Santiago, 21 de noviembre de 2018

Circular Nº30/2018 Ref.: Actualización de Indicadores de la Industria, noviembre 2018. La OIV estimó para 2018 una producción mundial de vino que vuelve a empinarse como una de las más altas desde el año 2000, luego de que la producción de 2017 había sido calificada como históricamente baja. De este modo la producción vuelve a alejarse del consumo mundial que, aunque no cuenta todavía con previsiones para 2018, ha mantenido niveles promedio de 242 millones de hectólitros en los últimos años, cuarenta millones de hL menos que la producción estimada para 2018. Las cifras de producción interna de vino, dadas a conocer en el mes de julio por el SAG, ya daban cuenta de un aumento de la producción en Chile, que el informe de la OIV recoge en sus nuevas estimaciones. En relación a los costos de producción para el vino nacional, si bien los indicadores no son del todo favorables, tampoco muestran magnitudes relevantes y varios de ellos han evolucionado de manera positiva en los últimos meses, tal es el caso del tipo de cambio y el Tipo de Cambio Multilateral del Vino que se han recuperado en lo que va del año, y el precio del vino a productor que ha ido disminuyendo su valor en el transcurso de este año, aunque el promedio sigue siendo superior al de 2017. Las ventas de vino en el mercado nacional han estado marcadas por un aumento en el valor y una disminución en el volumen transado, mientras que los espumantes han aumentado sus ventas, tanto en volumen, como en valor. Las exportaciones de vino embotellado por su parte, muestran aumentos en valor y disminución en volumen, pero destaca el aumento de precio promedio y el crecimiento de los envíos de los segmentos por sobre US$ 40/caja, reafirmando el crecimiento de las exportaciones de mayor valor. Atentamente,

Claudia Carbonell Departamento de Estudios Asociación de Vinos de Chile A.G.