró otro Mundial: el de fútbol. La organización lo paseó subido a un carrito de golf como si fuera un trofeo. Sin saber que iba a ser su último encuentro cara a cara con una multitud, el público lo abrazó y lo ovacionó en señal de reconocimiento, en otra muestra contundente que la reconciliación que él puso en marcha es una realidad. ß
“Todos estamos viviendo en un mundo mejor por la vida que vivió Madiba. Demostró que hay libertad en el perdón, que un gran corazón es mejor que una mente cerrada, y que las verdaderas victorias de la vida deben ser compartidas”
hUgo porta ex eMbAjAdor en sudáFricA
“El ejemplo del combate de Mandela se transformó en un paradigma para todos los que luchan por la justicia, la libertad y la igualdad” dilma roUSSeff presidentA de brAsiL