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ESPECTACULOS
I
Viernes 14 de enero de 2011
TELEVISION s LLEGA THE BIG C
Cuando la enfermedad te libera Con humor y optimismo, el personaje de Laura Linney se enfrenta a un cáncer terminal Una nueva serie desembarca este domingo en la pantalla chica. Se trata de The Big C, una comedia protagonizada por Laura Linney, que aquí es Cathy, una maestra de escuela a quien le diagnostican un cáncer terminal. La noticia, que ella no comparte con nadie –salvo, claro, con su médico–, funciona como un disparador para un cambio brutal en su propia vida, de modo tal que Cathy, que hasta ese momento era una mujer seria, formal, rígida y “aburrida”, se convierte de repente en una persona (torpemente) desinhibida, fresca e informal. Y divertida. O al menos es lo que intenta. La historia se inicia cuando Cathy recibe la noticia de su enfermedad, algo que ocurre, a su vez, en un momento muy particular de su vida: en plena crisis matrimonial, mientras se está separando de su tan infantil como tierno esposo Paul (Oliver Platt). Ambos tienen un hijo en común llamado Adam (Gabriel
Basso), un adolescente díscolo y malcriado. Completa el cuadro familiar el hermano de Cathy, Sean (John Benjamin Hickey), pero él no vive en la misma casa. De hecho, no vive en esa casa ni en ninguna otra, ya que se trata de un tipo muy singular: vive en la calle, es un vagabundo por propia elección. Cathy sabe que le queda poco tiempo de vida (medio año, un año, acaso año y medio), así que decide aprovecharlo y disfrutarlo a pleno, con alegría y buen humor. Decide, también, llevar adelante aquello que por trabajo, rutina o familia ha ido
1PARA AGENDAR The Big C. Desde este domingo, los domingos, a las 21, por HBO. Con Laura Linney, Oliver Platt, Gabriel Basso, John Benjamin Hickey. Dir.: Bill Condon.
postergando a lo largo de sus años. Se obsesiona, por ejemplo, con la construcción de una piscina en el jardín de su casa, sólo para enseñarle a su hijo un tipo de chapuzón que ella solía hacer cuando era chica. También decide empezar el diálogo con su vecina, con quien, durante años, jamás se habló, y ayudar a bajar de peso a su obesa y preferida alumna (Gabourey Sidibe, famosa por Precious). Como salvo su médico todos ignoran lo que le está ocurriendo, esta serie de determinaciones y su comportamiento en general son vistos como algo ridículo e insólito. Aunque Laura Linney resulta hoy una cara conocida por su prolífica carrera cinematográfica (estuvo tres veces nominada al Oscar e interpretó, entre otros recordados papeles, a la esposa de Sean Penn en Río místico, a la mujer de Jeff Daniels en Historias de familia y a la abogada amargada de El exorcismo de Emily Rose), la actriz supo brillar
también en este rubro televisivo, fue cuando actuó en las series Frasier y John Adams; e incluso se la pudo ver en La ley y el orden como actriz invitada. The Big C tendrá también participaciones especiales, puesto que ahí veremos a Cynthia Nixon (la genial Miranda de Sex & The City), a Idris Elba (el traficante de drogas de The Wire) y a Liam Neeson (el protagonista del film La lista de Schindler). La comedia cuenta con la dirección de Bill Condon (el mismo director de la película musical Soñadoras: Dreamgirls), va por su segunda temporada en los Estados Unidos y está nominada a los Globo de Oro, nominaciones que alcanzan tanto a la serie como a la actriz. La premiación, curiosamente, se llevará a cabo pasado mañana, esto es, el mismo día de su estreno en la Argentina.
Guadalupe Diego
Laura Linney y Oliver Platt, matrimonio en crisis en The Big C
TV
(((((
BUENO
TALK SHOW
Los unos y los otros Propuesta en la que la abundancia de recursos confunde PRODUCCION: MANDARINA PRODUCTORA L CONDUCCION: ANDREA POLITTI L ASESORA PSICOLOGICA: GRACIELA MORESCHI (PSIQUIATRA) L PANELISTAS: CIELO LATINI (ESCRITORA), PATRICIA GOMEZ DI LEVA (SEXOLOGA), MARIANA LEVY (ACTRIZ) Y TOMAS DENTE (PERIODISTA) L PRODUCCION EJECUTIVA: PABLO MARTINS L DIRECCION: CARLOS VIOLANTE. DE LUNES A VIERNES, A LAS 15, POR AMERICA L
Si hay un objetivo en Los unos y los otros, el mismo no es el de encontrar acercamientos entre los grupos de personas que se encolumnan en veredas opuestas respecto de los temas que allí se presentan como parte de antinomias congénitas en la sociedad de nuestros días. Todo está dispuesto para conseguir entretener al televidente y mantenerlo a la vera de la pantalla mientras dura la propuesta. En pos de lograr ese propósito, Andrea Politti cuenta con una batería importante de recursos para abordar la temática desde distintas perspectivas. Encuestas, debates, opiniones de profesionales, de los panelistas, del público, de los asistentes a una tribuna y de comunicaciones telefónicas con personalidades a las que se consulta en vivo aportan para convertir el debate en un espectáculo atractivo y hacer gala al género de los talk shows al que se supone pertenece el programa. La conductora, con sus años de experiencia en propuestas
similares, se mueve con mucha grado de artificialidad que, por simpatía aun en los momentos supuesto, destiñe la confianza en los que el dramatismo de lo hacia la propuesta. que ocurre podría desestabilizar El proyecto, también, incluye su compostura. Los aportes de otros ofrecimientos que lo enrarela asesora psicológica, aunque cen un poco. El segmento “Vidas no pueda esperarse de ellos cambiadas”, en el que distintos un rigor académico abparticipantes cambian sus roles por una semana, soluto en el contexto en el que se emimás allá de lo artifiten, aportan cierto cioso de su armado, PUNTOS grado de seriedad resulta divertido, para mantener la pero inserta conde rating es lo que promepropuesta dentro fusión respecto del dió el programa que conde fronteras de género. Lo mismo, duce Politti en su emisensatez. Más allá los informes en los sión de anteayer. de cierta soberbia que la conductora se y un grado de agresicaracteriza en el rol de vidad exacerbada hacia distintos actores sociales algunos participantes, el paque remiten demasiado a pel de los panelistas contribuye a ciertos docurealities como los incorporar picante a la sazón con que produce Chiche Gelblung. la que se condimenta la mezcla Una confusión que quizás habría que bulle en los estudios donde que evitar, perdiéndole miedo al tiene lugar el programa. Lo mis- rating y afianzando más un formo ocurre con el rol que juegan mato concreto en lugar de apostar los participantes, a quienes, sin a tantos números a la vez. embargo (¡qué difícil que esto no pase en la realización de este género!), se les nota mayor o menor Ricardo Marín
3,7