Primeros Auxilios Psicológicos ‐ Guía de Pautas Psicoeducativas‐ Por: Ptasnik, Alejandra Pamela Escenario: Ahogamiento. La familia N al completo decide ir a pasar el día a un parque acuático. Están todos los primos con sus padres respectivos y los abuelos. Al mediodía, dispuestos a empezar a comer, se dan cuenta que falta una de las primas de 16 años. En ese mismo momento oyen muchos gritos provenientes de la piscina de olas. Al acudir para saber qué ocurre ven a su nieta, hija y prima flotando boca abajo en el agua, muerta. Familia (a modo aclaratorio): Susana y Ricardo (abuelos), Celeste (víctima), Patricia y Oscar (padres de la víctima), Ramón y Sofía (tíos), José e Ignacio (primos) ‐Interviniente: Buenas tardes, somos Pamela y Clara, somos de la Cruz Roja local y estamos aquí a disposición para ayudarles. Si les parece bien, podemos dirigirnos a esa sala de allí para que puedan estar más cómodos y podamos conversar. ‐Abuelo: Si, creo que lo mejor sería ir donde podamos sentarnos. Abandonamos el perímetro de la piscina y nos ubicamos en una sala que dispone la administración del complejo, una vez todos ubicados dentro de la sala: ‐Interviniente Pamela: ¿quisieran decirme sus nombres, por favor? ‐Tío Ramón: Ellos son Susana y Ricardo, abuelos de Celeste; ellos son Patricia y Oscar, padres de Celeste; ella es Sofía mi esposa, ellos son José e Ignacio, primos de Celeste y yo soy Ramón, tío de Celeste. Mi padre, Ricardo es sordomudo, así que tendremos que usar lenguaje de señas con él. ‐Interviniente Pamela: Esta bien, manejo el lenguaje de señas e iré traduciendo lo que digo ¿Hay algo que necesiten? Tal vez un poco de agua… llamar a alguien? ‐Oscar: Sí por favor, quisiéramos llamar al Sacerdote de nuestra Parroquia, es quien bautizó a la niña y nos conoce a todos desde siempre, es como de la familia.

‐Interviniente Pamela: Ok, momentos antes hablé con el administrador del complejo y nos puso a disposición esta oficina con todo lo que ella ofrece, así que no hay problemas, pueden usar el teléfono las veces que necesiten. También quisiera mostrarles que al final de este pasillo está el baño, y en la puerta del frente hay una pequeña cocina por si quieren tomar algo caliente, en la nevera hay algunos snacks por si apetecen algo. Quisiera informarles que estaremos aquí por unas horas más hasta que el cuerpo forense y la policía terminen de hacer las labores de rigor, sería bueno que traten de beber algo de líquido y traten de comer alguna cosa. ‐José e Ignacio: Necesitamos una toalla, estamos mojados y tenemos frío. ‐Interviniente Pamela: Claro, ahora mi compañera Clara ha de conseguirles una. (Se acerca Clara y se dirige con los niños al otro lado de la sala por toallas) ‐Interviniente Pamela: Entiendo que están pasando un momento muy duro y si están de acuerdo y les parece bien quisiera aprovechar este momento sin los niños para comentarles un poco de cómo podrían ser estos próximos días, las posibles reacciones que pueden presentarse tanto en ustedes como en los niños. Por lo que veo, ellos deben tener entre 4 y 5 años, ¿esto es correcto? ‐Susana: Si, José tiene 5 e Ignacio 4. ‐Interviniente Pamela hablando a todo el grupo: Ante un acontecimiento crítico, como el que están viviendo ustedes, podemos tener reacciones y experimentar una serie de síntomas en respuesta al dolor y al alto nivel de estrés. No deben asustarse, todas estas reacciones son normales, inclusive la ausencia de reacción. Respecto a Ramón, ustedes saben que él reacciona de igual manera que ustedes y tiene las mismas necesidades, solo se comunica distinto. Es importante que como padres sepan que los niños reaccionan distinto a los adultos, por lo que deben hablar con los niños y explicarles lo que acaba de ocurrirle a Celeste, utilizando un lenguaje sencillo para que ellos puedan comprender. Por la edad que tienen, pueden creer que podrán volver a ver a su prima, y una vez que ustedes les cuenten sobre el fallecimiento de Celeste, tal vez hagan preguntas sobre a dónde se ha ido, si tendrá hambre, frío etc. Si ellos están al tanto de lo que pasa, van a poder comprender mejor

las posibles reacciones que vean a su alrededor y el desacomodo de sus itinerarios en los próximos días. Respecto a las posibles reacciones, podemos señalar cambios en su comportamiento: puede que hablen menos o más, estén más apegados a ustedes, que no quieran comer, que les cueste dormir o se despierten agitados, que sientan miedo a la oscuridad, a algún objeto o animal en especial. Tal vez noten cierta regresión en habilidades ya adquiridas por ellos, por ejemplo, volver a mojar la cama, no querer cepillarse los dientes solo etc. Lo ideal es que sean ustedes quienes les hablen, pero si sienten que necesitan apoyo aquí estaré para brindarles soporte. (regresan Clara y los niños, estamos la familia completa y las intervinientes reunidas nuevamente) ‐Sofía: ¿a qué se refiere? ¿Podemos enfermarnos? ‐Interviniente Pamela hablando a todo el grupo: Como les comentaba, puede haber muchas reacciones y todas ellas están bien, en las próximas horas o días pueden ustedes sentirse abrumados, confundidos, desorientados, cansados o sin energía, pueden tener malestar físico como dolores de cabeza o náuseas, tal vez les cueste retener información o no puedan concentrarse, pueden estar inapetentes y les cueste dormir o se levanten exaltados en medio de la noche. Sentirse perdidos o incluso re experimentar sensaciones del momento que acaban de vivir. Estas y algunas otras son reacciones normales que presentamos por estar adaptándonos a una nueva realidad. Dependiendo de cada uno, estas reacciones pueden durar desde unos pocos días a algunas semanas, pero es muy importante que estén atentos para buscar apoyo profesional, si notan que ustedes o los niños no mejoran o sienten que inclusive se profundizan las reacciones pasadas las 4 semanas. Por si esto llegara a ocurrir, les entrego estos folletos con datos útiles donde entre otros encontrarán: teléfono del Centro Nacional de Apoyo y Contención a las Familias y la línea de asesoramiento sobre cómo afrontar incidentes críticos de la Cruz Roja. También encontrarán ahí los horarios y el lugar donde se reúne el grupo de apoyo que brinda el municipio. También les dejo mi tarjeta personal. ‐Abuelo: hemos de estar atentos, es una situación muy dolorosa, estamos muy confundidos. Ojalá podamos superarlo alguna vez.

‐Interviniente Pamela: Todas las personas tenemos recursos personales que nos ayudan a sobrellevar las situaciones complicadas, puede serles útil recordar qué hicieron en situaciones difíciles anteriores para sentirse mejor. Sentirse afligidos es natural cuando se pierde a algún ser querido, pero deben recordar dormir y si no pueden, al menos recostarse a descansar, alimentarse sana y variadamente e hidratarse, evitar consumir alcohol o tabaco les ayudara a estar más íntegros. De todas maneras, les entrego este folleto donde podrán encontrar más detalladamente lo que acabo de decirles además de los teléfonos de la Policía, La Cruz Roja y la Guardia Civil que son los equipos que están interviniendo en este momento. En el anverso del mismo encontrarán la misma información en Braille. ‐Patricia: Muchas gracias. ‐Interviniente Pamela: deseo mencionarles algunas pautas de autocuidado para que las tengan en cuenta, sobre todo, en las siguientes semanas. Son rutinas que deben tratar de implementar a diario y repetirlas de ser posible, como por ejemplo exponerse al sol al menos por 30 minutos, hacer alguna actividad física o deporte, desconectarse del trabajo y las obligaciones regalándonos momentos de reparador descanso. Cultivar nuestras relaciones con la familia y amigos, hacer visitas culturales y a espacios verdes o de recreación, cultivar nuestras pasiones y algún pasatiempo también son formas de cuidarnos a nosotros mismos y de potenciar nuestras capacidades de resiliencia. ‐Ramón: Muchas gracias. Ha sido Usted muy amable, pero nos gustaría estar solos un rato. ‐Interviniente Clara: Lo comprendemos perfectamente. Estaremos aquí por si necesita algo. ‐Interviniente Pamela: Quedamos a disposición, hasta luego.