Una de las primeras señales que se debe buscar al evaluar el iris de un paciente es la densidad real que este posee, esta será el reflejo del estado de textura de las fibras que forman al iris. La densidad peor será aquella constituida por fibras conjuntivas laxas, formando lagunas, dehiscencias, desgarramientos del tejido, criptas, etc. Así como color del iris es indicativo de las distintas tendencias hereditarias, la densidad nos muestra lo que podemos denominar como vitalidad, poder, tono, resistencia o capacidad de recuperación ante la enfermedad, o nivel de energía vital (Henry Lindlahr). Interpretando en general todos estos signos, podremos realizar una adecuada evaluación del estado constitucional general del organismo de esa persona. Una constitución fuerte por ejemplo se observara en un iris de contextura fina, sin irregularidades o con pocos defectos de las fibras del tejido, lo que equivaldría a una buena o muy buena capacidad de recuperación. Por otra parte podemos ver iris hiperlaxos, erosionados, con agujeros y lagunas; estos iris con señales en cantidad son los más difíciles de interpretar, ya que muchas veces se observa en sujetos normales en apariencia y con pocos o sin problemas de salud. Al evaluar la densidad iridial valoramos que tan compacta es la estructura de las fibras conjuntivas. Si es débil no siempre se corresponde con una mala constitución, ya que se podría relacionar solo con una debilidad del tejido conectivo. Este sería el caso del iris de debilidad conjuntival, propuesto por Deck y otros en la escuela alemana, pero Dorothy Hall, expone de peor a mejor, en tipos de red, por ejemplo: tela de saco, lino, lino-seda y seda, según entretejido de las fibras del iris.
Jensen clasifica según los tipos de maderas: pino, en la densidad más ligera o roble, que es perfecta. La densidad del iris se determina sobretodo genéticamente y aparece a edades tempranas de la vida, esto se comprueba cuando se hacen estudiamos a familiares cercanos.
Según Jensen esta clasificación es fundamental para relacionar la calidad del iris con la constitución del individuo. La densidad del iris representa sin dudas el grado de integridad o perfeccionamiento de los tejidos (a nivel celular también) y órganos del cuerpo, brindándonos la medida de tono, poder de resistencia, vitalidad y poder de regeneración. Estas características de la trama fibrosa son independientes del color y de la presencia de signos, deformaciones y/o manchas en el iris. Se lo llama también iris de alta resistencia.
Es el iris ideal, las fibras del iris son imperceptibles, sin ondulaciones, ni lagunas ni señales blancas de irritación y sin manchas de colores ni lagunas. Las fibras aparecen compactas y finamente unidas entre sí. Todo ello indica una fuerza constitucional elevada, con alto poder de recuperación frente a la enfermedad. Suelen ser personas longevas y no se preocupan mucho por su salud en general. Poseen gran vitalidad y poder regenerativo.
Sus fibras ondulan, hay pequeñas lagunas o señales tipo « pelo peinado » color claro. Existen algunas zonas de debilidad y/o irritación, a veces se relaciona con enfermedades agudas., pero de buen pronóstico. Se observa facilmente en iris azules, porque en los otros que son pigmentarios es mas dificil valorar la de ondulación de fibras. Hay que ver si existen o no lagunas y la normalidad del tejido conectivo.
La mayoría de la gente presenta una densidad dos o tres. En este caso, por zonas o en general observaremos deshilachamientos moderados de las fibras, debilidades, lagunas (pocas), y algunas otras señales. Indica una debilidad constitucional heredada, pero de carácter muy moderado, considerada de pronóstico normal. La mayoría de personas se encuadran en este tipo de densidad, o en la inmediatamente superior.
Existen abundantes signos y sobretodo lagunas. El "Iris margarita" se prenta cuando se localizan alrededor de la corona del iris simétricamente, asemejando los pétalos de esta flor y las fibras radiales se desvían invadiendo los sectores vecinos, lo que nos indica la existencia de un estado de debilidad constitucional. El poder de recuperación de estas personas es más difícil, con convalecencias mas largas, y si llega a ser completa sera debido a la poca fortaleza constitucional.
Es el peor de las clasificaciones, sin embargo no indica enfermedad por su mera presencia. Existen varias o muchas cavidades alveolares y en ocasiones tambien criptas. Las fibras presentan una trayectoria aberrante, desviándose de su eje radial. Posee mal tejido iridial, criptas, irregularidades, y/u otros signos no favolrables, sin embargo no es lo mismo que el iris de debilidad conjuntiva que es un tipo constitucional en particular, pero siempre existe una debilidad constitucional basal. Para una persona con densidad débil una vida higiénica y disciplinada, con correctos hábitos de vida es indispensable para vivir mas años de lo que supone su falta de poder regenerativo y poca energía vital.
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Director del Curso:
Dr. Claudio Estève
Presidente Honorario de la Asociación Naturista de Buenos Aires. Ex Médico panelista del programa "Sin Dolor" de Utilísima Fox 2010/12 - Premio "Martin Fierro" 2011 / Nominado 2012. Conductor del programa “Biocultura y Salud” (lr21.com.uy) Miembro de la Unión Vegetariana Internacional (IVU) Licenciado en Medicina, Alicante, España (COMA.ES) Miembro de la Sociedad Latinoamericana de Fitomedicina
www.asociacionnaturista.com