SATANÁS Y SUS DEMONIOS SEGÚN LA BIBLIA (Conociendo a nuestro enemigo) Por Dr. Gerardo Laursen Usado con permiso Aquí (con breves observaciones) tenemos organizado en bosquejo lo importante en la Biblia sobre el diablo y los demonios. Son reales. Satanás no es una superstición de la Edad Media, como con cuerpo rojo, cuernos, cola y tridente. No se asemeja a la caricatura dibujado aquí: I. EL ORIGEN Y LA NATURALEZA DE SATANÁS A. Introducción Su existencia, Mt. 4:1-11; Ez. 28, etc.Testificado por Cristo, Mt. 13:39; Lc. 10:18; 11:18. Un ser inexistente no puede entrar en cerdos u ofrecer reinos. No siempre es violento o grosero, 2 Co. 11:14. Puede herir y atrapar hasta creyentes, 1 P. 5:8. Es creado y por eso limitado, Job 1:12; Stg. 4:7. Es personal. Tiene emociones, inteligencia y voluntad; habla. Es espíritu (un ángel caído; vea abajo). Sus nombres y títulos Satanás, Mt. 4:10 Diablo, Mt. 4:1 Tentador, Mt. 4:3 Lucero, Is. 14:12 Hijo de la mañana, Is. 14:12 Serpiente, Gn. 3; 2 Co. 11:3; Ap. 12:9 Dragón, Ap. 12:7 Apolión, Ap. 9:11 Beelzebú, príncipe de los diablos, Mt. 12:24 Belial, 2 Co. 6:15 Príncipe de este mundo, Jn. 12:31 Príncipe de la potestad del aire, Ef. 2:2 El dios de este mundo, 2 Co. 4:4 El malo, cp. Jn. 17:15 Enemigo, Mt. 13:28 Homicida, Jn. 8:44 Mentiroso, Jn. 8:44 Acusador, Ap. 12:10 Engañador, Ap. 12:9 B. El origen y carácter de Satanás, Ez. 28:11-19 Razones por qué Ez. 28 habla de él: Hay cambio de “príncipe” a “rey". Su descripción no es humana. El espacio dedicado sugiere importancia. La naturaleza simbólica del libro penetra al corazón de sus temas. Se presenta a Satanás bajo otros títulos también (como “serpiente”). Concuerda con otras descripciones bíblicas.
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Excepto por este pasaje e Isaías 14, no sabríamos nada del origen del pecado. (Recuerde que Lucero pecó antes de los sucesos del huerto de Edén.) Algunos términos clave en Ez. 28: 28:12 28:13 28:14 28:15 28:16 28:17
rey sabiduría, Mt. 13:36-39; Ap. 12:12. perfección Edén creación, pues Is. 54:17. querubín protector, Sal. 80:1; 99:1; 1 S. 4:4; 1 R. 8:7; He. 9:5. fuego hasta que se halló maldad. contrataciones = conmoción, destrucción, violencia. te eché se enalteció
C. El pecado de Satanás, Is. 14:12-17 y Job 26:7 Desea compartir la habitación de Dios. Desea controlar a las huestes celestiales. Desea controlar al pueblo de Dios. Desea recibir la gloria que solo a Dios le pertenece. Desea poseer el poder y la autoridad del Altísimo. Por eso, Satanás es el falsificador por excelencia. Desea, por ejemplo, que hagamos nuestras obras buenas en el poder de la carne. ¡A veces se encuentra en púlpitos! Él tiene sus maestros, profetas, predicadores y milagros aparentes. II. EL PROGRAMA DE SATANÁS EN EL MUNDO A. Hacia la obra de Cristo: estorbar y pararlo. Tentó a Jesús en las mismas áreas en que lo hizo con Eva y con nosotros: 1 Jn. 2:16 Mt. 4:1-11 Gn. 3:6
Tentación: Deseo de la carne Deseo de los ojos Hambre / pan Reinos Comida Placer
B. Hacia Dios Jn. 8:44, enemistad; mata a sus siervos; miente 1 Co. 5:5; 2 Co. 12:7, abofetea y mata a sus siervos. C. Hacia los inconversos Mt. 13:4, 19, arrebata lo sembrado. Jn. 13:2, motiva. 2 Co. 4:3-4, ciega. 2 Co. 11:13-15, se disfraza. Por eso Gá. 1:8; 2 P. 1:18-19. Ap. 20:3, 8, engaña. D. Hacia los creyentes Ef. 6:10-18, ataca la fe.
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Vanagloria Impresionar Sabiduría
2 Co. 2:10-11, sus maquinaciones. [¡En este pasaje nos vence por no perdonar!] 2 Co. 11:2-3, engaña, corrompe. Por eso la Biblia supera a la experiencia. Hch. 5:3; 1 Co. 7:5; 1 Ti. 3:6-7, anima al pecado. 1 Ts. 2:18; Mt. 16:21-23, estorba. Job 1-2; Ap. 12:10, acusa. E. Hacia el Anticristo 2 Ts. 2:9-10, le da poder para impresionar y engañar. Ap. 13:4, le da autoridad. F. Hacia Israel Ap. 12:13-17, anti-semitismo. G. Hacia las naciones: Ap. 12:9; 20:3,8, decepción. Recuerde: Su ataque principal es contra nuestra fe. Saber eso es nuestra defensa. Nuestra ofensiva es el conocimiento de la Palabra de Dios aplicado a la vida cotidiana. III. LOS JUICIOS DE SATANÁS Prohibido seguir en su hogar celestial, Ez. 28:16. Maldecido en Edén, Gn. 3:15-16. Juzgado en la cruz, Jn. 12:31. Hecho nulo, He. 2:14. Cerca del fin de la tribulación se le prohíbe la entrada al cielo, Ap. 12:8-10, 13. Asignado al abismo durante el milenio, Ap. 20:2. Lanzado al lago de fuego por la eternidad, Ap. 20:10. Su destino es garantizado. IV. LOS DEMONIOS DE SATANÁS A. Su origen y destino Algunos ángeles siguieron a Satanás cuando cayó. Y algunos de ellos pecaron una segunda vez, en Gn. 6, con castigo de estar en prisión actualmente. Para más explicación de este concepto controversial, vea mi artículo Ángeles en Prisiones, en ObreroFiel.com. Por ahora, el resto de los caídos están libres y son los demonios. Durante el milenio futuro estarán encarcelados, pero cerca del fin de él otra vez estarán sueltos brevemente. Su destino final es el lago de fuego. En resumen los pasajes son:
B. Su esfera de labor Algunos caídos en Tártaro (a veces este término griego se traduce infierno), 2 P. 2:4 El cosmos, Jn. 12:31 La tierra, Ez. 28:17; Ap. 12:9 El aire, Ef. 2:2 El abismo, Ap. 9:1-11 El lago de fuego, Ap. 20:10
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C. Su naturaleza Espíritus, Mt. 8:16; normalmente invisibles; viajan. Inteligentes, Mt. 8:29; 1 Jn. 4:1-3; 1 Ti. 4:1-3; Ap. 9:4; comunican. Malvados, Mt. 10:1 Individuos, Lc. 11:24-26. Varían. Unos son peores que otros. Insalvables, Stg. 2:19 D. Su número: ¡Solo la mitad de los que son los ángeles santos! Ap. 12:4 E. Sus actividades: Se oponen a Dios, cp. 2 Ts. 2:4. Estorban al hombre. Corrompen, Mt. 12:45 Causan algunas enfermedades, Mt. 9:32-33; 12:22; Lc. 8:26-36; 13:11,16 (pero no todas, cp. Mt. 4:24). Atacan, hieren, atrapan, 1 P. 5:8 Tientan, Stg .1:13; Mt. 4:1-3 Posesionar, Mr. 5:1-17 = Lc. 8:26-36 Promuevan hechicerías, adivinación, astrología, necromancia, etc. Pasajes clave: En 1 S. 28:7-20 la bruja llamó a un demonio que iba a fingir a ser el difunto Samuel, pero Dios envió al auténtico Samuel. Lc. 16:19-31, el hades. Nuestra relación con eso: Dt. 18:9-14; Lv. 19:31, prohibido consultar a brujos y adivinos. 1 Cr. 10:13-14, Saúl murió por consultar a una adivina. Ex. 22:18, instrucciones a Israel: “¡A la hechicera no dejarás que viva!” Indirectamente, ¡sirven a Dios! Sal. 78:49, destructores son enviados 1 R. 22:23, se les permite engañar Job 2:5-6, prueban Lc. 22:31, zarandean 1 Co. 5:5, matan 1 Ti. 1:20, castigan Ap. 16:13-16, reúnen reyes para Armagedón V. LAS ACECHANZAS DE SATANÁS Usa sus maquinaciones en nuestra contra, 2 Co. 2:11; Ef. 6:11; 1 Ti. 4:1; 2 Ti. 2:26. Ejemplos de ellas (adaptadas de Thomas Brooks, quien murió en 1680 d.C.): 1. Satanás presenta la carnada pero esconde el anzuelo. Remedio: Guarde su distancia. Cp. Eva, Gn. 3:4-5. Un ejemplo entre jóvenes es el fumar: la carnada es parecer de edad mayor; el anzuelo es que eventualmente produce enfermedades pulmonares. 2. Pinta el pecado con colores de virtud. Pero veneno pintado es veneno. Compárese la tolerancia de la iglesia hacia el incestuoso, en 1 Co. 5. Remedio: Recuerde que ese pecado costó la sangre de Cristo.
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3. Sugiere que los pequeños pecados no son muy malos. Pero: Uno siente la culpabilidad; 1 Co. 5:6; Pr. 6; Ro. 6:23. Remedio: Reconocer que Eva sólo comió fruto (Gn. 2:17); alguien sólo recogió leña el séptimo día (Nm. 15:32-36); alguien sólo tocó el arca (2 S. 6:6-7); pero todos murieron por eso. La levadura leuda, 1 Co. 5:6. 4. Nota que los mejores hombres pecan, y por eso también podemos nosotros. Pero: Col. 3:17; Sal. 51:8; 2 S. 12:10. Remedio: Observar resultados. Resultó el adulterio de David así: 2 S. 12:10-12. Por ejemplo, la espada jamás se apartó de su casa. Recuérdese como Pedro lloró (Mt. 26:75). 5. Presenta a Dios como el que perdona todo a todos. Pero: 2 P. 2:4-11. Es pecar contra la misericordia. Remedio: Saber que Dios es también justo, y castiga: He. 12:5-11. 6. Dice que el arrepentimiento es fácil, por eso pecar no es problema. Remedio: Leer Jer. 13:23; 2 Ti. 2:24-26. El deseo de arrepentirse no es tan fácil. ¿Por qué no lo hacen millones? Porque significa cambiarse. 7. Atrae atención a los malos en su prosperidad. Pero: Sal. 37:1-4; Is. 1:5. Les falta mucho más que lo visible. Deben dar cuenta por sus bendiciones. Es posible que ellos sean abandonados por Dios, Ro. 1:24-32. 8. Procura que usted haga comparaciones entre sí mismo y otros creyentes. Remedio: Nuestra norma ética es Cristo, no el compañero. Cp. la paja y la viga de Mt. 7:3-5. 9. Nos recuerda del peso de nuestra cruz. Pero: Referente a aflicciones: Ro. 8:17-18; 2 Co. 1:5; Fil 3:10; Col. 1:24; 1 P. 4:13. Referente a castigos: He. 12:10-11. Remedio: Llevar nuestra cruz vale la pena, y además es temporal y ligera, Mt. 11:28-30. 10. Confunde nuestros pensamientos con errores que afectan nuestro juicio. Como la chica evangélica enamorada de un afable y bondadoso inconverso (en clara contradicción a 2 Co. 6:14). Pero: Ef. 4:14; Col. 3:16; 2 Ts. 2:10-12; 2 Ti. 1:13; Tito 1:9; Pr. 3:15. Remedio: Estudiar la Biblia, y ponga énfasis donde Dios la pone. Es una marca de sabiduría poder distinguir entre los propósitos divinos y los esquemas de Satanás. No es siempre fácil saber si una puerta de oportunidad se cerró por la voluntad de Dios, o que el mismo evento es un estorbo del diablo. VI. NUESTRA DEFENSA CONTRA SATANÁS A. Principios generales Referencia Stg 4:7 Judas 1:8-9 Ef. 1:3; 6:10-12 Ef. 6:13-18; 2 Co. 10:3-5 Ef. 4:27; Dt. 18:9-14
Proceder Sometámonos a Dios y podemos resistir al diablo (cp. Ap. 20:1-3). Tomémoslo en serio. Démonos cuenta de nuestra posición en Cristo. Pongámonos toda la armadura de Dios. Así que nada de astrología, tablas de ouija, cartas tarot, ídolos, vicios, consultar a curanderos, etc.
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1 Jn. 4:4 Jn. 8:32 Jn. 16:11 1 P. 5:8 2 Co. 2:11 Ro. 8:28 Ro. 5:8-9 1 P. 1:16 2 Ti. 1:7 Jn. 8:44 Mt. 4:1-11
Démonos cuenta de que Cristo habita en nosotros. Démonos cuenta del poder de la verdad. Demonios son como cucarachas: corren hacia la sombra cuando se enciende la luz. Sepamos que Satanás ya está juzgado y derrotado. Renunciemos su control. Estemos alertas. El león ruge para paralizar con miedo. Conozcamos sus maquinaciones. Perdonemos a los hermanos. La presencia de problemas y ataques no necesariamente indica que estamos fuera de la voluntad de Dios. Recordemos que Dios nos ama. Seamos santos. No estamos enseñados a temerlo. ¡La cosa más grande de un demonio es su boca! (Miente). Usemos la Palabra de Dios.
B. Aplicaciones específicas. Por ejemplo, usando la Palabra de Dios: Satanás dice Preocuparse Chismear Mentir Codiciar Ser avaro Murmurar Tener miedo Desmayarse Malgastar tiempo
Pero Dios dice; Por nada estéis afanosos, Fil. 4:6. Sobrellevad los unos las cargas de los otros, Gá. 6:2. Siguiendo la verdad en amor, Ef. 4:15. Deléitese asimismo en Jehová, Sal. 37:4. Dios ama al dador alegre, 2 Co. 9:7. Contentos con lo que tenéis ahora, He. 13:5. La paz os dejo, Jn. 14:27. Confiad, yo he vencido al mundo, Jn. 16:33. Aprovechando bien el tiempo, Ef. 5:16. Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, Col. 3:23.
El poder de Satanás es obviamente más grande que el poder humano. Pero el diablo es una criatura, y por eso limitado. En contraste, el poder de Dios es infinito. ¿Ha visto películas o leído novelas en que el mundo espera quién vencerá una vez por todas en la batalla de Armagedón en el fin del mundo? ¡Qué tontería! En primer lugar, Armagedón viene al final de la tribulación, no al fin del mundo (Ap. 16:14-16; 19:17–20:2). Y no quiero arruinar la sorpresa, pero Dios es y siempre será el vencedor. (¡He leído el último capítulo de la Biblia, y ganamos!) Mientras tanto, podemos vencer al diablo y sus tentaciones por aprovechar del poder de Dios y la aplicación personal de la Escritura. “Y el Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo vuestros pies”, Ro. 16:20. ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.
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