Sonidos de la Tierra y Tierranuestra (A): Retos de

... la utilización de discursos y sermones, sino con el autoanálisis. Festivales regionales. 10 En abril de 2014 el tipo de cambio era de PYG ₲4.431 = USD $1.
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Sonidos de la Tierra y Tierranuestra (A): Retos de duplicar un modelo de negocio social En abril de 2014, en la ciudad de Panamá, se llevaba a cabo el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) para América Latina. Durante este evento, el maestro director, compositor e investigador musical, Luis Szarán, recibía el reconocimiento al Emprendedor Social del Año. Este premio era la máxima distinción mundial en su clase y le había sido otorgado gracias a la visión y al esfuerzo de 10 años para crear Sonidos de la Tierra. Sonidos de la Tierra, una iniciativa apoyada por AVINA en el año 2002, tenía por objetivo crear orquestas infanto-juveniles en comunidades de escasos recursos del interior de Paraguay. Su fin era reducir la pobreza, y promover la ciudadanía, la transformación social y la integración comunitaria1. Para Luis, la música era un arma poderosa en la batalla contra la pobreza y la discriminación. Su filosofía era que, desde el momento en que un niño o una niña sostiene por primera vez un instrumento musical en sus manos, se convierte en miembro de una orquesta. A su vez, la orquesta se considera “una escuela de vida2”. El WEF buscaba identificar y destacar el trabajo de líderes sociales alrededor del mundo. Mediante el reconocimiento a emprendedores, el WEF creaba oportunidades para que las organizaciones tuvieran acceso a redes de contactos usualmente inaccesibles, e intentaba que los empresarios pudieran movilizar los recursos necesarios para incrementar el impacto de sus programas y fortalecer sus resultados. Luis quería aprovechar la oportunidad para aumentar el impacto de Sonidos de la Tierra en el país y la región. Una alternativa era duplicar su modelo de negocio social. Ya contaba con experiencias de duplicaciones directas e indirectas en Argentina, Bolivia, Brasil y Uruguay. Los modelos en cada país se habían convertido en agrupaciones autónomas. Sonidos de la Tierra realizaba actividades de intercambio (seminarios y festivales nacionales e internacionales) con estas organizaciones. Por ejemplo, durante el Seminario Nacional y Festival de Orquestas Sonidos de la Tierra, celebrado en Pilar, Ñeembucú, en febrero de 2014, Luis recibió la visita de Melissa McDonald, quien tenía interés en duplicar el modelo de Sonidos de la Tierra en Bolivia. 1 2

Sociedad Filarmónica de Asunción. http://sfa.org.py. Abril, 2014. Szarán, Luis. “¿Por qué la música es más poderosa de lo que pensamos?” World Economic Forum. Marzo, 2014.

Otra alternativa era ampliar el alcance de Sonidos de la Tierra a través de la consolidación de la Red Sonidos de la Tierra, para incrementar el número de comunidades beneficiadas en Paraguay. Para llegar a más comunidades, el apoyo de profesores itinerantes y la inversión en más instrumentos eran clave. Luis sabía que debía encontrar la manera de atraer a más profesores al programa y se preguntaba, “¿Cuáles eran los cambios que debía hacer al modelo de negocio de Sonidos de la Tierra para ampliar su alcance en Paraguay?” Los recursos financieros eran limitados. Luis debía tomar una decisión y escoger una alternativa que permitiera a Sonidos de la Tierra maximizar el impacto del programa. Debía escoger entre duplicar el modelo de la organización en otro país o mejorar su modelo de negocio para incrementar el número de comunidades beneficiadas en Paraguay (ver Anexo 1). El nacimiento de una idea Luis nació en Encarnación, Paraguay, el 24 de setiembre de 1953. Descubrió su amor por la música durante su niñez. Su familia no aprobaba una carrera musical, porque en esa época se le relacionaba con una vida indisciplinada. El “Maestro”, como le llamaban, luchó por salir adelante con la ayuda de amigos y vecinos que lo apoyaron. Hizo su debut como director de orquesta y compositor a los 18 años. En 1975, obtuvo una beca del gobierno italiano y estudió dirección orquestal en el Conservatorio Santa Cecilia de Roma. Cultivó su carrera a través del estudio y de la investigación musical, y logró cosechar gran cantidad de éxitos en el campo artístico. En 1978, empezó a dirigir la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (OSCA) y, en 1990, fue nombrado como director titular. Su prolífica y sobresaliente carrera musical le permitió ganar fama a nivel internacional, así como un sinnúmero de premios y reconocimientos de clase mundial. Al año 2014, había dirigido más de 1.500 conciertos en todo el mundo, 400 de ellos en Europa3. Su carrera le había permitido alcanzar un alto grado de realización personal y profesional. Había logrado cumplir sus sueños: llevar cultura a los pueblos a través de su música, conocer personas de todo el mundo y recibir remuneraciones económicas significativas. Un día decidió que era el momento de retribuir y se planteó una nueva meta: utilizar la música para ayudar a la sociedad. Después de la caída de la dictadura de Stroessner, Paraguay inició un proceso de fortalecimiento democrático. Se creó entonces la Secretaría Nacional de la Juventud (SNJ). A inicios del siglo XXI, el viceministro de la Secretaría, amigo de Luis, le compartió los resultados de la encuesta anual de jóvenes. En ese momento, 65% de la población era jóvenes menores de 30 años. El 92% tenía como sueño hacerse rico, sin importar la forma ni los medios para hacerlo. En el 8% restante no había filósofos, artistas, poetas, científicos ni soñadores. Para Luis, estos resultados eran desesperanzadores. 3

Ibíd.

Al mismo tiempo, otro amigo de Luis, que era un ingeniero, estaba terminando la construcción de una ruta en el Chaco Paraguayo, cerca de una comunidad indígena. El ingeniero había decidido ayudarles con los ahorros que habían generado en el presupuesto de la obra. Esta comunidad no contaba con agua potable, escuelas ni hospitales. El ingeniero le pidió al cacique que hablara con el resto del pueblo y que propusiera algún proyecto en el que quisiera invertir los fondos ofrecidos. La respuesta fue sorprendente: la comunidad había pedido invertir el dinero en instrumentos musicales. El ingeniero preguntó, "¿Por qué no quieren escuelas?”. La comunidad respondió que cada persona era la escuela de sus hijos. Sorprendido, les preguntó, “¿Por qué no quieren un hospital?”. Nuevamente, la comunidad respondió que las personas vivían sanamente. Para esta comunidad, la música era una parte fundamental de su vida. Por las noches, las personas se reunían a cantar, y esto les inspiraba a encontrar soluciones a los problemas que se iban presentando. Esta historia causó un gran impacto en Luis. Para él, era una revelación que luego lo llevaría a construir uno de los proyectos más importantes de su vida. La música tenía tanto poder que podía utilizarse como una herramienta para la transformación social. Así nació la idea de Sonidos de la Tierra. Crecimiento de Sonidos de la Tierra Fase I. Los ayudantes (2002-2005) Sonidos de la Tierra fue creada formalmente en 2002, como un programa de integración y transformación social a través de la música. Su propósito era combatir la violencia juvenil al aprovechar el tiempo libre, y potenciar la autoestima y las actitudes democráticas de los y las jóvenes4 (ver Anexo 2). Luis estaba convencido de que la música tenía la fuerza para generar cambios en la sociedad. Deseaba crear una iniciativa que, de manera sistemática, buscara alcanzar objetivos sostenibles en el tiempo. Tuvo una idea revolucionaria: crear una organización con una estructura sostenible con un mínimo de recursos; es decir, hacer más con menos. El capital semilla del proyecto fue otorgado por AVINA, una fundación fundada en Latinoamérica en 1994 por el empresario suizo Stephan Schmidheiny. AVINA nació con el fin de apoyar iniciativas emprendedoras orientadas a un cambio sistémico hacia el desarrollo sostenible5. El deseo inicial de Luis, a través del vínculo con AVINA, fue establecer una alianza para concentrar toda su energía en la creatividad y en el terreno, en el contacto directo con la gente y su realidad, dejando la parte administrativa y de gestión a cargo de una institución calificada. Es así, que por recomendación de los representantes de AVINA, se le indica 4 5

Sonidos de la Tierra. ¿Quiénes somos? Sitio web oficial: http://www.sonidosdelatierra.org.py. 2014. Fundación Avina, “Sobre Avina”. Sitio web oficial: http://www.avina.net/esp/. 2014.

el nombre de Tierranuestra como uno de los mejores modelos de gestión, eficiencia y transparencia. Luis encarga entonces a Tierranuestra los servicios administrativos y contables de los fondos de AVINA por tres años. En 2005, el proyecto había tomado mucha fuerza. AVINA decidió nominar a Luis para los premios a emprendedores sociales que la Fundación Skoll realizaba cada año. La Fundación Skoll, fundada en 1999, tenía como misión el impulsar cambios a gran escala, a través de la inversión, asociación y celebración de las personas emprendedoras sociales y de las personas innovadoras que les ayudan a resolver los problemas que más aquejan al mundo6. De 400 personas nominadas de todo el mundo, Luis fue seleccionado como uno de los 13 emprendedores sociales del año. Sonidos de la Tierra recibió entonces la mayor donación desde sus orígenes. Al inicio, los fondos se otorgarían durante tres años pero, debido al éxito del proyecto, el período se prolongó a siete años7. Fase II. La fusión con Tierranuestra (2005-2008) En el año 2005, Luis recibió el Premio Skoll de Emprendedurismo Social, el cual era otorgado bajo una serie de compromisos. El más importante era ampliar el impacto de Sonidos de la Tierra. El crecimiento acelerado del programa, su expansión a otros territorios y la llegada de fondos de diversas fuentes, conllevó a necesitar más apoyo institucional, por lo que Sonidos de la Tierra pasa a ser parte de Tierranuestra, sin perder su identidad. La directora de Tierranuestra era Luisa Abbate, mejor conocida como Lucha. Luis y Lucha se conocían de tiempo atrás. Cuando conversaron sobre la idea con Fundación Skoll, se dieron cuenta de que ambos lideraban proyectos de transformación social y con misiones compartidas. Sonidos de la Tierra trabajaba con base en su enorme capacidad de adhesión y expansión a través de la música. Tierranuestra tenía una gran capacidad para posibilitar el “hacer crecer raíces” y el desarrollo integral de las personas. Tierranuestra ejecutaba procesos educativos que promovían la reflexión, la acción y el compromiso. La experiencia institucional acumulada por Tierranuestra desde sus orígenes también condujo a la organización a emprender proyectos conjuntos con grupos y comunidades. Fase III. Más premios y logros (2008-2014) En el año 2008, la Fundación HSBC nombró a Sonidos de la Tierra como el segundo mejor proyecto de responsabilidad social en el mundo. En mayo de 2013, la UNESCO, a través del Observatorio Regional de Responsabilidad Social para América Latina y el Caribe (ORSALC), otorgó el reconocimiento Ojo de Plata a Sonidos de la Tierra por ser la mejor experiencia de responsabilidad social de la región en cinco categorías: patrimonio, ciudadanía, educación, equidad y medio ambiente. En junio de 2013, el Centro Cultural de la República “El Cabildo” otorgó a la Fundación Tierranuestra y a 6 7

Skoll Foundation “About Skoll Foundation”. Sitio oficial: http://www.skollfoundation.org Fundraising Strategies. Sonidos de la Tierra. Paraguay, 2012.

Sonidos de la Tierra el premio de la Medalla a la innovación, creatividad e investigación científica. Este premio era otorgado por la Cámara de Senadores de la República a aquellas personas que con su trabajo y compromiso realizaban una contribución a la sociedad y se destacaban en su área o llevaban a cabo una gestión en beneficio de la ciudadanía y del país8. En octubre de 2013, Sonidos de la Tierra reuniría a 420 arpistas en el marco del VII Festival Mundial del Arpa en Paraguay, para lograr el récord mundial World Guinness Record con el conjunto de arpas más grande de la historia. Un año después, también ganaron el premio World Guinness Record como Marca batidora de récords del año en el Festival of Media LatAm en Miami, reconocimiento que los situó como el mejor World Guinness Record de Latinoamérica. Para febrero de 2014, el proyecto había alcanzado grandes logros. La metodología del Conservatorio Sobre Ruedas había permitido el acceso directo a la educación musical para más de 14.000 niños, niñas y jóvenes de escasos recursos en 205 comunidades paraguayas9. Se habían becado a 200 estudiantes de música. Además, los estudiantes de Sonidos de la Tierra habían obtenido 30% de los puestos en las cuatro orquestas profesionales que existían en Paraguay. Desde el punto de vista de la sostenibilidad, solo 12% del presupuesto era cubierto por donaciones, el 88% restante se lograba cubrir a través de la capacidad de autogestión que se había desarrollado en las comunidades. En el año 2013, los beneficiarios del programa habían generado aproximadamente USD $9.000.000, según los cálculos de Tierranuestra. El modelo de negocio social de Sonidos de la Tierra Misión de Sonidos de la Tierra La misión de Sonidos de la Tierra era promover el desarrollo cultural, social y económico de niños, niñas y jóvenes de bajos ingresos, para cultivar buenas prácticas ciudadanas y erradicar la pobreza. Sonidos de la Tierra buscaba identificar comunidades con potencial para alcanzar su misión. Luis explicaba: “En el momento que entro en una comunidad, me doy cuenta si las personas están preparadas para el cambio y si quieren trabajar con nosotros, o si es una comunidad sin energía y sin deseos de mejorar su vida. Nosotros podemos trabajar solamente con comunidades que estén preparadas para realizar cambios y que quieran mejorar su estilo de vida”. Aparte de buscar comunidades que estuvieran preparadas para cambiar, se buscaba trabajar en grupos con suficientes niños, niñas y jóvenes para crear escuelas de música. En las escuelas, se ponían en práctica los valores que Sonidos de la Tierra quería promover. Luego, se realizaba un acercamiento a los padres de familia para crear las “sociedades filarmónicas”—organizaciones comunitarias con el objetivo de garantizar la 8 9

Sonidos de la Tierra. El programa. Sitio web oficial: http://www.sonidosdelatierra.org.py. 2014. Ibíd.

sostenibilidad y participación continua de los jóvenes en la escuela, la orquesta y los eventos relacionados con la música. En un principio, Sonidos de la Tierra se encargaba de comprar los instrumentos, capacitar a los padres de familia y proveer los profesores. Posteriormente, debían ser las organizaciones de padres las que realizaran actividades de recaudación de fondos para mantener operando a las orquestas y a las escuelas de música. Orquestas de las comunidades. El modelo de Sonidos de la Tierra era peculiar. Los niños, los jóvenes y sus padres, además de ser beneficiarios, eran fundamentales para lograr los objetivos del programa. Se empeñaban en aprender a trabajar en equipo y con disciplina. Las orquestas representaban a sus ciudades en los festivales organizados por Sonidos de la Tierra de manera periódica. Pertenecer a una orquesta se había convertido en una fuente de orgullo para sí mismos, sus padres y vecinos. Las sociedades filarmónicas organizaban emprendimientos para poder financiar la operación de las escuelas de música y la asistencia de los niños y jóvenes a los distintos eventos. Por esto, Sonidos de la Tierra dependía relativamente poco de las donaciones. En algunos pueblos, las organizaciones de padres iban un paso más allá en su contribución al proyecto. Algunas comunidades habían logrado recibir terrenos y ladrillos donados por sus municipalidades y construían el salón para que sus hijos recibieran clases. Una comunidad ejemplar era la de Fuerte Olimpo, un pueblo muy lejos de la capital, sin internet, agua potable o luz eléctrica. A pesar de sus circunstancias, su orquesta, Panaca, se había convertido en una de las mejores orquestas del país en tan solo dos años. Sonidos de la Tierra atribuía su éxito al amor que la comunidad sentía por la música. En 2014, estaban construyendo un teatro y todos los niños estaban asistiendo a la escuela. Profesores de las orquestas en las comunidades. En un principio, fueron músicos de orquestas profesionales quienes habían ayudado a Luis a iniciar las escuelas de música. Con el paso del tiempo, los mejores estudiantes se habían convertido en profesores. Algunos eran miembros de sinfónicas nacionales. Para los músicos, representaba un gran esfuerzo convertirse en maestros de la Red Sonidos de la Tierra. La carrera musical demandaba entrenamiento constante y mucha disciplina. En cambio, la música era un medio para alcanzar un fin en Sonidos de la Tierra. La calidad musical no era lo primordial, por lo que los profesores sacrificaban sus expectativas de excelencia para generar equipos e incluir a todos los participantes en las orquestas. El tiempo dedicado a Sonidos de la Tierra era tiempo no invertido en sus propias carreras. Muchos decidían participar por el agradecimiento y la admiración que sentían hacia el proyecto y hacia Luis.

Willian Aguayo era uno de los exalumnos que se había convertido en profesor. Su participación en Sonidos de la Tierra inició en una de las orquestas. Con su gran talento y el apoyo del Maestro, inició una carrera como músico profesional. En 2014, Willian dividía su tiempo entre la dirección de una de las orquestas más importantes del país y su trabajo en Sonidos de la Tierra. Su labor consistía en dirigir tres orquestas y coordinar la logística de los mayores eventos que la organización realizaba. El tiempo que William dedicaba a Sonidos de la Tierra le restaba tiempo para perfeccionar su técnica musical. A pesar de esto, siguiendo el ejemplo de Luis, él quería devolver a la sociedad la ayuda que le había sido brindada en el pasado. Willian decía: “El maestro Szarán es la inspiración con la que se comenzó todo esto y para mí es uno de mis principales guías; me abrió muchas puertas para poder trabajar en conservatorios; me invitó a dirigir una orquesta profesional; es una inspiración”. Hacia finales de 2013, había 98 profesores itinerantes trabajando con la metodología del Conservatorio Sobre Ruedas, y viajando constantemente para cubrir la mayor cantidad de lugares posibles. Los profesores recibían PYG ₲60.000 por hora10 y eran compensados por la distancia que viajaran para llegar a las comunidades. La remuneración de Sonidos de la Tierra estaba dentro de los rangos ofrecidos por el mercado. Se estimaba que aproximadamente 80% de los profesores habían sido formados dentro del programa (ver Anexo 4). El sistema pedagógico El sistema pedagógico musical estaba inspirado en los conceptos del método Suzuki, aplicados con base en la realidad de cada región, etnia y grupo social. La materia prima había sido la música local propia de Paraguay, la música clásica y la música popular universal. El método Suzuki era una metodología creada en Japón en la década de los setenta. Con este método, el estudiante aprendía escuchando y tocando un instrumento. Se basaba en la experiencia vivencial para enseñar música de manera rápida y masiva. El estudiante no se sometía al estudio tradicional, sino que aprendía a través de juegos, para que el aprendizaje musical le provocara placer. Sin darse cuenta, el estudiante se encontraba inmerso en un régimen disciplinado que nacía de disfrutar de la música y no de la obligación de estudiarla. Sonidos de la Tierra se inspiró en la metodología anterior y la adaptó a la realidad de Paraguay. Se diseñó un repertorio y una pedagogía de manera tal que una persona que tocara una sola nota ya podía ser parte de una orquesta. Esto ayudaba a crear sentido de pertenencia, lo cual era una piedra angular para desarrollar la motivación en los estudiantes y el desarrollo de su autoestima. En las clases, se desarrollaban situaciones reflexivas para que los estudiantes aprendieran tolerancia y la disciplina, sin la utilización de discursos y sermones, sino con el autoanálisis. Festivales regionales. 10

En abril de 2014 el tipo de cambio era de PYG ₲4.431 = USD $1.

El programa proveía un siguiente nivel de integración social a través de festivales regionales. Generalmente, duraban de tres a cinco días, durante los cuales se organizaban actividades y seminarios. Eran oportunidades en las que participaban personas provenientes de diferentes zonas del país y se generaba una gran interacción multicultural. Por ejemplo, en la zona del Chaco, se juntaban brasileños, menonitas e indígenas (rivales en la vida cotidiana) para integrar una orquesta y tocar música juntos. Los seminarios y festivales eran espacios de intercambio e integración para los niños, las niñas y los jóvenes de la red de Sonidos de la Tierra. Estaban orientados al desarrollo y fortalecimiento de nuevas técnicas musicales, a la integración y a la generación de valores a través de la música. Estos eventos eran organizados por las asociaciones culturales y contaban con el apoyo institucional de Sonidos de la Tierra. Se habían constituido en espacios de aprendizaje y crecimiento. Representaban el más claro ejemplo de integración, autogestión, organización e impacto positivo del programa en cada comunidad, por el nivel de convocatoria y por la movilización de recursos humanos, económicos y materiales que los mismos generaban. Becas para talentos musicales. A medida que el proyecto se fue desarrollando en las comunidades, fueron surgiendo niños y jóvenes talentosos. En respuesta, Sonidos de la Tierra creó un programa de becas. Los becarios viajaban una vez por semana desde su pueblo a Asunción, para estudiar en un conservatorio, con un maestro privado o en la universidad. Esta parte del programa se había convertido en un ciclo solidario: lo que recibían en becas lo devolvían enseñando música a otras personas en el programa, en sus localidades o comunidades cercanas. Organización Sonidos de la Tierra era un programa institucional de la Fundación Tierranuestra—una entidad privada con la que compartía fines y que le otorgaba el respaldo legal, administrativo y organizativo. Las autoridades de Sonidos de la Tierra eran la asamblea de asociados, el consejo directivo, el síndico, la dirección ejecutiva, la dirección del programa SdT, la dirección administrativa y otros miembros del personal, divididos por programas y proyectos. Luis fungía como director general y máxima autoridad de Sonidos de la Tierra. Su principal función era ser el líder del programa. Además, se encargaba de captar recursos, rendir cuentas ante los donantes, aprobar presupuestos y motivar a los distintos grupos que conformaba la organización.

En un siguiente nivel del organigrama estaba el SdT, un consejo académico que respondía a Luis. El consejo era un equipo con fines académicos y servía como instancia de consulta y planificación de actividades. También se contaba con un asistente de dirección y un asistente administrativo. Existían las siguientes tres áreas funcionales: Coordinación de Relaciones Institucionales—Esta área estaba a cargo de Andrea Burt. Era un puesto clave para mantener la comunicación con donantes, auspiciadores e instituciones. Andrea se encargaba del marketing de causa, de las nominaciones a premios y becas, y del desarrollo de la marca Sonidos de la Tierra y Orquesta H2O. Las redes sociales cumplían un rol imprescindible a la hora de empoderar a la Red Sonidos de la Tierra y al público en general. Coordinación Académica—Esta área planificaba el calendario de jornadas académicas; trabajaba con los coordinadores locales y profesores itinerantes; y manejaba los programas de becas, festivales y seminarios. El responsable era Elio Fleitas. Coordinación de Producción—Esta área estaba a cargo de Willian Aguayo. Se encargaba de la logística de todos los eventos que Sonidos de la Tierra llevaba a cabo, y de la producción de los seminarios y festivales. Willian era el director de la Orquesta H2O. Gracias a una planificación estratégica institucional y a la voluntad indeclinable de Lucha y Luis, se estaba logrando con éxito el desafiante proceso de fusión entre Tierranuestra y Sonidos de la Tierra. En un inicio, ambas organizaciones tenían orígenes muy distintos. Tierranuestra era una organización conformada por empresarios e intelectuales y Sonidos de la Tierra provenía del campo artístico. En 2014, después de muchos esfuerzos y de la cooperación entre sus líderes, la fusión se había completado. Tierranuestra tenía 20 empleados que trabajaban con Sonidos de la Tierra y el resto de proyectos que la institución manejaba. Para Sonidos de la Tierra, un factor importante era tener reglas claras. El equipo trabajaba con todos los sectores de la sociedad, sin comprometerse con ninguna línea política o religiosa. Las decisiones más relevantes se tomaban por la dirección colegiada de Lucha y Luis, previa consulta al consejo directivo, y en conjunto con los coordinadores de cada área. Por otro lado, las comunidades no dependían del equipo de Sonidos de la Tierra para tomar sus decisiones. En este nivel, era importante el trabajo de los coordinadores locales para motivar y entusiasmar a las orquestas y a los padres de familia. Esta independencia entre los diferentes niveles de la organización generaba confusión. La falta de una estructura formal entre orquestas, organizaciones de padres y Sonidos de la Tierra no permitía identificar responsabilidades en distintas situaciones. Andrea Burt comentaba que, por ejemplo, si había un accidente en el traslado de las orquestas a los

eventos, no estaba claro quién debía responsabilizarse por los daños. En la medida que el proyecto creciera, este tipo de situaciones eran cada vez más probables. Recursos económicos y no económicos •

Voluntarios. El modelo de Sonidos de la Tierra funcionaba principalmente con base en los recursos humanos y sus relaciones. Un claro ejemplo era la centralidad que jugaba Luis en su organización. Según Patricia Burt, coordinadora de relaciones institucionales, “Sonidos de la Tierra dependía solamente del interés de la gente. Si las comunidades estaban interesadas en progresar, el proyecto iba a funcionar”. Explotar la fama de Luis era algo que ayudaba a despertar el interés de las personas. También ayudaba a que los padres de los alumnos estuvieran más receptivos a desarrollar las sociedades filarmónicas. Lo mismo sucedía con los donantes y su disposición a contribuir al proyecto. Cuando Sonidos de la Tierra empezó, Luis le dedicaba 10% de su tiempo; en febrero de 2014 le estaba dedicando 40%.



Fondos y financiamiento. La fama de Luis como director de orquesta, su carisma y sus numerosos amigos alrededor de Europa le abrieron la puerta hacia otros donantes. Algunos importantes donantes eran el Parlamento Nacional; el Fondo Nacional de Cultura (FONDEC); Itaipu Binacional; la Sociedad Filarmónica de Asunción; las embajadas de Alemania, Estados Unidos, Francia e Italia; la organización Partners of the Americas (Capítulo Paraguay-Kansas); la Dirección de Cultura de la Municipalidad de Asunción; y más de 100 empresas, municipios, gobernaciones y auspiciantes11 (ver Anexo 5).



Dinámica en las comunidades. Sonidos de la Tierra había logrado que grupos de personas normalmente segregados y hasta antagónicos trabajaran juntos. La formación de coros y orquestas juveniles a nivel comunitario, regional y nacional había logrado trascender las diferencias. Se había generado un sentido de pertenencia entre todos los actores: niños, jóvenes, padres de familia, maestros, religiosos, empresarios y políticos.

Estructura de costos La operación de Sonidos de la Tierra se encontraba alrededor de los USD $500.000 por año. Los principales gastos eran los salarios del personal de la organización, las becas y los eventos. Los eventos incluían los seminarios y festivales (ver Anexo 6).

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Fundraising Strategies. Sonidos de la Tierra. Paraguay, 2012.

El momento de tomar una decisión Después de haber recibido el reconocimiento del Foro Económico Mundial, Luis regresó a Paraguay. Durante su vuelo, mientras miraba al cielo, tuvo la certeza de que era su responsabilidad incrementar el impacto de Sonidos de la Tierra. Sabía que el éxito del programa se debía a una mezcla de muchos factores—los más evidentes eran su propio liderazgo y carisma. Había logrado que los profesores, estuvieran dispuestos a sacrificar sus propias carreras por un fin social. El éxito del proyecto se medía en resultados y no en el tamaño de su estructura organizativa, con el fin de mantener la sostenibilidad del proyecto y su independencia de donantes. Luis también pensaba en Lucha y el aporte de Tierranuestra. Su contribución había sido clave. Habían logrado mantener las reglas del juego claras y la transparencia en el manejo de la información y los recursos. Otro factor de éxito era la participación comunitaria. La autogestión de cada equipo a nivel local había logrado romper con la lógica paternalista y había convertido a los beneficiarios del proyecto en sus propios agentes de cambio12. Luis se preguntaba, “¿Cómo puedo incrementar el impacto de Sonidos de la Tierra?”. Dos soluciones parecían ser las más viables: 1. Duplicar el modelo en otro país. Luis quería llevar el modelo a Bolivia. Había que tomar en cuenta la importancia de su liderazgo en el desarrollo exitoso de Sonidos de la Tierra. Se propuso como líder en Bolivia al director del Sistema de Coros y Orquestas, Rubén Darío Suarez (ver Anexo 7). También había que reconocer que, en Paraguay, el modelo había sido exitoso en parte debido a que la cultura y la vida social del país giran en torno a la música. Luis se preguntaba si en el contexto boliviano el proyecto tomaría la misma fuerza que en su país (ver Anexo 8). Además, era importante definir cuantos profesores se necesitarían para iniciar el proyecto y cómo se iban a atraer al nuevo programa. Otra pregunta era si se utilizaría el nombre de Sonidos la Tierra y qué implicaciones tendría esto. 2. Mejorar el impacto al llegar a más comunidades. Ampliar el modelo de negocio en lugares donde todavía no se había logrado llegar era una alternativa con potencial. Aún existían muchas comunidades en el país en las que no existía el programa. Según los anuarios de la Dirección General de Estadísticas y Censos de Paraguay, la población considerada dentro del grupo de niños y jóvenes era mayor a 40% a finales de 2012 (ver Anexo 9). Para esto, se necesitaría aumentar el número de profesores y generar incentivos para que los profesores que ya eran parte del programa estuvieran dispuestos a seguir contribuyendo al proyecto.

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Factores de éxito del proyecto Sonidos de la Tierra en la construcción de capital social en Paraguay. Arrúa Gauto Gloria. Asunción, Paraguay. 2010.

Finalmente, Luis estaba considerando, en el corto plazo, reducir su participación en Sonidos de la Tierra. Debía identificar a la persona adecuada para sucederlo, la cual debía ser capaz de mantener el equilibrio en la estructura de la organización.

Anexo 1: (a) Paraguay Paraguay está localizado en Suramérica. Algunos analistas decían que, desde el punto de vista cívico, Paraguay se caracterizaba por el individualismo, la fragmentación, la falta de confianza en las instituciones y el débil capital social13. Esto era, en parte, el resultado de varios sucesos históricos. Paraguay había sufrido procesos colonialistas que marginaron y suprimieron las manifestaciones indígenas. La cultura, la religión, la lengua y las costumbres españolas fueron impuestas. Posteriormente, las múltiples dictaduras, mantenidas a través de reelecciones fraudulentas, debilitaron la institucionalidad, transparencia y confianza en el gobierno14. Un aspecto positivo de la cultura paraguaya era la importancia que la música tenía en la vida cotidiana desde los tiempos en que el país era habitado por aborígenes. Para ellos, la música era parte de las ceremonias y celebraciones; propiciaba la fecundidad y las buenas cosechas, y ahuyentaba a los malos espíritus. En épocas precoloniales, los indígenas crearon sonajas, flautas y tambores; hacían instrumentos con los materiales que tenían disponibles (calabazas, troncos huecos, dientes y pezuñas de animales, etc.). Durante la época colonial, llegaron misiones jesuitas que incluían a muchos músicos. Varios nuevos instrumentos fueron introducidos y ampliamente difundidos, como el violín, el clave, el órgano, la guitarra y el arpa. La difusión del arpa llegó a tal punto, que más tarde se convertiría en el instrumento nacional de Paraguay. Para los jesuitas, la música también era una parte importante de su vida cotidiana. El único aspecto de la cultura indígena que no fue censurado fue la lengua guaraní. Con esto se dio paso a una fusión musical en la que las melodías y los ritmos eran españoles, pero las letras eran cantadas en guaraní15. Tras la independencia de Paraguay en 1811, se instalaron continuas dictaduras. Las manifestaciones artísticas se restringieron al máximo, excepto por la música. Durante el resto del siglo XIX, la música popular continuó desarrollándose y difundiéndose mediante la organización de bandas militares en reuniones y eventos sociales16. Durante el siglo XX, la inestabilidad política llevó a muchos músicos al exilio. A pesar de lo anterior, a partir de la década de los setenta, la música paraguaya mostró señales de renovación. La actividad musical fue incrementándose cada vez más en las décadas subsiguientes. Históricamente, fue la música la que en momentos de crisis aportó esperanza al pueblo paraguayo, hasta convertirse en una parte esencial de su vida. Muestra de esto fue el desarrollo de íconos culturales relacionados con la música, como el arpa, la polca y la guarania. 13

Arrúa, Gauto Gloria. “Factores de éxito del proyecto Sonidos de la Tierra en la construcción de capital social en Paraguay”. Asunción, Paraguay. 2010. 14 Barreiro-Saguier, Rubén. “Los intelectuales frente a la dictadura: Represión cultural en Paraguay”. Revista latinoamericana de ciencias sociales. No. 35. ISSN: 025-3552. www.nuso.org. 15 Szarán, Luis. “Diccionario de la música en el Paraguay”. La Gráfica. Asunción, Paraguay. 1999. 16 Szarán, Luis. “Diccionario de la música en el Paraguay”. La Gráfica. Asunción, Paraguay. 1999.

Al iniciar el siglo XXI, Paraguay enfrentaba importantes retos. Como respuesta, estaban surgiendo iniciativas ciudadanas que buscaban crear un impacto social positivo. Una de estas era Sonidos de la Tierra, un emprendimiento social del maestro y musicólogo Luis Szarán. Anexo 1b: Breve historia política de Paraguay Paraguay se independizó de España en el año 1811. Durante los años siguientes, el país se sumergió en un estado convulso y complicado. Fue un país gobernado por tres dictaduras sucesivas. Entró en guerra con Argentina, Uruguay y Brasil. Se estima que el número de vidas que se perdieron era equivalente a la mitad de la población. Posteriormente, en las décadas de los años treinta y cuarenta, el país se vio nuevamente inmerso en una situación de inestabilidad política. Hubo una guerra contra Bolivia, una guerra civil y el surgimiento de nuevas dictaduras. En 1954, el General Alfredo Stroessner tomó el poder e instaló un gobierno que duraría 35 años. En 1989, un golpe de estado acabó con esta dictadura. Finalmente, en 1992, se cambió la constitución de la república con el fin de garantizar la democracia. En 2012, la población de Paraguay se componía de descendientes de españoles, guaraníes y de inmigrantes europeos. Eran idiomas oficiales el guaraní y el español17. Los retos económicos del Paraguay eran grandes. En las últimas dos décadas, Paraguay había tenido un crecimiento económico promedio de 3%. El PIB per cápita alcanzaba los USD $3.400 en 2012. El porcentaje de la población que vivía con un ingreso por debajo de USD $4 era de 32,8%. En ese mismo año, el índice de Gini era de 52,4%18. El motor de la economía y principal fuente de empleo era la actividad agrícola. El porcentaje de la población económicamente activa en el año 2012 que se dedicaba a actividades agropecuarias, pesqueras o agrícolas era de 23,5%. El promedio de ingreso mensual de estas ocupaciones era de USD $200. En el plano educativo, el promedio de escolaridad de la población mayor de 25 años era de ocho años. El 54,2% de los jefes de hogar tenía una escolaridad menor que seis años. Desde la perspectiva de indicadores del sistema de salud, también había estadísticas alarmantes. El 73% de la población no contaba con ningún tipo de seguro médico. En las áreas rurales, el total ascendía a 89,6%19.

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Paraguay, Country Profile, Country Watch. http://www.countrywatch.com/about/about.aspx. Diciembre, 2013. Indicadores Ecónomicos. World Bank. http://data.worldbank.org. Diciembre, 2013. 19 Encuesta Permanente de Hogares 2012. Dirección General de Estadísticas y Censos. http://www.dgeec.gov.py. Setiembre, 2013. 18

Anexo 2. Sonidos de la Tierra: Cómo trabajamos20

20

Sonidos de la Tierra: Cómo trabajamos. Sitio web oficial: http://www.sonidosdelatierra.org.py. 2014.

Anexo 3. Sonidos de la Tierra: Organigrama Asamblea FTN Síndico Consejo de Dirección

Dirección Ejecutiva Administración y Finanzas

Asesores: legal, impositivo y de proyectos

Audioria Interna

Programa Sonidos de la Tierra

Comunicación Institucional

Programa Comunidad Emprendedora

Proyecto Turismo Sostenible

Dirección General Luis Szarán

Consejo Académico

Asistente de Direccón Oscar Escurra

Asist. Administración Guillermo Bogado

Coordinacion Relaciones Institucionales Andrea Burt Voluntario s Internac.

Coord. Academica Elio Fleitas

Instructores Itinerantes

Asistente Becas

Representan te Local

Coord Producción Willian Aguayo

Luthiers Elencos

Secretaría Ejecutiva Raquel Lopez

Asistente Jaime Escurra

Anexo 4. Estadísticas de Sonidos de la Tierra

Comunidades beneficiarias Niños y jovenes participantes Número de becados Comunidades indigenas Profesores del programa Jornadas academicas permanentes Seminarios locales Seminario regionales Seminarios nacionales Festicales nacionales Alianzas con municipalidades Alianzas con ministerios públicos Alianzas con medios de comunicación

Año 2013 104 3500 94 8 98 3120 100 9 2 2 5 4 5

Anexo 5. Sonidos de la Tierra: Donaciones

Detalle de Donaciones Período 2007-2012 (Expresado en US$) Donante

Origen del donante

Skoll Foundation Estados Unidos Mission Alemania Alemania Mission Suiza Suiza Mission Austria Austria Adveniat Alemania Onlus Italia Petrobras Paraguay Plan Paraguay Paraguay PGGN Paraguay (Gobierno) Tigo Paraguay HSBC Inglaterra Total por Año

2007

2008

180,000 9,404

180,000 35,500

6,394 1,195

3,611 7,000 91,278 30,178

196,993

347,567

2009 64,046 87,205 28,347 16,216 2,437 12,000 77,406 84,348 33,142 405,147

2010 515,000 46,060 50,000 2,818 13,989 2,818 10,224 85,125 34,231 760,265

2011 54,993

2012

5,122 35,454 5,122 11,076

42,919 63,849 5,152 31,540 5,152 22,156

186,646

88,082

298,413

555,000 813,850

Total por donante 875,000 252,922 201,054 41,439 97,199 25,534 63,651 77,406 535,479 97,551 555,000 2,822,235

Anexo 6. Estructura de costos, 2012

Honorarios Monitores Movilidad y viáticos Becas a jovenes talentosos Seminarios musicales en el interior Creación de orquestas Insumos y materiales Servicios contratados Hospedaje y alimentación Gastos Varios Mantenimientos Varios Comunicaciones Alquileres pagados Energía Total

Fuente: Tierranuestra. Memoria 2012. Paraguay.

US$ 112,886 142,299 61,026 49,278 68,365 514 17,561 43,230 1,772 7,300 3,611 7,125 8,575 1,279 524,823

Anexo 7. Rubén Darío Suarez Arana21 En 1996, Rubén Darío Suarez Arana regresó a Bolivia, tras pasar varios años en Venezuela trabajando con orquestas juveniles. En ese mismo año, Rubén creó el coro y la orquesta de Urubichá. La agrupación se hizo famosa en el I Festival de Música Barroca y Renacentista Americana “Misiones Chiquitos”, que se llevó a cabo en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia. Sus integrantes eran de origen indígena. Para Rubén, las orquestas podían superar barreras de exclusión, pobreza y problemas sociales, y la carencia de una cultura de música clásica o pedagogía musical. Debido a esta creencia, con la ayuda de alumnos avanzados, creó orquestas en distintos lugares de Bolivia. En octubre de 2004, creo la Asociación para el Sistema de Coros y Orquestas (SICOR). SICOR, al igual que Sonidos de la Tierra, había desarrollado su propia metodología de aprendizaje. La misión de SICOR era mejorar la calidad de vida de los niños, potenciar el desarrollo personal y fortalecer el núcleo familiar a través de la música. El éxito de SICOR había despertado el interés de otras poblaciones en Bolivia y se había convertido en un movimiento regional. A nivel nacional, Rubén era un músico muy reconocido que tenía un gran poder de convocatoria, el cual había utilizado para reunir a los mejores músicos en diferentes ocasiones. Desde el punto de vista de Rubén, las entidades gubernamentales debían dar fondos a los programas. Por ejemplo, las giras de SICOR estaban parcialmente financiadas por el Gobierno Municipal de Santa Cruz. En 2014, SICOR había creado 22 coros y una orquesta en el departamento de Santa Cruz.

21

“¿Quiénes Somos?”, SICOR. Sitio web: http://sicorbolivia.wordpress.com. Consultado en octubre, 2014.

Anexo 8. Historia breve de la música en Bolivia La cultura boliviana, como parte de Latinoamérica, se caracterizaba por la amalgama entre las costumbres de una predominante población indígena y los elementos culturales europeos típicos del colonialismo22. Se pueden mencionar cuatro tipos de música relevantes: barroca boliviana, folklórica, popular y académica boliviana. La música barroca boliviana era producto de la influencia jesuita sobre el talento musical chiquitano, mojeño y guaraní. Los artistas de origen indígena aprendieron a crear instrumentos e interpretar la música barroca. La música barroca mestiza estaba muy relacionada con la religión. Antes de la fundación del Conservatorio Nacional de Música en 1907, sólo las catedrales e iglesias tenían coros y conjuntos instrumentales23. La música folklórica en Bolivia había sufrido muy pocas transformaciones debido al aislamiento geográfico del país. En el siglo XXI, todavía se utilizaban instrumentos prehispánicos. Las principales influencias de la música folklórica eran preincaicas, incaicas, españolas, amazónicas e, incluso, africanas24. La música académica boliviana, al igual que la música popular, había conservado sus rasgos indígenas, pero había sido influenciada por las tendencias contemporáneas. Después de la fundación del Conservatorio en 1907, se formaron algunos conjuntos orquestales. No obstante, fue hasta 1945 que se fundó la Orquesta Sinfónica Nacional25. Otro rol importante de la música en Bolivia se daba en el Carnaval de Oruro, una de las celebraciones más importantes del mundo. Se llevaba a cabo cada año en Oruro (oeste de Bolivia), reunía a miles de personas y mostraba la mezcla de las tradiciones religiosas españolas e indígenas. La música era una parte central de esta celebración, que duraba seis días y cuyo principal acontecimiento era una procesión de 28.000 bailarines y 10.000 músicos que recorrían 4 km durante 20 horas. En 2001, el carnaval había ingresado en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO26. En 2014, la música en Bolivia se seguía caracterizando por la mezcla entre sus raíces indígenas y la posterior influencia europea. Además, muchos de los eventos musicales seguían manteniendo relación con la religión.

22

“Cultura: Música y Danza”. Estado Plurinacional de Bolivia. Embajada en Washington, D.C. Sitio web: http://www.bolivia-usa.org. Consultado en octubre, 2014. 23 “Reseña Histórica”. Orquesta Sinfónica Nacional de Bolivia. Sitio Web: http://www.sinfonicabolivia.org. Consultado en octubre, 2014. 24 Cultura: Música y Danza”, Estado Plurinacional de Bolivia. Embajada en Washington, D.C. Sitio web: http://www.bolivia-usa.org. Consultado en octubre, 2014. 25 Reseña Histórica”. Orquesta Sinfónica Nacional de Bolivia. Sitio Web: http://www.sinfonicabolivia.org. Consultado en octubre, 2014. 26 “El Carnaval de Oruro”. UNESCO. Sitio Web: http://www.unesco.org. Consultado en octubre, 2014.

Anexo 9. Tamaño del mercado de Sonidos de la Tierra en Paraguay y Bolivia

Departamentos Distritos Población total Población total entre 0 y 9 años Población total 10 y 19 años

Paraguay 2012 18 250 6,672,633 1,469,593 1,397,642

Bolivia 2010 9 112 10,426,154 2,561,970 2,282,603

Fuentes: Paraguay: Anuario Estadístico 2012. Dirección General de Estadísticas, Encuestas y Censos. Bolivia: Proyección Total Proyectada 2010. Instituto Nacional de Estadística.