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espectáculos
Nº 12
| Lunes 21 de octubre de 2013
LUNES 21 de OCTUBRE
DATOS DISTRIBUCIÓN
Nº 13
Distribuidor: ..................................................................................................................................... Línea: ....................................................................................................................................................... Vendedor: .......................................................................................................................................... Paquete: ...............................................................................................................................................
PróximA ENTREGA LUNES 28 de OCTUBRE Válido exclusivamente en el territorio de la República Argentina, excepto en Jujuy, Rosario, Santa Rosa y Concepción del Uruguay.
Amores, desamores y abandonos
Y un día nico se fue. Tomás Fonzi y Walter Quiroz le ponen el cuerpo al musical –basado en el libro
del periodista Osvaldo Bazán– que dirige Ricky Pashkus en la Usina del Arte Viene de tapa
Por orden alfabético, el maestro de artistas otra vez reunió un dream team de intérpretes: Augusto Fraga, Ángel Hernández, Virginia Kaufmann, Cynthia Manzi, Juan José Marco, Tommy Martínez, Milagros Michael, Rodrigo Pedreira, Dennis Smith, Lucila Tolcachier, Silvana Tomé, Déborah Turza y Sebastián Vitale. Faltaban los protagonistas, dos actores que no vinieran del palo del musical. Tomás Fonzi confirmó su participación de inmediato, y también lo hizo Gastón Pauls, quien luego se desvinculó del proyecto. En su lugar ingresó Walter Quiroz. –¿Y un día Nico se fue… adónde? Walter Quiroz: –Es un viaje de ida [risas]. Nico se está yendo siempre. En este caso, de la vida de alguien, y deja un vacío enorme. Hay otro personaje, el mío, Osvaldo, que construye todo a partir de Nico. La obra habla de un darse cuenta: ¿estás con alguien porque realmente lo querés o porque buscás tapar un vacío, un desamor previo? Tomás Fonzi: –Nico es funcional a la patología de Osvaldo. Toda relación es un círculo, cada uno se complementa con el otro. –¿Cómo fue su experiencia en la incursión en el musical? Fonzi: –Apasionante. Es muy buena esa sensación de ser primerizo y de poder disfrutar de cada paso, del más chico al más grande. Me siento como un niño. Tomé clases de canto, de danza, pero ningún entrenamiento ni clase se compara con los ensayos. Ahí sentís que todas las barreras que podías llegar a poner desaparecen. Nunca fui un consumidor asiduo de musicales, pero siempre me pareció admirable el trabajo de sus artistas. Quiroz: –¿Viste cuando en El mago de Oz aparece el huracán y de repente, si te atrapa, te lleva a otro mundo? Eso es el musical. Ricky me dijo que esto iba a ser devastador, una locomotora que te pasa por arriba. Y así fue. Actuar es una cuestión de fe. –Toda obra tiene su complejidad, ¿cuál fue para vos la de Y un día…? Ricky Pashkus: –Hicimos un wor-
Masticar la cabeza del autor
Walter Quiroz y Tomás Fonzi se enfrentan a un desafío que los estimula y enriquece kshop con el texto en el taller de Julio Chávez para ver qué generaba el material. Vi esos primeros minutos y me pareció espantoso, porque no tenía humor. La obra obliga a un humor que no quiere decir gracioso, sino buen humor. Había tomado el tema del amor gay con solemnidad. Me había equivocado. Ésta es una obra sin el traumatismo de la discriminación, es una historia de amor y de lo que le ocurre a una persona cuando es abandonada. Al maestro, con cariño Tomás Fonzi viene de algunas temporadas muy activas en teatro, dirigido por Eva Halac (Código de familia) y Lía Jelín (Buenas noches, muchas gracias). Walter Quiroz es uno de los exponentes de la generación de jóvenes actores, con una tarea incesante en roles complejos, como las recientes –ambas dirigidas por Mariano Dosse-
Aparte de este proyecto musical que lo tiene feliz, Pashkus pone a punto Sorpresas, obra que debutará el 22 de noviembre en Mar del Plata, con Carmen Barbieri y Moria Casán, entre otras actrices. –Estás acostumbrado a trabajar con figuras muy populares, ¿cómo es esta experiencia de trabajar con artistas que además son tan mediáticas? Pashkus: –Si hay un actor, el resto deviene. El problema es que no haya un intérprete o que el material no sea el apropiado. Carmen es actriz y además hizo esta obra en Carlos Paz, como reemplazo de Ana María Cores. Y Moria es muy buena actriz... Cuando nos sacamos la foto para la marquesina, en la sala de maquillaje, vi en Moria una expresión gigante. Esa cara la pone a ella en condiciones de hacer lo que quiera, no solamente teatro de revista.
De conejillos de Indias
Elocuente experiencia política
Siempre al borde del abismo
zoo. texto y dirección: Manuela In-
iii furie. autor y director: marcin
diebe. de : Compañía Deutsches
compañía :
elenco:
Teatro de Chile.
Cristián Carvajal, Ariel Her-
mosilla, Héctor Morales y Juan Pablo
liber . elenco:
Compañía Modjeska
au t or a :
Dea
Loher. director: Andreas Kriegen-
Martín. duración: 110 minutos.
burg. dramaturguista : Meike Schmit. sala: Teatro San Martín.
E
l teatro chileno ha encontrado desde hace ya varios años distintos mecanismos para lograr una escena que, de un modo original, se permita jugar con temas de enorme interés. Manuela Infante es una de las representantes de ese nuevo teatro, y Zoo una de sus producciones. Muy apoyada en actores que conoce profundamente, Infante se permite indagar en el mundo de Charles Darwin, más puntualmente en las descripciones de su viaje a Tierra del Fuego y a partir de allí ingresar en un delirio metafóricamente poderoso: una etnia, los Tzoolkman, que tenía como particularidad el no luchar (oposición con la descripción de Darwin) y que se mimetizaba con el ambiente. El juego entre dos científicos y sus criaturas, alternando de escena en escena la identidad de cada uno, llega a zonas extremas en su delirio al tiempo que va sosteniendo cuestiones filosóficas muy complejas que permiten releer nuestro vínculo con los pueblos originarios, el lamentable “choque de culturas”, hasta llegar a un corrimiento de la naturaleza (la montaña vacía) que nos deja abandonados en un laboratorio en el que ya ni siquiera podremos saber cuál es el conejillo de Indias y cuál el profesional.ß federico irazábal
Theater de Berlín.
Theatre (Polonia). sala: Teatro San
Peragallo.
U D
os historias contundentes. Dos madres desesperadas hablan sobre sus hijos. Sus vidas están atravesadas por un social histórico muy determinante. Polonia invadida por los alemanes (un potente punto de partida), una sociedad marcada por un destino del que, parece, no se puede escapar al cabo de los años. En este presente, el recuerdo no desaparece, al contrario, se fortalece a causa de las secuelas que han quedado. Hoy, sólo se rescatan fragmentos de unos mundos personales y se exponen con crudeza. Y resultan más intensos aún, porque esa exposición tiene sabor a reality show, con una banda de rock que hace estallar la escena en más de una oportunidad, de manera estridente. Es magnífica la reconstrucción histórica de la compañía Modjeska Theatre. Severa en su crítica, elocuente en su tratamiento estético; la obra muestra una impiadosa manera de reconocerse como habitante de un país en el que se preferiría no haber nacido. ß Carlos Pacheco
rodrigo néspolo
Un hombre rodeado de divas
fiba
fante.
yecto sentí que aquel era mi lugar natural. ¡Mirá la locura de lo que te estoy diciendo! Hay algo del deseo que funciona: poco tiempo después me llamaron. Se me acaba de morir una amiga, Elena Tasisto, y siento el dolor día a día, pero esta obra no me dejó caer en la angustia. A mí me salvó. Tomás Fonzi y Walter Quiroz trabajaron en Verano del 98, pero nunca se cruzaron ni en escenas ni en los sets. Ahora le dan vida a esta historia de amor y se animan a apostar por un género, por un realizador, por una propuesta e incluso por una sala (alejada de los teatros comerciales) que los expone y los exige. Hay en ellos complicidad y alegría. Se tiran a la pileta sin chaleco salvavidas y se zambullen sin miedo, como el clavadista más experto.ß
n poco a la manera de Carver en Vidas cruzadas, aunque con más humor en el desarrollo e igual dureza en los desenlaces, Diebe presenta varias historias que se entremezclan y tienen como eje la extrañeza de ciertas existencias que no pueden encajar en un sistema de relaciones comunes, porque no comparten los valores dominantes o no pueden elegir qué hacer de sus destinos. Son los llamados “ladrones”, no porque se apropien de lo ajeno, sino debido a que ellos han logrado que sus vidas carezcan de sentido y estén siempre al borde del abismo. Con este atractivo planteo inicial y un conjunto de intérpretes aptos y sutiles, la obra se despliega en dos partes bien diferenciadas: la primera es de exposición de las situaciones que transitan esos seres (demasiado larga y cargada de alusiones poéticas no siempre felices); la segunda, mucho más efectiva, es cuando las historias descubren su verdadera pulpa dramática. En un estilo que va de Buster Keaton al golpe escalofriante, hay secuencias de mucho magnetismo y en las que los actores pueden expandir su afilado histrionismo. Otras donde el puro texto agobia. Si se puede atravesar la capa inicial de la trama, se disfruta mucho de la etapa resolutiva. Es de destacar en el espectáculo el ámbito escenográfico, ideal para la idea propuesta.ß alberto Catena
–La profesionalidad de las dos es enorme Pashkus: –Juegan a todos los juegos del teatro cervantino. Me dicen: “Sí señor, sí maestro”. No les gusta trabajar con el libro en la mano, se enojan con las chicas si llegan tarde. Hay una parte con la que no estoy tan acostumbrado y es la dinámica de ensayo que responde a la realidad en la que viven, llenas de notas, trabajos, etc. Pero cuando están de verdad en el ensayo es increíble. Ahí aparece algo. Además, hay otra diva que está esperando a Pashkus: Judy Garland. De la mano de la monumental Karina K –con quien ha trabajado en Sweeney Todd y Souvenir, entre otras–, en enero debutará en el teatro Apolo con Al final del arco iris, junto a Nicolás Vázquez y Raúl Rizzo.ß
na– El otro Judas, de Abelardo Castillo, y Espectros, de Henrik Ibsen. Así, pasa de un personaje llamado Osvaldo –en el texto del dramaturgo noruego–, que está en busca de la luz, a otro con ese mismo nombre y con ese mismo anhelo en Y un día Nico se fue. –¿Qué sienten que pueden tomar para el futuro a partir de esta obra? Fonzi: –Esta obra llegó en un momento perfecto para mí. Estar ahí arriba del escenario, además de actuar –que es un terreno conocido– cantando y bailando, me atraviesa y desnuda por completo. Esta exposición es justamente lo que estaba buscando. Me animé a tirarme a la pileta, como dice Ricky. Quiroz: –Cuando uno está buscando un maestro, aparece. Los dos estábamos estirando la mano. Cuando vi al elenco en la tele presentando este pro-
Hay algunos periodistas, de los más reconocidos, detrás del micrófono y también sobre los escenarios. Así como lo hizo este año Reinaldo Sietecase (Malditos todos mis ex, de Mariela Asensio), Osvaldo Bazán debuta como dramaturgo y además se anima a la actuación. “Esta obra es su cabeza. El ensamble son todos los datos y recuerdos que van apareciendo a partir de ese abandono”, dice Walter Quiroz. Dicen que toda obra es autobiográfica en algún sentido. En el caso de Y un día Nico se fue aparece un texto “personal”, tal es el adjetivo con el que los intérpretes se refieren al vínculo entre la historia y el autor: “Sabés que vamos a hablar de vos, ¿no? Y que vamos a estar masticando esos rincones de tu cabeza todo el tiempo”, le advirtió Fonzi. “Sonará cursi, pero lo que hicimos desde un inicio fue trabajar con amor, un amor que se contagia”, agrega Quiroz.
Y un día Nico se fue De Osvaldo Bazán Usina del Arte, Caffarena 1, La Boca. Jueves, a las 20.30; viernes, a las 21; sábados, a las 19 y a las 21.30.
Pantallas argentinas Julia Montesoro
estreno//darín, rumbo a españa
El 5 de noviembre, Ricardo Darín se reencontrará con la española Belén Rueda en Madrid para participar de la première de Séptimo, el thriller de Patxi Amezcua coprotagonizado por ambos, que en Argentina está por alcanzar el millón de espectadores y que en España desembarcará en el circuito comercial con 320 copias. Darín y Rueda compartirán esa velada especial, que será transmitida en directo a toda España por la cadena Telecinco Cinema, coproductora de la película, que acaba de estrenarse en Uruguay, que esta semana se conocerá en Chile y que ya tiene lanzamiento asegurado en el resto de América latina, Estados Unidos, Francia, Alemania, Austria, Suiza y Corea del Sur, según informaron las coproductoras argentinas del largo, Kramer & Sigman Films, Cepa Audiovisual y Telefé, que además, junto a sus socios europeos, están negociando los derechos para la realización de una remake de Séptimo en Hollywood.
rodajes//en los sets
En materia de filmaciones, hay varias novedades. En el barrio de Colegiales, Diego Peretti, Andrea Garrote, Roberto Catarineu y Pablo Seijo ruedan la comedia negra Showroom, dirigida por Fernando Molnar (correalizador, entre otros documentales, de Mundo alas y Rerum Novarum), a partir de un guión escrito por el propio cineasta en colaboración con Sergio Bizzio y Lucía Puenzo. En Buenos Aires también transcurre parte de la trama de Socios por accidente, una
Socios por accidente, con Listorti corte fantástico del realizador Marcelo Leguiza, que concursará el mes próximo en el festival Buenos Aires Rojo Sangre.
música//un concierto de película
Ricardo Darín en Séptimo comedia de aventuras encabezada por José María Listorti, Peter Alfonso, Ingrid Grudke, Anita Martínez, Edward Nutkiewicz y Lourdes Mansilla, codirigida por Fabián Forte y Nicanor Loreti, cuyo rodaje se completará en la provincia de Misiones. A su vez, en Mar del Plata, con equipos y actores de esa ciudad, avanza la filmación del thriller de suspenso Dentro del fuego, con dirección de Mariano Oliveros. Y en locaciones porteñas, la productora Mutazion rodó KV62, un film de
“Homenaje a la música del cine argentino” se titula el recital que se presentará en el Teatro Nacional Cervantes (el miércoles 30, a las 20.30, con entrada libre), y donde se interpretarán piezas musicales de largometrajes argentinos como Wakolda, La patria equivocada, La noche de los lápices, La historia oficial y Canción desesperada, entre otros. El recital, organizado por Directores Argentinos Cinematográficos, será brindado por la Orquesta Nacional de Música Juan de Dios Filiberto, acompañada por el grupo Anacrusa, con la dirección de Atilio Stampone y la participación de José Luis Castiñeira de Dios. Las entradas podrán retirarse el día del espectáculo, a partir de las 10, en la boletería de la sala.