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Ilustración, diseño y maquetación: Virginia García. Texto: Blas ... —¡Quiero jugar! —gritó Erizo con voz mandona. —¡Vale! —contestó Ratón Blanco— Pero.
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A mi familia, especialmente a Hugo, que lleva siete años haciéndonos la vida más divertida Virginia A mis hermanos Gaspar, Maruja y Miguel Ángel, con los que comparto infancia y sueños Blas Miras

Ilustración, diseño y maquetación: Virginia García Texto: Blas Miras Coordina la colección: Equipo Dylar Impresión: Grafo, S.A. ISBN: 978-84-15966-17-3 Depósito legal: CS 7-2015 © Dylar Ediciones, S.L.

www.dylar.es [email protected] Este libro está impreso sobre papel reciclable, ecológico, libre de cloro, y contribuye al desarrollo sostenible de los bosques.

Sin el permiso previo y por escrito de los titulares del copyright, queda rigurosamente prohibida la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, incluidos la reprografía y el tratamiento informático. Podrán emplearse citas literales siempre que se mencione su procedencia.

¡LO SIENTO! Blas Miras

Virginia García

Ratón Blanco estaba con sus amigos en el recreo. Jugaban con canicas de colores que intentaban colar en un pequeño agujero excavado en la tierra. Con una rama seca habían pintado una raya en el suelo para marcar la distancia. El primero que metiera dos veces su canica ganaría la partida, aunque lo más importante no era vencer, sino pasar un rato divertido entre amigos.

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No era nada fácil. Tiraban por turnos y, cuando alguno fallaba, los demás le animaban: —¡Uy… por poco! ¡En la próxima aciertas! —decían los que esperaban su turno. Después de varios intentos, Coneja Canela fue la primera en meter su canica. Todos se alegraron: ¡por fin alguien había colado una!

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Estaban a mitad de la partida cuando llegó Erizo. —¡Quiero jugar! —gritó Erizo con voz mandona. —¡Vale! —contestó Ratón Blanco— Pero tendrás que esperar a que terminemos la partida. Estamos los cinco empatados. Solo falta que uno de nosotros cuele otra vez la canica para saber quién ha ganado. —¡QUIERO JUGAR YA! —insistió Erizo desafiante.

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