8/Ciudad
sábado 30 de mayo de 2015
Indocencias
Comunión José Joaquín Burgos La iglesia de la Santísima Virgen de Coromoto, en Puerto Cabello, es bella, señorial, imponente. Allí estuvimos, el pasado domingo 24, con nuestros nietos María Laura y Daniel Alejandro, en la fiesta del corazón que fue su Primera Comunión. Y a encontrarnos con nuestro padre confesor, ese extraordinario, denso, profundo poeta que es el padre Luis Parada Salcedo, figura de honor tanto de la Iglesia Católica como de la poesía venezolana, particularmente de Carabobo. La vivencia fue extraordinariamente hermosa, inolvidable, llena de fe, de poesía, de cariño familiar de ese que cosecha recuerdos inolvidables y abre los altares del corazón para que el día tenga una claridad infinita. Puede ser tonto, realmente, que uno rememore estos momentos tan familiares y que tan poco, aparentemente, tengan que ver con las polémicas, los
barullos, los líos en que andan envueltos capuletos y montescos en éstos días de guerra política, de odios viscerales, de odios, suciedad informativa, asesinatos raciales, imperios de droga, pseudolíderes hipócritas y hediondos a excremento aunque vestidos de rigurosa etiqueta para mentir como ungidos de la verdad suprema y como defensores de la verdad. Eso duele, en verdad. Y uno lo piensa cuando ve a sus nietos en ese instante de recibir la hostia consagrada y entregar, realmente, su corazón y su pureza a Dios. No, me digo a mí mismo, en silencio. Sí debe escribirse esto. Debe dejarse recuerdo de ello para que alguien, algún día, lo lea y sepa que en estos tiempos de odios insensatos y de desprecio a tantos valores del espíritu, de vez en cuando el corazón se vestía de amor y de pureza para bendecir a los hijos y a los nietos DE TODOS, cualquiera fuese su credo religioso y su militancia política, el día de la primera comunión de los nietos. Gracias, Virgen de Coromoto. Gracias, padre Parada. Gracias, Laura. Gracias, Mario Ramón.
Aseguró Williams Sánchez
Mortalidad materna disminuyó 6% en un año Valencia, mayo 29 (Marlene Castellanos).- La cifra de mortalidad materna ha disminuido 6% en comparación al 2014, pues durante el año pasado la cantidad alcanzaba 73 madres fallecidas por cada 100 mil niños nacidos vivos y ahora está en 67. Así lo aseguró el presidente de la Sociedad Venezolana de Ginecología y Obstetricia, Williams Sánchez, quien aseveró que aunque la disminución es positiva la meta establecida en los años 90 era llegar en 2015 a un 14%. Entre las tres principales causas de mortalidad materna están los trastornos hipertensivos, problemas de hemorragias e infecciones uterinas. Éste y otros temas, según Sánchez serán expuestos durante el Trigésimo Primer Congreso Nacional de Obstetricia y Ginecología que se desarrollará desde el 30 de junio hasta el 3 de julio en las instalaciones del hotel Hesperia. Donde también se tocará el tema de ruptura prematura de membranas, parto pretérmino,
oncología, ginecología, restricciones del crecimiento intrauterino, mastología, fertilidad, controversia en obstetricia, endocrinología ginecológica, menopausia. A parte de los ponentes venezolanos también estarán presentes los doctores: Catalina Valencia y Mauricio Vasco, provenientes de Colombia y Douglas Jarquin, de El Salvador. Sánchez aseveró que a través de esta actividad se busca dar herramientas a los profesionales para que se actualicen para disminuir la mortalidad materna y por ello se dictarán cursos sobre endoscopia, piso pélvico, infarto - juvenil, anticoncepción, Ian Donald School, Materno Fetal, enfermería y Also. Sánchez, que estaba en compañía de los doctores, Jairo Fuenmayor y Clara Rivera, presidenta del gremio en Carabobo y Cojedes. Rivera indicó que es la tercera vez que la entidad es escogida por la Sociedad como sede del evento y que en esta oportunidad tendrán el honor de celebrar el 75 aniversario.
❒ Inició “Murales Ecológicos y Educativos” en Montalbán .- La Alcaldía de Montalbán inició el programa “Murales Ecológicos y Educativos” en defensa del medio ambiente y se estará llevando a cabo hasta el 31 de agosto. En el programa se elaboran murales artísticos con mensajes ecológicos y educativos con la intención de recuperar espacios públicos. Se han realizado tres murales, en Sabana de Aguirre, Las Matas y AngelonalLa Pica. (Prensa Alcaldía)
Confabulario Daniela Chirinos Arrieta
Laura Cordero, ganadora del V Concurso de Imagen Gráfica de Filuc
Desafiar el diseño y la literatura Laura Cordero presentará esta semana su tesis de pregrado. Diseño sustentable y campañas ecológicas, ése es su tema. Una vez superado este reto, en diciembre de este año, se graduará en la XI promoción de Arte, mención Diseño Gráfico, de la Universidad Arturo Michelena. Solo un acontecimiento extraordinario podía sacarla de esa “olla de presión” emocional que significa entregar una tesis, y, le pasó. Esta semana el comité organizador de la Feria Internacional del Libro de la Universidad de Carabobo, anunció que Laura Cordero y su propuesta basada en la Espiral de Fibonacci es la ganadora del V Concurso de Imagen Gráfica de Filuc. Laura es fiel visitante a la Feria del Libro de la UC y una asidua lectora, pero era la primera vez que enviaba una propuesta para este concurso. En ediciones anteriores solo llegó a imaginar qué podía mandar, incluso por tres años descargó las bases de la competencia, pero al final no participaba. Esta vez, se dijo “lo voy a mandar, en el nombre de Dios”. Siendo la única artista de su familia, en su casa la noticia resultó todo un acontecimiento. Ella lo toma feliz, como si fuese una previa de su graduación, pero sobre todo agradecida con la Filuc por abrir esta oportunidad a la comunidad gráfica “porque en el país no hay muchos concursos de este tipo”, comenta. Espiral del conocimiento Las bases del concurso exigían interpretar gráficamente el tema central de la Filuc 2015: Desafíos del libro. Fácilmente, pudo plantear, por ejemplo, a un libro en una carrera con obstáculos. Pero ella escogió la sección áurea del espiral de Fibonacci y representar “la multiplicidad de retos o procesos por los que pasa cada libro antes de llegar a las manos del lector”, pasando por el riguroso proceso editorial de pulir la obra “hasta lograr un resultado lo más cercano a la perfección”. Los libros de espiral -explica- son las versiones de un mismo libro, yendo desde el más pequeño, ubicado en lo profundo de la espiral, hasta el más grande que se encuentra en el exterior, justo en las manos de la figura minimalista que representa a un lector. “Cada uno de esos libros –añade- representa un paso o desafío del libro dentro del proceso editorial y el aumento proporcional de medidas expresa la superación y el mejoramiento continuo a medida que se acerca más a la meta y desafío final que es la publicación”. El uso del amarillo obedece al mismo concepto de la Espiral de Fibonacci, es decir, los números áureos o sección áurea. Además, los colores oficiales de la Filuc son amarillo (dorado) y el negro, por eso también los utilizó. “El que no lee... no diseña” No es la primera vez que el diseño y la literatura coinciden en los trabajos de Laura. Entre sus asignaciones este año le tocó ilustrar la obra de José Rafael Pocaterra. Ella es-
cogió La I latina y Los comecuentos, ya las conocía pero debió releerlas y analizarlas, antes de ponerse a diseñar. La lectura estimula la imaginación y de ahí parte la ilustración. Ése es el ejercicio. Laura lo sabe, por eso a la máxima: “El que no lee, no escribe”, ella añade: “... y tampoco diseña”. No hay día que no lea -confiesa- y su lectura se ve en sus diseños. Su libro de cabecera hoy es La sangre de los inocentes de Julia Navarro. No tiene preferencias en géneros literarios ni autores, sobre todo ciencia ficción como Viaje al centro de la tierra de Julio Verne, también le gusta Rómulo Gallegos y Mario Vargas Llosa. La niña de la casa será artista Desde niña le gustaron todas las artes. Pero apenas se graduó de bachiller se inscribió en la UC para estudiar una carera científica, Biología. Solo cursó un año, “eso no era lo mío”, dice. Así que desertó y se inscribió en la Escuela de Arte de la UAM. Una vez que tenga el título en la mano, le gustaría dedicarse al diseño de empaques y desde ya propone formas no convencionales. También prefiere la ilustración vectorial y diseño de carteles. Pero el área donde más le gustaría ejercer es en el diseño editorial. “Siempre ir más allá y no estancarse en lo que ya existe”, ésa es su premisa. “¡Anímense!” Si se abre la posibilidad de que pueda estudiar en el exterior una especialización en diseño, sin duda la tomaría, “pero seguro volvería a Venezuela para continuar luchando por mi país. Siempre regresaría”, afinca. “Todos los carabobeños tenemos algo que nos une a la UC, así sea por un curso que hayamos hecho alguna vez. Es una de las mejores universidades del país”, de eso está segura. Por eso, a quienes no se hayan atrevido aún a participar les dice: ¡Anímense!