¿QUE SIGNIFICA SER UN ABOGADO? Mirella Alvarado C.1 Lo primero que se presenta en mi mente al pensar en ABOGADO es la palabra DERECHO, estos dos términos están estrechamente ligados, ya que un abogado debe ser conocedor pleno del derecho. La abogacía no es tan solo una carrera ni un oficio, esta interviene más allá de una simple aplicación de normas, es tal vez una de las actividades que tiene mayor repercusión en la sociedad. Alguna vez un doctor me dijo: Nunca esperes el agradecimiento de tu defendido, pues, para él, sí ganas, es porque estaba en lo correcto y si pierdes es que tú no hiciste bien tu trabajo; con frecuencia se escucha juicios inmisericordes sobre la persona y la profesión del jurista, tal vez aquí como en tantos campos de la vida, cada quien dará su veredicto conforme a los resultados que tenga o la vinculación que haya establecido con profesionales que se dediquen a esta actividad. En la actualidad se dan muchos conceptos acerca del abogado, pocos son buenos y abundan los malos pero, ¿qué significa ser un abogado? El termino abogado proviene de latín “advocatus” que significa ayuda, los romanos los denominaron “patroni” que significa protectores, estos eran llamados por quienes necesitaban y solicitaban auxilio, socorro e intercesión. Partiendo de esta premisa entendemos que esta persona, a la cual denominamos abogado, realiza una función de defensa y ataque jurídico en un proceso judicial, sin embargo, el ejercicio de un abogado no termina ahí, el profesional del derecho además de la representación como auxiliar de la justicia, aporta a la sociedad su trabajo denodado y su permanente compromiso de vigilar la administración de justicia, estos dentro de un accionar ético permanente, que conlleve a la formación de valores. Es también el abogado el primer defensor de la democracia, la violación cotidiana de los derechos humanos por parte de los regímenes políticos, autoritarios y dictatoriales impuestos en las sociedades de América Latina, bajo una cortina de legalidad, hace que las democracias se debiliten y que activistas del derecho inicien su defensa en todos los ámbitos, actuando aisladamente o en organizaciones a nivel nacional o internacional, para impedir torturas, desapariciones, para garantizar libertades públicas y defender derechos humanos individuales o colectivos. Cuando una persona recurre a un abogado es porque ve en él un compañero, un amigo que va a ser posible que logre sus objetivos. Ser abogado es ser esa
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Alumna Facultad de Derecho USMP
voz, la voz que nos representa en una corte, es el que asegura que todos en el sistema de justicia escuchen de nosotros. El abogado no se hace con un título, si no con todo ese trajín del diario quehacer, con ver desde su escritorio pasiones más diversas. Ejercer la abogacía, no es una tarea fácil es, pues, una actividad muy vocacional donde en muchas ocasiones no existen horarios; es una profesión en donde los éxitos emocionales y laborales son gratificantes pero siempre van acompañados de mucho sacrificio. El abogado no solo debe tener un hambre de conocimientos sino también debe tener un sentimiento humano tan grande que le permita absorber ese conocimiento en forma provechosa, este debe estar en continuo estudio ya que el derecho es renovable, cambiante, avanza con la sociedad. Ante la opinión generalizada de la fama de los abogados; debo contestar que las excepciones no invalidan la regla. Aceptando que hay algunos que desmerecen tan apasionada carrera, no podemos generalizar la experiencia a todos los abogados y mucho menos al derecho. La moralidad del abogado no se limita al buen ejemplo sino a la acción, al cambio. Sin embargo, hoy, ciertos abogados se caracterizan por su interés lucrativo por encima del interés social. Mientras tanto, creemos que el abogado debe ser un defensor del bien común y de la justicia, y que así dirija la conducta de los pueblos hacia la construcción de un orden social conforme a las condiciones de un ideal más humano. Hoy en día todos nos quejamos a menudo de los abogados, pero ¿de quién se quejan los abogados? En el transcurso de la carrera voy aprendiendo, que es fácil ser bueno, pero difícil es ser justo. Debemos tomar conciencia y aceptar que él abogado interviene en las relaciones de la sociedad, sociedad a la que nosotros pertenecemos. El profesional del derecho busca que el orden establecido, fluya y se mantenga, siempre, en busca del fin supremo de la sociedad y el estado, la persona humana. Si hacemos un breve análisis de lo que ha sido el proceso evolutivo de la humanidad, es fácil encontrar que el derecho ha marchado en paralelo con el proceso de avance de la civilización humana, es decir ha sido el derecho, el elemento fundamental que ha permitido a los seres humanos sepultar las viejas disputas individuales o de grupo, en que los conflictos se dirimían y resolvían a través de la fuerza, lo cual fue superado utilizando el único elemento que ha sido capaz de armonizar, las relaciones entre las personas y la sociedad, es también con esto que se destaca al abogado como el actor más necesario dentro de la sociedad para hacer cumplir y defender, lo que es la norma jurídica. Es en este marco, de principios y valores, de capacidad y profesionalismo, que el 02 de abril de todos los años se estableció como el Día del Abogado, en
homenaje al natalicio del ilustre jurista arequipeño doctor Francisco García Calderón Landa, quien con su calidad humana y profesional supo encausar los hechos dentro de las pautas de la norma jurídica, en dirigir la conducta humana hacia los valores sociales que la orientan y en propender a que se realice cada vez más plenamente el Estado de Derecho. Es por eso que el compromiso de nosotros como estudiantes de la Facultad de Derecho de la USMP, es perseverar en el estudio , teniendo como sustento los principios y valores, aunados a los conocimientos del derecho, lo que nos haga merecedores de continuar el camino ya trazado de los que nos precedieron en esta noble profesión. ***********************************