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espectáculos
| Sábado 26 de enero de 2013
TEATRO
Bailan bien, pero quieren actuar nada es imposible . ★★
regu-
lar. intérpretes: Álvaro Navia, Vani-
na Escudero, Magui Bravi, Alexandra Larsson, Laurita Fernández, Diego Castro, Solange Abraham, Soledad Bayona, Yanil García, Erika Flores, Silvina Tordente, Martín Gómez, Nahuel Leguizamón, Nicolás Tadioli, Pablo Juin, Leandro Rodríguez, Emilio Zapata, Jimena González y Camila Zopatti. músico: Sebastián Fahey. coreografía :
María Laura Cattalini. direc-
ción de actores:
Sabr ina A r ia s.
dirección musical y vocal:
Bernstein.
escenografía :
Leonardo Alejandro
Kuprewicz. vestuario: Alejandra Robotti. diseño de video: Maxi Vecco. luces:
Ariel del Mastro y Alejandro Ve-
lázquez. producción general: Gabriel Rosenzvit y Sergio Collica.
sala:
Broadway 2. duración: 90 minutos.
U
na de las escasas virtudes artísticas que tiene y tuvo ShowMatch es que le enseñó a bailar a mucha gente que participó en el segmento “Bailando por un sueño”. Sobre todo a aquellas aspirantes a vedettes, mediáticas y chicas lindas de momento. Antes aparecían en los espectáculos revisteriles sin saber cómo moverse, pero ahora por lo menos bailan. El problema es cuando hablan o intentan actuar (antes de que alguien se rasgue las vestiduras, aclaremos que es un concepto generalizado). Si Nada es imposible hubiese sido un music hall sólo integrado por cuadros musicales donde estas esculturales señoritas puedan demostrar lo aprendido, el resultado seguramente habría sido diferente. En el programa de mano de la propuesta no figuran ni los nombres del autor ni del director. Vaya a saber quiénes habrán sido, pero lo cierto es que el libreto y la intención de convertir a la propuesta en una comedia musical, con hilo argumental, es lo que la vuelve frágil, amateur. Algunos dirán: “No intentaron hacer Shakespeare”. Sí, es verdad. Pero el libreto hasta tiene pre-
tendidos momentos dramáticos que irritan. Hay una trama ligera e inverosimil que pretende mostrar cómo un grupo de chicas audicionan para un espectáculo persiguiendo un sueño. Aquellos momentos de la audición son la excusa para presentar los cuadros musicales que, sin dudas, son lo mejor de la propuesta. La coreógrafa María Laura Cattalini conoce bien el estilo rimbombante de los cuadros de baile que suelen mostrarse en el ciclo televisivo y los reproduce con esa misma fuerza, aunque sin la necesidad de ir al extremo (como ocurre en la TV) de buscar proezas acrobáticas que puedan poner en riesgo la integridad física del que baila. Aquí es efectiva con lo justo y necesario. Las chicas bailan muy bien (sobre todo Laurita Fernández, Magui Bravi y Vanina Escudero), y las acompañan un cuerpo de baile femenino y masculino de primer nivel. Esa calidad artística es complementada por un adecuado diseño de vestuario de Alejandra Robotti, un perfecto diseño de luces de la dupla Del Mastro-Velázquez, y un atractivo diseño de video que brinda potencia a los cuadros. Poco habrá podido hacer Sabrina Arias en su trabajo de dirección actoral con un elenco de “no actores”. La propuesta está encabezada por Álvaro Navia, un cómico televisivo en una composición grotesca y nada creíble. Cuenta chistes, sí, pero de esos que se escuchan desde hace décadas; y tiene muy buena voz, aunque aún no sabe cómo cantar. Poca rigurosidad haciendo todo “de taquito”. Del resto del elenco sólo se puede rescatar la habilidad en la danza de las chicas mencionadas. En el caso de Solange Abraham y Alexandra Larsson, incluso, no se les entiende lo que dicen. El único actor del elenco, Diego Castro, hace lo que puede en su papel de director. Son destacables los pocos cuadros musicales donde participan los cantantes Leandro Rodríguez, Emilio Zapata, Jimena González y Camila Zopatti, lo mejor de un show que equivocó su rumbo y está en las antípodas de Tango feroz, de la misma producción. ß Pablo Gorlero
Lázaro, español casi argentino
martín felipe/afv
Cuando no hay respuestas teatro. Yoska Lázaro indaga en una tragedia del conurbano bonaerense Carlos Pacheco LA NACION
La marginación en el conurbano bonaerense es el tema central de esta nueva producción de un artista extranjero que se siente argentino. Llegó hace diez años a la Argentina, integrando la producción del espectáculo Confesiones del pene. Nacido en Alicante, España, Yoska Lázaro descubrió el teatro en la escuela secundaria y quedó fascinado. La historia de su desarrollo profesional tiene sus vaivenes. A los 20 años debía definir entre seguir el mandato paternal (ser empleado de los ferrocarriles españoles) o su vocación artística. No lo dudó, se fue a Madrid, estudió teatro dos años y luego vino a Buenos Aires. El autor, actor y director dice con una sonrisa que hoy siente
que no tiene pasado. Y en verdad algo de eso hay. Si uno lee su currículum sólo encuentra datos que lo ligan a este país. Se formó con Raúl Serrano, con Ricardo Bartis, hizo la carrera en dirección en la EMAD y salió de allí con el mejor promedio y la beca Pablo Podestá. Eso le posibilitará este año ser asistente de dirección de Guillermo Arengo en el espectáculo Triste golondrina macho, de Manuel Puig, que estrenará el Complejo Teatral de Buenos Aires. En 2007, Lázaro se reunió con un grupo de creadores locales y crearon el grupo Teatro Tres Velas. Ellos trabajan “temáticas sociales e históricas de nuestro país, como la dictadura militar, la identidad, la marginación, la pobreza y la lucha por sobrellevar la realidad”. “Hago obras de cosas que no
entiendo, no puedo entender” explica el teatrista cuando se le consulta acerca de por qué un español se preocupa por bucear en la historia política y social de la Argentina. Uno de los espectáculos más destacados de su carrera fue Los errores de Noé, donde trabajaba a partir de la última dictadura militar. Hoy estrenará Vago, donde ubica la acción en la década del 90, en el conurbano bonaerense, y pinta a personajes muy marginales. “Me cuesta entender la guerra entre hermanos –explica–. Me cuesta entender que dentro de una misma sociedad nos matemos porque tú piensas distinto. Eso es increíble. El conurbano está incomunicado. Uno de los personajes de Vago lo dice: «El problema es que estamos lejos». Ellos tienen la sensación de que, según te acerques o no al Obelisco, existís. Yo viví dos años en San Antonio de Padua, en un barrio en el que no había asfalto ni alcantarillas, ¿cómo puede ser? La gente me dice, «es Tercer Mundo», cosa que me molesta bastante. Me preocupa cuando no nos ocupamos de lo nuestro, lo argentino. Cómo puede ser que la mirada siempre esté afuera.” La trama de Vago gira en torno a la historia de hermanos. Él ha tenido un ACV por consumo de drogas y ella debe cuidarlo. Pero sus padecimientos por conseguir trabajo y hacer que su cotidianeidad se desarrolle por carriles normales resulta muy difícil. “Es un tema complejo que a nosotros nos genera mucha discusión interna – comenta Lázaro–. Mi teatralidad no tiene soluciones. Yo hago preguntas, pinto situaciones y luego el público, en su oscuridad piensa, reflexiona. Le gusta o no, pero les hago presente una par de situaciones sobre las que me parece que está bueno poner los ojos encima y no girar la cabeza. Pero respuestas no tenemos.” El elenco de Vago está integrado por Fernando García Valle, Romina Oslé, Marcelo Saltal, Julieta Timossi, Nicolás Blandi.ß
Vago De Yoska Lázaro Funciones: sábados, a las 21. Teatro: en El Abasto, (Humahuaca 3549).Entradas desde 60 pesos.
tango
Milongas vintage y electrónicas en La Usina del Arte Hoy y mañana, a partir de las 17, comenzará el ciclo gratuito de grandes milongas en La Usina del Arte de La Boca, que se repetirá el primer fin de semana de febrero con la presentación de un seleccionado de cantantes, músicos, bailarines y DJ. Figuras como Raúl Lavié, Rodolfo Mederos, Alberto Podestá y el Sexteto Mayor, más las milongas electrónicas animadas por los DJ Villa Diamante y Remolón de Zizek, estarán en el bello edificio de Av. Pedro de Mendoza 501. Gratis.ß
rock
Babasónicos en pantalla Una historia de rock en tiempos convulsos es el nombre del documental sobre Jessico, el álbum que consagró definitivamente a Babasónicos y que tendrá su primera proyección el 19 de febrero, en la Ciudad Cultural Konex. Dirigido por Alejandro Martín Arias, el film cuenta con declaraciones de los integrantes de la banda, amigos, colegas, su mánager y periodistas, y ubica al disco en el convulsionado contexto en el que se editó: a fines de 2001 y con el país al borde una enorme crisis económica y social.ß
en directo
Molotov, al Luna y al interior El cuarteto mexicano está de vuelta por estas tierras, y en este caso para emprender una gira de cuatro shows en cuatro locaciones diferentes. El primero será el 9 de febrero en Salta, junto a Illya Kuryaki and the Valderramas, y a él le seguirán el del 11 en Cosquín Rock, en Santa María de Punilla, y compartiendo escenario con Babasónicos y Las Pastillas del Abuelo, entre otros; el 12 en Corrientes, con Miranda! y, el 16, en el Luna Park porteño. Para este show las entradas, desde 150 pesos, ya están a la venta.ß