A menos que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas han sido tomadas de la Santa Biblia, Nueva Versión Internacional, nvi® © 1999 por la Sociedad Bíblica Internacional. Usadas con permiso. Todos los derechos reservados. Las citas bíblicas marcadas (rvr) son tomadas de la Santa Biblia, Versión Reina-Valera 1960 © 1960 Sociedades Bíblicas en América Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Usado con permiso. Las citas bíblicas marcadas (rvr95) son tomadas de la versión Santa Biblia, Reina-Valera 95® © 1995 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado con permiso. Las citas bíblicas marcadas (lbla) son tomadas de la Santa Biblia, La Biblia de las Américas®, lbla®, © 1986, 1995, 1997 por The Lockman Foundation. Usadas con permiso. Derechos reservados. (www.LBLA.org). Algunas definiciones de palabras tomadas del hebreo y del griego fueron tomadas de los diccionarios en el idioma inglés Strong’s Exhaustive Concordance, Vine’s Complete Expository Dictionary of Old and New Testament Words, y de New American Standard Exhaustive Concordance of the Bible (nasc). The Lockman Foundation. Usados con permiso. Algunas definiciones fueron tomadas del diccionario Gran Diccionario Larousse inglés-español, españolinglés, Real Academia Española, y Larousse Ilustrado Español Primera Edición 2002 tales como absoluto, la niña de mis ojos, autor, auténtico, autoridad, autoritario, llamamiento, constitución, Dios, manipular, natural, regla, sanción, vocación, yugo.
Traducción al español realizada por: Sí Señor, We Do Translations Jorge Jenkins E-mail:
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El Propósito y Poder de la Autoridad: Descubra el poder de su dominio personal (Publicado originalmente en inglés bajo el título: The Purpose and Power of Authority) Dr. Myles Munroe Bahamas Faith Ministries International P.O. Box N9583 Nassau, Bahamas
[email protected] www.bfmmm.com; www.bfmi.tv; www.mylesmunroe.tv
Whitaker House 1030 Hunt Valley Circle New Kensington, PA 15068 www.whitakerhouse.com
ISBN: 978-1-60374-270-2 Impreso en los Estados Unidos de América © 2011 por Myles Munroe Para comentarios sobre este libro o para información acerca de otros libros publicados por Whitaker House, favor de escribir via Internet a:
[email protected]. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de ninguna manera o por ningún medio, electrónico o mecánico—fotocopiado, grabado, o por ningún sistema de almacenamiento y recuperación (o reproducción) de información—sin permiso por escrito de la casa editorial. Por favor para cualquier pregunta dirigirse a:
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Dedicatoria
A
los líderes y mayordomos que están emergiendo en la siguiente generación. A mi amada esposa Ruth, y a mis hijos excepcionales, Charisa Makaria, y Myles “Chairo” Jr., quienes me permitieron poder ejercitar mi autoridad como padre, por medio de guiarlos hacia la tierra de la edad adulta, la cual se encuentra llena de retos. Ustedes siguen haciéndome sentir sumamente orgulloso de ustedes dos. A mi hermana Sheila, quien a pesar de tener que llevar la posición tan difícil de ser la hermana mayor de siete hermanos, reconoció el destino único que existe en mi vida, y escogió someterse a la autoridad del don que tengo en mi. A mi equipo de liderazgo tan distinguido y tan excepcional, quienes se han sometido a mi autoridad inherente, y al hacer esto, nos han permitido que conjuntamente edifiquemos una organización global que afecta a millones de vidas: Richard y Sheena Pinder, Henry y Sheila Francis, Jay y Euturpia Mullings, Dave y Angie Burrows, Alan y Nyoka Munroe, Wesley Smith, Angie y Eme Achara, Burton y Barbara Smith, Barbara Lockhart, Gloria Seymour, y Charles y Cassandra Nottage. Yo no hubiera podido tener la medida de éxito que tengo al presente, si no hubiera contado con su comprensión y sumisión a la autoridad del don que tengo en mí.
Reconocimientos
L
a creación de este libro ha sido un viaje personal de descubrimientos, a través del cual he contado con muchos tipos de guías viejos y nuevos, que me han ayudado a lo largo de este camino. Siempre estoy muy consciente de que todo aquello que podemos realizar o lograr en esta vida, se debe a la suma total de todas las gentes, situaciones, y circunstancias que hemos podido encontrar en nuestra vida. Este libro es la evidencia de esta realidad. Yo no hubiera podido iniciar este viaje sin la inspiración del equipo de liderazgo, así como de los miembros de la Iglesia Bahamas Faith Ministries International (BFMI) y de la Asociación Internacional de Líderes del Tercer Mundo (ITWLA). Si ellos son los líderes del futuro, entonces, el futuro se encuentra en buenas manos. Mucho muy importante, es el hecho de que las palabras a veces no pueden llegar a expresar lo inmensamente agradecido que me siento una vez más a Lois Puglisi, quien es un excelente, dedicado y muy talentoso editor, por toda la ayuda que me prestó para poder tomar este material de mi corazón y poder plasmarlo en estas páginas. Por siempre voy estar en deuda contigo por todo el éxito que nuestra colaboración llegue a alcanzar. A través del curso que se llevó la investigación del material necesario para este libro, he obtenido tiempo y apoyo de muchos líderes y amigos muy prestigiosos que se encuentran en los sectores público, privado, y voluntario. Gracias a todos ustedes por toda su participación práctica, su inspiración, y su educación. Espero que este libro les dé mucho más de aquello que ustedes invirtieron en mí.
Contenido Prefacio: El espectáculo de la (irreal) realidad..................9 Introducción: La autoridad puesta completamente de cabeza....................................................................... 13
Parte
uno:
¿Qué
es la autoridad?
1. La autoridad está dentro de ti Tú tienes autoridad y poder personal para poder . realizar to propósito en la vida.........................................21 2. Los “tiburones de los negocios” y otros “modelos” de poder Por qué la autoridad se ha convertido en el enemigo.......39 3. La fuente de la autoridad La relación esencial que existe entre autor . y autorizado.....................................................................67 4. La traición y restauración de la autoridad Una vida de imitación es mucho más costosa que la. vida del Diseñador............................................................87 5. Un principio vital de la autoridad Todo se somete a algo más, a fin de poder funcionar,. crecer, y prosperar......................................................... 123 6. Diez principios principales de la autoridad El plan original de la autoridad para la creación . y para la vida.................................................................147
Parte
dos:
¿Cuál
es mi autoridad personal?
7. Manifestando tu autoridad personal El propósito inherente contiene la habilidad para. realizar las intenciones del Autor...................................165 8. Beneficios de vivir en tu autoridad personal La libertad de ser la persona como originalmente. fuiste creado...................................................................201 9. Doce claves para poder descubrir la autoridad personal Para poder ejercitar la autoridad personal, tú . debes conocerte a ti mismo........................................... 209
10. Encendiendo tu autoridad personal El camino para poder ejercitar tu liderazgo. inherente.................................................................... 231 11. La naturaleza interdependiente de la autoridad Los beneficios y responsabilidades de la. instrucción, delegación, y sumisión.......................... 269 12. Cómo desarrollarse bajo la autoridad (tanto la positiva, como la negativa) Permaneciendo verdadero a tu propia autoridad,. mientras que respetas la autoridad de otros............. 301 13. Doce principios de autoridad con relación a tu llamamiento Entendiendo la visión de tu autoridad y tu esfera. de influencia...............................................................317
Parte
tres: Restaurando la verdadera autoridad en el mundo
14. Claves para reestablecer la legitima autoridad en la tierra Promoviendo el desarrollo corporativo a través . de la libertad y responsabilidad............................... 335 15. Cuatro medio ambientes básicos de la autoridad Restaurando los fundamentos de la autoridad . en la familia, en el gobierno, en la iglesia, y en. los negocios................................................................ 361 Epílogo: La autoridad, como el principio tan hermoso... 401 La autoridad, y una palabra para el tercer mundo Estableciendo la verdadera libertad a través de . una genuina autoridad.............................................. 405 Notas finales.................................................................... 409
Llevando
al máximo tu autoridad personal
Principios y ejemplos de autoridad.............................. 413 Perfil de tu autoridad personal..................................... 419 Acerca del autor.............................................................. 427
Prefacio
El espectáculo de la (irreal) realidad
N
ada en la vida es más perturbador que el hecho de tener que interactuar con un falso personaje. Todos hemos llegado a sentir la frustración, la profunda desilusión, e incluso, el trauma que conlleva la violación de la confianza que hemos colocado en una persona, quien más tarde resultó ser un fraude. Parece ser que en la sociedad de la Internet de hoy en día, con un ritmo muy rápido, motivados por la mentalidad del plástico, es cada vez más difícil poder encontrar gentes que sean auténticas. La mayoría de la gente ha sido enseñada—en forma directa, o por medio de observar los valores generales de sus sociedades—que es aceptable engañar, jugar juegos psicológicos, y promover intereses privados, a fin de poder lograr el éxito personal, a expensas de la honestidad, de la integridad, la ética, las convicciones morales, y un carácter fundamentado en principios. Es como si todo el mundo está jugando un papel o un personaje en el juego de la vida, y no están viviendo la vida genuinamente. Por consecuencia, la mayoría de las gentes no saben en quienes pueden depender realmente. Los líderes religiosos, los oficiales electos, los inversionistas corporativos, y muchas de las instituciones públicas, e incluso las esposas y esposos en quienes hemos 9
10 S El Propósito y Poder de la Autoridad
puesto nuestra confianza nos ha lastimado profundamente a través de la traición, el abuso, o el abandono. Mientras tanto, el nivel de desilusión que queda como resultado de nuestras grandes sociedades tan superficiales se ha convertido en un nivel epidémico. Incluso los programas de televisión que se denominan “programas reales” no son tan “reales”; todos ellos han sido preparados y editados de antemano. Esta falta de autenticidad no es una crisis aislada, sino que constituye un problema a nivel mundial. La gente está cambiando de la misma forma como el clima cambia, y viven sus vidas basadas solamente en su conveniencia. En forma muy extraña, todas nuestras culturas muy frecuentemente han mostrado abiertamente sus defectos con un grado bastante grande de orgullo y de gloria con relación a sus fallas y a la inmoralidad, por medio de la televisión, la radio y los programas de la Internet. Lo que el mundo necesita en este momento son gentes que sean auténticas. La autenticidad no es una cualidad que uno pueda aprender a través de un proceso general de educación o a través de experimentación. La verdadera autoridad es natural—es la manifestación natural de la autoridad inherente que se encuentra dentro de un ser humano. En otras palabras, la autenticidad puede ser descubierta sólo debido a que ya existe. Un ser humano se convierte en una persona auténtica cuando él o ella descubren su verdadero ser, y toman una decisión específica y continúa revelando ese ser a todo el mundo. La autenticidad no puede ser falsificada. La autenticidad es el verdadero “show de la realidad”. El hecho de ser una persona auténtica significa vivir, trabajar, y servir a la humanidad que se encuentra en toda la esfera personal de tu vida. Una persona auténtica nunca va a tratar de ser algo; él o ella simplemente ya es alguien. El hecho de ser auténtico, por lo tanto, consiste en ser tú mismo o tu misma—no de la forma
Prefacio: El espectáculo de la (irreal) realidad S 11
como la sociedad te ha dictado que deberías ser, sino en la forma como tú eres en tu esencia misma. Yo quiero invitarte a que te embarques en el descubrimiento de tu verdadero ser. A medida que lo hagas, tú vas a poder encontrar tu autoridad personal, y vas a poder vivirla a través de todas las áreas de tu vida. Éste es el único camino hacia la autenticidad.
Introducción
La autoridad puesta completamente de cabeza
L
as naciones industriales le tienen mucho temor, las naciones en desarrollo la odian, pero muy pocos llegan a entenderla. La misma palabra autoridad conjura en sí misma imágenes de opresión y de abuso, y sin embargo, la vida en todo el universo y en el planeta tierra no puede funcionar sin ella. Existen muchos beneficios y oportunidades que se encuentran conectadas a la autoridad, y que la mayoría de la gente jamás ha llegado a soñar acerca de ellos. Por lo tanto, yo estoy llegando a creer que el más grande problema nuestro mundo hoy en día, es la más elemental falta de respeto por la autoridad, lo cual se encuentra acompañado de una profunda indiferencia y de un total rechazo. La razón fundamental para este problema es que la mayoría de la gente alberga ideas fundamentales muy falsas acerca de la naturaleza de la autoridad. He descubierto a través de los años que existe mucha confusión y mal entendimiento acerca de este concepto. La confusión entra primero—la gente ha sido enseñada o ha experimentado nociones conflictivas con relación a lo que es la autoridad. Y el resultado es el mal entendimiento—ellos no 13
14 S El Propósito y Poder de la Autoridad
están conscientes de los beneficios personales o del valor que la autoridad puede traer a sus instituciones sociales y a sus naciones en forma conjunta. Y es debido a que mal entendemos lo que la autoridad realmente es—y debido a este mal entendimiento es que seguimos perpetuando el abuso de la autoridad y de sus consecuencias—y siempre albergamos algún tipo de sospechas con relación a ello. Todos tal vez tenemos algún tipo de conocimiento muy superficial acerca de la autoridad, pero hemos perdido de vista completamente las riquezas de su verdadera naturaleza. Por consecuencia, tratamos con ella como si fuera algo malvado necesariamente. Por ejemplo, cuando la gente se dirige a sus trabajos, muchos de ellos hacen lo que sus jefes les dicen que tienen que hacer—no porque ellos quieran o sientan que esto los va a beneficiar de alguna manera, sino al contrario, solamente para que ellos puedan mantener sus posiciones en su trabajo y sus cheques cada día de pago, o para que puedan seguir manteniendo buenas relaciones con sus supervisores. En otro ejemplo, algunas gentes con mucho enojo y en forma muy molesta, se someten a las leyes de la tierra mientras que manejan sus automóviles, pero si ellos se pasan un semáforo en rojo o exceden el límite de velocidad, y son detenidos por la policía, ellos tratan de negociar o de discutir con los oficiales. Ellos los reconocen como representantes de la ley, pero ellos están dispuestos a retar la ley para ver si pueden salirse con la suya. Una actitud muy similar con relación a la autoridad la podemos encontrar en muchos otros medio ambientes de la vida. Culturas enteras se han desarrollado pero están constantemente sospechando de la autoridad. Por ejemplo, a través de todo el mundo occidental, y los países que se encuentran en desarrollo, la autoridad es vista con una falta de confianza, por un sinnúmero de razones diferentes.
Introducción: La autoridad puesta completamente de cabeza S 15
Pero que en el mundo occidental desarrollado, la gente posee lo que tú tal vez puedes llamar “una relación” con la autoridad—ellos la usan cuando les conviene, pero ellos no le permiten tener una posición o relación permanente en sus vidas. En el mundo en desarrollo, la autoridad se ha convertido en un enemigo muy odiado, que representa a las cadenas y los látigos de la esclavitud y de la opresión. El mundo occidental mantiene la autoridad en la fuerza de su brazo, e incluso llega a temerla debido a que las gentes occidentales valoran en forma muy alta el concepto de libertad, lo cual se ha convertido en un sinónimo del individualismo. Los ideales de la mentalidad democrática han evolucionado a través de los años, hasta el punto donde la libertad significa libertinaje, o tener licencia para hacer las cosas sin ningún tipo de control o restricciones. Cualquier cosa que parezca ser alguna forma de control o restricción debe ser contenida. Esta es la razón de por qué, si tú fueras a sugerirle a las gentes occidentales que ellos crearán fronteras y límites para su comportamiento, muchos de ellos se revelarían en contra de esa recomendación. Es muy obvio que, las masas en sí, se encuentran sospechando de la autoridad en todas sus formas, mayormente, como resultado de la evolución de ideas derivadas de, o influenciadas por, la reforma, la iluminación, las revoluciones americana y francesa, la forma como los gobiernos se han involucrado en escándalos y guerras que no han sido populares, los estándares éticos y morales tan bajos, así como el surgimiento de la democracia como la fuerza política dominante en el mundo. Mientras tanto, en la mente de muchas gentes que viven en las naciones del tercer mundo, debido a todas estas historias de colonización y esclavitud que han acontecido en estos países, la autoridad ha venido a representar no sólo restricción o control, sino una franca dominación. Todos aquellos en
16 S El Propósito y Poder de la Autoridad
el tercer mundo envilecen la idea de que alguien pueda llegar a tener algún tipo de autoridad sobre ellos. Muchas antiguas colonias ahora son recientes democracias cuyos nacionales se encuentran en posiciones de liderazgo, o están deseando moverse en esa dirección, y la última cosa que ellos quieren tener que ver, es el hecho de someterse a algún tipo de autoridad externa que pueda revertir el progreso que ellos han logrado. De esta manera, el concepto de autoridad, lentamente ha venido a ser visto bajo una luz negativa—y algunas veces, incluso como una cosa ferozmente negativa—a través de toda la tierra. De nuevo, una parte del mundo le tiene miedo a la autoridad, mientras que otra parte del mundo la odia, y el resultado es que muy poca gente llega a confiar en ella. La mayor parte del problema consiste en que la autoridad ha sido mal interpretada, mal usada, y abusada por un gran número de individuos, líderes, grupos, y naciones a través de los siglos. Y un grande número de gente ha experimentado el desprecio, e incluso un trato mortal, que se ha derivado de este mal uso y abuso, de tal manera que muy pocos pueden llegar a imaginarse el hecho de poder abrazar la autoridad como un componente valioso y necesario, para poder lograr un tipo de vida pacífico y productivo. Pero, incluso aunque la mayoría de nosotros queremos llegar a existir sin que haya ningún tipo de autoridad que se ejercite sobre nosotros, yo creo que sufrimos de una contradicción interna, debido a que en algún lugar muy profundo dentro de nosotros mismos, reconocemos que necesitamos la autoridad en nuestra vida. No queremos que la autoridad nos controle, pero queremos que nuestras vidas sean estables, ordenadas, y muy fructíferas—lo cual es el resultado de una autoridad establecida y consistente. Todos nosotros hemos llegado a ver un microcosmos de este dilema, en los niños que parecen disfrutar de una atmósfera caótica, donde existe
Introducción: La autoridad puesta completamente de cabeza S 17
muy poca supervisión adulta, pero que entonces, se convierte en personas muy temerosas, hasta que alguien llega para darles algún tipo de estructura o de parámetros para vivir. De repente, ellos se encuentran más relajados y contentos, y son capaces de interactuar unos con otros en una manera muy constructiva. Como adultos, hemos tenido la esperanza de haber aprendido a gobernar nuestro comportamiento personal en un gran porcentaje. Pero, muy bien podemos estar viviendo en una versión amplificada del escenario que expliqué anteriormente, a medida que interactuamos con otros en nuestros hogares, nuestros lugares de trabajo, iglesias, y en nuestras naciones, donde las estructuras y los parámetros se encuentran en una espiral fuera de control, impidiéndonos que podamos disfrutar las vidas tan ricas y tan llenas de realización para las cuales fuimos diseñados. Podemos encontrarnos en medio de todo este caos, en cuyo caso no podemos llegar a darnos cuenta completamente de los efectos que el estrés y la tensión nerviosa de este tipo de medio ambiente están colocando sobre nosotros. O tal vez, nosotros nos encontramos bien conscientes de que las cosas no se encuentran correctas dentro de nosotros, y tampoco en nuestras sociedades. El propósito de este libro es descubrir la belleza de la verdadera autoridad, y restaurar la autoridad en el lugar de dignidad que le corresponde en nuestra vida personal, nuestras culturas, y nuestras naciones. La autoridad necesita ser reintroducida, tanto en el individuo, como en la sociedad en general, como el amigo verdadero que es—sin que tenga que ser el objeto de una relación transitoria basada en la fuerza del brazo de alguien, o considerada como un enemigo mortal. La autoridad ha sido puesta de cabeza, de tal manera que ha llegado a representar lo opuesto de lo que la genuina autoridad verdaderamente es. En lugar del control, la autoridad
18 S El Propósito y Poder de la Autoridad
promueve una libertad real, y abre la puerta a múltiples posibilidades. En lugar de dominación y muerte, la autoridad enciende el potencial personal que se encuentra dentro de cada individuo, mientras que al mismo tiempo, le da protección y vida. Las culturas y naciones de nuestro mundo están experimentando un conflicto innecesario, y están desperdiciando potenciales, debido a que tanta gente mal entiende la autoridad. Es imposible que nosotros podamos llevar nuestra vida al máximo, si nos mantenemos apartados de entender claramente el carácter de la verdadera autoridad—que no sólo es algo muy bueno, sino también es benéfico y necesario para poder llevar a la realización máxima y al cumplimiento de los propósitos que tenemos como individuos, en nuestra relaciones familiares, y las estructuras sociales más amplias de nuestras naciones, y del mundo.
Parte uno
¿Qué es la autoridad?
Capítulo uno
La autoridad está dentro de ti Tú tienes autoridad y poder personal para poder realizar tu propósito en la vida
N
i los jueces, ni la audiencia tenían expectativa alguna con relación a una mujer desempleada de mediana edad, que se miraba común y corriente, proveniente de Escocia, y quien era una concursante en un programa de televisión de realidad llamado Inglaterra Tiene Talentos, en la primavera del año 2009. Cuando le preguntaron cuál era su sueño, Susan Boyle contestó, “estoy tratando de llegar a convertirme en una cantante profesional”. A medida que ella habló con los jueces antes de su presentación, ellos se mostraron abiertamente muy escépticos, y muchos de los miembros de la audiencia hicieron gestos negativos con sus ojos, y sacudieron sus cabezas con tremenda incredulidad, tal vez pensando que esta concursante había incluido algún tipo de elemento cómico organizado por los productores del show. Cuando las notas introductorias de su canción comenzaron a tocar—“Estoy soñando un sueño”, de la obra musical de Les Miserables—algunos miembros de la audiencia se miraron como si estaban ansiosamente conteniendo la respiración, temerosos de que esta mujer tan inocente, 21
22 S El Propósito y Poder de la Autoridad
que no tenía pretensión alguna, llegara a humillarse a sí misma delante de millones de gentes. Entonces, ella comenzó a cantar. Con tonos líricos, emoción muy convincente, y un desempeño muy profesional, y ella cantó esa canción, de tal manera como si la hubiera escrito para sí misma, a fin de describir la vida carente de realización que había tenido hasta ese punto, así como sus esperanzas para el futuro. La mayoría de los miembros de la audiencia se pusieron a aplaudir, a gritar, y se pusieron de pie cuando ella acababa de cantar sólo algunas de las primeras líneas, y ella recibió una ovación de pie que tenía una tremenda resonancia a la conclusión de su presentación. En minutos, ella fue de haber sido percibida como un chiste, hasta el punto de ser considerada como toda una inspiración, y como un modelo para todos aquellos que están buscando una segunda oportunidad en la vida, o para todos aquellos que quieren tener una primera oportunidad de poder manifestar ante el mundo quiénes son interiormente. Susan Boyle se convirtió en un fenómeno internacional de la noche a la mañana por medio de su aparición en la televisión, la popularidad del video de su presentación en la página del Internet de YouTube, y el sobrecogimiento de atención que le otorgaron todos los medios de comunicación. La gente fue cautivada por su voz, y fue movida por su historia de décadas de lucha y de esperanza para poder realizar algo con su vida. Aunque su elevación instantánea hacia la fama ha causado un estrés inevitable para ella a lo largo del camino, ella parece que ha podido acostumbrarse a toda la presión producida por la atención que tiene sobre su persona. Después de terminar el concurso en segundo
La autoridad está dentro de ti S 23
lugar, ella continuó edificando su carrera como cantante profesional, que era lo que siempre había soñado. El debut de su primer CD, Estoy Soñando un Sueño, ha llegado a vender más de ocho millones de unidades en todo el mundo, al momento en que estoy escribiendo este libro. La realización de su sueño se convierte en una realidad, cuando durante la visita histórica del papa Benedicto XVI a Inglaterra y Escocia en septiembre de 2010, ella fue escogida para cantar delante del Pontífice, en la conclusión de su misa abierta que se celebró en Glasgow, a la cual asistieron cerca de 65,000 gentes. ¿Qué es lo que la autoridad tiene que ver con el desempeño en la televisión, o incluso con una cantante? ¿Acaso no es que la autoridad tiene que ver con el hecho de ejercitar algún tipo de jurisdicción o control sobre la gente? ¿Acaso esto no involucra, por ejemplo, líderes y seguidores, jefes y empleados, padres e hijos, maestros y estudiantes, oficiales de la ley y criminales—en otras palabras, todos aquellos que se encuentran a cargo, y todos aquellos que se encuentran debajo de ellos, y que son instruidos, dirigidos, ordenados, o forzados a hacer algo?
Toda persona en esta tierra tiene autoridad Existe un aspecto intrínseco de la autoridad que muy frecuentemente no es referido, ni aceptado, por los líderes, las corporaciones, los gobiernos, y los individuos, pero que es crucial para un comportamiento efectivo y realizador del ser humano. Provee la clave no solamente para la realización del individuo, sino también para el éxito de las corporaciones. La historia de Susan Boyle ilustra la esencia de la autoridad, así como el corazón mismo de este libro: la
24 S El Propósito y Poder de la Autoridad
verdadera autoridad es personal, y la verdadera autoridad sale desde adentro. Autoridad no significa tener poder o control sobre otros. La autoridad no es algo que tú recibes automáticamente con un título, tales como “supervisor”, “jefe”, “director general ejecutivo” o “presidente”. La autoridad personal se encuentra inherente dentro de cada ser humano, ya sea que esa persona esté considerada como la persona que se encuentra “a cargo” o como la persona que está siguiendo órdenes. La autoridad también se encuentra inherente dentro de cada cosa creada en la tierra. Es algo natural. No tiene La autoridad que ser algo que tiene que “trabapersonal se jarse”, y tampoco es algo que puede encuentra ser otorgado a alguien—solo puede inherente dentro ser impartido y desarrollado.
de cada ser humano, ya sea que la persona sea considerada como que está “a cargo”, o que se encuentre siguiendo órdenes.
La autoridad personal puede ser definida como los dones intrínsecos que una persona o una cosa posee a fin de poder llegar a realizar el propósito para el cual esa persona o esa cosa fue colocada en esta tierra. Debido a que la autoridad es intrínseca, cada persona o ser vivo, ya posee la habilidad para realizar su autoridad en el área, o en su esfera de poder, con relación al don que le ha sido otorgado. Tú tienes una autoridad personal y te capacita para poder realizar tu propósito en esta tierra. ¿Acaso tú has podido identificar tu autoridad personal? Si tú crees que
La autoridad está dentro de ti S 25
lo has hecho, ¿acaso te encuentras funcionando en ello a la máxima capacidad que te gustaría funcionar, y a todo tu potencial?
Cuatro principios fundamentales para poder entender la autoridad En este libro, tú vas a poder descubrir la forma de cómo poder aplicar cuatro principios fundamentales para poder entender la autoridad, y que puedas entrar a poseer el poder que tienes dentro de tu esfera de dominio. 1. El principio del autor: La impartición de tu autoridad personal se encuentra ligada al origen de tus dones y poder, por medio de los cuales tú puedes llevar a cabo los propósitos que tienes en esta vida, a través de tu esfera de influencia personal. Una vez que tú has descubierto la verdadera fuente de la autoridad que se encuentra inherente dentro de ti, se van a abrir oportunidades para que puedas experimentar la realización total y para que puedas contribuir con tus dones que son únicos para todo el mundo. 2. El principio de la autorización : No solamente tienes autoridad personal dentro de ti, pero tú también tienes el permiso y el derecho de poder realizarla en el mundo. No importa cuáles habían sido tus experiencias pasadas, y tampoco importa el tipo de restricciones que tú hayas sentido anteriormente, tú tienes la autorización que necesitas para comenzar a realizar el propósito de tu vida. Tú vas a descubrir que la clave para esa autorización se encuentra en los capítulos que siguen.
26 S El Propósito y Poder de la Autoridad
3. El principio de la autenticidad: Ninguna persona es verdaderamente auténtica, hasta que él o ella se encuentran manifestando su autoridad inherente. Una vez que tú has llegado a entender y a convertirte en la verdadera persona que tú eres—esa persona que fuiste diseñada desde tu nacimiento—tu vida toma su total autenticidad. En otras palabras, tú debes real o auténtico, mientras que tú estás siendo la persona que fuiste diseñada para ser, y estás realizando aquello que tú debes hacer en esta vida. En las páginas siguientes, tú vas a aprender la forma cómo poder identificar y desarrollar la autenticidad de ti mismo. 4. El principio de la autoridad: Los tres principios mencionados anteriormente llevan a este cuarto y muy importante principio de la autoridad, el cual se encuentra dividido en dos partes. En primer lugar, todos y todo ha sido diseñado para realizar su propósito. Debido a que tu autoridad es inherente, tú has sido equipado en forma automática para convertirte en aquello que tú has sido autorizado para ser, y para poder realizar todo aquello que has sido autorizado para hacer. Tú has sido diseñado para poder realizar el propósito de tu vida. Tu autoridad personal guía el foco de tu vida, y te capacita para poder realizar aquello para lo cual tú fuiste diseñado desde tu nacimiento. En segundo lugar, todo depende de algo, y debe someterse a algo a fin de poder funcionar en orden, poder crecer, prosperar, y tener éxito. A medida que tú leas este libro, en forma
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progresiva tú vas a poder ver la forma como tú puedes encontrar tu diseño, el cual es único, y cómo vas a poder comenzar a aplicarlo en los diversos aspectos de tu vida. Tu autoridad personal va a emerger, y tú vas a ser capaz de vivir una vida efectiva, a medida que tú trabajas en colaboración con otras personas, para llegar a cumplir la realización de los propósitos de los unos y de los otros.
La autoridad es personal, pero no es exclusiva Debido a que la autoridad básicamente es personal, algunas gentes cometen el error de pensar, que por lo tanto, esto es algo exclusivo para ellos, y no tiene nada que ver con otras personas. Ellos tal vez se ponen a pensar, Estoy siguiendo mi propia autoridad personal, y por lo tanto, tienes que quitarte de mi camino. O tal vez, ellos tienen la tendencia a ir en busca de sus dones y habilidades tan singulares, con el solo motivo de ver que provecho o conveniencia pueden sacar de ellos. Pero este tipo de perspectiva no puede reflejar la naturaleza de la autoridad personal, la cual ha sido diseñada para operar en concierto con otras gentes, y para el beneficio de los demás también. Debido a que la autoridad se encuentra dentro de cada persona, y debido a que los seres humanos son seres sociales, que interactúan en situaciones e instituciones sociales, ¿que es lo que sucede cuando mi autoridad llega a conocer tu autoridad en la familia, en el gobierno, en la iglesia, en el mundo de los negocios, y en otro tipo de relaciones y medio ambientes de interacción humana? La autoridad trabaja en una forma en que la autoridad personal de las gentes se interrelacionan y
28 S El Propósito y Poder de la Autoridad
funcionan en forma interdependiente en la vida corporativa. Esto no es solo una simple observación, sino un principio vital: necesitamos la autoridad de los unos y de los otros, para poder llegar a realizar la nuestra. La autoridad personal se lleva a cabo bajo el contexto de muchos y diversos medio ambientes de la vida, y en asociación con una diversidad de interrelaciones humanas y de organizaciones. Coopera en conjunto con las tareas colectivas de los seres humanos, tal y como lo podemos experimentar en las familias, en las comunidades, los gobiernos, las iglesias, las organizaciones sin fines lucrativos, escuelas, pequeños negocios, y largas corporaciones. Pero ninguna de estas relaciones y tareas puede progresar verdaderamente o tener éxito, a menos que cada individuo que se encuentre asociado con ellas, pueda entender su autoridad personal, y se encuentre operando bajo la misma. La autoridad personal tiene la cualidad de investir a cada persona con el poder necesario para que pueda contribuir con sus más grandes dones y talentos para su propia realización, y para el beneficio de toda la comunidad—sin importar que tan grande o qué tan pequeña pueda ser esa comunidad.
¿Cuál es tu sueño? ¿Cuál es el sueño que tienes para ti, para tu familia, tu negocio, tu organización, o tu nación? Muchas gentes no saben cómo poder vivir, ni como poder realizar sus sueños, y tampoco saben cómo encontrar su verdadero lugar en el mundo, debido a que no entienden la forma cómo pueden poner en práctica los principios de autoridad que mencionamos anteriormente. Tal vez puedes tener algún tipo de idea con relación a tu autoridad
La autoridad está dentro de ti S 29
personal, pero no estás realizando el vasto potencial que todavía existe dentro de ti; tú reconoces que estás viviendo muy por debajo de tus habilidades. Lo que es verdadero en el nivel personal, también es verdadero en el nivel corporativo. La gran mayoría de los problemas a nivel corporativo, comunitario, y nacional, parten La autoridad del hecho de que la gente no puede personal va a entender verdaderamente, y tamdepender de poco puede vivir dentro de su autorique te conozcas dad personal, o dentro de su función verdaderamente personal que poseen a través de la a ti mismo, así naturaleza interdependiente de la autoridad, lo cual ocurre, cuando como la autoridad la gente mezcla sus dones, a fin de que reside dentro de ti. trabajar en forma conjunta para el bienestar de la totalidad.
Tres claves para poder activar la autoridad personal En el caso de Susan Boyle, el potencial que ella tiene para inspirar y para entretener a la gente, a través de su don inherente de la música, había sido limitado a través de una serie de obstáculos, siendo el mayor de ellos una muy temprana forma de rechazo a través de sus compañeros y compañeras, lo cual dio como resultado una muy baja autoestima. Aparentemente, a medida que ella creció y se convirtió en una persona adulta, aunque ella estaba cantando localmente, poseía dentro de sí misma el sentir de que la vida estaba pasando de largo, y ella se la estaba perdiendo. ¿Qué es lo que llevó al cambio en sus circunstancias?
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En primer lugar, ella estaba consciente de la autoridad interna e inherente que poseía—su tremenda habilidad para cantar—y no permitió que ese talento se desvaneciera, sino que trató de desarrollarlo al máximo, en la mejor forma en que ella pudo hacerlo. La autoridad personal depende de de que tú puedas conocerte a ti mismo en forma verdadera, conociendo la autoridad que existe dentro de ti. Es imposible poder ejercer tu autoridad, si tú no te conoces a ti mismo. En segundo lugar, aunque las circunstancias de su vida le habían impedido que pudiera tener una carrera como cantante profesional en el pasado (e incluso había enviado CDs a diferentes compañías musicales, sin tener éxito alguno), Susan lo intentó una vez más. Ella hizo una decisión consciente para actuar basada en su autoridad inherente. De hecho, ella le había prometido a su madre, quien ya había fallecido, que ella llegaría a “ser alguien”. Su éxito en llegar “a ser alguien” no fue iniciado por la fama y la aclamación que ella recibió, sino debido a que ella ejercitó su autoridad inherente—que era la verdadera persona dotada desde su nacimiento—y el mundo pudo tomar nota de ello. Cuando ella empleó su autoridad, pudo descubrir el poder real de su esfera de influencia. En tercer lugar, incluso aunque éstos se encontraban fuera de su “zona de comodidad”, ella se colocó a sí misma en una situación donde otros pudieran reconocer su autoridad personal, y que la pudieran capacitar para que ella fuera en la búsqueda y el máximo desarrollo de la misma. Una vez que estuvo dispuesta a permitir que esto sucediera, su talento tan obvio atrajo la atención de todo el mundo. El descubrimiento del asombroso talento musical de Susan Boyle, nos sirve como un ejemplo excelente de la naturaleza de la autoridad personal
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de una persona, y de su interdependencia con la autoridad personal de los demás. Por favor debes notar con mucho cuidado, que yo no dije que su don fue creado, sino al contrario, “descubierto”. El programa de televisión británico Inglaterra Tiene Talentos no le dio a ella la autoridad para cantar, sino que simplemente proveyó el escenario para que ella pudiera ejercitar su autoridad. En esencia, ella siempre había poseído la autoridad de su don en la esfera del canto, pero ella necesitaba una audiencia y una oportunidad para servir al mundo con su talento. Pero por poco ella casi ni siquiera trató de ser una concursante en el programa de televisión, debido a que estaba pensando que era muy vieja para ir en busca de su sueño. Tú nunca vas a ser muy viejo o muy joven, o muy pobre o muy rico, o muy cualquier otra cosa, como para ir en busca de tu autoridad inherente. Todo aquello que es natural dentro de ti, se va a manifestar por sí mismo si tú se lo permites.
Tú esfera de dominio personal El rey Salomón, que ha sido una de las gentes más sabías que jamás han vivido, escribió lo siguiente: “La dádiva del hombre le ensancha el camino y le lleva delante de los grandes” (Proverbios 18:16, rvr), y “¿Has visto hombre solícito en su trabajo? Delante de los reyes estará” (Proverbios 22:29, rvr). El don de Susan Boyle abrió el camino para ella—la llevó delante de mucha gente muy influyente, que abrieron puertas para que ella pudiera llegar a realizar sus sueños y aspiraciones más íntimas, que había abrigado toda su vida. Aunque ella ya había ejercitado su don en diferentes maneras en medio de su comunidad local, existía una esfera mucho más grande donde ella tenía que compartir ese don.
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Tu autoridad también tiene una esfera de dominio en donde tiene que ser ejercitada. El tamaño o el alcance de esa esfera de dominio, y el hecho de que tú te conviertas en alguien “muy conocido” no es el asunto a tratar. El asunto consiste en si acaso tú vas a poder reconocer lo que se encuentra inherente dentro de ti, y si vas a poder ejercitar tu don para ti mismo y para los demás. Tu autoridad es la habilidad única del liderazgo que tú posees en el mundo. Mucha gente permite que su verdadera autoridad permanezca sin ser explotada en forma alguna. Ellos tal vez nunca han llegado a descubrir o nunca han llegado a buscar su habilidad especial, con la cual pueden contribuir a su generación. Ya sea que uno se encuentre operando genuinamente en el don o talento que uno posee, esto no necesariamente tiene que ser medido por medio del éxito exterior. Tanto un hombre de negocios que sea multimillonario, como una madre soltera está luchando para sobrevivir día con día, ambos, pueden tener una autoridad escondida, la cual nunca han llegado a explotar, y que una vez que sea dada a conocer y manifestada, va a traer algo de tremendo valor a su vida, y a la vida de muchos otros. La única forma en que tú puedes ejercitar la verdadera autoridad, es por medio de reconocer y comenzar a funcionar en el poder de tu esfera de dominio personal.
Las búsquedas auténticas y las búsquedas falsas Cuando la gente llega a violar los principios de autoridad, normalmente esto sucede debido a que ellos no tienen un entendimiento fundamental, de lo que la autoridad genuina verdaderamente es. Muchos individuos
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que tienen grandes dones, talentos, sueños, y promesas, han destruido su futuro, por medio de fracasar en poner en práctica o implementar estos principios. Por ejemplo, mucha gente va en busca de la prosperidad o de la fama para que esto sea solo en su propio beneficio, pero este tipo de búsquedas no son auténticas. Al contrario, la gente debería estar yendo en busca de su propia autoridad interior. Ellos van a descubrir que cuando ellos hagan esto, la prosperidad los va a alcanzar. Nuestra prosperidad se encuentra dónde se encuentra nuestra autoridad. La verdadera autoridad es el derecho y el poder de ser aquella persona tal y como originalmente fuiste diseñada para vivir. Tú puedes tener un padre, un carpintero, un estilista, una persona de negocios, un director corporativo ejecutivo, maestro, estudiante, pastor, oficial de gobierno, o cualquier otro tipo de función o llamamiento en forma mucho más efectiva—y esto puede ser una persona en ti mismo mucho más efectiva—si acaso tú llegas a descubrir tu verdadera autoridad y puedes llegar a entender y a vivir todos sus principios. Si tú ya has podido llegar a descubrir tu autoridad personal, y te encuentras en la búsqueda de ella, tú puedes convertirte en una persona mucho más efectiva por medio de aplicar los principios de autoridad que se encuentran delineados en este libro. Tú puedes llegar a descubrir cómo es que ellos pueden operar, y todo lo que ellos pueden hacer en tu vida y en tu vocación, a medida que tú interactúas con otros en diferentes áreas de la vida, y a medida que aprendes la forma cómo puedes fusionar o mezclar tu autoridad personal con la autoridad personal de otros, para poder obtener resultados mucho más grandes. Tú también vas a poder aprender
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el origen de tu autoridad personal, la razones de por qué funciona la autoridad, y la forma como la autoridad funciona, así como la forma de poder ponerla en práctica o implementarla. Si el concepto de autoridad personal es algo completamente nuevo para ti, o si tú o te has encontrado frustrado, debido a que tú sabes que posees algo, con lo cual tú puedes contribuir a tu generación, pero al mismo tiempo, sientes que no has podido ejercitar tu autoridad personal, y quieres llegar a ser una persona muy efectiva en esto, tú vas encontrar las herramientas que necesitas en este libro. Toda persona puede llegar ejercitar autoridad, debido a que la autoridad se encuentra dentro de cada uno de nosotros.
Las razones de por qué mucha gente le tiene miedo a la autoridad Aunque todos tienen un autoridad personal, y aunque todos los principales medio ambientes de la ínter actuación humana involucran el uso de la autoridad, la autoridad personal sigue siendo todavía uno de los principios más malentendidos en las relaciones humanas. Debido a esto, la mayoría de la gente que yo he conocido, le tienen miedo a la autoridad en alguna medida. Tú tal vez puedes ser uno de ellos. Tal vez tú has escogido este libro, y lo estás leyendo con alguna medida de aprehensión. Esto es algo que se puede entender, considerando la forma en que la autoridad ha sido modelada o mostrada para muchos de nosotros. La mayoría de la gente mal entiende la autoridad debido a que ellos nunca han podido verla en su forma verdadera. La autoridad ha sido concebida equivocadamente, ha sido mal definida, malamente representada, y usada en las peores formas.
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Le tenemos miedo debido a que no entendemos su naturaleza y sus propósitos. Como resultado de esto, la autoridad es vista como un elemento negativo, en lugar de ser vista como un elemento positivo. Tú tal vez has tenido algún tipo de experiencia negativa con un padre, maestro, jefe en tu trabajo, o algún otro tipo de “figura de autoridad”. Tú tal vez puedes ser una mujer o un miembro de una raza o comunidad, a quienes siempre se les ha dicho que son inferiores, y a quienes se les ha impedido que puedan desarrollar sus habilidades al máximo. Tal vez tú has sido una víctima de la opresión, donde la autoridad religiosa fue usada para controlar tu vida, o, incluso peor, tal vez alguna autoridad religiosa tomó ventaja de tu confianza, y llegó a abusarte mental o físicamente. Si éste es el caso, tú falta de confianza, tu temor, e incluso, el odio que tienes en contra de la autoridad es algo que se puede entender muy fácilmente. O, tú tal vez eres uno de esos que creen que sólo cierto tipo de gentes pueden poseer un título o una personalidad de tipo A, o alguien que sólo puede alcanzar cierto “nivel” en la vida, y que solo este tipo de gentes pueden tener autoridad. La autoridad es un aspecto de la vida que ha sido mal entendido y mal usado hasta el punto de que muy frecuentemente se ha convertido en lo opuesto de lo que realmente debería de ser. Pero tú vas a poder descubrir en este libro que la naturaleza de la autoridad genuina, es la antítesis de la supresión y de la opresión, y que realmente es la fuente de la verdadera libertad y realización. En el capítulo siguiente, vamos explorar algunos de los puntos de vista tan restringidos y tan distorsionados con relación a la autoridad, que la gente ha aceptado, y vamos a explorar algunos de los conceptos equivocados
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que ellos han esparcido, todo lo cual nos ha llevado a lo que yo creo es una crisis presente con relación a la autoridad. En cada país del mundo, la gente ha malentendido, ha usado equivocadamente, o abusado de la autoridad. Como resultado de esto, hemos tenido demasiado del tipo equivocado de autoridad, y muy poco del tipo correcto de autoridad. Nuestro fracaso para poder llegar a entender la autoridad nos ha llevado a disminuir la calidad de vida de las gentes, y nos ha llevado a una falta de orden verdadero, paz, y progreso en las sociedades y culturas de todo el mundo.
¿Cuáles son aquellas cosas para las cuales tú tienes autorización y que puedes realizarlas? Por lo tanto, la autoridad es la clave para la realización y para Tú tienes la poder vivir una vida efectiva, así oportunidad, como la forma para poder funcioresponsabilidad, nar adecuadamente en la vida, y y habilidad para la garantía de poder tener éxito. desarrollar tu La autoridad es la ley del desempropia autoridad peño en su máxima expresión. personal, y poder También son los medios de una realizar tu propósito influencia poderosa y muy positiva en la vida de otras gentes. Si único en la vida, la autoridad es y contiene todas conjuntamente con estas cosas, ¿entonces acaso no los demás. es imperativo que todos nosotros lleguemos entender este concepto tan crítico? Obviamente, sí. A menos que tú llegues a conocer qué es aquello a lo cual tú has sido autorizado, y que puedes realizar en
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esta vida, tú siempre vas estar experimentando algún grado de falta de satisfacción, incertidumbre, frustración y tal vez, incluso enojo con relación a tus circunstancias. Pero tú tienes la oportunidad, la responsabilidad, y la habilidad para poder desarrollar tu propia autoridad personal, y poder llevar a cabo tu propósito, que es único en la vida, en conjunción con otras personas. Tú has sido diseñado en forma única para aquel propósito para el cual naciste, a través de tus dones, habilidades y personalidad. No importa lo que otras gentes te hayan dicho en el pasado acerca de tu potencial, tú puedes desarrollar los principios, el poder, y la protección de la autoridad dentro de tu propia vida. Cada uno de los siguientes capítulos ha sido diseñado de tal manera, que a medida que tú avanzas en este libro, tú vas a poder obtener una visión mucho más completa de la verdadera autoridad, así como de muchas de las aplicaciones de la autoridad en tu vida, todo lo cual te va a liberar para que puedas llegar a ser todo aquello para lo cual tú fuiste diseñado desde tu nacimiento. Tú vas a poder aprender acerca de las esferas o medio ambientes básicos de la autoridad, y la forma cómo puedes vivir fructíferamente en cada uno de ellos. A través del Propósito y Poder de la Autoridad, tú vas a poder llegar a... • Reconocer lo que es la verdadera autoridad— y lo que no es ••Entender tu propia autoridad personal e inherente ••Descubrir la forma en que puedes identificar “el territorio” o área de tu vida que tú estás autorizado a supervisar
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••Aprender los orígenes de la verdadera autoridad ••Obtener orden, simplicidad, y paz en tu vida ••Responder en forma constructiva a los demás, y dentro de sus propias esferas de autoridad ••Ejercitar tus dones y poderes intrínsecos ••Dirigir a otros hacia su propia autoridad personal • Vivir en plena confianza y con propósito • Ser verdadero con relación al llamamiento de tu vida • Llevar al máximo tus dones, talentos, y habilidades ••Poder encontrar la verdadera prosperidad ••Trabajar con gozo Susan Boyle tuvo la determinación de hacer algo con su vida, después de haber pasado años de desilusión, y por lo tanto, llegó a ejercitar la autoridad que se encontraba dentro de ella. “Yo me hice la promesa de llegar a ser alguien en esta vida”, ella dijo. Yo quiero que tú hagas esta misma promesa a alguien más. Ese “alguien más” es tu verdadera persona, la cual va a ser manifestada ante el mundo entero. Susan Boyle no solamente ha usado su autoridad, pero ella en sí misma se ha convertido en una autoridad. La verdadera autoridad es la manifestación de uno mismo. En los siguientes capítulos, vamos a poder ver algunos principios fundamentales de la autoridad, que forman el antecedente o el fundamento básico, para poder llegar a entender, y poder implementar tu autoridad personal.
Capítulo dos
Los “tiburones de los negocios” y otros “modelos” de poder Por qué la autoridad se ha convertido . en el enemigo
A
caso tú te quedaste sorprendido con la descripción que te di de la autoridad en el capítulo uno, definiéndola como algo personal, y que viene de adentro de uno mismo? Mucha gente piensa acerca de la autoridad como algo que existe fuera de ellos—e incluso como algo que les ha sido impuesto. ¿Qué es lo que tú piensas normalmente, cada vez que tú escuchas la palabra autoridad? ¿Acaso tú tienes una imagen positiva o negativa de ella?
La forma como nuestras ideas afectan nuestro estilo de vida Nuestras perspectivas de la vida han sido desarrolladas mayormente a través de las experiencias que hemos tenido de primera mano. Algunas veces, nuestras experiencias han tenido un efecto positivo en nosotros, y nos han llevado hacía pensamientos y acciones, los cuales nos han afirmado en esta vida. En otras ocasiones, nuestras experiencias han tenido un efecto negativo nosotros, y nos han causado que adoptemos mentalidades que 39
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llegan a limitarnos totalmente. Por lo tanto, tenemos que tener mucho cuidado con relación a basar nuestra vida solamente en nuestras experiencias. De otra manera, nuestras deducciones nos pueden impedir que tengamos una vida llena de realización y de recompensas, si es que acaso estás deducciones nos han llevado a vivir en la desilusión, el temor, la desconfianza con relación a los demás, y muchas cosas similares a estas. Cada vez que yo manejo en ciertas áreas de mi vecindad, me pongo a recordar un accidente que tuve en cierta ocasión, y todo ese tipo de memorias y sentimientos asociados con el accidente, siguen regresando a mi vida. Algunas veces, el hecho de regresar a cierto lugar, o a cierto medio ambiente en nuestra vida, puede volver a abrir algún tipo de incomodidad o de temor, que nosotros pensamos que ya habíamos vencido. Tenemos que tomar la decisión de no permitir que este tipo de sentimientos nos controlen, y afecten la manera cómo vivimos. Todos nosotros recogemos cierto tipo de temores a través de nuestra vida, los cuales se derivan de experiencias que nos han causado incomodidad, insatisfacción, o dolor. Para usar un ejemplo muy simple, vamos a suponer que un niño se quedó atorado en un elevador por un periodo de dos horas, y desarrolló un temor con relación a todo tipo de espacios cerrados. Entonces, cuando él creció y se convirtió en un joven, él estuvo involucrado en varios accidentes automovilísticos, y llegó a desarrollar un temor muy grande cada vez que tenía que manejar. A medida que creció hacia su edad adulta, él sufrió una caída y tuvo una fractura muy severa en su brazo, y por lo tanto, el desarrolló un temor con relación a las caídas. Todo el mundo tiene experiencias y asuntos de esta naturaleza.
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Aunque siempre tenemos que usar precauciones normales y sentido común, a medida que nos desenvolvemos en nuestra vida, los temores con relación a los espacios cerrados y los accidentes no son algo inherente, sino que son temores que han sido aprendidos. Cuando alguien experimenta cualquier tipo de temor, eso se convierte en algo muy real para esa persona, ya sea que otros puedan o no sentir lo mismo, o que puedan justificar ese tipo de temor. Estamos tratando con emociones que han comenzado a afectar nuestro comportamiento, y que necesitan ser confrontadas. En forma similar, hemos llegado a desarrollar nuestras actitudes y reacciones con relación a la autoridad— ya sea que se trate de una actitud negativa o positiva—y todo esto basado en nuestras experiencias pasadas con “figuras de autoridad” en lugar de detenernos realmente a pensar acerca de este concepto. Yo creo que la mayoría de la gente tiene temor o rechaza la verdadera autoridad. Si alguien se siente incómodo con relación a ella, le tiene miedo, o incluso, llega a despreciar la idea de autoridad, esta persona es muy probable que alguna vez tuvo una experiencia negativa en algún punto, que precipitó este tipo de sentimientos. Nuestras actitudes y perspectivas con relación a la autoridad tienen un efecto directo en la perspectiva que tenemos acerca de la vida, y de nosotros mismos, y con relación a los propósitos y objetivos que buscamos. Por lo tanto, la incomodidad que tenemos, y el temor hacia la autoridad, de igual manera necesitan ser reconocidos y confrontados, antes de que podamos ir en busca de nuestra propia autoridad personal. Desafortunadamente, la mayoría de nosotros hemos tenido oportunidades que nos han dado experiencias muy
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negativas con relación a la autoridad. Muchos de nuestros padres, miembros de la familia, maestros, jefes en el trabajo, y líderes civiles y religiosos, en forma inconsciente han contribuido al malentendido que tenemos de la autoridad, debido a su propia falta de entendimiento con relación a lo que es la autoridad genuina. Nuestras esposas o esposos también pueden haber contribuido con relación a la confusión que tenemos de la autoridad, debido a sus propios antecedentes y experiencias personales, nos trajeron consigo mismos hacia esta relación. Nuestras culturas han contribuido a los conceptos equivocados que tenemos acerca de la autoridad, a través de haber establecido tradiciones que se encuentran basadas en interpretaciones equívocas de la autoridad. En el medio ambiente religioso, mucha gente llega a percibir a Dios como un monstruo, debido a todo aquello que les enseñaron cuando eran niños; les dijeron que Dios es un tirano, que solamente está buscando cómo agarrar a alguien in fraganti, para que finalmente pueda castigarlo en el infierno. A final de cuentas, todos nosotros hemos perpetuado nuestro propio mal entendimiento de la autoridad, por medio de reforzar las ideas erróneas que hemos absorbido. De nuevo, mucho de todo aquello que hemos experimentado, ha edificado una imagen de autoridad en nuestra mente y en nuestro corazón, la cual es un tipo de mentalidad intrusa o incluso, temible. Si una raza entera o una generación entera le tienen miedo a la autoridad, esto se debe a que en alguna parte dentro de su pasado colectivo, ellos llegaron a experimentar dolor, incomodidad, o insatisfacción, como resultado de una autoridad aparente.
Opiniones acerca de la autoridad La gente ha tenido una diversidad completamente diferente de experiencias con relación a la autoridad en
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nuestro mundo contemporáneo, igual que como sucedió en épocas anteriores, y esto ha llevado a una diversidad de opiniones acerca de lo mismo. Esta la razón de por qué, si tú realizas una búsqueda en los libros, en la computadora y en la Internet, acerca de la autoridad, tú vas encontrar puntos de vista tan opuestos como el odio y rechazo que Oscar Wilde tenía de la autoridad cuando dijo—“La autoridad es sumamente degradante”—como el extremo opuesto que encontramos en la observación irónica de Albert Einstein cuando dijo—“El hecho de castigarme por mi infracción hacia la autoridad, siendo que el destino me instituyó a mí mismo como toda una autoridad”—o incluso yendo hasta la advertencia tan apasionada de Daniel Webster, que dijo—“Si nosotros y nuestra posteridad rechazamos la autoridad y la instrucción religiosa, estaremos violando las reglas de justicia eterna, estaremos despreciando los mandamientos de la moralidad y en una forma completamente irresponsable, estaremos La autoridad destruyendo la constitución polígenuina genera un tica que nos mantiene en unidad, medio ambiente y ninguno puede predecir el tipo de catástrofe tan repentina que para que las gentes puedan pensar, nos puede sobrevenir, sepultando toda nuestra gloria en una oscuri- soñar, descubrir, y dad profunda”. refinar sus dones Tal parece como si la gente se está dividiendo en ciertos grupos cuando tiene que ver con la autoridad. Para algunos, la autoridad representa orden y estructura. Para otros, la autoridad representa una falta de libertad de pensamiento y acción. La autoridad es
y talentos, para edificar a los demás, y para que ellos mismos puedan desarrollarse completamente.
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considerada por muchos como una fuerza negativa que obstruye la libertad de las gentes—o en el mejor de los conceptos, una maldad que es necesaria para mantener a la vida funcionando. Pero la autoridad en su forma verdadera no es obstructiva, ni restrictiva. La autoridad genuina llega a crear un medio ambiente, para que la gente pueda pensar, soñar, descubrir, y refinar todos sus dones y talentos, a fin de que puedan edificar a otros, y desarrollarse a sí mismos al máximo. La autoridad, por lo tanto, ha sido secuestrada, y el resultado de esto, es que ha sido concebida en forma equivocada, ha sido definida equivocadamente, y ha sido tergiversada a través de todo el globo terráqueo.
Nadando conjuntamente con los tiburones de los negocios Yo nací en las islas tropicales, bañadas de sol de las Bahamas, en el mar Caribe, lo cual ha sido considerado por millones de gentes, como un lugar rodeado por las aguas más maravillosas que existen en el mundo. Obviamente, las actividades acuáticas son muy populares en este lugar. Algunas veces, me gusta la pesca con arpón en el océano, y he podido ver tiburones en múltiples ocasiones. Cada vez que me encuentro debajo del agua, y llego a ver un tiburón, de todas formas, no importa cuántas veces haya sucedido, me da un escalofrío en todo el cuerpo, ¡especialmente si el tiburón es mucho más grande que yo! Han habido pocas ocasiones cuando todas las circunstancias han apuntado hacia el hecho de que ese tiburón estaba muy interesado en mi, y yo me llegué a sentir completamente indefenso. En una ocasión, yo ya había atravesado un pez con arpón, pero el pez todavía seguía moviéndose a pesar de
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estar clavado en el arpón, cuando de repente, un tiburón se acercó y aparentemente decidió lo siguiente, “tú acabas de robar mi cena”. Déjenme decirles que yo tuve que comportarme como todo un caballero ante este tiburón. De inmediato, solté el arpón mientras que me puse a pensar, Señor tiburón, tú puedes tener el pescado y te puedes comer el arpón junto con ello. Al mismo tiempo que yo estaba pensando esto, yo estaba nadando para alejarme de ese lugar. Yo sabía que si el tiburón quería atacarme para obtener un buen pedazo de mí, él podría hacerlo sin ningún problema. ¿Por qué? Yo no nací con el don de la natación, y por lo tanto no era nada fácil para mí poder moverme en medio del agua, con la facilidad que tenía el tiburón. Tomaba mucho más esfuerzo de mi parte que de parte del tiburón, debido a que la natación es una de sus habilidades naturales, y el océano es su esfera natural de dominio. Es su medio ambiente de autoridad. Esos dientes tan afilados también forman parte de su autoridad. Es una autoridad de la cual yo me encuentro consciente y respeto profundamente, y al hacer esto, estoy protegiéndome a mí mismo en la forma adecuada. Existen muchas historias y casos probados de ataques perpetrados por los tiburones, donde mucha gente ha quedado incapacitada, y muchos otros han perdido su vida. ¿Acaso nosotros podemos echarle la culpa a los tiburones por estos incidentes, o acaso tenemos que aceptar todo esto como resultado natural de la autoridad que tiene la naturaleza dentro de sus funciones? Parece ser que el tiburón considera todo este tipo de comportamiento como algo natural, y como algo que se encuentra dentro de su autoridad. En esencia, nosotros somos quienes estamos traspasando su esfera de dominio de su
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autoridad, y esa violación da como resultado una muestra natural de su autoridad. Es muy interesante poder notar que nosotros no condenamos a todos los tiburones debido a las acciones de uno solo. Tampoco cancelamos el valor que tienen los tiburones, ni menospreciamos el papel tan vital que ellos juegan dentro del tan variado escenario de las cosas de esta vida. Nosotros los consideramos como que simplemente están ejerciendo su autoridad dentro de la naturaleza. Tal vez deberíamos ser nosotros los que tenemos que ponernos a pensar acerca del temor que les tenemos a los tiburones, y transformarlo en un respeto hacia la autoridad que tienen dentro de su medio ambiente. Cada vez que yo me encuentro en el océano, y puedo ver el poder y la belleza tan impresionante del tiburón, y me pongo recordar que soy yo quien estoy traspasando su esfera de dominio y de autoridad, y por lo tanto, yo honro el hecho de mantener mi distancia, y estar listo a abandonar su dominio en el momento en que sea necesario. A través de este entendimiento, mi temor de la autoridad se ha convertido en un respeto por la autoridad.
“Tiburones” humanos Yo he podido encontrar ciertos tipos de gentes que tienen los dientes muy afilados. Todos nosotros podemos experimentar todo un conjunto de problemas, cada vez que llegamos a tratar con “tiburones” humanos que se encuentran posando como figuras de autoridad, y que causan daños muy serios a nuestra vida. La diferencia entre estas gentes y los tiburones en el océano, es que esos tiburones humanos se encuentran operando fuera de los parámetros de la verdadera autoridad, y más allá de su medio ambiente natural de autoridad. Ellos mal usan y abusan la autoridad, a medida que están gobernando
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a otras gentes en diversos medio ambientes y posiciones de la vida. Ellos arrebatan todo aquello que no les corresponde, y debido a que se han convertido en personas muy hábiles en hacer esto, y también son capaces de mostrar sus dientes tan filosos, todas las gentes que se encuentran alrededor de ellos, han tenido que rendir su propia autoridad natural y ponerse a nadar para salvar sus propias vidas. Considerando todas las malas experiencias con relación a la autoridad que muchos de nosotros hemos tenido, necesitamos tener mucho cuidado de no “tirar nuestro tesoro a las aguas”. En este libro, vamos explorar muchas razones de por qué la autoridad genuina es muy buena, y de hecho, es esencial para poder vivir una vida llena de productividad y de realización. Pero debido a que esto ha sido abusado por todos aquellos que eran los custodios o usurpadores de la autoridad, a través de toda la historia, las gentes han sido abusadas en forma tan profunda, que ellos llegan a rechazar lo que ellos creen que ha causado ese dolor—“la autoridad”—en lugar de rechazar el mal uso o abuso de la misma. Algunas gentes han usado cuchillos como armas para matar a otras gentes, pero los cuchillos en sí mismos no fueron el problema. El problema consistía en aquellos que usaron los cuchillos. De la misma forma, si tú sufres una quemadura mientras que estás planchando ciertas prendas de vestir, la plancha no es el problema, sino la distracción, accidente o defecto mecánico que provocó que te quemaras con la plancha. Por lo tanto, el problema no es la autoridad, sino la forma como las gentes han tratado la autoridad. La mayoría de la gente no reconoce exactamente qué es lo que les provoca a reaccionar de esta manera, cada vez que ellos se ponen a resistir lo
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que están llamando como autoridad. Pero el hecho de seguirse enfocando en sus malas experiencias, les puede impedir que tengan buenas experiencias con la autoridad en el futuro.
Conceptos equivocados muy comunes con relación a la autoridad Debido a que todos estos conceptos de la autoridad que han sido aceptados en forma común, pero que son falsos han impregnado a las naciones y a las culturas del mundo, en primer lugar necesitamos ponernos explorar lo que la verdadera autoridad no es, de tal manera que podamos liberarnos de todos esos conceptos erróneos, y que podamos llegar a entender en forma clara lo que la verdadera autoridad si es. Vamos a ver si tú puedes reconocer algunos de los “tiburones” humanos que se encuentran representados en los siguientes conceptos de la autoridad. Algunos de estos términos pueden sobreponerse unos con los otros, pero cada uno de ellos tiene un aspecto muy diferente, al cual debemos poner mucha atención. La persona que ejerce poder Uno de los falsos conceptos de la autoridad que ha llevado al mal uso y al abuso de la misma, es el hecho de asumir que el poder es sinónimo de la autoridad. Muchas gentes han venido a ver a la autoridad como un poder muy grande que es capaz de dominar a otras gentes. El poder es la capacidad para mover algo por medio de la fuerza o energía, ya sea que se trate de un objeto, una idea o una persona. Es la habilidad para provocar, activar, incitar, transformar, o impactar. El poder puede ser ejercitado a través de la posición, el conocimiento, la
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fuerza, fortaleza, integridad, influencia, personalidad, o amenazas. Pero el poder no es lo mismo que la autoridad. La diferencia consiste en que la verdadera autoridad siempre se encuentra sancionada, o autorizada, mientras que el poder puede ser ilegítimo, y sin contar con autorización alguna. El poder que es usado para dañar a las gentes de alguna manera, claramente es algo no autorizado; éste se ha convertido en un arma. Los bravucones en todos los tiempos y en todas las edades han usado el poder de esta manera. Muchas gentes que han entrado en contacto con poder que es opresivo, e incluso abusivo, llegan a desarrollar un temor de la autoridad, debido a que en su mente, ellos han transferido esa experiencia a la autoridad misma. Por ejemplo, si el niño es abusado físicamente por alguno de sus padres, él tal vez va a tratar de protegerse de mayor abuso futuro, por medio de rechazar a cualquier adulto que él ve o denomina como una figura de autoridad. Si una esposa es abusada emocionalmente en forma repetida por su marido, ella puede comenzar a sospechar de otras gentes que le hacen diferentes tipos de sugerencias o que le ofrecen algún tipo de consejo, pensando que los motivos que ellos tienen son los mismos y que contienen el mismo tipo de control que ella sufrió por su marido. En el nivel de la sociedad, o a nivel nacional, desafortunadamente, la historia se encuentra repleta de ejemplos de poder que no ha contado con autorización alguna. Uno de los ejemplos más obvios es Adolfo Hitler, que llegó a tomar el control total de Alemania a través de la intimidación, y por medio de superar el uso de la fuerza, y entonces, puso todas sus armas de abuso en la mayor parte del continente europeo. Todos aquellos que
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ejercitan el poder sin autoridad alguna, se encuentran forzados a someter a la gente bajo su voluntad. Cada vez que llegamos a ver a una persona que está oprimiendo a otras gentes, ya sea que se trate de una manipulación por medio de estarles dando falsas promesas falsas esperanzas, ya sea que se trate por medio de controlar sus destinos debido a que él posee algo que la gente necesita, esto siempre se va a tratar de un abuso de la autoridad. Los dueños de esclavos usan el poder hasta el punto de “poseer” a otros seres humanos, El poder consiste teniendo que someterlos por medio de la fuerza física.
simplemente en energía y habilidad, pero la autoridad es el permiso y el derecho para usar ese poder.
El poder nunca fue diseñado para existir sólo por sí mismo, sino como una herramienta para el bien de las gentes. El poder tiene que ser protegido y regulado, y la autoridad genuina es la que se encarga de hacer esto. Por ejemplo, la electricidad si no cuenta con un conductor, o con una terminal de tierra, puede ser muy destructiva; pero cuando cuenta con estas cosas, nos puede dar luz y energía para que podamos usar aparatos, equipo, instrumentos electrónicos, y cosas parecidas a estas. El mismo poder que nos puede destruir, se convierte en un servicio a favor de nosotros, si es regulado, o sometido para el propósito correcto. El poder es simplemente energía y habilidad, pero la autoridad es el permiso y el derecho de usar ese poder. El poder sin autoridad es energía sin autorización; y se convierte en una fuerza ilegal. La clave para el éxito no consiste en solamente tener poder, sino en conocer y usar el
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poder que ha sido autorizado. Alguien que se encuentra actuando con una verdadera autoridad protege e imparte poder a las gentes. La verdadera autoridad convierte el poder en servicio. Ésta es la razón por la cual la más grande protección en contra del poder mal dirigido es la autoridad genuina. Cuando las gentes operan en una forma autorizada, ellos van a usar el poder para servir fines que son constructivos. Sin embargo, todos también tenemos que reconocer, que la autoridad sin poder es algo completamente ineficaz; básicamente va a consistir en el permiso para poder hacer algo, sin tener la habilidad de poder llevarlo a cabo. La autoridad es responsabilidad, pero el poder es la habilidad. ¿Acaso alguna vez has tenido que apelar hacia algún oficial de gobierno, o alguna vez has trabajado para un supervisor que no tenía habilidad alguna, no tomaba acción alguna, y tampoco hacía los cambios o correcciones que eran necesarios? Tú no puedes dar autoridad sin dar conjuntamente el poder necesario para que ese recipiente pueda actuar, o de otra manera, esa autoridad es completamente ineficaz. Una persona debería de delegar autoridad, solamente si tiene la capacidad para respaldarla. Por lo tanto, la autoridad y el poder son inseparables. Si los llegan a separar, el propósito de cada uno de ellos se debilita, se distorsiona, o queda completamente nulificado. Cada uno de estos tiene su propio lugar. Una persona que tiene el “espíritu de jefe” El concepto del “espíritu de jefe” tiene que ver con el poder, pero su atributo principal es el abuso de la posición a través de la manipulación. La palabra manipular
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es definida como “controlar o jugar con alguien usando medios insidiosos, injustos o una serie de artimañazas”. La persona que posee el espíritu de jefe tiene la idea de que el hecho de tener autoridad significa que puede tomar ventaja de las gentes, ordenar todas las cosas de las otras gentes como a él o a ella se le antoje, y obligarlos a hacer todo lo que él o ella les dice por medio de la coerción. Este tipo de perspectiva es en contra de todo lo natural, completamente opuesto a la ética, con relación a lo que es la verdadera autoridad. Cuando alguien que se encuentra en una posición de liderazgo llega a abrazar esta idea tan falsa de la autoridad, él o ella se involucran en acciones que intimidan, discriminan, explotan, oprimen, suprimen, y abusan de la gente. Muchas gentes han tratado a otros de acuerdo a este espíritu de jefe, o han tenido la experiencia de recibir los resultados de este tipo de trato, en una forma mayor o menor. Lo opuesto a este tipo de espíritu de jefe, es el hecho de usar la autoridad para el bien de todos los que están involucrados, buscando la cooperación de los demás, y sus contribuciones, en lugar de estar tratando de manipularlos. La persona que manda o que “se encuentra a cargo de todo” Muchas gentes piensan que debido a que hay alguien que los está gobernando o que “se encuentra a cargo de todo”, esa persona en forma automática posee autoridad. Debido a que la autoridad necesita autorización y necesita ser legítima, de todas maneras, todos aquellos que usurpan la función de liderazgo, en realidad, no poseen ninguna autoridad genuina, aunque ellos se encuentren en posiciones que les permitan gobernar.
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Cualquier intento de ponerse a cargo de las cosas sin autorización cancela la autoridad. Muchos gobiernos en naciones alrededor de todo el mundo han contado con gobernadores que carecían de autorización alguna. Algunos de estos gobernadores tal vez hayan realizado cosas extraordinarias, pero de todas formas, eran completamente ilegítimos. Las gentes que hacen a un lado las reglas legítimas, con el propósito de obtener poder, siempre tienen que estar mirando por encima de sus hombros, para cuidarse de todos aquellos que les pudieran hacer lo mismo a ellos. Han establecido un precedente, por medio de haber menospreciado e ignorado la autoridad establecida. Muy frecuentemente, este tipo de personas tienen que matar a otras gentes para poder obtener y mantenerse en el poder, debido a que todo el mundo está consciente de que todo lo que hacen no es válido. Una persona puede “estar a cargo de todo” en forma legítima, pero tiene que ganarse esta posición, y tiene que estar autorizado para ello—a través de elección legal, una sucesión adecuada, el consenso del grupo, y cosas parecidas a estas. Existe un relato en las antiguas escrituras de un pastor muy joven llamado David, quien recibió la autorización de parte de Dios, para suceder al rey Saúl como el siguiente rey del pueblo de Israel. Un profeta había sido enviado para decirle que había sido elegido, y para ungirlo para su gobierno. Sin embargo, incluso contando con esta sanción divina para respaldarlo, David no llegó a tomar el trono, sino hasta que era el tiempo para hacerlo. Él no mató al gobernador presente, que era el rey Saúl. Mientras que Saúl todavía vivía, David no se atrevió a usurpar el trono, incluso, aunque Saúl estaba buscando matarlo. David indicó lo siguiente: “No extenderé mi mano contra mi señor, porque
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es el ungido de Jehová” (1 Samuel 24:10, rvr). Después de que Saúl murió, entonces fue que David se convirtió en el gobernador legítimo de Israel. Una persona que domina Mientras que “el espíritu de jefe” principalmente se refiere a la manipulación, y el espíritu de “estar a cargo” se refiere a la usurpación, el concepto de dominación tiene que ver con control. Mucha gente confunde la autoridad con la dominación. Existen aquellos que operan completamente a través del control. Algunas de estas gentes son tan inseguras, que la única forma que ellos sienten que pueden esconder sus vulnerabilidades, y obtener al respeto de los demás es (en forma irónica) empleando un puño de hierro. A fin de poder mantener un estado de control, todos aquellos que operan de acuerdo a este punto de vista, amenazan a otros, o La autoridad llegan a usar algún tipo de técnicas genuina no negativas que ya discutimos antecontrola, sino riormente: ellos tal vez pueden exhipermite que la bir algún tipo de espíritu de jefe, gente tenga la usar fuerza, y rehusarse a delegar, libertad para debido a que ellos no pueden confiar ejercer su propia en nadie. Ellos centralizan todo tipo de actividades en ellos mismos, y se autoridad. convierten en el eje central de todo el poder y de todas las decisiones, micro administrando las actividades de toda su organización, su familia, la iglesia, o la nación. Las gentes que equiparan este tipo de dominación con la autoridad, pueden llegar a crecer en desconfianza, con relación a cualquier
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tipo de parámetro que otros traten de poner en ellos o en sus acciones. La autoridad genuina no tiene que controlar, sino que le da la libertad la gente para que puedan ejercitar su propia autoridad. Un verdadero líder jamás siente la necesidad de dominar a otros, sino que de inmediato, comparte su autoridad con ellos. Él quiere delegar autoridad, y quiere motivar a otros para que desarrollen sus propias habilidades. Una persona que funciona como un dictador o un tirano Algunas gentes piensan que una persona que ejerce un poder absoluto se encuentra en un lugar de autoridad. La naturaleza misma de un dictador cancela la autoridad, pero, de todas formas, esto es debido a que la verdadera autoridad no demanda el gobierno incondicional sobre otras gentes. Una dictadura incorpora el punto de vista de dominación en gran manera. No permite la libertad de expresión, y tampoco le permite a las gentes que exploren sus ideas, o que participen completamente de oportunidades para su crecimiento personal y profesional—en esencia, a estas gentes se les ha negado la habilidad de ser completamente humanos. La gente puede llegar a confundir la dictadura con la autoridad, si es que ellos han llegado a vivir bajo un sistema opresivo durante un período de tiempo, de tal manera que esto se ha convertido en algo familiar, e incluso represivo para ellos. Un dictador y un tirano son similares en el hecho de que en lugar de exhibir una autoridad verdadera, ellos son autoritarios. Uno de los significados de la palabra autoritario es “favorecer, relacionarse, o depender
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ciegamente sumisos a la autoridad”. La persona que tiene un punto de vista autoritario demanda una obediencia absoluta y que no se cuestiona para nada por parte de los demás. El espíritu de tirano es el nivel máximo de corrupción en el poder, que quiere que otros se sometan sin cuestionar y sin que siquiera se pongan a pensar. Un tirano no solamente es un usurpador del poder, sino que especialmente ejerce el poder para su propia ganancia y seguridad personal. De nuevo, la misma naturaleza de la dictadura y de la tiranía cancela la autoridad genuina. Cualquier sumisión percibida que viene a ser resultado de la fuerza o de la amenaza no es una verdadera sumisión, sino solamente rendición. Dondequiera que existe la verdadera autoridad, va a existir una verdadera sumisión—la cual, tal y como pudimos ver en el último capítulo, es un acto voluntario, y forma parte de la naturaleza inherente interdependiente de la autoridad. La rendición es un completo contraste a esto, y siempre va a ser resultado de manipulación y temor. Cuando la gente le tiene tanto miedo a otra persona, de tal manera que están temerosos de hacer aquello que realmente desean realizar, debido a que esa persona tiene “autoridad”, entonces, estas gentes se encuentran funcionando debajo de una dictadura. Esto no es autoridad; esto es intimidación. La verdadera autoridad le permite a la gente expresarse a sí mismos, y desarrollarse al máximo en todos sus potenciales. La verdadera autoridad no restringe, sino al contrario, provee instrucción, consejo, y guía para poder edificar a los demás. Lo opuesto a un tirano, es alguien que busca el bienestar de los demás, y no su propio beneficio, e incluso, llega a realizar sacrificios personales por el bien de las demás gentes.
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Una persona que tiene un título Algunas gentes piensan que debido a que una persona posee un título, en forma automática la autoridad lo está acompañando. Tenemos la tendencia a respetar y a honrar gente que tiene títulos, los cuales parecen elevarlos. De esta manera estamos confundiendo las etiquetas con la autenticidad, pero no siempre es un hecho que una persona que posea un título esté ejerciendo autoridad. Por ejemplo, una persona puede involucrarse en complicidades, manipular un sistema, o incluso llegar a matar, para poder obtener cierto título o posición. El gobierno de esta persona no cuenta con autorización. Solamente es la autoridad genuina la que genera gobierno o verdadero poder legal. Un líder verdadero puede tener un título, pero él no opera basado en ese título. Él siempre va a operar basado en su autoridad interior, y la gente va a responder a esta autoridad natural, en lugar de responder a su etiqueta o título. Una persona muy gritona o “muy exagerada” En ocasiones, en forma automática la gente atribuye a autoridad alguien que grita bastante o que aparenta ser “muy exagerado”. Este aspecto de falsa autoridad tiene que ver con la personalidad de esta persona—él o ella pueden aparentar ser muy fuertes, muy necios en sus opiniones, muy difíciles de soportar, muy carismáticos, bastante articulados y persuasivos, amenazantes, o incluso, sumamente molestos. Pero, sólo debido a que una persona, o incluso un grupo de personas que gritan en lugar de hablar, o ejercen uso de la fuerza, esto no necesariamente significa que tienen una autoridad legítima sobre los demás. Muchas gentes son intimidadas
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a través de este tipo de individuos, y por lo tanto, sucumben ante ellos. Estas gentes le permiten a estas personas gritonas que tomen todas las decisiones, y esto ocasiona que todo el mundo que está conectado con ellos se tenga que mover en cierta dirección, lo cual puede ser o no saludable.
Tú vas a saber que tienes una autoridad efectiva, cuando tú no tengas que decir nada, o estés muy tranquilo, y la gente siga respondiendo positivamente hacia ti y hacia tu influencia.
En contraste a esto, yo he notado que la verdadera autoridad muy frecuentemente es calmada o incluso, silenciosa. Se requiere de mucha más autoridad natural, para poder reducir el volumen de tu voz, y de todas maneras, seguir siendo efectivo. Muy frecuentemente, mientras más grande es la verdadera autoridad que está presente, más calmada va a ser toda la atmósfera alrededor. Tú sabes que posees autoridad efectiva cuando tú no tienes que decir nada, o cuando te encuentras muy calmado, y la gente responde en forma positiva, tanto a ti, como a toda tu influencia. Estuve enseñando en el segundo año de la escuela preparatoria por cinco años, y pude aprender muy rápidamente, que si yo tenía que gritarle a mis alumnos para poder mantener el orden, entonces, yo no tenía ninguna autoridad real. Por lo tanto, muy rápidamente yo establecí los lineamientos necesarios, y comuniqué todos los valores bajo los cuales mi salón de clases debería manejarse, poniendo muy claro todo esto en el pizarrón y en anuncios muy grandes que se encontraban colocados alrededor del salón de clase, donde se especificaban cuáles tenían que ser las leyes del medio ambiente de
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aprendizaje. Yo había sido autorizado por la escuela para enseñar a los alumnos, y por lo tanto, mi autoridad en esta situación era completamente legítima, pero entonces, yo tenía que crear el contexto para esta autoridad. Una vez que los alumnos llegaron entender mis valores y parámetros, ellos sabían que tenían que someterse a estas reglas, si es que querían tener una buena relación conmigo. Los alumnos respondieron muy bien y respetaron mi autoridad, y por lo tanto, siempre existió un medio ambiente muy bueno para el aprendizaje. Un principio muy similar puede ser visto en muchos líderes efectivos de países, compañías e incluso familias. La medida de su autoridad es todo aquello que sucede en medio de su silencio—o incluso en su ausencia. Por ejemplo, si una madre sale a realizar ciertos mandados, dejando al hijo mayor para que supervise el hogar, la medida de su verdadera autoridad va a ser reflejada en la forma como el hijo mayor responde durante su ausencia. ¿Acaso él se pone a correr salvajemente por toda la casa, o acaso él se asegura que sus hermanos menores estén bien cuidados? Si el hogar se encuentra en paz cuando la madre regresa, esto quiere decir que los hijos han respetado su autoridad, incluso cuando ella no estaba presente. O de otra manera, vamos a suponer que tú te encuentras en una junta en tu lugar de trabajo donde hay otras quince personas presentes, pero el presidente de la compañía está ausente. Tal vez existe confusión acerca de lo que debería hacerse en forma regular con relación a cierto asunto o con relación a quien debería realizarlo. Entonces, el presidente decide entrar en la reunión y se sienta a en un rincón, hasta atrás de la sala de juntas, y toda la discusión y el medio ambiente cambia, a medida que las gentes se calman, y comienzan
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a hacer sugerencias constructivas. Éste es un ejemplo de la autoridad silenciosa que se pone en acción, simplemente con la presencia de una persona. Jesús de Nazaret poseía esta autoridad inherente. En una ocasión, cuando los líderes religiosos de esos días querían engañarlo, ellos le trajeron a una mujer que había sido atrapada en adulterio, para ver si Jesús iba a estar de acuerdo en que ella debía ser apedreada hasta morir, lo cual era el castigo de acuerdo a la ley. Jesús respondió con silencio, mientras ellos seguían demandando una respuesta. Entonces, él les hizo una pregunta muy calmadamente, la cual en forma decisiva los derrotó, y ellos tuvieron que retirarse. Esto es la autoridad. Más esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia el suelo, escribía en tierra con el dedo. Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella. E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra. Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio. Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó? Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más. (Juan 8:6–11, rvr) Más tarde, Jesús fue traído delante del gobernador, Poncio Pilato, y fue acusado falsamente. Él no dijo una sola palabra como respuesta. El silencio de Jesús perturbó a Poncio Pilato. Es muy interesante observar que
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la respuesta de Poncio Pilato consistió en amenazar a Jesús con autoridad, diciéndole que él tenía la autoridad de soltarlo o de matarlo. Jesús le respondió, diciendo, “Ninguna autoridad tendrías contra mí, si no te fuese dada de arriba; por tanto, el que a ti me ha entregado, mayor pecado tiene” (Juan 19:11, lbla). Jesús se encontraba operando bajo una autoridad que era mucho más alta que la del Una persona gobernador, e incluso, Poncio Pilato con verdadera tenía que someterse a esa autoautoridad no ridad, ya sea que estuviera consciente de esto o que no lo estuviera. tiene que alardear
acerca de ella; La confianza o el control, tal y como Jesús lo demostró, viene de se muestra un sentido de verdadera autoridad. automáticamente. La autoridad crea su propia confianza. Una persona con autoridad verdadera no tiene que fingirlo; esta persona se vende a sí mismo. De igual manera, cuando la persona tiene autoridad legítima, él o ella no tienen que usar fuerza o un volumen alto de voz para demandar ser escuchados. La gente va a escuchar a la autoridad verdadera, ya sea que estén de acuerdo con ella o que no lo estén. Los líderes religiosos en los días de Jesús, seguían cuestionando su autoridad debido a que querían menospreciarlo. Pero muchas de las gentes respondieron ante Jesús. “Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas” (Mateo 7:28–29, rvr). Lo que no es la autoridad Los conceptos tan aceptados de autoridad que hemos enlistado anteriormente no tienen nada que ver con la autoridad real, pero el problema consiste en que
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la mayoría de la población del mundo cree que una o más de estas ideas representa la autoridad, y esta es la razón de por qué nos encontramos experimentando una crisis en la autoridad actualmente. Todas estas ideas tan falsas son lo que muchas gentes piensan cada vez que escuchan esta palabra, debido a que la autoridad ha sido definida o modelada para ellas en maneras distorsionadas, y su experiencia de ella, ha sido opresiva, negativa, rígida, e incluso mortal. Debemos poder entender lo que no es la autoridad... ••No es dominar a los demás ••No es ser más poderoso que las demás ••No es ser un dictador para los demás ••No es oprimir a los demás ••No es dominar a los demás ••No es forzar a la gente para que hagan lo que tú quieres que ellos realicen ••No es manipular a la gente para que hagan lo que tú quieres que ellos realicen ••No es controlar a los demás ••No es restringir a los demás ••No es tiranizar a los demás ••No es sujetar otras gentes bajo tu voluntad Para resumir, muy frecuentemente todos nosotros percibimos la autoridad como una persona, un partido, o una posición que domina, controla, o manipula a otras gentes o situaciones, normalmente para la ventaja de esa misma autoridad percibida. ¡Y todos nosotros odiamos ser dominados, manipulados, y controlados!
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Todos aquellos que exhiben una autoridad falsa, no solamente están lastimando a todos aquellos que los rodean, sino que también están paralizando la verdadera autoridad que se encuentra dentro de ellos mismos, y que ellos deberían estar ofreciendo a los demás. Ellos no están operando en su propia autoridad y esfera de dominio, sino en un falso dominio de un abuso completo. Mientras que en forma natural, solemos ser partidarios de las víctimas que han sufrido bajo la falsa autoridad, debemos darnos cuenta que tanto los perpetradores como las víctimas de las percepciones equivocadas de autoridad, necesitan encontrar y vivir en la libertad que viene, solamente a través de la autoridad verdadera.
Resultados del mal uso y del abuso de la autoridad La gente reacciona de diferentes maneras ante el descuido, el maltrato, o el abuso de la autoridad, pero nuestros conceptos y experiencias negativas con relación a la autoridad, producen emociones y actitudes, las cuales llegan a extraer completamente la vida de nosotros. Ponte a pensar acerca de experiencias negativas específicas en tu vida, donde tú has tenido que tratar con gentes que se encontraban en supuesta autoridad, o cuando tú te encontrabas en ciertas circunstancias que parecían estarte controlando. Ahora bien, quiero que consideres la forma como tú has reaccionado ante ellas, a medida que sigues leyendo la siguiente lista de reacciones que la gente tiene ante la autoridad falsa: ••El temor: Ellos tienen miedo de ser gobernados y controlados. ••La intimidación / timidez: Ellos se sienten inseguros debido a todos aquellos que dicen
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tener cierta autoridad sobre ellos, y tal vez van de acuerdo con sus órdenes y sugerencias, sólo debido a que sienten que no tienen opción alguna. ••La desconfianza / precaución: Ellos se mantienen siempre a cierta distancia de otras personas, porque no quieren que nadie tome ventaja de ellos, y tampoco quieren que su vida llegue a estar controlada por otra persona. ••La sospecha: Ellos tienen desconfianza de todos aquellos que tienen que dar a cargo de algo o de alguien, y por lo tanto, procuran apartarse siempre de ellos. ••La fricción: Sus relaciones con todos aquellos que se encuentran “a cargo” son muy tensas; ellos tienen muchos problemas para encontrar un factor común donde puedan conectar con sus supervisores, maestros, padres, y colegas. ••El antagonismo / la contención / la actitud retadora: Ellos se encuentran en total desacuerdo, y son completamente beligerantes a través de su ínter actuación con las otras gentes. ••La actitud defensiva: Ellos se ofenden muy fácilmente, y tratan de protegerse a toda costa de todo tipo y forma de crítica. ••El resentimiento: Ellos desarrollan un espíritu de amargura con relación a todos aquellos que llegan a percibir como “ejecutivos” o “supervisores”.
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••La protesta: Ellos objetan todo tipo de sugerencias, porque se ponen a pensar, Nadie me va a decir lo que yo tengo que hacer, y por lo tanto, de inmediato, ellos siempre se ponen a discutir en contra de cualquier intento que pueda llegar a influenciar su vida. ••La persona evasiva: Debido a las experiencias negativas que han tenido con la autoridad, ellos evitan a toda costa ejercer la iniciativa o tomar papeles de supervisión. ••Las amenazas: Ellos se sienten en peligro, y se sienten muy vulnerables ante todos aquellos que poseen algún tipo de poder. ••El estrés / la ansiedad / la preocupación / el terror o pavor: Ellos experimentan angustia cada vez que tienen que interactuar con figuras de autoridad. ¡Qué forma de vida tan terrible! Como resultado del mal uso y del abuso de la autoridad, nuestro mundo—y en forma muy especial, la generación actual—tiene y posee una corriente subterránea de desconfianza, falta de respeto, y temor de la autoridad. Algunas gentes han llegado hasta el punto de rechazar por completo cualquier semblanza de autoridad. Otros han venido a creer que la supresión y la opresión son componentes naturales de la autoridad, y por lo menos, todos estos componentes tienen que ser aceptados, tolerados, o soportados. Estos conceptos de la autoridad, establecidos con tanta duración, y el comportamiento que resulta de ellos, son la causa fundamental de muchos de los problemas que encaramos en el mundo hoy en día. Básicamente, ellos están destruyendo a las
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gentes, e impidiéndoles que lleguen a ser todo aquello para lo cual fueron diseñados desde su nacimiento. Y aunque podemos llegar a entender y a simpatizar con la reacciones y emociones descritas anteriormente, ninguna de ellas son saludables, y no van a contribuir para nada, en ayudarnos a ejercitar nuestra propia autoridad personal inherente.
Un principio muy hermoso Las experiencias negativas que hemos tenido con la autoridad, en forma inevitable han dejado un efecto en nuestra realización y efectividad en la vida. Por lo tanto, debemos hacer a un lado todas las concepciones equivocadas anteriores con relación a la autoridad, y debemos movernos más allá de nuestras reacciones con relación al mal uso y el abuso de la autoridad, y al contrario, debemos descubrir la naturaleza y los principios de la verdadera autoridad. Me gusta llamar a la autoridad “el principio tan hermoso” debido a que no se trata de “enseñorearse sobre los demás”. Se trata de suavizar los senderos y caminos para las gentes. Es la forma de poder proveer los recursos, protección, refrigerio, iluminación, crecimiento, felicidad, realización, satisfacción, y contentamiento que todos necesitamos. En el siguiente capítulo, vamos explorar la naturaleza de la verdadera autoridad, y vamos a ver en qué está basada esta naturaleza.
Capítulo tres
La fuente de la autoridad La relación esencial que existe entre autor . y autorizado
E
n el último capítulo, pudimos mirar algunos de los sustitutos tan pobres y tan destructivos de la autoridad. Para poder conocer y entender la autoridad verdadera, necesitamos explorar la fuente de origen, de la autoridad humana, y los propósitos inherentes de esa autoridad.
El Autor El “Dueño de los Derechos de Autor” de la tierra La palabra autoridad se deriva de una palabra latina, auctor. La palabra auctor significa “promotor, creador coautor”. ¿Que es un autor? Una definición muy simple del diccionario es “una persona que crea o que es el origen de algo: la fuente o inicio de algo”. Un autor es el creador o la persona que origina algo. En muchos países, el derecho de autores de obras literarias o musicales, y los patentes de los inventores, son considerados en un valor muy alto, y se encuentran protegidos por la ley. Permíteme mencionar aquí que todo ser humano tiene el derecho de creer lo que él o ella deseen creer, y yo 67
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respeto y defiendo este derecho. En nuestra era moderna de la susodicha iluminación, muchos han optado por creer que son simplemente meros productos de un proceso de evolución, y que son hijos de los monos. Sin embargo, es mi firme convicción y creencia, que todos los seres humanos tienen un Autor—que es el Creador del mundo—quien es la fuente de origen de nuestra vida misma, además de ser la fuente de origen de nuestra autoridad. Nuestro Creador o Dios, es el origen del mundo y de todo lo que existe en el. Le llamamos “Dios” a Dios debido a que Él es el autor natural de toda la creación. La palabra Dios se refiere a “la realidad máxima o suprema: como el ser perfecto en poder, sabiduría, y misericordia, que es adorado como el creador y gobernador de todo el universo”. Aunque mucha gente ha tratado de negar o de nulificar “los derechos de autor” que Dios tiene sobre ellos, éstos siguen perteneciendo a Dios y por siempre lo serán. El principio de la autoridad del creador es fundamental y básico, para poder entender la naturaleza del poder de tu autoridad personal. Los derechos de la fuente de origen de la autoridad Dios, como el único ser autosuficiente, es el autor, es la causa de origen, y el creador de todas las cosas visibles e invisibles. Él es el único que tiene el derecho de ser el soberano absoluto sobre todo aquello que Él ha creado. Es Dios “por cuya causa son todas las cosas, y por quien todas las cosas subsisten” (Hebreos 2:10, rvr). El creador le dio existencia a todo lo que existe, y Él tiene el poder de la vida en sí mismo—la habilidad para poder otorgar la vida y para poder quitarla también. Desde nuestra perspectiva como seres humanos, ¡no existe una autoridad mayor que esta! Muchas gentes literalmente se encuentran buscando la fuente de la
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juventud, y en forma figurativa, ellos se encuentran buscando la vida eterna. Pero solamente Dios puede dar vida eterna. Jesús de Nazaret dijo lo siguiente: “Porque como el Padre tiene vida en sí mismo” (Juan 5:26, rvr). En el primer libro que fue escrito por Moisés, el gran líder y escritor de la ley, dice lo siguiente: “En el principio creó [fue el autor] Dios los cielos y la tierra” (Génesis 1:1, rvr). David, el rey y músico de Israel, escribió lo siguiente: “De Jehová es la tierra y su plenitud; el mundo, y los que en él habitan” (Salmo 24:1, rvr). Todo lo que existe en la tierra—las plantas, los animales, pájaros, reptiles, océanos, tierra, los seres humanos—así como todo lo que existe en el vasto universo—es propiedad de Dios. Nadie tiene el derecho de falsificar todo lo que Dios ha “escrito” en las fundaciones del mundo, y nadie tiene el derecho de usurpar lo que Dios ha creado.
Nuestra autoridad proviene de nuestra Fuente de Autoridad Un autor o creador siempre es la fuente de autoridad de su obra, ya sea que se trate de un libro, un aparato, un automóvil, una casa, un avión. Por ejemplo, yo soy el autor de un número de libros, y yo puedo enseñar todo lo que se encuentra en mis libros, sin tener que mirar a los volúmenes publicados o a las notas originales que los crearon, debido a que yo soy la fuente de origen de todos ellos. Las gentes pueden usar mis libros para enseñar a otros, pero como el autor de los mismos, yo soy el único que puedo hablar en forma definitiva acerca del contenido de ellos, y acerca del propósito que tuve cuando los escribí. Todo lo que un autor o un inventor produce es creado debido a que existe algo que él o ella desean comunicar o hacer para iniciar su producción. Todo es creado por una razón.
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Por lo tanto, la fuente de origen de un producto tiene el derecho legítimo de establecer los parámetros de la autoridad que ha puesto en su producto, así como establecer la forma como el producto funciona mejor. Este parámetro es lo que todos llamamos los principios o leyes que lo gobiernan, y es a través de ellos que ese producto puede operar. Para un producto que ha sido producido por una compañía, el parámetro para la autoridad ese producto podría ser el manual del usuario. De esta manera, no es la compañía o el creador solamente quienes son la autoridad, sino la documentación que contiene los principios y leyes que gobiernan el producto es lo que se ha convertido también en la autoridad. El manual del producto no es producido por una bodega, por un distribuidor, ni por un consumidor, sino por aquel que originó el producto. Las opiniones y preferencias de todos estos con relación al producto pueden ser muy interesantes, pero no constituyen la autoridad; ninguno de éstos han sido autorizados por el fabricante y tampoco pueden ser garantizados. La fuente de autoridad y autoridad máxima de toda la autoridad humana, por lo tanto es el Creador, de igual manera que todos los principios y leyes que Él ha establecido con relación a la humanidad, todo lo cual se encuentra registrado en las Escrituras. Cualquier cosa que no corresponde a ellas o que no refleja su esencia y espíritu no es una autoridad verdadera, y las opiniones que no corresponden al diseño original del Creador no pueden ser garantizadas. Todo aquello que las gentes formulan a través de teorías con relación a la humanidad y a la creación no forman el asunto en cuestión. La pregunta es, ¿qué es lo que el Fabricante diría acerca de esto?
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Si queremos vivir en la realidad que se deriva de seguir los principios que gobiernan la autoridad verdadera, debemos entrar en contacto con la fuente y origen de la autoridad, y de esta manera vamos a poder encontrar Sus parámetros para nuestra vida. Ésta la forma como podemos protegernos y preservarnos a nosotros mismos como seres humanos. Un principio es una ley establecida o una regla fundamental bajo la cual algo funciona debido a su naturaleza y diseño. Los principios que necesitamos aplicar para nuestra vida se encuentran inherentes en la creación, no están limitados por el tiempo, y son permanentes. Ellos fueron establecidos por el creador, para asegurar y proteger las funciones y realización de su creación. Estos principios han sido denominados a través de diferentes términos en las Escrituras, tales como “mandamientos”, “preceptos”, “estatutos”, y “los caminos de Dios”. La autoridad es un principio en sí misma, pero también funciona de acuerdo a ciertos preceptos específicos que debemos llegar a entender, a fin de que podamos llegar a apreciarlos, y que podamos beneficiarnos de ello.
La autoridad compartida Bajo las leyes de derecho de autor de los Estados Unidos de América, aunque un autor sea el dueño de su obra, y posea completa autoridad con relación a ella, él también tiene el poder de compartir los derechos de autor de esa obra con alguien más, o de transferir esos derechos completamente, de tal manera que otra persona se llegue a convertir en el “beneficiario de los derechos de autor” con relación a esa obra. Esto se lleva a cabo a través de un documento por escrito, en donde el autor le otorga el permiso para la transferencia total
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o compartida de estos derechos. Los derechos también pueden ser transferidos legalmente por medio de un testamento o herencia; si el autor muere, los derechos son impartidos a un pariente o amigo que haya sido designado por el autor.
Fuimos creados para compartir la autoridad inherente del Dios Creador, por medio de haber sido hechos a su En forma similar, Dios como propia imagen y el Creador, como el Autor de nuespor medio de ser tro mundo, y poseyendo todos los derechos de propiedad con relación su “simiente”.
al mismo, ha delegado parte de su autoridad por medio de confiársela a los seres humanos. Él compartió cierta autoridad con relación a sus “derechos de autor” de la tierra, de tal manera que todos nosotros pudiéramos ejercer esa autoridad dentro y sobre toda la tierra. Fue Dios mismo quien nos diseñó con la habilidad para poder llevar a cabo nuestras autoridades individuales y colectivas en el mundo.
La autoridad se encuentra formada como parte de nuestra misma existencia ¿De qué forma fue que el Dios Creador nos otorgó estos derechos de propiedad compartida del mundo? Él no nos dio esta autoridad como una forma de transacción que se realiza entre los socios de un negocio. Él la compartió con nosotros de la misma forma como un padre comparte todo aquello que es suyo con sus hijos. Todos nosotros fuimos creados para poder compartir la autoridad inherente del Creador, a través de ser hechos a su propia imagen, y por medio de ser su propia “simiente”.
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De esta manera, ha sido formada la autoridad en nuestra misma existencia como seres humanos: Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. (Génesis 1:26–27, rvr) Para poder mostrarle a los seres humanos la autoridad que Dios había colocado dentro de ellos, y para poder instruirlos con relación a esta autoridad, “Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra” (Génesis 1:28, rvr). Fuimos creados—literalmente—por causa de la autoridad. A los seres humanos se les ha otorgado tanto una autoridad general sobre la tierra, como una autoridad personal que es específica para cada uno de nosotros. El Creador opera en el universo en conjunción con su autoridad. Fuimos creados para recibir autoridad de Él, y a cambio, poder operar de acuerdo a esta autoridad, y de acuerdo a los principios que Él ha establecido para la tierra. Nuestra autoridad se manifiesta en un número de diversas maneras, y en diferentes ámbitos de la ínter actuación y de las tareas que tienen que ver como seres humanos, a medida que fructifícanos con nuestra vida, a medida que llenamos la tierra, y a medida que la
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gobernamos. Nuestro entendimiento de la autoridad y el propósito del Creador, y la respuesta que nosotros presentemos ante ellos, son demostrados en la medida en que nosotros lleguemos a cumplir o realizar la propia autoridad.
La autoridad está formada dentro de toda la creación No son solamente los seres humanos quienes funcionan a través de la autoridad, si no que en realidad, es toda la creación que funciona dentro de ella. En la naturaleza, podemos ver muy claramente algunas de las formas en que el Creador ha establecido la autoridad para que sea un principio en la tierra. Por ejemplo, cuando Dios diseñó el mundo, lo creó para que funcionara durante dos periodos distintos, el día y la noche. En forma muy interesante, Moisés describió los propósitos de estos dos en términos de autoridad: Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así. E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. Y las puso Dios en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra, y para señorear en el día y en la noche, y para separar la luz de las tinieblas. Y vio Dios que era bueno. (Génesis 1:14–18, rvr)
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Nuestra vida en esta tierra se encuentra gobernada por días y tienen una duración aproximada de veinticuatro horas, y por medio de estaciones, y ambos fueron establecidos en el origen de la humanidad. Obviamente, nosotros no tenemos la habilidad de cambiar la realidad de los días y de las estaciones. Tenemos que respetar la “autoridad” del sol y de la luna—que son dos lumbreras que “supervisan” nuestro mundo. En forma general, todas las cosas ocurren más lentamente durante la noche, no sólo debido a que la gente se encuentre cansada y tengan la necesidad biológica de dormir, sino también, debido a que la noche es un tiempo mucho menos adecuado para trabajar. El mundo también adopta una atmósfera diferente después de que todo ha oscurecido. Todo está más callado, y se convierte en un tiempo de reflexión y de descanso, en lugar de ser un tiempo de producción. Por supuesto, todos podemos trabajar con las luces artificiales, pero no hay nadie que pueda mantener una actividad en forma indefinida las veinticuatro horas del día, todos los días. En adición a esto, hay muy pocas gentes que se encuentran disponibles para interactuar con ellas durante la noche, debido a que ellas, también, son gobernadas por los parámetros de este mismo ciclo de vida diaria matutina. Por lo tanto, nos encontramos gobernados por la naturaleza de los días. Las estaciones también tienen “autoridad” sobre nuestra vida, de la misma forma, afectando la forma y el tiempo en que hacemos las cosas. Incluso en lugares como las islas de las Bahamas, donde el clima está caliente todo el año, las estaciones gobiernan los tiempos durante los cuales podemos involucrarnos en cierto tipo de actividades. Por ejemplo, aunque muchos turistas visitan estos lugares durante las estaciones del otoño y el
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invierno, y se ponen a nadar en el océano, la mayoría de los habitantes de las Bahamas piensan que hacer esto es algo loco. Ninguno de ellos va a nadar, sino hasta que el clima es bastante bueno y muy caliente—¡por lo menos con 90°F! En regiones donde las estaciones van de una temperatura extrema a otra, las gentes tienen que alterar la forma de su comportamiento, a fin de poder adaptarse a las condiciones tan cambiantes del clima. Todos nosotros hemos creado cierto tipo de hábitos y comportamientos, así como estilos de vida, que van de acuerdo a las estaciones, y en este sentido, las estaciones ejercen autoridad sobre nuestras vidas. En otro ejemplo de la autoridad a través de la naturaleza, Dios creó a los animales y a las plantas en diferentes géneros y especies—Él los creó “según su género” (Génesis 1:11–12; 21, 24–25, rvr). Cada especie es única, y fue creada para cumplir y realizar el propósito de Dios bajo su propia autoridad de existencia.
Debemos consultar al Autor Si realmente queremos llegar a conocer los propósitos para los cuales Dios creó los cielos y la tierra, entonces, no tenemos opción alguna, sino consultar a Dios como el Autor Universal. La ciencias pueden proveer algunas respuestas con relación a cómo es que las cosas funcionan, y de que están formadas, pero solamente pueden descubrir todo aquello que ya ha sido creado. Cuando un científico llega a descubrir un aspecto de la vida que ha estado funcionando desde la creación, ¡algunas veces solemos darle tanto crédito como si él fuera la persona que creó todo esto! Tal vez le otorgamos algún premio Nóbel o algún otro tipo de reconocimiento. Mientras que por un lado valoramos a los
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científicos y todos sus descubrimientos, también necesitamos pensar de ellos con la perspectiva adecuada. De nuevo, la ciencia en forma simple, sólo puede descubrir lo que el Autor ya Yo creo que ha puesto en la creación.
la mayoría
Más aún, el hecho de descubrir de la gente algo es una cosa. El hecho de poder no ha sido entender la razón de por qué fue creado es una cosa completamente diferente. “descubierta” aún, en Yo creo que la mayoría de las gentes realmente no han llegado a ser “destérminos de cubiertos” en términos de conocer por conocer por qué y cómo es que fueron creados. Muy qué y para qué pocas gentes llegan a entender quiénes fueron creados. son ellos realmente debido a que no se encuentran en contacto con el Creador. Solamente un autor puede conocer verdaderamente su obra y las razones de por qué la escribió. Solamente un inventor puede conocer verdaderamente su invento y las razones de por qué lo creó. Una cosa es conocer que Dios te creó a su imagen y a su semejanza, pero hay algo completamente diferente, y que va más allá del acto de la creación misma, y esto es la razón de por qué Dios te creó, y llegar a conocer el tipo de autoridad que Dios te ha dado para que puedas realizar tu propósito en la tierra. Como la máxima autoridad, el Dios Creador es la fuente de origen de la autoridad que existe dentro de ti, dentro de mí y dentro de cualquier ser humano en el mundo. Necesitamos llegar a reconocer y ejercitar la autoridad que Dios ha colocado dentro de nosotros, y necesitamos llevar a cabo todo aquello que Dios nos ha autorizado realizar y llegar a ser.
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El propósito determina el diseño En el mundo físico Para poder comenzar a reconocer y ejercitar la autoridad que se encuentra dentro de nosotros, vamos explorar uno de los principios fundamentales de la autoridad que referimos en el capítulo uno: Todos y todo ha sido diseñado para llegar a realizar su propósito. También podemos describirlo de esta manera: el propósito para el cual un producto ha sido designado, determina el diseño del producto mismo. Todo (por lo menos, todo aquello que está bien hecho) ha sido designado de tal manera que pueda llegar a cumplir y realizar el propósito para el cual fue creado. Este principio fundamental se encuentra formando parte de toda la creación. Todo ha sido creado debido a que hay algo que el Creador quería en esta tierra, y por lo tanto, eso requería su existencia. Por ejemplo, en el mundo físico que Dios creó, Él necesitaba algo que le impidiera a la gente y a los objetos que se encontraban en esta tierra salir vagando hacia el espacio, y por lo tanto, Dios estableció la gravedad, junto con todas las leyes que están asociadas con ella. Dios sabía que iba a necesitar algo que fuera capaz de producir rayos de luz, los cuales tenían que producir la fotosíntesis en las plantas, y por lo tanto, Dios insertó este tipo de capacidad en el sol. El propósito de Dios consistía en perpetuar la vida sobre la tierra, y por lo tanto, proveyó el sustento y la perpetuación de la vida en un número determinado de días. Aunque muchas flores son muy hermosas, y podemos admirar su belleza, y aunque el hecho de apreciar
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esta belleza es muy valioso en sí mismo, hay algo mucho más que las flores y su belleza. Ciertos insectos han sido diseñados genéticamente para que puedan responder a ciertos colores de las flores, y estos colores se encuentran conectados a todo aquello que los insectos necesitan para alimentarse y poder sobrevivir. Una vez que los insectos se han alimentado de los retoños de las flores, ellos recogen el polen de las plantas, y entonces transfieren ese polen a otras plantas. Esto causa que las plantas puedan crear nuevos brotes y fruto, lo cual a su vez, produce nuevas plantas, de tal manera que la vida puede ser transferida a las generaciones siguientes. Por lo tanto, Dios no solamente estaba pensando acerca de la belleza de las plantas, sino también estaba pensando acerca de las nuevas plantas que serían reproducidas como resultado de todo esto. Dios ha creado todo con un propósito, y Dios le ha dado a todas las cosas su propia autoridad para poder realizar ese propósito. Dios creó al cuerpo humano con varios propósitos en la mente, y por lo tanto, Dios lo diseñó para que pudiera funcionar de acuerdo a ciertos procesos. Por ejemplo, Dios sabía que el cuerpo humano iba a necesitar algún método para poder obtener oxígeno mientras que al mismo tiempo podría exhalar el bióxido de carbono, y por lo tanto, Dios diseñó a las plantas primeramente con la capacidad para poder absorber el bióxido de carbono, y convertirlo en oxígeno. Entonces, Dios creó al cuerpo humano con la capacidad de producir dióxido de carbono, que es lo que las plantas necesitan, y a las plantas les dio la capacidad para producir oxigeno, que es lo que el cuerpo humano necesita. Dios también diseñó los pulmones del ser humano para que pudieran actuar como un mecanismo de intercambio para todo este proceso.
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Dios creó todo lo que existe, debido a que había algo que iba a requerir esta existencia. Cada aspecto del cuerpo humano fue diseñado con una tarea específica, de tal manera que pudiera funcionar en una forma saludable. El mundo entero fue creado para que pudiera funcionar de tal manera que todo pudiera contar con aquellas cosas que necesitaba para mantener la vida en este planeta. Y desde entonces, el Creador ha seguido manteniendo al mundo continuamente. Porque en él [Dios] fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten. (Colosenses 1:16–17, rvr, se añadió énfasis) En el “mundo” de las relaciones humanas y de la vocación Dios no solamente planeó las ínter actuaciones y las relaciones de unos con otros en el mundo físico de acuerdo a sus propósitos, sino que también planeó las relaciones humanas y las vocaciones humanas de acuerdo a sus propósitos divinos. Cuando digo vocación, yo no solo me estoy refiriendo a los “trabajos” que desempeñan las gentes. Yo me estoy refiriendo al concepto de vocación como “la función especial de un individuo o de un grupo” o “la fuerte inclinación o llamamiento a un estado en particular o un tipo de acción”. Existe algo que Dios desea realizar, que fue lo que hizo nuestra existencia necesaria y valiosa. Si alguna vez tú te sientes tentado a
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sentir que no eres nada importante, debes recordar que tu propósito fue la causa de que tú llegaras a nacer. Dios tiene una tarea en Tu nacimiento mente, y esto es lo que ha hecho de ti es prueba de una persona indispensable. Y de cada persona en este pla- que Dios quería realizar algo neta—que ahora nos estamos aproxique requería mando a los 7 billones de seres humanos, jóvenes y viejos—fuimos que Él te creara creados, debido a que hay algo que para este Dios quiere hacer, y que requiere la propósito. existencia de cada una de estas personas. Tu nacimiento es prueba y evidencia de que Dios quiere realizar algo, para lo cual Él te ha creado.
Todos han sido creados para tener dominio sobre un área o sobre un “territorio” específico de la vida, que solamente esta persona puede llegar a “gobernar”. Cuando tú llegas encontrar el área o territorio que tú estás supuesto a supervisar, tú vas encontrar el secreto para la realización de tu vida, y para la contribución tan especial que tú tienes hacia la raza humana. Tu autoridad se encuentra delineada a través de esta tarea territorial. Existe una palabra griega para la palabra “autoridad” en las Escrituras y es la palabra exousia, y uno de los significados de esta palabra es “influencia delegada”. Por lo tanto, la autoridad determina la influencia que tú tienes en el mundo. Esto significa que todo aquello para lo cual tú fuiste creado se constituye en tu territorio, o en tu área de autoridad. Tus dones y cualidades que son únicos, son las herramientas especiales que te van a permitir funcionar dentro de tu autoridad.
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El origen de la autoridad apoya, y es responsable de su producto La autoridad se deriva del Autor y es para el Autor Por lo tanto, la autoridad es un propósito inherente de todos los seres humanos. Más aún, junto con la autoridad, nos ha sido dada la habilidad para poder llegar a realizar las intenciones o deseos de nuestro Autor o Fuente de Origen. Por lo tanto, la autoridad se deriva del Autor y la autoridad es para el Autor. La autoridad se llega a realizar en forma exitosa, cuando el Autor es agradado. Cada vez que tú manifiestas tu autoridad, esta es la medida de tu éxito. El Creador apoya la autoridad que Él ha delegado. Él es responsable de asegurarse que la autoridad que te ha dado sea exitosa. Alguien que posee autoridad verdadera nunca va a abandonar a todos aquellos a quienes ha delegado autoridad. Dios los va a capacitar para que puedan llegar a realizarla. “Jehová cumplirá su propósito en mí” (Salmo 138:8, rvr). Es un asunto de reputación Una de las razones de por qué el Creador apoya la autoridad que nos ha dado, es que su reputación se encuentra en juego. Por ejemplo, en el mundo comercial, todos los productos que tú compras se encuentran apoyados o garantizados por los fabricantes, debido a que es su propio nombre lo que está respaldando los productos, y ellos quieren proteger sus reputaciones en la mente de todos los consumidores. Una compañía quiere que todos sus productos tengan éxito y que esto se traduzca en muchas ventas. Su nombre y su imagen son sinónimos en la mente de los consumidores, y por lo tanto,
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si un producto llega a fallar o se encuentra defectuoso, el nombre de la compañía va a mancharse—y algunas veces hasta el punto de causar la quiebra total de esa empresa. Cuando la compañía Toyota tuvo problemas técnicos con su automóvil tan popular y tan económico en energía, que es el modelo Prius, así como con otros modelos, la excelencia de su nombre previamente tan renombrada en la industria automotriz se debilitó. Por medio de confrontar esta situación, y tratar de volver a ganar la confianza de los consumidores, una de las cosas que ellos hicieron fue poner anuncios en la televisión, diciendo que estaban trabajando muy fuertemente para corregir todos los problemas. Para proteger aún más el nombre de la marca de Toyota, la compañía envió al presidente de la compañía, quien es el nieto del fundador, para que se reuniera con el Congreso de los Estados Unidos de América, y de esta manera, poder discutir todos los asuntos en forma directa, y poder explicar los pasos que la compañía estaba tomando para resolver los problemas, y para poder manejar adecuadamente el control de calidad. Todo esto fue hecho a fin de proteger el nombre de la compañía, y para poder recuperar su autoridad en el mercado automotriz. Cuando la industria bancaria internacional se vio involucrada en una espiral descendente, entre otras cosas, debido a las prácticas deshonestas en el préstamo de dinero, causando que muchos bancos fracasaran, y apresurando los gobiernos para que ofrecieran subsidios y préstamos, a fin de ayudar a estos bancos a superar la crisis, algunos bancos llegaron a mostrar anuncios en sus edificios donde declaraban que se encontraban “libres de problemas”. Ellos querían que todos sus clientes llegaran a saber que ellos no se habían involucrado
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en políticas riesgosas en el mercado de la banca, y que se encontraban en un estado financiero saludable, y que no tenían necesidad de aceptar los fondos que el gobierno estaba ofreciendo. Todos estos anuncios constituían un intento para proteger sus nombres en las mentes de todos los consumidores. En forma similar, cada vez que saltan los asuntos y problemas que tienen que ver con la calidad de ciertos alimentos, o con algún tipo de epidemia por causa de envenenamiento a través de alimentos consumidos, algunos supermercados y restaurantes ponen anuncios que indican que sus productos no fueron afectados por lo que haya sido que estaba causando el problema. Ellos quieren que la gente sepa que ellos todavía tienen mercancía de buena calidad, de tal manera que sus reputaciones no se vean afectadas por los problemas de otras compañías. Todos estos ejemplos son una reflexión con relación al hecho de que una fuente de origen, o el fabricante de un producto desea garantizar la calidad de ese producto, para que sea algo seguro, y que funcione de acuerdo a como fue diseñado originalmente. El Creador apoya la autoridad que nos ha dado, a medida que operamos de acuerdo a los principios que Él ha establecido para la humanidad. Dios nos dice, “Yo apresuro mi palabra para ponerla por obra” (Jeremías 1:12, rvr), y también dice, “Pues Jehová no desamparará a su pueblo, por su grande nombre” (1 Samuel 12:22, rvr).
El dilema de la autoridad Tal y como fue establecida por el Creador, la autoridad es algo muy bueno inherentemente. Nos permite llegar a realizar nuestros propósitos colectivos e individuales
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como seres humanos. Pero, en forma histórica, hemos podido ver la forma como la autoridad ha sido acusada, a través de todos aquellos que estaban supuestos a ser sus custodios, y de la misma forma, a través de todos aquellos quienes usurparon la autoridad debido a sus propios propósitos y objetivos tan egoístas. De nuevo, la falsa autoridad ha lastimado a mucha gente en forma tan profunda, de tal manera que ahora ellos rechazan el concepto de la autoridad misma. En nuestro mundo contemporáneo, y debido a todas las experiencias negativas que hemos tenido con “figuras de autoridad”, estamos encarando el asunto que tiene que ver con la necesidad de tener un trato amistoso con la autoridad, a fin de que podamos llevarnos unos con otros en la vida, pero de alguna manera, no llegamos a confiar en esto completamente. No queremos llegar a aceptar ningún vestigio de la autoridad absoluta. Sin embargo, nos encontramos en un profundo dilema: como seres humanos, fuimos creados para operar bajo la autoridad legítima y sus principios, y nuestras vidas no pueden llegar a funcionar en forma adecuada sin ello; pero al mismo tiempo, le tenemos miedo a la autoridad.
Volviendo a capturar el propósito original de la autoridad A la luz de ese dilema, ¿cómo es que vamos a poder recuperar la autoridad genuina en nuestra vida? El Creador dice lo siguiente: “Mi pueblo fue destruido porque le faltó el conocimiento” (Oseas 4:6, rvr). Por lo tanto, vamos a movernos hacia delante, para poder descubrir la forma de volver a capturar la verdadera naturaleza de la autoridad para nosotros y para nuestro mundo.
Capítulo cuatro
La traición y restauración de la autoridad Una vida de imitación es mucho más costosa. que la vida del Diseñador
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uestra autoridad se encuentra basada en todo aquello que el Creador planeó y diseñó para nosotros, pero la mayoría de nosotros no estamos viviendo de acuerdo a nuestra autoridad personal. Para poder volver a capturar nuestra autoridad verdadera, necesitamos llegar a descubrir cómo es que toda esta confusión de la humanidad con relación a la autoridad comenzó, y las razones de por qué todavía todo esto persiste. Tenemos que comenzar desde el principio mismo. Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. (Génesis 1:26–27, rvr) Cuando los seres humanos fueron creados a la imagen y semejanza del Dios Creador, ellos fueron diseñados para ser como Él, actuar como Él, y funcionar 87
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como Él. De la misma forma como Dios gobierna, los humanos estaban supuestos a gobernar la tierra—bajo la autoridad máxima de Dios, y los principios que Él había establecido para la tierra. Esta autoridad no les pertenecía a los seres humanos; solamente les había sido confiada por el Creador. Los seres humanos habían sido delegados con una autoridad compartida. Tú nunca puedes “tomar” la autoridad verdadera. Siempre es delegada solamente, y por lo tanto, sólo puede ser recibida con gratitud, y debe ponerse en práctica. Tú puedes tomar el poder, pero la autoridad y algo que tiene que ser otorgado. Más aún, si tú transfieres algo de la autoridad que tú has recibido hacia alguna otra persona, entonces esa persona también, lo único que puede hacer es recibirla. Él o ella no pueden arrebatar la autoridad que tú tienes.
La traición de la autoridad En el último capítulo pudimos notar que la verdadera autoridad corresponde a los principios y leyes que el Creador ha establecido con relación a la humanidad. Si fracasamos en seguir todos estos principios y leyes nos vamos a encontrar a nosotros mismos fuera de la protección de la autoridad de Dios, y por lo tanto, nos exponemos a todo tipo de riesgos. Todo aquello que no ha sido autorizado por el Creador, no puede ser garantizado para que funcione tal y como fue diseñado. En forma muy desafortunada, los primeros seres humanos se salieron completamente de los parámetros de autoridad que el Dios Creador les había dado, e hicieron exactamente todo aquello que Dios les había dicho que no hicieran. ¿Por qué? Porque ellos deseaban el poder más que la autoridad.
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Dios tiene un enemigo, que es Satanás (cuyo nombre significa “el acusador” o “el adversario”), y también es llamado el diablo, quien fue el que tentó a los primeros seres humanos para que hicieran todo esto. El diablo es un ser creado angélicamente, que se rebeló en contra de la autoridad de Dios. El objetivo del diablo es provocar que los seres humanos pierdan todo lo que son realmente, por medio de falsificar la vida tan preciosa y la autoridad que Dios les ha dado. El diablo tentó a los primeros seres humanos por medio de preguntarles, “¿Acaso no te gustaría llegar a ser como Dios?”. Pero Adán y Eva ya eran como Dios; ellos ya habían sido creados a su imagen, y reflejaban su naturaleza. Ellos ya poseían la autoridad delegada de Dios. Pero el diablo quería que ellos se pusieran a dudar inherentemente para que desearan convertirse en algo más, algo que es completamente en contra de la naturaleza. Y esta es la misma forma como él ha estado tentando a los seres humanos desde entonces. Esta es la forma como la tentación inicial transpiró: Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase. Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás. Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto? Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer; pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él,
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ni le tocaréis, para que no muráis. Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal. Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.. (Génesis 2:15–17; 3:1–6, rvr) De nuevo, la autoridad verdadera consiste en la confianza que nos ha sido otorgada. No es nuestra; nosotros no somos los dueños de ella. Cualquier intento de mal usarla poder desecharla se constituye en una traición en contra de esa confianza que nos fue otorgada. Cada vez que le es dada autoridad a una persona, él o ella siempre debe estar consciente de que esto no va a formar parte de su propiedad personal. No es algo que esté a la venta; tampoco es algo con lo que se deba apostar, vender, o usar para obtener ganancias personales. Este es el tipo de comportamiento que examinamos en el capítulo dos junto con todos aquellos que tienen una falsa autoridad—el tipo de gente que “gobierna” a través del uso de la fuerza, el tipo de gente que tiene el “espíritu del jefe”, el dictador, y todos los otros estilos ya discutidos. Al contrario, la autoridad que ha sido confiada siempre tiene que ser usada con el propósito para el cual fue otorgada. Y debido a que es algo que nunca llega a ser parte de la propiedad de aquella persona que lo recibe, siempre puede ser reclamada para que sea devuelta, si acaso esto llega a ser necesario. En lugar de ponerse a cuidar la confianza que habían recibido, Adán y Eva entregaron su autoridad—y
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la autoridad de toda la raza humana—a un gobernador ilegítimo. La acción de ellos fue el equivalente de una traición, debido a que traicionaron la confianza, y rompieron la alianza que tenían con su Dios Creador y Soberano. La fuente de origen fundamental de todas las deficiencias y problemas de la raza humana, por lo tanto, fue la violación original de la máxima autoridad del Dios Creador—fue una traición de la devoción y confianza, por parte de la creación, en contra del Creador. Esta violación es lo que las Escrituras denominan “pecado”, y todo lo que está mal en el mundo hoy en día, es una consecuencia del abandono total de la autoridad.
Tres resultados fundamentales de esta traición ¿Acaso alguna vez tú has llegado a comprar la imitación de una Todo lo que está marca, de algún producto que a ti mal en el mundo te gustaba? Algunas veces, pensahoy en día es mos que estamos ahorrando dinero consecuencia cuando hacemos esto. Pero, con de haber mucha frecuencia, simplemente obtenemos aquello por lo cual estamos abandonado la pagando. El producto de imitación autoridad. se desgasta, se descompone, o pierde su valor mucho más rápidamente, y ni siquiera funciona en forma efectiva, debido a que ha sido creado a partir de materiales mucho más baratos. Entonces, tenemos que comprar otro para reemplazar a este. El hecho de ir en busca de imitaciones puede terminar en algo mucho más costoso, que si simplemente compramos la marca original o la versión del diseñador en primer lugar.
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Adán y Eva fueron sorprendidos por una invitación de la autoridad—una versión mucho más barata de la autoridad—cuando ellos se pusieron a jugar en las manos del vendedor, llamado Satanás, quien les estaba vendiendo la imitación de la autoridad. Los resultados fueron desastrosos, y mucho más caros, que si ellos hubieran permanecido leales y verdaderos a la vida que él Maestro Diseñador les había otorgado: 1. La falsificación de la autoridad. Cuando los seres humanos abandonaron la autoridad de Dios, ellos perdieron la autoridad compartida que poseían en la tierra; ellos le entregaron todo esto al enemigo de Dios, y esta es la razón de por qué satanás es llamado “el dios de este mundo” (2 Corintios 4:4). A través la desobediencia de Adán y Eva, el diablo tomó el poder en la tierra y ahora él puede hacer todo un caos en ella. Desde ese día en adelante, la humanidad ha tenido que vivir bajo una autoridad falsa, la cual fue usurpada, y que está destinada a la ruina total. 2. El impacto de la falsedad. Bajo esta falsa autoridad, la vida es muy dura, complicada, nos llena de desilusión, y se constituye en una carga enorme. “Maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de . tu vida. Espinos y cardos te producirá” (Génesis 3:17–18, rvr). Existe un precio muy alto por vivir a las sombras de la autoridad original que la humanidad tuvo alguna vez. Pero los seres humanos trajeron todas estas cosas sobre ellos mismos, como resultado natural de haber escogido vivir fuera de su verdadera
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autoridad. Una acción en contra de lo natural lleva a una existencia en contra de lo natural. 3. La autodestrucción final. Cualquiera que falsifica la autoridad verdadera, a final de cuentas, se va a destruir a sí mismo, debido a que ya no se encuentra bajo la protección y salvaguarda de esa autoridad. Esta es la razón de por qué Adán y Eva—y todos los seres humanos subsecuentes—tenían que morir. Fue exactamente acerca de esto que Dios les había dado la advertencia: “Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás” (Génesis 2:16–17, rvr). Esto es exactamente lo que la autoridad falsa dijo que no iba a suceder: “Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis” (Génesis 3:4, rvr). Y eso fue exactamente lo que sucedió: “Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás” (Génesis 3:19, rvr).
Consecuencias de haber perdido la autoridad Los tres resultados fundamentales de la traición mencionados anteriormente, llevaron a estas consecuencias adicionales: La humanidad perdió su verdadero hogar Un resultado adicional de haber rendido la autoridad fue el hecho de que la humanidad perdió su verdadero hogar. El autor del libro de Judas nos da una perspectiva con relación a esta consecuencia tan aleccionadora. Él
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escribió acerca de la forma como Dios le dio autoridad a ciertos ángeles, quienes subsecuentemente se deshicieron de la misma. Vamos a ver Judas 1:6, usando varias traducciones, de tal manera que podamos obtener el impacto total de este punto de vista: Y a los ángeles que no mantuvieron su posición de autoridad, sino que abandonaron su propia morada, los tiene perpetuamente encarcelados en oscuridad para el juicio del gran Día. (nvi, se añadió énfasis) Y a los ángeles que no conservaron su señorío original, sino que abandonaron su morada legítima, los ha guardado en prisiones eternas, bajo tinieblas para el juicio del gran día. (lbla, se añadió énfasis) Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día. (rvr, se añadió énfasis) Dios les había dado posiciones de autoridad a estos ángeles—autoridad para realizar diversas tareas—pero los ángeles abandonaron estas tareas, cuando se rebelaron en contra de la máxima autoridad de Dios como Creador. Basados en este versículo en el libro de Judas, podemos llegar a la conclusión de que la autoridad de los ángeles no era algo que ellos solamente poseían o tenían; sino que era algo que formaba parte integral de quienes ellos eran—en su misma naturaleza y existencia. Esto les otorgaba a ellos un lugar dentro del reino de Dios. Cuando desecharon su autoridad, su completa existencia fue cambiada en forma fundamental.
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Debes notar en las escrituras anteriores que las palabras posición, señorío, y dignidad se encuentran ligadas con las palabras propia morada y morada legítima. Cuando los ángeles abandonaron su autoridad, esto fue el equivalente de una persona abandonando su hogar y su familia. Una vez más, esto constituyó una traición de la confianza—y la pérdida fue incalculable. Judas continúa hablando acerca de los “hombres impíos” que actuaron de la misma forma como estos ángeles habían actuado, y quienes “rechazan la autoridad” (Judas 1:4, 8, rvr). Cuando Adán y Eva desobedecieron la Palabra de Dios, la humanidad cayó de su lugar de autoridad, y la vida en la tierra fue alterada en forma fundamental. Por consecuencia, los seres humanos perdieron su lugar en la vida. Nuestro verdadero “hogar” como seres humanos, es ese lugar para el cual fuimos creados, para que pudiéramos vivir en él, y donde pudiéramos aplicar nuestra autoridad personal. Tu esfera de dominio de autoridad no consiste en un edificio de ladrillos, sino que es un lugar de realización, una posición. Es donde tú verdaderamente perteneces, y donde tú encuentras todo aquello que necesitas para poder experimentar la realización total, Nuestro verdadero el refrigerio, y la renovación. Cuando tú llegas a descubrir “hogar” como seres tu autoridad inherente, tú estás humanos, es el lugar encontrando tu verdadero lugar, para el cual fuimos tú te sientes que estás en casa, creados, y donde y te sientes muy cómodo funciopodemos ejercer nando a partir de esta posición. nuestra autoridad ¿Por qué? De nuevo, debido a que personal. la verdadera autoridad es algo natural.
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Los ángeles que se rebelaron y abandonaron su verdadero hogar, escogieron las tinieblas por encima de la luz de Dios. De forma similar, cada vez que tú no sabes quién eres tú, donde estás supuesto a estar, y cuál es tu autoridad, entonces es que tú te encuentras ignorante, o “completamente en las tinieblas”. Tú vas tropezando por toda la vida, en lugar de ir caminando con un propósito a través de ella. Estos ángeles en forma voluntaria, abandonaron sus posiciones de autoridad. Por lo tanto, los demonios son ángeles quienes se encuentran fuera completamente de su posición. Ellos siguen siendo ángeles, pero se encuentran fuera de orden, y están separados de su autoridad anterior. Un humano que se encuentra fuera de orden, sigue siendo humano por supuesto, pero se encuentra fuera de su esfera de dominio, o fuera de su medio ambiente natural de autoridad; su vida no es aquello que está supuesta a ser. En forma similar a los ángeles que abandonaron su autoridad, las gentes que no se encuentran ejercitando su autoridad, ni están usando sus dones inherentes, muy frecuentemente se encuentran “atormentados” mental y emocionalmente. Ellos tienen la tendencia a estar muy irritados, comenzar peleas con otras gentes, y sufrir de ansiedad, debido a que no están haciendo todo aquello que están supuestos a hacer, y esto se convierte en una situación llena de desilusión, muy desestabilizante, y profundamente frustrante para ellos. Ellos no son “demonios”, pero la palabra demoníaca parece definir el tipo de experiencia que están atravesando. Y debido a que se encuentran fuera de orden, ellos también tienen la tendencia a atormentar a todos aquellos que se encuentran a su alrededor.
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La diferencia entre los ángeles que abandonaron su autoridad, y los seres humanos, tal y como lo veremos más adelante, consiste en que los seres humanos no tienen que permanecer para siempre en las tinieblas. Ellos pueden ser restaurados a su autoridad original.
La perpetuación de la autoridad falsa sobre la tierra Sin la autoridad genuina y absoluta, sólo queda la autoridad falsa y transitoria—que es una “autoridad” basada en las circunstancias, en la mera especulación, en la opinión, tradición, en el capricho, y en cosas semejantes a éstas, incluyendo los asuntos religiosos. Esta ha sido una característica del mundo desde que se consumió la traición. Como parte de su plan de restauración, el Dios Creador le dio a la humanidad las Escrituras, a fin de guiarlos, y volverlos nuevamente a Dios mismo y a su autoridad original. De nuevo, las Escrituras son “el Manual del fabricante” para la humanidad. Las Escrituras son completamente confiables, en contraste con la falta de consistencia y capricho de los seres humanos. Esta es la razón de por qué Jesús le enseñó a la gente que tenían que escuchar a los maestros de la ley cuando ellos se refirieran al “Manual”, o a la ley, pero que no debían actuar en la forma como los maestros de la ley lo hacían, debido a que las vidas de estos maestros no reflejaban nada de lo que ellos enseñaban. Jesús dijo, En la cátedra de Moisés se sientan los escribas y los fariseos. Así que, todo lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo; más no hagáis conforme a sus obras, porque dicen, y no hacen. Porque atan cargas pesadas y difíciles de llevar,
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y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo quieren moverlas. (Mateo 23:2–4, rvr) Esos líderes religiosos no se encontraban viviendo de acuerdo a los principios y estándares establecidos por el Dios Creador, incluso siendo que ellos conocían cuales eran estos principios y estándares. En otra ocasión, Jesús les dijo directamente a todos los líderes religiosos, “Porque dejando el mandamiento de Dios, os aferráis a la tradición de los hombres” (Marcos 7:8, lbla). De nuevo, podemos ver que los seres humanos están dando mayor credibilidad a la opinión y a la tradición, que a la verdad que viene de su Dios Creador. Jesús también le advirtió a sus discípulos acerca de otro aspecto de la autoridad falsa—un método con relación a gobernar a la gente, el cual estaba siendo practicado por aquellos que vivían fuera de Israel, y que generalmente se les refería como “los gentiles”, que es una palabra que significa “las naciones”. Mas Jesús, llamándolos, les dijo: Sabéis que los que son tenidos por gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y sus grandes ejercen sobre ellas potestad. Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos. Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos. (Marcos 10:42–45, rvr) El término “se enseñorean de” en este pasaje, tiene la connotación de “control” o “sojuzgar”, y la frase “ejercen sobre ellas potestad” denota “ejercer un privilegio
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total sobre alguien”. A medida que Jesús dirigía a sus discípulos hacia la restauración de sus relaciones con Dios, y hacia la renovación de la autoridad, les mostró a ellos que la naturaleza de la autoridad verdadera no consiste en tener el control total por medio de “enseñorearse” por encima de los demás, sino que consiste en usar los dones que te han sido otorgados, para servir a los demás. Como podemos ver, toda la raza humana por completo fue desviada de su curso, debido a que nuestros primeros padres humanos, Adán y Eva, abandonaron su autoridad. A causa de su rebeldía en contra del Dios Creador, La verdadera la naturaleza de la humanidad se alteró, de tal manera que autoridad no consiste todos los seres humanos que en tener el control nacieron a partir de ellos, tamtotal por medio de bién han sido corruptos, y tienen “enseñorearse” de la tendencia a buscar su propia otros, sino a través de autoridad falsa—en forma colecusar los dones que te tiva e individual.
han sido dados para
El conflicto y abuso que servir a los demás. podemos ver en nuestro mundo hoy en día en una mayor escala, es lo que sucede cuando la autoridad es concebida en forma equivocada, y mal usada. Y nuevamente, esto es lo que ha llevado a mucha gente a que mal entiendan y a que le tengan miedo a la autoridad en general. Las buenas noticias consisten en que el Dios Creador no tiene planes de abandonar a la humanidad en este estado. Él ha provisto un vehículo de reconciliación y restauración.
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La humanidad no está autorizada a cambiarse a sí misma Vamos a considerar la forma como el creador realizó esta reconciliación y restauración, por medio de ver la analogía de un fabricante autorizado, comparado con un fabricante no autorizado, lo cual se asemeja a la comparación entre el original del diseñador comparado contra el concepto de imitación. Muy pocas gentes son más peligrosas que un fabricante no autorizado. Muchos de nosotros hemos tenido la experiencia de haber llevado alguna pieza de equipo, un aparato, o un automóvil, con alguien que no sabía lo que estaba haciendo. Esta persona decía que si podía repararlo, pero tiempo después nos dimos cuenta que él simplemente estaba “experimentando” con nuestra posesión tan valiosa. ¿Por qué? Él no estaba autorizado para tratar nada con relación a ese aparato específico. Él no tenía la autoridad, ni la habilidad que posee alguien que si está conectado con la compañía o fabricante original. La persona no autorizada solo puede experimentar La persona no autorizada tiene que experimentar, debido a que no tiene acceso a los planes originales. Ellos solamente cuentan con un punto de vista que está basado en probar, experimentar con los errores inherentes a esto. Ésta es la razón de por qué, cuando no llevas un aparato al fabricante autorizado, sino a un sustituto cualquiera, ellos desbaratan tu pieza de equipo, muchas veces, pero no pueden volver a armarla correctamente— o en la forma en que se encontraba originalmente. Por lo tanto, cada vez que tú llevas cualquier pieza de equipo para qué lo repare alguien que no está autorizado, tú te das la media vuelta solamente teniendo la esperanza
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de que todo pueda llegar a salir bien. Y todo has tenido alguna mala experiencia en una situación similar a ésta, el nivel de confianza que tú tienes en la persona no autorizada puede ser mucho menor. Donde no existe ningún sentido de autoridad, no puede existir confianza alguna. De hecho, la ausencia de autoridad produce confusión, e incluso, caos. Los efectos de lo no autorizado pueden ser vistos en una variedad de situaciones y medio ambientes en la vida. Por ejemplo, ¿acaso alguna vez has estado en un restaurante que es administrado en la manera más profesional, y tú ni siquiera tienes que pedir que te sirvan nuevamente café o agua, y tu comida llega siempre en el momento adecuado, y además cuenta con una atmósfera que está llena de paz? La experiencia opuesta consiste en estar en un restaurante donde todo el personal de los meseros parecen estar agitados y llenos de confusión, no pudieron tomar tu orden correctamente, otros clientes están discutiendo con los gerentes y dueños, debido a que han estado esperando por mucho tiempo para sentarse en una mesa, y la atmósfera en general es sumamente incómoda. Esta es la diferencia entre un medio ambiente que está gobernado por la autoridad— lo cual es un medio ambiente autorizado—y un medio ambiente donde la autoridad está ausente—que es un medio ambiente no autorizado. El valor de algo que tú posees muy frecuentemente llega a determinar si tú vas a pagar el costo necesario para que sea una persona autorizada por el fabricante quien te lo repare. El fabricante original siempre parece ser más caro, pero también muy frecuentemente es mucho más seguro. ¿Por qué? Porque el fabricante no va estar experimentando. Él ya ha sido autorizado por
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la compañía para que pueda trabajar en el producto, y tiene el acceso al conocimiento y experiencia de la compañía con relación a ese producto. La persona autorizada puede proveer el máximo desempeño, o función, mientras que la persona no autorizada solo puede mal usar y abusar de estas cosas tan valiosas. Después de haber enviado algo para que fuera reparado, y una vez que te lo devolvieron, ¿acaso tú tuviste que decir alguna vez, “Esto funcionaba mejor antes de que yo lo enviará a reparación”? Estaban mal, pero no estaba tan mal como ahora lo está. Aquello que tú enviaste, por lo menos estaba trabajando de alguna manera, hasta que una persona no autorizada comenzó a intervenir en ese aparato.
El Fabricante Autorizado Para poder llegar a reparar la autoridad humana, necesitamos volver al Fabricante Autorizado, y no a un sustituto cualquiera. Debes ponerte a pensar acerca de tu vida bajo la perspectiva de que tú eres un producto del Dios Creador, Incorporado. Él es nuestro Fabricante. Si has llegado a comprar productos que vienen con garantía, tú tal vez has podido notar que los fabricantes son muy particulares acerca de la autorización, y acerca de la necesidad que existe de seguir las instrucciones muy cuidadosamente. Alguien me regaló un aparato de sonido en una ocasión, y esto vino con el Manual del Fabricante. En la parte trasera del manual había una tarjeta que decía “Garantía Limitada”. La gran mayoría de los certificados de garantía cuentan con palabras en forma similar. Por ejemplo, una “garantía limitada” muy frecuentemente cubre solamente 90 días de mano de obra y dos años en las partes o refacciones. Dentro de
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los primeros tres meses que tú posees ese producto, si algo no funciona bien, el fabricante lo va a reparar sin costo alguno—y sin costo de mano de obra. Durante dos años, si algo no funciona bien, el fabricante va a reponer cualquier parte que se haya roto o que esté defectuosa, pero tú vas a tener que pagar por la mano de obra. No suena como un mal trato, pero tú tienes que fijarte con mucho cuidado en todas esas condiciones que vienen en letras muy pequeñas, y que muchas veces incluye la palabra “condiciones”. Todo fabricante tiene condiciones: si tú haces esto, nosotros garantizamos hacer esto otro. Si tú mantienes esto, nosotros realizaremos esto otro.
La condición del Fabricante ¿Cuál es la condición del Dios Creador, Incorporado? El fabricante va a reemplazar todas las partes defectuosas sin costo para el dueño original. Él garantiza reemplazar el producto gratuitamente; esto es lo que las Escrituras denominan como gracia. Existe un período de gracia para la restauración de nuestra relación con el Dios Creador, así como para la restauración de nuestra autoridad original, y actualmente todavía nos encontramos dentro de ese período de gracia. Si nos volvemos a conectar con el Dios Creador durante este periodo de gracia, entonces la garantía va a ser eterna e ilimitada. Las condiciones de un fabricante normalmente dicen que las partes usadas para reposición de producto también se encuentran garantizadas por el resto de la vida del período de garantía original del producto. Por lo tanto, hasta en tanto que este producto exista, también van a existir las partes necesarias para el mismo. Con el Dios Creador, Incorporado, no importa que tan viejo tú seas, no importa qué tantos errores tú hayas cometido, Él todavía tiene una bodega llena de “refacciones” que
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están esperando para poder reemplazar todas tus partes defectuosas, cada vez que tú acudas a Él. Los fabricantes van a proveer la mano de obra que tiene que ver con la reparación o reposición de las partes defectuosas sin cargo alguno. En forma similar, sólo nuestro Fabricante Autorizado puede hacer esta obra de restauración. Tenemos que colocar nuestra fe en Él solamente, para que haga la obra que necesita ser hecha. Vamos a mirar a todas esas condiciones que se encuentran en letras muy pequeñitas, y que normalmente está todo esto incluido en el Manual del Fabricante. La mano de obra gratuita y las refacciones están sujetas a las siguientes condiciones: el dueño debe proveer prueba de la fecha de compra, cada vez que está solicitando un servicio que se encuentra dentro de la garantía limitada. Algunas Tiene que existir veces, llega a suceder en alguna ocasión donde ya sea que tú hayas un punto en tu vida cuando tomes comprado el producto, o que lo hayas recibido como un regalo, de una decisión todas formas, tú eres el dueño. La específica para compañía no tiene la obligación de aceptar la gracia reparar un producto que haya sido que te es ofrecida, robado.
de tal manera que De la misma forma, nosopuedas pertenecer tros no podemos solamente pedir al Dios Creador que el Creador vuelva a establecer la autoridad dentro de nosotros, nuevamente.
cuando nosotros no tenemos intención alguna de ser restaurados con El, y tampoco tenemos intención alguna de seguir su Manual de Fabricante (las Escrituras) para nuestra vida. El Dios Creador va a decir lo siguiente: “Tiene que existir
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una relación entre nosotros”. Tiene que existir un punto en tu vida, donde realizas una decisión específica para aceptar la gracia que te ha sido ofrecida, de tal manera que tú puedas pertenecer una vez más al Dios Creador. La salvación es un asunto personal, de la misma forma como la autoridad inherente es algo personal. Esto significa que todo aquello que nosotros somos (todo lo cual nos ha sido confiado a nosotros) le pertenece a Él, y todo aquello que nosotros vamos a llegar a ser también le pertenece a Dios. Otra condición de un fabricante, la cual yo mencioné anteriormente, es que todas las reparaciones tienen que ser realizadas a través de un fabricante o taller autorizado, y que está conectado de alguna manera a la compañía. El Manual del Fabricante normalmente provee información con relación a todas las direcciones de los agentes que pueden proporcionar servicio autorizado, así como la forma de poder comunicarse con ellos. El Dios Creador, Incorporado, funciona de una manera similar. Si tú deseas restauración, y necesitas reparar tu vida, tú tienes que acudir a su Distribuidor Autorizado. No se permite ningún tipo de experimentación con este producto. El Manual del Fabricante es muy claro con relación a explicar quién es el Distribuidor Autorizado, debido a que solamente existe uno solo: Jesús el Cristo, el Hijo del Dueño de la compañía. Él es el único camino, la única verdad, la única vida. Nadie puede ser restaurado, si no es por Él. (Ver Juan 14:6). Si alguien trata de ser restaurado por algún otro medio, él es el equivalente de un ladrón que trepa a través de una ventana, o que se mete en las casas para poder obtener las cosas que se encuentran dentro. (Ver Juan 10:10). Tú puedes intentar
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acercarte al fabricante por cualquier otro medio, pero tú no vas a contar con ningún tipo de verificación, ni con ningún tipo de certificado de autorización. Jesús dijo, “Mi Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre” (Juan 16:23). Muchas gentes no están recibiendo lo que el Dios Creador desea para ellos, debido a que se están acercando por diferentes medios que no han sido autorizados. Si tú vives de acuerdo a las condiciones de la garantía, tú puedes esperar recibir todos los beneficios de las garantías, o de las promesas. Continuamente la gente está tratando de cambiar la garantía del Dios Creador. Algunas gentes llegan a declarar que “todos los caminos llevan al mismo lugar” cuando tiene que ver con el hecho de conectarse con Dios. Pero eso nunca es el caso con ningún otro destino. Por ejemplo, si tú quieres ir al aeropuerto, ¿tomarías tú cualquier ruta dentro de una distancia a la redonda de cien millas a fin de poder llegar ahí? Tiene que existir una ruta específica que te va a dirigir adonde tú quieres ir. Esta ruta es a través del Distribuidor Autorizado, que es Cristo Jesús. Normalmente las condiciones de un fabricante establecen todavía más, “ninguna persona, agente, distribuidor, representante, fábrica o compañía está autorizada a cambiar, modificar, o a enmendar los términos de esta garantía”. En forma similar, una vez que Dios ha hablado, la garantía ha sido sellada. Nosotros no podemos añadirle, no podemos sustraer nada de ella, ni podemos alterar lo que Dios ya ha establecido, porque cualquiera de estas acciones carecería de autorización y de autenticidad. Las formas de vivir y de pensar que no han sido autorizadas, siempre nos van a impedir realizar o llegar a nuestra autoridad original.
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Las Escrituras son muy claras en el sentido de que necesitamos una nueva naturaleza a fin de que podamos ser restaurados al Dios Creador, y a nuestra autoridad verdadera. Jesús dijo, Yo te aseguro que quien no nazca de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios— respondió Jesús—. Lo que nace del cuerpo es cuerpo; lo que nace del Espíritu es espíritu. No te sorprendas de que te haya dicho: “Tienen que nacer de nuevo”. (Juan 3:5–7) Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él. (Juan 3:16–17) La frase “nacer de nuevo” es un término que se ha usado por aquí y por allá en forma casual, de tal manera que su verdadero significado se ha perdido. Pero tuvo su origen con Cristo Jesús, y significa que tú has recibido una nueva naturaleza, a través de Él como el Distribuidor Autorizado, lo cual te permite tener acceso a Dios Creador y a todo el plan por completo que Dios tiene para tu vida. Siempre normalmente existe una declaración final en la garantía de un fabricante que establece lo siguiente: “Si usted viola cualquiera de estas condiciones específicas, esta garantía quedará completamente nula y cancelada”. De nuevo, ¿puede haber algo más claro que esto? Todos nosotros necesitamos operar bajo los principios y leyes del Creador, a fin de que podamos obtener todos los beneficios que Él nos ofrece.
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Tú tal vez has estado tratando de recibir la ayuda de Dios para tu La autoridad del vida, sin darte cuenta que tú no te Dios Creador encuentras cubierto bajo la garante provee con tía. Tú sabes que no has estado la autoridad de viviendo correctamente, pero tú poder ser su hijo, y le has estado pidiendo Dios que tener una relación te ayude a arreglar tu situación. con Él, donde no La garantía se activa, una vez que solamente puedas nosotros le decimos a Dios que queremos vivir de acuerdo a sus prinllamarlo “Dios cipios, en lugar de estar viviendo Creador” sino en la forma como lo hemos hecho también “Padre”. hasta ahora. El Dios Creador, Incorporado, siempre se encuentra disponible, y tú puedes venir a quedar cubierto bajo su garantía en cualquier tiempo y en cualquier momento, por medio de recibir el regalo y don que ha sido ofrecido a través del Distribuidor Autorizado.
El don o regalo del Distribuidor Autorizado Jesús es el distribuidor autorizado, y Él dice que puede reparar nuestra autoridad defectuosa, por medio de darnos una vida nueva, de acuerdo a la naturaleza del mismo Dios Creador. De esta forma, Él viene a restaurar todo aquello que Adán y Eva perdieron por medio de haber abandonado la autoridad, y haber desobedecido los principios del Dios Creador. Jesús dijo, “Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida” (Juan 8:12). La forma como ocurrió esta restauración fue de acuerdo a los principios de autoridad: La Autoridad Máxima es responsable por este producto, y solamente Él puede salvarlo.
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¿Porque es que Él quiere salvarte? “Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios” (Juan 1:12). La palabra griega que fue traducida para la palabra “derecho” en este versículo, es la misma palabra que algunas veces es traducida como “autoridad” o “poder”. En otras palabras, la autoridad que el Dios Creador te provee a ti, es la autoridad para que puedas llegar a ser su hijo, y que puedas tener una relación con Él donde no sólo puedas llamarlo “Dios Creador”, sino también “Padre”. ¿Porque es Jesús el distribuidor autorizado que puede hacer que todo esto suceda? ¿Porque es que todos aquellos que reciben a Jesús obtienen este derecho, autoridad o poder para llegar a ser hechos hijos de Dios? Jesús es el Distribuidor Autorizado debido a que Él también es el Fabricante. En Juan 10:30, Jesús dijo lo siguiente: “Yo y el Padre uno somos”. El discípulo de Jesús llamado Juan también registró lo siguiente: En el principio ya existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. Él estaba con Dios en el principio. Por medio de él todas las cosas fueron creadas; sin él, nada de lo creado llegó a existir. En él estaba la vida, y la vida era la luz de la humanidad….Y el Verbo se hizo hombre y habitó entre nosotros. Y hemos contemplado su gloria, la gloria que corresponde al Hijo unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.. (Juan 1:1–4, 14) Jesús es el Fabricante que vino a la tierra para rescatar sus productos que se habían descompuesto. El único camino y forma en que ellos podían ser perdonados y restaurados de su rebelión y de su traición, era por medio de alguien que pagara el precio en lugar
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de ellos. De igual manera como el nieto del fundador de la compañía Toyota que llegó a representar tanto a la compañía como el producto delante del Congreso de los Estados Unidos, Cristo Jesús, como el Hijo de Dios—el Verbo hecho carne—fue el único que podía representar tanto al Dios Creador y a sus seres humanos creados, a fin de llegar a reparar el abismo que existía entre las dos partes, y traer una completa restauración y reconciliación. La obra redentora del Dios Creador requería que enviará a su propio Hijo a la tierra, para poder asegurar la reputación de su imagen en toda la humanidad.
Restaurado en el verdadero lugar que te corresponde Cuando Cristo Jesús murió la cruz, Él pago el precio de toda nuestra naturaleza humana caída, la cual nosotros habíamos heredado de nuestros primeros padres humanos. El también pagó el precio por todas aquellas ocasiones cuando nosotros hemos actuado en contra de la naturaleza y principios de nuestro Dios Creador. La traición se castiga con la muerte, y Cristo Jesús tomó ese castigo en lugar de nosotros, haciendo posible nuestra restauración. Pero su acción provee solo la garantía. Tú tienes que aceptar el don o regalo de convertirte en un “producto” completamente nuevo, a fin de poder quedar protegido bajo esta garantía. Tú tienes que responder a ella, por medio de realizar una decisión personal, donde vengas a quedar bajo la garantía que te ofrece el Fabricante, a fin de que puedas recibir el perdón y la restauración que necesitas. El libro de Hebreos declara lo siguiente: Aunque era Hijo, mediante el sufrimiento aprendió a obedecer; y consumada su perfección,
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llegó a ser autor de salvación eterna para todos los que le obedecen. (Hebreos 5:8–9) La palabra “perfección” en este sentido indica una completa madurez, y una completa sumisión. La palabra “autor” de se está refiriendo a la causa original. Nosotros obedecemos a Dios debido a que Él es la causa original de nuestra salvación eterna, y es solamente Él también quien nos puede capacitar para que vivamos de acuerdo a nuestra autoridad original. Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios. (Hebreos 12:2, rvr) La palabra traducida como “autor” aquí también tiene significado de “fundador” o “líder”. Cristo Jesús fue el único que pudo realizar una obediencia total y completa a los principios y leyes del Dios Creador. Por lo tanto, Él nos guía, y es el modelo perfecto para nuestra completa obediencia hacia las mismas, de tal manera que podamos vivir de acuerdo a nuestra autoridad.1 Alguien tal vez podría preguntar, “¿Por qué es que Dios tenía que enviar a su propio Hijo para que se convirtiera en un sacrificio por nosotros? ¿Por qué es que Dios tenía que experimentar el castigo en lugar de nosotros? ¿Por qué es que Dios tendría que levantar a Jesús de entre los muertos, y establecerlo como Rey de reyes?”. El hizo todo esto para redimirnos, debido a que la autoridad que llevamos dentro de nosotros mismos es algo tan asombroso, que Dios consideró que era digno de su muerte. ¿Acaso tú puedes llegar a entender verdaderamente que esta tierra te necesita? Necesita tu propósito y tu don. Necesita tu autoridad.
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Atraídos hacia su misericordia Existen gentes que desean ser restaurados a nuestro Dios Creador, pero al mismo tiempo le tienen miedo. Ellos creen que “temer” al Señor, significa tener que tenerle miedo a Dios. Pero el temor con respecto a Dios significa respeto de Dios, tener conciencia de todo el poder que Dios tiene a favor de ti. Él puede hacer grandes cosas a favor tuyo a través de su poder. Si tú has llegado a desarrollar un miedo de la autoridad con relación a Dios a través de los años, este miedo muy probablemente te ha impedido recibir la restauración que Dios te ofrece. En mi propia vida, me tomó mucho tiempo poder llegar a entender y aceptar la verdad de que Dios no está enojado con los pecadores. Pablo de Tarso, el gran teólogo del La bondad primer siglo, escribió lo siguiente: “Pero de Dios nos Dios demuestra su amor por nosotros debería acercar en esto: en que cuando todavía éramos a Él. Él no es un pecadores, Cristo murió por nosotros” tirano, ni un (Romanos 5:8). Dios no se encuentra dictador—¡Él enojado contigo por todo aquello que tú has hecho mal. Él se encuentra lases un Salvador! timado por ello. ¿Por qué? Debido a que Dios conoce que todo esto te ha impedido hacer todas las cosas que son correctas. Dios sabe que si Él no te ayuda, tú vas a seguir lastimándote profundamente. Por lo tanto, la bondad de Dios debería acercarnos a Él. Él no es un tirano, ni un dictador—¡Él es un Salvador! Él no es un monstruo, ni un destructor—Él es un redentor y un restaurador. Tú debes recordar que “Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él” (Juan 3:17). El hecho de
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poder llegar a entender la verdad con relación al amor de Dios y su provisión para poder restaurarnos, va a eliminar todo miedo que tengamos de Él y de su autoridad.
La autoridad personal de Jesús Jesús funcionó a través de su autoridad personal, y El es nuestro modelo de autoridad verdadera, a medida que somos restaurados a nuestro Dios Creador, y comenzamos a vivir en nuestra autoridad delegada. Vamos a mirar algunas de las formas en que Jesús demostró estas cosas. 1. Jesús entendió su autoridad. El dijo, “Porque así como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha concedido al Hijo el tener vida en sí mismo, y le ha dado autoridad para juzgar, puesto que es el Hijo del hombre” (Juan 5:26–27). La mayor parte de las confrontaciones que Jesús experimentó con los líderes religiosos de sus tiempos, tuvieron que ver con la autoridad. Todos estos líderes se encontraban muy enojados con Él, y de hecho, le estaban preguntando, “¿Quién te ha autorizado a ti para que hagas y digas todas estas cosas?” La autoridad parecía ser la mayor preocupación que tenían con relación a Jesús, pero Él conocía su propia autorización. Jesús estaba en sólo sus años treintas cuando comenzó su ministerio en esta tierra, y la mayoría de los fariseos eran mucho más avanzados en edad que Él, pero ninguno de ellos contaba con una verdadera autoridad. Jesús fue señalado debido a que Él hablaba con autoridad, mientras que los escribas y fariseos hablaban como
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gentes que no tenían autoridad alguna. (Ver, por ejemplo, Mateo 7:28–29). Ellos solamente hablaban acerca de las Escrituras (así como acerca de muchas otras enseñanzas), pero Jesús era el Verbo mismo. El hablaba como la Fuente de Origen, y no solo como alguien que simplemente se refiere a la Fuente de Origen. 2. La confianza de Jesús era resultado de su autoridad. [Jesús dijo,] “Por eso me ama el Padre: porque entrego mi vida para volver a recibirla. Nadie me la arrebata, sino que yo la entrego por mi propia voluntad. Tengo autoridad para entregarla, y tengo también autoridad para volver a recibirla. Éste es el mandamiento que recibí de mi Padre. De nuevo las palabras de Jesús fueron motivo de disensión entre los judíos. Muchos de ellos decían: “Está endemoniado y loco de remate. ¿Para qué hacerle caso?” Pero otros opinaban: “Estas palabras no son de un endemoniado. ¿Puede acaso un demonio abrirles los ojos a los ciegos?” (Juan 10:17–21) Cuando tú entiendes verdaderamente tu autoridad, esto te va a dar la confianza necesaria para seguirla. 3. Jesús decía que el hecho de tener fe equivalía a poder entender y operar bajo autoridad, tal y como podemos ver en el relato del centurión que le pidió a Jesús que sanara a su siervo: [El centurión dijo,] “Pero con una sola palabra que digas, quedará sano mi siervo. Yo mismo obedezco órdenes superiores y, además, tengo soldados bajo mi autoridad. Le digo a uno: “Ve”, y va, y al otro: “Ven”, y viene. Le digo a mi siervo:
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“Haz esto”, y lo hace. Al oírlo, Jesús se asombró de él y, volviéndose a la multitud que lo seguía, comentó:—Les digo que ni siquiera en Israel he encontrado una fe tan grande”. (Lucas 7:7–10) 4. Jesús contaba con la autorización para dar vida. [Jesús orando al Padre, dijo lo siguiente:] “Ya que le has conferido [a tu Hijo] autoridad sobre todo mortal para que él les conceda vida eterna a todos los que le has dado. Y ésta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien tú has enviado”. (Juan 17:2–4) [Jesús le dijo a las gentes,] “Trabajen, pero no por la comida que es perecedera, sino por la que permanece para vida eterna, la cual les dará el Hijo del hombre. Sobre éste ha puesto Dios el Padre su sello de aprobación….Todos los que el Padre me da vendrán a mí; y al que a mí viene, no lo rechazo. Porque he bajado del cielo no para hacer mi voluntad sino la del que me envió. Y ésta es la voluntad del que me envió: que yo no pierda nada de lo que él me ha dado, sino que lo resucite en el día final. Porque la voluntad de mi Padre es que todo el que reconozca al Hijo y crea en él, tenga vida eterna, y yo lo resucitaré en el día final”. (Juan 6:27, 37–40) 5. Jesús estaba autorizado para perdonar pecados. Pues para que sepan que el Hijo del hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados…. (Marcos 2:10)
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Entonces le dijo Jesús a ella:—Tus pecados quedan perdonados. Los otros invitados comenzaron a decir entre sí: “¿Quién es éste, que hasta perdona pecados?”—Tu fe te ha salvado—le dijo Jesús a la mujer—; vete en paz. (Lucas 7:48–50) 6. Jesús está autorizado para hacernos hijos de Dios. Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios. (Juan 1:12) ¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! (1 Juan 3:1) 7. Jesús está autorizado para restaurar la autoridad. Porque así como el Padre resucita a los muertos y les da vida, así también el Hijo da vida a quienes a él le place. Además, el Padre no juzga a nadie, sino que todo juicio lo ha delegado en el Hijo, para que todos honren al Hijo como lo honran a él. El que se niega a honrar al Hijo no honra al Padre que lo envió. (Juan 5:21–23) Todo cuanto tiene el Padre es mío. Por eso les dije que el Espíritu tomará de lo mío y se lo dará a conocer a ustedes. (Juan 16:15) Y le entregaron el libro del profeta Isaías. Al desenrollarlo, encontró el lugar donde está escrito: “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a
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poner en libertad a los oprimidos, a pregonar el año del favor del Señor”. Luego enrolló el libro, se lo devolvió al ayudante y se sentó. Todos los que estaban en la sinagoga lo miraban detenidamente, y él comenzó a hablarles: “Hoy se cumple esta Escritura en presencia de ustedes”. Todos dieron su aprobación, impresionados por las hermosas palabras que salían de su boca. (Lucas 4:17–22) 8. Jesús nos da a nosotros la autoridad. Una de las últimas palabras que Jesús usó en la tierra cuando estaba hablando con sus discípulos fue la palabra “autoridad”: Jesús se acercó entonces a ellos y les dijo:—Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles que obedezcan todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo. (Mateo 28:18–20) No les toca a ustedes conocer la hora ni el momento determinados por la autoridad misma del Padre—les contestó Jesús—. Pero cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra. (Hechos 1:7–8) Muy frecuentemente, el más grande obstáculo para que la gente pueda vivir de acuerdo a su autoridad es una falta de entendimiento con relación al hecho de que
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ellos poseen la autorización para poder ejecutar o llevar a cabo su autoridad. Esto impide que puedan creer y llevar a cabo aquello para lo cual fueron creados, y por lo tanto, ellos se conforman con mucho menos de lo que pueden y de lo que deberían hacer. Ellos permiten que las fuerzas e influencias exteriores ejerzan poder sobre ellos, en lugar de que sea su autoridad interna quien determine la forma como deben vivir su vida. Ésta es la razón de por qué ellos no contribuyen con sus dones a su generación. Como resultado de esto, tanto ellos como toda su generación salen perdiendo. En el capítulo tres, yo describí la forma como un autor tiene los derechos de autor con relación a su obra, y la forma como él tiene el derecho de compartir esos mismos derechos de autor con alguien más, así como el poder para heredarlos a quien el autor desee hacerlo. Cuando Jesús murió a favor de nosotros, dándonos la autoridad y el poder para que nos convirtamos en hijos de Dios, nosotros recibimos la herencia completa de derechos que Jesús había obtenido. “Por eso Cristo es mediador de un nuevo pacto, para que los llamados reciban la herencia eterna prometida, ahora que él ha muerto para liberarlos de los pecados cometidos bajo el primer pacto” (Hebreos 9:15). La autoridad es el principio de los derechos. La autoridad es el permiso del Autor para que tú puedas llegar a ser todo aquello para lo cual El te diseñó. Tú no sólo tienes el permiso, sino cuentas con la comisión y el poder para poder llegar a realizar tu propósito. Contando con este conocimiento y el entendimiento de la autoridad, tú puedes experimentar el plan de Dios para tu vida, y no solo conformarte con soñar acerca de ello.
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El privilegio de la autoridad Los ángeles a quienes se hizo referencia en el libro de Judas, tal y como discutimos anteriormente, no fueron restaurados al lugar que ellos habían abandonado, pero Dios ha hecho una provisión para los seres humanos, para que puedan ser restaurados a su provisión. ¿Qué es lo que tú vas a hacer con la autoridad que te ha sido provista? Tú tienes la elección de aceptarla o de desecharla. Yo conozco muchos individuos, y probablemente tú también, que poseen tremendos dones, talentos, y sueños, y que tenían un gran futuro muy promisorio para su vida, pero acabaron por destruir su futuro, a través de violar de alguna manera la autoridad genuina. Las prisiones se encuentran llenas con gentes que potencialmente podían haber sido grandes líderes, y que ahora se encuentran confinados de por vida, debido a que violaron la autoridad de la sociedad, la cual ha establecido leyes para el orden y la paz. Los centros de rehabilitación para drogadictos se encuentran llenos con gente muy talentosa, que jamás llegó a realizar sus potenciales, debido a que se encontraban violando la autoridad de sus cuerpos, por medio de abusarlos a través de sustancias ilegales muy dañinas. En el presente, existen muchas gentes que tienen grandes ideas, sueños, y planes para sus vidas, pero se encuentran en un curso de colisión con la destrucción, debido a que están—o han estado contemplando— la posibilidad de violar el privilegio de autoridad que el Dios Creador les ha dado, por medio de ir en busca de su propia autoridad sólo para fines meramente egoístas. ¿Por qué es que las gentes terminan por arruinar sus vidas de esta manera? Ellos han abandonado (o tal
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Todos tenemos, no sólo el privilegio de recibir autoridad de parte de Dios, sino también la responsabilidad de permanecer en ella, después de haberla recibido.
vez nunca llegaron a conocer) el lugar de autoridad donde ellos pertenecían verdaderamente— de la misma manera como sus padres humanos originales lo hicieron.
El comentario que pudimos ver en el libro de Judas nos dice que el hecho de vivir en la autoridad que Dios nos ha dado, es como estar en casa o llegar a casa, como si nos estuviéramos acomodando en nuestra propia habitación. No sólo tenemos el privilegio de haber recibido autoridad de parte de Dios, sino también tenemos la responsabilidad de permanecer en esta autoridad, después de que la hemos recibido. Esto honra a nuestro Dios Creador, y preserva el orden y la paz en nuestra vida, y en las vidas de todas las gentes que nos rodean. Yo quiero exhortarte a que hagas esta oración al Dios Creador en voz alta: “Señor, muéstrame mi autoridad. Yo me acercó a ti en la base del sacrificio que hizo el Distribuidor Autorizado, Cristo Jesús. Yo recibo este don y regalo de restauración, y me coloco bajo la garantía que Jesucristo me está ofreciendo, para que yo pueda recibir el perdón, la restauración, y la vida eterna. Yo no quiero desperdiciar ni un solo día más fuera de mi posición. Yo quiero estar en orden. Yo quiero conocer la autoridad que tú tienes para mí, de tal manera que yo pueda colocarme en el lugar correcto en esta vida, para que yo pueda realizarme al máximo, y apoyar a todos aquellos que están alrededor de mí. También, para que yo pueda llegar a
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realizar todo aquello que te da placer, y llegar a convertirme en aquello para lo cual tú me creaste. Ayúdame, Señor, para que yo no llegué a abandonar mi posición. En el nombre del Distribuidor Autorizado, amén”.
Capítulo cinco
Un principio vital de la autoridad Todo se somete a algo más, a fin de poder . funcionar, crecer, y prosperar
E
n este capítulo, vamos explorar un principio fundamental de la autoridad, el cual va a marcar una diferencia en tu vida. Es un principio que referimos en el capítulo uno: Todo y todos dependen de algo o de alguien, y deben someterse algo o alguien más, a fin de poder funcionar, crecer, prosperar, y tener éxito. Este principio fue establecido bajo la esencia misma de este mundo cuando fue creado. Nada de lo que el Dios Creador ha creado, puede existir si no tiene sumisión a algún tipo de autoridad, debido a que la autoridad, por naturaleza, involucra dependencia e interdependencia. La primera manifestación de la autoridad consiste en que todo depende del Dios Creador para su existencia, debido a que todo tuvo su origen en Él. Colosenses 1:16–17 declara lo siguiente: Porque por medio de él fueron creadas todas las cosas en el cielo y en la tierra, visibles e invisibles, sean tronos, poderes, principados o autoridades: todo ha sido creado por medio de él y 123
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para él. Él es anterior a todas las cosas, que por medio de él forman un todo coherente. Todas las cosas existen y son sostenidas por medio del poder del Dios Creador. No sólo fue el universo—lo visible y lo invisible—producido por Él, sino que también depende en Dios para su existencia continua. Toda la creación tiene que referirse al Dios Creador para su vida y éxito. Todo en la creación fue diseñada para funcionar a través del principio de la autoridad. Una semilla debe “someterse” a ser plantada en la tierra para que pueda llegar a crecer; en este sentido, la tierra es la autoridad de la semilla. Un pez debe “someterse” a vivir en el agua, a fin de que pueda sobrevivir, y por lo tanto, la autoridad de los peces es el agua; si ellos no se sometieran a ella, ciertamente morirían. Los planetas de Nunca vamos a nuestro sistema solar se someten a crecer por encima la fuerza de la gravedad del sol como de la necesidad de su autoridad; si ellos no lo hicieran, tener autoridad. el sistema solar ya no podría estar intacto, y los planetas entrarían en Esta es una una espiral fuera de control en el verdad que se espacio.
aplica a toda Todos y todas las cosas deben la creación y a someterse a algo o alguien más, a toda experiencia fin de que puedan funcionar y tener éxito. Es imposible poder crecer más humana.
allá de nuestra autoridad. Podemos llegar a transferir nuestra responsabilidad a diferentes tipos de autoridad, tal y como cuando un niño crece y se sale de la autoridad de sus padres, comenzando su propia familia, y comienza a interactuar con otras personas en el mundo, pero nunca vamos a
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poder crecer hasta el punto de no llegar a necesitar la autoridad. Éste es un concepto verdadero para toda la creación, y que se aplica en todo tipo de experiencias humanas. Cualquiera que rehúsa ser gobernado por la autoridad genuina es ilegítimo, y se encuentra funcionando en forma descompuesta en este mundo. Por ejemplo, un criminal es una persona que rehúsa someterse a la sociedad, y ha violado la autoridad de las vidas o propiedades de otras personas. Él ha cruzado esas barreras o esferas de autoridad. Si es atrapado y castigado, la cárcel se convierte en una autoridad forzada sobre él. Él ha sido forzado a someterse a la sociedad, a través de una severa restricción de sus actividades. Si un niño rehúsa reconocer la autoridad de sus padres, que le están tratando de enseñar maneras positivas y constructivas en que puede vivir esta vida, entonces él va a sufrir las consecuencias de algún tipo de autodestrucción en su mente, cuerpo, o alma. Tú te encuentras viviendo en una invalidez o ilegitimidad muy peligrosa, si es que tú no te estás sometiendo a ninguna autoridad, de tal manera que otras gentes no pueden confiar en ti, y tampoco pueden someterse en forma segura a ti cuando lo necesitan. Debemos someternos solamente a aquellos que a su vez se encuentran bajo sumisión.
El ejemplo más grande de este principio fundamental de la autoridad Yo creo que el ejemplo más grande de alguien que pudo entender y vivir este principio, el poder, y el propósito de la autoridad, es Cristo Jesús, y no puede ganar mucho entendimiento de la autoridad a través de mirar y estudiar la forma como Jesús vivió su vida.
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La clave para el éxito, la efectividad, eficiencia, poder, y perfección de la vida de Jesús en la tierra, fue el completo entendimiento y adherencia que Él tenía hacia la autoridad. Podemos ver la sumisión de Jesús hacia la autoridad a través de toda su vida en esta tierra. Vamos a ver algunos ejemplos que son claves para demostrar esto. Jesús se sometió a sus propias leyes establecidas En primer lugar, la voluntad y disposición que Jesús tuvo para venir a esta tierra como un ser humano, aunque Él mismo era Dios (ver Juan 1:1–4:14), ¡fue un acto extraordinario de sumisión! En los escritos del teólogo Pablo de Tarso, podemos leer lo siguiente: “Pero cuando se cumplió el plazo, Dios envió a su Hijo, nacido de una mujer, nacido bajo la ley, para rescatar a los que estaban bajo la ley, a fin de que fuéramos adoptados como hijos” (Gálatas 4:4–5). El primer paso para poder corregir el problema que tenía la humanidad con relación a la autoridad, fue su propia sumisión a la autoridad. ¿Porque es que Él se sometió a esto? Debido a las mismas leyes que tenían que ver con la autoridad, que Él mismo había establecido para la creación física y para la vida espiritual de su pueblo: ••Jesús en forma voluntaria vino a este mundo en forma física, como un bebé, y a través del vientre de una mujer, tal y como el resto de los seres humanos lo hacen. ••El nació “bajo la ley”, a pesar de que fue Él mismo quien instituyó la ley para los israelitas, y se sometió a todos sus requisitos y reglas. Debido a que Dios había establecido todo tipo de autoridad, Jesús sabía que era indispensable el hecho de someterse a la
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autoridad, incluyendo en esto la protección que la autoridad provee para el espíritu, alma, y cuerpo de un individuo. Jesús se sometió al bautismo para “cumplir con lo que es justa” En segundo lugar, quiero enfocarme en forma muy particular en los relatos que tienen que ver con el bautismo de Jesús, en relación a la sumisión que Él mostró hacia la autoridad, debido a que esta sumisión fue la inauguración de su ministerio. Si deseamos llegar a ser todo aquello para lo cual fuimos creados, necesitamos llegar a entender lo que Jesús habla acerca de la autoridad, y la forma como él respondió ante la autoridad, así como los resultados tan asombrosos que se derivaron de esto. Un día Jesús fue de Galilea al Jordán para que Juan lo bautizara. Pero Juan trató de disuadirlo. —Yo soy el que necesita ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí?—objetó.—Dejémoslo así por ahora, pues nos conviene cumplir con lo que es justo—le contestó Jesús. Entonces Juan consintió. Tan pronto como Jesús fue bautizado, subió del agua. En ese momento se abrió el cielo, y él vio al Espíritu de Dios bajar como una paloma y posarse sobre él. Y una voz del cielo decía: “Éste es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él”. Luego el Espíritu llevó a Jesús al desierto para que el diablo lo sometiera a tentación. (Mateo 3:13–4:1) Este incidente está repleto de significado. ¿Acaso tú sabes que tan lejos está el lugar donde Jesús fue bautizado en el río Jordán con relación a la región de Galilea? Se encuentra a una distancia
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aproximada de setenta u ochenta millas. Esto significaría más de una semana de camino a pie a través de un terreno lleno de piedras y colinas. Jesús no vino solamente para una visita casual. Jesús vino buscando a Juan. Hemos podido ver que las experiencias que muchas gentes han tenido con la autoridad han sido negativas, y que por lo tanto, esto les ha hecho preocuparse y desgastarse con relación a la autoridad. Pero el hecho de someterse a la autoridad verdadera es algo deseable y esencial para nuestras vidas, y una de las formas en que podemos saber que esto fue lo que Jesús iba buscando consiste en reconocer que esto es precisamente lo que nosotros muchas veces tratamos de evitar. Él iba buscando toda aquello de lo cual nosotros queremos huir. Él iba buscando todo aquello de lo cual nosotros queremos tener sospechas. El buscó confiadamente a Juan el Bautista, para que éste le permitiera a Jesús poder someterse a su autoridad. “Mas Juan se le oponía, diciendo: Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí? Pero Jesús le respondió: Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia. Entonces le dejó” (Mateo 3:14–15, rvr, se añadió énfasis). La expresión “toda justicia” significa “toda posición correcta o toda acción correcta”. Jesús estaba diciendo que esto era necesario para que Él pudiera estar en una relación correcta con la Autoridad Máxima, Dios el Padre. La autoridad necesita de autoridad para poder impartir poder Juan ya había distinguido previamente su autoridad de la autoridad de Jesús. Antes que Jesús llegaba
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para ser bautizado por él, Juan le había dicho toda la gente, “Pero el que viene después de mí es más poderoso que yo, y ni siquiera merezco llevarle las sandalias” (Mateo 3:11, se añadió énfasis). Juan conocía muy bien la autoridad tan poderosa de Cristo Jesús. Juan también había dicho esto, “Yo los bautizo a ustedes con agua para que se arrepientan. Él los bautizará con el Espíritu Santo y con fuego” (versículo 11). ¿Qué tipo de bautismo era el que Jesús vino buscando? El bautismo con agua. Y era Juan quien estaba autorizado a bautizar con agua. Jesús no podía bautizarse a si mismo, debido a que Él no era el bautizador de agua. Siendo tan grande como Jesús es, Él tenía que someterse a la autoridad que ya había sido establecida por Dios el Padre, para este tiempo y momento de su vida terrenal. La profecía del antiguo testamento que se encuentra en Malaquías 3:1 revela el tipo de autoridad a que Jesús se estaba sometiendo cuando Él fue bautizado por Juan: “Yo estoy por enviar a mi mensajero para que prepare el camino delante de mí. De pronto vendrá a su templo el Señor a quien ustedes buscan; vendrá el mensajero del pacto, en quien ustedes se complacen”. Pero ¿quién podrá soportar el día de su venida? ¿Quién podrá mantenerse en pie cuando él aparezca? Porque será como fuego de fundidor o lejía de lavandero. (Malaquías 3:1–2) Existen dos “mensajeros” que se encuentran mencionados en este pasaje. El primer mensajero iba a preparar el camino para el Señor, y esto se refiere a Juan el Bautista. El segundo mensajero es el mensajero del pacto, y esto se refiere a Jesús.
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La autoridad de Juan se encontraba en la tarea que iba a realizar—iba a preparar el camino para el Señor. Juan declaró lo siguiente: “Para que él [el gran Mensajero] se revelara al El secreto de la pueblo de Israel, vine bautizando con vida consiste agua” (Juan 1:31).
en someterse constantemente a Dios y a su autoridad, aunque no siempre puedas entender lo que Él está haciendo.
El relato que se encuentra en el libro de Mateo, dice que Jesús le contestó a Juan en términos de autoridad— “Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia”—“Entonces Juan consintió” (Mateo 3:15).
El secreto para esta vida es someterse constantemente a Dios y a su autoridad, aunque muchas veces tú no llegues a entender lo que Dios está haciendo. De hecho, Juan le dijo a Jesús, “Yo no puedo bautizarte. Tú eres quien deberías bautizarme a mí”. El no llegaba a entender completamente su autoridad al principio, lo cual es el caso con la mayoría de la gente hoy en día. Tu autoridad se puede encontrar en todo aquello que Dios ha preparado para ti, y que es lo que tú necesitas realizar. Si hay alguien que necesita los dones que Dios te ha dado, entonces no van a existir sustitutos posibles; ellos tienen que acercarse a ti. A algunas personas no les va a gustar este hecho, pero Dios los ha enviado a ti. Algunas veces nos vamos a llegar a sentir incómodos con nuestra propia autoridad, de la misma forma como Juan se sintió, pero necesitamos obedecer a Dios, a fin de poder llegar a realizar los propósitos que solamente Dios conoce completamente. Debido a que Juan se encontraba operando bajo la autoridad de Dios, él pudo entender cuando Jesús apeló
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a los términos de autoridad, y entonces, él estuvo de acuerdo en bautizarlo. El resultado de la sumisión de Jesús ante la autoridad establecida es sumamente poderoso: Tan pronto como Jesús fue bautizado, subió del agua. En ese momento se abrió el cielo, y él vio al Espíritu de Dios bajar como una paloma y posarse sobre él. Y una voz del cielo decía: “Éste es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él”. (Mateo 3:16–17) Una voz se dejó escuchar desde el cielo. ¿Cuándo? “Tan pronto como” Jesús se sometió a la autoridad. La frase “Tan pronto como” significa de inmediato. Nosotros deberíamos considerar si la habilidad que tenemos para escuchar a Dios con relación a sus propósitos para nuestra vida se relaciona directamente al tipo de respuesta que presentamos a su autoridad. Si tú no estás recibiendo ningún tipo de guía de parte de Dios, tal vez esto se debe a que tú has estado violando algún tipo de autoridad que Dios ha establecido en tu vida. ¿Qué es lo que le agradó tanto a Dios el Padre celestial, que hizo que Él hablara en voz alta? ¡Dios el Padre fue testigo de que Jesús, Dios el Hijo, se estaba sometiendo a un humano en completa obediencia! Dios confirmó que la obediencia de Jesús era algo sumamente agradable. Por supuesto, que Jesús no se sometió solamente a un ser humano, sino la autoridad que Dios le había otorgado a ese ser humano. Podemos ver la sumisión de Jesús hacia otras autoridades terrenales en varios pasajes de su vida, de la misma forma, a medida que Él era guiado por Dios el Padre, con el fin de mantener el orden, la paz, y el propósito. Algunos ejemplos de estos son los siguientes:
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• Sumisión a la autoridad de sus padres. (Ver Lucas 2:40–52). • Sumisión ante el requisito de los impuestos del templo y de los impuestos requeridos por el emperador romano César. (Ver Mateo 17:24–27; 22:15–21). • Sumisión ante el gobernador, Poncio Pilato. (Ver Juan 19:10–11). La sumisión a la autoridad lleva a la verdadera grandeza Algo vital que necesitamos entender es que Jesús no podía comenzar, ni podía llegar a realizar su obra, sino hasta que Juan “lo enviara”. El hecho que muchos de nosotros no hemos llegado a entender, ni hemos llegado a tener buenas experiencias con la autoridad, lo cual provoca que tratemos de evitarla, puede estar siendo originado por el hecho de que hemos perdido de alguna manera, la autorización de nuestra propia autoridad. Tal vez no hemos tenido la oportunidad de ejercitar nuestra autoridad al máximo de su potencial, debido a que es la autoridad la que imparte o autoriza nuestra propia autoridad. En primer lugar nos debemos someter a la autoridad de nuestro Dios Creador, y entonces, a la autoridad que Dios ha otorgado a otros seres humanos, en diversas esferas y aspectos de la vida. En un capítulo posterior, yo describo la forma como tú puedes responder a la “autoridad” que no está alineada con los propósitos de Dios, y aún así, poder recibir la bendición de Dios, y todos los beneficios derivados de ello. Existe bastante evidencia de que nadie entendió la autoridad más que el Autor mismo de la Autoridad de la Vida, quien estableció la autoridad en la tierra. Jesús
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tiene el poder de cambiar a todo el mundo, pero todo ese poder dependía en primer lugar, de su sumisión a Juan. Juan sostenía la autoridad en su mano, para poder enviar a Jesús. Si Jesús mismo necesitaba someterse a Dios el padre, y a Juan como una autoridad terrenal, ¿por qué es que muy frecuentemente nosotros pensamos que no necesitamos someternos a nadie? Nadie ha tenido un impacto más grande en el mundo que Jesús, pero Él no se puso a buscar “un ministerio”, ni tampoco se puso a buscar seguidores para Él mismo en forma independiente. Él conocía y vivía en la autoridad que Él mismo había otorgado, la cual había sido confirmada de diferentes maneras en su nacimiento. (Ver, por ejemplo, Lucas 2:25–32). A la edad de doce años, Jesús se encontraba discutiendo asuntos muy profundos acerca de Dios y de las Escrituras, con los maestros en el templo. (Ver Lucas 2:42–47). Cuando Jesús sintió el llamamiento de Dios, el cual le indicaba que tenía que ser bautizado por Juan, Él abandonó la región donde había crecido y se dirigió al río Jordán. Él no vino simplemente para ver lo que Juan estaba haciendo. Él no vino para ver si Juan era el tipo de predicador que a Él le gustaba. Él no vino para ver si Juan tenía el tipo de ministerio con el cual a Él le gustaría “conectarse”. Jesús, Dios el Hijo, el Creador del mundo, vino buscando una autoridad a la que Él sabía que tenía que sujetarse y someterse. De igual manera, no importa que tan “grande” tú hayas sido destinado hacer de tu nacimiento, alguien tiene que enviarte. Más aún, la grandeza no viene solamente derivada de los dones y talentos. Se deriva de que todo esté donde está supuesto a estar en términos de autoridad personal, y que te encuentres operando en tu esfera de dominio, la
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La grandeza no se deriva de los dones y talentos solamente. Proviene de estar en el lugar que estás supuesto a tener, en términos de la autoridad personal y de estar operando en tu esfera única de dominio.
cual es única. Juan había dicho, “Pero el que viene después de mí es más poderoso que yo” (Mateo 3:11). Jesús llegó, aquel de quien Juan dijo que era más poderoso, y de hecho, Jesús le dijo a Juan, “Yo necesito someterme a ti como la autoridad en esta situación. En esta circunstancia, tú eres ‘más grande’, en el hecho de que tú te encuentras administrando la autoridad que Dios te ha dado”.
El hecho de actuar en la autoridad que Dios te ha dado te da grandeza. Pero la autoridad que trae grandeza, muy frecuentemente no consiste en lo que nosotros solemos pensar. Significa servir a los demás. En un momento posterior, Jesús les dijo a sus discípulos, Pero entre ustedes no debe ser así. Al contrario, el que quiera hacerse grande entre ustedes deberá ser su servidor, y el que quiera ser el primero deberá ser esclavo de los demás; así como el Hijo del hombre no vino para que le sirvan, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos. (Mateo 20:26–28) Es el hecho de llegar a ser, y ponerte a realizar aquello que tú debes ser y hacer, lo que te convierte en algo grande. No importa lo que otras gentes digan acerca de ti, siempre hay algo por lo cual ellos tienen que acercarte a ti, debido a que Dios te ha dado a ti este tipo de autoridad. Debes recordar que la autoridad es completamente independiente de todo tipo de títulos. Algunas gentes
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poseen títulos, pero ellos no tienen ninguna autoridad real. La autoridad va más allá de los títulos; es aquello que Dios ha colocado dentro de ti. Cuando Jesús le dijo a Juan, “Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia” (Mateo 3:15, rvr), de hecho, Jesús estaba diciendo, “Juan, no vamos a ponernos a discutir asuntos de títulos. Vamos simplemente a seguir la autoridad correcta”. La sumisión a la autoridad trae consigo poder espiritual y protección ¿Qué es lo que hubiera sucedido si Jesús no hubiera estado dispuesto a someterse a la autoridad de Juan en el bautismo, o si Juan hubiera rehusado bautizar a Jesús, debido a que Jesús era mucho más grande que él, o si al contrario, Jesús hubiera sido quien terminará bautizando a Juan en el agua? Los cielos no se hubieran abierto, el Espíritu Santo no hubiera descendido en la forma de una paloma, la voz de Dios no hubiera confirmado quien era Jesús delante de toda la gente, y Jesús no hubiera sido capaz de comenzar su ministerio. Justo después de que Dios habló desde los cielos, las Escrituras dicen, “Luego el Espíritu llevó a Jesús al desierto para que el diablo lo sometiera a tentación” (Mateo 4:1). Después de que la autoridad de Jesús fue confirmada por Dios, de inmediato, Jesús fue tentado por el diablo con el fin de que abandonara esa autoridad verdadera, y que en su lugar, tomará una falsa autoridad. No debe sorprenderte si tú también, eres tentado para rendir tu autoridad legítima, a fin de obtener lo que parece ser el camino más fácil para poder vivir tu vida. Debes notar la forma como las tentaciones del diablo fueron dirigidas directamente en contra de la autoridad:
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••La tentación para convertir las piedras en pan puede ser vista como un ataque en contra de Dios como el Origen y el Sustentador de la vida. La respuesta de Jesús fue, “Escrito está: “No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios’” (Mateo 4:4). ••La tentación para que Jesús se arrojara desde lo alto del templo, obligando a que Dios lo salvara de alguna manera, puede ser vista como un engaño para ir más allá de los parámetros de la autoridad que Dios ha dado. La respuesta de Jesús fue, “También está escrito: ‘No pongas a prueba al Señor tu Dios’” (versículo 7). ••La tentación para postrarse y adorar al diablo a cambio de “todos los reinos del mundo y su esplendor” (versículo 8), puede ser visto como un complot para hacer que Jesús rechazara la autoridad justa y establecida del reino de los cielos, o del reino de Dios, a cambio y a favor de la autoridad falsa, transitoria, y decadente que existe en la tierra. Esta fue una tentación muy poderosa en especial, debido al mensaje que Jesús iba a traer, y que consistía en que el reino de los cielos había llegado a la tierra—a través de Él. (Ver, por ejemplo, versículo 17). La respuesta de Jesús fue, “—¡Vete, Satanás!…Porque escrito está: ‘Adora al Señor tu Dios y sírvele solamente a Él’” (versículo 10). Como respuesta a cada una de estas tentaciones, Jesús citó la Palabra de Dios, el “Manual” que muestra
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la forma en que los seres humanos tienen que vivir. Éste Manual es la Palabra de Autoridad del Dios Creador. Si Jesús hubiera rehusado ser bautizado por Juan, antes de dirigirse a ser tentado en el desierto, entonces, Él no hubiera sido capaz de vencer todas estas tentaciones, tal y como lo hizo. El diablo hubiera ganado. ¿Por qué? Porque Jesús hubiera estado operando en una forma que estaba completamente fuera de orden con relación a la autoridad. Él hubiera estado operando en desobediencia, o en violación a los caminos y propósitos de Dios. Él hubiera roto su relación con Dios el Padre, abandonado su palabra, y dañado la credibilidad de Dios. La fuerza espiritual y la habilidad para poder derrotar al diablo, vinieron de la obediencia a los caminos de Dios, y de mantenerse en la autoridad que Dios había establecido. ¿Cuántas gentes hay que salen a “pelear en contra del diablo” pero no han hecho todo aquello que están supuestos a hacer antes de salir? Sin contar con la autoridad adecuada del cielo, ellos fracasan. En una ocasión, siete hijos de un hombre llamado Sceva, que era un sumo sacerdote judío, estaban tratando de echar fuera demonios en el nombre de Jesús, pero debido a que ellos no contaban con la autoridad de estar en una relación correcta y en una posición correcta con Dios, ellos fracasaron totalmente: Un día el espíritu maligno les replicó: “Conozco a Jesús, y sé quién es Pablo, pero ustedes ¿quiénes son?” Y abalanzándose sobre ellos, el hombre que tenía el espíritu maligno los dominó a todos. Los maltrató con tanta violencia que huyeron de la casa desnudos y heridos. (Hechos 19:15–16)
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El hecho de tener las palabras correctas no es suficiente. Tú necesitas tener la autoridad que las respalde. Finalmente, si Jesús no hubiera sido bautizado por Juan, esto hubiera interferido con la historia, y hoy en día todos nosotros estaríamos “sin esperanza y sin Dios en el mundo” (Efesios 2:12). Esto hubiera impedido la restauración de la humanidad en su relación con Dios, así como la recuperación de su autoridad.
La misma naturaleza de Jesús muestra su autoridad y su sumisión Existe un pasaje en Filipenses 2 que es asombroso con relación a la revelación que muestra de la autoridad de Jesús y de su humildad, por medio de someterse a la autoridad: La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús, quien, siendo por naturaleza Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse. Por el contrario, se rebajó voluntariamente, tomando la naturaleza de siervo y haciéndose semejante a los seres humanos. Y al manifestarse como hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, ¡y muerte de cruz! (Filipenses 2:5–8) La frase “se humilló a sí mismo” es una frase clave. Teniendo toda la autoridad como Dios, ¡Jesús se humilló a sí mismo! La autoridad no funciona si alguien tiene que humillarte a ti. La verdadera autoridad no humilla a la gente, sino espera que la gente se humille a sí misma. Esto es exactamente lo que Jesús estaba supuesto a hacer. Él se humilló a sí mismo. “Humíllense delante del Señor, y él los exaltará” (Santiago 4:10).
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El pasaje de Filipenses continúa diciendo lo siguiente: Por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre, para que ante el nombre de Jesús se doble toda rodilla en el cielo y en la tierra y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. (Filipenses 2:9–11) “Por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo”. Jesús se humilló a sí mismo; por lo tanto, Dios hizo algo. Dios no solo lo exaltó, sino que Dios “lo exaltó hasta lo sumo”. Las Escrituras dicen que la promoción en esta vida no proLa verdadera viene de los hombres. “La exaltación autoridad no no viene del oriente, ni del occidente ni humilla a la del sur, sino que es Dios el que juzga: gente, sino a unos humilla y a otros exalta” (Salmo espera que la 75:6–7). Esto significa que todo el avance, progreso, y desarrollo en tu gente se humille a sí misma. vida no viene como resultado de las acciones de otros hombres, sino que proviene directamente de Dios. Jesús conocía la autoridad en una forma que nosotros necesitamos llegar a entender y a vivir, para que no solamente podamos experimentar los “por lo tanto” de Dios, sino que también podamos saber que poseemos dentro de nosotros mismos la autoridad de Dios. ¿Qué es lo que podemos aprender de la naturaleza humilde de Jesús? Podemos aprender que a pesar de que conozcamos quiénes somos y cuál es nuestra autoridad, debemos decidir no aferrarnos a nuestros derechos, de tal manera
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que podamos llegar a realizar el propósito de cumplir la voluntad de Dios en nuestra vida, y de levantar a los demás, lo cual es mucho más grande. Jesús pudo haber dicho, “Yo soy Dios. Yo no me voy a convertir en un ser humano”. Pero su propia confianza y contentamiento basado, en el conocimiento de quién era Él, fue lo que lo capacitó para “[negarse] a sí mismo, [tomar] la misma naturaleza de un siervo, y [ser hecho] a la semejanza de los seres humaLas gentes que no saben nos” (Filipenses 2:7, rvr). Como un ser quiénes son, humano y como el Salvador del mundo, Él soportó el abuso verbal, el dolor emono pueden cional de la traición, todas las tentaciosometerse a la nes humanas, y un sufrimiento físico autoridad. insoportable, especialmente por medio de su muerte en una cruz. Su decisión de humillarse a sí mismo no fue una decisión fácil, pero Él no tuvo duda alguna acerca de ello. He descubierto que las gentes que no saben quienes son, no pueden llegar a someterse a ningún tipo de autoridad. Cuando tú sabes quién eres, entonces tú puedes entender que no existe persona alguna que pueda degradarte o devaluarte. La sumisión es posible y se convierte en algo mucho más fácil, cuando tú te encuentras conectado con tu propia dignidad, y cuando tú sabes y estás consciente del gran valor que tienes delante de Dios. La opinión de otras gentes y la forma cómo te traten no va a llegar a influenciarte, a pesar de que ellos te lleguen a lastimar muy profundamente. Jesús sabía que... ••Él tenía un llamamiento. ••Él tenía la unción.
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••Él tenía poder. ••Él podía obrar milagros. • Él tenía conocimiento de revelación. Sin embargo, Él también sabía que su autoridad venía directamente de Dios el Padre, y Él vivía para servir a Dios y para llegar a realizar su propósito en esta tierra. “Mi alimento es hacer la voluntad del que me envió y terminar su obra” (Juan 4:34).
Los puntos para la promoción Él “se humilló a sí mismo...por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo” (Filipenses 2:8–9). Si tú quieres vivir en la autoridad de tu esfera de dominio personal, si tú quieres que Dios te promueva, y si tú quieres tener éxito en la vida, llegando a realizar completamente la voluntad de nuestro Padre celestial, tú debes ser capaz de entender estos puntos, los cuales se derivan del principio de la autoridad: 1. Cuando tú sabes quién eres tú dentro de la autoridad que Dios te ha dado, la primera cosa que tú buscas es que la autoridad que Dios ha colocado en tu vida, te pueda beneficiar y pueda protegerte, así como la aplicación práctica de tu autoridad. Es la última cosa que la mayoría de la gente hace. Al contrario, ellos están buscando reputación, fama, y poder por encima de otras gentes; ellos buscan edificar grandes organizaciones, obtener muchos seguidores, y cosas semejantes a estas. El Dios Creador les da a todas las gentes una autoridad inherente, en diversos ámbitos y para razones muy específicas, y nosotros
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tenemos que responder a otras gentes, en reconocimiento a su autoridad, y respetando el orden que Dios ha establecido. Juan el Bautista era la autoridad establecida por Dios para preparar a la gente para la venida del reino de Dios en la tierra. Jesús reconoció y aceptó a Juan como la autoridad enviada de parte de Dios, por medio del entendimiento que tuvo de las Escrituras proféticas y del testimonio de Juan. 2. Sin autoridad, no existe (ninguna otra) autoridad. Jesús fue buscando a Juan antes de comenzar su ministerio, y se sometió a su autoridad. Jesús, de hecho, le dijo a Juan, “Juan, el orden correcto es primero tú, y entonces yo. No importa quién soy yo; lo que importa es la forma como podamos trabajar juntos”. Era una sumisión mutua del uno hacia el otro, de acuerdo a la autoridad de Dios que los había capacitado a los dos para que pudieran llegar a realizar sus propósitos individuales. 3. La “autoridad” si no cuenta con una autoridad verdadera, no es autoridad. La sumisión de Jesús a la autoridad de Dios a través de Juan, es lo que le permitió ser enviado para que pudiera comenzar su propio ministerio. Pero, si Jesús no se hubiera sometido, no hubiera tenido autoridad para poder funcionar en su ministerio. 4. Poder entender la autoridad es la clave para vivir y para una vida efectiva. El Espíritu Santo de Dios habitaba en Jesús y también descendió sobre Él en su bautismo, para capacitarle y para que pudiera realizar su llamamiento. Esto no
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hubiera podido ser posible si Jesús no hubiera tenido la voluntad o disposición de someterse. 5. La autoridad es el hilo que conforma y une toda la tela. Tal y como escribí anteriormente, la mayoría de los problemas que estamos encarando—ya sea que se traten de problemas de tipo personal, corporativo, comunitario, o nacional—se derivan del hecho de que no entendemos y tampoco vivimos de acuerdo a la autoridad que refleja la naturaleza y el propósito del Dios Creador. Nuestras vidas son como diseños muy hermosos que Dios está realizando en una tela que está siendo tejida. La tela misma está formada de hilos de autoridad, y si nosotros violamos la autoridad de Dios, entonces el plan que Él tiene para nuestra vida no se va a poder desarrollar en este maravilloso diseño, sino al contrario, va a comenzar a deshilacharse.
Representantes de la máxima autoridad La autoridad es un principio tan vital, debido a que no estamos autorizados a funcionar, si no nos encontramos bajo autoridad. Para regresar a la analogía del fabricante, muchas compañías que producen productos, los garantizan, pero solo a través de la autoridad adecuada—el manual y la garantía. En estos casos, aunque un producto abandone la bodega de la compañía, nunca llega a abandonar la autoridad de la compañía. De nuevo, no sólo los consumidores tienen la obligación de consultar el manual, para poder saber cómo usar el producto en forma adecuada, sino que también tienen que acudir solamente a un distribuidor autorizado, en caso de que necesite en cualquier tipo de reparaciones.
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El hecho de contar con un distribuidor autorizado implica que este distribuidor se encuentra sometido a la compañía que delegó su autoridad, de tal manera que el producto todavía se encuentra bajo la jurisdicción de su creador original. Todos nosotros tenemos “distribuidores autorizados” en diferentes áreas o esferas de nuestra vida. Por ejemplo, el director general de una organización es como un distribuidor autorizado, debido a que él tiene que responder, a final de cuentas, ante el Comité Ejecutivo de Directores, ante los accionistas, o ante los consumidores. En otro ejemplo, un secretario de estado representa al presidente de un país, pero también supervisa a todos los embajadores que han sido enviados a las diferentes naciones con las cuales ese país tiene relaciones diplomáticas. Si el sistema funciona tal y como ha sido establecido, los embajadores están funcionando bajo una autoridad delegada; ellos representan al presidente, aunque no siempre se encuentran en contacto directo con él. Ellos no tienen permiso para establecer sus propias políticas con las naciones; ellos siempre se encuentran sometidos a la autoridad del secretario de estado, quien a su vez, se encuentra sometido al presidente. Ellos nunca pueden, ni deben hablar por ellos mismos, sino solamente en representación del presidente, de tal manera que realizan declaraciones oficiales tales como, “La posición de mi gobierno es...”. De igual manera, si nos encontramos bajo la autoridad de Dios, no es nuestro lugar el establecer una política que sea diferente a la de Dios, ni hablar de acuerdo a nuestros propios intereses. De la misma forma que la distancia no cancela la autoridad bajo la cual se encuentran los embajadores políticos, el hecho de que nos encontramos en la tierra, y Dios se encuentra en los cielos, no
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cancela la autoridad de Dios en nuestra vida, especialmente, debido a que Dios nos ha dado su propio Espíritu Santo para que habite dentro de nosotros, una vez que hemos sido restaurados en la comunión con Dios. Por el contrario, es nuestro papel y función llevar a cabo la autoridad de Dios en la tierra. El coronel Larry Donnithorne, en su libro El Modelo de Liderazgo de West Point, contó la forma como los individuos se convierten en líderes efectivos en su propia vida, a través de un sistema de disciplina. El escribió, “Cada líder es un seguidor. Nadie dirige una organización sin restricción alguna. Para todo líder, no importa que tan ‘supremo’ sea, siempre existe una autoridad más alta a quien tiene que responder [a quien tiene que rendir cuentas]”.1 De hecho, todo aquel que El éxito que quiere llegar a ser exitoso, tiene que tengas en tu responder a alguien más. El éxito de un primer ministro, o del director autoridad, va a de una empresa, o de un embajadepender de tu dor, depende en gran manera, si él propia habilidad o ella han sido capaces en el pasado para someterte de aprender a someterse a la autoa la autoridad ridad, aprender de otros, y servir a los demás. De la misma forma, el genuina, a fin de éxito que tú tengas en tu autoridad aprender y servir va a depender de la habilidad que a los demás. tengas para someterte a la autoridad genuina, para aprender, y para servir. Es únicamente cuando aprendemos sumisión, que podemos convertirnos en verdaderos líderes. Finalmente, a medida que buscamos nuestra autoridad personal, debemos mantener en mente que (1) nuestra máxima autoridad es Dios; tenemos que someternos
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a Dios y a los propósitos que Dios tiene para nosotros; (2) tenemos que “someternos” a alguien, o vivir de acuerdo a, nuestras esferas de dominio inherente—la autoridad, sueños, y dones que Dios te ha dado—y no debemos de tratar de ser alguien que no somos, ni debemos tratar de tener éxito basándonos en motivaciones impropias o equivocadas; (3) tenemos que someternos a la autoridad que Dios le ha dado a otros, en una relación mutua, y en la comunidad.
Capítulo seis
Diez principios principales de la autoridad El plan original de la autoridad para la . creación y para la vida
E
l propósito tiene que ver con la intención original, y ya hemos visto que la autoridad es una parte inherente del diseño de la humanidad, lo cual fue creado por su Fuente de Origen, que es el Dios Creador de todo el universo. Para resumir nuestra exploración del significado de la autoridad verdadera, y para que nos pueda servir como preludio a la parte dos de este libro, en donde vamos a examinar la forma como tú puedes aplicar estas verdades en tu autoridad personal, vamos a mirar diez razones principales de por qué la autoridad fue establecida como un principio esencial para nuestras vidas.
Propósito #1: Orden La autoridad produce y mantiene el orden—en las familias, en la sociedad, y en el mundo—debido a que establece una referencia con respecto a todo tipo de relaciones en la vida. Cuando funcionamos de acuerdo a la autoridad, todo el mundo sabe dónde está supuesto a estar, y lo que está supuesto a realizar, basado en la autoridad que cada uno ha recibido. 147
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Esta autoridad tiene que estar fundamentada en la autoridad absoluta, que es el Dios Creador, o de otra manera va a acabar por desbaratarse completamente. El término absoluto en este sentido no significa algo controlador, abusivo, o opresivo. Al contrario, refleja todas estas definiciones: 1. “Independiente de los parámetros arbitrarios de medición”. La autoridad de Dios es estable; no cambia en un momento dado, de tal manera que quedemos confundidos o fuera de balance. Dios no es caprichoso, ni voluntarioso. Como nuestra Autoridad Máxima, Dios es el que establece todos nuestros parámetros. La palabra gobernador se deriva de la palabra gobernar, lo cual proviene de una palabra en el latín, que significa “mantener derecho, en forma recta, rectamente”. La autoridad verdadera te provee una referencia, o sea, una dirección que tú puedes seguir. 2. “Fundamental, máximo”. No existe nada que pueda ir por encima, ni más allá de los principios y parámetros que Dios ha establecido. Cualquier otra cosa es inferior. 3. “Apropiándose perfectamente a la naturaleza de una cosa”. La autoridad de Dios es inseparable de quien Él es—y es parte de su misma naturaleza. Los seres humanos fueron creados para involucrarse en relaciones, y para ir en busca de proyectos cooperativos, y la autoridad de Dios provee el orden necesario, en que todo esto puede ocurrir en forma exitosa.
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Propósito #2: Máxima productividad Debido a que la autoridad produce orden, forma un medio ambiente ideal para una máxima productividad. Anteriormente, pudimos mirar la analogía del Manual del Fabricante. Si seguimos las instrucciones del fabricante para el cuidado de un producto, va a funcionar en su máxima capacidad. Si violamos las instrucciones autorizadas, vamos a incapacitar el potencial del producto, de tal manera que no va a poder ser utilizado al máximo. El hecho de seguir la autoridad inherente, garantiza el éxito en el funcionamiento del producto. En forma similar, los seres humanos pueden obtener el éxito en su máxima expresión, cuando viven de acuerdo a los principios de autoridad. Cuando cada persona opera desde el punto de referencia, considerando que todos poseen autoridad personal—un papel o función especial que cada uno juega dentro del conjunto total—y cada persona puede valorar la autoridad y contribución de los demás, entonces, ni el conflicto, ni la contención, fricción, y confusión van a poder entrometerse para reducir la productividad. Todo mundo trabaja conjuntamente para poder obtener el máximo resultado. Una definición de la palabra productivo es “tener la cualidad o el poder para poder producir en abundancia”. La palabra “cualidad” puede ser referida a la autoridad, y la palabra “poder” puede ser referida a la habilidad que cada uno de nosotros tenemos, y que nos ha sido dada por el Dios Creador, para poder llevar todas las cosas a su máxima realización. Si violamos el principio de la autoridad, automáticamente, estamos obstaculizando nuestro propio potencial y nuestra efectividad.
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Propósito #3: Protección La autoridad ha sido diseñada para proteger sus productos, y no para restringirlos. La autoridad del Dios Creador establece las barreras, límites, y referencias que nos protegen del mal uso, del abuso, y de la autodestrucción. Cuando nuestros primeros padres humanos abandonaron su autoridad, ellos se destruyeron a sí mismos, y nosotros todavía seguimos experimentando los efectos de esa decisión cada día. El manual de un fabricante tiene una lista de cosas que debe uno hacer y de cosas que uno no debe hacer para poder proteger el producto, así como todas aquellas cosas que tienen que ver con el producto. Por lo tanto, si obedecemos las instrucciones de nuestro Fabricante, y si nos mantenemos dentro de nuestra autoridad, entonces, nos estamos protegiendo no sólo a nosotros mismos, sino también a otros con quienes tenemos algún tipo de relación, y con quien tratamos en diferentes esferas de la vida. Jesús mismo no podía estar sin la cobertura de autoridad proveniente de Dios el Padre. Continuamente debemos recordarnos a nosotros mismos, que necesitamos estar cubiertos por alguna autoridad, de tal manera que podamos proteger a otros, y mantenerlos a salvo.
Propósito #4: Preservación La preservación tiene que ver con la protección. Si un fabricante promete que su producto tiene una garantía de por vida, si tú sigues ciertos procedimientos, entonces, si tú los sigues, el producto debe durar. Si tú violas esos procedimientos, el producto va a ser dañado, y la garantía va a ser cancelada automáticamente.
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El Dios Creador nos ha dado promesas a todos nosotros, pero Tenemos al Espíritu necesitamos seguir las condiciode Dios viviendo nes correspondientes, para que dentro de nosotros, podamos ser capaces de benede tal manera que ficiarnos de estas promesas. La contamos con autoridad de Dios preserva la la autoridad y calidad de nuestra vida, si es que llegamos a seguir las instruc- habilidad, e incluso la perseverancia, ciones que se encuentran en su Manual, que son las Escrituras, para llevar a cabo con relación a la forma como sus propósitos. debemos conducirnos. Además de esto, el hecho de que seamos verdaderos con relación a la autoridad personal que Dios ha colocado dentro de nosotros, va a salvaguardar los propósitos divinos específicos que existen para nosotros. También tenemos al Espíritu de Dios viviendo dentro de nosotros, de tal manera que tenemos la autoridad y la habilidad, incluyendo la perseverancia, para llevar a cabo los propósitos de Dios.
Propósito #5: La representación a través de la validez y la defensa Cualquiera que delega parte de su autoridad a otros, es responsable de representarlos. Muy frecuentemente pensamos en términos de embajadores que están representando sus países, así como los productos que representan a sus fabricantes, pero lo inverso también es verdadero. Podemos ver esta realidad funcionando en dos formas muy prácticas—a través de la validez y de la defensa.
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La validez En primer lugar, si tú te encuentras operando bajo la autoridad de otra persona, la autoridad de esa persona certifica las decisiones y acciones que tú tomas en representación de él o ella. Jesús declaró continuamente que sus acciones se encontraban apoyadas por una autoridad celestial. Él dijo, “Porque esa misma tarea que el Padre me ha encomendado que lleve a cabo, y que estoy haciendo, es la que testifica que el Padre me ha enviado” (Juan 5:36), y “Si no hago las obras de mi Padre, no me crean” (Juan 10:37). Jesús tenía paz incluso con relación a la muerte, debido a la validez de su autoridad: Por eso me ama el Padre: porque entrego mi vida para volver a recibirla. Nadie me la arrebata, sino que yo la entrego por mi propia voluntad. Tengo autoridad para entregarla, y tengo también autoridad para volver a recibirla. Éste es el mandamiento que recibí de mi Padre. (Juan 10:17–18) Si tú eres enviado a algún lugar bajo una autoridad genuina, tú puedes tener paz, debido a que esa autoridad es responsable de ti. En otro ejemplo de las Escrituras, el arcángel Miguel no uso su propia autoridad para pelear en contra del diablo, sino que usó sus palabras con sumo cuidado, diciendo, “¡El Señor te reprenda!” (Judas 1:9). Miguel estaba actuando a favor de Dios, pero tenía que reprender al diablo bajo la autoridad del nombre de Dios, y no bajo su propio nombre, para que esa autoridad pudiera ser efectiva ante los ojos de Dios. Finalmente, el centurión romano que mencioné anteriormente confió y apeló completamente a la autoridad de Dios, cuando le pidió a Jesús que sanara a su
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siervo. Él sabía que el ministerio de Jesús había sido validado por el Padre celestial, y no llega a existir duda alguna de que su siervo podría ser sanado. (Ver Mateo 8:5–13). La defensa El segundo punto con relación a ser representado por la autoridad de alguien, tiene que ver con esa representación a través de la defensa. Si un producto es defectuoso o fracasa en el propósito para el cual fue creado, entonces el creador o el fabricante tiene que intervenir y resolver el problema. Solamente la autoridad, o fuente de origen del producto puede defender a ese producto. De nuevo, cuando ciertos modelos de automóviles Toyota llegaron a tener problemas técnicos bastante grandes, la compañía que previamente había tenido un excelente prestigio en la industria automotriz se encontraba bajo juicio de la opinión pública, y por lo tanto el presidente de la compañía, quien era el nieto del fundador, vino en persona para testificar delante del Congreso de los Estados Unidos de América, para asegurarle al gobierno, que la compañía se estaba encargando de resolver el problema. Toyota no mandó a algún gerente primerizo de la compañía para que diera esa declaración de seguridad. El presidente no solamente estaba representando la compañía, sino también el producto; él estaba hablando a favor del producto. En forma similar, podemos ver que la obra redentora del Dios Creador requirió que Él enviará a su propio Hijo a la tierra a reclamar y defender su propia imagen en la humanidad. Por lo tanto, la autoridad representa al producto. Esto significa que si tú no te encuentras bajo ninguna autoridad, y tú tomas algún tipo de acción y fracasas, no va a existir ninguna persona que pueda hablar a favor de
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ti, ni protegerte. Pero si fracasas mientras que te encuentras bajo alguna autoridad, tu autoridad puede ayudarte, yendo a tú rescate. Por ejemplo, si tú te encuentras en un juicio, después de haber sido acusado de un crimen, generalmente es recomendable que tú contrates un abogado para defenderte, en lugar de que trates de defenderte a ti mismo. Si resulta que te encuentran “defectuoso”, tú necesitas una autoridad de respeto que te pueda representar. Muchos abogados defensores les recomiendan a sus clientes que no digan nada, porque cualquier cosa que digan puede ser usada en contra de ellos. Cuando tú te encuentras en una situación de necesidad, la autoridad que está sobre ti se va a convertir en tu defensa. Cuando los seres humanos, que son “el producto” del Fabricante Divino, fracasaron por medio de abandonar su autoridad, el Fabricante no se deshizo de ellos, sino que vino en persona para ayudarlos, por medio de representarlos y defenderlos. El cielo no mandó solamente a un ángel; al contrario, Dios el Hijo, cuya imagen estaba en el producto, vino a redimir y a restaurar a toda la humanidad. Cuando Jesús fue atacado por los líderes religiosos, quienes dijeron que su testimonio no era válido, Él dejó que el Padre celestial se convirtiera en su defensa, por medio de decir lo siguiente: Aunque yo sea mi propio testigo—repuso Jesús—, mi testimonio es válido, porque sé de dónde he venido y a dónde voy. Pero ustedes no saben de dónde vengo ni a dónde voy. Ustedes juzgan según criterios humanos; yo, en cambio, no juzgo a nadie. Y si lo hago, mis juicios son válidos porque no los emito por mi cuenta sino
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en unión con el Padre que me envió. En la ley de ustedes está escrito que el testimonio de dos personas es válido. Uno de mis testigos soy yo mismo, y el Padre que me envió también da testimonio de mí.—¿Dónde está tu padre? —Si supieran quién soy yo, sabrían también quién es mi Padre. (Juan 8:14–19) Jesús era Dios en la carne, y por lo tanto, Él tenía a la máxima autoridad dentro de sí mismo, y por eso, Jesús podía testificar a favor de Él mismo. Aún así, él dirigió a los líderes religiosos hacia el testimonio de confirmación del Padre celestial, que lo había enviado. Jesús siempre defendió sus palabras y sus acciones a través de la autoridad del Padre celestial. Él les dijo a todos aquellos que lo acusaban, que ellos no conocían a la Autoridad Verdadera, o de otra manera hubieran sabido que su testimonio era válido. “Si Dios fuera su Padre—les contestó Jesús—, ustedes me amarían, porque yo he venido de Dios y aquí me tienen. No he venido por mi propia cuenta, sino que él me envió” (Juan 8:42). Una vez más, la clave para el éxito de Jesús, consistía en que Él se encontraba debajo de una autoridad, y tenía, tanto la autorización, como el poder para llevar a cabo el propósito El Espíritu de para el cual Él vino a esta tierra. Como Dios dentro representante del Padre celestial, Jesús de ti, reafirma dijo e hizo, solo aquello que el Padre la voluntad celestial dijo e hizo. de Dios en tu
vida. Cuando tú realizas tu autoridad personal, y te encuentras siguiendo el Manual del Fabricante, aquel que te ha enviado se convierte en tu defensa. El Espíritu de Dios que se encuentra
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dentro de ti reafirma la voluntad del Padre celestial en tu vida: “Pero cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propia cuenta sino que dirá sólo lo que oiga” (Juan 16:13). Jesús dijo, “El Padre está conmigo” (Juan 16:32), y Él les dijo a sus discípulos, “Y les aseguro que estaré con ustedes siempre” (Mateo 28:20). Un fabricante siempre respalda el producto, independientemente adonde se envíe ese producto. Cuando te encuentras sometido a la Máxima Autoridad, nunca vas a estar solo. Tú no vas a tener que defenderte a ti mismo. Siempre va a haber alguien que te va a defender, y que te va a ayudar.
Propósito #6: La seguridad Mientras que tú te encuentres operando bajo la autoridad de la Máxima Autoridad, tú estás a salvo. Cualquiera que te ataque, estará atacando a la Máxima Autoridad, quien, a través de Cristo Jesús, también es tu Padre celestial. El Señor llama a su pueblo “la niña de los ojos” (Zacarías 2:8). La frase “la niña de los ojos” significa “alguien que es apreciado en extremo”. Por lo tanto, la autoridad se convierte en tu sentido de seguridad. Jesús usó palabras muy fuertes en contra de aquellos que lastimaban a cualquiera que pertenecía al Padre celestial: “Pero si alguien hace pecar a uno de estos pequeños que creen en mí, más le valdría que le colgaran al cuello una gran piedra de molino y lo hundieran en lo profundo del mar” (Mateo 18:6). ¡No es nada seguro atentar en contra de los hijos de Dios! Es mucho mejor estar debajo de alguna autoridad. Jesús siempre sabía que Él se encontraba seguro, debido a que nunca operó fuera de la autoridad. Esto no significa
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que Él fuera inmune a los problemas y dificultades, pero cuando Cuando tú te tú te encuentras debajo de la encuentras debajo Autoridad Máxima, tú estás prode la Autoridad tegido, de tal manera que puedes Máxima, estás llegar a realizar el propósito de tu protegido, de autoridad personal. Las gentes tal manera que se pusieron de acuerdo muchas puedas cumplir veces para matar a Jesús, pero el propósito de tu ellos no pudieron tocarlo, sino hasta que era el tiempo en que Él autoridad personal. tenía que ser sacrificado a favor de todos nosotros. “Se levantaron, lo expulsaron del pueblo y lo llevaron hasta la cumbre de la colina sobre la que estaba construido el pueblo, para tirarlo por el precipicio. Pero él pasó por en medio de ellos y se fue” (Lucas 4:29–30). Cuando tú te encuentras operando bajo la autoridad del Padre celestial, tú tienes acceso a toda su ayuda, consejo, corrección, instrucción, disciplina, y muchos otros beneficios que tú no tendrías de otra manera. Tú recibes previsión y una visión retrospectiva—que te dan la seguridad de una visión mucho más amplia para tu vida. Tú también vas a contar con un “refugio” (Salmo 32:7) en Dios, a través de un lugar de refugio, donde puedas referir te cada vez que lo necesites. Este conocimiento te va a dar un sentido de valentía. Tú puedes tener confianza, debido a que no te encuentras bajo tu propio riesgo, sino que tienes a alguien más que te está protegiendo.
Propósito #7: La promoción Cuando tú te encuentras bajo la Máxima Autoridad, tú te vas a dar cuenta que la promoción no tiene que
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venir de otras gentes, sino de Dios, aún cuando tú te encuentres trabajando con otros, y para otros. Tu autoridad y tu promoción se van encontrar basados en aquello por lo cual fuiste creado en forma única por Dios, para que lo puedas realizar en concierto con otras personas. Dios va a usar otras gentes para colocarte en situaciones, donde tú puedas llevar a cabo tu propósito, que es único, pero tú vas estar autorizado solamente por Dios, para la realización ese propósito. El hecho de someterte a todos aquellos a quienes Dios les ha dado autoridad en tu vida, mientras que te encuentras yendo en busca de tu propia autoridad, te va a llevar al progreso y al crecimiento en el área de la responsabilidad. Josué fue honrado por Dios, y fue promovido debido a la devoción que tenía hacia Dios, y debido a la forma en que él se había sometido al liderazgo de Moisés. De entre todos los israelitas, él terminó obteniendo la posición como el siguiente líder del pueblo. Conocemos a Josué debido a la asociación que tenía con Moisés, de la misma forma que conocemos acerca del profeta Eliseo, debido a la asociación que tenía con su mentor, Elías. El hecho de operar debajo de una autoridad, no sólo te preserva, sino que también te otorga un legado. La autoridad puede darte una vida muy poderosa cuando tú te someterse a ella.
Propósito #8: La libertad Otro propósito de la autoridad es poder proveer el marco y el medio ambiente para una completa libertad. Contrario a lo que algunas gentes suelen pensar, la autoridad no restringe la libertad, sino al contrario, la asegura. “Ahora bien, el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad” (2 Corintios 3:17).
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La verdadera libertad siempre va a existir dentro del contexto de límites legítimos. Esto se debe a que la libertad sin la autoridad, sin las leyes y principios, se convierte en una anarquía. Una de las razones de por qué la revolución americana tuvo éxito, es que muchos de sus líderes, tales como Washington, se habían “ganado” la autoridad de parte de los ciudadanos, a través de sus realizaciones, y a través de la vida que vivieron, y debido a que muchas de las estructuras gubernamentales que existían en ese entonces, fueron mantenidas intactas básicamente. Cuando los gobernadores reales abandonaron las antiguas colonias, los gobernadores americanos tomaron sus lugares.
Propósito #9: La identidad La autoridad es la fuente de origen de la autenticidad, y la autenticidad es la fuente de origen de la identidad. Por lo tanto, tú nunca vas a poder conocer tu identidad, si no tienes referencia con relación a tu autoridad. ¿Por qué es El propósito que todo fabricante coloca su nombre en sus productos? Un ejemplo, ¿por de la autoridad es ponerte en qué es que la tapa de cada computacontacto con dora portátil tiene los nombres de los fabricantes de computadoras en ellos, la verdadera de tal manera que el nombre puede persona que tú leerse muy fácilmente cuando abres eres, tal y como la tapa de esa computadora personal? Dios te creó. Esto es con el propósito de recordarnos continuamente que la identidad de esa computadora personal está conectada a su fuente de origen, o a su autoridad. Cualquier definición con relación a ese producto, debe estar en relación y en referencia a su fabricante.
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De igual manera, tú no puedes llegar a saber quién eres tú realmente—esto es, tu identidad—si te encuentras apartado de Dios, quien es tu Fuente de Origen. De nuevo todo mundo puede tener una opinión acerca de un producto, pero es solamente el fabricante quien conoce su propósito—el qué y el porqué de ese producto.
Propósito #10: La realidad Debido a que la autoridad es la fuente de origen de la autenticidad y de la verdadera identidad, también es la fuente de origen de la realidad. Por lo tanto tú debes de... 1. Conocer tu autoridad. 2. Ser verdadero con relación a esa autoridad. Cuando tú te encuentras debajo de la máxima autoridad, y estás operando dentro de tu autoridad personal, la gente puede llegar a saber quién eres tú realmente. Ellos pueden identificar tus dones y habilidades. Esta es una de las maneras a través de las cuales Dios obra, para poder llegar a realizar tu propósito dentro de tu esfera de dominio. Si tú no te encuentras operando en tus dones, tú no puedes ser identificado, y la gente no va a poder notarte en esa forma específica. Tú nunca vas a poder llevar a cabo tú verdadero propósito.
El llamamiento de las gentes auténticas El mundo está careciendo completamente de gentes que sean auténticas. Debido a que la autenticidad es un componente clave de la autoridad, eso explica por qué nos encontramos en este tipo de crisis de autoridad hoy en día. Algunas gentes pueden estar huyendo en forma activa de la realidad que están destinados a ser, pero muchos otros ni siquiera están conscientes de que están viviendo vidas falsificadas. Ellos simplemente no saben
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lo que se encuentra dentro de ellos mismos, y tampoco saben cómo poder llegar a realizar su autoridad personal. En la parte dos de este libro, vamos a mirar las maneras como podemos descubrir e implementar la autoridad personal. Lo que tú estás a punto de leer va a despertar dentro de ti, algunos sueños escondidos que Dios siempre ha querido que tú realices. Tú vas a aprender la forma en que puedes llegar a impartirlos en tu vida, y en la vida de muchos otros.
Parte dos
¿Cuál es mi autoridad personal?
Capítulo siete
Manifestando tu autoridad personal El propósito inherente contiene la habilidad para realizar las intenciones del Autor
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n una ocasión pude ver un documental en la televisión acerca de Carl Lewis, nueve veces ganador de la medalla olímpica de oro, que en un punto de tiempo era el hombre más veloz en todo el mundo. Un segmento mostró a Lewis con otros veinte corredores que se encontraban alineados en la pista, y listos para competir en la carrera. A medida que observé, pude ver el concepto de la autoridad personal ilustrado de una manera perfecta. El desempeño de Lewis en la carrera, demostró la diferencia entre un hombre que está autorizado, y todos aquellos que no cuentan con autorización alguna. Cuando se disparó la pistola para dar inicio a la carrera, todos los otros corredores comenzaron, pero Lewis no se apresuró. La forma como él atacó esta carrera, me recordó la declaración que hiciera el rey Salomón, “Me fijé que en esta vida la carrera no la ganan los más veloces” (Eclesiastés 9:11). ¡Esto es en forma muy especial, con relación a aquellos que corren demasiado aprisa, y demasiado pronto! Lewis tomó un paso firme y muy relajado a través de toda la pista, y todos lo demás lo estaban pasando en forma extremadamente rápida. 165
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De repente, la cámara hizo un cambio para tomar acercamientos de los cuatro corredores que se encontraban a la cabeza de la carrera. El corredor en primer lugar se estaba fastidiando y esforzándose demasiado, tal como si él estuviera pensando, Carl se encuentra justo detrás de mi. El corredor que se encontraba en segundo lugar estaba sudando copiosamente, y su pecho se veía como si estaba a punto de explotar. Yo me imagino que tal vez él estaba pensando, Tengo que seguir corriendo muy fuerte. Mientras tanto, Lewis iba deslizándose muy suavemente a lo largo de la pista. De repente, un corredor comenzó a retrasarse, luego fueron dos, luego cinco, luego diez. Y entonces, casi todo el resto de los corredores. Los únicos dos corredores que permanecían en punta estaban matándose a fin de poder mantener el paso, pero Lewis parecía como que simplemente seguía deslizándose por la pista. Yo me dije a mí mismo, Esas piernas fueron creadas para hacer esto. Lewis espero hasta que faltaban las últimas cincuenta yardas, y entonces fue como si algo se hubiera descargado sobre él—comenzó a apretar el paso, y rebasó a todos los otros corredores, de una forma que parecía como si ellos estaban simplemente parados en la pista. Entonces, una vez que cruzó la línea de meta en primer lugar, el no hizo ningún tipo de aspavientos para lucirse. Él fue completamente humilde. Me gustó mucho eso acerca de él. ¿Porque es que él no hizo ningún tipo de aspavientos para lucirse? Debido a que el hecho de correr era algo completamente natural para él. Él sabía que había nacido para hacer esto. Él sabía que estaba supuesto a ganar esta carrera. La multitud estaba volcada sobre él como una locura, pero él se encontraba tan tranquilo y tan fresco como una lechuga.
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Cinco características de tu autoridad personal El desempeño de Lewis en esa carrera nos dio el ejemplo para las siguientes cinco características de la autoridad personal, lo cual tú vas a ser capaz de reconocer en tu vida, a medida que tú llegas ejercitar tu propia autoridad con su poder inherente dentro de tu esfera de dominio personal. 1. Tu autoridad personal es algo natural que se encuentra dentro de ti. Es algo a lo cual tú fuiste autorizado en forma intencional, y es el don que el Dios Creador te ha dado, para que tú llegues a realizarlo. Tú naciste para hacer esto, y a medida que tú manifiestas tu autoridad, vas a llegar a darte cuenta que ese es el propósito par el cual tú fuiste creado. 2. Tu autoridad personal es muy valiosa. Tú tienes un don, con el cual puedes contribuir al mundo entero. Pero, aunque fuiste diseñado para hacer algo desde su nacimiento, tú tal vez puedes comenzar a pensar que hay otras gentes que se encuentran mucho más adelantadas que tuvo en esta vida, y que tú no estás yendo tan aprisa en este camino de la vida, como deberías hacerlo. Incluso en este momento, tal vez puedes estar sintiendo que hay otros que te están dejando atrás con relación al éxito o a las realizaciones que han podido llevar a cabo. Pero no debes preocuparte; tienes que tomar tu paso de acuerdo a la autoridad que tú tienes, y vas a poder llegar a la línea de meta, justo en el tiempo adecuado. El hecho de tratar de usar atajos hacía tu autoridad personal, los cuales
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no van a reflejar los propósitos y caminos del Dios Creador, va a hacer de ti una persona no autorizada y carente de autenticidad. Tú puedes mantener la paz dentro de ti, y seguir manteniendo el paso que llevas, una vez que has podido entender quién eres realmente, y el valor que tu vida, y tu autoridad personal tienen ante tu Amoroso Dios Creador Jesús dijo, “Yo he venido para que tengan vida, y la tengan en Cuando tú te abundancia” (Juan 10:10).
encuentras trabajando en algo para lo cual fuiste diseñado desde tu nacimiento, la gente va estar consciente de ti en una forma muy natural.
3. Tu autoridad personal es auténtica. Cuando tú te encuentras trabajando en algo para lo cual tú fuiste diseñado desde tu nacimiento, la gente va estar consciente de ti en forma muy natural. Muy interesantemente, ellos incluso, tal vez lleguen a tener miedo de ti. Esto sucede muy frecuentemente, debido a que si tú realmente conoces lo que estás haciendo, tú vas a intimidar a la gente que se sienta menos segura de sí misma, sólo por el simple hecho de entrar en el mismo lugar donde ellos se encuentran. Tú tienes que continuar la búsqueda de tu autoridad muy fielmente, sin importar las reacciones negativas que otros puedan tener con relación a tu persona.
4. Tu autoridad personal va a florecer en el medio ambiente adecuado. Cuando tú has sido diseñado desde tu nacimiento para hacer algo,
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pero no has podido entrar de lleno a realizarlo, algunas veces, lo único que tú vas a necesitar es ubicarte en el medio ambiente correcto, y algo va a “prenderte el foco”, y tú vas a poder despegar. Este medio ambiente es un lugar donde tú puedes correr con toda libertad operando en todos tus dones, a medida que sigues los principios del Dios Creador para la vida y para ejercitar la autoridad. Tal y como el salmista escribió, “Corro por el camino de tus mandamientos, porque has ampliado mi modo de pensar” (Salmo 119:32). Este tipo de medio ambiente también va a ser un lugar donde otros van a poder ver tus dones, y van a poder confirmar que tú tienes la habilidad natural en tu propia esfera de dominio, y te van a ayudar para que tú puedas ir hacia delante en el cumplimiento y realización de tus metas y objetivos. 5. Tu autoridad personal va estar caracterizada por la humildad. Cuando tú sabes exactamente para que fuiste diseñado desde tu nacimiento, y tú puedes llegar a entender la verdadera autoridad, tú vas a ser una persona muy humilde. La palabra humilde se deriva de una palabra del latín, que es humus, que significa “tierra”. Esto nos da la visita completa del principio que implica que la autoridad es algo natural. El hecho de ser humilde significa que tú eres tú mismo. Lewis era natural o “terrenal”, cuando ganó esa carrera. A medida que tú ejercitas tu autoridad personal, tú también vas a ser completamente natural.
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¿Dónde es que tú te encuentras, en términos de las cinco características anteriores de autoridad personal en tu vida? Hasta que tú llegues a entender tu propia autoridad, muy probablemente, tú te vas a encontrar haciendo algo que no has sido autorizado. Ésta es la razón de por qué yo quiero que tú llegues a entender verdaderamente la prioridad, el valor, beneficios, y la necesidad de llegar a identificar, y de ejercitar tu autoridad inherente. Tú tienes un autor, o fuente de origen, que te ha dado una vida y un propósito, de tal manera que tú necesitas preguntarte a ti mismo en forma muy seria, muy activa, y muy persistente, “¿Cuál es mi autoridad personal natural? ¿Qué es aquello para lo cual estoy autorizado y que puedo realizar?”. Para ayudarte a contestar estas preguntas, en primer lugar, vamos explorar el valor y el significado de la autoridad personal. Entonces, vamos a mirar a cada una de las cinco características mencionadas anteriormente de la autoridad personal con mucha más profundidad.
El valor y significado de tu autoridad personal Dios te dio autoridad personal de acuerdo a un orden, a un propósito, y a una creatividad El concepto de la autoridad personal se encuentra referido en varias maneras a través de todas las Escrituras, con algunas variantes en términos, dependiendo del tipo de traducción que se trate: “llamar” o “llamamiento”, “voluntad de Dios”, “señalado”, “ordenado”, “don”, “obra”, “habilidad”, “tareas asignadas”. Todas estas palabras revelan diferentes aspectos del significado de la autoridad personal. Por ejemplo, Jesús
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contó una parábola acerca de un hombre que les confió su dinero a sus siervos, mientras que él salió de viaje. “A uno le dio cinco mil monedas de oro, a otro dos mil y a otro sólo mil, a cada uno según su capacidad” (Mateo 25:15). La palabra griega para la palabra “habilidad” en este versículo es dunamis, que significa “poder milagroso” o “fuerza”. Esta palabra implica que cada siervo tenía ciertas capacidades inherentes para poder hacer algo con relación al dinero que le había sido confiado, y junto con esas capacidades tenía una responsabilidad que debía ejercitar. Tú también, tienes habilidades que te han sido confiadas junto con tu autoridad personal, para que puedas realizarlas a favor de tu Dios Creador. Pablo de Tarso se encontraba operando en una forma que era contraria a la autenticidad, cuando él tuvo un encuentro con el Cristo viviente. Vamos a revisar esta experiencia con mucho más detalle en un capítulo posterior. Pero como resultado de este encuentro, Pablo preguntó, “‘¿Qué debo hacer, Señor?’ Y el Señor me dijo: ‘Levántate y entra a Damasco; y allí se te dirá todo lo que se ha ordenado que hagas’” (Hechos 22:10, lbla). La palabra “ordenado” también puede ser traducida como “asignado” o “señalado”. La palabra griega es tasso, que significa “arreglar en una forma ordenada, por ejemplo, asignar o encargar (con relación a cierta posición o tarea)—señalar, determinar, ordenar, establecer”. También significa “colocar en orden, arreglar”. Como un Dios de propósito, orden, y creatividad, el Dios Creador ha asignado o señalado para cada persona su lugar correcto y autorizado para que pueda funcionar al máximo. Dios ha hecho arreglos para que cada uno de nosotros podamos funcionar en una posición estratégica, en una forma muy suave y fácil, junto con otros,
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a fin de llegar a realizar los propósitos divinos. Dentro de este orden necesario, Dios nos ha dado una libertad extraordinaria para que podamos expresarnos, y que podamos disfrutar de nuestra autoridad individual. Pablo escribió a los Corintios lo siguiente: “Después de todo, ¿qué es Apolos? ¿Y qué es Pablo? Nada más que servidores por medio de los cuales ustedes llegaron a creer, según lo que el Señor le asignó a cada uno” (1 Corintios 3:5). La palabra que aquí se traduce como “asignó”, proviene de la palabra griega didomi, que significa “dar”. A cada uno a nosotros se nos ha asignado u otorgado una tarea en particular que tenemos que realizar. Si Dios planeó funciones intrínsecas, que se encuentran conectadas las unas con las otras, para el mundo físico (tales como la fotosíntesis) para sus propios propósitos divinos, ¿qué es lo que Dios estaba pensando, cuando El te creó a ti? Dios te dio a ti—¡si, a ti!—el permiso y el poder para actuar El concepto de autoridad está sobrecargado de significado, y por esto es que necesario mirarlo desde diferentes ángulos, a fin de que podamos llegar a entenderlo completamente. En capítulos anteriores, pudimos definir la autoridad personal como “los dones inherentes que una persona o cosa poseen, a fin de poder llevar a cabo o realizar el propósito para el cual esa persona o esa cosa fue colocada en esta tierra”. Vamos explorar los conceptos de autoridad y de autorización con un énfasis muy particular, enfocándonos en la forma como tú puedes manifestar tu autoridad personal. A continuación vas a encontrar algunas definiciones de autoridad que yo he recogido:
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••“El poder para determinar / el derecho para controlar o Cuando determinar tu propio destino”. Dios te creó, Para nuestros propósitos, automáticamente esta definición se refiere a la te dio no sólo capacidad para poder llegar el poder, sino el a ser la persona que debes permiso para ser, tal y como originalmente fuiste diseñado. Tú tienes actuar en tu propia el derecho de determinar tu autoridad; Dios propio futuro, basándote en te dio el permiso la autoridad inherente que te para que puedas fue dada por el Dios Creador. ser tú mismo. El futuro se encuentra dentro de ti. Dios te ha dado el permiso para que puedas llegar a ser todo aquello para lo cual fuiste diseñado desde tu nacimiento. Éste es el alcance de tu autoridad. Tú no tienes la autoridad para hacer que alguien más sea como tú, ni para tratar de hacerte parecer a alguien más. Tú tienes la autoridad solamente para llegar a ser aquella persona que tú debes ser. Éste es el poder que se encuentra dentro de ti, y que tú necesitas llegar a determinar, y en este capítulo, de igual manera en los siguientes capítulos, te voy a mostrar la forma cómo puedes llegar a tomar esta determinación. ••“Derecho o poder delegado”. No fuiste tú quien generaste este poder, sino fue Dios quien te lo dio a fin de que puedas manifestar todo aquello que Dios puso dentro de ti. Él te ha dado el derecho para que llegues a convertirte
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en el tipo de persona que Dios quiere que tú seas. ••“Poder basado en el derecho, en el permiso para poder actuar”. Cuando Dios te creó, Él te dio en forma automática, no solamente poder, sino también el permiso para actuar en tu autoridad; Dios te dio el permiso para que llegues a ser la persona que debes ser, tal y como Él te diseñó. ••“Sanción”. Esta definición tiene que ver y se encuentra relacionada con la última definición. En términos de autoridad, sanción significa “aprobación, permiso, o ratificación oficial o explícita”. El término sanción se encuentra relacionado al término bíblico santificar, el cual significa “ser apartado con un propósito especial”. Por lo tanto, Dios nos ha dado la sanción, o la aprobación oficial, con relación a la posición específica en que Dios nos ha colocado, y es a partir de esto, que podemos funcionar al máximo. Hemos sido seleccionados o apartados para una función específica. Por diferentes razones, mucha gente tiene miedo de dar los pasos necesarios para entrar en su autoridad personal, y llegar a realizar los sueños que se encuentran dentro de ellos. Esta es la razón de por qué yo quiero que tú seas capaz de poder entender claramente esta verdad: el hecho de que a ti te ha sido dada autoridad, significa que tú, en forma personal, tienes el privilegio y la capacidad para poder realizar el propósito de tu vida, dentro de tu esfera de dominio personal. Tú tienes permiso para poder ejercitar la fuerza que se encuentra dentro de ti, y
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que te ha sido impartida por Dios. Tú tienes el derecho de ejercitar tu poder inherente. Cuando tú llegas a entender verdaderamente tu autoridad, tú llegas a ser libre, para que puedas convertirte en la persona que debes ser. ¿Acaso tú crees que se te ha dado autoridad, desde antes de que tú llegarás a nacer, a fin de que puedas impartir algo a este planeta? Hemos estado viendo que todo ha sido creado para llegar a cumplir las intenciones del Autor. Lo que se aplicó al profeta Jeremías con relación a esto, también se aplica a tu persona. Dios le dijo, “Antes de formarte en el vientre, ya te había elegido; antes de que nacieras, ya te había apartado” (Jeremías 1:5). Dios te escogió y te ha apartado por una razón. Tú vas a llegar a manifestar tu autoridad, cuando tú tengas la mentalidad correcta con relación a ella. Si tú quieres permanecer fuera, o tú quieres moverte por fuera de tu autoridad personal, tú no sólo vas a ser una persona muy frustrada, y con mucha angustia dentro de ti, sino que también vas a perder completamente el punto de tu propósito en la vida. Pablo escribió lo siguiente: “En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad” (Efesios 1:11, rvr). Esto significa que Dios estableció tu destino antes de que tú fueras concebido, y el hecho de llegar a realizar ese destino, es lo que te convierte en la persona auténtica que tú eres. Debes notar que el versículo anterior dice que Dios obra todo de acuerdo y conforme con sus propósitos. Como los representantes de Dios, tenemos que realizar el mismo tipo de “entrenamiento”, bajo la autoridad que Él nos ha dado. Tu autoridad personal te permite atraer
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cosas a tu vida, las cuales van a estar en conformidad con los propósitos que tienes debajo de Dios. Tú tienes el poder para darle forma a tu vida, de acuerdo a tu autoridad personal. Ahora, vamos a explorar en mayor profundidad las cinco características de tu autoridad personal, a medida que tú te preguntas a ti mismo algunas cosas con relación a tu vida actual.
1. Tu autoridad personal es algo natural dentro de ti Es aquello para lo cual tú naciste, y es algo natural dentro de ti; tú no tienes que “tratar” de hacerlo. Esto no significa que tú no vas a tener que trabajar muy duro, mientras te encuentras tratando de realizar o llevar a cabo tu autoridad, y tampoco significa que tú no vas a tener que forzarte a ti mismo en ciertas maneras, a fin de que puedas crecer, y realizar tus objetivos, o tampoco significa que no vas a enfrentar todo tipo de retos, a medida que vas en busca de tu autoridad personal. Pero lo que sí significa es que, hablando en forma general, tú te vas a sentir mucho más lleno de energía, renovado, y con mucho entusiasmo con relación a lo vas a estar haciendo, y vas a tener las habilidades naturales para poder acabarlo. Tú vas a poder manifestar tu autoridad, sólo si tú comienzas con aquello que es natural, y que es la dirección de Dios para tu vida. Cada persona ha recibido dones y una esfera de dominio, en la cual tienen que operar. A medida que tú te sometes a Dios, y al sueño o visión que Él ha colocado en tu corazón, tu autoridad personal va a emerger, y tú vas a vivir con confianza y con mucha efectividad.
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La vida se va a mirar y va a ser mucho más fácil para ti Todo aquello para lo cual Dios te creó, ya se encuentra dentro de ti. Esta es la razón de por qué las gentes que han llegado a encontrar sus esferas personales de dominio hacen que la vida se vea mucho más fácil. No sólo vas a poder hacer que la vida se vea mucho más fácil por medio de ejercitar tu autoridad personal, sino que tu vida también va a ser mucho más fácil, debido a que tú no vas a tener que estar luchando en contra de actividades o medio ambiente que no son naturales, o que no cuentan con autorización alguna.
A través de ejercer tu autoridad personal, no solamente vas a hacer que la vida se vea más fácil, sino también, como resultado de esto, no vas a tener que estar peleando en contra de actividades, o medio ambientes que no son naturales o que no se encuentran autorizados.
En forma similar a los corredores que hicieron su máximo esfuerzo para tratar de seguir compitiendo mientras que Carl Lewis parecía que solamente iba trotando y deslizándose a lo largo de la pista, la gente que está tratando de funcionar afuera de sus territorios naturales, o de sus esferas de autoridad, tienen que luchar y trabajar mucho más fuerte, porque ellos jamás fueron diseñados para hacer las cosas que están haciendo. Ellos tal vez han tenido algún tipo de éxito exterior, pero en realidad, ellos no cuentan con paz, ni reposo en su interior; ellos no tienen la iluminación natural del espíritu, ni el entusiasmo derivado de ir en busca de los verdaderos deseos que se encuentran en el corazón de uno.
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Tú vas a tener un profundo sentido de satisfacción ¿Alguna vez te has puesto imaginar porque es que Jesús muy frecuentemente enseñó a las gentes usando ilustraciones que tenían que ver con la naturaleza? Jesús basó la mayoría de sus enseñanzas en lo natural, en las cosas que rodeaban la vida cotidiana, y en las operaciones que eran familiares para todas las gentes. Por ejemplo, Él se refirió a los lirios del campo y a las aves de los cielos, así como a la pesca y a la siembra de semillas. Continuamente, Jesús puso todo este tipo de ilustraciones como ejemplos, a fin de mostrarle a la gente la forma como la vida natural podría ser cuando ellos se encontraran fluyendo dentro de los propósitos del Dios Creador. En Mateo 6:25–30, Jesús dijo lo siguiente: Por eso les digo: No se preocupen por su vida, qué comerán o beberán; ni por su cuerpo, cómo se vestirán. ¿No tiene la vida más valor que la comida, y el cuerpo más que la ropa? Fíjense en las aves del cielo: no siembran ni cosechan ni almacenan en graneros; sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No valen ustedes mucho más que ellas? ¿Quién de ustedes, por mucho que se preocupe, puede añadir una sola hora al curso de su vida? ¿Y por qué se preocupan por la ropa? Observen cómo crecen los lirios del campo. No trabajan ni hilan; sin embargo, les digo que ni siquiera Salomón, con todo su esplendor, se vestía como uno de ellos. Si así viste Dios a la hierba que hoy está en el campo y mañana es arrojada al horno, ¿no hará mucho más por ustedes, gente de poca fe?
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Le tomó trece años al rey Salomón edificar su palacio real y adornarlo con cedro, bronce, y oro. Él tuvo una gran de multitud de trabajadores, a fin de mantener todas estas operaciones en orden. Él acumuló oro y plata, trayendo prosperidad y riqueza a su ciudad. Él edificó ese templo tan asombroso. Una vez que todo había sido acabado, gente famosa de muchas otras naciones, tales como la reina de Seba, vinieron de lugares muy lejanos para ver a Salomón en toda su gloria, con su sabiduría y todas sus riquezas. Sin embargo, de hecho Jesús dijo, “Este lirio se encuentra aquí hoy en día pero desaparece el día de mañana, y su belleza es mucho mejor que todo el esplendor de Salomón y todo su reino”. ¿Qué es lo que hace que sea tan fácil para el lirio del campo hacer su trabajo y manifestar su propósito? Es que el lirio fue creado para ser un lirio. Los deleites de muchas gentes se han convertido realmente en su autoridad personal Los árboles no tratan de crecer. Los pájaros no tratan de volar. Los peces no tratan de nadar. Todas estas habilidades son completamente naturales para ellos. En una forma similar, todo aquello para lo cual tú fuiste diseñado desde su nacimiento, tú estás autorizado para poder hacerlo; y se convierte en algo completamente normal para ti. Tú siempre vas a poder saber cuál es tu autoridad, debido a que va a ser algo que vas a disfrutar mientras que lo estás haciendo—o si no siempre lo vas a “disfrutar”, tú vas experimentar un sentimiento muy profundo de satisfacción, que se va a derivar de ello. En esta base, llegamos a la conclusión de que los placeres y deleites de muchas gentes muy probablemente pueden estar relacionados con su autoridad personal en
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esta vida. Ellos disfrutan las actividades en las que participan en su tiempo libre, mucho más de lo que ellos disfrutan lo que hacen en su trabajo. Esta es la razón de por qué ellos no pueden esperar para salir de su trabajo al final del día o de la semana, para dedicarse a hacer las cosas que les dan gran placer o deleite. Estas cosas placenteras o deleites son lo que ellos realmente quieren hacer. Ya sea que su trabajo les haga sentir como que están empujando una enorme roca hacia arriba de una pendiente muy inclinada, sus deleites y placeres los hacen sentir como que simplemente se están deslizando fácilmente hacia abajo de la pendiente. Todos estos placeres y deleites no son una actividad que resulte difícil para ellos; son excitantes, emocionantes, placenteros, y los llenan de Cuando sabes realización una vez que se encuenque te encuentras tran en ellos. Todo esto es algo natuhaciendo algo ral y divertido. Por lo tanto, todos para lo cual no estos placeres y deleites, revelan la fuiste diseñado verdadera autoridad y los dones que se encuentran dentro de estos indidesde tu nacimiento, tú viduos.
te vas a sentir molesto en ese trabajo actual.
Existe mucha gente en la tierra que se encuentra frustrada, deprimida, o desilusionada todos los días, debido a que tienen que ir a un trabajo para el cual ellos no están autorizados. Ellos no fueron diseñados desde su nacimiento para hacer esas cosas, y se sienten—y están— fuera del hogar. Yo pienso que esto es algo muy triste. Muchas gentes “que no están autorizadas” arrastran a otros alrededor de ellos. Tú tal vez te encuentras trabajando con algunas de estas gentes. Ellos se quejan
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acerca del trabajo, se quejan acerca del jefe, y se quejan acerca de ti. Ellos incluso se llegan a quejar acerca del clima, acerca de la forma como su automóvil está funcionando—acerca de todo. ¿Por qué? Ellos están tan miserables, debido a que no han sido capaces de encontrarse a sí mismos. La gente miserable es gente que se odia a sí misma. Algunas veces, a ellos no les gusta la gente que los rodea, debido a que les recuerda la realidad de ellos mismos—sus compañeros de trabajo, colegas, o miembros de familia tampoco están en la condición de saber quienes son en realidad estas personas. En contraste a esto, he podido encontrar gentes que han descubierto su autoridad natural, y han comenzado a ser el tipo de persona que fueron diseñados desde su nacimiento, y de repente se enamoran de todos y de todas las cosas que lo rodea. Todas aquellas cosas que solían molestarles ya no los molestan. Ellos se encuentran muy contentos debido a que ahora tienen una razón auténtica para vivir. Cuando tú conoces que estás haciendo algo para lo cual no fuiste diseñado desde tu nacimiento, tú te vas a sentir muy irritado y molesto en tu trabajo actual. Tú no te vas a sentir cómodo en ello. ¿Alguna vez has escuchado que alguien dice acerca de su trabajo, posición o medio ambiente, “Esto simplemente no es para mí”? ¿Qué es lo que ellos realmente quieren decir con esta expresión? El trabajo, posición, o medio ambiente los está encerrando y asfixiando completamente. Está acalambrando literalmente su estilo de vida. Los está deteniendo y les está impidiendo llegar a ser aquello para lo cual fueron diseñados desde su nacimiento. Es muy frustrante encontrarse en un lugar donde tú no puedes esperar para retirarte. La mayoría de la gente no quiere retirarse de hacer las cosas que aman. ¿Acaso
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tú deseas ser liberado de tu trabajo actual? ¿Acaso tú estás esperando que llegue el día en que empieces a recibir tu pensión de jubilación? Si éste es el caso, eso muy probablemente se debe, muy dentro de ti, a que tú no estás haciendo aquello para lo cual fuiste diseñado desde tu nacimiento. En adición a esto, cuando no te encuentras operando en tu territorio verdadero, otras gentes que operan en forma natural en ese territorio, van a llegar a intimidarte. ¿Recuerdas el encuentro que tuve con el tiburón mientras que me encontraba pescando? Ese tiburón me intimidó debido a que él se encontraba en su medio ambiente natural, y yo no estaba en el medio ambiente natural. Si tú estás tratando de hacer cosas para las cuales tú no fuiste diseñado desde tu nacimiento, entonces todas aquellas gentes que sí fueron diseñadas desde su nacimiento para hacer esto, van a constituir una amenaza para ti, aunque ellos no tengan la intención de amenazarte, debido a que tú te sientes completamente inadecuado. De nuevo, tú vas a tratar de hacer un esfuerzo sobrehumano para realizar lo que ellos están haciendo en forma completamente natural. Para que puedas manifestar la autoridad que Dios te ha dado, en primer lugar, tú necesitas preguntarte a ti mismo, “¿Acaso me encuentro fluyendo en forma natural con relación a mi esfera de dominio personal? ¿O acaso me encuentro completamente fuera de lugar?”.
2. Tu autoridad personal es muy valiosa En segundo lugar, tu vida es sumamente valiosa eternamente ante los ojos de tu Dios Creador. Tú fuiste creado a su imagen, Él te ama profundamente, y has sido redimido por Él. De la misma forma, tu autoridad personal o tarea es algo que tiene un valor inconmensurable ante los ojos de Dios.
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¿Acaso tú sabes—o te encuentras convencido—del valor que tienes ante Dios y con relación a sus propósitos para este mundo? Debes recordar que uno de los principios de autoridad consiste en que la intención con la cual se produjo y se diseñó un producto, determina el diseño general del producto. El autor o fabricante determina el diseño, las características, cualidades, y capacidad de ese producto. Todo esto se hace teniendo en mente el propósito para el cual ese producto ha sido creado. Por lo tanto, el autor también es el creador del valor y de la dignidad de ese producto. Quiero darte un vislumbre de lo La tierra asombroso que tú eres realmente, a necesita tu través de las verdades que son presentadas en el Salmo 139. Éste salmo, que propósito, tu fue escrito por el rey David, nos va a autoridad, y ayudar para que podamos entender el tus dones. valor de nuestra autoridad personal, la cual es única. La razón de por qué Dios dio a su Hijo Cristo Jesús para que muriera por ti, es que Dios conoce el tesoro que se encuentra dentro de ti. La autoridad que Dios colocó dentro de ti es tan valiosa, que Él no quiere que tú llegues a la tumba, sin que hayas tenido la oportunidad de poder manifestarla. No podemos permitir que el cementerio se convierta en el lugar donde enterramos el tesoro que Dios puso en nuestra vida. ¡Esta tierra necesita tu propósito, tu autoridad, y tu don! Tú fuiste creado en una forma maravillosa El Salmo 139:13 dice, “Tú creaste mis entrañas”. Dios creó tus “circuitos” íntimos, o sea, tus componentes; Dios hizo de ti una persona vital, hecha a su imagen, y te dio tu propósito.
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“Me formaste en el vientre de mi madre” (Salmo 193:13). Dios no sólo se limitó a crear tus entrañas, sino que Él también creó todo tu cuerpo. Después de que tú fuiste concebido, Dios te tejió dentro del vientre de tu madre, de acuerdo al diseño que Él había preparado para tu vida. “¡Te alabo porque soy una creación admirable! ¡Tus obras son maravillosas, y esto lo sé muy bien!” (versículo 14). Tú fuiste hecho “con temor”. Esto se refiere a un temor positivo, tal como la reverencia y la honra que le debemos a Dios. Tú fuiste hecho “en forma admirable”. La palabra hebrea de dónde se traduce “admirable” significa “distinguir”, “hacer una diferencia”, o “ser distinto”. Dios te hizo como una persona absolutamente única. Tú tal vez sientes que no eres perfecto, pero todas tus características físicas son parte de un plan de Dios. Cuando tú te miras en el espejo, tu primera declaración debería ser, “¡Admirable!”, debido a que tú fuiste hecho en una forma admirable y maravillosa. Tu temperamento, tu personalidad, tu estatura, tu rostro, el color de tu piel, e incluso todas las características que heredaste de tu familia, son usados por Dios con relación a tu autoridad personal. ¿Por qué? Debido a que tu propósito requería que tú fueras la persona que eres, y en la forma como tú eres. El profeta Isaías declaró lo siguiente: “A pesar de todo, Señor, tú eres nuestro Padre; nosotros somos el barro, y tú el alfarero. Todos somos obra de tu mano” (Isaías 64:8). El también declaró, “¿Acaso el barro le reclama al alfarero: ‘¡Fíjate en lo que haces!’?” (Isaías 45:9). Por lo tanto, no debemos rechazar lo que Dios ha hecho. No debemos hablar en contra de aquello que Dios llama bueno. No deberíamos comparar aquello que Dios llama bueno con lo que los hombres llaman bueno, debido a
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que los hombres no saben lo que realmente es bueno. Dios te hizo en una forma maravillosa. Tú tienes un propósito especial para tu vida “No estaba oculto de ti mi cuerpo cuando en secreto fui formado, y entretejido en las profundidades de la tierra. Tus ojos vieron mi embrión” (Salmo 139:15–16, lbla). Esto significa que toda tu estructura, tu cuerpo, no estaba escondido de Dios, mientras que tú eras formado “en secreto”. Los ojos de Dios están sobre todas las mujeres embarazadas y en sus hijos que todavía no han nacido. Éste la razón de por qué tenemos que tener mucho cuidado acerca de nuestro concepto que tiene que ver con el huevo fertilizado que se convierte en un ser humano. Tan pronto como el huevo y el esperma se unen, Dios imparte un espíritu eterno para que resida en esa “habitación”. Yo creo que Dios no permite que el esperma y el huevo se unan, a menos que Él tenga una razón y un propósito para ese ser humano. Independientemente de las circunstancias que estén rodeando esa concepción, esto es el resultado de un preconcepción. Dios ya ha preconcebido en su mente el hecho de que tiene que realizar algo en la tierra. Dios tiene algo que quiere realizar a través de ti, y por lo tanto, Él te creó para que tú llegues a hacerlo. Tú no eres el fruto de un error. Cada vez que un varón descarga su esperma, cerca de quinientos millones de espermas son eyaculados. Todos los quinientos millones de espermas se dirigen hacia el huevo, pero solamente uno llega a alcanzarlo. Cuatro cientos noventa y nueve millones de humanos potenciales no llegan a alcanzar ese huevo, debido a que aquello que se requiere en esta tierra te necesita solamente a ti. Esta es la razón por la
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cual yo creo que existe un sentido asombroso de destino en el interior de cada ser humano. Existe un clamor que dice, “Yo nací para realizar algo. Yo no sé qué es esto, ¡pero existe algo que yo debo hacer!”. ¿De dónde es que surge este clamor? Surge de un lugar que va más allá del intelecto y de tus emociones. Surge de un lugar tan lejano dentro de ti, que la Biblia lo denomina “abismo”: “Un abismo llama a otro abismo” (Salmo 42:7). ¿Y qué es lo que tú abismo profundo está clamando? Es Dios. Solo Dios puede responder a tu clamor. Este clamor solamente puede ser satisfecho en Dios, debido a que nadie conoce un producto como la persona que lo creó. Nadie conoce el material como el autor mismo. Nadie conoce la razón, mejor que el autor, de por qué algo fue hecho. Más allá de toda duda, este planeta necesita la autoridad personal que tú llevas dentro de ti. Lo mismo es verdad acerca de cualquier otro ser humano. Es una tragedia, cada vez que alguien muere a través de una sobredosis de drogas, o de un suicidio, o de cualquier otro tipo de abuso en contra de su propio cuerpo. Dios llora debido a que todas esas gentes nunca llegaron a descubrir quiénes eran verdaderamente. De la misma forma, cuando un bebé que no ha nacido todavía, es abortado, todo el cielo llora debido a que la tierra nunca va a poder recibir el don tan asombroso que Dios envió a través de esa criatura. ¿Acaso alguna vez te has puesto a imaginar qué hubiera sucedido si María, la madre de Jesús, hubiera tenido un aborto? En ese pesebre estaba un niño, que llevaba dentro de sí mismo la salvación para todo el mundo. O en otro caso, ¿qué hubiera sucedido si la madre de Moisés no lo hubiera protegido, y hubiera permitido que los soldados
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del faraón lo mataran? En esa canasta que se encontraba flotando a lo largo del río Nilo, se encontraba un niño que llevaba dentro de sí mismo, el liderazgo de la nación de Israel, y la misión de escribir los primeros cinco libros de la Biblia.
Tú ya has sido predestinado para revelar al mundo los planes y pensamientos escondidos de Dios, que Él ha colocado dentro de ti.
Cada día, yo camino con un sentido de una responsabilidad asombrosa, sabiendo que tengo que hacer aquello para lo cual fuí diseñado desde antes de nacer, y tengo que realizar todo esto antes de morir. Y tú también. Tú no fuiste creado solamente para vivir una vida de casualidad. Tú naciste para darle un aspecto único de vida a este planeta, y para hacer una contribución al mismo. Esa es tu área de autoridad; es la esfera de dominio en la cual tú tienes que ejercitar tu liderazgo. Tú eres un libro “best seller” que está esperando ser leído “Todo estaba ya escrito en tu libro; todos mis días se estaban diseñando, aunque no existía uno solo de ellos” (Salmo 139:16). Aún antes de que tú fueras concebido, Dios ya había “terminado” toda tu vida. Todo aquello que tú tenías que llegar a ser, fue ordenado y fue “escrito” aún antes del día que tú naciste. Esto significa que tú eres un libro best seller, que está esperando ser leído por la vida. Todo lo que tú estás supuesto a hacer, y a llegar a ser, y realizar, ya fue escrito en este “libro”, siendo Dios quien lo ha escrito como tu Autor. Tú ya has sido predestinado para revelar al mundo los pensamientos secretos y los planes de Dios, que Él ha colocado dentro de ti.
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“¡Cuán preciosos, oh Dios, me son tus pensamientos! ¡Cuán inmensa es la suma de ellos! Si me propusiera contarlos, sumarían más que los granos de arena” (Salmo 139:17–18). Yo creo que David, de hecho, estaba diciendo, “¡Cada vez que me pongo a pensar en lo que tú has hecho en mi vida, y acerca de los planes que tú escribiste en tu libro con relación a mí, este conocimiento es tan valioso para mí, que no tiene precio alguno, aunque no soy capaz de analizar todos tus pensamientos tan asombrosos!”. Los pensamientos que Dios tiene acerca de ti son tan asombrosos, que cualquier intento para tratar de entenderlos sería como tratar de contar los granos de arena que se encuentran en la playa—es algo completamente imposible. Lo que Dios piensa acerca de nosotros es tan asombroso, que nadie es capaz de calcularlo, o de poder comprenderlo. Ponte a pensar acerca de algunas de las gentes que tú conoces, y con quienes has tenido la oportunidad de crecer. ¿Acaso no existen algunas gentes que tú pensaste que nunca iban a tener éxito en la vida, pero que ahora tienen negocios sumamente exitosos? Existen gentes que la sociedad ha evaluado, y ha declarado que nunca van a ser buenos para nada, ni para nadie, y sin embargo, después de un tiempo, Dios realizó un milagro en sus vidas. Ellos entraron en contacto con su propia autoridad personal y sus dones, y se convirtieron en instrumentos poderosos para la sociedad. Yo encuentro este tipo de resultados como algo increíblemente asombroso. Esta es la razón de por qué las Escrituras dicen que los pensamientos de Dios con relación a nosotros son tan asombrosos, de tal manera que es imposible que podamos analizarlos. Para poder manifestar la autoridad que Dios te ha dado, tú nunca debes de discriminarte a ti
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mismo, sino al contrario, tienes que ponerte a descubrir todo aquello que Dios ha escrito acerca de ti.
3. Tu autoridad personal es auténtica Dios creó a todo el mundo con una esfera de dominio de autoridad, y es esa esfera de dominio donde tú manifiestas quien eres realmente. El objetivo del autor para ti es que llegues a ser auténtico, y tú llegas a ser una persona auténtica, cuando tú te conviertes en aquello para lo cual fuiste diseñado. Yo he podido conocer a través de los años, miles de gentes que no están autorizadas, las cuales se encontraban haciendo algo para lo cual no fueron diseñados, ni “fabricados” desde su nacimiento, y ellos se encuentran llenos de frustración. La mayoría de las gentes viven su vida, mueren, y son enterrados sin que nunca hayan llegado a tener la oportunidad de “mostrarse” en esta tierra, debido a que nunca fueron auténticos. Ellos vivieron por sesenta, setenta, ochenta, o más años, pero nunca nadie puede “verlos”—porque ellos nunca pudieron tener testimonio de la manifestación de quienes estas gentes eran realmente en su interior. Ellos son meras impresiones de lo que otras gentes han puesto, tal y como si se tratara de un revestimiento o cubierta artificial. Si tú te comparas a ti mismo con otros, y te sientes mucho muy inferior a ellos, hasta el punto de que tú tienes que tratar de imitarlos, y entonces, cuando tú tratas de hablar como lo hacen otras gentes, de mirarte cómo se miran otras gentes, y de hacer las cosas como otras gentes las hacen, tú no estás siendo auténtico. El hecho de ser auténtico significa manifestar quién eres tú realmente, y ejercitar completamente tus propios dones. ¿Eres tú una persona auténtica? ¿Acaso tú has
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Cuando descubres aquello para lo cual fuiste diseñado desde tu nacimiento, y te pones a funcionar en ello, esto se convierte en algo tan natural que no va a ser “tu segunda naturaleza”, sino “tu primera naturaleza”.
llegado a reconocer todo aquello que no es auténtico acerca de ti mismo, y has podido desprenderte de toda esa capa de revestimiento que tenías en tu vida?
Es una paradoja el hecho de que mientras ciertos tipos de gentes se encuentran intimidados, o guardan resentimientos en contra de aquellos que son auténticos, al mismo tiempo, ninguna otra cosa en el mundo atrae más gente, que una persona que es verdaderamente auténtica. Las gentes que son auténticas atraen a otros que pueden ver algo fresco y lleno de confianza en ellos, y también llegan a sentir la aceptación de parte de otras gentes, debido a que ya no se encuentran en competencia con otras personas. Debes decirte a ti mismo, Tengo que convertirme en una persona auténtica antes de morir. A medida que voy en busca de mi autoridad inherente, otras gentes van a ser capaces de ver quién soy yo realmente. En este momento, yo todavía estoy vistiendo la imagen de otras gentes, pero cuando comience a vivir de acuerdo a mi autoridad, y dentro de mi esfera de dominio personal, esto va a remover todo el recubrimiento, y va a permitir que todo aquello que se encuentra dentro de mí sea revelado. Una vez más, el hecho de ser una persona auténtica consiste simplemente en ser, en forma natural, aquello que tú eres. ¿Acaso alguna vez has escuchado que alguien exclama, “¡Mira! ¿Puedes ver ese pájaro? ¡Está volando!”? No. Los pájaros vuelan encima de nuestras
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cabezas todos los días, de tal manera que muy frecuentemente ni siquiera llegamos a notarlos. Los pájaros están autorizados para volar, y son sumamente auténticos cuando se encuentran haciendo aquello para lo cual fueron diseñados. En forma similar, la autoridad personal es algo inherente, natural, y correcto. Cuando tú llegas a encontrar aquello para lo cual tú fuiste diseñado desde el nacimiento, y comienzas a funcionar en ello, esto va a convertirse en algo tan natural que no va a ser tú “segunda naturaleza”, sino que se va a convertir en tú “primera naturaleza”. Tal vez, cuando tú tienes la oportunidad de ver gentes que se encuentran en su esfera de dominio natural, o que se encuentran funcionando dentro de sus cualidades, algunas veces tú llegas a pensar, A mí me gustaría poder tocar el piano de esa manera. A mí me gustaría poder escribir algo como eso. A mí me gustaría poder hablar de esa manera. A mí me gustaría poder pintar algo como eso. A mí me gustaría, a mí me gustaría.... Tú tienes que dejar de estar deseando todo eso, y ponerte a descubrir tu propio territorio. Esta es la forma de poder llegar a ser una persona auténtica. Esta es la forma en que puedes llegar a manifestar tu autoridad personal.
4. Tu autoridad personal florece dentro del medio ambiente correcto Las semillas se convierten en árboles debido a que su potencial es algo que en forma natural se encuentra dentro de ellas. Todo lo que ellas necesitan es el medio ambiente adecuado y los nutrientes correctos. De igual manera, el hecho de manifestar tu autoridad personal requiere que tú nutras el medio ambiente que sea
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adecuado para ello. El hecho de poner atención a este aspecto de la autoridad, te va a permitir florecer y llevar al máximo tu efectividad. Debes crear el medio ambiente que sea óptimo para ti Tú puedes crear el medio ambiente correcto, por medio de remover todo aquello que te ha estado distrayendo, y que es superfluo para tu autoridad, y reemplazarlo con todo aquello que te va a edificar en el contexto de tu autoridad. Por ejemplo, si tú quieres desarrollar el don que tú tienes para fabricar muebles, pero pasas todo el tiempo mirando programas de televisión, tú no vas a llegar a realizar tu potencial en la vida. Al contrario, tú puedes ir a visitar, y observar otros fabricantes de muebles mientras que realizan sus obras, puedes hacer investigaciones con relación al diseño de muebles, puedes encontrar un lugar donde tú puedas trabajar, y muchas otras cosas como estas. Tú también puedes crear el medio ambiente que sea correcto para ti, por medio de buscar el apoyo y la motivación de todos aquellos que te conocen, y que van a poder afirmar tus dones, y también, por medio de obtener conocimientos adicionales, entrenamiento, y habilidades que te ayuden a llevar tus habilidades al máximo. Además de esto, tu autoridad personal muy frecuentemente va a crear un medio ambiente en el cual puede remontarse, a medida que tú operas dentro de tu esfera de dominio personal. Un colega me dijo que durante un viaje de negocios, ella se encontraba en un aeropuerto yendo de una salida a la siguiente, porque tenía que conectar con otro vuelo, cuando de repente, ella pudo mirar un baño de mujeres que tenía un anuncio que
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decía lo siguiente: “Este baño fue limpiado por Valeria”. Cuando ella caminó dentro del baño, ella pudo escuchar a Valeria que se encontraba cantando con mucho júbilo. “Éste es un día muy bueno. Depende lo que tú hagas de este día y de ella”—siendo “ella” que se estaba refiriendo a la vida. Valeria saludaba a cada mujer que entraba con una expresión llena de júbilo, “¡Bienvenida al baño feliz de Valeria!”. El lugar se encontraba reluciendo de limpieza, y de igual forma, se encontraba la personalidad de Valeria. En el mundo tan agitado, cansado, y apresurado de un aeropuerto tan importante, Valeria motivaba el espíritu de la gente, mientras que al mismo tiempo estaba proveyendo un servicio que era tan necesario. Ella estaba creando su propio medio ambiente tan positivo, ¡y ella estaba supervisando ese baño tan grande con una verdadera autoridad! Las gentes que han llegado a descubrir su autoridad personal, y han podido crear un medio ambiente óptimo para ellas, van a ponerse a trabajar, incluso si no les pagan por hacerlo. Cuando tú te encuentras haciendo aquello para lo cual fuiste diseñado desde tu nacimiento, tú no necesitas ningún tipo de motivación externa para trabajar durante largos periodos de tiempo. Las gentes tienen que recordarte cuando ha llegado la hora del almuerzo o cuando es la hora para irse a casa. Cuando tú has encontrado tu verdadero trabajo, tú quieres permanecer en ello todo el día y toda la noche. La autoridad correcta y el medio ambiente adecuado te están dando una motivación y satisfacción que son muy poderosas. El medio ambiente “equivocado” puede convertirse en tú “pre-ocupación” Las gentes que se encuentran en trabajos o en circunstancias, las cuales no tienen nada que ver con su
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autoridad personal, en realidad, no tienen ocupación alguna; ellos tienen pre-ocupaciones. Cuando tú llegas a encontrar tu verdadera vocación, ya nunca más vas a tener que estar “pre-ocupado”, sino al contrario, vas a estar “ocupado”—interesado, completamente absorto, y dedicado al máximo con tu propósito. Sería una cosa terrible nunca poder ir más allá de tu pre-ocupación. Sin embargo, yo creo que el Dios Creador, en su sabiduría, algunas veces nos va a permitir estar “preocupados” en ciertos trabajos durante cierto tiempo, a fin de que podamos ganar experiencia y habilidades, las cuales seremos capaces de usar más tarde en nuestras verdaderas ocupaciones. De esta manera, tu preocupación es tu trabajo, pero tu ocupación es tú obra real. La mayoría de la gente no Tú puedes deshacerte va a trabajar en una obra. Ellos de la frustración que simplemente van a un trabajo. Si sientes por tu trabajo tú te encuentras en un trabajo que no se encuentra alineado actual, a través de con tu propósito, entonces debes enfocarte en aquello considerar que eso es algo solapara lo cual te mente temporal. Tus supervisopuede preparar—el res y compañeros de trabajo no conocen quién eres tú realmente conocimiento, la en lo interior, pero Dios si lo sabe. experiencia, y las Cada posición de pre-ocupación habilidades que puedes ganar por en la vida es solamente temporal, hasta que tú llegas a alcanmedio de él. zar el punto donde te encuentras en una posición en que puedes manifestar la verdadera persona que eres. Si tu trabajo actual es una pre-ocupación, no debes solamente renunciar y abandonarlo, sin contar
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con ningunos planes específicos. Tú puedes ayudar a la frustración que sientes en tu trabajo, por medio de enfocarte en aquellas cosas en las cuales este trabajo temporal te puede preparar—para que puedas contar con el conocimiento, experiencia, y habilidades que tú estás obteniendo a través de él. Tú puedes ir cada día a tu lugar de trabajo, diciéndote a ti mismo, Yo voy a descubrir mi autoridad, mi tarea, y entonces, voy a relacionar este trabajo a mi verdadera obra, aprendiendo todo lo que yo pueda aquí, y que pueda ayudarme, para poder moverme en la dirección adónde realmente quiero ir. Debes esperar tu manifestación con mucha paciencia Otro punto que debes mantener en mente, es que tú tal vez llegues a florecer “mucho más tarde”. A algunas personas les toma más tiempo que otras, para que puedan llegar a manifestar sus habilidades y dones latentes, por diferentes razones. Puede ser que toda la combinación de experiencias de tu vida, y no solamente tus “pre-ocupaciones”, te han estado preparando para el tiempo cuando tú te vas encontrar en el medio ambiente correcto, entre la gente adecuada, y entonces va a ser que tú autoridad personal va a despegar. De nuevo, este va a ser un medio ambiente donde tú vas a correr libremente con todos tus dones, y lo más seguro, es que tu progreso y avance van a crecer en forma exponencial, debido a que tú has estado preparándote para este momento durante mucho tiempo. Por lo tanto, si todavía te encuentras nutriendo el conocimiento y las habilidades que te van a permitir llegar a manifestar completamente tu autoridad personal, debes ser paciente contigo mismo y con tus circunstancias, y debes darle gracias a tu Dios Creador por autorizarte este, que es su tiempo perfecto para tu vida.
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5. Tu autoridad personal está caracterizada por la humildad La gente que conoce y que manifiesta su autoridad personal, no son gentes arrogantes con relación a sus realizaciones; ellos no van por todos lados poniendo sus éxitos en las caras de otras gentes, como si ellos sintieran que son muy superiores a los demás. Mientras ellos disfrutan su trabajo, ellos también son humildes acerca de esto, debido a que ellos saben que no se crearon a sí mismos, sino que todos sus dones les han sido dados por Dios. Cuando tú te encuentras operando en tu autoridad personal, vas experimentar una gran realización personal, y el gozo de estar trabajando dentro de tu esfera de dominio. No hay nada malo con esto. ¡Es algo muy natural poder disfrutar aquello para lo cual tú fuiste diseñado! Pero todos aquellos que mantienen su autoridad personal en perspectiva, nunca buscan lucirse. Igual que Carl Lewis, ellos son personas muy equilibradas. En adición a esto, ellos son capaces de someterse a la autoridad de otros en su medio ambiente, debido a que ellos reconocen los dones tan valiosos que todos han recibido.
¿Acaso tú has podido lanzarte al máximo de tu capacidad? Los cuatro principios fundamentales y tú En el capítulo uno, yo enlisté cuatro principios fundamentales para poder entender la autoridad, y para poder entrar en el poder de la esfera de tu dominio personal, los cuales hemos estado explorando en este libro. Ahora, vamos a considerar todos estos, a la luz de tu autoridad personal específica.
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El principio del Autor. El único que conoce el propósito y función verdadera y original de un producto es el autor. ¿Acaso tú te encuentras conectado al Autor de la Vida, de tal manera que puedes descubrir el propósito y autoridad que Él ha colocado muy profundamente dentro de ti? Éste es el primer paso y el más importante, a fin de que tú puedas manifestar tu autoridad personal. La autenticidad comienza con el hecho de ser conectado con el Dios Creador a través de Cristo Jesús, quien es el Distribuidor Autorizado, y por medio de desear vivir de acuerdo a los principios y estándares que Él ha establecido. Dios es la realidad. Jesús dijo, “Yo soy el camino, la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”. (Juan 14:6, rvr). No le va a hacer mucho bien a la búsqueda de tu autoridad personal, si tú te encuentras dedicado a medias a aquel en cuya imagen tú fuiste creado, a aquel que te ama tan profundamente, y que ha colocado dones y sueños tan maravillosos dentro de ti. Incluso aunque tú fueras a ejercitar ciertos dones inherentes y llegaras a ser muy exitoso desde una perspectiva externa, tú verdaderamente no estarías reflejando todo lo que Dios ha colocado dentro de ti, y todo lo que Él podría hacer con estos dones, si fueran usados para sus propósitos y para honrarlo solamente a Él. Tal y como Pablo escribió, “Al que puede hacer muchísimo más que todo lo que podamos imaginarnos o pedir, por el poder que obra eficazmente en nosotros” (Efesios 3:20). Una vez que tú te encuentras conectado con el Dios Creador, debes permanecer conectado con Él por medio de leer su Palabra, y por medio de hablar con Él, lo que también es conocido como oración. A medida que pláticas con Dios, debes pedirle que haga tu autoridad personal
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algo muy claro para ti. Dios te creó, y Él sabe todo lo que puso dentro de ti, y que tú tienes que hacer a favor de tu generación. “Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica” (Efesios 2:10, se añadió énfasis). Entonces, tienes que anticipar sus respuestas, entregarle todo lo que Él ha colocado dentro de ti, ¡y ver todo lo que va a suceder! El principio de la autorización. La autorización es la transferencia legítima de poder a un representante, para que sea usada específicamente con el propósito para el cual fue deleCuando llegas a gada. Aquel que recibe el poder descubrir aquello delegado está consciente de que no para lo cual fuiste es dueño de aquello que recibió.
creado, Dios El Autor puso algo dentro de ti espera que uses ese y Él quiere ver esto manifestado en conocimiento para esta tierra. Tu autoridad personal elevarte al máximo. es la autorización del Dios Creador
para que representes su imagen, deseos, ideas, y principios en este mundo. Tú naciste con la autoridad para poder ejecutar una tarea específica, y solamente tú puedes realizar la en la manera como fuiste diseñado desde antes de nacer. Cuando tú llegas a descubrir aquello para lo cual tú fuiste creado, entonces Dios espera que tú uses ese descubrimiento para alcanzar tu máximo potencial. Tu autoridad personal entonces, va hacer ofrendada a Dios con toda gratitud. El poder o el apoyo, para esta autoridad, consiste en la mezcla única de dones inherentes, habilidades, y perspectivas, que tú posees a fin de poder llegar a realizar el propósito para el cual fuiste creado. A través de
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la restauración provista por el Distribuidor Autorizado, el Dios Creador también nos ha dado su propio Espíritu Santo, para que viva dentro de nosotros y para que nos capacite de tal manera, que podamos realizar nuestros propósitos. Éste es el don máximo de su representación en nuestra vida, y necesitamos seguir la guía del Espíritu Santo que se encuentra dentro de nosotros. Por lo tanto, la autorización es el derecho legal y la libertad dada por el Autor a su creación, para ejercitar y manifestar la habilidad o poder que Él le otorgó. ¿Acaso tú posees la mentalidad que reconoce que tus dones y habilidades han sido autorizados por el Dios Creador para que sean utilizados a fin de realizar sus propósitos en este mundo? Hasta que lleguemos a intercambiar la idea de nuestra ambición egoísta, a cambio de un espíritu servicial desinteresado, no vamos a ser capaces de manifestar verdaderamente nuestra autoridad personal. El principio de la autenticidad. La autoridad inherente se encuentra en el propósito o tarea que uno tiene en este mundo. Tú tal vez vas encontrar que tienes más de una tarea en diferentes ocasiones de tu vida, dentro de la misma esfera de dominio o con otras esferas de dominio que están relacionadas. Tú debes conocer tu área o áreas de autoridad, y por lo tanto, tienes que descubrir quién eres tú auténticamente, de tal manera que tú seas muy fiel en realizar aquello para lo cual estás autorizado. ¿Qué tan bien conoces tu área o áreas de autoridad? Si tú te encuentras bien familiarizado con esa esfera personal de dominio, ¿has estado siendo fiel en operar dentro de la misma? ¿Qué es lo que puede estar impidiéndote hacer esto, y como es que tú puedes arreglarlo? El principio de la autoridad. Un autor incorpora en forma natural dentro de la hechura de su producto, la
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capacidad—o la autoridad y el poder—para realizar, para producir, y para cumplir con su propósito. Tú naciste con una autoridad delegada. Tu autoridad es el don divino, tarea divina, pasión divina, y contribución, por la cual tú fuiste colocado en esta tierra, y que tienes que compartir con toda la humanidad. Nadie puede robártela, nadie puede obstaculizarla, devaluarla, o detenerla, a menos que tú se los permitas. ¿Cómo es que tú vas a servir al mundo a través de tu don?
El principio de la vida El principio de la vida para cada ser humano consiste en volverse a conectar con el Autor, descubrir su autoridad personal, convertirse en una persona auténtica, y llegar a realizar aquello para lo cual has sido autorizado. Espero que vas a guardar muy dentro de tu corazón todas estas verdades que tienen que ver con manifestar tu autoridad personal. Para mí, este conocimiento fue el resultado de un proceso de volverme a conectar con el Dios Creador, estudiar la Palabra de Dios, a través de las experiencias de la vida, por medio de leer una multitud de libros, y a través de hablar con muchas gentes. Yo quiero hacer este proceso algo mucho más fácil para ti, y esta es la razón de por qué he escrito este libro. Yo quiero que tú puedas descubrir la libertad y el gozo de operar en tu esfera de dominio personal. Por lo tanto, a continuación vamos explorar los beneficios que vas a recibir de ejercitar la autoridad que Dios te ha dado.
Capítulo ocho
Beneficios de vivir en tu autoridad personal La libertad de ser la persona, tal y como . originalmente fuiste creado
E
n este capítulo, voy a proveer una perspectiva de los beneficios tan tremendos que tú vas experimentar, a medida que tú ejercitas tu autoridad personal, lo cual te va a otorgar la libertad de ser la persona tal y como fuiste creado originalmente. Entonces, en el siguiente capítulo, te voy a mostrar la forma cómo puedes descubrir tu autoridad personal, a fin de asegurar que vas a comenzar a recibir todos estos beneficios.
Tú eres un original Todas las personas han nacido siendo un original, pero la mayoría de la gente termina convirtiéndose en simples copias. El mundo tiene tantos duplicados, que es sumamente difícil poder encontrar un original que ande por ahí. Las gentes “normales” son las copias. Cuando tú manifiestas tu autoridad personal, tú no sólo eres una variación de alguien más. Tú sabes quién eres verdaderamente, y esta es la clave de tu originalidad. Existe solamente una persona que es como único ejemplar de ti, y tú puedes llevar esto al máximo, expresando 201
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tu diseño, el cuál es único. Tú pones en efecto la visión y los objetivos que Dios te ha dado para tu vida, aunque éstos pueden ser diferentes de los objetivos y visiones de la gente que te rodea.
Tú conoces tu valor intrínseco Mientras que la mayoría la gente está luchando para poder encontrar un sentido de importancia personal para su vida, tú puedes entender que tu importancia se deriva de tu autoridad personal inherente, y del amor de Aquel que te creó. Debido a que tú te encuentras consciente de tu valor intrínseco, tu vida está llena de esperanza y propósito. Tú no sucumbes ante la incertidumbre con relación a tu valor y dignidad, debido a que puedes reconocer que tú posees una importancia tremenda para tu generación, y esto te aísla de todos los dardos de la negatividad y de la crítica, que puedan venir en contra tuya.
Tú experimentas la realización personal A medida que tú vives de acuerdo a tu autoridad personal, estás experimentando el contentamiento y la gratificación que se derivan de servir al mundo, a través de tus dones naturales y de tu propósito inherente. Tú tienes la certeza de que no estás malgastando tu vida, sino al contrario, estás usando tu tiempo, talentos, experiencia, y energía en las mejores formas posibles.
Tú posees una confianza genuina Debido a que tú sabes que estás autorizado por tu Dios Creador, tú te mueves hacia adelante con confianza, de tal manera que eres capaz de realizar todo aquello para lo cual fuiste diseñado en esta tierra, desde tu nacimiento. Tú tienes valor, tomas riesgos, y expresas tu creatividad, pero nunca llegas a “hacer experimentos”
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con tu vida. Tú tienes una razón específica para vivir, y vas en busca de ella con todo propósito. En adición a esto, tú no te estás imaginando o preguntando si acaso aquello que estás buscando va a funcionar; tú sabes que si va a funcionar, debido a que fuiste creado para realizarlo. En primer lugar, tú tienes confianza en tus habilidades naturales inherentes. Incluso si lo que tú estás tratando de hacer falla veinte veces, tú sabes que eventualmente va a tener éxito. Tú interpretas los fracasos solo como una escuela temporal que te enseña lecciones de carácter, habilidad, y perspectiva. Tú nunca te rindes; tú solamente descansas un poco antes de comenzar otra vez. Más aún, tú te encuentras confiado de que todos los recursos que necesitas van a estar disponibles. ¿Por qué? Porque tú crees que todas las personas están supuestas a ser prósperas—teniendo más de lo necesario para ti mismo—a través del ejercicio de tus dones, de tal manera que todos estos recursos pueden ser reinvertidos en tu propósito, y también pueden ser compartidos con todos aquellos que se encuentran en algún tipo de necesidad: “Unos dan a manos llenas, y reciben más de lo que dan; otros ni sus deudas pagan, y acaban en la miseria. El que es generoso prospera; el que reanima será reanimado” (Proverbios 11:24–25).
Tú te encuentras completamente libre de todo tipo de competencia con otras personas Por medio de ejercitar tu autoridad personal, tú te estás estableciendo a ti mismo como único y genuino, y esta realidad contraataca cualquier pensamiento momentáneo que tú tengas con relación a competir con otros, a fin de confirmar tu propio valor y lugar en el mundo. Debido a que tú sabes quien eres, tú no puedes
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ser manipulado fácilmente por todos aquellos que quieren usarte. Tú no estás buscando inflar tu ego, derrotar a la competencia, o menospreciar a otras personas. Tú solamente quieres manifestar quién eres tú verdaderamente en el cumplimiento del propósito que Dios te ha dado. Por medio
de ejercer tu autoridad personal, estás estableciéndote como una persona única y genuina.
De igual manera, tú no vas a ser intimidado por nadie. Nadie puede amenazar tu verdadera autoridad— aunque algunas gentes van a intentar hacerlo—debido a que tú no estás tratando de ganar la competencia en contra de ellos; tú solamente estás siendo la persona que eres.
También sabes que si tú tratas de usar algún tipo de manipulación o fuerza, para obligar a otras gentes a que confirmen las ideas que tú tienes para ellos, tú vas estar obrando en contra de los propósitos del Dios Creador. Tú has aprendido que el Dios Creador quiere que tú despiertes y desarrolles todas tus habilidades y tú llamamiento, y que te mantengas alejado de los negocios que le corresponden a otras gentes, de tal manera que tú puedas eliminar cualquier tipo de necesidad que hayas percibido y que te coloqué en una rivalidad abierta o sutil en contra de ellos. A medida que haces esto, vas a ser capacitado para obrar de acuerdo a tu propia autoridad.
Tú eres libre y no tienes que compararte con otras personas Debido a que tú puedes reconocer que eres distinto de todos los demás con relación a tu autoridad, tú no necesitas compararte con nadie más. Tú no tienes que
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estar revisando el progreso que has hecho en la vida, con relación a otros, y tampoco tienes que estar juzgando si ellos se encuentran adelante o detrás de ti, y tampoco tienes que comparar los resultados de tu trabajo en contra de el o de ellos. Tú tal vez has podido aprender nuevas habilidades y técnicas, como resultado de estar observando otras gentes que tienen dones y habilidades que son similares a las tuyas, de tal manera que puedes crecer en efectividad dentro de tu esfera de dominio personal. Pero este tipo de observación no es con el propósito de ejercer comparaciones; es una forma de asesoramiento. Tú estás siendo bendecido a medida que tú ejercitas tu autoridad personal, debido a que tú no sientes la necesidad de moldear a otras gentes para que sean exactamente cómo tú eres, y tú tampoco sientes la necesidad de imitar a otras gentes, a fin de poder alcanzar la misma altura que ellos tienen. Tu estilo, tu enfoqué, tu perspectiva, todo esto es absolutamente tuyo. Tú sabes que tienes una audiencia compuesta de uno solo, tu Dios Creador, y sabes que Él siempre te está motivando y echando porras.
Tú estás libre de todo tipo de celos Debido a que tú conoces tus valores intrínsecos y las características que te hacen distinto de los demás, y estás libre de todo tipo de competencia y comparación, tú no te sientes celoso de los demás. Si otras gentes pueden hacer ciertas cosas mejor de lo que tú puedes, esto no te hace sentirte que eres una persona de segunda clase. ¿Por qué no? De nuevo, porque eso no es un asunto que a ti te importe. Tú puedes hacer ciertas cosas y otras gentes no pueden. Tú puedes entender que de acuerdo a la forma como el Dios Creador diseñó el mundo, la autoridad de los unos complementa la autoridad de los otros,
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y también sabes que los problemas comienzan cuando la gente siente que los demás tienen algo mucho más grande de lo que ellos poseen, y que deberían ser ellos quienes poseyeran eso. Tú nunca pierdes la parte genuina que eres tú, debido a los celos, porque sabes que esa parte consiste en el único “tú” que tiene autoridad verdadera. Todo aquello para lo cual tú fuiste diseñado desde el nacimiento, nadie más puede llevarlo a cabo de la forma como tú puedes, con tu personalidad, tu perspectiva, y tu experiencia. Tú puedes reconocer que el hecho de sentirte celoso de alguien más, que desde su nacimiento fue diseñado para hacer algo que tú no puedes, o para realizarlo en una medida diferente de la tuya, esto consiste en un total desperdicio de tiempo. Al contrario, ¡tú recurres a tu propia autoridad y la pones a funcionar!
Tú no tienes que tener miedo Debido a que tú sabes que fuiste diseñado desde tu nacimiento para realizar algo específico, y confiando en tu habilidad para poder llevarlo a cabo, tú no tienes miedo del fracaso, ni de ninguna persona que pueda criticarte, o que intente impedir que realices lo que estás haciendo. Tú tienes tal confianza con relación a tu llamamiento, que esto te impulsa hacia delante con anticipación y propósito, sin importar que sea lo que suceda. Como una persona que está operando bajo autorización, tú encuentras que el hecho de llevar a la realización tu autoridad personal es algo que puedes disfrutar, y que no produce ningún tipo de ansiedad. Incluso con las presiones que son inevitables, con las luchas y responsabilidades de la vida, tú puedes dormir muy bien en las noches, debido a que todo ese tipo de dificultades, a final de cuentas, no son problema tuyo. Tú te
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encuentras funcionando bajo la autoridad delegada de tu Dios Creador, y Él va a abrir el camino para que tú puedas hacer aquello que estás supuesto a realizar. Tu trabajo consiste en hacer aquello para lo cual tú fuiste diseñado, y la Autoridad que se encuentra arriba de ti, es responsable por todo lo demás, incluyendo los resultados de tus esfuerzos.
Tú posees pasión y motivación internamente Tu autoridad produce automáticamente una pasión por la vida, debido a que opera en medio de tus deseos y visión más íntimos que tienes con relación al futuro. Esto te da una tremenda motivación interna para que puedas actuar en tu propósito y en tus dones, y que puedas llegar a ver que tu visión se convierte en una realidad. A medida que tú funcionas dentro de tu esfera de dominio personal, vas a exhibir cualidades de una persona independiente. Tú no tienes que esperar que alguien más te presione para que comiences a usar tus dones o para qué trabajes con relación a tus objetivos; al contrario, tú no puedes esperar para levantarte por las mañanas, y continuar trabajando en ellos. Tu motivación interna y tu pasión también alimentan una actitud de perseverancia dentro de ti. No importa que tanto tiempo se lleve para desarrollar tus habilidades naturales, poner tus planes en acción, o poder ver resultados, tú sigues persistiendo y creyendo, mientras que continúas moviéndote hacia delante.
Tú eres auténtico La combinación de todo lo anterior te convierte en una persona auténtica, lo cual significa que tú expresas realmente quién eres, reflejando tus sueños, ideas, y creatividad. Tú te conoces a ti mismo muy bien, y actúas
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en forma consistente con ese conocimiento, usando tus dones para poder manifestar el tesoro que Dios ha escondido en lo más profundo de tu ser, y que Él quiere que tú lo uses para servir al mundo. Tú también mantienes tu autenticidad, debido a que estás consciente que esto es vital para que puedas ejercitar tu verdadera autoridad, y que la puedas mantener en forma efectiva. ¿Acaso estás listo para recibir todos los beneficios mencionados anteriormente en tu vida? En el capítulo siguiente, vamos a mirar algunas preguntas específicas y muy prácticas, que te van a ayudar a confirmar tu propia autoridad personal.
Capítulo nueve
Doce claves para poder descubrir la autoridad personal Para poder ejercitar la autoridad personal, . tú debes conocerte a ti mismo
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illones de gentes usan la red social en la Internet llamada Facebook. En ella, mantienen sus perfiles con todo lujo de detalles acerca de su vida, así como fotos de familia y amigos, listas de sus libros favoritos, los resultados de cuestionarios de cultura popular que ellos han tomado, y muchas cosas más. Pero con toda esta información, yo me pregunto cómo es que muchos de todos estos millones, todavía no han sido capaces de llegar a conocerse a sí mismos, así como la autoridad personal que Dios ha colocado dentro de cada uno de ellos. El mundo se encuentra lleno con gente que no es auténtica, y que están realizando todo tipo de cosas no autorizadas. Ellos tal vez sean sinceros y con buenas intenciones en todas sus tareas, pero una persona puede ser muy sincera, y también nada auténtica al mismo tiempo. Quiero motivarte para que tomes el tiempo necesario para asegurar que verdaderamente te conoces a ti mismo, debido a que es imposible poder ejercitar la autoridad personal, sino hasta que tú seas capaz de hacer 209
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esto. Debido a que el Dios Creador ha colocado tu autoridad dentro de ti, cuando tú lo ejercites a través de la guía y el poder del Espíritu Santo que vive dentro de ti, vas a poder aprender mucho acerca de ti mismo, por medio de examinar tus pensamientos, ideas, y pasiones personales. Tu autoridad personal puede ser descrita usando varios términos, tales como la visión para tu vida o tu propósito, tu medio ambiente de liderazgo, y tus dones. Puede ser identificada a través de tus deseos naturales, y a través de todo aquello que tú sientes como tu tarea inherente en esta vida. Todas estas palabras nos ayudan para poder entender el concepto de la autoridad personal, a medida que se manifiesta en diferentes formas dentro de tu vida.
Desarrolla un perfil de tu autoridad personal Este capítulo incluye preguntas para que tú puedas reflexionar en ellas, y que las puedas contestar, todo lo cual yo creo que se va a convertir en un ejercicio divertido y muy inspirador para ti. El hecho de ponerte a pensar acerca de estas preguntas te va a despertar en algunos sueños o visiones que has tenido escondidos. Tú vas a tener que sacar estas respuestas a partir de tus deseos y pasiones más profundos, y vas a tener que imaginar posibilidades generadas a partir de ideas que viven en lo más profundo de tu corazón. De esta manera, vas a poder moverte del simple hecho de pensar acerca de la autoridad personal, o de simplemente desear poder ejercitarla, a la realidad de estar operando en ella. Para resumir tú “investigación”, quiero sugerirte que desarrolles un perfil de tu autoridad personal. Una muestra de este tipo de perfil se encuentra incluida en
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la parte final de este libro. Éste perfil en forma general debería ser reservado para ti mismo, a fin de ayudarte a que puedas entender tu autoridad. La gente puede meterse en muchos problemas cuando ellos comienzan a consultar a otras gentes con relación a descubrirse a sí mismos, debido a que pueden sucumbir ante la opinión de otra persona, en lugar de ir en busca de aquello que verdaderamente es auténtico en ellos. Tú tienes que protegerte a ti mismo de no caer en esto. Por el otro lado, tú tal vez vas a querer mostrar tu perfil a tu esposa o a uno o dos amigos muy cercanos, debido a que algunas veces las otras personas que nos conocen muy bien, también pueden ayudarnos a ver aspectos de nosotros mismos que nosotros no somos capaces de ver, tales como los dones, talentos, e intereses que muchas veces hemos dejado de mirar, o aquellas habilidades que tal vez hemos olvidado, y que en algún punto de nuestro pasado, las llegamos a ejercitar. Ellos tal vez puedan decirte, “¿Recuerdas cuando tú tenías mucha pasión por hacer _______________ cuando eras niño?”. O tal vez te puedan decir, “Yo recuerdo que tú eras muy diestro haciendo _______________”. Debes usar discreción y no compartir mucho, sino hasta que tú hayas llegado a la mayoría de tus propias conclusiones, de tal manera que tú no seas influenciado en extremo por otras gentes. Entonces, debes compartir tus descubrimientos con dos o tres otras personas, si acaso deseas hacer esto.
¿Qué tan bien te conoces a ti mismo? Debes preguntarte a ti mismo las siguientes doce preguntas que son claves, tomándote el tiempo necesario para recordar el pasado, para evaluar tus dones actuales, tus habilidades y preferencias, y para poder tener una visión del futuro. Debes registrar tus conclusiones en
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una libreta o dentro de un fólder de tu computadora, después de que hayas usado la forma muestra de perfil para descubrir tu autoridad personal. También debes considerar todo aquello que tal vez te esté impidiendo llegar a la realización máxima de tu autoridad personal—o por lo menos poder identificarlo, en primer lugar—cosas tales como el temor, la apatía, y cosas parecidas a estas, y de esta manera, poder usar las sugerencias que damos en este libro para vencer todo este tipo de cosas. A continuación, vas a ver doce claves para poder descubrir tu autoridad. Las siguientes preguntas fueron hechas con el propósito de ayudarte para que puedas afinar tu esfera de dominio personal. Algunas de las preguntas son similares, pero su propósito es confirmar aquello para lo cual tú fuiste diseñado, y que tienes que realizar en la vida. Si tú das respuestas que son completamente diferentes a cada pregunta, entonces tú vas a necesitar seguir refinando tus respuestas. Tú tal vez no vas a tener una respuesta muy clara para cada pregunta, pero debes enfocarte en aquellas preguntas para las cuales si tienes respuestas específicas.
Clave #1: ¿Cuál es mi deseo más profundo? Debes escribir aquello que tú sientes muy profundamente que te gustaría hacer con tu vida, a través de usar tus dones, y la forma como tú esperas impactar a la humanidad durante tu tiempo de vida. Todas estas son cosas en las cuales no solamente vas a tener un interés temporal o “pasajero”, sino al contrario, vas a tener una aspiración o un deseo muy profundo de hacer estas cosas. A través los años, tú tal vez vas encontrar dos o tres cosas que tú tienes que hacer en diferentes temporadas de tu vida, pero tú tienes que ser capaz de distinguir
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entre lo que a ti te gustaría hacer, y lo que tú sientes que realmente debes Es muy fácil hacer. Es muy fácil repartirnos en abarcar tantas cosas, y con todo esto, acabademasiadas mos por nunca realizar nuestros propósitos. Debes recordar que aunque cosas, y nunca tú tengas etapas de experiencias en tu llegar a realizar vida, a través de las cuales te involunuestros cres en diferentes tareas, y aunque tú verdaderos tal vez llegues a manifestar tu autoripropósitos. dad personal en varias formas usando uno o más dones, todas estas manifestaciones van a ser centradas en un área particular o en un tema particular que refleja los propósitos específicos de Dios para ti.
Clave #2: ¿Cuáles son las cosas por las que siento una verdadera pasión? ¿Cuáles son las cosas que realmente te importan? ¿Cuáles son los dones y habilidades en que tú te deleitas y te gozas cuando los usas? Una vez que encuentras las respuestas a estas preguntas tan elementales, tú puedes encontrar la pasión que te va a ayudar a realizar tu autoridad personal. Dios nos separó a cada uno de nosotros y dijo, “Tú has nacido para esta tarea específica. Tú tienes la autoridad para ser completamente libre dentro de esta esfera de dominio de tu vida”. De nuevo, la autoridad es la libertad para que puedas ser quien realmente eres. La autoridad no restringe; imparte y envía. La autoridad no te obstaculiza; te ayuda. La autoridad no te detiene; provee el momento y el acceso. La autoridad da la experiencia más asombrosa de libertad que ninguna persona puede llegar a tener. Es increíblemente satisfactorio el hecho de
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estar haciendo aquello que tú sabes con toda certeza que fuiste diseñado desde tu nacimiento, y poder hacerlo sin límite alguno. Jesús declaró, “Para Dios todo es posible” (Mateo 19:26). De hecho, Jesús estaba diciendo, “Para Dios, todas las cosas para las cuales tú fuiste llamado son posibles”. Nada es imposible si tú naciste con el diseño para realizarlo. Tal vez te puede llevar veinte, cuarenta, o incluso sesenta años, pero tú vas a llegar a realizarlo. Debes ponerte a pensar acerca de Noé, quien nació para construir el arca, de tal manera que él y toda su familia pudieran estar a salvo, cuando la tierra iba a ser destruida a través de ese gran diluvio. ¡Ninguno podía construir un arca mejor de lo que Noé lo hizo! El edificó una inmensa estructura que podía albergarlo a él, a su familia, y a todos los animales que llevaron con ellos, y además, podía flotar perfectamente—¡y funcionó! (Ver Génesis 6:5–8:22). Yo me imagino que la gente se estaba riendo de él, debido a que le tomó cerca de cien años construir esa arca, y además de esto, nunca antes había llovido en la tierra. Ellos probablemente lo criticaron mucho, le dieron la espalda como amigos, y hablaron mal de él detrás de sus espaldas. Si él hubiera construido el arca en el tiempo actual en que vivimos, hubiera tenido toda la burla a través de todos los programas de televisión, y todos los diferentes sitios de la Internet. Las fotografías de él y de su arca estarían en la primera plana de los periódicos más importantes del mundo. Todos los medios de comunicación estarían diciendo que él estaba loco, demente, completamente fuera de sí. Pero a pesar de todos estos retos tan inmensos, Noé prosiguió construyendo el arca. Cuando una persona es auténtica, y cuando es completamente apasionado acerca de su propósito, no puede
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ser detenido; él o ella no van a permanecer desilusionados o desanimados por mucho tiempo. No importa que sea lo que las gentes le tiren a él o a ella, van a permanecer diciendo lo mismo: “Voy a acabar por realizarlo”. ¿Acerca de qué tipo de cosas es que tú sientes una pasión como esta?
Clave #3: ¿Qué es lo que me hace enojar? Existe un enojo constructivo, y también existe un enojo destructivo. La mayoría de nosotros piensa acerca del tipo de enojo destructivo, cada vez que se menciona la palabra enojo. Pero existe algún tipo de enojo que es legítimo, tal como el enojo que está dirigido a las cosas malas que existen en este mundo. Pablo escribió, “Si se enojan, no pequen. No dejen que el sol se ponga estando aún enojados, ni den cabida al diablo” (Efesios 4:26–27). El estaba refiriendo el Salmo 4:4, que dice lo Cuando alguien siguiente: “Si se enojan, no pequen; es auténtico, y en la quietud del descanso nocturno tiene pasión por examínense el corazón”.
su propósito,
El enojo puede ser legítimo, pero jamás va a poder el enojo mal dirigido nos hace vulneser detenido; y no rables, para que podamos ser atacados por el diablo, y debilita nuestra va a permanecer autoridad. Por ejemplo, cuando Caín desanimado por se enojó debido a la ofrenda de su mucho tiempo. hermano que fue aceptada por Dios, pero la suya no fue aceptada, Dios le dijo, “¿Por qué estás tan enojado? ¿Por qué andas cabizbajo? Si hicieras lo bueno, podrías andar con la frente en alto. Pero si haces lo malo, el pecado te acecha, como una fiera lista para atraparte. No obstante, tú puedes dominarlo” (Génesis 4:6–7).
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En otro ejemplo, Moisés tenía el deseo de que su pueblo pudiera ser liberado de la opresión de la esclavitud en Egipto, pero él tomó el asunto en sus propias manos, y mató a un supervisor egipcio, que estaba abusando de un israelita. Como resultado de esto, el tuvo que salir huyendo del país durante cuarenta años, hasta que él se encontraba listo para seguir la manera de Dios, para libertar a los hijos de Israel. (Ver Éxodo 2:11–15, 23–3:22). El enojo que es egoísta o que está motivado por la ira es destructivo, pero el enojo que está basado en el deseo de que la gente sea tratada correctamente, está basado en la compasión por los demás, y también es provocado por el dolor derivado de las injusticias, y esto es constructivo si dirige a una acción positiva que pueda remediar los problemas, en lugar de permitir que se convierta en resentimiento, amargura, falta de perdón, o violencia en contra de los perpetradores. “No paguen a nadie mal por mal. Procuren hacer lo bueno delante de todos” (Romanos 12:17). ¿Qué cosas hay en esta vida que provocan que te enojes hasta el punto de tomar alguna acción a favor de aquellos que son maltratados, abusados, u oprimidos? ¿Acaso tienes algunos planes que pudieran aliviar el sufrimiento de otros? ¿Qué clase de ideas tienes tú que puedan comunicar valores y mentalidades positivos a las gentes? Las respuestas a estas preguntas te pueden llevar a tu autoridad personal.
Clave #4: ¿Qué tipo de ideas se mantienen persistentes en mi mente y en mi corazón? ¿Acaso existe algo específico que a ti te gustaría realizar? ¿Qué clase de sueños recurrentes tienes tú para
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tu vida? Yo creo que los pensamientos, ideas, planes, y sueños que permanecen consistentes dentro de ti, fueron colocados por tu Dios Creador. Vamos a poder hablar acerca del tiempo correcto en un capítulo posterior, pero tú debes darte cuenta que tus pensamientos y sueños consistentes, pueden llegar a realizarse, incluso si ellos no se manifiestan de inmediato. Muy frecuentemente yo me refiero a la clave #4 como “la idea que nunca sale de ti”. Tal vez tú te has estado preocupando con algunas otras cosas, pero esta idea siempre regresa a tus pensamientos. Es una pasión que no va a rendirse, un deseo persistente, o una búsqueda que se encuentran en tu corazón. Josué tenía sueños que Dios le había dado con relación a que iba a tener una posición de autoridad sobre su familia. Sin poder entender al principio que esta posición era con el propósito de ayudar a que su familia pudiera sobrevivir, en lugar de simplemente alimentar su ego, él fue a través de una serie de experiencias extremadamente humillantes—incluyendo el hecho de haber sido vendido o como esclavo, y haber sido arrojado a la prisión debido a una acusación equivocada—mucho antes de que él estuviera listo para realizar su autoridad personal en la vida. Eventualmente, él se convirtió en el segundo gobernador más poderoso de Egipto debajo del faraón, y salvó las vidas de su familia, durante un tiempo de una hambruna muy severa. (Ver Génesis 37, 39–47). ¿Cuál es la aspiración a largo plazo que tú tienes? ¿Cuál es la visión, idea, o sueño que está latiendo en tu corazón hoy en día? ¿Acaso tú motivación es para hacer algo positivo o está basada en motivos egoístas? ¿Acaso estás dispuesto a realizar esto para honrar a Dios, y para edificar a los demás?
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Clave #5: ¿Qué es lo que yo me imagino haciendo todo el tiempo? ¿Qué es aquello en lo que tú te imaginas que te vas a llegar a convertir? ¿Qué es lo que tú realmente quieres hacer, y que no le has dicho a nadie más acerca de ello? Puede tratarse de algo que tú has pensado durante mucho tiempo mientras que te encuentras en tu lugar de trabajo, y tú estás deseando poder hacer eso en lugar del trabajo actual. Puede ser algo que tu ve que otros están haciendo, y tú te dices a ti mismo, ¡Me gustaría hacer algo como eso! Si sólo yo pudiera hacerlo de esa manera.... Tal vez se trata de algo que mientras tú estás despierto por las noches, estás imaginándote a ti mismo edificando, escribiendo, dibujando, construyendo, o realizando. Tú tal vez has estado soñando acerca de hacer esto desde que tú eras un niño. Debes preguntarte a ti mismo, “¿Qué es lo que yo preferiría ser o hacer? ¿Cuáles son los dones o habilidades que a mí me gustaría usar y desarrollar a fin de poder llegar a ser eso o poder llegar a hacer esto?”.
Clave #6: ¿Qué es lo que yo quiero hacer por la humanidad? ¿Qué es aquello que tú deseas poder realizar en beneficio de la humanidad? ¿Acaso se trata de la creación de un nuevo invento o el descubrimiento de alguna nueva medicina? ¿Acaso tú quieres arreglar algún problema específico o poder realizar algún tipo de reforma en la sociedad? ¿Acaso quieres proveer un refugio donde la gente pueda obtener el descanso y la relajación que tanto necesitan, en medio de estas vidas tan ocupadas que tienen? Tú tal vez no tienes el deseo de construir ningún tipo de estructuras físicas, tal como lo haría un
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arquitecto o un contratista experto, pero tú tal vez quieres edificar las estructuras sociales de tu nación, y esa tal vez, sea el área de tu dominio personal, y el don que Dios te ha dado. La clave #6 también puede ser en la forma de estas preguntas: “¿Qué clase de impacto me gustaría tener en mi propia comunidad?”, o “¿Qué es lo que yo quiero pasar a la siguiente generación?”, o incluso “¿Cuáles son las cosas por las cuales me gustaría ser recordado en la posteridad?”. ¿Cuál es aquella cosa positiva por la cual tú tienes una pasión al punto de dejarla como herencia, para todos aquellos que van a venir después de ti en la vida?
Clave #7: ¿Qué es lo que me podría dar la máxima realización? Para poder contestar esta pregunta, tú debes comenzar por medio de pensar acerca de tus actividades y realizaciones del pasado—en la escuela, en tu trabajo, en tu actividad favorita, o cualquier otra cosa en la cual hayas estado involucrado. Debes remarcar y subrayar estas tareas o logros que te han dado la más grande satisfacción y realización en tu vida. ¿Qué es lo que tienen todas estas cosas que han podido darte toda esa satisfacción y realización? ¿Acaso te encuentras involucrado en la actualidad en esas mismas actividades? ¿Por qué sí o por qué no? ¿Acaso existen actividades similares, proyectos o tareas similares que podrían darte esa misma medida de placer personal? Si es así, ¿cuáles podrían ser ellas? Debes tratar de evaluar todo aquello que te motiva y que te recompensa al máximo en la vida, y entonces debes tratar de imaginar las posibilidades de cómo podrías incorporar esto en tu vida como tu vocación o como el enfoque principal de tu vida.
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Clave #8: ¿Qué es aquello que yo puedo hacer sin esperar ningún tipo de ganancia monetaria o compensación? ¿Acaso existe algo que tú encuentras tan recompensador, que podrías hacerlo aún si no te pagaran por ello, y aunque no recibirás ningún otro tipo de compensación, incluyendo el hecho de no recibir ni las gracias, ni las alabanzas de las demás gentes? Tal vez te encuentras haciendo algo parecido a esto como un voluntario en alguna organización caritativa, ya sea en tu iglesia, o como una actividad recreativa. ¿Cuál es esta actividad y cuál es la naturaleza de ella? Por ejemplo, ¿Acaso involucra el hecho de trabajar con niños? ¿Jóvenes? ¿Adultos? ¿O acaso involucra el hecho de ayudar a gente que tiene que recuperarse de diferentes adicciones? ¿O incluye tener que pasar tiempo con ancianos en asilos de ancianos? ¿Realizar colectas que tienen que ver con investigaciones médicas? ¿Enseñarle a las gentes a leer y a escribir? ¿Visitar a los veteranos de guerra en el hospital? ¿Acaso involucra proyectos comunitarios, tales como plantar jardines, reciclar, limpiar graffiti, y cosas parecidas a éstas? ¿Acaso te gusta trabajar como voluntario en tu biblioteca local, o en algún sitio histórico que esté cercano a tu casa? ¿O acaso disfrutas de la música o de algún otro tipo de arte? La respuestas que des a las preguntas anteriores, muy bien pueden determinar tu área de autoridad, especialmente debido a que hemos visto que mucha gente se siente mucho más contenta trabajando en las actividades que les gusta, en lugar de hacerlo en sus trabajos, de tal manera que estas actividades recreativas llegan a reflejar los verdaderos propósitos que tienes en la vida.
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Sin embargo la pregunta de la clave #8 nos lleva a una paradoja. Aquella cosa Aquella cosa que tú harías sin espeque tú podrías rar recibir ningún tipo de ganancia monetaria, usualmente se convierte hacer sin tener que obtener en la tarea que te va a pagar para vivir. Tú lo haces en forma tan natu- dinero a cambio, ral, y se convierte en algo tan bueno, normalmente se que atrae por sí solo la compenconvierte en la sación de la gente que reconoce su tarea que acaba valor. O tal vez, tú te sientes tan reapagándote. lizado mientras que lo haces, que tú serías infinitamente mucho más feliz si logras conseguir un trabajo que se relacionara con esa área en lugar del trabajo actual que tú tienes, incluso siendo que tu trabajo actual te paga mucho más. El asunto consiste en obtener la calidad de vida necesaria, y poder realizar tu verdadera contribución a tu generación. ¿Acaso preferirías que te pagaran más pero tener que estar experimentando frustración e insatisfacción por el resto de tu vida, lo cual te puede llevar al estrés mental y físico, así como a sentimientos caprichosos con relación a que tu vida carece de significado alguno? ¿O acaso tú preferirías cumplir tu propósito, servir a otros, y vivir un tipo de vida mucho más feliz, más saludable y balanceada? Yo creo que por medio de vivir en su autoridad personal, muchas gentes podrían resolver los problemas de salud mental, físicos, o de relaciones, que tienen actualmente. Por lo tanto, debes preguntarte a ti mismo que tipos de actividades te están dando satisfacción en la actualidad, y tú no estás siendo pagado por ellas, y cuáles son las cosas a las cuales te dedicas tanto, y que tú podrías seguir haciendo, aún si no recibirás ningún dinero por
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ello, y que sería aquello que tú podrías hacer sin tener que recibir ningún tipo de compensación.
Clave #9: ¿Qué es lo que yo preferiría estar haciendo? ¿Acaso siempre te encuentras pensando con relación a otras cosas, en lugar de estar haciendo aquello en lo cual te encuentras involucrado en este momento? Esa “otra cosa” probablemente es tu área de autoridad. Hasta en tanto tú continúes pensando en ello, en lugar de ponerte a hacer algo, entonces, eso quiere decir que tú no deberías estar haciendo lo que haces actualmente. No es muy difícil poderse figurar esta situación. Otra manera de poder mirar a esta pregunta es basándose en nuestra discusión anterior acerca de que nuestra autoridad personal se convierta en nuestro verdadero hogar, habitación, o lugar de refugio. Debes preguntarte a ti mismo, “¿Qué es lo que a mí me gustaría hacer y que haría sentir como ‘en casa’? ¿Qué es aquello que parece ser tan natural y cómodo para mí?”. Cuando tú llegas a encontrar tu autoridad, tú realmente no tienes que ir a un trabajo; tú de hecho, “te sientes en casa”. De hecho, existe mucha gente que se encuentra funcionando dentro de su autoridad en un trabajo físico, y se sienten “como en casa” debido a que su autoridad está conectada con quienes son realmente, y con todo su estilo de vida. Si la gente se siente muy contenta de dejar sus trabajos, ellos no se sienten como si estuvieran en casa, cuando están en ellos. Y cuando ellos no se sienten como si estuvieran en casa, ellos terminan siendo muy competitivos los unos con los otros. Ellos pelean por aquellos recursos que perciben como muy escasos, pensando que no existen suficientes
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posiciones, recursos, o motivación para todo el mundo. En contraste, una persona que sabe y que ejercita su propia autoridad, se compara solamente con sí misma, sabiendo que todo lo que necesita, le va a ser provisto. En forma periódica revisa su vida por medio de preguntarse a si mismo, “¿Acaso estoy haciendo aquello que yo debería hacer para poder realizar mi autoridad?”. La gente que se encuentra causando problemas en sus trabajos, tal vez necesitan ser reubicados a un departamento o área diferente dentro de su compañía, en donde puedan ajustarse mucho mejor. O tal vez, ellos necesitan un medio ambiente completamente diferente. Si tú no te encuentras funcionando en tu verdadera posición de autoridad, tú puedes destruir toda una organización, a través del conflicto que provoques y por medio de estarte quejando. El hecho de encontrar y vivir dentro de tu autoridad te protege a ti y a otros también, debido a que como hemos visto anteriormente, la autoridad trae orden y paz. Tú te sientes como en casa cuando estás trabajando dentro de tu autoridad y de tus dones. ¿Qué es lo que tú preferirías estar haciendo con tu vida? ¿Qué es lo que te hace sentir como en casa cuando lo estás realizando?
Clave #10: ¿Qué es aquello que yo haría, si yo supiera que no voy a fracasar en ello? Si tú pudieras hacer cualquier cosa en este mundo, conociendo que va a tener éxito, ¿qué es lo que tú harías? En primer lugar, ¡debes eliminar todo tipo de respuestas superficiales para esta pregunta! Algunos de aquellos que podrían sacarse la lotería, se desquitan de todos aquellos que en alguna ocasión los han insultado, y que han hecho cosas parecidas a estas. Al contrario,
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esta pregunta está diseñada para ayudarte a que puedas eliminar el temor y la duda que pueden congestionar tu mente, y detener tus pensamientos cada vez que tú comienzas a pensar acerca de lo que realmente te gustaría hacer en la vida. Debes olvidar el temor y la duda, y debes considerar que nada es imposible. ¿Qué tipo de tarea, proyecto, obra creativa, trabajo, o plan te gustaría llevar a cabo si estuviera libre de riesgos? Si esto fuera un éxito, ¿no importaría el tipo de obstáculos que tratarán de impedirlo? ¿Y si el dinero tampoco fuera un impedimento? ¿Y si tú no tuvieras que preocuparte con relación a que tienes antecedentes equivocados, una apariencia errónea, experiencia de trabajo que está equivocada, o cualquier otra cosa que tú normalmente piensas como un obstáculo en tu camino? Y quiero motivarte para que tomes tiempo extra al contestar esta pregunta. El temor puede ser un muy poderoso inhibidor para evitar que puedas pensar en forma clara, y te puede tomar un poco de tiempo para que puedas ir más allá de cualquier tipo de sentimientos de temor, de tal manera que tú puedas pensar y soñar sin impedimento alguno. Entonces, una vez que tú eres capaz de describir tu respuesta, debes evaluarla a la luz de tus otras respuestas, y a la luz de lo que tú estás comenzando a aprender con relación a tu autoridad personal.
Clave #11: ¿Cuál es la cosa más importante que yo puedo hacer con mi vida? El hecho de descubrir la autoridad personal normalmente viene cuando evaluamos aquellas cosas que son las más importantes para nosotros en la vida. Esto muy frecuentemente no consiste en aquello que nos está
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presionando en nuestros calendarios, o aquellas cosas que nos harían ver como las gentes más exitosas ante los ojos de los demás, sino aquello que sería lo que verdaderamente El hecho de podría significar la mayor contridescubrir la bución que podemos hacer, con una mejor elección de estilo de autoridad personal normalmente vida, la cual tiene sus prioridades en orden, a fin de reflejar nuestros llega cuando nos valores fundamentales y nuestras ponemos a evaluar creencias. cuál es la cosa más Otra manera de poner esta importante para pregunta clave es, “¿Qué es lo nosotros en que yo deseo que hubiera hecho, esta vida. cada vez que miró hacia atrás al pasado de mi vida?”, o “¿Cuáles son aquellas cosas de las cuales me arrepentiría de no haberlas hecho, si llegará mi tiempo para morir y para estar presente ante mi Dios Creador?”. Por lo tanto, tú tienes que considerar que es, por encima de todas las otras cosas, la cosa más importante que tú podrías hacer con tu vida, y que es lo que tú quieres que ocurra en tu vida, así como la forma en que tú quieres vivir tu vida.
Clave #12: ¿Qué tipo de tarea o de actividades me conectaría de la mejor manera con mi Dios Creador? Una pregunta final tan básica que debes preguntarte a ti mismo, es que tipo de vocación te ayudaría a mantenerte conectado con el Dios Creador, y te ayudaría a mantenerte fiel a su autoridad, leyes, y principios para la vida. La autoridad personal viene de Dios, y nunca
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puede involucrar ningún tipo de actividad que sea contraria a los caminos y a la naturaleza de Dios. En primer lugar, por supuesto, cualquier cosa inmoral o ilegal no sería una esfera legítima de dominio para tu autoridad personal. En segundo lugar, la autoridad personal no puede ser encontrada en aquellas tareas que se buscan con fines egoístas, o con el propósito de elevar el ego de uno mismo, o de lucirse ante los demás. ¿Quién es sabio y entendido entre ustedes? Que lo demuestre con su buena conducta, mediante obras hechas con la humildad que le da su sabiduría. Pero si ustedes tienen envidias amargas y rivalidades en el corazón, dejen de presumir y de faltar a la verdad. Ésa no es la sabiduría que desciende del cielo, sino que es terrenal, puramente humana y diabólica. Porque donde hay envidias y rivalidades, también hay confusión y toda clase de acciones malvadas. En cambio, la sabiduría que desciende del cielo es ante todo pura, y además pacífica, bondadosa, dócil, llena de compasión y de buenos frutos, imparcial y sincera.. (Santiago 3:13–17) El hecho de trabajar en tu esfera de dominio personal va a promover “el fruto del Espíritu” en tu vida: “En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio” (Gálatas 5:22–23). La autoridad dada por Dios siempre consiste en una fuerza positiva; y ayuda o edifica a la humanidad de alguna manera. En tercer lugar, existen ciertas actividades y áreas de la vida que tú vas a saber que no se encuentran dentro
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de tu esfera de dominio de autoridad personal, debido a que en forma consistente, te ponen en algún tipo de problemas—ya sea que el problema es algo manifiesto, o que está involucrando malas actitudes o un estilo de vida que es improductivo o que no es nada saludable. Debemos preguntarnos muy seriamente a nosotros mismos, “¿Qué tipo de actividades y áreas en este momento presente pueden ser consideradas como tentaciones enfermizas para mí? En contraste a esto, ¿qué tipo de actividades y tareas me acercan a Dios y a sus caminos cada vez que me involucro en ellas?”. Las respuestas a estas preguntas no van a ser las mismas para todas las personas. Todos nosotros necesitamos adherirnos a los principios tan claros que se encuentran en las Escrituras. Pero cada persona también tiene sus propias áreas de debilidad, y tiene que estar en guardia con relación a cada una de ellas. Tal vez no exista nada malo intrínsecamente con relación a cierta actividad, pero si tú siempre eres apartado de Dios debido a esa actividad, entonces hay algo que existe en esa actividad que no es correcto para ti. “Todo lo contrario, cada uno es tentado cuando sus propios malos deseos lo arrastran y seducen. Luego, cuando el deseo ha concebido, engendra el pecado; y el pecado, una vez que ha sido consumado, da a luz la muerte” (Santiago 1:14–15). Tu autoridad personal va ser algo muy positivo, y va a ser algo que te va a elevar. A través de ella, tú vas a ser capaz de honrar al Dios Creador que te creó, y vas a poder reflejar aspectos de su carácter y de sus propósitos.
Resumiendo tus descubrimientos Las doce preguntas que presentamos anteriormente tienen el valor suficiente, como para que te tomes
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el tiempo suficiente para pensar acerca de ellas, y contestarlas, de tal manera que tú puedas moverte hacia delante con tu autoridad. Cuando tú hayas contestado completamente la pregunta anterior, pidiéndole a Dios que te guíe para hacerlo, y tú sientas que tus respuestas han podido revelar tu autoridad personal, entonces, debes ponerte a escribir un resumen de todo aquello que tú crees, que son las cosas para las cuales Dios te colocó en esta tierra. Entonces, debes contestar las preguntas que corresponden a cada uno de los siguientes títulos: • Documentando tu autoridad personal: ¿En qué formas específicas he podido ejercitar esta autoridad en el pasado? ¿Cómo es que puedo edificar esto en el futuro? • Ejercitando y refinando tu autoridad personal: ¿En qué formas es que yo puedo desarrollar y aplicar me autoridad personal en este momento que ya conozco a que se refiere todo esto? • Poniendo en práctica tu autoridad personal: ¿Quién tiene el conocimiento, habilidades, y dedicación, para que pueda ayudarme a poner en práctica mi autoridad? (Para mayor información en este tema, ver el capítulo once). Imprime el resumen de tus declaraciones, y / o tu perfil completo, así como una lista de los beneficios que puedes obtener a través de vivir dentro de tu autoridad personal, y ponerlos en un lugar que esté bien visible, donde puedas verlos frecuentemente, y esto pueda ayudar a enfocarte para que puedas vivir dentro de tu esfera de dominio personal diariamente.
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Dios quiere que todos nosotros seamos participantes activos Dios quiere en sus propósitos para esta tierra, que todos a través de nuestra autoridad personal. Las Escrituras son el único nosotros seamos participantes libro que declara que Dios nos creó activos en sus para tener dominio, y para gobernar sobre toda la tierra. Ellas son propósitos en esta el único libro que declara acerca tierra, a través de de Jesús, “Digno eres de recibir el nuestra autoridad rollo escrito y de romper sus sellos, personal. porque fuiste sacrificado, y con tu sangre compraste para Dios gente de toda raza, lengua, pueblo y nación. De ellos hiciste un reino; los hiciste sacerdotes al servicio de nuestro Dios, y reinarán sobre la tierra” (Apocalipsis 5:9–10). Un rey es alguien que está autorizado a gobernar. Existe una esfera de dominio de la vida para la cual tú fuiste diseñado desde tu nacimiento y que tienes que gobernar. Tú nunca vas a tener tu realización, sino hasta que llegues a descubrir esa área, y tú siempre vas estar tratando muy fuerte y luchando de alguna manera, hasta que puedas llegar a encontrarla. Pero una vez que tú llegas a encontrarla, el hecho de poder trabajar en ella va a parecer como si se tratara de una maquinaria muy bien aceitada que trabaja muy suavemente. De repente, tú vas a conectarte con la vida. Esa es la habilidad que Jesús vino a reclamar para ti. ¿Acaso tú vas a tomar la determinación de convertirte en una persona auténtica? ¿Acaso vas a buscar poder descubrir, con la ayuda del Espíritu Santo de Dios, quién eres tú realmente? Estoy muy emocionado de todo lo que tú vas a poder encontrar, una vez que contestes las doce preguntas que se encuentran en este capítulo.
Capítulo diez
Encendiendo tu autoridad personal El camino para poder ejercitar tu liderazgo inherente
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ichael Jordan fue un jugador de básquetbol profesional fenomenal, que jugó para el equipo de los toros de Chicago. Muchos lo consideraron como el jugador más grande de básquetbol en toda la historia del deporte. En el juego dos de las eliminatorias de semifinales del año de 1986, Jordan anotó 63 puntos en contra de Larry Bird y el equipo de los celtas de Boston, lo cual significó un récord de anotación en las eliminatorias semifinales, el cual sigue vigente hasta el día de hoy.1 Tal parecía como si él ni siquiera tenía que mirar a la canasta para poder hacer todas estas anotaciones. Esta cualidad se encontraba en su propia sangre. Cuando él saltó a la cancha y brincó para tirar las anotaciones, el parecía ser una “maquinaria bien aceitada” funcionando a toda su capacidad. El había nacido para hacer esto. Pero más tarde, en el año de 1993, cuando él todavía tenía solamente 30 años de edad, él anunció su retiro del básquetbol. Muy poco tiempo después de esto, él firmó un contrato de béisbol con el equipo de los medias blancas de Chicago. Aquí estaba un hombre que había sido 231
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dotado extraordinariamente para el básquetbol, decidiendo ponerse a jugar béisbol. La cosa más rara que jamás yo pude ver, consistía en este jugador Michael Jordan, sosteniendo un bate de béisbol en sus manos. Incluso el uniforme se veía completamente mal en él. Él era tan alto (seis pies y seis pulgadas, que en sistema métrico sería 1.96 m) que su uniforme le quedaba muy corto. Mientras que aparentemente estaba trabajando muy duro en el béisbol y aprendiendo todo lo que podía, esto simplemente no parecía ser la cosa correcta para él. Entonces, después de aproximadamente un año en el béisbol, lo abandonó, y regresó a la NBA, donde continuó su extraordinaria carrera como basquetbolista.2 La experiencia de Michael Jordan es instructiva con relación a la autoridad personal, debido a que incluso cuando tú conoces tus dones, tú puedes perder el enfoque completamente, moviéndote a un medio ambiente que se encuentra completamente fuera de tu esfera de dominio natural.
La mayoría de la gente está viviendo vidas no autorizadas La esfera de dominio de tu autoridad personal es donde tú estás autorizado para funcionar a través de tu propósito inherente. Cuando tú te encuentras en tu área de autoridad, esto es como si un instinto tomara el control, de la misma manera como el estilo de juego de Michael Jordan con el básquetbol. Tal vez, es como un reflejo. Es una parte de tu propia naturaleza que no tiene que esforzarse, y que es casi inconsciente. Tú no tienes que esforzarte para hacer nada. Por lo tanto, uno de los más grandes misterios para mí, es el hecho de que la mayoría de la gente se encuentra
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viviendo vidas no autorizadas. Ellos nunca se han preguntado a sí mismos (porque tal vez ellos han fracasado por medio de no seguir preguntándose a sí mismos) con relación a sus trabajos o cualquier otro tipo de actividades, “¿Acaso yo fui creado para hacer esto?”. Ya hemos visto que la autoridad personal es el derecho legal y la libertad otorgada por el Autor a los seres humanos (y otros seres vivientes) para que puedan manifestar esa habilidad especial y el poder que Dios les ha otorgado. El hecho de manifestar aquello que se encuentra dentro, es lo que le da a una persona su autenticidad. Ser auténtico significa (1) ser (o llegar a ser) uno mismo, (2) manifestar la verdadera forma de uno mismo, y (3) ser verdadero ante uno mismo. En este capítulo, quiero presentar siete bosquejos muy importantes, que te van a ayudar a encender y a continuar manifestando la autoridad personal dentro de ti.
Bosquejo #1: Debes mantenerte en el área particular de tus dones En primer lugar, para poder funcionar dentro de tu autoridad personal, tú tienes que mantenerte dentro del área particular de tus dones. Para poder permanecer ahí, tienes que saber cuáles son las cosas que no son correctas para ti, de la misma forma como debes saber todas aquellas cosas que si son correctas para ti. El tiempo es demasiado precioso como para malgastarlo en las cosas equivocadas. Debido a que Michael Jordan estuvo retirado del básquetbol por más de un año, él tuvo que dedicar varios meses trabajando para tratar de volver a ponerse en la condición física necesaria, de tal manera que él
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pudiera regresar a la forma óptima que él había tenido previamente. Aunque él todavía tenía un talento natural asombroso, él había perdido la certeza con relación a su precisión y habilidades. Él había perdido su sensibilidad con relación al juego. Yo pude ver a Jordan cuando jugó sus primeros tres juegos después de regresar nuevamente al básquetbol, y los jugadores de los equipos contrincantes, parecían tener una suprema ventaja sobre él, debido a que ellos nunca habían dejado de jugar, y todavía se encontraban en el punto óptimo de sus habilidades. Esto es lo que sucede cuando tú te sales de tu autoridad persoTu esfera de nal. Cuando tú abandonas tu don dominio y de inherente a cambio de hacer alguna autoridad es otra cosa, todos aquellos que cuenel lugar donde tan con dones similares, y que van a puedes prosperar seguir usándolos, van a permanecer en un estado excelente. Y una vez y trabajar que tú regresas a tu don, vas a tener con gozo. que trabajar muy duro a fin de poder “alcanzarlos”. Tú tienes que asegurarte de que te estás manteniendo en tu mejor forma, dentro del área de tus habilidades. Tu esfera de dominio de autoridad es aquel lugar donde tú puedes prosperar y trabajar con gozo. Tal y como hemos podido ver anteriormente, aunque esto puede llegar a incluir disciplina y esfuerzo, va a parecer algo muy fácil para ti en muchos aspectos, debido a que tú fuiste formado para ello. Pablo de Tarso escribió lo siguiente, “Hermanos, cada uno permanezca ante Dios en la condición [“estado” (rvr)] en que estaba cuando Dios lo llamó” (1 Corintios 7:24). Para la palabra “condición”, también podemos sustituirla por la palabra posición, o
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don. De hecho, este versículo está diciendo, “Mantente en la autoridad que el Dios Creador te ha dado. Esta es tu responsabilidad ante Dios”.
Bosquejo #2: No permitas que otros te presionen para que entres en un área diferente de autoridad A fin de poder permanecer dentro de tu propia área de autoridad, tú no debes permitir que ningunas otras personas te presionen para hacer algo que no es correcto, de acuerdo a tu propósito inherente. Si tú te rindes ante ellos, tú no vas a ser capaz de ser una persona verdaderamente auténtica. Pablo motivó a sus lectores en la Roma del primer siglo—así como a todos nosotros hoy en día—para que encontremos nuestras esferas de dominio, las cuales son únicas, y que permanezcamos en ellas, por medio de no conformarnos ante las ideas falsas, ni rendirnos ante la presión que tenga que ver con seguir un camino que es contrario a las leyes y principios que el Dios Creador ha establecido. No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta. Por la gracia que se me ha dado, les digo a todos ustedes: Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que debe tener, sino más bien piense de sí mismo con moderación, según la medida de fe que Dios le haya dado. Pues así como cada uno de nosotros tiene un solo cuerpo con muchos miembros, y no todos estos miembros desempeñan la misma función, también nosotros, siendo muchos, formamos un solo cuerpo en Cristo, y
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cada miembro está unido a todos los demás. Tenemos dones diferentes, según la gracia que se nos ha dado. Si el don de alguien es el de profecía, que lo use en proporción con su fe; si es el de prestar un servicio, que lo preste; si es el de enseñar, que enseñe; si es el de animar a otros, que los anime; si es el de socorrer a los necesitados, que dé con generosidad; si es el de dirigir, que dirija con esmero; si es el de mostrar compasión, que lo haga con alegría.. (Romanos 12:2–8) Pablo estaba hablando acerca de descubrir tus dones personales que vienen directamente de Dios. Cuando él escribió acerca de “Tenemos dones diferentes, según la gracia que se nos ha dado”, él se estaba refiriendo a las habilidades autorizadas que nos han sido dadas por nuestro Dios Creador. Jesús equiparó nuestro entendimiento de la autoridad con la fe (ver Lucas 7:8–10), y por lo tanto, “la medida de fe” que Pablo mencionó anteriormente, puede ser vista como nuestro entendimiento y total aceptación de la autoridad que Dios nos ha dado. Debes moverte en contra del flujo de las opiniones no autorizadas ¿Qué es lo que significa para ti evitar ser moldeado conforme al modelo del “mundo”, en términos de tu autoridad personal? Significa no seguir los estándares, perspectivas, y conveniencias de la cultura general alrededor de ti, a través de “algunas veces muy bien intencionados” parientes, amigos, maestros, figuras de autoridad no autorizadas, y muchos otros que muy frecuentemente te van a presionar para que te conformes y hagas todo aquello que ellos quieren que tú seas y hagas, por lo que
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ellos piensan que es importante y digno de ser logrado en esta vida, en lugar de las ideas y sueños que Dios te ha dado. La mentalidad del mundo muy frecuentemente ya ha tomado su opinión acerca de nosotros, y vamos a tener que trabajar en contra del flujo de esa opinión, si acaso eso es contrario a nuestra autoridad personal. Tratar de ser alguien o algo para lo cual tú naciste, es una de las experiencias más frustrantes que tú puedes llegar a tener. ¿Acaso alguna vez un maestro te ha llegado decir, “Tú podrías llegar a ser un muy buen ________________”, y tú te sentiste presionado a ir en busca de cierta vocación, incluso aunque esto era la última cosa que tú querías hacer realmente? O algunas veces, los padres suelen decirles a sus hijos, “Yo siempre quise llegar a ser un o una __________________, pero nunca logré llegar a hacerlo, así que, tú vas a tener que convertirte en ello”. Los hijos no tienen el menor interés en este tipo de ocupaciones, pero ellos se involucran en ellas debido a que sus padres querían hacer esto. Por ejemplo, un padre muy bien puede decirle a su hijo lo siguiente: “Yo siempre tuve el deseo de ser un abogado, pero no tuve el dinero necesario. Tuve que trabajar con mis manos muy fuerteCuando una mente en una fábrica, así que no persona deja de ser importa lo que tú digas, tú tienes auténtica sólo con que convertirte en un abogado. Tú vas a tener que ser aquello que yo el fin ser aceptado por los demás, siempre soñé”. Qué clase de tragedia es el hecho que tenemos una multitud tan grande de gente que no son auténticas en el mundo. No podemos seguir los sueños de otras
entonces, ha roto la fe con relación al diseño original que Dios le dio.
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gentes, sino que debemos seguir los sueños que el Dios Creador ha implantado dentro de cada uno de nosotros. Por lo tanto, cuando tú asistes a la escuela o vas a tu negocio u organización, no debes de tratar de ser “aceptado”. Tú eres sumamente único como para ser aceptado como uno más de la multitud. Esto no significa que deberíamos tratar de ofender a otras personas, pero si se sienten ofendidos por el hecho de que estamos siendo personas auténticas, tenemos que darnos cuenta de que algunas veces esto viene junto con el territorio de ser auténtico. Cuando una persona deja de ser auténtica, sólo por el hecho de que pueda ser aceptada en la sociedad, ha roto la fe con el Dios Creador que lo formó en ese diseño especial. Nadie debería comprometer lo que es, a fin de poder ganar aceptación de los demás. Tú no eres como los demás. Tú eres auténtico. La autoridad es el derecho y la capacidad para poder ser y llegar a ser la verdadera persona que tú eres. Algunas veces, la gente no está tratando de cambiarte en una dirección diferente en la vida, sino que parece no tomar en cuenta tu valor o tus cualidades en una forma justa. No debes aceptar este tipo de rechazo con relación a quién eres tú, y al propósito por el cual el Dios Creador te formó. Pablo escribió, “Mas hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestro gloria” (1 Corintios 2:7, rvr). Existe una “sabiduría oculta” que es de Dios. En el contexto de tu autoridad personal, hay algo que Dios designó para ti, a fin de que tú llegues a convertirte en ello, que tú puedas realizarlo, y que ha estado escondido en Dios desde antes de que el mundo existiera. Y se trata de un secreto. ¿Por qué? Porque solamente Dios conoce aquello para lo cual te ha creado.
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Los seres humanos necesitan a Dios a fin de que puedan llegar a descubrir y realizar su propósito para esta vida. No es como algunos suelen creer, debido a que deberíamos ser “religiosos”. La religión es una razón muy triste para acercarse a Dios. Dios quiere que tú seas restaurado a la comunión con Él, de tal manera que tú puedas tener una relación con Él, y por lo tanto, Él no va a perder todo aquello que puso dentro de ti, para que llegues a manifestarlo en esta tierra. La venida de Jesús a esta tierra, y el hecho de que Él murió en la cruz por ti, es una medida del tesoro que se encuentra dentro de ti. Pero es muy difícil llegar a ser aquello para lo cual tú fuiste destinado desde nacimiento, cuando tú te encuentras alrededor de gentes que son completamente “tóxicas” con relación a ti. A través de su negatividad y crítica, ellos dañan tu medio ambiente para que no puedas desarrollar tus dones e ideas, y ellos desvían tu búsqueda de los sueños que Dios te ha dado. Ciertos medio ambientes simplemente no son tierra buena para la semilla de tu autoridad. Si tu madre te sigue diciendo que tu no vales nada y que nunca vas a poder realizar ninguna cosa, y tu padre te sigue diciendo que él desearía que tú nunca hubieras nacido, las probabilidades son muy pocas de que tú vas a llegar a realizar tu propósito. Tú frecuentemente vas a tener que removerte tanto como sea posible de ese tipo de medio ambiente, si es que acaso vas a llegar a ser la persona que fuiste destinado desde tu nacimiento. Algunas veces, Dios nos aparta muy lejos de nuestro medio ambiente familiar, debido a que la gente que creció junto con nosotros, cree que conoce todo acerca de nosotros, incluso cuando no es así. La gente que conoce nuestro pasado puede interferir con nuestro futuro.
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Ellos disfrutan el hecho de alimentarnos con información acerca de nuestros errores y fracasos pasados. Ellos incluso pueden tratar en forma muy activa de detenernos, para que no lleguemos a convertirnos en aquello para lo cual fuimos destinados desde nuestro nacimiento. Sin embargo, lo único que ellos conocen qué es lo que les hemos podido mostrar hasta este punto. Es muy interesante poder notar que en ciertos relatos bíblicos, cuando Dios llamó a una persona para un propósito en particular, le dijo y le hizo abandonar su hogar, e ir a algún otro lado, de tal manera que pudiera tener el entrenamiento y la experiencia que iba a necesitar para poder realizar su llamamiento. Por ejemplo, Abraham fue llamado muy lejos de su tierra natal, de tal manera que le pudiera nacer una nueva nación. (Ver Génesis 12:1–4). José fue separado de su familia, de tal manera que él pudiera madurar y convertirse en un gobernador muy sabio. (Ver Génesis 37:23–28; 50:18–21). Tú nunca deberías dirigirte hacia el futuro mientras que te encuentras mirando el espejo retrovisor. Al contrario, debes mirar tu sueño, basado en tu autoridad. Quita tus ojos del pasado y ponte a ver la visión y la tarea que Dios ha puesto en tu vida. “Ninguno de los gobernantes de este mundo [aquí podríamos sustituir “ninguno de las autoridades este mundo”, ya sea que se trate de maestros, jefes de trabajo, padres, o cualquier otro tipo de parientes] la entendió [esta sabiduría que ha sido destinada para ti, es el tesoro]” (1 Corintios 2:8). Las gentes no siempre llegan a entender la sabiduría de Dios, especialmente si ellos no se encuentran en ningún tipo de relación con Él. Esta es una de la razones de por qué, cuando otros nos dicen que no podemos hacer algo, tenemos la tendencia a revelarnos
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en contra de lo que nos están diciendo. Nosotros sabemos muy dentro de nosotros mismos, que ellos no están calificados para declararnos nuestras limitaciones. Es muy cierto que algunas gentes nos pueden dar consejos muy buenos, y ayudarnos a entender los dones que se encuentran dentro de nosotros, así como las cosas que debemos hacer mucho mejor. Más aún, en el capítulo once, vamos a poder ver que otras personas también pueden ayudar a que pongamos en práctica nuestra autoridad. Pero nadie tiene ningún derecho a decirte que tú no puedes hacer algo, si Dios lo ha colocado dentro de ti para qué lo realices. Por ejemplo, una persona le puede decir a otra algo como esto, “Yo creo que tú eres bueno para esta y esta cosa”. Ese puede o puede no ser el caso. Esa persona tal vez no ha podido tener acceso completo a su autoridad todavía. El o ella pueden ser un ingeniero, un maestro o un artista ya muy entrado en años. Nosotros realmente no sabemos Nadie tiene el quiénes son las demás personas en su interior. Tal vez, hace diez años, derecho de decirte la gente te hizo a un lado con relalo que tú no ción a algo, y ahora tú te encuenpuedes hacer, si tras haciendo exactamente aquello que te dijeron que no podías hacer. Dios ha colocado La gente se desarrolla en lo físico, eso para que tú lo espiritual, emocional, mental y realices. psicológico con un ritmo de crecimiento diferente, ellos incluso van a comenzar a manifestar su verdadera autoridad en tiempos diferentes. Es muy importante que todos nosotros busquemos descubrir quiénes fuimos creados y diseñados desde nuestro nacimiento, de tal manera que podamos desarrollarnos en dirección de esos objetivos.
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Un hombre muy joven dio un testimonio en mi iglesia diciendo que él había sido un “drogadicto muy duro”. Entonces, él añadió, “Miren lo que Dios ha hecho”. Por lo tanto, en vista de cualquier condición presente, no debes rendirte con relación a ti mismo. Y tampoco debes rendirte con relación al futuro de tus hijos. No canceles la esperanza que tienes en tu hijo o en tu hija, si acaso él o ella están usando drogas. No rechaces a tu hija si ella se embaraza fuera del matrimonio. Dentro de tus hijos existen tesoros por los cuales Dios mandó a su Hijo. Esta es la razón de por qué necesitamos seguir diciéndole a los demás acerca de las buenas nuevas del Fabricante, con relación a que todos tienen autoridad personal dentro de ellos, y de que son sumamente valiosos y únicos ante los ojos del Fabricante, y también respecto a que pueden ser restaurados con el Fabricante, a través del don del Distribuidor Autorizado. Pablo parafraseó lo que dice en Isaías 64:4, diciendo, “Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente humana ha concebido lo que Dios ha preparado para quienes lo aman” (1 Corintios 2:9). ¡Yo creo que lo que él estaba indicando es que nadie ha podido ver todavía la persona real que existe dentro de ti! La gente te puede elevar y te puede despreciar, te puede decir que eres un don nadie, y que eres solamente un desperdicio de tiempo, y una irritación sumamente miserable para ellos. Ellos pueden expresar cosas negativas todo el tiempo. Pero las Escrituras dicen que estas gentes no pueden ver, ni escuchar, ni imaginar todo aquello que Dios tiene en mente para ti. Los oídos de la mayoría de la gente solamente pueden escuchar cosas acerca de otras personas, que sólo son una parte de la historia completa. Por ejemplo, alguien
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tal vez puede decirte, “¿Acaso ya escuchaste? Fulana de tal está embarazada”. Tú puedes contestar, “Si, escuché algo, pero de acuerdo a la Palabra de Dios, mis oídos no han escuchado el resto de su historia todavía. El resto de su historia va a venir después de que ella descubra y viva su autoridad personal”. Tú necesitas afirmar esta misma verdad para tu propia vida: todo aquello que yo soy ahora es solamente temporal. Lo que tú ves ahora, no es todo lo que tú vas a llegar a obtener. ¡Sólo Dios tiene la última palabra para mí! Debes recordar que… ••Moisés fue un asesino—temporalmente. (Ver, por ejemplo, Éxodo 2:11–15; 3:1–10). ••Rahab una prostituta—temporalmente. (Ver, por ejemplo, Josué 2; 6:17–25). ••Gedeón fue un cobarde—temporalmente. (Ver, por ejemplo, Jueces 6:11–7:25). ••Pablo de Tarso un asesino—temporalmente. (Ver, por ejemplo, Hechos 7:55–8:3; 9:1–22). Tú no has leído el final de tu historia todavía, y por lo tanto no puedes cerrar el libro. La gente tal vez te ha hecho a un lado, o tú tal vez has saltado algunas páginas de tu libro. Por ejemplo, tal vez tú estabas supuesto a casarte en el capítulo siete del libro de tu vida, pero tú te casaste en el capítulo tres y te divorciaste en el capítulo cinco. Ahora, tú estás pensando, Esto es todo. Ya no queda nada para mí. Dios está diciendo, “No, tú solamente te casaste con la persona equivocada en el capítulo equivocado”. Déjame decirte, que si tú te casaste en el capítulo equivocado, tú vas a necesitar mucha gracia. Pero Dios todavía tiene planes para tu vida, y tú todavía puedes vivir de acuerdo tu autoridad. O tal vez tú
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estabas supuesto a completar tu educación en el capítulo ocho pero tú te saliste de la escuela en el capítulo cuatro. Debes regresar a la escuela y terminar tus estudios, incluso si tú tienes que ir a clases con otros estudiantes mucho más jóvenes que tú. No debes preocuparte acerca de ellos. Sólo sigue adelante con tu sueño y repítete lo siguiente: “Yo tengo que aprender esto para que yo pueda hacer aquello para lo cual fui diseñado desde mi nacimiento”. Si tú necesitas, debes obtener los servicios de un tutor o algún otro tipo de ayuda que te pueda servir para recuperar todo aquello que perdiste mientras que te encontrabas fuera de la escuela. Dios te va a devolver todo aquello que te pertenece. O tal vez tú estabas supuesto a comenzar tu propio negocio en el capítulo trece, pero trataste de comenzar en el capítulo siete, y el negocio fracasó, y tuviste que entrar a un trabajo regular otra vez. Todos esos retrasos no significan necesariamente que los sueños no eran de Dios. Pero tú necesitas ir en busca de los sueños de Dios en el tiempo de Dios. Tú solamente estabas intentando realizarlos en los capítulos equivocados de tu vida. Debes mantener un paso firme y lleno de propósito No trates de apresurar nada. Debes recordar a Carl Lewis, y debes mantener un paso estable para ti mismo, a medida de que tú corres en el camino de tu autoridad. Tú estás a punto de completar el capitulo cinco de tu vida, para moverte hacia el capítulo seis, y entonces ir al capítulo siete, en lugar de estarte concentrando en el capítulo diez. Tú necesitas planear para el futuro, pero no trates de vivirlo antes de que éste futuro llegue. Debes dejar de pensar acerca de todo aquello que tú no tienes todavía, y en lugar de eso, tienes que trabajar para dirigirte hacia tu propósito máximo.
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Hemos leído en 1 Corintios 2:9, que dice, “Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente humana ha concebido lo que Dios ha preparado para quienes lo aman”, el versículo 10 es el factor decisivo; esta es una revelación maravilloso de nuestro Dios Creador. Comienza diciendo, “Pero Dios…” (rvr). Debes recordar que tus maestros realmente no te conocen, el jefe de tu trabajo realmente no te conoce, los oficiales de gobierno realmente no te Tú eres tan conocen, e incluso tu familia real- maravilloso, que mente no te conoce. “Pero Dios…” sólo Dios puede si te conoce. ¿Por qué? Debido a describirte. que Dios es “el autor y consumador” Ningún ser (Hebreos 12:2, rvr) de nuestra fe.
humano puede
“Pero Dios nos las reveló a nosoexplicarte o tros por el Espíritu” (1 Corintios 2:10, describirte. rvr). La única manera de poder conocer la verdad acerca de ti mismo, es por medio de la revelación proveniente del Espíritu Santo de Dios. Tú eres tan asombroso, que necesitas ser explicado directamente por Dios. Ningún humano puede explicarte. Dios mismo tiene que hacer esto. Jesús le dijo a sus discípulos, Cuando llegó a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos:—¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre? Le respondieron:—Unos dicen que es Juan el Bautista, otros que Elías, y otros que Jeremías o uno de los profetas.—Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?—Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente—afirmó Simón Pedro.—Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás—le dijo Jesús—, porque eso no te lo reveló ningún mortal, sino mi Padre que está
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en el cielo. Yo te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y las puertas del reino de la muerte no prevalecerán contra ella. Te daré las llaves del reino de los cielos; todo lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo. (Mateo 16:13–19) De hecho, Jesús le dijo a Pedro, “Pedro, ¡lo único que tú tienes es información! Nadie puede conocerme a menos que el Padre se los revele. Y déjame decirte algo acerca de tu autoridad personal. Tú vas a convertirte en un líder en mi iglesia, y yo te voy a dar las llaves del reino de los cielos”. Aquello que se encuentra dentro de ti es tan tremendo, que sólo Dios tiene los detalles. Esta es la razón de por qué tú no debes permitir que otras personas o tú mismo te limiten, basándose en tu comportamiento o circunstancias pasadas. Pero tú eres mucho más grande de lo que tú has realizado hasta ahora. Nadie realmente te conoce, excepto aquel que te creó, y sólo el Espíritu de Dios puede revelarte los detalles del plan que Dios tiene para ti. Entonces, 1 Corintios 2:10–14 dice lo siguiente: Ahora bien, Dios nos ha revelado esto por medio de su Espíritu, pues el Espíritu lo examina todo, hasta las profundidades de Dios. En efecto, ¿quién conoce los pensamientos del ser humano sino su propio espíritu que está en él? Así mismo, nadie conoce los pensamientos de Dios sino el Espíritu de Dios. Nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo sino el Espíritu que procede de Dios, para que entendamos lo que por su gracia él nos ha concedido. Esto es
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precisamente de lo que hablamos, no con las palabras que enseña la sabiduría humana sino con las que enseña el Espíritu, de modo que expresamos verdades espirituales en términos espirituales. El que no tiene el Espíritu no acepta lo que procede del Espíritu de Dios, pues para él es locura. No puede entenderlo, porque hay que discernirlo espiritualmente. (1 Corintios 2:10–14) De nuevo, cuando comienzas a decirles a las gentes acerca del sueño que Dios ha colocado en tu corazón, algunas veces, todos aquellos que no tienen el Espíritu de Dios van a decir que todo esto es una tontería. Bajo esta base, es muy posible que tú puedas medir la validez de tu sueño, a través de la forma como la gente dice que es muy ridículo. Si todo el mundo dice que si es posible, tal vez eso no es de Dios. Pero cuando la gente comienza a decirte que tú no puedes hacerlo, o que tú no tienes las conexiones para poder hacerlo, entonces eso justamente puede ser algo de Dios. Dios siempre te va a dar un sueño que requiera su ayuda para poder realizarlo. Esta es la razón de por qué siempre va a ser imposible que tú puedas realizarlo por ti solo. Las tareas que Dios nos ha dado siempre requieren de su asistencia y ayuda, de tal manera que podemos darnos cuenta que realmente provienen directamente de Él. La autoridad personal no es lo mismo que la autoridad de uno mismo; nuestra autoridad no se deriva de nosotros mismos, aunque se encuentra dentro de nosotros. Ha sido colocada dentro de nosotros por el Dios Creador. “Si alguien ha de gloriarse, que se gloríe en el Señor” (1 Corintios 1:31). No importa lo que la gente te haya dicho en el pasado, y por eso mismo, tienes que conectarte a la autoridad de
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Dios para tu vida. Debes someterte al Autor de tu salvación, para que puedas descubrir el sueño que Él ha colocado en tu corazón. Debes recordar que estás autorizado para realizar tu propósito en esta vida, y que nadie más puede hacerlo en la misma forma como tú. Tu personalidad ha sido diseñada para tu autoridad. Todo lo que existe acerca de ti es perfecto para que puedas realizar todo aquello para lo cual fuiste creado. Tú tal vez has tenido que recoger muchos hábitos, concepTu personalidad ha tos, e ideas de otras gentes con sido diseñada para relación a cómo debería ser tu tu autoridad. Todo vida. Tú tal vez has aprendido a en ti es perfecto con imitar a otras gentes. Pero desde relación a aquello este día en adelante, tú puedes para lo cual fuiste tomar la determinación de ser una persona auténtica. Debes creado. permitir que tu deseo se convierta en la manifestación de ti mismo. Pero el Dios Creador no te va a permitir que te pierdas en medio de toda la multitud. Tú eres sumamente importante, esencial, original. Debes guardarte en contra de las decisiones que son meramente emocionales Todos nosotros tenemos inversiones emocionales en todas nuestras relaciones con los miembros de nuestra familia, amigos, asesores, y no siempre es fácil poder separarnos de todas estas ataduras emocionales, cuando es necesario, a fin de mantenernos fieles a nuestros propósitos personales. Por ejemplo, Michael Jordan había indicado que la razón principal por la cual él fue en busca del béisbol, fue que su padre—quien había sido asesinado solamente meses antes de que Michael tomara
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la decisión de abandonar el básquetbol—siempre había querido ser un jugador de las grandes ligas del béisbol. El sueño de su amado padre para esta vida, combinado con la tensión emocional de haber perdido su padre, aparentemente lo dirigieron en un área que no tenía nada que ver con sus dones tan especiales.3 Todo este tipo de influencias que todos entendemos, son muy poderosas en nuestra vida, y tenemos que tener mucho cuidado para poder determinar las razones por las cuales hacemos lo que estamos haciendo. Tienes que evaluar si estás siendo verdadero contigo mismo Muy frecuentemente, volteamos a ver las experiencias y situaciones de otras gentes, y las tomamos como nuestra guía, pero fracasamos al no mirarnos en el espejo, y preguntarnos a nosotros mismos, “¿Acaso estoy siendo verdadero a mí mismo, tal y como el Dios Creador reformó? ¿Acaso este soy yo? ¿Acaso es esta persona lo que yo quiero ser realmente?”. De nuevo, la mayoría de nosotros nos hemos convertido en lo que otras gentes han esperado que nosotros seamos. Tenemos miedo de ser quiénes somos realmente, debido a que no queremos provocar ningún tipo de dificultades. Estamos tan ocupados tratando de encajar en todo esto, de tal manera que no tenemos tiempo para levantarnos como nosotros mismos. Estamos tan entregados y dedicados a agradar a todo el mundo, de tal manera que nunca llegamos a agradar a nuestro Dios Creador o a nosotros mismos. Por esto no es nada raro lo que Pablo dijo, “No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente” (Romanos 12:2). La precaución que Pablo nos dio es muy importante, debido a que si no nos conformamos a este tipo
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de presiones, sino que somos transformados a través de la renovación de nuestro entendimiento y pensamiento o de acuerdo a nuestra autoridad, entonces nuestra autoridad y la forma cómo la ponemos en práctica nos va a confirmar completamente: “Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta” (Romanos 12:2). Todos vamos a poder saber aquello para lo cual fuimos diseñados desde el nacimiento y que podemos llegar a ser, y que podemos realizar. No debes permitir que la mentalidad de la sociedad—o tus propios pensamientos que estén basados en la mentalidad de la sociedad—te presionen para determinar cuál debe de ser tu esfera de dominio personal, de acuerdo a todos esos valores, en lugar de que se haga de acuerdo a los valores del Dios Creador.
Bosquejo #3: Conociendo la fuerza de tu propia autoridad Todos los dones de todas las gentes son necesarios Para evitar ser persuadidos excesivamente a través de los demás, tú debes conocer y confiar en la fuerza de tu propia autoridad. Pablo escribió lo siguiente: “Tenemos dones diferentes, según la gracia que se nos ha dado” (Romanos 12:6). Todos nosotros tenemos diferentes dones de acuerdo a la gracia—las habilidades, los talentos—que hemos recibido. Todos los dones diferentes no tienen la misma función, y por lo tanto, necesitamos poder reconocer y disfrutar nuestros dones en particular. “Pues así como cada uno de nosotros tiene un solo cuerpo con muchos miembros, y no todos estos miembros desempeñan la misma función, también nosotros, siendo muchos, formamos un solo cuerpo en Cristo, y cada
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miembro está unido a todos los demás” (Romanos 12:4–5). Todo mundo tiene un área específica de autoridad, un área de dones, y esa autoridad es algo que todo el resto del mundo necesita. Si no podemos encontrar nuestras áreas y tampoco podemos llegar a realizarlas, entonces vamos estar causando debilidad o “enfermedad” en el “cuerpo”; y estamos obstaculizando el bienestar de nuestra generación. De hecho, estamos teniendo un impacto negativo en toda la comunidad. Si nosotros (1) todos pertenecemos los unos a los otros, y (2) todos tenemos dones diferentes, eso significa que los otros miembros de la comunidad necesitan nuestros dones, y nosotros necesitamos los de ellos. Vamos a suponer que tú tienes un dolor de muelas. ¿Acaso tú le pedirías al mecánico que arregla tu automóvil que te revisara la muela? Un mecánico tiene diferentes herramientas, incluyendo pinzas, y si tú quieres tomar esa decisión, ¡estoy seguro que él te puede sacar esa muela! No, la razón de que tú te sientas, cierras tus ojos y confías en un dentista, es que tú respetas los diplomas que están colgando en su pared. Tú crees que él tiene la educación y el entrenamiento que lo califican para trabajar en tus dientes. Tú no quieres estar sentado en una silla dental esperando tener una endodoncia (que te extraigan la raíz de tu muela), y que venga el dentista y te diga, “Ahora, vamos a ver, nunca he hecho esto antes. ¿Qué es lo que debo de hacer primero?”. En este punto, definitivamente es el tiempo para irse corriendo— ¡aunque tengas que brincar por la ventana! “Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que debe tener, sino más bien piense de sí mismo con moderación, según la medida de fe que Dios le haya dado” (Romanos 12:3). Pablo está diciendo que debemos pensar
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de nosotros mismos de acuerdo a los dones que Dios nos ha dado, y que no debemos envanecernos tratando de realizar o establecer algo para lo cual no fuimos diseñados. No tenemos que estar imaginando que pertenecemos a los territorios de otras gentes, sólo porque pensamos que sus tareas nos van a gustar mucho más que las nuestras. En ese sentido, “el hecho de pensar de nosotros más alto de lo que debemos” se refiere a pensar de nosotros mismos en una manera diferente de la que deberíamos pensar, pensando en nosotros en términos de algo que no es correcto para la esfera de dominio de autoridad a la cual hemos sido llamados. ¿Acaso tú no sabes que no vas a poder encontrar tu don por medio Si quieres tener verdadero éxito en ir a la preparatoria o a la univerla vida, tienes que sidad? No se va a encontrar allí. encontrar tu área Al contrario, tú lo llevas contigo, debido a que se encuentra dentro de autoridad, y el de ti. La educación no puede darte don o dones que la un don; solamente puede ayudarte acompañan. a refinarlo. Si tú te encuentras en la Universidad y no conoces el don que tú tienes, tú probablemente vas cambiar materia cada mes. En Proverbios 18:16, Salomón nos dice, de hecho, que nuestros dones son los que abren camino para nosotros, nos prosperan, y nos ponen delante de gentes notables y muy importantes. Es tu don—y no tu educación, ni tu trabajo—lo que te va a poner delante de gentes de mucha influencia. Tu don es el que te va a prosperar. Si tú quieres ser verdaderamente exitoso en la vida, tú tienes que encontrar tu área de autoridad y tienes que encontrar todos los dones que la acompañan. Entonces, tú necesitas tomar la determinación de
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reconocer la fuerza de esa autoridad, permanecer en ella, y desarrollarla. Debes dejar que tu mente sea renovada a través de la Palabra de Dios, y entonces vas a ser transformado en la voluntad perfecta de Dios para ti y para tu vida. No debes pensar de ti mismo más ni menos de lo que tú deberías, sino que debes pensar de ti mismo en la forma correcta—de acuerdo a tu autoridad. “Diferente” no es una opinión de valor “Tenemos dones diferentes” (Romanos 12:6). Espero que esté muy claro para ti que el término “dones diferentes” no quiere decir que algunos dones de autoridad personal son más importantes que otros—la palabra diferente simplemente significa “diferente”. Este punto es crucial debido a que algunas gentes creen que si sus dones no se encuentran en la primera fila del escenario donde todo mundo pueda verlos, entonces ellos deben ser inferiores. Ellos piensan que la persona que siempre está conspicua es aquella que tiene el valor más alto. Pero sólo debido a que tú no te encuentras en la primera línea del escenario, no significa que tú no eres importante. En otro de sus escritos, Pablo dijo que algunas de las partes más importantes del cuerpo están escondidas. (Ver 1 Corintios 12:22–24). Debes considerar la forma cómo funciona el cuerpo humano. Tú nunca puedes ver tu corazón, pero hace circular la sangre a través de todo tu cuerpo y te mantiene con vida. Si tu corazón se convirtiera en algo visible fuera de tu cuerpo, entonces, a menos que tú estuvieras en una sala de operaciones teniendo algún tipo de cirugía, ¡tú de cierto morirías! De igual manera, cuando la gente se encuentra fuera de su lugar de autoridad, ellos pueden “matar” a toda la comunidad.
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Si todo el cuerpo fuera ojo, ¿qué sería del oído? Si todo el cuerpo fuera oído, ¿qué sería del olfato? En realidad, Dios colocó cada miembro del cuerpo como mejor le pareció. Si todos ellos fueran un solo miembro, ¿qué sería del cuerpo? Lo cierto es que hay muchos miembros, pero el cuerpo es uno solo. (1 Corintios 12:17–20) Cuando tú descubres tu don, vas encontrar que funciona mayormente detrás del escenario, pero si tú no te encuentras operando en él, entonces todos aquellos que necesitan de tu don van a estar careciendo de algo vital.
Bosquejo #4: Debes confiar en tus dones inherentes Una vez que tú conoces tu autoridad y puedes reconocer su particularidad, así como la contribución tan importante que puede darle a los demás, tú tienes que confiar en ella. El hecho de confiar en tu don inherente te va a permitir realizar tu autoridad y va a evitar que seas desviado fuera de curso. La mayoría nosotros hemos estado viviendo de una forma “ilegal”. En lugar de estar confiando en nuestros dones, hemos estado tratando de hacer alguna cosa diferente. Por ejemplo, algunas gentes han estado intentando realizar aventuras de negocios para las cuales ellos nunca fueron diseñados desde su nacimiento. Todos estos proyectos se han convertido en algo muy dañino para ellos. Para el tiempo en que ellos ya han fracasado en todos ellos muchas veces, y la vida los ha golpeado por todos lados, ellos deberían poder figurarse que todos estos proyectos no formaban parte de su llamamiento, y deberían regresar a tratar de operar en sus verdaderos dones.
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Es verdad que la búsqueda de cualquier llamamiento genuino va a involucrar algunos retrasos y obstáculos, y requiere perseverancia, pero esto no es a lo que me estoy refiriendo. Estoy hablando de las ocasiones cuando la gente va corriendo detrás de algo que no es correcto para ellos y entonces se ponen echarle la culpa a sus circunstancias, a otras gentes, o los ataques del diablo, con relación a todos sus problemas. Pero ni son las circunstancias, ni los demás, ni el diablo, los responsables por las barreras de lo que ellos están tratando de hacer en todas estas aventuras que no tienen nada que ver con sus esferas de dominio de autoridad personal. Las gentes que tratan de hacer cosas, para las cuales ellos Las gentes que tratan nunca fueron diseñados desde su nacimiento, van a causar dolo- de hacer cosas para las cuales nunca res de cabeza para ellos mismos fueron diseñados y para muchos otros. Ellos van a frustrar a todo el mundo alre- desde su nacimiento, dedor de ellos, y ellos mismos se van a causar dolores van a convertir en el problema.
de cabeza para ellos
No todos poseen los dones mismos y para para poder administrar su propio los demás. negocio. Algunas gentes son mejores con relación a tener un trabajo con un salario fijo, en lugar de un negocio que requiere tomar riesgos y que involucra capital o el hecho de tener que supervisar otras gentes. Ciertas gentes han sido llamadas a organizar todas las cosas, pero no a iniciarlas. El hecho de organizar todas las cosas es tan importante como el hecho de iniciarlas. Cada tuerca necesita un tornillo, pero hay muchísimas tuercas que andan por aquí y por allá sin contar con ningún tornillo en que puedan ser atornilladas. Ellos dicen, “Yo quiero
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hacer esto y quiero aquello”, y saben que no son capaces de hacer esas cosas, pero siguen tratando, de todas maneras. Años más tarde, ellos todavía están endeudados, tratando de figurarse la forma de hacer que su “autoridad” pueda funcionar. Además de esto, una persona puede ser muy talentosa, habilidosa, y tener mucha experiencia con relación a algo, pero ella puede no estar autorizada, debido a que la autoridad tiene una tarea o tareas que son específicas, así como un medio ambiente particular, que se encuentra conectado con todo ello. De nuevo, tú no le permitirías al mecánico que repara tu automóvil que operará tu cuerpo. No importa qué tantos certificados tenga en la pared; el tal vez asistió a diez escuelas diferentes para recibir entrenamiento en mecánica de Carlos y automóviles, y tal vez es el mejor mecánico en todo el país, pero tú no le dirías, “Debido a que eres tan bueno en las reparaciones del motor del automóvil, ¿por qué no me abres con un cuchillo y me haces una cirugía también?”. Sus habilidades no sirven para nada con relación a la cirugía. En forma similar, la autoridad es específica. Todo viene a la siguiente pregunta: ¿Qué cosa es aquélla para la cual yo nací y que realmente debo realizar? También tenemos que darnos cuenta que cuando nos encontramos funcionando fuera de nuestra autoridad, tal vez vamos a estar causando que alguien más se encuentre fuera de orden también, debido a que estamos usurpando su lugar. De esta manera, podemos tener muchos dones, ser muy talentosos y habilidosos, pero también vamos a ser destructores e incluso muy perjudiciales. El mundo se encuentra lleno con gente muy activa pero que no son autorizados. Tú necesitas encontrar el
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lugar donde puedes florecer y que puedes confiar en tu don inherente. ¿Cómo es que tú puedes llegar a florecer? De nuevo, Pablo escribió, “Tenemos dones diferentes, según la gracia que se nos hadado” (Romanos 12:6). Debes notar que el dijo que tú don viene con gracia. La palabra que aquí se traduce como “gracia” en este pasaje, es la palabra derivada del griego charis, la cual se refiere a “la influencia divina en el corazón, conjuntamente con su reflejo en la vida; incluyendo gratitud”. La influencia de Dios nos ha dado la habilidad de poder realizar ciertas cosas. Por lo tanto, si tú has sido formado para ser un árbol de manzanas, y estás tratando de dar fruto como naranjas, tú vas estar muy frustrado, debido a que esa habilidad no se encuentra formada dentro de ti. Dios da gracia para el don y da poder para el propósito. Cuando David fue escogido por Dios para que fuera rey de Israel, y fue ungido por medio del representante de Dios, que era el profeta Samuel, “Entonces el Espíritu del Señor vino con poder sobre David, y desde ese día estuvo con él” (1 Samuel 16:13). David recibió tanto la autoridad para ser un rey, así como el poder que lo capacitó, a través de la unción de Dios. Todo aquello que Dios te da para qué lo llegues a realizar, Él te imparte la gracia necesaria para que puedas hacerlo. Debes recordar que la autoridad es equivalente a su propio poder. En relación a ejercitar los dones personales, Pablo dijo cosas como, “Si es el de prestar un servicio, que lo preste; si es el de enseñar, que enseñe; si es el de animar a otros, que los anime; si es el de socorrer a los necesitados, que dé con generosidad; si es el de dirigir, que dirija con esmero” (Romanos 12:7–8). Debes notar la forma como él sigue diciendo repetitivamente “que…”. Cuando la persona tiene un don, nosotros como sus compañeros, debemos confiar en su habilidad y permitirle que lo ponga en
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práctica. No deberíamos impedirle que pueda ejercitar su don por medio de hacerle sentir culpable acerca de ello, ni tampoco por medio de forzarlo a hacer algo diferente. En otras palabras, Debemos permitir que ese don imparta aquello para lo cual fue creado. Necesitamos permitir que la persona pueda ser quién es realmente. “Si es el de socorrer a los necesitados, que dé con generosidad” (Romanos 12:8). El hecho de dar es un don en sí mismo. Algunas gentes tienen la habilidad para hacer mucho dinero, y ellos lo hacen a fin de poder dar en abundancia a los demás. Algunas gentes simplemente aman el hecho de dar y siempre se encuentran dando algo. Sin siquiera tener que pensarlo, ellos dan hasta sus propias casas y se van a vivir a la calle, sólo para darse cuenta más tarde, ¡Acabo de dar mi casa! Otras gentes tienen mucho trabajo para poder dar algo; ellos tienen que orar para tener la voluntad de poder hacer esto. Algunas gentes parecen necesitar una revelación especial de parte de Dios para que puedan dar algo. Todas las gentes tienen dones diferentes y tienen cualidades diferentes. Pablo mencionó “animar a otros” como un don específico también. Algunas gentes nacieron simplemente para animar a otros y afirmarlos. Cada vez que ellos se encuentran alrededor, ellos dicen cosas que te hacen sentir muy bien acerca de ti mismo. Tal vez Pablo estaba pensando acerca de su compañero de viajes y socio llamado Bernabé, quien había sido diseñado para animar a los demás. Cuando todos aquellos que pertenecían a la nueva iglesia de Jerusalén tenían miedo de Pablo debido a que él era muy bien conocido como un perseguidor, Bernabé animó a todo el mundo y les aseguró, en efecto, “Este hombre está bien. El se ha vuelto a conectar con
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el Dios Creador y se encuentra viviendo en su verdadera autoridad ahora”. Y ellos aceptaron a Pablo debido a que Bernabé los animó para que lo hicieran. (Ver Hechos 9:26–27). Uno de los doce discípulos de Jesús, llamado Andrés, también era una persona que le gustaba animar a los demás. No existe libro en las Escrituras titulado “el libro de Andrés”, pero existen dos libros que fueron titulados con el nombre de su hermano Pedro. Pero Andrés fue la persona que presentó a Pedro con Jesús. (Ver Juan 1:35– 42). Jesús puso a Pedro en orden, y Pedro se convirtió en uno de los líderes principales de la iglesia naciente. Pero Andrés, tiene todo el crédito por haber animado a Pedro para que conociera a Jesús en primer lugar. Todos tienen un papel o función vital. Por lo tanto, permíteme animarte para que no te conviertas en una falsificación, sino para que confíes y ejercites el don que hay en ti, el cual es único. Existen muchas falsificaciones en el mundo hoy en día.
Bosquejo #5: No tienes que disculparte por tu autoridad Para poder ser auténticos en nuestra autoridad, también debemos aprender a aceptar, y debemos sentirnos cómodos con los dones y perspectivas que Dios nos ha otorgado. Algunas gentes siempre están disculpándose por el hecho de ser quienes ellos son realmente. El remedio para esta mentalidad tan impropia se deriva de un versículo que miramos anteriormente: “Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que debe tener” (Romanos 12:3). Otra vez, ¿cuál es el otro lado de esta declaración? Una vez que tú has podido encontrar la forma como debes de pensar acerca de ti mismo—tal y como has aprendido de la Palabra de Dios, a medida que
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tú tienes más conocimiento acerca de la forma como Dios te creó, y a medida que tú eres transformado a través de la renovación de tu mente—entonces, tienes que pensar de esta manera. “Sino más bien piense de sí mismo con moderación, según la medida de fe que Dios le haya dado” (Romanos 12:3). Tienes que pensar de ti mismo con una mente muy clara y honesta—no con intimidación o temor acerca de lo que otros puedan pensar o decir—sino con relación a tu persona como realmente tú fuiste diseñado desde tu creación. Y por lo tanto cuando tú llegas a ser muy bueno con relación a algo, y tú lo sabes, tú puedes decir, “¿Adivinen una cosa? Yo soy muy bueno en esto”. Esto no es orgullo ni estar alardeando, aunque algunas gentes puedan percibirlo esta manera. Tú solamente estás pensando en la forma en que tú debes de pensar acerca de ti mismo, y por medio de manifestar tu don, tú estás permitiendo que otros tengan la oportunidad de combinar sus dones para el bien corporativo.
Bosquejo #6: Debes evaluarte solamente a través de ti mismo No debes evaluarte a través de la autoridad de alguien más A medida que pensamos de nosotros mismos “Sino más bien piense de sí mismo con moderación, según la medida de fe que Dios le haya dado” (Romanos 12:3), necesitamos poder valorar la forma como estamos realizando nuestros propósitos en la vida, con relación a todo aquello para lo cual el Dios Creador nos ha diseñado. No debemos usar ningún otro tipo de medidas, tales como los estándares que tengan que ver con los dones o la falsa autoridad de otras gentes. Existen muchas gentes que se sienten muy orgullosas de las realizaciones que
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han logrado, pero Dios muy probablemente está disgustado con relación a ellas, debido a que estas personas se han desviado completamente de sus verdaderos propósitos. Existen muchas Puede haber cosas que tú has realizado y acerca de las cuales gentes que están muy tú pienses que son grandioorgullosas de sus sas, pero de hecho, Dios está realizaciones, aunque diciendo, “Basado en tu propia Dios se siente muy autoridad, esto no tiene nada que ver con los propósitos que desilusionado de las mismas, debido a que yo tengo para ti”.
ellos se desviaron Ésa es una razón por la completamente cual tú no debes permitir que de sus verdaderos otras gentes te digan que tan “grandioso” eres. Sólo el Dios propósitos. Creador sabe que tan grandioso tú puedes llegar a ser. Cuando tú recibes placas, reconocimientos, o trofeos de otras personas, tú tienes que considerar todos estos honores de acuerdo a una perspectiva mucho más alta. Ellos pueden convertirse en algo muy peligroso para ti, si tú comienzas a pensar que ya has “llegado” y has realizado tu propósito, siendo que de hecho te queda mucho más por hacer. El hecho de ponerse a creer en este tipo de tributos también puede ser algo muy limitante, puesto que ellos reflejan cosas que tú has realizado, basado en una autoridad falsa, en lugar de que sea tu verdadera autoridad. Todos ellos pueden causar que tú te desvíes completamente de curso de donde tú deberías estar basado en tus dones inherentes. Muchas gentes tienen aspiraciones con relación a llegar a ser algo que no están autorizados, y ellos “piensan mucho más alto de ellos mismos” de lo que deberían.
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Debes evaluarte a ti mismo por medio de tu propia capacidad y de tu propio potencial Si tú no has sido desviado de tu curso, sino que al presente te encuentras yendo en busca de tu autoridad personal, necesitas valorar tu progreso en relación a donde tú podrías estar, si tú estuvieras aplicando verdaderamente todo tu potencial, con todo el propósito de llegar a realizarlo. Por ejemplo, si tú automóvil tiene la capacidad de poder viajar a una velocidad de 150 millas por hora, pero tú nunca vas más allá de las 65 millas por hora, eso no cancela la habilidad de tu automóvil para poder viajar a 150 millas por hora. Tal vez tú vas viajando a una velocidad de 65 y rebasas a otra persona en la carretera que va solamente a 50 millas por hora. La otra persona puede impresionarse y decir, “Caramba, ¿acaso no va muy rápido?”, y tú puedes estarte sintiendo muy halagado. Cuando tú te comparas con tu propio “velocímetro”—tu propia capacidad, tu propio potencial—tú, de hecho puedes haberte estado desempeñando muy pobremente. Cuando mi hijo y mi hija eran más jóvenes y todavía estaban en la escuela, yo me senté a platicar con ellos debido a que cada uno de ellos tenía una calificación en su última tarjeta de calificaciones, la cual era mucho más baja de lo que ellos eran capaces de realizar. Mi esposa y yo habíamos trabajado muy fuerte con ellos en todos sus estudios, y conocíamos la capacidad que ellos tenían. Yo le pregunté a mi hija, “¿Acaso tú te encuentras satisfecha con esto?”. Ella me dijo que no, pero añadió, “Pero muchos otros niños reciben calificaciones similares a estas”. Yo dije, “Debemos olvidarnos acerca de los otros niños. ¿Acaso tú te encuentras satisfecha con esto?”. “No, Papá”. “Bueno. ¿Qué es lo que tú piensas que
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eres capaz de poder obtener como calificación en esta clase?”. Ella dijo, “Que podía haber obtenido una calificación de 95”. Yo dije, “Bien. Por lo tanto, ¿por qué no la obtuviste?”. Ella tuvo que juzgarse a sí misma literalmente. Ella dijo, “Esto sucedió porque yo no puse todo mi esfuerzo”. Yo dije, “Como tú puedes ver, tú no necesitas la tarjeta de calificaciones de un maestro. Tú puedes hacer tu propia tarjeta de calificaciones. Si 80 por ciento de la clase obtuvo la misma calificación que está en esa tarjeta de calificaciones, y tú obtuviste un punto más alto que el 80 por ciento, entonces eso te hace parecer como qué hiciste algo muy bueno. Pero si tú te comparas a ti misma a lo que tú deberías haber obtenido, entonces tú esfuerzo no ha sido suficiente. Tú siempre vas a poder encontrar a alguien a quien puedes superar. Pero la persona a quien tú tienes que ‘ganarle’ es a ti mismo”. ¿Alguna vez has tenido la oportunidad de estar parado frente a una multitud y tener que realizar algo, y la multitud aplaudió, pero cuando tú saliste del escenario, tú te encontrabas completamente molesto? He tenido este tipo de experiencia un número de veces. ¿Por qué es que sentimos esto? Debido a que no teníamos que compararnos con relación a la reacción de la gente, sino en comparación a lo que nosotros sabíamos que éramos capaces de realizar. Debes evaluarte a través del propósito que el Dios Creador tiene para ti Cuando nacemos, entramos al escenario que se llama tierra, y nuestra audiencia está formada por uno solo. Nosotros fuimos creados para “realizar algo” para esta audiencia singular. Él es el Fabricante del mundo entero, el Autor de toda la creación. Él creó todo para que todas las cosas pudieran realizar aquello para lo cual
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fueron diseñadas. Y Dios espera tener placer a través de todas estas cosas. La creación “Porque tú creaste todas las cosas; por entera fue tu voluntad existen y fueron creadas” diseñada para (Apocalipsis 4:11, rvr). La creación agradar a Dios. entera fue diseñada para agradar a ¡La única cosa Dios. ¡La única cosa con la cual Dios con la cual Dios está teniendo problemas son los seres humanos! Cada árbol frutal conoce el tiene problemas fruto que esta supuesto a rendir, pero son los seres de alguna manera nosotros como humanos! humanos seguimos queriendo convertirnos en cosas que jamás estuvieron en la intención de Dios para nosotros. Y yo creo que muy frecuentemente Dios está diciendo, “Esto no es lo que yo quería. ¿Cómo es que yo estoy obteniendo este producto, siendo que yo formé uno completamente diferente?”. Esta es la razón por la cual nuestro objetivo o meta número uno no debe ser agradar a otras gentes, si no que debe consistir en agradar al Autor que nos creo. Tal y como Pablo escribió, Nosotros, por nuestra parte, no vamos a jactarnos más de lo debido. Nos limitaremos al campo que Dios nos ha asignado según su medida, en la cual también ustedes están incluidos…. No nos jactamos desmedidamente a costa del trabajo que otros han hecho….Sin tener que jactarnos del trabajo ya hecho por otros. Más bien, “Si alguien ha de gloriarse, que se gloríe en el Señor”. Porque no es aprobado el que se recomienda a sí mismo sino aquel a quien recomienda el Señor. (2 Corintios 10:13, 15–18)
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Debes recordar que la autoridad proviene del Autor y es para el Autor. La autoridad se realiza cuando el Autor es complacido. Esto es algo crítico para Dios. Hasta que Dios diga, “bien hecho”, nosotros no debemos dejar de seguir intentando. Hasta que Dios diga, “bien buen siervo y fiel”, no hemos llegado a lograrlo. (Ver, por ejemplo, Mateo 25:14–29). Todos los demás están aplaudiendo simplemente. Sólo Dios sabe cuándo la función va a terminar. Sólo Dios tiene el derecho de decir cuando tú has tenido éxito o cuando has fracasado. Por lo tanto, el placer del Autor es la meta y objetivo de toda persona autorizada. Pablo enfatizó, “¿Quién eres tú para juzgar al siervo de otro? Que se mantenga en pie, o que caiga, es asunto de su propio señor. Y se mantendrá en pie, porque el Señor tiene poder para sostenerlo” (Romanos 14:4). El Autor conoce qué es lo que Él te dio, y qué es aquello en lo cual estás autorizado a convertirte o llegar a ser. Y tú vas a sostenerte, “porque el Señor tiene poder para sostenerlo”.
Bosquejo #7: Si tú te desvíes de tu autoridad, simplemente vuelve a someterte a tu autoridad otra vez Si en alguna ocasión tú conociste y llegaste a ejercitar tu autoridad personal, pero te has desviado completamente de ella, la primera cosa que debes hacer es volver a someterte a tu autoridad nuevamente, de tal manera que tus dones puedan ser renovados dentro de ti. Tú deberías (1) someterte a tu Dios Creador, (2) someterte a la autoridad personal, sueño, visión, y dones que Dios ha colocado dentro de ti, y que te van a ayudar a guiar tu vida, en lugar de estar tratando de convertirte en una
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persona que no eres, y (3) someterte a otros dentro de la comunidad, y dentro de tus relaciones, de la misma forma como todos los demás usan sus dones para el beneficio de todos los que se encuentran involucrados. Podemos ver este proceso ilustrado en la vida de Pablo. Él se encontraba operando bajo una falsa autoridad, en lugar de operar bajo la autoridad de Dios, por medio de perseguir al mismo pueblo de Dios—los seguidores de Jesús—en Jerusalén. Entonces, “respirando aún amenazas de muerte” (Hechos 9:1). En contra de los discípulos de Jesús, fue a damasco, bajo la sanción de los líderes religiosos no autorizados, para tomar prisioneros a todos los seguidores de Jesús que se encontrarán área. Sin embargo, después de que Pablo tuvo un encuentro con el Jesús resucitado, cuando iba de camino a damasco, toda su perspectiva cambió, y él se vino a meter bajo la autoridad verdadera de Dios. Una vez que hizo esto, Dios envió a un hombre llamado Ananías aquí encontrará a habló, a pesar del temor inicial que tenía Ananías, debido a que Dios quería exhortar a Pablo en la nueva tarea que tenía asignada en la vida, la cual era su verdadera autoridad: Entonces Ananías respondió: —Señor, he oído hablar mucho de ese hombre y de todo el mal que ha causado a tus santos en Jerusalén. Y ahora lo tenemos aquí, autorizado por los jefes de los sacerdotes, para llevarse presos a todos los que invocan tu nombre.—¡Ve!—Insistió el Señor—, porque ese hombre es mi instrumento escogido para dar a conocer mi nombre tanto a las naciones y a sus reyes como al pueblo de Israel. (Hechos 9:13–15)
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Jesús le había dicho durante su encuentro en el camino a Damasco, “¿Qué sacas con darte cabezazos contra la pared?” (Hechos 26:14). La expresión “cabezazos contra la pared” también puede ser definida como “algo que duele tanto como si estuviera enterrado”, como una espina, o como un “aguijón” o una “punta muy afilada”. Tú puedes darte la idea de todo esto. Sin embargo, en un sentido figurativo, puede referirse a un “impulso divino”. Esto parece implicar que muy profundo dentro de sí mismo, Pablo sabía que se encontraba operando bajo una falsa autoridad, y por lo tanto, estaba peleando en contra de este “impulso divino” que se encontraba dentro de él, o la espina de su conciencia, que lo estaba llamando hacia la autoridad verdadera. Este conflicto interior aparentemente era muy doloroso en forma emocional y mental para Pablo. Debes recordar que cuando tú no te encuentras operando de acuerdo tu autoridad, se va a requerir un esfuerzo adicional para que puedas funcionar. No es algo natural. Todas las cosas terminan siendo doblemente difíciles, o tomando el doble de tiempo, o necesitando el doble de atención, debido a que tú no fuiste creado para ellas. En contraste a esto, tal y como hemos visto, cuando tú te encuentras autorizado para poder realizar algo, tú también has sido investido de poder para hacerlo. Una vez que Pablo pudo entender su verdadera autoridad, y se encontraba viviendo de acuerdo a ella, él “cobraba cada vez más fuerza” (Hechos 9:22) por medio de llevar a cabo su verdadera tarea para esta vida. Cualquiera que sea tu don, allí es donde se encuentra tu poder. Tú tienes la autoridad de ser quien tú eres realmente, debido a que tú has sido dotado para ser tú realmente.
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¿Acaso tú eres la persona que realmente quieres ser? ¿Acaso tú ya eres el tipo de persona que quieres llegar a ser en la vida? Si no es así, entonces tú debes dejar de ser el tipo de persona que has estado tratando de ser, y debes comenzar a moverte con dirección a quien tú realmente quieres llegar a ser, debido a que esa va a ser tu verdadera persona. Es lo que tú estás supuesto a manifestar. Eso es lo que otras gentes necesitan recibir de parte tuya. En esto consiste ser auténtico. Cuando tú descubres tu verdadera forma de ser, de repente tú te vas a convertir en una persona distinta. No exclusiva, simplemente distinta. Sí, tú vas a necesitar otras gentes, pero tú no vas querer ser como todos los demás. Otras personas van a poder aprender de ti, pero ellos tampoco se van a convertir en lo que tú eres, y viceversa. El Dios Creador está buscando gentes que anhelen convertirse en aquello para lo cual Él los diseñó. Todo lo que Él puso en ti, muy bien puede estar sepultado bajo la influencia de las perspectivas falsificadas de otras gentes, los estilos de vida falsificados, por las ideas falsificadas y las opiniones acerca de ti, todo esto junto con tu propia incertidumbre y mal entendimiento con relación a tu propósito. Como resultado de esto, Dios no puede ver la reflexión de sí mismo que Él colocó dentro de ti, y Él no puede testificar la manifestación de sus ideas a través de ti. ¿Acaso tú vas a llegar a ser todo aquello para lo cual fuiste creado? El hecho de encender tu autoridad personal a través de estos siete bosquejos, te va a permitir experimentar la realidad y el poder de vivir de acuerdo a tu esfera de autoridad personal.
Capítulo once
La naturaleza interdependiente de la autoridad Los beneficios y responsabilidades de la instrucción, delegación, y sumisión
L
a autoridad es un esfuerzo de equipo más que una actividad de una sola persona. Aunque cada individuo tiene una autoridad personal, la naturaleza de la autoridad es tal, que los propósitos de las gentes se encuentran relacionados entre sí, y funcionan en forma interdependiente en la vida corporativa. Es un principio fundamental, el hecho de que cada uno de nosotros necesitamos la autoridad de los unos y de los otros, para poder realizar nuestra propia autoridad.
Cada persona en la tierra tiene que someterse a la autoridad En el capítulo cinco, pudimos ver que nada de lo que el Creador ha hecho existe sin que se someta a algún tipo de autoridad, y debido a su propia naturaleza, la autoridad involucra tanto dependencia, como interdependencia. En primer lugar, todo depende del Creador para poder existir, debido a que todo en esta vida fluye a partir de Él, y es sostenido por Él. En segundo lugar, las vidas de los seres vivos se encuentran entretejidas 269
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entre sí en una forma natural debido a su existencia y a su crecimiento. En tercer lugar, todos necesitamos someternos a la autoridad personal de otros, a fin de que podamos funcionar en esta vida, y todos de una manera natural, necesitamos estar sometidos a la autoridad de los demás. Yo uso el ejemplo común y corriente de la sumisión en donde podemos confiar en la autoridad del dentista, para qué trabaje de una manera segura y eficiente en nuestros dientes. Existen cientos de otros tipos de ejemplos, tales como la necesidad de detenerse ante la luz roja de un semáforo, o la necesidad de ceder el paso a otros vehículos cuando nos encontramos manejando. La mayoría de la cortesía común y corriente, de hecho, es una forma de sumisión de los unos a los otros, por el beneficio común. Aunque la interdependencia es un estado natural de la vida, el hecho de dar y tomar con relación a la autoridad genuina, es algo que se ha perdido por un buen tiempo. El mal uso y el abuso de la autoridad han permitido que se levanten diferentes tipos de conceptos equivocados acerca de los líderes y los seguidores, con relación a las características de la sumisión, siendo esto el causante de que la gente sea parte de situaciones donde ellos sienten que van a “tomar órdenes” de otros. Como un componente de este tipo de mentalidad está el hecho de que mucha gente se ha sentido sobrecogida por diferentes circunstancias en su vida, las cuales les han hecho sentir que están completamente indefensos. De nuevo, debido a que muchos de nuestros padres, maestros, jefes en nuestros trabajos, y otro tipo de figuras de autoridades no pudieron entender la autoridad, y la mal usaron con relación a nosotros, ahora nosotros nos encontramos con mucho miedo de someternos a los
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demás, y por lo tanto, nos es muy difícil poder poner en práctica nuestra propia autoridad verdadera. Por consecuencia, muchos de nosotros tenemos sueños, metas y objetivos, y dones, todo lo cual se encuentra atrapado dentro de nosotros. A pesar de sus experiencias pasadas, todos aquellos que han resistido la sumisión genuina y el concepto de delegación, se han robado a sí mismos de los beneficios y oportunidades que se encuentran conectados con las relaciones interdependientes. Desafortunadamente, ellos se han restringido a sí mismos de no poder experimentar el propósito y la voluntad de Dios para sus vidas, a través de sus actitudes, con relación a lo que ellos perciben como “autoridad”.
Existe un tiempo para delegar, y existe un tiempo para someterse En varias ocasiones a través de tu vida, tú vas a recibir el llamamiento para delegar a otros, y todo esto basado en tu autoridad. En otras ocasio- El hecho de entender la verdadera nes, vas a tener el llamamiento de someterte a otros, basado esto delegación y la en su autoridad. Esto solamente verdadera sumisión, es parte natural de la vida. No nos van a liberar es algo de lo cual debas sentirte a todos nosotros, incómodo, ya sea que tú estés en el lado de dar o en el lado de reci- para que podamos experimentar los bir. Algunas gentes se sienten muy incómodas con relación a dirigir a otros, de la misma forma que se sienten incómodos con
propósitos y planes del Dios Creador para nuestra vida.
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relación a recibir órdenes, debido a que ellos no quieren sentir como si estuvieran “siendo manipulados como títeres por todos lados”. El hecho de no querer ejercitar la falsa autoridad es una actitud muy buena, y éste tipo de preocupación podría ser válido si delegar fuera la misma cosa que pudiera equivaler a actuar como un tirano o tener el “espíritu de jefe”. Pero no lo es. Al contrario, la delegación es un aspecto natural de la autoridad legítima. Todos nosotros necesitamos poder reconocer esta verdad, porque la función de dirigir y asesorar a otros puede ser una parte integral de realizar nuestra propia autoridad personal. Por lo tanto, el hecho de poder entender la verdadera delegación y la verdadera sumisión, nos va a liberar a todos nosotros, para que podamos experimentar los propósitos y los planes del Dios Creador para nuestras vidas. A medida que investigamos los temas de delegación, asesoramiento, y sumisión en este capítulo, tenemos que mantener en mente los siguientes puntos tan fundamentales: 1. Nuestra autoridad máxima es de Dios; tenemos que someternos a Él y a sus propósitos para nuestra vida. 2. Debemos “someternos” o vivir de acuerdo a nuestra esfera de dominio inherente—que son la autoridad, sueños, y dones que Dios nos ha dado—en lugar de tratar de ser alguien que no somos, o tratar de tener éxito por medio de motivaciones que no son adecuadas. 3. Debemos someternos a la autoridad que Dios les ha dado a otros en las relaciones y en la comunidad. 4. Para que podamos funcionar adecuadamente en el papel de la persona que delega, o de la
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persona que recibe delegación, es vital que sepamos claramente nuestro propio valor. Debemos conocer que somos de gran valor ante los ojos de Dios, y que Él nos ha dado dones y habilidades especiales, con los cuales podemos contribuir a la vida corporativa, o de otra manera, vamos a ser influenciados excesivamente por las opiniones y demandas de las gentes, y vamos a ser incapaces de poder realizar nuestra autoridad. Vamos a mirar ahora lo que significa delegar autoridad y someterse a la autoridad, así como las responsabilidades y beneficios que se encuentran conectados con cada una de estas funciones.
Principios para las personas que delegan autoridad, y para las personas que reciben la delegación de autoridad Todos nosotros fuimos creados a la imagen de Dios, y Dios mismo La autoridad que es un experto en delegar. Él ha delerecibiste de Dios gado autoridad para cada uno de te fue investida nosotros con relación a nuestros para que la propósitos individuales y también con relación al placer de esta vida. compartas con Dios “que nos provee de todo en otros, obteniendo abundancia para que lo disfrutemos” resultados (1 Timoteo 6:17). En forma similar, positivos. parte de la delegación de autoridad de Dios consiste en darle a la gente la habilidad para que pueda poner en práctica la autoridad de otros, a través del asesoramiento, y de la búsqueda de objetivos comunes. La delegación humana, por lo tanto, es la transferencia de autoridad. Consiste en tomar el permiso que
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tú tienes de parte del Dios Creador para usar poder, y compartirlo con alguien más. La delegación le otorga a la otra persona el derecho de funcionar en esa autoridad. Los siguientes son principios elementales para la autoridad delegada. La autoridad es legítima sólo si ha sido delegada A menos que la autoridad haya sido delegada, tú no la posees realmente. No puede ser arrebatada y tiene que ser legítima. La autoridad tiene que ser dada debido a razones y propósitos específicos, y ninguno de estos pueden llevarse a cabo si alguien no ha sido autorizado. Esta la razón de que toda autoridad debe provenir de Dios como la Autoridad Máxima, y es la razón también de que cualquier tipo de autoridad que administremos como seres humanos, tiene que haber sido otorgada por Dios también. La autoridad es dada para que pueda ser compartida La autoridad no es otorgada para guardarse solamente, sino para ser distribuida. La autoridad que tú has recibido de Dios, fue impartida para que la puedas compartir con otros, y para que todos conjuntamente puedan obtener resultados positivos. Mientras que este principio es verdadero para cualquiera en su autoridad personal—todos los dones y habilidades han sido otorgados para beneficio, no sólo de nosotros mismos, sino también de los demás—esto se aplica en forma muy especial a todos aquellos que tienen áreas de supervisión o de poder y que pueden delegar a otros. La delegación de la autoridad es la transferencia legítima de poder, para capacitar a los demás y que puedan ejercitar u operar en su propia autoridad. Tal vez la forma más alta de delegación es lo que enviste de poder a la gente, para que
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ellos a su vez puedan investir a otros, por el beneficio de todos. Cualquiera que guarda su autoridad y rehúsa delegarla, va a estar violando un principio natural de la autoridad. Igual que el maná que guardaron los israelitas, la autoridad no debe ser usada con este tipo de intenciones, porque de otra manera se corrompe. (Ver Éxodo 16:13–20). Cristo Jesús ejemplificó en forma perfecta el principio de la autoridad compartida. Él siempre delegó su autoridad con el propósito de beneficiar a los demás. Como el Hijo de Dios, como el Verbo hecho carne, Jesús parecía recibir autoridad en forma progresiva del Padre celestial. Pero todo tipo y forma de autoridad que Él recibió, siempre la usó y la delegó para servir a los demás. Aquí hay algunos ejemplos: ••La obediencia de Jesús hasta el tiempo que incluye su bautismo por Juan provocó la siguiente afirmación de su Padre celestial: “Éste es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él” (Mateo 3:17). Jesús era uno solo en propósito con el Padre celestial. ••Después de que Jesús venció todas las tentaciones del diablo, Él “regresó a Galilea en el poder del Espíritu” (Lucas 4:14). Jesús había recibido autoridad y poder para su ministerio. ••Jesús manifestó esa autoridad y ese poder: “Jesús recorría toda Galilea, enseñando en las sinagogas, anunciando las buenas nuevas del reino, y sanando toda enfermedad y dolencia entre la gente” (Mateo 4:23). ••Después de que Jesús había demostrado que Él tenía el poder y la autoridad del Padre
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celestial, Él a su vez, delegó a sus discípulos: “Reunió a sus doce discípulos y les dio autoridad para expulsar a los espíritus malignos y sanar toda enfermedad y toda dolencia” (Mateo 10:1). • Jesús delegó autoridad a muchos otros de sus seguidores: “Después de esto, el Señor escogió a otros setenta y dos para enviarlos de dos en dos delante de él a todo pueblo y lugar adonde él pensaba ir” (Lucas 10:1). • A través de su vida tan obediente y de su muerte como sacrificio, Jesús calificó para “la Máxima Autoridad”. Después de su resurrección, Jesús le dijo a sus seguidores, “Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo” (Mateo 28:18–20). Debes notar que en respuesta a que toda la autoridad le había sido dada a Jesús, les dijo a sus discípulos, “Por tanto, vayan”. Jesús de inmediato delegó su autoridad. El no controló, no la guardó, y tampoco la vendió. Jesús no dijo, “Toda autoridad me ha sido dada; por lo tanto, la voy a usar para mi propio provecho”. Jesús la distribuyó. • Jesús prometió autoridad adicional para sus seguidores: “Al que salga vencedor y cumpla mi voluntad hasta el fin, le daré autoridad sobre las naciones” (Apocalipsis 2:26).
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Jesús constantemente estaba transfiriendo autoridad a fin de poder realizar su propósito, y para qué se pudieran llevar a cabo los propósitos de otros, y para beneficiar a la comunidad y al mundo entero. Todos nosotros a quienes nos ha sido otorgada autoridad debemos hacer lo mismo.
Si alguien es una autoridad legítima, esto se prueba a través de ver que tanto ha beneficiado su autoridad la vida de otras gentes.
La autoridad, ya sea que se trate de autoridad personal o corporativa, siempre tiene que ser usada para servir, beneficiar, o mejorar a los demás. Pablo escribió de la “autoridad que el Señor nos ha dado para la edificación y no para la destrucción de ustedes” (2 Corintios 10:8). Si alguien que se encuentra en una posición de autoridad no ayuda a los demás, él o ella no está ejercitando una genuina autoridad, sino simplemente poder. La autoridad no debe ser delegada basándose en favoritismo La delegación de autoridad no debería ser motivada ni total, ni parcialmente por el favoritismo. Esto es con el fin de mantener la naturaleza de nuestro Dios Creador. “Ahora comprendo que en realidad para Dios no hay favoritismos, sino que en toda nación él ve con agrado a los que le temen y actúan con justicia” (Hechos 10:34–35). Pablo escribió a su discípulo Timoteo lo siguiente: “A que sigas estas instrucciones sin dejarte llevar de prejuicios ni favoritismos” (1 Timoteo 5:21). Y podemos leer en el libro de Santiago, Hermanos míos, la fe que tienen en nuestro glorioso Señor Jesucristo no debe dar lugar a favoritismos. Supongamos que en el lugar
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donde se reúnen entra un hombre con anillo de oro y ropa elegante, y entra también un pobre desarrapado. Si atienden bien al que lleva ropa elegante y le dicen: “Siéntese usted aquí, en este lugar cómodo”, pero al pobre le dicen: “Quédate ahí de pie” o “Siéntate en el suelo, a mis pies”, ¿acaso no hacen discriminación entre ustedes, juzgando con malas intenciones?… Pero si muestran algún favoritismo, pecan y son culpables, pues la misma ley los acusa de ser transgresores. (Santiago 2:1–4, 9) Tú no puedes dar autoridad solamente porque alguien te agrada, sino tiene que ser debido a que sus dones, talentos, y personalidad, que son únicos, corresponden con las tareas o la supervisión que necesita ser delegada para un proyecto específico. De esta manera, tú estás siendo responsable por la autoridad que también a ti te fue delegada. Nunca debe darse a autoridad a una persona que no ha sido probada previamente La autoridad junto con el poder que la acompaña, nunca debe ser delegada a alguien que es inmaduro, o a alguien que es un novato en el área de la supervisión. Al contrario, el poder delegado tiene que ser investido gradualmente, e instalado como resultado de la confianza que uno tiene en que esa persona a quien se le ha delegado, poco a poco se ha ganado todo esto con el tiempo. Antes de delegar autoridad, en primer lugar, tú deberías evaluar la madurez de una persona, por medio de aprender cómo es que esa persona ha funcionado debajo de autoridad en el pasado. ¿Acaso esa persona trabaja bien con otros, o él o ella siempre se encuentran peleando en contra de la dirección e instrucciones, y es una persona
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contenciosa abiertamente o en una forma sutil? Ninguna persona puede estar abierta a una autoridad a la cual no se ha sometido. La persona que recibe la autoridad también debe permitir a la persona que se la esta delegando que lo guié y que lo apoye. Pablo escribió lo siguiente: “Si es el [don] de dirigir, que dirija con esmero” (Romanos 12:8). En otras palabras, debes permitir que esa persona a quien Dios llamó para ser un visionario y un supervisor, pueda ser visionario y supervisor. La persona que recibe la delegación no debe de darle todo tipo de dificultades de oposición. Si la persona que está delegando se ve forzada a convertirse en algo que no es debido a la resistencia de aquellos a quienes él está tratando de delegar, esto va a causar problemas para toda la organización. Deben permitirle que permanezca dentro de su autoridad. Todos aquellos que no han sido probados con relación a la sumisión son potencialmente líderes muy peligrosos. ¿Por qué? Normalmente venimos a confiar en alguien como resultado de haber probado la actitud de esa persona con relación al poder, la fama, la popularidad, el orgullo, y cosas parecidas a éstas. Todo este tipo de actitudes son muy peligrosas para alguien que se encuentra en una posición de liderazgo, y necesitan ser confrontadas antes de que se le otorgue autoridad a alguna persona. Hemos podido testificar los resultados tan trágicos en naciones a través de todo el mundo, después de que a alguien se le ha confiado autoridad, o esa persona ha arrebatado la función de liderazgo para la cual no se encontraba calificado. Debes recordar que Jesús mismo fue aprobado y aprobado como digno de confianza en tres áreas diferentes, antes de que Él pudiera comenzar a embarcarse
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de lleno en el propósito de su vida. Estas pruebas ocurrieron durante su tentación por el diablo en el desierto, justo después de que fue bautizado por Juan. (Ver Mateo 4:1–11). Cualquiera Una persona que se encuentra en el liderazgo debe debe ser capaz pasar estas mismas pruebas:
de controlar sus deseos físicos, antes de que se le pueda dar autoridad y poder.
1. La prueba de los apetitos. Esta prueba incluye la bebida, la comida, y el sexo. El diablo quería que Jesús gratificara su hambre mucho más que cualquier otro tipo de consideraciones, incluyendo su relación con Dios el Padre. Una persona debe ser capaz de administrar y controlar sus deseos físicos, antes de que pueda recibir a autoridad y poder.
2. La prueba de la fama y popularidad. Cuando el diablo le presentó el reto a Jesús para que saltara del pináculo del templo, la plaza que se encontraba debajo estaba llena con más de un cuarto de millón de gentes que habían venido a Jerusalén para la fiesta de la Pascua. El punto de esta prueba consistía en ver si Jesús podría desear la fama instantánea, en lugar de seguir siendo obediente hacia Dios y poder recibir “toda la autoridad” en el tiempo correcto, después de su sacrificio y resurrección. (Ver Mateo 28:18). Si la persona no ha pasado la prueba de la popularidad y el deseo por la fama instantánea, él o ella no es digno de confianza con relación a la autoridad. 3. La prueba del poder. El diablo le dijo Jesús que si lo adoraba, le daría todo el poder sobre los
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reinos de la tierra. A nadie se le debe dar autoridad, sino a aquella persona que no desea el poder para usarlo en su propio beneficio. Las tres calificaciones establecidas por Dios, luego entonces, para que una persona pueda ser confiada con el ejercicio de la autoridad, así como para que pueda delegarla a otros, son el control sobre los apetitos de uno mismo, la voluntad para ir a través del proceso de sumisión y obediencia, a fin de ganarse la confianza y el respeto, en lugar de ir en busca de la fama instantánea, y el deseo de servir en lugar de simplemente desear el uso del poder. Debes notar que incluso aunque Jesús ya había sido afirmado por Dios el Padre como su Hijo, debido a la sumisión y obediencia de Jesús, Dios aún así lo probó. Después de pasar las pruebas, “Jesús regresó a Galilea en el poder del Espíritu” (Lucas 4:14). Jesús recibió la investidura de un aumento de autoridad. Y Él nunca abusó de su autoridad para obtener ganancias personales, para destruir a los demás—incluyendo esto a sus enemigos—o por la fama. Jesús la usó para la redención, el progreso, desarrollo, y protección de otras gentes. Jesús es nuestro claro ejemplo de que el máximo propósito de la autoridad y poder es el servicio—el hecho de servir a los intereses y a las necesidades de los demás nunca es de carácter egoísta. Este tipo de actitud con relación a la autoridad de uno es tan crucial, y esto hace que las pruebas sean necesarias. Por lo tanto, el verdadero éxito en la vida, requiere de la sumisión a la autoridad legítima. El espíritu de una genuina sumisión y humildad siempre va a traer favor delante de Dios. De igual manera, el éxito de una persona cuando tiene que delegar autoridad, va a depender en la habilidad que tenga para someterse a la autoridad
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genuina, para poder aprender de ella, y para poder servir a los demás. Es sólo cuando llegamos a aprender la verdadera sumisión, que podemos convertirnos en líderes verdaderos. Nosotros podemos decidir si queremos tener éxito o si queremos fracasar ante los ojos de Dios, a través de la actitud que tengamos con relación a la autoridad. La autoridad delegada debe ser precedida por la preparación Antes de que tú puedas delegar autoridad a una persona, tú debes prepararlo y entrenarlo. La persona que recibe la delegación de autoridad, en primer lugar necesita ser enseñado con relación al verdadero propósito y responsabilidad de la autoridad. La gente tiene que ser preparada para que pueda recibir el poder, debido a que el uso de Un requisito poder es la máxima forma de respara el uso de ponsabilidad. Es solo hasta que una la autoridad es persona llega a entender el peligro del poder, así como sus beneficios, la cualidad de la humildad. La que él o ella puede recibir autoridad. Esta es la razón de por qué un humildad es la conciencia de la requisito indispensable para el uso del poder de la autoridad, es la cuavulnerabilidad de lidad de humildad. La humildad es uno mismo. la conciencia de las vulnerabilidades de uno. Tú no puedes confiar completamente en una persona que no conoce sus propias debilidades, o que no está dispuesta a contraatacar o a compensar esas debilidades. La persona que recibe la delegación de autoridad, también necesita ser entrenada en los diversos aspectos de sus futuras responsabilidades como supervisor.
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Una función esencial de alguien que se encuentra en la posición de delegar autoridad, es poder conocer cuando una persona está lista para recibir autoridad. La autoridad no debe ser delegada en forma prematura. La autoridad delegada no debe ser abandonada La autoridad y el poder deben ser delegados poco a poco, y no deben abandonarse jamás. La persona que está delegando autoridad sigue siendo responsable por ello, incluso después de haberlos compartido con alguien más. La autoridad siempre es responsable por la autoridad que ha sido delegada. Cuando Jesús les dio autoridad a sus discípulos, no los dejó abandonados, para que ellos solos tratarán de figurarse qué era lo que estaban supuestos a realizar a continuación. Jesús dijo, “No los voy a dejar huérfanos; volveré a ustedes” (Juan 14:18), y “Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo” (Mateo 28:20). Aquellos a quienes tú delegas autoridad pueden estar a cargo de varias áreas, pero tú sigues siendo responsable de todas esas áreas al final de cuentas. Esta es la razón de por qué tú necesitas hacer seguimiento, asesorar, y regular la autoridad que has delegado en forma continua. La delegación siempre va a contar con un factor de responsabilidad. Si yo le delego autoridad a alguien más, yo debo permanecer consciente del hecho de que lo que le he proporcionado a esa persona, me había sido otorgado a mí como un préstamo también. Por lo tanto, aunque yo haya delegado autoridad, estoy usando un poder prestado. De nuevo, toda aquella persona que se encuentra bajo autoridad tiene que rendir cuentas a la Autoridad Máxima.
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La autoridad delegada siempre va a ser una autoridad delegada De la misma forma, si la autoridad te ha sido delegada, esto no te da licencia para que tú comiences a funcionar completamente por su propia cuenta. Siempre debes recordar que tu autoridad es una confianza que te ha sido otorgada, y que tú eres responsable de rendir cuentas ante la persona que te la dio. Para ponerlo en una forma muy simple, la autoridad es sinónimo de responsabilidad. La necesidad de reportar a la persona que delegó la autoridad se encuentra inherente. Podemos responder en forma constructiva ante la autoridad de otros, a medida que reconocemos su propia autoridad inherente, la cual les ha sido dada por Dios. La autoridad delegada debería ser auténtica La persona que delega autoridad nunca debe intentar forzar a la persona que recibe la delegación de autoridad a que viole o descuide su propia esfera de autoridad personal, y que a consecuencia de esto se convierta en una persona no auténtica. En otras palabras, no debemos hacer que la gente opere en esferas de dominio que no sean naturales para ellos; no debemos esperar que los árboles de naranjas den manzanas. La persona ha recibido dones que provienen de su Dios Creador, para que sean usados “en proporción con su fe” (Romanos 12:6), y por lo tanto, un líder necesita permitirle a la gente que use sus verdaderos dones. Debes permitir que las gentes sean quienes ellos son verdaderamente, y no sólo imágenes de tu propia creación. El beneficio va a ser algo mucho más feliz, que va a constituir personas que reciben autoridad delegada y que van a ser más productivos, en lugar de que sean personas quejosas y contenciosas.
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La autoridad delegada es protegida por la persona que delega De la misma forma cómo el Dios Creador apoya y protege a los seres humanos que son recipientes de su autoridad, la persona que delega autoridad es responsable de proteger a la persona a quien se la ha delegado. La persona que recibe la autoridad delegada debería tener el permiso de llevar a cabo o poner en práctica la autoridad que le ha sido concedida. Sin embargo, él o ella también debe recibir la seguridad de que cada vez que sea necesario, debe referirse o apelar a la persona que le delegó la autoridad, la cual debe ser una prioridad, el hecho de ofrecer su ayuda, sabiduría, dirección, y motivación. Si surge algún problema, a final de cuentas esto es responsabilidad de la persona que delegó la responsabilidad. La autoridad delegada puede ser retirada La persona que se encuentra en autoridad nunca debe tener miedo de retirar la autoridad delegada, cada vez que esto sea necesario. La autoridad es un privilegio y no un derecho. Es el permiso de usar el poder que le corresponde a otra persona. Alguien que se encuentra funcionando fuera de su autoridad delegada es ilegal, y no puede confiarse en esa persona completamente. Jesús contó una parábola en donde un hombre rico descubrió que su administrador había tergiversado sus recursos, y entonces, le dijo, “Ya no podrás más ser mayordomo” (Lucas 16:2, rvr). Aunque este administrador terminó por redimirse a si mismo ante los ojos de su patrón, Jesús nos estaba diciendo que la autoridad puede ser retirada debido al mal uso. Si una persona nos decepciona o defrauda, podemos retirar la autoridad y responsabilidades de esa persona.
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Debido a que la autoridad delegada siempre es algo prestado, la persona que la distribuye es responsable de cómo, cuándo, y a quien es delegada esa autoridad, y él va a tener que dar cuentas por ello. Algunas veces, la persona que delega autoridad tiene que remover a alguien de una posición de autoridad, por la misma razón de que él es responsable ante Dios, y esa es la acción responsable que el debe ejecutar, por la protección y beneficio de todos aquellos que se encuentren involucrados Existe un número de veces en la historia de Israel, cuando la gente estaba representando equivocadamente a Dios como su fuente de origen, de tal grado que Dios, de alguna manera, en forma temporal tenía que removerlos de su función hasta que ellos se arrepintieran y voltearán de todo corazón a Dios, y a la tarea que tenían con relación a revelar la naturaleza y propósitos de Dios a todo el mundo. Incluso durante sus períodos de “remociones”, Dios seguía trabajando en las vidas de los individuos israelitas para que sus propósitos divinos continuaran en ellos, pero la nación no estaba funcionando en la forma cómo debía de hacerlo. Para regresar a un ejemplo que vimos anteriormente, si yo soy el líder de una nación y te otorgo la autoridad de ir como embajador a otro país, entonces el poder, o el apoyo, corresponsabilidad, de llevar a cabo la tarea va conjuntamente. Lo que te da la autorización es el hecho de que yo te lo otorgué. Y tú tienes que usar esa autorización para las razones específicas de que te fue dada, o de otra manera, se convierte en un mal uso del poder. En este caso, yo puedo removerte de ese otro país, y hacerte responsable por tú falta de representación. Si tú cambias tu actitud, yo puedo volverte a enviar para que termines tu tarea. Si tú rehúsas representar
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mis políticas, yo puedo quitarte tus tareas y dárselas a otro que sí las va a llevar a cabo.
Los beneficios de la sumisión genuina Toda vez que es nuestra posición someternos a la autoridad de otros, ¿cómo es que debemos pensar acerca de nuestra función? De nuevo, la sumisión es un acto voluntario y natural que forma parte de la naturaleza interdependiente de la autoridad. No es lo mismo que rendirse, donde una persona sucumbe ante otra a través de la manipulación y el temor.
La sumisión genuina consiste en la voluntad consciente de una persona para someterse a la autoridad personal que Dios le dio a otra La sumisión genuina consiste persona. en la conciencia y voluntad de una persona para rendirse ante la autoridad personal que Dios le ha dado a otra persona. Las Escrituras dicen que Jesús fue “fiel al que lo nombró” y que el fue honrado por haberse sometido a la misión que tenía en esta vida, incluso hasta el punto de pagar el máximo sacrificio por nosotros. Por lo tanto, hermanos, ustedes que han sido santificados y que tienen parte en el mismo llamamiento celestial, consideren a Jesús, apóstol y sumo sacerdote de la fe que profesamos. Él fue fiel al que lo nombró, como lo fue también Moisés en toda la casa de Dios. De hecho, Jesús ha sido estimado digno de mayor honor que Moisés, así como el constructor de una casa recibe mayor honor que la casa misma. Porque toda casa tiene su constructor, pero el constructor de todo es Dios. (Hebreos 3:1–4)
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Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe, quien por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios. (Hebreos 12:2) El primer Adán no se sometido a Dios, pero Jesús que es “el último Adán” (1 Corintios 15:45), si lo hizo. Nosotros tenemos que enfocarnos en Jesús como él “Autor y Perfeccionador” de nuestra fe y de nuestra autoridad. Él está calificado para ser el Autor y el Perfeccionador, debido a que Él se sometió completamente a la autoridad de Dios el Padre. Vamos a regresar a la escena del bautismo de Jesús, a fin de que podamos subrayar los beneficios de la sumisión a Dios, y de la sumisión a aquellos a quienes Dios les ha delegado autoridad. Debes recordar que Jesús se sometió a Juan de acuerdo con la autoridad que Juan había recibido de Dios para bautizar. Tan pronto como Jesús fue bautizado, subió del agua. En ese momento se abrió el cielo, y él vio al Espíritu de Dios bajar como una paloma y posarse sobre él. Y una voz del cielo decía: “Éste es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él”. Luego el Espíritu llevó a Jesús al desierto para que el diablo lo sometiera a tentación. (Mateo 3:16–4:1) A partir de este relato, podemos echar un vistazo a estos beneficios de una sumisión genuina y muy fiel: ••El cielo, o lo que es la presencia y los recursos de Dios, se abren completamente sobre tu vida. Tú tienes acceso a los privilegios de una verdadera relación y conexión con Él.
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••Tú eres “presentado” a otros a través de Dios mismo. Tú no necesitas estar luchando para promoverte a ti mismo, debido a que Dios te va a dar la promoción, a medida que tú sigues fielmente sus caminos. •• Tú debes ser confirmado directamente por Dios mismo. Dios el Padre llamó a Jesús “mi hijo amado”, y a medida que tomamos el ejemplo de Jesús para nuestras vidas, nosotros también vamos a ser confirmados de una manera similar como miembros de la familia de Dios. Jesús dijo, “Pues mi hermano, mi hermana y mi madre son los que hacen la voluntad de mi Padre que está en el cielo” (Mateo 12:50). ••Tú recibes una función especial del Espíritu de Dios, la cual se encuentra disponible sólo para aquellos que están bajo su misión. ••Debes estar preparado y equipado a través del Espíritu de Dios para las pruebas y tribulaciones. ••Algunas veces, tú vas a recibir un honor mucho más grande que la persona a la cual tú te estás sometiendo. Como Dios en la carne, Jesús era mucho más grande que Juan el Bautista y que todas las otras gentes, aunque la manifestación de su grandeza dependía en la sumisión que Él presentara ante la autoridad. A medida que tú te sometes a la autoridad en esta tierra, tú vas a poder encontrar que tú te conviertes en alguien “mucho más grande” que la persona a quien tú te estás sometiendo, con relación a la influencia o
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realizaciones. Esto no siempre es el caso, y tampoco quiere decir que tú tienes más valor que la otra persona. Esto puede significar que tú autoridad personal se extiende en forma natural a una esfera mucho más amplia y mucho más profunda en esta vida. ¿Acaso los beneficios mencionados anteriormente han llegado a cambiar tu perspectiva con relación a la sumisión?
Entrando en una relación de asesor-asesorado La función de dar y de tomar con relación a la autoridad y a la Si tú eres sabio, vas a realizar una sumisión puede ser ejemplificada mucho mejor a través de la relabúsqueda muy ción entre el asesor y el asesorado. cuidadosa, para Un asesor es alguien que invierte encontrar un asesor su tiempo, energía, y que tiene que sea muy efectivo un genuino interés en la vida de otra persona, con el propósito de en una esfera de dominio parecida a capacitar a esa persona para que pueda realizar su autoridad perla tuya. sonal. El asesorado puede iniciar la relación, y él tiene que someterse voluntariamente, con el propósito de aprender y poder crecer como persona. Tal y como mencioné anteriormente que cuando tú conoces quién eres tú realmente dentro de la autoridad que Dios te ha dado, la primera cosa que tú vas a buscar es la autoridad que Dios ha colocado en tu vida para beneficio y protección tu vida, y para que puedas poner en práctica tu propia autoridad. Si tú eres sabio, vas a
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buscar muy cuidadosamente a alguien que sea muy efectivo, y que se encuentre en una esfera de dominio muy parecida a la tuya y, después de considerar esto en oración, vas a pedir la oportunidad de entrar en una relación de asesoramiento con él o con ella. (Normalmente es lo mejor, por un número de razones, que los hombres tengan asesores varones, y que las mujeres tengan asesores femeninas). Esta persona puede ser un miembro de la familia, un líder cívico, un líder en la iglesia, un miembro de alguna organización en la cual tú te encuentras involucrado. Desafortunadamente, es muy rara la vez cuando la gente acude a otros para pedirles que establezcan este tipo de relación, a fin de que puedan aprender lo que ellos conocen, y que puedan ver de primera mano la forma como estas personas funcionan dentro de su autoridad. Sin embargo existen gentes que tienen la humildad suficiente en su corazón, como para buscar una relación asesor-asesorado y son los que se convierten en líderes verdaderos, en lugar de todos aquellos que solamente están tratando de presionar o manipular su camino para llegar hasta la “cumbre”. Ejemplos de asesoramiento Un ejemplo muy famoso de asesoramiento lo podemos encontrar en las Escrituras, y está involucrando a los profetas Elías y Eliseo. Dios le había dicho a Elías que Eliseo era su sucesor autorizado. [El Señor dijo,] “Unge también a Eliseo hijo de Safat, de Abel Mejolá, para que te suceda como profeta.…Elías salió de allí y encontró a Eliseo hijo de Safat, que estaba arando. Había doce yuntas de bueyes en fila, y él
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mismo conducía la última. Elías pasó junto a Eliseo y arrojó su manto sobre él.…Luego partió para seguir a Elías y se puso a su servicio”.. (1 Reyes 19:16, 19, 21) El manto de Elías, era el símbolo de su ministerio profético, y por medio de ponerlo alrededor de Eliseo, él estaba demostrando que iba a transferir su autoridad a Eliseo. Debes notar la actitud de Eliseo. Él no era como la mayoría de la gente, que quieren la posición antes detener la calificación y la experiencia. Él estaba dispuesto a convertirse en el sirviente de tiempo completo de Elías, para poder observarlo a medida que él realizaba su llamamiento como profeta. Él no tenía miedo de someter su vida a Elías, por temor de tener su vida gobernada y controlada por Elías o por temor de perder todo su futuro. Éste tipo de temor viene como resultado de mal entender la autoridad, la cual, en su forma verdadera, libera y permite que una persona ponga en práctica y llegué a realizar su propósito. El más grande ejemplo de un asesor es Cristo Jesús, quien asesoró al pequeño grupo de doce hombres de entre todo el grupo de discípulos que Él había escogido para entrenar como sus apóstoles, o aquellos que iban a tener una autoridad especial para establecer su iglesia en la tierra, después de que Jesús regresará a Dios el Padre. La palabra apóstol se deriva de la palabra griega que significa “un delegado; específicamente un embajador del Evangelio; oficialmente como un comisionado de Cristo” o “un mensajero, una persona enviada con una misión”. Jesús los entrenó, y entonces les delegó la autoridad a estos hombres, quienes iban a convertirse en embajadores y mensajeros de la misión de Jesús, que consistía en
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traer el reino de Dios a la tierra. Su relación de asesoramiento duró por tres y medio años, antes de la muerte y resurrección de Jesús. Estos hombres se sometieron al asesoramiento de su Gran Maestro. Ellos pasaron grandes cantidades de tiempo con Jesús, observando su estilo de vida de primera mano, y tratando de imitarlo. Ellos eran capaces de hacerle todo tipo de preguntas y se beneficiaron a través del conocimiento y de la sabiduría de Jesús, con el propósito de sufrir una transformación personal. Jesús les hizo preguntas y los probó para ver si ellos habían entendido quien era Él realmente, así como las verdades y principios que les estaba enseñando. (Ver Juan 6:5–13). Escogiendo un asesor: cualidades y actitudes del asesoramiento El asunto del asesoramiento no es algo a lo que una persona deba adentrarse con ligereza. Cuando tomamos la decisión con relación a quién te vas a acercar como un asesor potencial, e incluso cuando estás considerando solicitar un trabajo, unirte a una iglesia, o formar parte de una organización o de un individuo que te pueda influenciar, y que también pueda influenciar la dirección de tu vida, debes referirte al siguiente listado en primer lugar, antes de que tomes cualquier tipo de decisión. Esto te va ahorrar tiempo, y te va a ayudar para que no llegues a ser objeto de dolores de cabeza, e incluso, de abuso. Debes someterte a alguien sólo si... ••Esa persona te ama. ••Esa persona no va a recibir ningún tipo de ganancias derivadas de tu sumisión.
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••Esa persona va a estar dedicada a tu éxito aún más de lo que tú lo estás. ••Esa persona ha pasado las tres pruebas cruciales de (1) los apetitos, (2) fama y popularidad, y (3) poder. ••Esa persona es segura con relación a su liderazgo y habilidades. ••Esa persona está o ha estado en el lugar adonde tú quieres ir. • Esa persona tiene acceso a todos aquellos que tú necesitas llegar a conocer. • Esa persona está dispuesta a enseñarte todo lo que conoce. Características claves del asesoramiento ¿Qué es lo que significa para ti el hecho de convertirte en una persona asesorada, o en una persona que ha recibido autoridad delegada? A continuación vas encontrar una lista de las características y beneficios generales de las relaciones entre los asesores y las personas asesoradas, así como de la autoridad delegada: ••Identificación / identidad: Es la asociación de tu persona y de tu nombre con la autoridad respectiva ••Rendir cuentas: Es el seguimiento todo de tu autoridad delegada, y de tus acciones, así como la evaluación de tu progreso ••Responsabilidad: Es una confianza solemne para llevar a cabo y mostrar prueba de la autoridad delegada
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••Credibilidad: Es la autorización para poder trabajar a favor de la persona en autoridad, y en algunos casos, llegar a sucederlo ••Representación: Es el respaldo y certificación de la autoridad con relación a las decisiones y acciones que tú tomas a favor de la persona que se encuentra en autoridad, así como el beneficio de su defensa y ayuda a favor tuyo • Consejo: Es el conocimiento y sabiduría que la persona que está en autoridad ha ganado, a través de años de experiencia y estudio • Protección: Es la seguridad que consiste en ser capaz de apelar las decisiones y las responsabilidades que están involucrados para resolver problemas, por parte de la autoridad • Recursos físicos: Consisten en la provisión y apoyo necesario para poder llevar a cabo tu autoridad • Personal: Consiste en contar con el acceso necesario a las gentes, a través de la persona que se encuentra en autoridad, y que puede ayudarte a realizar tu responsabilidad y tu llamamiento personal Una persona con genuina autoridad puede abrir puertas para ti Como tú puedes ver, cuando tú te sometes a una autoridad, tú te estás identificando con él o ella, y estás recibiendo muchos beneficios derivados de esta relación, incluyendo la credibilidad. Aquí es donde entra en acción el poder del asesoramiento. De hecho, una persona que
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se encuentra en autoridad puede transferirte en muy poco tiempo, lo que esa persona le tomó toda una vida poder realizar. Debes considerar el caso de Moisés y Josué. Muy poco tiempo antes de que Moisés muriera, él transfirió el liderazgo de Israel a Josué, bajo la guía y dirección de Dios. Nadie de entre el pueblo de Israel discutió acerca de esto, ni trató de nominar a alguien más para este trabajo; al contrario, Josué fue aceptado como el sucesor de Moisés. “Entonces Josué hijo de Nun fue lleno de espíritu de sabiduría, porque Moisés puso sus manos sobre él. Los israeliCuando te tas, por su parte, obedecieron a Josué sometes a la e hicieron lo que el Señor le había ordeautoridad, te nado a Moisés” (Deuteronomio 34:9). identificas con De hecho, Moisés transfirió cuaesta persona, y renta años de su liderazgo a Josué en recibes muchos aproximadamente cuarenta segunbeneficios de dos. De forma similar, la unción de esta relación, Elías como profeta de Dios fue transferida a Eliseo, cuando llegó el tiempo incluyendo la para que Elías dejara esta tierra. Esta credibilidad. transferencia fue representada por el acto simbólico de Eliseo, cuando recibió el manto de Elías. De hecho, Eliseo deseaba y recibió una doble porción de la unción de Elías. Otros profetas pudieron reconocer esta versión y dijeron, “El espíritu de Elías está reposando en Eliseo”. (Ver 2 Reyes 2:8–15). La mayoría de la gente cree que la sumisión significa restricción, y por lo tanto, ellos se ponen a competir en contra de la autoridad, o tratan de hacerse ver a sí mismos como iguales a alguien más que se encuentra en una función de autoridad. En forma muy honesta, la
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cosa más tonta que tú puedes hacer es tratar de competir con la verdadera autoridad. La sumisión a la autoridad abre puertas que tú no tienes que empujar. Una persona con genuina autoridad te puede ayudar a progresar muy rápidamente, con relación a que puedas llevar a cabo algo que ti te hubiera tomado diez años lograrlo en tus propias fuerzas. De nuevo, cada vez que tú te sometes a la autoridad, estás recibiendo todo aquello que esa persona te puede dar—amistades, recursos, experiencias, las lecciones que ha aprendido con base a sus fracasos, y el acceso a diferentes tipos de medio ambientes que pueden ser muy influyentes y fructíferos. Juan el Bautista tenía muchos seguidores, a medida que él preparaba a la gente para la venida del Distribuidor Autorizado, o el Mesías. La gente iba a buscarlo “de Jerusalén, de toda Judea y de toda la región del Jordán” (Mateo 3:5). Mucha gente vino debido a que él tenía una campaña masiva. Jesús pudo haber enseñado de esta manera, voy a tratar de atraer parte de la multitud de Juan para comenzar mi propio ministerio con ellos. Al contrario, Jesús se sometió y los seguidores de Juan se convirtieron en los seguidores de Jesús en forma legítima. Al día siguiente Juan vio a Jesús que se acercaba a él, y dijo: “¡Aquí tienen al Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo! De éste hablaba yo cuando dije: ‘Después de mí viene un hombre que es superior a mí, porque existía antes que yo’.…Yo lo he visto y por eso testifico que éste es el Hijo de Dios”. Al día siguiente Juan estaba de nuevo allí, con dos de sus discípulos. Al ver a Jesús que pasaba por ahí, dijo:—¡Aquí tienen
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al Cordero de Dios! Cuando los dos discípulos le oyeron decir esto, siguieron a Jesús. (Juan 1:29–30, 34–37) Si tú te sometes y recibes de esa persona que tiene una verdadera autoridad, eventualmente tú vas a recibir su credibilidad. En forma voluntaria y consciente, Juan transfirió toda su escuela de seguidores a Jesús. El declaró, “Yo ni siquiera lo conocía, pero, para que él se Muchas gentes revelara al pueblo de Israel, se encuentran vine bautizando con agua” trabajando muy duro, (Juan 1:31). Jesús “heredó” en debido a que no han forma legal a todos los seguidores de Juan en el comienzo podido entrar en sumisión, para poder de su ministerio, y algunos de recibir los beneficios ellos se convirtieron en sus discípulos más cercanos. Los de la misma. antiguos discípulos de Juan ya se encontraban relacionados con el mensaje que decía, que ellos necesitaban alinear sus vidas con el Dios Creador, y que el reino de Dios estaba viniendo a la tierra. Jesús no tuvo que luchar, ni promoverse a sí mismo, a fin de poder llevar a cabo el propósito para el cual había venido. A medida que Jesús siguió los caminos de Dios el Padre celestial, Dios mismo se encargó de proveer para Él. Mucha gente se encuentra trabajando muy duro debido a que no han entrado en sumisión, y por lo tanto, no han recibido sus beneficios. La sumisión reduce el estrés, ahorra tiempo, y elimina trabajo. Cuando tú te sometes en una forma genuina, tú vas a trabajar de una manera mucho más inteligente, y no mucho más duro.
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“¡No te pases de la raya!” Cuando la gente llega a entender verdaderamente la autoridad, la delegación, y la sumisión, la vida va a moverse en una manera mucho más suave para ellos, y sus relaciones se van a caracterizar por el orden y la paz. Ellos van a funcionar en sus áreas de autoridad personal, van a respetar la autoridad de los demás, y no van a traspasar la autoridad de todos aquellos que se encuentran alrededor de ellos. De esta manera, se va a lograr la armonía y la efectividad. Una parte del Padre Nuestro dice, “Perdónanos nuestras deudas [las veces que hemos traspasado], así como nosotros perdonamos a nuestros deudores [a todos aquellos que han traspasado en contra de nosotros]” (Mateo 6:12). ¿Acaso el más grande ejemplo de autoridad ha podido llamar nuestra atención con relación a la necesidad que tenemos de permanecer en nuestra propia esfera de autoridad, para no traspasar la autoridad de otras personas, y tampoco interferir con sus llamamientos personales? La única manera para poder experimentar completamente el plan de Dios para tu vida, es a través de entender la interdependencia que tu autoridad personal tiene con la autoridad personal de otras personas, y poder llevar a cabo esa interdependencia a través del asesoramiento, la delegación, y la sumisión.
Capítulo doce
Cómo desarrollarse bajo la autoridad (tanto la positiva, como la negativa) Permaneciendo verdadero a tu propia autoridad, mientras que respetas la autoridad de otros
H
abiendo hablado acerca de los beneficios y responsabilidades del asesoramiento, de la delegación, y de la sumisión, todavía necesitamos estudiar ciertas necesidades y asuntos que van a surgir dentro de estas relaciones. Algunas veces es difícil poder saber la forma correcta para equilibrar la autoridad y la sumisión, especialmente cuando nos encontramos en circunstancias donde aquellas personas que se encuentran en posición de autoridad, no entienden la verdadera autoridad, o no practican ninguno de sus principios. Siendo que jamás deberíamos estar dispuestos a entrar en una relación de autoridad con alguien que no se halla sometido a alguien más, o que hace mal uso de la autoridad, también van a haber ocasiones cuando nos vamos a encontrar en este tipo de relaciones dentro de nuestra familia, nuestro trabajo, o algún otro tipo de situaciones en esta vida. Las siguientes directrices generales te van a ayudar para que puedas responder en forma positiva, e incluso que puedas prosperar, ya sea que te encuentres bajo una autoridad genuina o bajo una autoridad falsa y carente 301
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de información. Debes notar que tu situación personal tiene que ser considerada en forma individual, meditando muy cuidadosamente y orando a la Máxima Autoridad, debido a que los puntos siguientes no pueden tocar todas las circunstancias que tú tal vez llegues a encontrar. La principal cosa que tienes que recordar es que tú puedes permanecer verdadero a tu autoridad personal, mientras que al mismo tiempo respetas la autoridad y posiciones de otros.
Estudia la estructura formal de la organización o del grupo Debes estudiar la estructura formal de organización de la familia, de la comunidad, o del negocio en que te encuentras involucrado. Esto te va a ayudar para que puedas entender las posiciones relativas, y las interrelaciones que existen entre todos los miembros. Esto va a responder la pregunta de que quien, en forma oficial, esta en autoridad inmediata, y también a quien puedes tú apelar con relación a algún problema o necesidad. También va a clarificar a todos aquellos que se encuentran como autoridades inmediatas de los demás en el grupo, especialmente si ellos difieren de tu autoridad inmediata. Si tú te has colocado en la posición superior de autoridad, entonces debes recordar que tu Autoridad Máxima es tu Dios Creador, y que tú eres responsable ante Él por todos los miembros del grupo. En adición a esto, tú debes tener una o dos personas, o un grupo pequeño a quien tú puedas rendirle cuentas, para tu propia protección y seguridad como líder. Tú necesitas ser capaz de discutir su función y tus responsabilidades con una autoridad superior, y con todos aquellos que te
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pueden ayudar a permanecer legítimo y verdadero ante los principios y caminos del Dios Creador.
Estudia las estructuras informales del grupo A continuación, debes estudiar las estructuras informales de autoridad dentro de la familia, la comunidad, o el negocio. Aunque ciertas estructuras y procedimientos formales normalmente existen en todos estos lugares, muy frecuentemente los individuos interactúan unos con otros en maneras “que no son oficiales”, de acuerdo a sus personalidades, relaciones, experiencias pasadas o historial. Si tú llegas a aprender tanto las estructuras oficiales como las estructuras no oficiales o informales, tú vas a poder obtener un mejor entendimiento de cómo funciona la autoridad, la delegación, el asesoramiento, y la sumisión en tu grupo. Por ejemplo, en una familia, aunque el papel de los padres consiste en enseñar, entrenar, y supervisar a todos los hijos, los hijos se relacionan con sus padres en diferentes formas, de acuerdo a sus edades, temperamentos, estilos de aprendizaje, y muchas otras cosas parecidas a estas. De esta manera, aunque sus padres tengan la tendencia a tratarlos a todos ellos exactamente de la misma forma, el hecho de que cada hijo tiene una formación singular hace que esto sea muy difícil en muchas ocasiones, si acaso, no imposible. Se necesitan diferentes tipos de apreciación o puntos de vista con los diferentes hijos en términos de enseñanza, corrección, y nutrición de acuerdo al carácter único de cada relación. En otro ejemplo, alguien que se encuentra trabajando en la bodega de una compañía tal vez no llegue a tener el acceso inmediato al director general ejecutivo con relación al flujo de trabajo del organigrama, pero
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debido a que ha trabajado en ese mismo lugar por treinta años, y ha estado ahí desde que el negocio comenzó, el director general ejecutivo puede llegar a buscarlo en forma directa para pedirle información o algún consejo, en lugar de solicitar esto a través de sus supervisores. A medida que tú realizas el estudio de la organización, tienes que asegurarte de poder determinar tus propias relaciones formales e informales dentro del grupo, de tal manera que tú te encuentres completamente consciente de la forma como debes interactuar con los demás en un nivel oficial y en un nivel informal. El hecho de contar con el conocimiento de estas dos estructuras te va a ayudar para que recibas el apoyo que necesitas, que puedas hacer decisiones que sean buenas y muy eficientes, que puedas participar en la vida del grupo, y que puedas llevar a su total realización todas tus tareas, objetivos, y metas, de acuerdo con tu autoridad personal.
Debes identificar a todos aquellos que poseen influencia y una autoridad bien merecida En tercer lugar, debes de identificar a todos aquellos individuos que poseen una autoridad “bien merecida” así como influencia dentro de las estructuras formales e informales de la organización. Una persona que ha ganado la autoridad posee el conocimiento, la sabiduría, experiencia, y habilidades que los demás en el grupo llegan a reconocer y respetar, de tal manera que la gente acude a esta persona cuando necesita información clave, y cuando necesitan ayuda con relación a la familia, comunidad, o negoció, para que se puedan resolver todos los problemas, y que todo pueda marchar muy suavemente en general. Un individuo que cuenta con autoridad bien merecida, puede ser el fundador de la organización, alguien que ha sido promovido a una posición ejecutiva
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debido a que ha sido parte del personal de una compañía, un presidente honorario, una abuela o un abuelo, o un empleado de largo tiempo. Debes notar que estos individuos pueden tener una función visible o tal vez no la tengan; ellos pueden tener un papel muy callado que funciona detrás del escenario, pero que ejerce gran influencia en el grupo como conjunto.
Debes referirte a tu autoridad inmediata en primer lugar, especialmente cuando tengas cualquier tipo de dudas Si tú tienes una preocupación o un problema que necesita ser confrontado, siempre debes referirte a tu autoridad inmediata, ya sea que se trate de tu padre o madre, el presidente del comité, un maestro, un supervisor, un director, o un director general ejecutivo. Tú debes seguir el mismo curso cada vez que tú tienes dudas acerca de quién es la persona a quien tú debes acudir con relación a una pregunta o una situación—el lugar donde debes comenzar es con tu autoridad inmediata. En un caso donde el asunto involucra a tu autoridad inmediata, tú tal vez te sientas tentado a ir con alguien que esté encima de él para hablar del problema. Sin embargo, normalmente esta es una opción muy pobre, debido a que menosprecia la responsabilidad personal y la interacción positiva en esa relación. Por favor, quiero que notes que en circunstancias especiales, tales como asuntos de abuso físico o acoso sexual que involucran a tu autoridad inmediata, tú deberías apelar a alguien que pueda tratar el problema con confianza y con seriedad. La mayoría de lugares de trabajo han establecido procedimientos para proteger a los empleados en este tipo de casos, y para proveer algún
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mediador neutral con el que los empleados puedan platicar, tal como un director de recursos humanos. Si el abuso o el acoso se presentan a través de un miembro de la familia, tú debes contactar al pastor que cuente con tu respeto, a un consejero familiar, o un refugio para mujeres. En forma general, por medio de acudir a tu autoridad inmediata, independientemente del asunto que se trate, tú vas estar siguiendo el orden correcto. Si tú brincas a tu autoridad inmediata, y recurres al siguiente nivel de autoridad, que se encuentra encima de él, lo más probable es que vas a iniciar una falta de confianza en tu autoridad directa e inmediata, y también en cualquier otra autoridad que se encuentre por encima de él. Tan incómoda como este tipo de inter actuación puede llegar a ser, tú debes acudir al supervisor, al director, al presidente de la junta, o a tu padre en primer lugar, y debes explicar en forma muy clara y respetuosa cual es el asunto que se trata. Por ejemplo, si tú estás teniendo dificultad para poder realizar tu trabajo debido a algo que el supervisor está haciendo, o debido a algún tipo de práctica en tu departamento, tú debes decirle todo aquello que te está retrasando u obstaculizando. Yo quiero sugerir que si tú no recibes una respuesta que te pueda ayudar, tú debes regresar nuevamente a ese mismo supervisor dos veces más. Tú debes documentar cada una de estas conversaciones de alguna manera. Si tú todavía no recibes ningún tipo de respuesta positiva, entonces es cuando debes ir al nivel siguiente. Éste nivel deberá ser quien quiera que sea el supervisor inmediato de tu jefe o supervisor. Tú quieres que la autoridad que está encima de tu supervisor sepa que tú has seguido el orden correcto
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para tratar este problema antes de acudir a esta otra persona. La compañía va a tener que tratar con ese supervisor una vez que tú explicas la situación, pero cualquier acción, ahora se va encontrar bajo la esfera de dominio de ellos, y no la tuya, para que no trates de realizar esto de alguna otra manera. El hecho de acudir a tu supervisor o a la autoridad inmediata que se encuentra por encima de tu supervisor no es algo que se puede realizar fácilmente o sin responsabilidad. No debes acudir a tu supervisor con relación a asuntos triviales, ni tampoco ir al siguiente nivel de autoridad, sólo debido a que tú estás enojado en contra de tu supervisor. Al contrario, debes guardar este tipo de apelaciones con relación a los asuntos que verdaderamente te impiden que seas capaz de realizar tu trabajo.
Nunca debes brincar, despreciar, o ignorar a tu autoridad inmediata En forma similar, nunca debes brincar por encima, tampoco debes despreciar, o ignorar a tu autoridad inmediata cuando se trata de otro tipo de inter actuaciones que se den en tu familia, en tu comunidad, o en tu negocio. Siempre debes seguir las líneas de la autoridad designada. Por ejemplo, Jesús les dijo a sus discípulos, “Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre” (Juan 15:16, se añadió énfasis). Jesús posee toda autoridad, y el hecho de que sus discípulos pidan en el nombre de Jesús mantiene el poder, así como el orden de la autoridad verdadera. En el caso de José, el faraón le dio autoridad sobre toda la tierra de Egipto, por medio de darle su propio anillo real. Aunque José tenía un gran poder para
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gobernar y era el segundo en el nivel de autoridad en toda esa tierra, él todavía tenía que responder ante el faraón. (Ver Génesis 41:40–42). Un ejemplo práctico de estas directrices en el lugar de trabajo sería el hecho de canalizar todo tipo de comunicaciones—ideas, sugerencias, y cosas parecidas a estas—a través de tu supervisor por medio de un correo electrónico o de un memorándum, de tal manera que sea muy claro para todos los demás, que ésta es la forma como tú óperas regularmente. Deja que esa comunicación vaya a través de la línea que le corresponde. La primera persona en autoridad tiene la decisión de comunicar o no la idea o sugerencia. Si tú documentas su comunicación, el supervisor de esa persona tiene que responder por ello, si acaso esa idea no ha sido retransmitida como debe. Es muy posible que ese superEl hecho de seguir visor quiera tomar crédito por algo que tú sugeriste. En ese caso, tú a la autoridad debes ser muy honesto si acaso designada honra alguien te pregunta acerca de eso, a Dios, y Él te pero de otra manera, solamente recompensará por debes entregar este asunto a Dios para que todo obre bien, en lugar tu trabajo. de ir por todos lados quejándote acerca de esto. El consejo que Pedro les dio a los esclavos del primer siglo parece tener una buena aplicación en este caso: “Criados, sométanse con todo respeto a sus amos, no sólo a los buenos y comprensivos sino también a los insoportables. Porque es digno de elogio que, por sentido de responsabilidad delante de Dios, se soporten las penalidades, aun sufriendo injustamente” (1 Pedro 2:18–19). El hecho de seguir la autoridad designada para hablar honra a Dios, y Él te va a recompensar por tu trabajo. (Ver Colosenses 3:23–24).
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Debes someterte a la posición de autoridad, y no necesariamente a la persona que se encuentra en ella Esta directriz toca el punto de cómo responder ante la autoridad ilegítima. Si tú necesitas operar bajo alguien que no entiende y tampoco acepta la autoridad verdadera, debes reconocer que tú te estás sometiendo a la posición que le ha sido delegada a esta persona de parte de alguien que está mucho más alto que él. La oficina es mucho más importante que el oficial en este caso. Sin embargo, se te piden que hagas algo que viola los principios de Dios, por supuesto que tú no puedes participar en ello. Tú debes seguir el ejemplo de Daniel, tal y como él lo hizo cuando vivió como un exiliado en Babilonia, lo cual era un medio ambiente de adoración hacia los ídolos, bajo los reyes Nabucodonosor y Darío. Por ejemplo, cuando fue creado un decreto real que indicaba que todas las gentes tenían que adorar solamente al rey Darío por un periodo de treinta días, Daniel continuó orando solamente a Dios, y como resultado de esto, fue lanzado al foso de los leones. Dios lo protegió, y nada, ni nadie pudieron tocar su vida. Sin embargo, como testimonio del respeto que Daniel le tenía a la autoridad, cuando Darío vino a ver si Daniel había sobrevivido, Daniel no le respondió con enojo, ni con resentimiento, “¡Oh rey, vete de aquí!”. Al contrario, él lo saludó muy efusivamente, diciendo, “¡Que viva Su Majestad por siempre!” (Daniel 6:21), y explicó la forma como Dios lo había rescatado, y el hecho de que él era inocente, y que no había ofendido al rey. (Ver Daniel 6). El capítulo once de Hebreos nos da una lista de gentes que sirvieron a Dios, aún en medio de las peores circunstancias. Algunos fueron liberados en forma
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milagrosa, mientras que otros fueron burlados, abusados físicamente, puestos en prisión, o incluso asesinados. Todos ellos fueron muy notables debido a su fe. Sin importar si ellos fueron liberados o no, todos ellos recibieron alabanza de parte de Dios, y recompensa por haber permanecido verdaderos hacia Dios y hacia los caminos de Dios. Debes servir a la posición, y no a la persona, cada vez que sea posible, y debes servir a Dios todo el tiempo.
Debes hacer a esa autoridad no autorizada responsable de tus principios y convicciones Si una autoridad no autorizada te pide que hagas algo que tú no puedes hacer bajo una buena conciencia, y él no tiene que rendirle cuentas a nadie más, entonces tú debes hacerlo responsable de tus propios principios y convicciones. ¿Qué es lo que esto significa? Algunas veces tú puedes llegar a trabajar bajo una figura de autoridad que es contraria a tus ideales y principios, y puedes llegar a tener gran influencia sobre esa persona, simplemente debido a que tú tienes confianza en tu propia autoridad personal, y debido a que esto es mucho más fuerte que la autoridad pública de esa persona. En el ejemplo anterior, Daniel no sucumbió ante la adoración de los ídolos, y todos aquellos que se encontraban alrededor de él— incluyendo al rey—tuvieron que tratar con sus convicciones y principios. Los otros consejeros del rey habían manipulado a Darío para qué creará el decreto, debido a que ellos se sentían celosos de Daniel. Los principios, sabiduría, y ética de trabajo de Daniel, le habían dado tal favor ante los ojos del rey, que él estaba a punto de ser puesto como el segundo a cargo de todo el reino, y ellos
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pensaron que deberían atacarlo en el área de sus propias convicciones, y que esto causaría la caída total de Daniel. (Ver Daniel 6:3–9). Al contrario, ocurrió exactamente lo opuesto. Aunque Darío no podía revocar su decreto, él fue consolado grandemente por medio de encontrar que Daniel había sido salvado de los leones, y no solamente promovió a Daniel, sino que también honró al Dios de Daniel. Todos aquellos que se oponían a Daniel recibieron el castigo que ellos habían buscado para él. (Ver Daniel 6:10–28). En forma similar, José conocía a Dios como su referencia en la vida, y por lo tanto, se encontraba bien establecido en la ética y en la moralidad, y podía entender los límites que eran justos, pero parecía ser capaz de trabajar con cualquiera que se encontrara funcionando en algún tipo de autoridad. Incluso después de haber sido vendido como un esclavo, él pudo servir a todos aquellos que se encontraban por encima de él en una forma muy honorable—su primer amo egipcio, llamado Potifar; el guardia de la prisión que tuvo la tarea de supervisarlo, después de que él fue acusado falsamente por la esposa de Potifar; y el faraón. Cuando la esposa de Potifar trató de seducir a José, el rehusó comprometer sus principios, y por lo tanto, ella tuvo que contar mentiras que dieron como resultado el encarcelamiento de José. Entonces, incluso después de que el copero del faraón, quien había estado en la cárcel con José, había sido restaurado a su función, una vez que José Interpretara su sueño, pero que muy prontamente olvidó su promesa de ayudar a José, de todas formas, José continuó confiando en Dios para que lo liberara de la prisión. Después de dos años, cuando el faraón tuvo un sueño muy perturbador, el copero recordó a José, y
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José no solamente fue liberado, sino que fue puesto como el segundo al mando en toda la tierra de Egipto, después de faraón. (Ver Génesis 39:1–41:44).
Daniel y José cooperaron con figuras de autoridad no autorizadas, tanto como les fue posible, pero nunca llegaron a comprometer su relación con Dios.
Daniel y José cooperaron con figuras de autoridad no autorizadas, tanto como les fue posible, pero ellos nunca comprometieron su relación con Dios.
Una de las claves para poder mantener este tipo de equilibrio, es un principio que yo subrayé anteriormente: cuando tú te encuentras operando bajo tu autoridad personal, y conoces que tu Autoridad Máxima es Dios, tú ya no vas a sentirte amenazado por nadie, y ya no vas a necesitar nada de nadie más, a fin de poder sentirte valioso o seguro; por lo tanto, nadie va a poder manipularte o chantajearte para que hagas algo que no quieres hacer. En otros ejemplos de las Escrituras, incluso bajo la amenaza de muerte, Ester, siendo urgida por medio de su tío Mardoqueo, estaba dispuesta a arriesgar su propia vida delante de del rey Asuero, a fin de salvar a su pueblo de la muerte. (Ver el libro de Ester). Daniel no tuvo miedo de apelar al rey Nabucodonosor, quien había ordenado que todos los consejeros del rey fueran puestos a muerte, incluyendo a Daniel y a sus amigos, y tampoco tuvo miedo de pedir a Dios la interpretación del sueño que lo atribulaba tanto. (Ver Daniel 2). Cuando los amigos de Daniel, Sadrac, Mesac, y Abednego fueron amenazados con la muerte en un horno de fuego, si ellos no adoraban al ídolo de oro que el rey Nabucodonosor había hecho, ellos rehusaron, diciendo lo siguiente:
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¡No hace falta que nos defendamos ante Su Majestad! Si se nos arroja al horno en llamas, el Dios al que servimos puede librarnos del horno y de las manos de Su Majestad. Pero aun si nuestro Dios no lo hace así, sepa usted que no honraremos a sus dioses ni adoraremos a su estatua.. (Daniel 3:16–18) De nuevo, él tuvo que responder ante las convicciones y principios de Sadrac, Mesac y Abednego, los cuales estaban dispuestos a morir por ellas. Dios los protegió del horno de fuego, de tal manera que no solamente sobrevivieron del fuego, sino que también ni siquiera tenían el olor de humo en sus ropas. (Ver versículos 22–30). En las interacciones que tú tengas con la familia, la comunidad y los negocios, ¡podemos esperar que tú nunca vas a tener que encarar ninguna cosa tan difícil como Daniel y sus amigos, o como José, o cómo Ester tuvieron que encarar! Sin embargo, sus experiencias ilustran el hecho de que tú puedes permanecer verdadero con relación a tus convicciones, principios, y tu autoridad personal, mientras que al mismo tiempo puedes seguir sirviendo a una autoridad no autorizada, mientras que tú realmente estás honrando a Dios en tu vida.
Debes eliminar la costumbre de quejarte todo el tiempo, así como la difamación de la autoridad Las personas en tu familia, en tu comunidad, o en tu compañía están murmurando y quejándose acerca de la autoridad—ya sea que ésta se trate de una autoridad autorizada o una autoridad no autorizada—tú debes hacer tu mejor esfuerzo para eliminar o diluir este tipo de actitudes, por medio de promover la conversación
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positiva y la paz entre los miembros del grupo. Podemos leer en el libro de Hebreos lo siguiente: Ciertamente, ninguna disciplina, en el momento de recibirla, parece agradable, sino más bien penosa; sin embargo, después produce una cosecha de justicia y paz para quienes han sido entrenados por ella. Por tanto, renueven las fuerzas de sus manos cansadas y de sus rodillas debilitadas. “Hagan sendas derechas para sus pies”, para que la pierna coja no se disloque sino que se sane. Busquen la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Asegúrense de que nadie deje de alcanzar la gracia de Dios; de que ninguna raíz amarga brote y cause dificultades y corrompa a muchos. (Hebreos 12:11–15, se añadió énfasis) Aunque las circunstancias no vayan a ser muy agradables, y tal vez lleguen a ser injustas, otra vez, debes exhortar a todos para que exista respeto hacia la posición, y no sólo hacia la persona. Esto debe hacerse con mucho tacto y paciencia, pero muy frecuentemente, tú puedes diluir una sesión agresiva o una situación negativa, por medio de ofrecer alternativas prácticas y constructivas con relación a las quejas, y por medio de desviar la conversación hacia tópicos que sean mucho más positivos. Tú también puedes platicar con relación a usar los canales adecuados para tratar de corregir el problema, tal y como fueron descritos en los números cuatro y cinco.
Debes motivar a los demás para que respeten a la autoridad, a través de tu propio ejemplo ¿Qué es lo que tú estás demostrando con tu propia actitud hacia la autoridad, en las diferentes esferas de
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la vida corporativa en qué estás involucrado? Es muy importante no sólo diluir las quejas de los demás con relación a la autoridad, sino también poder motivar a los miembros de la organización, a través de tu propio ejemplo, para que respeten a la autoridad. Tú siempre vas a tener la tentación para hablar en forma negativa a otros con relación a ciertas gentes del grupo, o acerca de la organización misma, debido a las actitudes de gentes, a las políticas, y cosas por el estilo, pero debes resistir esta tentación. Pablo escribió, Eviten toda conversación obscena. Por el contrario, que sus palabras contribuyan a la necesaria edificación y sean de bendición para quienes escuchan. (Efesios 4:29) Debes referir todas tus preocupaciones a tu Máxima Autoridad, y dejar que Él te dirija y te guíe: No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús. Por último, hermanos, consideren bien todo lo verdadero, todo lo respetable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo digno de admiración, en fin, todo lo que sea excelente o merezca elogio.. (Filipenses 4:6–8)
Debes recordar que el hecho de someterse a la autoridad es un principio establecido Para poder tener éxito mientras que nos encontramos debajo de autoridad, necesitamos poder recordar que tanto el hecho de delegar, como el hecho de someterse a la autoridad establecida, están fundados dentro de la
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creación y la vida. Primeramente, tú debes someterte a tu autoridad no con el propósito de proteger tu relación con esa autoridad, sino al contrario, con el propósito de preservar tu relación superior con el Dios Creador, que estableció la autoridad, y que desea que vivamos en ella, por el beneficio de la paz y el orden. Igual que Jesús, todos nosotros necesitamos obedecer a Dios para cumplir “toda justicia” (Mateo 3:15, rvr), lo cual significa “toda posición que sea correcta, o toda función que sea correcta”. Hagan lo que hagan, trabajen de buena gana, . como para el Señor y no como para nadie en este mundo, conscientes de que el Señor . los recompensará con la herencia. Ustedes sirven a Cristo el Señor. (Colosenses 3:23–24)
Capítulo trece
Doce principios de autoridad con relación a tu llamamiento Entendiendo la visión de tu autoridad. y tu esfera de influencia
S
e requiere el honor de su presencia”….
Cuando tú recibes correspondencia en el correo que comienza con estas palabras, tú sabes que estás siendo invitado a un evento muy especial—como lo puede ser una boda, un aniversario, un cumpleaños, o algún otro tipo de ocasión muy importante. Si una invitación de este tipo viene directamente del Presidente de una nación, esto se considera como un honor muy particular. El hecho de entrar en tu autoridad es aceptar el honor de la invitación llena de gracia, que viene de parte del Soberano de todo el universo, para que te unas a Él con relación a realizar un propósito muy importante en este mundo. Al tratar con el significado de la autoridad personal en los capítulos anteriores, algunas veces yo me he referido a ella usando términos adicionales, tales como tarea, misión o visión en esta vida, vocación, trabajo, ocupación, y llamamiento. La palabra griega kletos, que se traduce como “llamamiento” en varios lugares de las 317
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Escrituras, tiene el significado de “invitados”. La palabra y llamamiento ha sido definida en el diccionario de la Real Academia Española como “un fuerte impulso que tiene que ver con una acción o dirección, siempre y cuando se encuentra acompañada de convicción a través de la influencia divina”. Este concepto provee una buena descripción de la autoridad personal. Todos nosotros fuimos creados con un “impulso”, o motivación inherente, para ir en búsqueda de un propósito particular en esta vida, el cual tiene que ver con servir a los demás, y hemos sido invitados a realizar este propósito por Dios mismo. He resumido la autoridad de nuestro llamamiento en doce principios, y a medida que nos movamos a la parte tres de este libro, yo quiero subrayarlos, de tal manera que tú estés absolutamente seguro con relación al alcance de tu autoridad personal y tu área de dominio. Estos principios resumen la naturaleza de su propia autoridad personal, en tal forma, que tú puedas identificar, entender, y tomar las acciones necesarias para poder realizar tu llamamiento, teniendo la convicción de que todo esto te ha sido dado por Dios, con el propósito de que sirvas a tu generación.
Principio #1: La autoridad es general A los seres humanos se les ha dado dominio, o autoridad general sobre la tierra, desde la creación (ver Génesis 1:26), aunque ellos abandonaron esta autoridad. Cuando tú vuelves a conectarte con tu Dios Creador a través del Distribuidor Autorizado, que es Cristo Jesús, ésta autoridad te vuelve a ser restaurada, y también recibes otra autoridad general. Es la autoridad para poder actuar a favor del Dios Creador, por medio de comunicarle
Doce principios de autoridad con relación a tu llamamiento S 319
a todo el mundo la oportunidad que toda la gente tiene de ser restaurada y de volver a conectarse con Él, y que de esta manera, puedan recibir todos los beneficios derivados de volver a ponerse debajo de la garantía externa de Dios, y de poder descubrir su propia autoridad personal de cada uno. (Ver, por ejemplo, Mateo 28:18–20).
Tu conexión con el Dios Creador te une con todos aquellos que han sido restaurados a Él.
La conexión que tú tienes con el Dios Creador te une a ti con todos los demás que ya han sido restaurados con Él. Es básico que puedas entender que tienes propósitos comunes con todos ellos, como personas que han sido reconciliadas hacia el Dios Creador, incluso a medida que ejercitas tu autoridad personal. Pablo escribió lo siguiente: Esfuércense por mantener la unidad del Espíritu mediante el vínculo de la paz. Hay un solo cuerpo y un solo Espíritu, así como también fueron llamados a una sola esperanza; un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo; un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos y por medio de todos y en todos. (Efesios 4:3–6)
Principio #2: La autoridad es específica En Efesios 4, podemos ver que existe un cuerpo, un espíritu, un Señor, una fe, un bautismo, y un Dios y Padre de todos nosotros, quien es la Autoridad Máxima y es el que nos une a todos. sin embargo, la siguiente parte, comienza con la palabra “pero”: “Pero a cada uno de nosotros se nos ha dado gracia en la medida en que Cristo ha repartido los dones” (versículo 7). Existe una
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gracia individual (que es la influencia divina o la invitación divina) dentro del contexto de nuestra peculiaridad para con los demás que nos permite llevar a cabo nuestro llamamiento específico. “Cada uno ponga al servicio de los demás el don que haya recibido, administrando fielmente la gracia de Dios en sus diversas formas” (1 Pedro 4:10). Pablo escribió acerca de su propia autoridad en una manera en que todos nosotros podamos aprender esto a consciencia: No es que ya lo haya conseguido todo, o que ya sea perfecto. Sin embargo, sigo adelante esperando alcanzar aquello para lo cual Cristo Jesús me alcanzó a mí. Hermanos, no pienso que yo mismo lo haya logrado ya. Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús. (Filipenses 3:12–14)
Principio #3: La autoridad se basa en la comunidad La autoridad se caracteriza porque esta basada en la comunidad y es algo interdependiente. Todos nosotros tenemos algo con lo cual podemos contribuir a la comunidad, y que va a proporcionar algo para la vida comunitaria, sin importar en qué tipo de medio ambiente exista esa comunidad. Todos nosotros hemos sido diseñados para usar nuestro poder autorizado dentro de tales comunidades, a medida que realizamos nuestros llamamientos, los cuales son únicos.
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Pues así como cada uno de nosotros tiene un solo cuerpo con muchos miembros, y no todos estos miembros desempeñan la misma función, también nosotros, siendo muchos, formamos un solo cuerpo en Cristo, y cada miembro está unido a todos los demás. Tenemos dones diferentes, según la gracia que se nos ha dado. (Romanos 12:4–6) ¿Qué concluimos, hermanos? Que cuando se reúnan, cada uno puede tener un himno, una enseñanza, una revelación, un mensaje en lenguas, o una interpretación. Todo esto debe hacerse para la edificación de la iglesia. (1 Corintios 14:26)
Principio #4: La autoridad es central La verdadera autoridad es central a tu naturaleza de acuerdo a la forma como Dios te creó; es una parte integral de tu personalidad y de tus dones. No es algo que tengas que ponerte como una cosa añadida a quien tú ya eres realmente, y tampoco va a ser algo forzado o incómodo que tú tengas que ejercitar, sino todo lo contrario, es algo completamente natural. Debido a esto, la autoridad personal es completamente liberadora para todos aquellos que entran en ella. Tú creaste mis entrañas; me formaste en el vientre de mi madre. ¡Te alabo porque soy una creación admirable! ¡Tus obras son maravillosas, y esto lo sé muy bien! Mis huesos no te fueron desconocidos cuando en lo más recóndito era yo formado, cuando en lo más profundo de la tierra era yo entretejido. Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación: todo estaba ya escrito en
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tu libro; todos mis días se estaban diseñando, aunque no existía uno solo de ellos. (Salmo 139:13–16)
Principio #5: La autoridad recibe capacitación Cuando Moisés fue llamado por Dios para que dirigiera a los israelitas fuera de la esclavitud en Egipto, él dijo, “Ay, Señor! nunca he sido hombre de fácil palabra, ni antes, ni desde que tú hablas a tu siervo; porque soy tardo en el habla y torpe de lengua” (Éxodo 4:10, rvr). Moisés no se había dado cuenta que ese poder venía juntamente con la autoridad que él había acabado de recibir. Y Jehová le respondió: ¿Quién dio la boca al hombre? ¿o quién hizo al mudo y al sordo, al que ve al ciego? ¿No soy yo Jehová? Ahora pues, ve, y yo estaré con tu boca, y te enseñaré lo que hayas de hablar. (Éxodo 4:11–12, rvr) Dios le había dicho a Moisés, “Te enviaré a Faraón” (Éxodo 3:10, rvr), y por lo tanto, Moisés no iba a ir delante de faraón bajo sus propios méritos, sino bajo la autoridad de Dios. Igual que Moisés, la mayoría de nosotros no podemos reconocer el poder natural de nuestra esfera de dominio personal, y tampoco podemos darnos cuenta de que nuestro Dios Creador está a nuestro lado para capacitarnos, y que podamos llevar a cabo la autoridad que Él nos ha dado. El libro de Hebreos nos motiva de la siguiente manera, “Mantengamos firme la esperanza que profesamos, porque fiel es el que hizo la promesa” (Hebreos 10:23).
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Cuando tú operas en la autoridad de tu llamamiento, tú estás Cuando siendo equipado y capacitado en funcionas bajo forma automática para ello, debido la autoridad a que Dios es fiel para proveer de Dios, todos todo aquello que necesitas. Tú está sus recursos se siendo “autosuficiente” en el sentido encuentran de que naciste con ese propósito, de tu lado. y tú tienes habilidades inherentes dentro de ti, que Dios te asignó para que tú puedas realizar tu propósito. Más aún, cuando tú funcionas debajo de la autoridad de Dios, los recursos divinos están de tu lado, de la misma forma como lo estuvieron para Moisés.
Principio #6: La autoridad se realiza a sí misma Los dones que el Dios Creador ha plantado dentro de ti van a crecer y van a dar fruto a medida que tú confías en el poder de todo aquello que Dios te ha dado, y a medida que tú encomiendas el uso de todo esto a Dios. Dios dice lo siguiente: Porque yo estoy alerta para que se cumpla mi . palabra. (Jeremías 1:12) Mis caminos y mis pensamientos son más altos que los de ustedes; ¡más altos que los cielos sobre la tierra! Así como la lluvia y la nieve descienden del cielo, y no vuelven allá sin regar antes la tierra y hacerla fecundar y germinar para que dé semilla al que siembra y pan al que come, así es también es la palabra que sale de mi boca: No volverá a mí vacía, sino que hará lo
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que yo deseo y cumplirá con mis propósitos. (Isaías 55:9–11)
Principio #7: La autoridad puede permanecer dormida o sin ser descubierta Aunque la autoridad personal se puede realizar a sí misma, puede permanecer dormida o sin ser descubierta dentro de nosotros—y algunas veces por el resto de nuestra vida—a menos que sea despertada a su realidad en nuestra vida, y colocada bajo el contexto de una relación restaurada con nuestro Dios Creador. Esta es una de las razones por las que Pablo escribió a los Efesios del primer siglo lo siguiente: Pido también que les sean iluminados los ojos del corazón para que sepan a qué esperanza él los ha llamado, cuál es la riqueza de su gloriosa herencia entre los santos, y cuán incomparable es la grandeza de su poder a favor de los que creemos. (Efesios 1:18–19) La autoridad también va a permanecer dormida dentro de nosotros si nosotros la ignoramos, la descuidamos, o la rechazamos. Pablo le escribió a Timoteo, “Por eso te recomiendo que avives la llama del don de Dios que recibiste cuando te impuse las manos” (2 Timoteo 1:6), y Jesús contó esta parábola que tiene que ver con los dones y llamamiento que nos son confiados por Dios: El reino de los cielos será también como un hombre que, al emprender un viaje, llamó a sus siervos y les encargó sus bienes. A uno le dio cinco mil monedas de oro, a otro dos mil y a otro sólo mil, a cada uno según su capacidad. Luego se fue de viaje. El que había recibido las cinco mil fue en seguida y negoció con
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ellas y ganó otras cinco mil. Así mismo, el que recibió dos mil ganó otras dos mil. Pero el que había recibido mil fue, cavó un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor. (Mateo 25:14–18, se añadió énfasis) La parábola continúa con el dueño regresando a casa y con sus sirvientes a quienes les había encomendado los cinco talentos y los dos talentos, presentando sus talentos duplicados a él. Él les responde a cada uno de ellos, “¡Hiciste bien, siervo bueno y fiel! En lo poco has sido fiel; te pondré a cargo de mucho más. ¡Ven a compartir la felicidad de tu señor!” (Mateo 25:21, 23). Entonces, el siervo que solamente tenía un talento—aquél del cual se nos ha dicho que debido al temor (ver versículos 24–25)—vino y se lo regresó al dueño, sin haber obtenido ningún tipo de ganancias en esa propiedad. Pero su señor le contestó: “¡Siervo malo y perezoso! ¿Así que sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido? Pues debías haber depositado mi dinero en el banco, para que a mi regreso lo hubiera recibido con intereses. Quítenle las mil monedas y dénselas al que tiene las diez mil. Porque a todo el que tiene, se le dará más, y tendrá en abundancia. Al que no tiene se le quitará hasta lo que tiene”.. (Mateo 25:26–29) No necesitamos tener miedo de no tener nada que podamos mostrar de nosotros mismos a nuestro Dios Creador, si es que hemos invertido y ejercitado nuestros dones y talentos naturales, y nos encontramos expectantes, esperando recibir los resultados.
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En adición a esto, cada vez que usamos aquello que nos fue dado para el beneficio de los demás, esto va a ser devuelto a nosotros multiplicado: “Den, y se les dará: se les echará en el regazo una medida llena, apretada, sacudida y desbordante. Porque con la medida que midan a otros, se les medirá a ustedes” (Lucas 6:38).
Principio #8: La autoridad es refinada con el uso De la misma forma como necesitamos poner nuestros dones a trabajar en primer lugar, así también necesitamos refinarlos a través del uso continuo, del entrenamiento, y del desarrollo, de tal manera que ellos puedan llegar a una forma que sea efectivamente óptima. Por eso oramos constantemente por ustedes, para que nuestro Dios los considere dignos del llamamiento que les ha hecho, y por su poder perfeccione toda disposición al bien y toda obra que realicen por la fe.. (2 Tesalonicenses 1:11) No se contenten sólo con escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica. El que escucha la palabra pero no la pone en práctica es como el que se mira el rostro en un espejo y, después de mirarse, se va y se olvida en seguida de cómo es. Pero quien se fija atentamente en la ley perfecta que da libertad, y persevera en ella, no olvidando lo que ha oído sino haciéndolo, recibirá bendición . al practicarla. (Santiago 1:22–25)
Principio #9: La autoridad es permanente La autoridad personal es una parte permanente de nuestra naturaleza. Nunca se va de nosotros, “Porque
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los dones de Dios y su llamamiento son irrevocables” (Romanos 11:29). Nuestra autoridad puede ser revocada debido al mal uso, pero nuestra formación básica y nuestros dones van a permanecer. Si volvemos a alinear nuestras vidas La autoridad con Dios, Él nos va a restaurar y va personal es a renovar nuestros llamamientos. una parte “Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de permanente quienes lo aman, los que han sido llade nuestra mados de acuerdo con su propósito” naturaleza; (Romanos 8:28).
jamás se retira
El principio es la razón de por de nosotros. qué las mismas ideas y sueños siguen regresando a nosotros a través de toda nuestra vida. Debemos darnos cuenta de que nuestra autoridad personal se encuentra conectada con nuestra identidad, y refleja nuestro verdadero propósito, de tal manera que podamos buscar aquello para lo cual fuimos llamados en esta vida.
Principio #10: La autoridad es la voluntad perfecta de Dios Los seres humanos fueron creados y restaurados con el propósito de la autoridad, lo cual nos dice que la autoridad es la voluntad perfecta de Dios para todos nosotros. Yo no pude entender la autoridad por muchos años, pero a medida que me puse a estudiar sus principios, comencé a apreciar el hecho de que la autoridad es la mejor cosa que jamás Dios nos ha dado, por múltiples razones. He representado un buen número de estas razones en este libro—la autoridad nos da propósito, protección, realización, motivación, un lugar en esta vida, orden, paz, y muchas cosas más.
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Su divino poder, al darnos el conocimiento de aquel que nos llamó por su propia gloria y potencia, nos ha concedido todas las cosas que necesitamos para vivir como Dios manda. (2 Pedro 1:3) Mientras más aprendemos acerca de nuestra autoridad inherente y más la ejercitamos en nuestra vida, más vamos a poder entender qué tan importante es en relación a la voluntad de Dios para nosotros. No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta. (Romanos 12:2)
Principio #11: La autoridad requiere de la sumisión personal hacia Dios Cada una nosotros debemos someternos a Dios, y debemos permitirle que desarrolle sus principios para nuestra vida, a medida que ejercitamos la autoridad personal. El hecho de enfocarnos en lo que está sucediendo en la vida de otra persona, en lugar de enfocarnos en aquello que Dios nos ha dado, y en la forma como Dios nos está dirigiendo, siempre nos va a desviar de curso. El discípulo de Jesús llamado Pedro comenzó a hacer esto, pero la respuesta que Jesús le dio fue, “Tú sígueme”: Después de eso añadió:—¡Sígueme! Al volverse, Pedro vio que los seguía el discípulo a quien Jesús amaba, el mismo que en la cena se había reclinado sobre Jesús y le había dicho: “Señor, ¿quién es el que va a traicionarte?” Al verlo, Pedro preguntó:—Señor, ¿y éste,
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qué?—Si quiero que él permanezca vivo hasta que yo vuelva, ¿a ti qué? Tú sígueme no más.. (Juan 21:19–22) El principio número once comparte una luz adicional con relación a los principios uno y dos, que indican que la autoridad es general y que la autoridad también es específica. Aunque todos nosotros tenemos un llamamiento general a la autoridad con relación a la creación y a la restauración, cada uno de nosotros en forma individual, debemos seguir al Distribuidor Autorizado, a medida que obedecemos la Palabra de Dios y seguimos la guía del Espíritu de Dios, para poder realizar los propósitos específicos que el Fabricante tiene para nosotros. Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra. (2 Timoteo 3:16–17) Muchas cosas me quedan aún por decirles, que por ahora no podrían soportar. Pero cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propia cuenta sino que dirá sólo lo que oiga y les anunciará las cosas por venir. Él me glorificará porque tomará de lo mío y se lo dará a conocer a ustedes. (Juan 16:12–15)
Principio #12: La autoridad tiene su tiempo para una administración madura El rey Salomón escribió, “Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo” (Eclesiastés 3:1). Existe un tiempo para todas las
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cosas, y va a existir un tiempo para la administración madura de tu autoridad personal. Las Escrituras dicen que cuando Jesús vino a la tierra a cumplir su llamamiento con relación a restaurar a los seres humanos para con Dios el Creador, esto fue justo en el tiempo correcto: Pero cuando se cumplió el plazo, Dios envió a su Hijo, nacido de una mujer, nacido bajo la ley, para rescatar a los que estaban bajo la ley, a fin de que fuéramos adoptados como hijos. (Gálatas 4:4–5) El tiempo de la autoridad es un principio muy importante que nosotros que debemos mantener en mente. Necesitamos ser muy sensibles a los caminos y formas en que Dios está trabajando en nuestra vida. Nosotros no sabemos completamente la cantidad o el tipo de preparación que vamos a necesitar para tener una administración madura de nuestra autoridad, pero si sabemos lo que las Escrituras enseñan con relación a la importancia de nuestro entrenamiento, prueba, y crecimiento proporcional, lo cual lleva a la madurez, y que podamos llegar a ser muy útiles para los fines de Dios. Por lo tanto, tenemos que estar preparándonos en forma continua para ejercitar nuestra autoridad, por medio de desarrollar nuestro carácter, dones, y habilidades, de tal manera que estemos listos, una vez que Dios abra las puertas de las oportunidades para nosotros. En una casa grande no sólo hay vasos de oro y de plata sino también de madera y de barro, unos para los usos más nobles y otros para los usos más bajos. Si alguien se mantiene limpio, llegará a ser un vaso noble, santificado, útil para
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el Señor y preparado para toda obra buena.. (2 Timoteo 2:20–21) El que es honrado en lo poco, también lo será en lo mucho; y el que no es íntegro en lo poco, tampoco lo será en lo mucho. Por eso, si ustedes no han sido honrados en el uso de las riquezas mundanas, ¿quién les confiará las verdaderas? Y si con lo ajeno no han sido honrados, ¿quién les dará a ustedes lo que les pertenece? (Lucas 16:10–12) Cuando esas puertas de oportunidad lleguen a abrirse, tú vas a poder encontrar que tú has estado operando de forma continua en tu autoridad, aunque tal vez has tenido períodos de tiempo en que te has visto forzado a retroceder, a reagruparte, o a tener que descansar, antes de volver a movilizarte. Pero a medida que tú te preparas, y preparas tus dones, y a medida que te mantienes conectado con tu Dios Creador, tú también vas a poder conocer cuando llegue el tiempo en que debas activarte y administrar tu autoridad. Para ti esto va ser “el cumplimiento de tu tiempo”.
Parte tres
Restaurando la verdadera autoridad en el mundo
Capítulo catorce
Claves para reestablecer la legítima autoridad en la tierra Promoviendo el desarrollo corporativo a través . de la libertad y de la responsabilidad
I
magínate que tú vives en una nación que está siendo gobernada por un dictador muy duro. El gobierno de tu país natal ha llegado a controlar cada aspecto de tu vida, en cuanto tú puedes recordar, y ahora has recibido la tarea de ser asignado a un campo de trabajos forzados. Tu alma ha estado clamando por la libertad, y en total desesperación, te has unido con varias otras personas para tratar de planear un escape de ese campo de trabajos forzados. Después de poder escapar exitosamente, haces planes para que alguien te saque de contrabando, fuera de este país. Tú tienes que viajar en un bote muy pequeño a través del océano, lo cual dura semanas, y cuentas con muy poca comida y agua muy limitada, mientras que te has lanzado en la búsqueda de una vida mejor, en un país que les otorga derechos a sus ciudadanos y también los defiende. Finalmente, has alcanzado las playas de este nuevo lugar. Ahora, todo lo que necesitas es alguien que se encuentre en una posición de autoridad en ese país, para que te pueda otorgar permiso, y que tú puedas entrar y comenzar a edificar 335
336 S El Propósito y Poder de la Autoridad
una vida nueva y mucho mejor de lo que tenías antes. Tú necesitas un estatus legal para poder vivir aquí. De forma inesperada, ¡tu hermano mayor te saluda en las playas de este nuevo país! El había viajado a través de ese mar tan peligroso varios años antes que tú, y ha estado en contacto con todos aquellos que traen gente de contrabando de tu país natal. Sabiendo que tú ibas a venir, él ya ha hecho los arreglos necesarios para que tú recibas asilo en esta nueva tierra. Ahora vives en una comunidad con miembros de tu familia política, a quien también él les ayudó a obtener su libertad, y quienes ahora a su vez, ayudan a otros también. Te encuentras lleno de gozo a medida que entras a tu nueva vida en la compañía de una familia muy amorosa y que te apoyan completamente.
Dándole la bienvenida a la gente a este nuevo “país” De forma similar, la gente alrededor de todo el mundo que se encuentra viviendo bajo una falsa autoridad en sus diferentes formas, son como los ciudadanos de una nación oprimida. Cristo Jesús es su “Hermano mayor” quien ha ido delante de ellos para preparar el camino, y que ellos puedan entrar a un nuevo país, que es el reino de Dios, el cual se encuentra caracterizado por la paz, el orden, y la libertad, y es allí donde los valores y la importancia de cada persona son reconocidos. “Porque a los que Dios conoció de antemano, también los predestinó a ser transformados según la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos” (Romanos 8:29). Hemos podido ganar entendimiento con relación a la genuina autoridad y hemos podido entrar en esta
Claves para reestablecer la legítima autoridad en la tierra S 337
maravillosa libertad, nos hemos convertido en parte de la comunidad de nuestro Hermano mayor, dentro del reino de Dios en la tierra, y podemos participar en ayudar a restablecer la autoridad legítima en este mundo. Ahora somos responsables de buscar la oportunidad de poder capacitar a otros, para que ellos también entren a este nuevo camino de vida, en donde ellos pueden estar completamente libres de las restricciones y el abuso de la falsa autoridad, y pueden ejercitar su autoridad personal completamente, bajo el contexto de sus inter actuaciones y relaciones con otros. De esta manera, hemos sido llamados a darle la bienvenida a toda esta gente a “un nuevo país”. Vamos a mirar brevemente a esa “nación” tan opresiva, de la cual toda la gente necesita ser liberada, y entonces, vamos a mirar doce principios para ayudar a toda esta gente para que puedan ser liberados de la falsa autoridad.
La erosión continua de la autoridad La autoridad falsa que estamos experimentando en el mundo hoy en día es un asunto que ha durado mucho tiempo—el cuál ha partido desde que nuestros primeros padres abandonaron la autoridad—y también es el resultado de una erosión lenta, pero constante de la autoridad, durante el siglo XX. Los principios que fueron establecidos por el Dios Creador han sido recapturados e implementados en las sociedades, en diferentes grados, durante diferentes períodos de la historia humana, y hace cien años, la gente tenía un entendimiento mucho más claro de la autoridad verdadera, y poseía el respeto correspondiente con relación a ella.
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Ciertamente, las naciones y culturas no se encontraban viviendo La autoridad de acuerdo a los principios del Dios genuina Creador en todos los aspectos de la sigue siendo vida. Había muchísimas enfermedanuestra única des sociales y muchas injusticias en esperanza para los cien años que nos precedieron, este planeta. de la misma forma como existen hoy en día. Las estructuras de autoridad fueron mal usadas por medio de individuos que operaban con ellas, resultando en formas de opresión y en el abuso de la dignidad humana, a través de sistemas que reducían a la gente a un estatus subhumano, forzando a la gente a la esclavitud, y robándoles completamente su libertad. El siglo XX puede haber sido el siglo más sangriento en todos los registros, con todas sus guerras, con la “limpieza étnica”, y la aniquilación de millones de gentes a través de dictadores y tiranos. Estoy en contra de cualquier forma de mal uso de la autoridad, que llegue a abusar, deshumanizar, y destruir a la gente. El propósito de este libro es ayudar a rescatar a la autoridad de esta historia tan oscura, así como de abusos potenciales en el futuro. Tal y como escribí anteriormente, muchas gentes a través de todo el mundo han abandonado el concepto de la autoridad, en parte, como resultado de estos abusos y sus consecuencias. Pero la autoridad genuina sigue siendo todavía nuestra única esperanza para este planeta. Por lo tanto, nuestro enfoque y prioridad necesita estar colocado en la reedificación de las vidas destrozadas y de las naciones que se encuentran en lucha a través de todo el mundo.
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Un reconocimiento de la esencia de la autoridad en años pasados Aún con el mal uso y abuso de la autoridad en los años pasados recientes, todavía existía entre muchas gentes en diferentes naciones, un entendimiento y aceptación general de la esencia de la verdadera autoridad, y de sus estructuras de apoyo dentro de la sociedad, tales como la familia, el gobierno, la iglesia, y los negocios, y en forma histórica, la función establecida de la autoridad en todos estos ámbitos o medio ambientes era mucho más clara, y por lo tanto existía mayor orden y armonía. Por ejemplo, existían ciertos tipo de expectativas y de límites con relación a tener hijos bajo el contexto del matrimonio, y contando con un acuerdo donde la unión matrimonial debería ser estimada y protegida. En forma general, la gente mostraba más respeto por sus líderes, así como por sus compañeros de trabajo. La gente joven había sido enseñada a estimar a los ancianos, y se había colocado un valor muy alto con relación a la edad y a la sabiduría. Existía un respeto por las instituciones sagradas. Se daba más honor a todos aquellos que contribuían con sus vidas para el desarrollo de la sociedad, en lugar de dárselo a las celebridades, quienes muy frecuentemente sólo son “famosos, por el simple hecho de ser famosos”. Las instituciones de la comunidad y del gobierno también contaban con mucho mayor respeto. Este respeto por los oficiales civiles y públicos era adoptado no solamente por los ciudadanos y los electores, sino también por todos aquellos que se encontraban en posiciones de importancia. Por ejemplo, uno no solía escuchar tanto a cerca de los alcaldes, pastores, y otro tipo de líderes que se involucraban en problemas morales o éticos,
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debido a que ellos honraban la confianza que les había sido concedida por medio de sus posiciones. Por supuesto, siempre existieron excepciones a esta actitud general con relación a la autoridad, a través de gentes que fingieron y abusaron de sus posiciones, y se salieron con la suya, debido a que nunca fueron atrapados, o nunca fue revelado en forma pública lo que habían hecho. Pero como una regla general, la gente valoraba y respetaba la función de la autoridad en sus vidas. El rechazo a la autoridad en la sociedad contemporánea Tal y como hemos visto, en el mundo de hoy en día, existe una confusión general acerca de la autoridad, y acerca del rechazo en contra de la autoridad, y esa ignorancia con relación a la autoridad ha llevado a vidas completamente desordenadas. Por ejemplo, los padres, madres, y los hijos no han incorporado los principios de la autoridad en la vida familiar. Como resultado de esto, muchos padres han abdicado de sus funciones como la autoridad mayor dentro de la familia, y muchos maridos y esposas no están seguros de quien es la persona responsable de hacer esto, y muchos hijos no estiman a sus padres. Otro resultado es que muy pocos parámetros han sido establecidos y enseñados a los hijos, de tal manera que los hijos mismos están teniendo hijos, y los bebés de estos padres no autorizados, no se encuentran preparados para transmitir ningún concepto claro con relación a cómo debe verse la autoridad. En el medio ambiente del gobierno, multitud de ciudadanos tienen muy poco respeto por sus líderes nacionales, y carecen de estimación por sus símbolos nacionales. Están prevaleciendo los “políticos” que sirven sus propios intereses en lugar de que existan verdaderos hombres de
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estado. Muchos políticos están buscando esas posiciones de autoridad, no para impartir poder a otros, por medio de servir a sus electores, sino al contrario, para usar su poder, a fin de asegurar y preservar ventajas y conveniencias personales. En el medio ambiente de la iglesia, algunos líderes religiosos han permitido que sus pasiones físicas gobiernen por encima de sus responsabilidades, hasta el punto donde ciertos sacerdotes y predicadores han usado su autoridad para abusar, manipular, y en algunos casos, destruir las vidas de cristianos que habían sido confiados bajo su supervisión. En el medio ambiente de los negocios, la búsqueda de la codicia y de la especulación, sustituyendo el lugar de las empresas honestas, ha llevado a muchos ejecutivos y a sus corporaciones hacia las prácticas ilegales o dudosas, que algunas veces han causado la caída, tanto de los ejecutivos, como de las instituciones. Algunos líderes de sindicatos también han abusado sus posiciones de autoridad y la confianza que sus miembros habían colocado en ellos, para que trajeran condiciones de trabajo que fueran justas y equitativas; ellos han usado las cuotas de los miembros para sus propios intereses, mientras que al mismo tiempo han estado debilitando muchas compañías que son legítimas—y en algunos casos, poniéndolos en bancarrota y completamente fuera de los negocios, así como causando que todos sus miembros pierdan sus trabajos. La elevación del individualismo Uno de los factores que ha contribuido al rechazo y erosión de la autoridad a través de todo el mundo, es la creciente popularidad de la idea del individualismo,
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la cual muy frecuentemente ha sido promovida a través del sistema político de la democracia. La búsqueda de la democracia ha capturado la mente de muchas gentes en todas las naciones alrededor del mundo, y esto ha llevado a la afirmación de la libertad y a muchos beneficios para gentes que habían sufrido durante mucho tiempo, bajo la opresión de la falsa autoridad que se encontraba detrás del comunismo, las dictaduras, y el colonialismo. Mientras que han habido muchas cosas muy positivas que se han compartido como resultado de la democracia, el concepto de las gentes con relación a este sistema político, muy frecuentemente enfoca la idea de individualismo hasta el punto tal, que ellos sienten que ya no tienen que rendir cuentas a nadie por ninguna cosa, y que nadie tampoco tiene el derecho de decirles lo que deben de hacer. Era necesario abandonar todas esas autoridades falsas, pero parece ser que mucha gente ha abandonado todo tipo de autoridad completamente, junto con todo esto. El exceso en el énfasis con relación al individualismo, puede llegar a paralizar el potencial de las gentes, por medio de causarles que busquen el poder solamente, en lugar de buscar una autoridad genuina. En su extremo, una actitud de individualismo ignora la realidad de que los seres humanos fueron hechos para vivir dentro de la comunidad, en las diferentes formas que hemos discutido anteriormente, y también para contribuir con sus cualidades idóneas, los unos para con los otros. En forma muy importante, también niega la necesidad de la responsabilidad personal y de la relación de dar y tomar que viene como resultado de la autoridad establecida y de la sumisión, lo cual permite que la vida pueda operar en una forma muy suave, muy tranquila, y también trae orden y paz a las naciones.
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También algo que contribuye a la erosión de la autoridad en nuestras naciones son los cambios en las moralidades sociales, las cuales se han alejado del diseño original del Fabricante. De nuevo, la actitud de “yo puedo hacer todo lo que yo quiera, y tú no tienes que decirme lo que yo debo de hacer” ha superado el entendimiento básico de lo que consiste el valor de la vida, de acuerdo a las leyes y principios del Dios Creador. La tendencia hoy en día, que consiste supuestamente en apoyar los dones individuales de las gentes, parece estar dedicada a erradicar todo tipo de autoridad fundamental. Pero, la autoridad es la única cosa que puede renovar y preservar nuestra sociedad contemporánea. Por ejemplo, una perspectiva de este tipo puede llegar a transgredir la vida familiar en un caso donde, si tu hija de trece años de edad queda embarazada, ella tiene el derecho de esconder esta información de ti como padre o madre, y tú no tienes autoridad alguna en su vida con esta situación. Al La ignorancia contrario, el estado, a través de la escuela de la pública adonde ella asiste, tiene la autoverdadera ridad y tiene también la influencia completa sobre ella. En esta y en muchas autoridad es padre de la otras maneras, los padres han perdido anarquía. su autoridad ante otras autoridades que están operando bajo principios completamente falsos. En este tipo de circunstancias, todos nos preguntamos por qué es que la sociedad ha seguido desintegrándose. La pregunta es la siguiente: ¿Cuál es el tipo de autoridad que va a seguir siendo promovida en la sociedad—una autoridad falsa o una autoridad genuina? La ignorancia de la verdadera autoridad es la madre de la anarquía. Una sociedad sin autoridad, deja de ser
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una verdadera sociedad, debido a que cualquier tipo de sociedad está formada de relaciones sociales, y estas relaciones sociales necesitan el marco de la autoridad para que puedan funcionar en una forma saludable y efectiva. Esta es la razón por la cual los principios de la autoridad genuina deben ser comunicados en forma muy clara a toda la gente, en todas las naciones. La gente necesita llegar a entender los beneficios de la autoridad personal y corporativa, para su vida, así como para la vida de los demás. La verdadera autoridad en una sociedad trae la estructura, paz y productividad para esta vida, cosas que son absolutamente necesarias. El rechazo de la verdadera autoridad sacrifica la visión y los propósitos de la gente, mientras que la adherencia a la autoridad protege los propósitos de la gente, y produce una visión personal, así como la confianza para que puedan llegar a su completa realización. Cuando todo el mundo entiende su propósito y su función, a la luz de los propósitos del Dios Creador, este conocimiento viene a generar el funcionamiento suave y efectivo de las relaciones sociales, y el ejercicio de la autoridad personal. Sin autoridad... Sin autoridad, no existen bases para que nadie tenga que rendir cuentas, y por lo tanto, la gente se siente insegura, debido a que no saben lo que pueden esperar de los demás. La “libertad” sin ley, o sin responsabilidad, en forma eventual se va a convertir en un caos completo. Sin la verdadera autoridad... ••La vida no tiene orden alguno. ••No existe confianza alguna. ••El propósito no tiene protección alguna.
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••No existe ningún tipo de funcionamiento efectivo. ••El destino ha sido abandonado por completo. ••El poder es desperdiciado. ••La energía es abusada. ••El potencial es desviado. La autoridad que ha sido erosionada en nuestro mundo necesita ser reestablecida nuevamente. Cuando la verdadera autoridad es colocada en su lugar, renueva el sentido de seguridad, de tal manera que la gente experimenta menos tensión nerviosa en sus vidas, y reducen la tensión también en sus relaciones. Esta es la razón de por qué el hecho de restaurar la autoridad verdadera va a promover la seguridad nacional y global, así como la paz y el crecimiento. A continuación vas encontrar claves para reestablecer la autoridad legítima en esta tierra:
Clave #1: Reconocimiento de la crisis de autoridad Para poder restaurar la autoridad legítima, en primer lugar necesitamos poder reconocer que existe una carencia general de la autoridad genuina en todas las esferas básicas de la sociedad—lo cual incluye nuestras familias, los gobiernos locales y nacionales, las iglesias, y los negocios—y esto es un problema crítico que necesita ser confrontado. El hecho de poder restablecer la autoridad legítima no va a suceder si seguimos pensando que algún “grupo” anónimo, o “el gobierno” van a arreglar las cosas para todo el mundo. Esto tiene que comenzar con cada uno de nosotros, en forma individual, a medida que volvemos a
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descubrir la verdadera autoridad para nosotros mismos, y entonces nos ponemos a comunicar sus verdades y principios a los demás.
Clave #2: Redefiniendo la autoridad, y explicando su verdadera naturaleza Cuando comunicamos lo que es La autoridad la autoridad, tenemos que definirla en forma muy clara. La autoridad ha perno es una dido su significado para la mayoría de maldad la gente, y muy frecuentemente todos inherente, ni ellos erróneamente la consideran como una maldad algo que tiene que ver con la opresión o necesaria, sino el control. Esta es la razón de por qué al contrario, yo he dedicado varios capítulos en este es la clave para libro a definir y explicar la verdadera naturaleza de la autoridad. El término todo lo bueno. tiene que ser conceptualizado nuevamente y renovado en la mente de las gentes. La autoridad no es una maldad inherente y tampoco necesariamente es una maldad, sino al contrario, la autoridad es el medio para alcanzar buenas cosas. Tú puedes utilizar los principios que se encuentran a través de todo este libro, pero especialmente en la parte uno, los principios que pueden ayudar a los demás a que lleguen a entender la verdadera definición y el verdadero propósito de la autoridad. Tú también puedes edificar con relación a los aspectos positivos de la autoridad, para que la gente puede reconocer esto a través de la vida cotidiana. Por ejemplo, cada vez que las gentes asisten a una boda, usualmente ellos escuchan que el sacerdote o el juez de paz dice algo como esto, “Por la autoridad (o poderes) investidos en mi a través del estado de ____________, ahora yo los pronunció a ustedes marido y
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mujer”. O cuando alguna universidad le confiere grados académicos a todos aquellos que terminaron con todos los requisitos educacionales, el presidente o el decano de la universidad suele decir algo similar como esto, “Por el poder investido en mi a través de la mesa directiva de la universidad, yo te otorgo el grado de ____________, junto con todos los derechos, privilegios, y responsabilidades que lo acompañan”. Existen aspectos muy positivos y muy gozosos de la autoridad, que han establecido nuevas familias, y han recompensado el esfuerzo personal y los logros individuales, en lugar de oprimir y restringir. En adición a esto, la autoridad personal y corporativa involucra el otorgamiento y el ejercicio de derechos y privilegios, los cuales provienen de una autoridad mayor.
Clave #3: Restaurando los fundamentos de la autoridad genuina Toda autoridad tiene que estar basada en la autoridad absoluta, Toda autoridad que es el Dios Creador, o de otra debe estar basada manera va a acabar partiéndose en la Autoridad en pedazos. La autorización de Absoluta, que es uno mismo no es autoridad; éste es el error histórico de lo que hemos el Dios Creador, o llegado a conocer como “huma- de otra manera, va nismo”, el cual promueve la idea de a desbaratarse en que el hombre es su propia medida pedazos. en esta vida. Debido a que la verdadera autoridad siempre se encuentra delegada, parecería que el más grande culpable de la erosión de la autoridad en esta y en las generaciones anteriores es la elevación de los seres humanos como la autoridad máxima. Los humanos, en ellos mismos,
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no tienen autoridad alguna. Al contrario, la gente necesita una referencia muy sólida con relación a quién es Dios, especialmente como nuestro creador, y en relación a nuestra dependencia de Él. “A pesar de todo, Señor, tú eres nuestro Padre; nosotros somos el barro, y tú el alfarero. Todos somos obra de tu mano” (Isaías 64:8). En nuestras sociedades contemporáneas, mucha gente no quiere aceptar la idea de la autoridad absoluta. Pero tal y como pudimos ver anteriormente, la palabra absoluta ha sido definida como “fundamental, máxima”. Todo aquello que se encuentra fuera de Dios y fuera de sus caminos es inferior. De nuevo, la verdadera autoridad tiene que ser fundamentada en un autor, y por lo tanto, todos nosotros debemos identificarnos en primer lugar con nuestro Autor. Debemos comenzar con un reconocimiento general de nuestro Dios Creador y de sus leyes básicas, tal y como se encuentran registradas en su Palabra, que son las Escrituras. El primer mandamiento de Dios para su pueblo, el cual le dio a Moisés para confirmar la absoluta autoridad de Dios en sus vidas es: “Yo soy el Señor tu Dios. Yo te saqué de Egipto, del país donde eras esclavo. No tengas otros dioses además de mí” (Éxodo 20:2–3). El hecho de reconocer y servir a Dios, como nuestro Creador y Gobernador, nos va a capacitar para que podamos volver a edificar los fundamentos antiguos, tan seguros de la sociedad: El Señor te guiará siempre; te saciará en tierras resecas, y fortalecerá tus huesos. Serás como jardín bien regado, como manantial cuyas aguas no se agotan. Tu pueblo reconstruirá las ruinas antiguas y levantará los cimientos de antaño; serás llamado “reparador de muros
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derruidos”, “restaurador de calles transitables”. (Isaías 58:11–12) El mundo necesita volver a sus sentidos; necesitamos regresar a la realidad de que existen los valores absolutos, los cuales son fundamentales, fuertes, estables, y son el apoyo y soporte, tanto para los individuos, como para la sociedad como un conjunto total. A medida que lo hacemos, vamos a ser llamados “reparadores de muros derruidos, restauradores de calles de transitables”. Las comunidades van a ser restauradas y las vidas van a ser reedificadas.
Clave #4: Debemos identificar las leyes del Dios Creador como nuestra referencia para la autoridad La erosión y la desilusión con relación a la autoridad dentro de nuestras naciones pueden ser rastreadas hasta el momento en que los movimientos de las gentes se apartaron de los pilares de autoridad que habían sido establecidos por el Dios Creador, y que debían aplicarse para el funcionamiento efectivo y exitoso de toda su creación. El Autor de toda la autoridad más legítima, se reveló a sí mismo dentro del contexto del texto bíblico, el cual establece muy claramente las leyes y principios fundamentales, por las cuales todas las cosas vivas, incluyendo a la humanidad, tienen que operar. Añadiendo un poco más con relación a la clave número tres, entonces, después de establecer el fundamento general de la autoridad del Dios Creador en nuestra vida, todos nosotros necesitamos identificar sus leyes y principios, los cuales deben ser nuestra referencia para nuestro diario vivir. Es la única manera para efectuar una verdadera restauración de la autoridad.
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Casi todas las naciones han sido construidas y fundamentadas en la ley, debido a que la ley produce y mantiene una sociedad estable y funcional. Para que se pueda llevar a cabo un sano desarrollo nacional, toda la nación debe estar de acuerdo con relación a cuál va a ser la ley o la autoridad. Muchas naciones tienen una constitución, lo cual puede ser definido como “las leyes y principios básicos de una nación, estado, grupo social, la cual determina los poderes y obligaciones del gobierno, y garantiza ciertos derechos para la gente que habita dentro de esta nación”. Una constitución establece todo lo que ha sido llamado como “las reglas de la ley”, donde a final de cuentas constituye la ley que gobierna a la nación, y no es el presidente, ni el primer ministro, ni el congreso o parlamento. Aunque muy frecuentemente repetimos la frase de que “nadie se encuentra por encima de la ley”, este principio tiene que regresar a la práctica. Cuando la gente piensa que a final de cuentas ellos gobiernan toda la nación basados en sus propias opiniones, entonces la autoridad ha sido debilitada, e incluso cancelada completamente, debido a que las opiniones de las gentes pueden ser muy arbitrarias y pueden cambiar cada vez que se les antoje. El hecho de gobernar a través de encuestas de opinión puede sonar algo justo, hasta que llegamos a ver qué tan inconsistentes pueden llegar a ser las actitudes de la gente de una semana a la semana siguiente, y de un mes al mes siguiente, todo dependiendo de las circunstancias inmediatas de su propia vida, y de los eventos en las comunidades y en el mundo alrededor de ellos. Esta es la razón de por qué la única manera de encontrar un fundamento sólido para gobernar es a través de la naturaleza firme de las leyes y principios ya establecidos.
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De nuevo, la autoridad de Dios, la cual Él provee a través de su Palabra, es La autoridad estable; no cambia en un abrir y cerrar de Dios, la de ojos. Otra definición para la palabra absoluto que pudimos ver anterior- cual Él provee a través de mente es “independiente de parámetros o estándares arbitrarios de medida”. su Palabra es También pudimos ver que la palabra estable; no gobernador se refiere o se deriva de la cambia con las palabra latina que significa “mantener circunstancias. derecho, recto”. La verdadera autoridad nos da un punto de referencia, y nos da una dirección muy clara en la cual podemos seguir. La realidad de la crisis actual en nuestras naciones en el mundo entero, es que necesitamos decidir cuál va a ser nuestra autoridad fundamental y la dirección en que vamos a ir. Para resolver nuestros problemas, la autoridad legítima tiene que ser instaurada, y eso solamente va a suceder, a medida que las naciones aprenden a alinear sus leyes para que estén de acuerdo con los principios del Dios Creador. Donde no existe autoridad, no existe ley alguna. Donde existe respeto para la autoridad, siempre va a existir un desarrollo ordenado en ese país. Por ejemplo, si la gente valora la ley, el crimen va a disminuir, debido a que la gente va a respetar la propiedad de otros, y van a ver muchísimos menos hogares destruidos debido a que los maridos y las mujeres van a tomar seriamente los votos que se hicieron los unos a los otros. En otras palabras, la sociedad necesita ser introducida de nuevo a sus principios originales. Por eso dice el Señor omnipotente: “¡Yo pongo en Sión una piedra probada!, piedra angular y
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preciosa para un cimiento firme; el que confíe no andará desorientado. Pondré como nivel la justicia, y la rectitud como plomada”. (Isaías 28:16–17) Tenemos que restaurar de nuevo la justicia y la rectitud del Dios Creador, como nuestra medida para vivir nuestra vida. Ésa debe ser la preciosa piedra angular de nuestras relaciones individuales, en las comunidades, y en las naciones. Necesitamos una piedra angular que ya haya sido probada, y que sin lugar a dudas haya demostrado ser inamovible—una Roca sólida. Un ancla algunas veces puede prestarse para ser una buena analogía con relación a la estabilidad, pero mi experiencia a través de haber crecido en las Bahamas me ha mostrado que si se acerca una tormenta, el ancla es completamente inútil si no cuenta con una Roca. Las rocas no se mueven, pero las anclas ciertamente si se mueven, y los barcos pueden ser jalados y movidos muy lejos de su lugar de anclaje, y dentro de aguas muy peligrosas. El Distribuidor Autorizado, quien es “la piedra angular” (Efesios 2:20), es el único que puede guiarnos de regreso al Dios Creador, y a nuestra estabilidad como seres humanos, Él dijo, Por tanto, todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca. Cayeron las lluvias, crecieron los ríos, y soplaron los vientos y azotaron aquella casa; con todo, la casa no se derrumbó porque estaba cimentada sobre la roca. Pero todo el que me oye estas palabras y no las pone en práctica es como un hombre insensato que construyó su casa sobre la arena. Cayeron las lluvias, crecieron los ríos,
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y soplaron los vientos y azotaron aquella casa, y ésta se derrumbó, y grande fue su ruina. (Mateo 7:24–27)
Clave #5: Debemos enseñar que todos deben rendir cuentas a la autoridad La siguiente clave es que toda la gente debe entender que todo el mundo tiene que rendir cuentas ante la autoridad, y que la solución es algo voluntario, y consiste en someter la independencia de uno, a cambio de un bien personal o corporativo mucho más grande. Nunca vamos a poder tener éxito en el aislamiento. La vida no nos permite esto debido a que fuimos creados y diseñados para las relaciones. De hecho, si la gente no aprende a someterse en forma voluntaria, la sociedad puede forzarlos a que se sometan. Por ejemplo, cuando un juez sentencia a alguien y lo manda a prisión por violar la ley, él simplemente está tomando una persona que vive sin ley, y lo está colocando bajo la autoridad nuevamente. Un prisionero o recluso siempre tiene que recibir órdenes con relación a cuando tiene que despertarse, cuando tiene que ir a la cama, cuando tiene que comer, cuando tiene que bañarse, qué es lo que debe vestir, qué tipo de trabajo puede realizar, cuando tiene que comenzar a trabajar, cuando tiene que parar de trabajar, a quien puede visitar y por cuánto tiempo, y muchas otras cosas parecidas a éstas. Su vida se encuentra sujeta a una autoridad mucho más estricta, donde todos sus deseos personales han sido puestos a un lado. Por lo tanto, aunque el prisionero o recluso ha rechazado la autoridad, ahora está siendo forzado a vivir debajo de ella, de todas formas. Es mucho mejor respetar la autoridad y recibir sus beneficios, que tener que sufrir como resultado de
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ignorarla o rechazarla. Muchas gentes sufren debido a que han ignorado o rechazado la autoridad. Ellos tal vez no se encuentren en una prisión, pero sus vidas están completamente desordenadas, inestables, e improductivas. Nosotros tenemos que comunicarle a los demás que la verdadera autoridad y la sumisión tienen el propósito de dar y recibir todo aquello que es bueno para nuestra vida. De la misma forma como nos sometemos al oxígeno que las plantas producen, debemos mantenernos unos a los otros buscando por todas las formas respetar la autoridad de los demás, y recibir todo aquello para lo cual ellos han sido autorizados, y que puedan compartirlo con nosotros. Si tú conoces cuál es tu autoridad y cuál no es, entonces tú puedes respetar la autoridad de otras gentes, a medida que ellos te proveen con lo que tú necesitas, y que tú no posees. No debemos controlar a otros, sino que debemos usar nuestra autoridad para servirlos, y tenemos que rendir cuentas por el servicio para el cual usamos nuestra autoridad. Vamos a motivar a la gente para que puedan confiar en la autoridad de los unos y los otros, que puedan respetarla, y que puedan permitir el ejercicio de sus dones inherentes, a medida que nosotros ejercitamos los nuestros.
Clave #6: Debemos hacer a la autoridad responsable por su propia autoridad En los diferentes ámbitos y medio ambientes de la vida, tenemos el derecho de hacer responsable a alguna persona que se encuentre en autoridad, con relación a su autoridad máxima, quienquiera que sea que haya delegado ese poder en esta persona. Esto es esencial para poder restaurar la autoridad legítima en la tierra. Nadie puede estar por encima de la autoridad o de otra manera,
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va a mal usar y abusar a los demás. Los padres, los políticos, pastores y sacerdotes, y los líderes de negocios se encuentran en posiciones, ya sea para ayudar o para lastimar a los demás, a través de su comportamiento y actitudes que guarden en sus posiciones de autoridad. Por ejemplo, lo que contribuyó a la crisis económica que comenzó en la primera década del siglo XXI, fue que las corporaciones no tenían que rendir cuentas con relación a las prácticas irresponsables para los negocios. Existe ahora una reinstalación de autoridad en la forma de salvaguardas y reglas que están ayudando a confrontar este problema. Este tipo de reinstalación de principios saludables se encuentra en el corazón de la restauración de toda una cultura.
Clave #7: Debemos enseñar los beneficios de la autoridad La gente debe poder entender en manera muy especial los Cuando la gente beneficios de la verdadera autoridad, para que ésta pueda ser entiende la verdadera naturaleza de la establecida de nuevo en todo el mundo. A todos se nos ha enseautoridad y la ñado con relación a los peligros sumisión, se hace de la falsa autoridad por tanto mucho más claro el tiempo, que muy frecuentemente hecho de que existen ya no sabemos si se trata de una más ventajas en la distorsión de algo que es positivo sumisión, que en y afirmante para la vida de las gentes. Cuando la gente llega a la rebeldía. entender la verdadera naturaleza de la autoridad y de la sumisión, se hace mucho más claro el hecho de que existen más ventajas para la sumisión que para la rebeldía.
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Los beneficios de la autoridad personal han sido subrayados a través de todo este libro, que en forma particular en el capítulo ocho: originalidad, conciencia del valor intrínseco, realización personal, confianza, ningún tipo de competencia, ningún tipo de comparaciones, ningún tipo de celos, ningún tipo de temores, motivación interna, pasión, y autenticidad. Los propósitos principales de la autoridad, tal y como fueron delineados en el capítulo seis, también son ventajas para la autoridad que tiene que confrontar la crisis en nuestro mundo hoy en día. La verdadera autoridad trae orden, una máxima producción, preservación, representación a través de la validez y la defensa, seguridad, promoción, libertad, identidad, y realidad. De hecho, cuando uno se encuentra viviendo bajo la autoridad de uno mismo, esto nos lleva a una vida mucho más clara y libre de complicaciones. Cuando tú puedes entender tu autoridad personal, vas a saber quién eres realmente, aquello para lo cual has sido diseñado, y vas a saber a quién puedes apelar cuando se presente un problema o una necesidad. Por lo tanto, la autoridad es la fuente de origen del orden y de la paz. Es la sustancia de la simplicidad.
Clave #8: Debes descubrir tu autoridad personal para que puedas delegar autoridad Por supuesto que otra clave esencial consiste en que tenemos que estar seguros de descubrir nuestra autoridad personal, de tal manera que estemos calificados y equipados para poder delegar la verdadera autoridad a otros. No podemos ayudar a restaurar a los demás, si no hemos sido restaurados nosotros mismos. Debemos hacer una prioridad el hecho de pedirle al Dios Creador que ponga bien en claro tu autoridad
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personal, y debes contestar todas las preguntas que se encuentran en el Perfil de Autoridad Personal en la sección que se encuentra al final de este libro. De esta manera, tú no sólo vas experimentar la realización personal, sino que también vas a ser capaz de mostrarles a otras personas la forma en que puedan entrar a su verdadera autoridad.
Clave #9: Debemos permitir que la gente pueda ir en busca de sus áreas de autoridad La novena clave para poder restablecer la legítima autoridad consiste en permitir que la gente vaya en busca de sus áreas de autoridad, y también consiste en motivarlos para que ellos hagan lo mismo con otros. La autoridad nos da una libertad total dentro de los límites de nuestra esfera de dominio personal, y por lo tanto, nos permite ser aquellas personas que fuimos diseñadas desde nuestro nacimiento, sin limitación alguna. ¿Cuáles son estos límites? No debemos transgredir a los demás, ni a la autoridad que sostengan, o de otra manera vamos estar traspasando esos límites. Si tenemos una idea bien clara de nuestra autoridad—tal y como lo vimos en la clave número ocho, mencionada anteriormente—entonces vamos a poder conocer cuándo es que estamos traspasando los límites de otra persona. De nuevo, debemos reconocer que toda persona es un líder, a medida que lleva a cabo la autoridad que Dios le ha dado en esta tierra, y también debemos reconocer que nosotros nos encontramos dentro de nuestra autoridad, sólo cuando estamos en el área de nuestro propósito personal. Podemos capacitar a otros también para que vayan en busca de sus dones, por medio de crear medio ambientes
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para ellos donde puedan encontrar La autoridad nos y poner en práctica su autoridad personal. Los padres pueden hacer da una libertad una contribución muy especial en total dentro de los este sentido. Si un hijo o hija desculímites de nuestra bre muy temprano en su vida cuál esfera de dominio es su autoridad personal, y cuál es su posición y función en la familia, personal. y si él o ella ha sido enseñada que esa posición y función también van a permanecer cuando sea un adulto, entonces él o ella van a tener una guía muy clara de cómo poder vivir en esta vida. A medida que la gente descubre y comienza a ejercitar sus dones personales, toda la estructura de autoridad interdependiente va a comenzar a tomar el lugar que le corresponde.
Clave #10: Debemos reconocer que todos tenemos que rendir cuentas a la Fuente de Origen de toda autoridad La clave número diez nos trae nuevamente al punto de comienzo donde debemos reconocer a Dios como nuestro Autor. No podemos simplemente reconocer la Fuente de Origen de nuestra autoridad y al mismo tiempo, no rendir cuentas a Él. Dios es a quien tenemos que rendirle cuenta de nuestras vidas, y de la forma como hemos usado la autoridad que Él nos ha dado. Pablo dijo, Está escrito: “Tan cierto como que yo vivo— dice el Señor—, ante mí se doblará toda rodilla y toda lengua confesará a Dios”. Así que cada uno de nosotros tendrá que dar cuentas de sí a Dios. (Romanos 14:11–12)
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El hecho de volver a establecer la autoridad legítima en el mundo, va a incluir en una forma muy natural la responsabilidad y el hecho de tener que rendir cuentas, y estas cualidades deberían comenzar con cada uno de nosotros. Por lo tanto, todos nosotros tenemos que estar conscientes del hecho de que vamos a ser juzgados, y vamos a tener que rendir cuentas por nuestras vidas delante de nuestro Dios Creador. Y, a medida que descubrimos, disfrutamos, y realizamos nuestra autoridad personal, todos podemos recordar que… Dios no es injusto como para olvidarse de las obras y del amor que, para su gloria, ustedes han mostrado sirviendo a los santos, como lo siguen haciendo. Deseamos, sin embargo, que cada uno de ustedes siga mostrando ese mismo empeño hasta la realización final y completa de su esperanza. (Hebreos 6:10–11)
Capítulo quince
Cuatro medio ambientes básicos de la autoridad Restaurando los fundamentos de la autoridad . en la familia, en el gobierno, en la iglesia, . y en los negocios
E
n el último capítulo, pudimos ver que para volver a establecer la autoridad legítima en esta tierra, todos debemos reconocer la autoridad absoluta de nuestro Dios Creador, y debemos identificar leyes y principios específicos en los cuales tenemos que basar nuestras vidas. Para ayudarte a que comiences a realizar esto, este capítulo provee Escrituras fundamentales que corresponden a la naturaleza de la autoridad en cuatro esferas o medio ambientes básicos de las relaciones humanas: la familia, el gobierno, la iglesia, y los negocios. Cada una de estas áreas involucra inter actuaciones muy importantes entre las gentes, las cuales necesitan guía y estructura para el ejercicio adecuado de la autoridad. A medida que tú revisas estas cuatro esferas o medio ambientes, debes mantener en mente estos siguientes puntos: ••La autoridad puede ser comparada con la electricidad: la misma fuerza que se usa para investir de poder a la gente, tiene el potencial 361
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para destruirlos, si no es regulada y sometida al propósito correcto. • La autoridad produce y mantiene el orden—en las familias, en las sociedades, en las naciones, en el mundo—debido a que establece la referencia para todos los tipos de relaciones en la vida. Cuando alguien se encuentra funcionando de acuerdo a la autoridad, él conoce dónde está supuesto estar y qué es lo que está supuesto a realizar, basado en la autoridad que le ha sido otorgada. Nunca es un asunto de que alguien sea “más grande” o más importante, sino que el asunto consiste en ver cuál es la autoridad de cada persona para el bienestar, protección, y seguridad de todos aquellos que se encuentran involucrados. También es un asunto que consiste en crear el medio ambiente donde cada persona pueda remontarse en su autoridad personal, y que pueda hacer una contribución a toda la comunidad. • La autoridad y la sumisión son interdependientes. En las relaciones, las gentes dan y reciben. Cuando tú das, tú estás ejercitando cierto grado de autoridad; cuando tú recibes, tú estás operando bajo cierto grado de sumisión. La autoridad no puede funcionar sin sumisión, y la sumisión es inválida y carece de significado alguno, si no se encuentra bajo el contexto de una verdadera autoridad. De hecho, la sumisión es muy peligrosa sin la autoridad genuina, porque lo que algunas veces es llamada “sumisión”, de hecho ha sido
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sustituida por la opresión y el menosprecio de otras personas. • La autoridad, el poder, y la posición se encuentran relacionados entre sí. La autoridad es un derecho delegado, o un permiso. El poder es la habilidad, la fuerza, una fortaleza que capacita a una persona. La posición es el lugar que una persona ocupa con relación a otros. Tú autoridad personal es tu esfera de dominio o “hogar”, en el orden de las cosas, y es la clave para tu poder y efectividad. • Cuando tú llegas a entender el propósito de la autoridad, tú vas a saber que necesitas respetar, cooperar, y amar a los demás; para que los demás puedan ser capaces de darte algo que tú necesitas; y que tú puedas ser capaz de suplir algo que los demás también necesitan. • Debido a que la autoridad imparte a su vez, poder y autoridad, el hecho de poder entender la función de la autoridad en cada esfera de la vida, nos da la oportunidad de poder ejercitar todo el potencial de nuestra autoridad personal. Lo que sigue a continuación no es un manual exhaustivo con relación a estas cuatro esferas de autoridad, debido a que se necesitaría dedicar un libro entero a cada una de estas áreas. Al contrario, ha sido diseñado, a fin de poder referirte a diversas Escrituras muy características, que pertenecen a cada una de estas esferas o medio ambientes, de tal manera que tú puedas comenzar a aplicarlas en tu vida, conjuntamente con los otros principios de autoridad que se encuentran en este
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libro. Sin embargo, he incluido una discusión un poco más profunda con relación al medio ambiente o esfera de la familia, debido a que ha habido mucha confusión y contención en la sociedad acerca de las funciones de los hombres y de las mujeres, de su formación inherente, así como de sus diferencias y similitudes, y todos estos asuntos necesitan ser analizados con relación a la autoridad.1
La esfera o medio ambiente de la familia ¿Cuál fue la primera esfera o medio ambiente que Dios estableció en la tierra? No fue la “religión” o la iglesia, y ni siquiera fue el estado—fue la familia. Una de las razones de por qué la familia es la esfera o el medio ambiente más importante de la autoridad, es debido a que contribuye a todos las otras esferas o medio ambientes de autoridad—que van a convertirse en los futuros participantes del estado, de la iglesia, y de los negocios, pero primero son criados y entrenados bajo el contexto de la familia. Por lo tanto, la calidad de los líderes en todas las otras esferas o medio ambientes depende de lo que la familia produzca. El tipo de hijos que salen de nuestras familias va a determinar el tipo de sociedad que vamos a tener. William J. Bennett…dijo en una ocasión que la familia es la Secretaría de Salud, la Secretaría de Educación, y el Departamento de Seguro Social. La sociedad todavía tiene que inventar mejores maneras para poder crear gente saludable bien ajustada a la sociedad, por medio de colocarlas en familias amorosas e intactas, que vivan bajo los principios de Dios....La familia, la iglesia, y el gobierno ocupan esferas
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separadas de la vida, pero dependen los unos de los otros”.2 ¿Por qué es necesaria la autoridad realmente dentro de una familia? De nuevo, tenemos que regresar a los propósitos principales de la autoridad. La autoridad se necesita dentro de una familia para el orden, la máxima producción, preservación, la representación a través de la validez y de la defensa, la seguridad, promoción, libertad, identidad, y realidad. ¿Cuál es la naturaleza de la autoridad en la familia, y cómo es que todo este tipo de relaciones tienen que ser conducidas? La estructura dentro de la familia que lleva a cabo los anteriores propósitos de la autoridad es (1) el marido como el líder, (2) la esposa como líder conjunta, y (3) la sumisión de los hijos a ambos padres. Vamos a mirar las bases Escriturales para este orden, debido a que el mal entendimiento con relación a estas funciones ha llevado al mal uso y abuso muy trágico de la mujer en las relaciones matrimoniales, en las relaciones familiares, y en la sociedad, no solamente hoy en día, sino a través de la mayor parte de la historia de la humanidad. La fuente de origen de la autoridad para el esposo y la esposa Cuando nuestro Autor creó a los seres humanos, Él comenzó con un hombre, llamado Adán, cuyo cuerpo formó a partir de la tierra, y cuyo espíritu y alma fueron formados a partir de Dios mismo. Moisés registró lo siguiente: “Y Dios el Señor formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz hálito de vida, y el hombre se convirtió en un ser viviente” (Génesis 2:7). El varón fue formado en primer lugar, pero no fue diseñado para que viviera en aislamiento o soledad, ni
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para que llegara a realizar su autoridad por sí mismo. Él fue diseñado para hacer todo esto en colaboración con la mujer. Por lo tanto, la mujer es una colaboradora conjunta, que trabaja al lado del hombre para poder realizar aquello para lo cual ambos fueron creados. Luego Dios el Señor dijo: “No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada”.…Entonces Dios el Señor hizo que el hombre cayera en un sueño profundo y, mientras éste dormía, le sacó una costilla y le cerró la herida. De la costilla que le había quitado al hombre, Dios el Señor hizo una mujer y se la presentó al hombre, el cual exclamó: “Ésta sí es hueso de mis huesos y carne de mi carne. Se llamará ‘mujer’ porque del hombre fue sacada”. (Génesis 2:18, 21–23) La palabra “costilla” que se encuentra en Génesis 2:22 se deriva de la palabra hebrea tsela. Esto no necesariamente significa una costilla, tal y como solemos entender la palabra. Puede significar “el lado” o “la cámara”. El punto aquí es que Dios sacó a la mujer de una parte del hombre, debido a que el “receptor” tiene que ser exactamente como él “dador”, o fuente de origen. De la misma forma como el hombre fue creado básicamente y espiritualmente, a fin de que pueda recibir el amor de Dios, y que pueda permanecer en una relación con Él, la mujer tenía que ser de la misma esencia del hombre, a fin de que pudiera recibir amor del hombre, y que pudiera permanecer en una relación con él. Debemos darnos cuenta que aunque los hombres y las mujeres tienen la misma esencia, de hecho, Dios los hizo usando métodos completamente diferentes. La Biblia dice que el hombre fue formado a partir del polvo
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de la tierra. (Ver Génesis 2:7). La palabra hebrea que se traduce como “formado” es la palabra yatsar, que quiere decir “moldear”, de la misma forma como un alfarero moldea o le da forma al barro. Sin embargo, Dios “hizo” a la mujer. (Ver Génesis 2:22). La palabra hebrea que aquí se traduce como “hizo” es la palabra banah, que significa “construir” o “edificar”. Cuando Pablo escribió, “De hecho, el hombre no procede de la mujer sino la mujer del hombre” (1 Corintios 11:8), él se estaba refiriendo a éste pasaje en Génesis. Dios tomó a la mujer del hombre, y la “construyó”. Si Dios hubiera regresado al polvo de la tierra para formar otra persona cuando Él iba a formar a la mujer, ella no hubiera salido del varón, y por lo tanto ella no hubiera sido dicha de la misma esencia del hombre. Dios tomó exactamente lo que se necesitaba del hombre para hacer a la mujer. La mujer fue hecha tanto a la semejanza del hombre que, cuando Dios se la presentó al hombre, las primeras palabras del hombre fueron, “Ésta sí es hueso de mis huesos y carne de mi carne” (Génesis 2:23). Debes notar que debido a que Dios hizo al segundo ser humano a partir de Adán, y no a partir de otro montón de tierra, toda la gente que ha vivido a través de los tiempos, básicamente salieron de Adán, que puede ser considerado nuestra fuente de origen biológica o terrenal. Ninguno de nosotros es una persona independiente; y ninguno de nosotros puede decir que hemos sido “hechos por nosotros mismos”, debido a que todos nacimos con relación a alguien más que vino antes de nosotros—y la forma más directa es a través de nuestros propios padres, pero todos ellos regresan en forma original a Adán.
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El tiempo de Adán en la creación En el capítulo tres de este libro, pudimos ver que un autor o un creaDios creó a los dor siempre es la fuente de origen hombres y a las mujeres en de autoridad de su propia obra. La fuente de origen de un producto forma similar, tiene el derecho legítimo para estapero diferente, de blecer los límites de la autoridad que tal manera que coloca en su producto, y la forma puedan realizar como ese producto puede funciolos propósitos nar mejor. Todos estos límites es lo para los cuales que llamamos los principios o leyes Dios los diseño. que lo gobiernan, y a través de los cuales este producto puede operar. Dios creó a los hombres y a las mujeres en forma similar y diferente al mismo tiempo, de tal manera que ellos pudieran realizar los propósitos divinos que Dios había establecido para ellos. Los hombres y las mujeres fueron creados por medio de su fuente de origen con diseños complementarios, que reflejan sus funciones individuales dentro de los propósitos más grandes de autoridad para los cuales fueron creados por Dios. Por lo tanto, Dios creó en primer lugar al hombre, y le dio información con relación a la forma en que él debía vivir sobre la tierra, y entonces lo colocó en un jardín. La mujer fue creada después de esto. Dios el Señor tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén para que lo cultivara y lo cuidara, y le dio este mandato: “Puedes comer de todos los árboles del jardín, pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no deberás comer. El día que de él comas, ciertamente morirás”.. (Génesis 2:15–17)
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El tiempo de Adán en la creación es muy importante con relación a la autoridad. El fue el primero en ser creado y a quien se le dio la información. El fue el primero en el escenario del mundo, y el primero en recibir instrucciones de parte del Dios Creador, y esto lo convirtió en una autoridad legítima. Podemos ver un ejemplo de este tipo de autoridad en un juzgado o una sala de la corte legal. Durante un juicio, cualquier testigo es considerado creíble, y de valor muy especial si es que estaba en la escena en primer lugar, y puede describir lo que vio de primera mano. Esta es la razón de por qué Adán a final de cuentas, fue responsable cuando la serpiente engañó a Eva, y ambos desobedecieron las leyes del Dios Creador, por medio de hacer aquello que Dios les había dicho que no hicieran. El hombre había recibido las instrucciones originales, y era su responsabilidad pasar estas instrucciones y asegurarse de que fueran seguidas al pie de la letra. Por lo tanto, desde el principio de la creación de la humanidad, la familia ha tenido una estructura de autoridad. Esta estructura no hace que el hombre sea mejor o más inteligente que la mujer, pero al contrario, permite proveer orden y parámetros para las relaciones humanas. “Y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó” (Génesis 1:27, se añadió énfasis). El hombre y la mujer conjuntamente son “el hombre”. Dios no creó a la mujer a partir de la tierra, sino a partir del hombre, y por lo tanto existe una necesidad de cooperación mutua, de sumisión mutua, y de interdependencia. Los problemas comienzan cuando esta cooperación y dependencia sufre todo tipo de retos. No podemos crecer más allá de la naturaleza que
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Dios nos ha dado. La lucha de la mujer por sus derechos debajo de Dios es legítima. Pero el hecho de decir que los hombres y las mujeres tienen exactamente la misma autoridad es algo completamente desacertado de acuerdo a los registros de las Escrituras. La autoridad sólo puede ser otorgada; nunca puede ser arrebatada, y los hombres y las mujeres tienen diferentes tipos de autoridad. Pablo escribió lo siguiente: “Ahora bien, quiero que entiendan que Cristo es cabeza de todo hombre, mientras que el hombre es cabeza de la mujer y Dios es cabeza de Cristo” (1 Corintios 11:3). Él estaba diciendo que existe un orden para las relaciones humanas dentro de la familia, comenzando con el hombre, después la mujer, y extendiéndose a los hijos, lo cual vamos a discutir brevemente. Debes notar que “Dios es cabeza de Cristo”. Cristo mismo se somete al Padre, incluso siendo que Él es uno solo con el Padre, y por lo tanto, nuevamente, la sumisión no refleja autoestima o dignidad, simplemente posición. La falsa autoridad y el abuso en los matrimonios Existen muchos pleitos y discusiones entre los hombres y las mujeres hoy en día con relación a quien es “inferior” o “superior”. ¡Qué ese tipo de actitud esté muy lejos de nosotros! Este tipo de contención jamás fue planeada por Dios. Existe tensión, pleitos, y antagonismos entre el hombre y la mujer, debido a la confusión que tienen acerca de la autoridad, y esa ignorancia de la autoridad da lugar al conflicto. Tal y como hemos visto anteriormente, ante la ausencia de autoridad, esto produce caos y tiranía. Sin la autoridad, la vida no tiene orden algún. Sin la autoridad, el propósito no tiene protección alguna. Sin la autoridad, no existe ningún tipo
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de funcionamiento efectivo. Sin la autoridad, se ha abandonado el destino completamente. Sin la autoridad, el poder es malgastado y desperdiciado. Sin la autoridad, la energía es abusada. Sin la autoridad, el potencial es desviado. Cristo es la cabeza del esposo, y el esposo de la cabeza de la esposa o mujer, de tal manera que todos se encuentran debajo de algún tipo de autoridad en la vida, y no son independientes. Debido a que la mujer salió del hombre, él es, en este sentido, su fuente de origen y proveedor. Dios diseñó a la mujer para que recibiera su autoridad a partir de su “fuente de origen”. Esto no les da a los maridos el derecho de ejercitar la falsa autoridad en la forma de tiranía o del “espíritu de jefes”. Por el contrario, el marido es la protección o cober- Los hombres tienen tura de la mujer. que entender
que si ellos no se Los hombres tienen que encuentran bajo llegar a entender que si ellos no se la autoridad de encuentran bajo la autoridad de Dios, tampoco ellos pueden espeDios, no pueden rar que nadie más responda a su esperar que nadie propia autoridad. Esto se aplica más responda a su no solamente en la esfera o medio autoridad. ambiente de la familia, sino en todo tipo de esferas o medio ambientes de autoridad. A medida que los hombres lleguen a entender esto, van a poder restaurar el orden a todo el desastre que estamos experimentando en el mundo, debido a que todo tiene que comenzar con la familia. El hombre es el que tiene que rendir cuentas ante Dios por su liderazgo en la familia. Particularmente si él usa este tipo de autoridad por los motivos y razones equivocadas. La seguridad de la mujer estriba en
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la conciencia que ésta tenga de que el hombre es el que tiene que dar cuentas ante Dios—y que Dios es quien va a tratar con el hombre. En casos de abuso, la mujer tiene que protegerse a sí misma, y encontrar algún tipo de refugio. Al mismo tiempo, ella debería apelar en oración su causa ante el Dios Creador, quien es la autoridad del hombre, y es el Único ante quien el hombre, al final, tiene que rendir cuentas. Cuando el hombre o la mujer se encuentran fuera de posición dentro Cuando el del contexto de la familia, la autorihombre o dad se pierde completamente. Debes la mujer se recordar partiendo del libro de Judas, encuentran que los demonios fueron quienes se fuera de su salieron de su posición adecuada. posición en Ahora, ellos están tratando de hacer la familia, la que los seres humanos se salgan autoridad se también de su posición. Todos necesidestruye. tamos permanecer debajo de alguna autoridad, de tal manera que no vayamos a atraer a los demonios, o ningún tipo de espíritus malignos. Si todo está de acuerdo con algún tipo de mentalidad demoníaca, si los demonios se convierten en tus “amigos” debido a que tú ya no estás en la posición adecuada, entonces tú vas a estar causando problemas—no sólo a ti mismo, sino también a tu familia. Los demonios fueron atormentados una vez que ellos abandonaron sus posiciones. Yo sé que existen mujeres que sienten que están viviendo vidas atormentadas, debido a que sus maridos no se encuentran bajo la autoridad de Dios, y su familia vive dentro del desorden y de la tensión nerviosa. “Cristo es cabeza de todo hombre” (1 Corintios 11:3). El hombre que no está sometido a la autoridad de Cristo
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es un hombre “sin cabeza”. Él también carece de poder alguno sobre los demonios que lo están atormentando, y que también lo están atacando. De igual manera, cuando una mujer se encuentra fuera de su posición, el espíritu de este mundo conoce que ella carece de una autoridad verdadera. Si ella no permanece en el orden que le corresponde, bajo la cobertura del hombre, ella también, se convierte en lo equivalente y como un “demonio”, que ha abandonado su verdadera posición. Debes recordar que si Jesús no se hubiera sometido a la autoridad de Juan el Bautista, Él no hubiera sido capaz de soportar las tentaciones del diablo. Por lo tanto, la habilidad para poder tener la victoria sobre los espíritus malignos, se relaciona en forma proporcional a una respuesta adecuada hacia la autoridad y hacia la oposición. El más grande ejemplo de sumisión humana ¿Cómo es que los maridos y las esposas deben poner en práctica su autoridad dentro del matrimonio? En la carta de Pablo a los efesios, leemos lo siguiente: Sométanse unos a otros, por reverencia a Cristo. Esposas, sométanse a sus propios esposos como al Señor. Porque el esposo es cabeza de su esposa, así como Cristo es cabeza y salvador de la iglesia, la cual es su cuerpo. Así como la iglesia se somete a Cristo, también las esposas deben someterse a sus esposos en todo. Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella para hacerla santa. Él la purificó, lavándola con agua mediante la palabra, para presentársela a sí mismo como una iglesia radiante, sin mancha ni arruga ni ninguna otra imperfección, sino santa e intachable. Así mismo el esposo debe
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amar a su esposa como a su propio cuerpo. El que ama a su esposa se ama a sí mismo. (Efesios 5:21–28) En su forma genuina, el matrimonio debería ser el máximo ejemplo humano de autoridad y sumisión. Pablo también escribió, Sin embargo, en el Señor, ni la mujer existe aparte del hombre ni el hombre aparte de la mujer. Porque así como la mujer procede del hombre, también el hombre nace de la mujer; pero todo proviene de Dios. (1 Corintios 11:11–12) “Sométanse unos a otros, por reverencia a Cristo” (Efesios 5:21). Debes recordar que la verdadera sumisión es un acto natural y voluntario que forma parte de la naturaleza interdependiente de la autoridad. El matrimonio es la sumisión de dos personas, una a la otra, en todas las cosas: sus cuerpos, dones, talentos, energía, realizaciones, posesiones, finanzas, y muchas otras cosas más. No se trata solamente de la sumisión de una persona a la otra, ni tampoco de la sumisión parcial de una persona a la sumisión parcial de la otra. El concepto moderno del matrimonio está careciendo de la autoridad verdadera, debido a que no refleja esta característica de sumisión de uno al otro en todas las cosas, sino que al contrario, motiva a la gente para que formen definiciones, tales como, “Yo te voy a dar el cincuenta por ciento y tú vas a darme el cincuenta por ciento” para alcanzar un supuesto cien por ciento de dedicación, o acuerdos prenupciales donde una o las dos partes retiene algo de la otra parte. El libro los efesios parece resumir la belleza de la sumisión mutua y de la unidad en el matrimonio, en la
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forma tal y como el Dios Creador lo diseñó: “Así mismo el esposo debe amar a su esposa como a su propio cuerpo. El que ama a su esposa se ama a sí mismo….En todo caso, cada uno de ustedes ame también a su esposa como a sí mismo, y que la esposa respete a su esposo” (Efesios 5:28, 33). La estructura de la autoridad de la familia que fue establecida por el Fabricante se encuentra bajo un gran estrés hoy en día. Ha sido amenazada en su misma naturaleza, y toda vez que la familia se encuentre bajo amenaza, todos los otros tipos de estructura de autoridad también son amenazados. Esta es la razón de por qué es crítico que comencemos a restaurar los fundamentos de autoridad, por medio de enfocarnos en esta primera esfera o medio ambiente. Vamos a continuar moviéndonos ahora a la autoridad de la familia con relación a los hijos. La fuente de origen de la autoridad para los hijos Como la unidad básica y fundamental de la sociedad, la familia es Por medio de responsable de enseñarle la autoridad vivir en una a los hijos, quienes son los futuros líderes y participantes de la socie- familia, los hijos aprenden que dad. Por lo tanto, la familia necesita permanecer intacta, y nadie debe las vidas de las meterse con ella. Por ejemplo, cuando gentes necesitan los hombres homosexuales o dos orden, para que mujeres lesbianas adoptan y crían a pueda existir paz un bebé, la estructura de autoridad de un padre, de una madre, y de los y productividad. hijos ha sido rota por completo, y los hijos no van a poder llegar a entender la autoridad, tal y como el Dios Creador la ha establecido.
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Los hijos aprenden la autoridad genuina por medio de observar todo esto, bajo el contexto de una verdadera estructura familiar. Una persona que no ha sido enseñada que debe respetar a sus propios padres, es casi seguro, y de la misma forma no va a respetar la autoridad en otras esferas de la sociedad. Por medio de vivir en una familia, los hijos pueden aprender que las vidas de las gentes necesitan orden, para que pueda existir paz y productividad. Los mandamientos bíblicos para los hijos en relación a que deben obedecer y honrar a sus padres y madres, forman una parte muy grande y muy importante de su propio entrenamiento con relación a la autoridad, así como también para su propia protección y bienestar. El hecho de salvaguardar y preservar la autoridad en la familia, por lo tanto, se convierte en un asunto vital. Las relaciones familiares no deben tocarse descuidadamente en forma peligrosa, sino tienen que ser hechas con un propósito firme, a través de los padres, a fin de poder realizar el diseño divino para poder enseñar la autoridad dentro de las relaciones sociales. Si un hijo o hija aprende los principios de la autoridad en el hogar de primera mano, entonces él o ella puede aplicarlos a sus relaciones con sus supervisores y compañeros de trabajo, a sus relaciones con los miembros de su iglesia y de la comunidad o de organizaciones culturales con las que se encuentre conectado, en su inter actuación con todos aquellos que se encuentran en el gobierno y en posiciones civiles, y en todos los demás tipos de relaciones que pueden ocurrir en esta vida. Cuando tú has recibido un buen entrenamiento como hijo o hija, y has puesto tu dedicación para recibir ese tipo de entrenamiento, tú vas a poder desarrollar estándares morales y posiciones éticas, de tal manera que vas a respetar a
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otras personas y también a sus propiedades, las leyes de la tierra, y cosas similares a estas. A continuación vas encontrar algunas Escrituras que les enseñan a los hijos las verdades y los principios con relación a la autoridad de sus padres en su vida, así como la importancia de obedecer y seguir las instrucciones de los padres. Hijos, obedezcan a sus padres en todo, porque esto agrada al Señor. Padres [y madres también], no exasperen a sus hijos, no sea que se desanimen. (Colosenses 3:20–21) Hijos, obedezcan en el Señor a sus padres [como la autoridad que Dios puso encima de ustedes], porque esto es justo. “Honra a tu padre y a tu madre—que es el primer mandamiento con promesa—para que te vaya bien y disfrutes de una larga vida en la tierra”. Y ustedes, padres, no hagan enojar a sus hijos, sino críenlos según la disciplina e instrucción del Señor. (Efesios 6:1–4) Hijo mío, obedece el mandamiento de tu padre y no abandones la enseñanza de tu madre. Grábatelos en el corazón; cuélgatelos al cuello. Cuando camines, te servirán de guía; cuando duermas, vigilarán tu sueño; cuando despiertes, hablarán contigo. El mandamiento es una lámpara, la enseñanza es una luz y la disciplina es el camino a la vida.. (Proverbios 6:20–23) Al que mira con desdén a su padre, y rehúsa obedecer a su madre, que los cuervos del valle le saquen los ojos y que se lo coman vivo los
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buitres [la vida de este hijo o hija va a ser “devorada”, y todo su potencial va a ser desperdiciado de alguna manera]. (Proverbios 30:17) El necio desdeña la corrección de su padre; el que la acepta demuestra prudencia. (Proverbios 15:5) El hecho de rechazar la autoridad que Dios ha establecido para la familia, obviamente lleva a consecuencias muy serias para los hijos. Por ejemplo, las Escrituras declaran que los hijos deben obedecer a sus padres, para que puedan disfrutar de larga vida sobre la tierra. Lo opuesto también aplica, porque si ellos desobedecen a sus padres, no van a poder disfrutar de una larga vida. Yo no creo que esto solamente se refiere a la vida física. La esencia de esa declaración consiste en que si tú violas la autoridad que el Dios Creador ha colocado por encima de ti, la vida va a “matarte” literalmente. Tú no vas a poder experimentar las riquezas y el gozo de todo aquello para lo cual tú fuiste diseñado originalmente. Debes notar que las instrucciones para los padres también son sumamente importantes. Los padres generan el medio ambiente en el hogar, para que sus hijos puedan tener entendimiento del Dios Creador y de los principios y leyes de Dios, así como el medio ambiente adecuado para el desarrollo de la autoridad personal de los hijos. El hecho de exasperar o amargar a los hijos no les va a enseñar la naturaleza del Dios Creador, y tampoco va a promover ningún tipo de entendimiento con relación a las bendiciones y a la protección de la verdadera autoridad. Si un hijo o hija es obediente y se somete a su padre y a su madre todo el tiempo en que él o ella se encuentran viviendo en casa de sus padres, entonces, su vida
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moral va a ser preservada. Incluso cuando Satanás trate de derrotarlo a él o a ella o cuando las situaciones amenacen en destruirlos a él o a ella, si han estado en una relación adecuada con la autoridad, Dios va a entrar en acción para protegerlos. Por lo tanto, la duración de la vida y la calidad de vida tienen una relación directa y recíproca a la autoridad. Finalmente, incluso después de que los hijos ya no se encuentran viviendo en el hogar de sus padres, ellos deben seguir respetándonos. Siempre debemos respetar y honrar a nuestros padres como nuestra autoridad inicial, debajo de Dios, en nuestra experiencia como seres humanos.
La esfera o medio ambiente del gobierno La siguiente esfera o medio ambiente de autoridad es la esfera o medio ambiente del gobierno, el cual debe incluir el gobierno nacional, regional (tales como los estados y provincias), los gobiernos locales, y las relaciones entre los líderes gubernamentales y los ciudadanos. Dios instituyó la autoridad gubernamental En primer lugar, la autoridad gubernamental fue instituida por Dios. Otra palabra griega que es traducida como la palabra autoridad varias veces en las Escrituras es la palabra dunastes. Por ejemplo, en Hechos 8:27, leemos lo siguiente: “Un etíope eunuco, alto funcionario [con autoridad] encargado de todo el tesoro de la Candace, reina de los etíopes….Éste había ido a Jerusalén para adorar” (rvr95). Ésta palabra dunastes significa “un gobernador o un oficial, de gran autoridad, de mucho poder, muy poderoso”. Las autoridades terrenales pueden impartir autoridad y poder, pero Dios mismo es el Único Omnipotente
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(Omni-Potente). El es el Único Potentado por encima de todos los potentados. Toda autoridad legítima que existe en la tierra—ya sea que se trate de la autoridad de un rey, una reina, madre, padre, jefe, o cualquier otra persona—tiene su origen en Dios. De nuevo, si Dios no le da a alguien autoridad, entonces esa persona no tiene autoridad alguna. Vamos a mirar algunos pasajes generales de las Escrituras con relación a la autoridad terrenal de los gobiernos, y entonces también, algunos principios que tienen relación con esto. Yo creo que la palabra “condenación” en el primer pasaje se refiere a la destrucción de sí mismo. Todos deben someterse a las autoridades públicas, pues no hay autoridad que Dios no haya dispuesto, así que las que existen fueron establecidas por él. Por lo tanto, todo el que se opone a la autoridad se rebela contra lo que Dios ha instituido. Los que así proceden recibirán castigo.. (Romanos 13:1–2) Entonces, para acecharlo [a Jesús], [los líderes religiosos] enviaron espías que fingían ser gente honorable. Pensaban atrapar a Jesús en algo que él dijera, y así poder entregarlo a la jurisdicción del gobernador.—Maestro—dijeron los espías—, sabemos que lo que dices y enseñas es correcto. No juzgas por las apariencias, sino que de verdad enseñas el camino de Dios. ¿Nos está permitido pagar impuestos al césar o no? Pero Jesús, dándose cuenta de sus malas intenciones, replicó:—Muéstrenme una moneda romana. ¿De quién son esta imagen y esta inscripción?— Del césar—contestaron.—Entonces denle al
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césar lo que es del césar, y a Dios lo que es de Dios. No pudieron atraparlo en lo que decía en público. Así que, admirados de su respuesta, se callaron. (Lucas 20:20–26) Sométanse por causa del Señor a toda autoridad humana, ya sea al rey como suprema autoridad, o a los gobernadores que él envía para castigar a los que hacen el mal y reconocer a los que hacen el bien. (1 Pedro 2:13–14) Los oficiales de gobierno tienen que rendir cuentas delante de Dios Debido a que Dios ha establecido la autoridad, todos los oficiales de gobierno son responsables delante de Dios por sus acciones, y todos ellos tienen que rendir cuentas ante Dios con relación a la forma como llevaron a cabo sus autoridades. De la misma forma, los ciudadanos tienen que considerar a todos estos oficiales como “siervos de Dios”. La sentencia está en labios del rey; en el veredicto que emite no hay error….El rey detesta las malas acciones, porque el trono se afirma en la justicia. (Proverbios 16:10, 12) Porque los gobernantes no están para infundir terror a los que hacen lo bueno sino a los que hacen lo malo. ¿Quieres librarte del miedo a la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás su aprobación, pues está al servicio de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, entonces debes tener miedo. No en vano lleva la espada, pues está al servicio de Dios para impartir justicia y castigar al malhechor. Así que es necesario someterse a
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las autoridades, no sólo para evitar el castigo sino también por razones de conciencia. (Romanos 13:3–5) Debemos respetar a los oficiales de gobierno Algunas veces, Dios da autoridad gubernamental incluso a aquellas personas que parecen no reconocer a Dios, y Él los usa a todos estos para sus propósitos. Debemos recordar lo que Jesús le dijo a Poncio Pilato: “No tendrías ningún poder sobre mí si no se te hubiera dado de arriba” (Juan 19:11). Aunque no siempre vamos a poder entender por qué esto es así, siempre debemos respetar y obedecer a todas las autoridades gubernamentales, hasta en tanto que nos sea posible, de acuerdo con los principios de Dios. Debemos darle honor al Dios Creador por la autoridad que Él ha establecido en toda la tierra, y también debemos respetar la autoridad terrenal de Dios. Recuérdales a todos que deben mostrarse obedientes y sumisos ante los gobernantes y las autoridades. Siempre deben estar dispuestos a hacer lo bueno: a no hablar mal de nadie, sino a buscar la paz y ser respetuosos, demostrando plena humildad en su trato con todo el mundo.. (Tito 3:1–2) Por eso mismo pagan ustedes impuestos, pues las autoridades están al servicio de Dios, dedicadas precisamente a gobernar. Paguen a cada uno lo que le corresponda: si deben impuestos, paguen los impuestos; si deben contribuciones, paguen las contribuciones; al que deban respeto, muéstrenle respeto; al que deban honor,
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ríndanle honor. No tengan deudas pendientes con nadie, a no ser la de amarse unos a otros. De hecho, quien ama al prójimo ha cumplido . la ley. (Romanos 13:6–8) Una de las características de la libertad que podemos encontrar en una república, en una democracia, o en una monarquía constitucional consiste en que los ciudadanos pueden cuestionar a los oficiales electos, con relación a la confianza que les ha sido otorgada—y con relación a lo que están haciendo y diciendo. Este es el derecho que tienen los ciudadanos de hacer esto; se espera que los ciudadanos hagan esto a fin de mantener a los oficiales electos dentro de la capacidad y responsabilidad de rendir cuentas con relación a sus posiciones. Pero el hecho de hacer que los oficiales tengan que rendir cuentas, algunas veces se desintegra y se convierte en una crítica despiadada, que no ofrece apoyo alguno y tampoco brinda sugerencias concretas, no permitiendo que los líderes puedan dirigir realmente. Existe una diferencia entre requerir que los oficiales rindan cuentas y entre burlarse, ofender, y hacer todo tipo de chismes acerca de ellos esparciendo culpas que no son adecuadas. Éste tipo de comportamiento es contrario a las enseñanzas de las Escrituras. Todos nosotros debemos respetar las posiciones de los oficiales gubernamentales. Todos debemos orar por los oficiales gubernamentales En lugar de estarse burlando y quejando, todos los ciudadanos que se encuentran viviendo bajo las leyes y principios del Dios Creador, han sido llamados para que oren por los oficiales de gobierno—para que éstos puedan
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ejercitar la genuina autoridad, y que tengan la sabiduría para las decisiones que necesitan realizar. Pablo escribió, Así que recomiendo, ante todo, que se hagan plegarias, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todos, especialmente por los gobernantes y por todas las autoridades, para que tengamos paz y tranquilidad, y llevemos una vida piadosa y digna. Esto es bueno y agradable a Dios nuestro Salvador, pues él quiere que todos sean salvos y lleguen a conocer la verdad. (1 Timoteo 2:1–4) ¿Cuántos de nosotros podemos responder verdaderamente ante la exhortación de Pablo? Cuando podamos llegar a entender los principios de la autoridad, es entonces que podremos tomar esta responsabilidad en forma muy seria. Debido a que todos los gobernadores y los líderes, se encuentran, a final de cuentas, bajo la autoridad de Dios, entonces es Dios la autoridad a la cual podemos apelar en relación a todas las decisiones y comportamiento de estos líderes. La autoridad de Dios sobrepasa a la autoridad terrenal Todos debemos darnos cuenta, sin embargo, que cuando las personalidades de autoridad terrenales tratan de obligarnos a hacer algo que se encuentra en conflicto, o que es contrario a las leyes y principios del Dios Creador, los cuales son mucho más altos, no podemos obedecer en ese caso a las autoridades terrenales, sino que al contrario, debemos obedecer a Dios en primer lugar. Los seguidores de Jesús en el primer siglo llegaron a encontrar este tipo de situación:
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—Terminantemente les hemos prohibido enseñar en ese nombre. Sin embargo, ustedes han llenado a Jerusalén con sus enseñanzas, y se han propuesto echarnos la culpa a nosotros de la muerte de ese hombre.—¡Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres!—respondieron Pedro y los demás apóstoles—.El Dios de nuestros antepasados resucitó a Jesús, a quien ustedes mataron colgándolo de un madero. Por su poder, Dios lo exaltó como Príncipe y Salvador, para que diera a Israel arrepentimiento y perdón de pecados. Nosotros somos testigos de estos acontecimientos, y también lo es el Espíritu Santo que Dios ha dado a quienes le obedecen. (Hechos 5:28–32) Debes notar que Pedro, quien escribió, “Sométanse por causa del Señor a toda autoridad humana” (1 Pedro 2:13), también les dijo a todos aquellos que se encontraban en alguna posición de autoridad lo siguiente: “¡Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres!”. Cuando nosotros nos lleguemos a encontrar bajo este mismo tipo de circunstancias, contamos con la motivación que viene de parte del Distribuidor Autorizado, Cristo Jesús: Cuando los hagan comparecer ante las sinagogas, los gobernantes y las autoridades, no se preocupen de cómo van a defenderse o de qué van a decir, porque en ese momento el Espíritu Santo les enseñará lo que deben responder. (Lucas 12:11–12) Este es otro ejemplo de nuestra Máxima Autoridad, protegiéndonos y haciéndose responsable por nosotros.
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El gobierno ha sido diseñado con el fin de establecer orden, paz y gozo La verdadera autoridad se deriva de las verdades y principios eternos, y este tipo de autoridad produce orden. Esta es la razón de que podemos encontrar a “la ley y al orden” juntos muchas veces. Cuando los justos dominan, el pueblo se alegra; cuando domina el malvado, el pueblo gime. (Proverbios 29:2, rvr95) En forma muy triste, las verdades y principios eternos de la autoridad no están siendo enseñados en muchas escuelas, las cuales muy frecuentemente están asesoradas y supervisadas por los gobiernos. Los maestros están instruyendo a los hijos con relación a que no existe ningún tipo de verdad absoluta, y por lo tanto, las bases para el fundamento de la autoridad están siendo erosionadas. Los maestros reciben instrucciones de sus directores y de las organizaciones de educación, con relación a que no deben ejercitar ningún tipo de autoridad sobre los alumnos en la forma de corregirlos, y éste tipo de punto de vista nos lleva a una espiral descendente con relación al comportamiento de los alumnos. Cuando los niños o jóvenes no tienen respeto alguno hacia la autoridad, esto lleva al deterioro de las relaciones con sus maestros y con los directores, hasta el punto donde los maestros no pueden realizar su trabajo, y algunos alumnos ahora se encuentran matándose los unos a los otros, e incluso matando a los maestros dentro de las escuelas. Y es entonces que nos ponemos a imaginar y a preguntar las razones de por qué el sistema se está cayendo en pedazos. De nuevo, donde no existe una autoridad genuina, eventualmente todo va a convertirse en un caos. En contraste a esto, en todos lados donde la gente cuenta con una ley genuina, buena, la cual está basada
Cuatro medio ambientes básicos de la autoridad S 387
en los principios del Dios Creador—y se ponen a obedecerla—va a existir orden y paz en sus comunidades. George Washington escribió en su comunicado de despedida como primer presidente de los Estados Unidos lo siguiente: Una de las disposiciones y hábitos que llevan a la prosperidad política, consiste en que la religión y la moralidad son apoyos indispensables. En vano podría cualquier hombre clamar el tributo del patriotismo, si a su vez está trabajando para socavar estos grandes pilares de la felicidad humana, estos firmes puntales de los deberes de los hombres y ciudadanos. La persona que simplemente es un político, debe respetar y valorar todo esto de igual manera que el hombre común y corriente lo hace. Ningún volumen podría ser capaz de detallar todas las conexiones que esto tiene con la felicidad pública y privada.3 Cristo Jesús es el Rey de reyes A final de cuentas, todos los gobiernos en esta tierra van a acabar por estar en orden, con paz, y con gozo, debido a que se van a encontrar bajo la autoridad directa del Distribuidor Autorizado: Porque nos ha nacido un niño, se nos ha concedido un hijo; la soberanía reposará sobre sus hombros, y se le darán estos nombres: Consejero admirable, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz. Se extenderán su soberanía y su paz, y no tendrán fin. Gobernará sobre el trono de David y sobre su reino, para establecerlo y sostenerlo con justicia y rectitud desde ahora y para siempre. (Isaías 9:6–7)
388 S El Propósito y Poder de la Autoridad
En su manto [de Jesús] y sobre el muslo lleva escrito este nombre: Rey de reyes y Señor de señores. (Apocalipsis 19:16)
La esfera o medio ambiente de la iglesia La esfera o medio ambiente de la iglesia, ha sido confundido algunas veces como “la institución de la iglesia”. Y mientras que la vida de la iglesia se manifiesta en iglesias individuales, denominaciones, y otros grupos religiosos, la verdadera esfera o medio ambiente de la iglesia consiste en la comunión de todos aquellos a través de todo el mundo, que han sido restaurados a Dios, a través del Distribuidor Autorizado, que es Cristo Jesús. Cristo Jesús es la cabeza, o Autoridad Principal Él [Dios] nos libró del dominio de la oscuridad y nos trasladó al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención, el perdón de pecados. Él [Jesús] es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación, porque por medio de él fueron creadas todas las cosas en el cielo y en la tierra, visibles e invisibles, sean tronos, poderes, principados o autoridades: todo ha sido creado por medio de él y para él. Él es anterior a todas las cosas, que por medio de él forman un todo coherente. Él es la cabeza del cuerpo, que es la iglesia. Él es el principio, el primogénito de la resurrección, para ser en todo el primero. Porque a Dios le agradó habitar en él con toda su plenitud. (Colosenses 1:13–19, se añadió énfasis) Dios estableció la iglesia, Cristo Jesús es la “Cabeza”, y es Él quien delega la autoridad a ciertas personas para que dirijan dentro de esta esfera o medio ambiente.
Cuatro medio ambientes básicos de la autoridad S 389
En la iglesia Dios ha puesto, en primer lugar, apóstoles; en segundo lugar, profetas; en tercer lugar, maestros; luego los que hacen milagros; después los que tienen dones para sanar enfermos, los que ayudan a otros, los que administran y los que hablan en diversas lenguas.. (1 Corintios 12:28) Él mismo [Cristo Jesús] constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; y a otros, pastores y maestros, a fin de capacitar al pueblo de Dios para la obra de servicio, para edificar el cuerpo de Cristo. De este modo, todos llegaremos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a una humanidad perfecta que se conforme a la plena estatura de Cristo. (Efesios 4:11–13) Pues por medio de él [de Cristo Jesús] tenemos acceso al Padre por un mismo Espíritu. Por lo tanto, ustedes ya no son extraños ni extranjeros, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y los profetas, siendo Cristo Jesús mismo la piedra angular. (Efesios 2:18–20) Responsabilidades de los líderes de la iglesia Todos aquellos que han sido escogidos para recibir autoridad de liderazgo, así como otros dones específicos de autoridad (ver 1 Corintios 12:4–11) en la iglesia, tienen que rendir cuentas ante la Cabeza, con relación a la forma en que usan su autoridad, tienen ciertas responsabilidades que tienen que ver con esta autoridad, y deben conducirse a sí mismos, de acuerdo a los principios y leyes de Dios:
390 S El Propósito y Poder de la Autoridad
A los ancianos que están entre ustedes, yo [Pedro], que soy anciano como ellos, testigo de los sufrimientos de Cristo y partícipe con ellos de la gloria que se ha de revelar, les ruego esto: cuiden como pastores el rebaño de Dios que está a su cargo, no por obligación ni por ambición de dinero, sino con afán de servir, como Dios quiere. (1 Pedro 5:1–3) Se dice, y es verdad, que si alguno desea ser obispo, a noble función aspira. Así que el obispo debe ser intachable, esposo de una sola mujer, moderado, sensato, respetable, hospitalario, capaz de enseñar; no debe ser borracho ni pendenciero, ni amigo del dinero, sino amable y apacible. Debe gobernar bien su casa y hacer que sus hijos le obedezcan con el debido respeto; porque el que no sabe gobernar su propia familia, ¿cómo podrá cuidar de la iglesia de Dios? No debe ser un recién convertido, no sea que se vuelva presuntuoso y caiga en la misma condenación en que cayó el diablo. Se requiere además que hablen bien de él los que no pertenecen a la iglesia, para que no caiga en descrédito y en la trampa del diablo. Los diáconos, igualmente, deben ser honorables, sinceros, no amigos del mucho vino ni codiciosos de las ganancias mal habidas. Deben guardar, con una conciencia limpia, las grandes verdades de la fe. Que primero sean puestos a prueba, y después, si no hay nada que reprocharles, que sirvan como diáconos. Así mismo, las esposas de los diáconos deben ser honorables, no calumniadoras sino moderadas y dignas de toda confianza. El diácono debe ser esposo de una sola mujer y gobernar bien a sus hijos y su
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propia casa. Los que ejercen bien el diaconado se ganan un lugar de honor y adquieren mayor confianza para hablar de su fe en Cristo Jesús. (1 Timoteo 3:1–13) El obispo tiene a su cargo la obra de Dios, y por lo tanto debe ser intachable: no arrogante, ni iracundo, ni borracho, ni violento, ni codicioso de ganancias mal habidas. Al contrario, debe ser hospitalario, amigo del bien, sensato, justo, santo y disciplinado. Debe apegarse a la palabra fiel, según la enseñanza que recibió, de modo que también pueda exhortar a otros con la sana doctrina y refutar a los que se opongan. (Tito 1:7–9) La autoridad no es un asunto de edad, sino de posición Para poder ejercitar autoridad en la iglesia, una persona debe ser madura en su fe y en su estilo de vida, pero la edad—ya sea que se trate de alguien que es mucho mayor de edad o de alguien que es mucho más joven que tú—no es un factor para descalificar a esa persona de ser tu autoridad en la iglesia, si es que Dios lo ha colocado ahí. Pablo le escribió a Timoteo diciendo, “Que nadie te menosprecie por ser joven. Al contrario, que los creyentes vean en ti un ejemplo a seguir en la manera de hablar, en la conducta, No nos y en amor, fe y pureza” (1 Timoteo 4:12). sometemos a No debemos someternos a las gentes sólo debido a la edad que tengan, sino la gente debido a su edad, sino debido a la posición que ocupen. Miriam, que era la hermana mayor de Moisés, tenía serios problemas con relación a someterse a la posición. Ella
debido a su posición.
392 S El Propósito y Poder de la Autoridad
se sentía muy celosa de la autoridad que Moisés tenía, incluso aunque a ella también le había sido impartida cierto tipo de autoridad. (Ver Miqueas 6:4). Cuando ella se salió completamente de orden, por medio de criticar el liderazgo de Moisés (junto con el otro hermano de Moisés, llamado Aarón), Dios se enojo con ella, pero Moisés, quien era la autoridad por encima de ella, intervino para salvar su vida. (Esto es todavía otra instancia que nos muestra la forma como la autoridad va a protegerte, preservarte, mantenerte, y salvarte). Sin embargo, Miriam tuvo que sufrir la disciplina, debido a que ella era una figura de autoridad visible en medio de todo el pueblo, y también para que ella pudiera aprender a entender la naturaleza de la autoridad de Dios. (Ver Números 12:1–15). Debes recordar que cuando Jesús se sometió a Juan, de hecho Él dijo, “Es necesario que nosotros cumplamos toda justicia”. Pero cuando algunas gentes se encuentran bajo un pastor más joven que ellos, tal vez llegan a pensar, ¿Acaso yo me tengo que someter a este hombre? ¡Soy suficientemente grande como para ser su padre! Eso tal vez es cierto, pero tu sumisión hacia él es correcta a fin de “cumplir toda justicia”, debido a que él es el pastor. Yo soy pastor de mis hermanos que son mayores que yo. Esto no significa que soy mejor que ellos. Es un asunto de posición, y a veces es una posición muy difícil en que uno tiene que estar, ¡porque ellos me conocen mucho mejor que la mayoría de las gentes! La sumisión que ellos muestran hacia mí como su pastor, ha sido una consecuencia del entendimiento que tienen acerca del orden. Ellos saben que ellos no pueden pastorearse a sí mismos. Dios colocó en el cuerpo de Cristo apóstoles, evangelistas, profetas, pastores, y maestros, para instruir y
Cuatro medio ambientes básicos de la autoridad S 393
guiar a su pueblo. Cualquiera que quiere estar entrenado espiritualmente tiene que encontrar a todos aquellos que se encuentran funcionando en estos dones del ministerio. Si el ministerio de apóstol, evangelista, profeta, pastor, o maestro viene a recaer en alguien que es más joven o más viejo de lo que tú eres, entonces, de nuevo, la posición es mucho más importante que la persona. Necesitamos seguir la autoridad que se encuentra en nuestra vida, porque es un asunto de justicia. Responsabilidades de los miembros de la iglesia Pablo le escribió a Tito, “Exhorta y reprende con toda autoridad. Que nadie te menosprecie” (Tito 2:15). Desafortunadamente, existen muchos que parecen estar menospreciando y despreciando la autoridad que existe en las iglesias hoy en día. La cultura de la democracia ha llevado hacia una actitud de individualismo en otras esferas o medio ambientes, lo cual también gravita en contra de la autoridad que se encuentra en los medio ambientes de la iglesia. Yo no creo que el cristiano común y corriente ha llegado a entender la naturaleza de la autoridad. El mismo tipo de crítica improductiva con relación a los líderes del gobierno de que hablamos en la sección anterior se aplica en contra de los líderes de la iglesia también. A causa de esto, la gente abusa verbalmente y falta al respeto a sus pastores, critica a los líderes de la iglesia detrás de su espalda, cierran sus ojos ante la instrucción buena y sana, y ante la enseñanza de la Palabra de Dios, y fracasan al no pagarle a sus líderes un salario decente por el servicio que éstos están realizando. Otra razón por la cual la gente menosprecia la autoridad en la iglesia, es que muchas iglesias han
394 S El Propósito y Poder de la Autoridad
“sobrepasado la dosis” con relación al concepto de la gracia, incluso pagando el precio de sacrificar la obediencia. La gracia ha sido usada como una excusa por toda la gente, para poder ignorar la instrucción de los pastores y maestros, que llaman a toda la gente para que alineen sus vidas de acuerdo a las leyes y principios de Dios.
Los miembros de la iglesia deben respetar a sus líderes, y deben someterse a las recomendaciones de los líderes, con relación a vivir de acuerdo a la La gracia de Dios es real, naturaleza de Dios. maravillosa, y algo absolutamente
necesario para todos nosotros. No podíamos recibir el perdón de Dios y una nueva vida a través del Distribuidor Autorizado sin ella. “Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad” (1 Juan 1:9). Pero, tal y como dijo Pablo, no debemos considerar la gracia con ligereza: “¿Qué concluiremos? ¿Vamos a persistir en el pecado, para que la gracia abunde? ¡De ninguna manera! Nosotros, que hemos muerto al pecado, ¿cómo podemos seguir viviendo en él?” (Romanos 6:1–2). Al contrario, los miembros de la iglesia deben respetar y honrar a sus líderes, y deben someterse a sus exhortaciones y advertencias con relación a que deben vivir de acuerdo a la naturaleza de Dios: Hermanos, les pedimos que sean considerados con los que trabajan arduamente entre ustedes, y los guían y amonestan en el Señor. Ténganlos en alta estima, y ámenlos por el trabajo que hacen. Vivan en paz unos con otros. (1 Tesalonicenses 5:12–13)
Cuatro medio ambientes básicos de la autoridad S 395
Los ancianos que dirigen bien los asuntos de la iglesia son dignos de doble honor, especialmente los que dedican sus esfuerzos a la predicación y a la enseñanza. Pues la Escritura dice: “No le pongas bozal al buey mientras esté trillando”, y “El trabajador merece que se le pague su salario”.. (1 Timoteo 5:17–18) Obedezcan a sus dirigentes y sométanse a ellos, pues cuidan de ustedes como quienes tienen que rendir cuentas. Obedézcanlos a fin de que ellos cumplan su tarea con alegría y sin quejarse, pues el quejarse no les trae ningún provecho. (Hebreos 13:17) Mujeres con autoridad dentro de la iglesia El último punto que me gustaría discutir en el medio ambiente de la iglesia tiene que ver con relación a una pregunta que sigue teniendo mucha controversia en la mente de las gentes: ¿Acaso las mujeres deben estar en posiciones de liderazgo? Este asunto es demasiado amplio para poder discutirlo en profundidad bajo el contexto de este libro, y por lo tanto te voy a dar lo que yo creo que son unos bosquejos muy importantes con relación a la autoridad para las mujeres que se encuentran sirviendo como pastores y maestros.4 Basado en el orden de autoridad que pudimos explicar en la sección anterior llamada “la esfera o medio ambiente de la familia”, donde pudimos ver que el varón fue creado en primer lugar, y que la mujer fue creada a partir del varón, yo creo que cualquier mujer que se encuentre sirviendo como pastor, y que sea soltera, debería encontrar una autoridad masculina que le sirva como su cobertura y protección, y como aquella persona a
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quien ella tiene que rendir cuentas como una figura de autoridad. La evangelista y sanadora Kathryn Kuhlman tenía un ministerio muy poderoso, pero cuando ella se paraba para ministrar, siempre le decía a toda su audiencia quien era su pastor, colocándose ella bajo esta autoridad para su ministerio. Ella en forma voluntaria se sometía a él como su cobertura. Para una mujer que funciona como pastor o maestro, y que también se encuentra casada, es muy importante que ella se someta a su marido, y que no se encuentre operando fuera de su relación de autoridad como marido y esposa. Ella también debe de tener una persona o un grupo de personas a quien tenga que rendir cuentas, y de quien ella dependa desde el punto de vista de su ministerio, pero su primera prioridad debe ser mantener una relación adecuada de autoridad delante de Dios, y esto tiene que reflejarse en su relación con Dios, y en su relación con su marido.
La esfera o medio ambiente de los negocios En los capítulos once y doce de este libro, el análisis de la autoridad, del asesoramiento, y de la sumisión, nos dio un número de bosquejos y principios básicos que podemos aplicar en forma muy particular en el medio ambiente de los negocios, y yo quiero sugerirte que tú revises esos capítulos, teniendo esta otra esfera en mente también. Transacciones honestas Todos aquellos que son dueños y que administran negocios, así como los consumidores que usan todos los servicios y compran sus productos, deben tratar los unos a los otros en forma honesta y justa.
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El Señor aborrece las balanzas adulteradas, pero aprueba las pesas exactas. Con el orgullo viene el oprobio; con la humildad, la sabiduría. A los justos los guía su integridad; a los falsos los destruye su hipocresía. En el día de la ira de nada sirve ser rico, pero la justicia libra de la muerte. (Proverbios 11:1–4) El malvado obtiene ganancias ilusorias; el que siembra justicia asegura su ganancia. El que es justo obtiene la vida; el que persigue el mal se encamina a la muerte. (Proverbios 11:18–19) Las pesas y las balanzas justas son del Señor; todas las medidas son hechura suya…. El camino del hombre recto evita el mal; el que quiere salvar su vida, se fija por dónde va. Al orgullo le sigue la destrucción; a la altanería, el fracaso. Vale más humillarse con los oprimidos que compartir el botín con los orgullosos. (Proverbios 16:11, 17–19) Y todo lo que hagan, de palabra o de obra, háganlo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios el Padre por medio de él. (Colosenses 3:17) Relaciones entre los jefes y los empleados Los jefes y los empleados, de la misma forma, deben tratarse los unos a los otros en forma justa. Las siguientes Escrituras originalmente se referían a las relaciones que existían entre los esclavos y sus amos, pero estas Escrituras también pueden enseñarnos verdades fundamentales para el lugar de trabajo. Debes ver si puedes reconocer estos principios y bosquejos que se encuentran en las Escrituras más adelante: (1) Dios es nuestra Autoridad Máxima, que va a recompensar nuestro
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trabajo, a medida que lo realizamos para Él; (2) nosotros debemos ser diligentes y sinceros en nuestro trabajo, ya sea que alguien se encuentre observándonos o no; (3) necesitamos tratarnos los unos a los otros con respeto y con bondad; (4) los jefes y los patrones deben proveer condiciones adecuadas para el trabajo, y deben pagarle a sus empleados; (5) los empleados no deben robar ni deben tratar de engañar a sus jefes o patrones, sino que deben hacer su mejor esfuerzo cada día que van a trabajar; (6) debemos respetar la posición de cualquier persona que se encuentre en una función de autoridad. Hagan lo que hagan, trabajen de buena gana, como para el Señor y no como para nadie en este mundo, conscientes de que el Señor los recompensará con la herencia. Ustedes sirven a Cristo el Señor….Amos, proporcionen a sus esclavos lo que es justo y equitativo, conscientes de que ustedes también tienen un Amo en el cielo. (Colosenses 3:23–24; 4:1) Esclavos, obedezcan a sus amos terrenales con respeto y temor, y con integridad de corazón, como a Cristo. No lo hagan sólo cuando los estén mirando, como los que quieren ganarse el favor humano, sino como esclavos de Cristo, haciendo de todo corazón la voluntad de Dios. Sirvan de buena gana, como quien sirve al Señor y no a los hombres, sabiendo que el Señor recompensará a cada uno por el bien que haya hecho, sea esclavo o sea libre. Y ustedes, amos, correspondan a esta actitud de sus esclavos, dejando de amenazarlos. Recuerden que tanto ellos como ustedes tienen un mismo Amo en el cielo, y que con él no hay favoritismos.. (Efesios 6:5–9)
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Esclavos, obedezcan en todo a sus amos terrenales, no sólo cuando ellos los estén mirando, como si ustedes quisieran ganarse el favor humano, sino con integridad de corazón y por respeto al Señor. (Colosenses 3:22) Enseña a los esclavos a someterse en todo a sus amos, a procurar agradarles y a no ser respondones. No deben robarles sino demostrar que son dignos de toda confianza, para que en todo hagan honor a la enseñanza de Dios nuestro Salvador. En verdad, Dios ha manifestado a toda la humanidad su gracia, la cual trae salvación y nos enseña a rechazar la impiedad y las pasiones mundanas. Así podremos vivir en este mundo con justicia, piedad y dominio propio, mientras aguardamos la bendita esperanza, es decir, la gloriosa venida de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo. Él se entregó por nosotros para rescatarnos de toda maldad y purificar para sí un pueblo elegido, dedicado a hacer el bien. (Tito 2:9–14) Todos los que aún son esclavos deben reconocer que sus amos merecen todo respeto; así evitarán que se hable mal del nombre de Dios y de nuestra enseñanza. Los que tienen amos creyentes no deben faltarles al respeto por ser hermanos. Al contrario, deben servirles todavía mejor, porque los que se benefician de sus servicios son creyentes y hermanos queridos. (1 Timoteo 6:1–2) Criados, sométanse con todo respeto a sus amos, no sólo a los buenos y comprensivos sino también a los insoportables. Porque es digno de elogio
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que, por sentido de responsabilidad delante de Dios, se soporten las penalidades, aun sufriendo injustamente. Pero ¿cómo pueden ustedes atribuirse mérito alguno si soportan que los maltraten por hacer el mal? En cambio, si sufren por hacer el bien, eso merece elogio delante de Dios.. (1 Pedro 2:18–20) Si leemos, estudiamos, y aplicamos los principios escriturales que se encuentran en este capítulo, a las principales esferas o medio ambientes de la vida humana, vamos a poder realizar grandes avances con relación a entender la autoridad, así como la forma como debe funcionar en esta tierra. También vamos a poder ver de forma mucho más clara la manera en que podemos restaurar las estructuras del orden y de paz en nuestras familias, comunidades, naciones, y en el mundo entero.
Epílogo
La autoridad, como el principio tan hermoso
E
n el capitulo dos, yo escribí lo que me gusta llamar dentro de la autoridad genuina, “el principio tan hermoso”, debido a que, contrario a la falsa autoridad, no se trata de “enseñorearse sobre” otros. Al contrario, significa que es una manera de proveer los recursos, protección, refrigerio, crecimiento, realización, y la satisfacción que todos necesitamos en la vida.
El “yugo” de autoridad es fácil y ligero El Distribuidor Autorizado, que es Cristo Jesús, es el único que puede restaurar nuestra relación con el Dios Creador, llevándonos a nuestra autoridad personal, capacitándonos para que podamos vivir en colaboración con otros, y restableciendo la verdadera autoridad en el mundo. Jesús puede hacer esto a medida que nosotros reconocemos la autoridad de nuestra vida, y a medida que aprendemos acerca de Él y de sus caminos. Jesús dijo, Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a 401
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quien el Hijo lo quiera revelar. Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga. (Mateo 11:27–30, rvr, se añadió énfasis) La invitación de Jesús remarca la naturaleza de la autoridad de Dios y todo aquello que podemos recibir de Él. Un yugo en forma tradicional es “una barra o un marco de madera por el cual se juntan dos animales (frecuentemente son bueyes) al nivel de sus cabezas o de sus cuellos, para que puedan trabajar juntos”. La mayoría de la gente considera que un yugo representa algo que es opresivo y que tiene que ver con confinamiento. Ellos están muy preocupados y muy cargados en esta vida, y piensan que el hecho de huir de la autoridad es la respuesta. Pero Cristo Jesús nos invita a experimentar una clase completamente diferente de yugo, que es el tipo de yugo que nos une a Él en el propósito compartido de realizar los planes de Dios para nosotros y para el mundo. El hecho de que seamos unidos con Cristo Jesús, nos permite caminar a través de la vida con un paso seguro, a medida que Él nos va guiando. El yugo de autoridad de Cristo Jesús nos da “descanso” espiritual y personal, debido a que a través de él, podemos llegar a convertirnos en aquello para lo cual fuimos diseñados, y vamos a ser capaces de realizar en esta vida el diseño que recibimos desde antes de nacer.
Lo que significa “llevar su yugo” Para poder darnos de este tipo de reposo, Cristo Jesús, que es nuestro Distribuidor Autorizado, en primer
Epílogo: La autoridad, como el principio tan hermoso S 403
lugar nos pide que “vengamos” y reconozcamos que la autoridad verdadera y el propósito no pueden ser hallados en ningún otro lugar aparte de Él. En segundo lugar, Jesús nos pide que “tomemos su yugo” sobre nosotros mismos, de tal manera que podamos aprender de Él. Debes notar que somos nosotros los que en forma voluntaria tomamos el yugo de Cristo Jesús, debido a que queremos trabajar al lado de Él, para poder realizar los planes del Dios Creador. Jesús no es quien pone el yugo sobre nosotros. De esta manera, una vez más, podemos ver que la sumisión siempre es un acto voluntario de nuestra parte, a fin de que podamos llegar a realizar el propósito que Dios nos ha dado. El hecho de tomar el yugo que Cristo Jesús, involucra caminar al lado de Él, a medida que descubrimos y aceptamos nuestras esferas o medio ambientes inherentes de autoridad, aprendemos las verdades y principios de autoridad que se encuentran en la Palabra de Dios, y vivimos de acuerdo a ellos.
El yugo de Cristo Jesús es “fácil”, debido a que mientras caminamos a su lado, Él nos guía en el camino que En este proceso, vamos a estar debemos tomar.
siendo guiados por aquel que nos creó, y que nos ama profundamente. Dios no es una figura de autoridad que se encuentra enojada, y está listo para golpearnos, tal y como algunos se han llegado a imaginar. Su actitud “humilde y gentil” con relación a nosotros, nos atrae hacia Él, y nos capacita para que podamos aprender de Él, y lleguemos a convertirnos en aquello para lo cual Él nos creó. “Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él” (Juan 3:17).
404 S El Propósito y Poder de la Autoridad
El yugo de Cristo Jesús es “fácil” debido a que a medida que caminamos al lado de Él, Él nos guía en la forma cómo debemos de ir. Lo que estamos cargando es “ligero”, debido a que consiste en verdades y principios que nos liberan completamente y también es algo ligero debido a que es natural, y debido a que cuando vivimos en esa esfera natural, ya no vamos estar cargados ni oprimidos por la falsa autoridad y los caminos sin salida de un estilo de vida centrado en el egocentrismo y en el temor.
El principio, poder, y protección de la autoridad A través del “yugo” de la autoridad genuina, tú vas a poder vivir dentro del gozo de tu propia esfera de dominio personal, la cual es parte del gran diseño de Dios para tu vida. Tú puedes impartir el principio, poder, y protección de autoridad a tu vida y a todas las circunstancias que te rodean. Es mi oración que este libro traiga sanidad y restauración del orden a todas las esferas de la sociedad, a través de todas las naciones del mundo. Las gentes de toda la tierra necesitan la paz, la confianza, y la seguridad de la autoridad genuina. Por lo tanto, todos nosotros necesitamos revertir el mal entendimiento, el mal uso, y el abuso de la autoridad en todo el mundo, de tal manera que en forma progresiva, podamos tener más del tipo correcto de autoridad, y menos del tipo equivocado de autoridad. Tú has recibido la invitación de tu Dios Creador para “venir” y “llevar” la autoridad que Dios te ha dado, a fin de que puedas realizar los propósitos que Dios tiene para ti y para tu generación. ¿Acaso vas a aceptar su invitación?
La autoridad, y una palabra para el tercer mundo Estableciendo la verdadera libertad a través de . la autoridad genuina
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uchas de las gentes que viven en el tercer mundo han llegado a tener muchísimas sospechas con relación al concepto de autoridad, como resultado de la forma en que ellos han sido mal usados y abusados históricamente a través de otras naciones y grupos. Los países post coloniales experimentaron el abuso opresivo de reinos dominadores que ejercitaron control sobre sus territorios. La mayoría de estos poderes aniquilaron a las culturas, mientras que al mismo tiempo violaron los recursos de sus colonias, sojuzgando a todos aquellos que eran nativos a estas áreas conquistadas, y comerciando con la labor humana y con la vida humana; básicamente, ellos redujeron a la humanidad a las comodidades que les convenían y como si fueran sus propias pertenencias. Todas estas experiencias dieron como resultado dos tipos de actitudes entre los oprimidos: (1) promovieron una mentalidad de derrota y de rendición, y (2) encendieron una resolución feroz para echar fuera cualquier tipo de forma que pudiera percibirse como control autoritario, y que se interpusiera en medio de los ideales para establecer la búsqueda de la libertad como el ideal máximo. En forma muy 405
El mal entendimiento de la autoridad genuina y de la verdadera libertad en el tercer mundo, ha llevado a nuevas formas de opresión.
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importante, estas dos actitudes han sido acompañadas de rechazo, no sólo en contra de la falsa autoridad, sino también en contra de la autoridad legítima. Como consecuencia de esto, las gentes del tercer mundo han abrazado la tendencia a nivel mundial con relación a la democracia pura, la cual ha nublado los límites tan claros de la autoridad. Esta tendencia ha causado que la gente en forma continua apruebe los parámetros de la “libertad”. Si el movimiento presente en la evolución de la democracia continúa, sin que vuelvan a ser establecidos los conceptos absolutos y tan claros de la autoridad, entonces, yo creo que él “experimento americano” y otro tipo de experimentos en la democracia, van a fracasar totalmente, debido a que la autoridad preserva, protege, y defiende todo aquello que se somete a ella. Los principios de autoridad que he enfatizado en este libro son (1) la ignorancia de la verdadera autoridad es el padre de la anarquía, y (2) sin la autoridad verdadera, el propósito no tiene protección alguna. En forma desafortunada, podemos ver que todos estos principios se están desenvolviendo en los países que se encuentran en desarrollo. El mal entendimiento de la autoridad genuina y de la verdadera libertad en el tercer mundo ha llevado en la actualidad hacia nuevas formas de opresión. La gente va a hacer casi cualquier cosa, si es que acaso ellos piensan que eso es vital para su supervivencia, y esta es la razón de por qué estamos viendo hoy en día, que algunos líderes nativos del tercer mundo se encuentran abusando a sus propias gentes, en un intento de ganar algo para ellos mismos. Han estado en la tierra de la necesidad y de la carencia por tanto tiempo, que ellos creen que deben arrebatar cualquier cosa que puedan,
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mientras que pueden hacerlo. Pero nunca podremos elevarnos a nosotros mismos al precio de arrojar a los demás hacia debajo de nosotros. Hemos sido llamados a proteger no sólo nuestros propósitos individuales, sino también nuestros propósitos colectivos. Nuestras políticas y nuestras acciones deberían promover el bien de todos. Para poder hacer esto, debemos llegar al lugar donde podamos damos cuenta—y que podamos ejemplificar el hecho—de que la libertad y la autoridad no son incompatibles. Al contrario, la libertad viene a través de la autoridad, y los dos se apoyan y se complementan el uno al otro. Debes recordar que Dios tomó a un grupo de esclavos—que son los hebreos—y los sacó de la tierra de Egipto, e hizo una nación muy grande y poderosa a partir de ellos. Sin embargo, ¿cuál fue la primera cosa que Dios les dio para que ellos pudieran establecer su libertad? Dios no les dijo que ahora ellos ya podían hacer cualquier cosa que quisieran (lo cual era su tendencia continúa). Al contrario, Dios les dio una autoridad sólida en la cual ellos debían edificar sus vidas. Dios les dio su ley, a través de Moisés, como la fuente de autoridad que tenían que respetar. Y Dios les dio también su presencia para apoyarlos y guiarlos. El concepto clave que debemos abrazar es que el hecho de reconocer la Autoridad Absoluta—que es la autoridad de Dios, junto con los principios y leyes de la Palabra de Dios—es esencial para poder entrar en la verdadera libertad de la autoridad personal y corporativa, y de esta manera, poder desarrollar a las naciones. “Jesús se dirigió entonces a los judíos que habían creído en él, y les dijo:—Si se mantienen fieles a mis enseñanzas, serán realmente mis discípulos; y conocerán la verdad, y la
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verdad los hará libres” (Juan 8:31–32). El hecho de depender en nuestra Autoridad Absoluta es también esencial para que podamos delegar nuestra autoridad inherente a todos aquellos que nos rodean, y que necesitan nuestro apoyo y ayuda, para que puedan entrar al poder de sus propias esferas o medio ambientes de dominio personal. La autoridad genuina es el La autoridad único camino para poder establecer genuina es el una libertad verdadera. No podemos único camino negarnos a nosotros mismos o a los para establecer demás que se encuentran en el mundo en desarrollo, la oportunidad para la verdadera edificar, basándonos en todo aquello libertad. que ya se ha realizado hasta ahora. Y vamos a llegar a revertir, y tal vez, incluso a destruir todo aquello que ya se ha realizado, si rechazamos los principios de la autoridad. Al contrario, tenemos que entrar en todas las libertades, todas las posibilidades, y todo el progreso de una vida autorizada y diseñada por nuestro Dios Creador, y que nos ha sido dada para nuestro enriquecimiento, y para el placer de Dios.
Notas finales Capitulo cuatro Ver en el idioma ingles Merrill F. Unger and William White Jr., eds., Vine’s Complete Expository Dictionary of Old and New Testament Words (New York: Thomas Nelson Publishers, 1985), 45, s.v. Author, numéro 2, archegos. 1
Capitulo cinco 1 Ver en el idioma ingles Larry Donnithorne, The West Point Way of Leadership (New York: Currency Books [Doubleday], 1993), 19.
Capitulo diez 1 Ver en la Internet: http://www.nba.com/history/players/ jordan_bio.html. 2 Ver en el idioma inglés Scott Merkin, “Jordan’s Effort a Marvel 15 Years Later,” MLB.com, http://mlb.mlb.com/news/article. jsp?ymd=20090223&content_id=3869616&vkey=news_mlb&fext=. jsp&c_id=mlb. 3
Ibid.
Capitulo quince Para un análisis mas detallado de la formación inherente de un individuo y las funciones del hombre y de la mujer, sea tan amable de referirse a los libros de este mismo autor titulados, Entendiendo el Propósito y el Poder de la Mujer (Whitaker House, 2003) y Entendiendo el Propósito y el Poder de los Hombres (Whitaker House, 2003). 1
Ver en el idioma ingles Tom Minnery, “The Relationship between Church, Family and Government,” Focus on the Family magazine, July 1998, 12, 10. 2
Discurso de despedida presidencial de George Washington, página 20, de la siguiente dirección en la Internet: http://gwpapers. virginia.edu/documents/farewell/transcript.html. 3
4 Para un análisis bíblico con relación al tema de las mujeres y el liderazgo, sea tan amable de referirse al siguiente libro de éste mismo autor titulado, Entendiendo el Propósito y el Poder de la Mujer, capitulo once, “¿Debería la mujer estar en liderazgo?” (Whitaker House, 2003).
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Llevando al máximo tu autoridad personal
Principios y ejemplos de autoridad
P
ara poder llevar tu autoridad al máximo, debes revisar los siguientes principios y ejemplos Escriturales de autoridad, los cuales son esenciales para poder descubrir y ejecutar tu propósito dentro de tu generación, agradando a tu Autor, y trayendo satisfacción a tu persona.
Principios generales de autoridad ••Dios es un Dios de autoridad. ••Dios es la fuente de origen de toda autoridad. ••Dios creó a todos y a todo lo que existe con autoridad inherente. ••La autoridad es una ley natural y un principio de la creación. ••La autoridad es natural para cualquier persona. ••La autoridad personal es determinada a través de los dones, talentos, habilidades naturales, y la pasión interna en el individuo. ••La autoridad personal es el permiso del Autor para que tú puedas ser tú mismo. ••El propósito es aquello que tú estás autorizado a realizar; tu tarea es tu propósito. ••La autoridad es la fuente de origen del poder verdadero, y es el medio para poder poner en práctica en su totalidad este poder. ••La autoridad hace la vida mucho más fácil, y también hace que la vida se vea más fácil a los ojos de otras personas. 413
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• La autoridad establece sus propias libertades y limitaciones. • La autoridad sólo puede ser otorgada, y nunca quitada. • La autoridad protege a la autoridad delegada y a su poder. • La autoridad siempre tiene que rendir cuentas. • La autoridad no necesita ningún tipo de defensa propia; sus decisiones son validadas a través de su propia fuente de origen. • La sumisión a la autoridad pone en práctica la autoridad en sí misma, y protege el propósito. • La autoridad es la clave para la vida y para poder funcionar adecuadamente, así como el fundamento para la efectividad; garantiza el máximo desempeño. • La autoridad le da significado a la vida. • La autoridad es la garantía de la realización. • La autoridad es la medida de éxito. • La autoridad está basada en la fe y produce confianza. • La autoridad lleva al orden y a la paz. • La ignorancia o la ausencia de autoridad produce confusión y caos. • La desobediencia a la autoridad sacrifica el propósito y cancela la visión. • La persona no autorizada sólo puede abusar. • Una persona puede estar llena de talentos, dones, habilidades, y experiencia, y aún así,
Principios y ejemplos de autoridad S 415
no estar autorizada, por medio de no estar realizando el potencial y la autoridad personal que Dios le ha dado. • Uno no sólo debe descubrir su propia autoridad, sino también debe ponerla en práctica, y debe permanecer en ella. • Si alguien se ha desviado de la autoridad, esta persona debería de inmediato someterse a ella nuevamente, de tal manera que todos sus dones puedan ser renovados dentro de él o ella.
Ejemplos seleccionados en las Escrituras de la autoridad y de su poder • Génesis 1:1: Dios es el autor de toda la creación. • Génesis 1:11–12: La semilla de todas las cosas se encuentra dentro de ellas mismas; la autoridad es algo inherente. • Génesis 1:16–17: Dios creó dos luces para “gobernar” el día y la noche. • Génesis 1:24–25: Dios creó los animales de acuerdo a sus especies. • Génesis 1:26–28: El hombre (varón y hembra) fue hecho a la imagen de Dios, y se le otorgó autoridad personal, así como dominio sobre toda la tierra. • Génesis 6:13–22: Noé fue autorizado para que construyera el arca. • Génesis 12:1–3: Abraham fue autorizado para que se convirtiera en el padre de una nueva gente y de una nación completamente nueva.
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• Éxodo 3:7–10: Moisés fue autorizado para ir delante de faraón y para sacar a los israelitas de la tierra de Egipto. • Mateo 3:13–17: Juan fue autorizado para que bautizara a la gente, y que preparara el camino para el Distribuidor Autorizado (Jesús), o el Mesías. • Lucas 4:31–36: Jesús operó bajo la autoridad y poder de Dios, de tal manera que la gente estaba “[asombrada] de su enseñanza, porque les hablaba con autoridad”, y “¡con autoridad y poder [Jesús] les da órdenes a los espíritus malignos, y salen!”. • Juan 21:19–22: Pedro fue autorizado para que siguiera a Jesús sólo dentro de su propia autoridad personal, y no tenía que traspasar la autoridad de ninguno otro. • Mateo 16:18; Juan 21:15–17: Pedro fue autorizado para que cuidara y edificara a la iglesia. • Hechos 26:12–18: Pablo recibió autoridad para ir con los gentiles “con el fin de designarte siervo y testigo” de Jésus. • Juan 1:12: Todos aquellos que han sido restaurados por el Dios Creador están autorizados a convertirse en “hijos de Dios”. • Mateo 28:18–20: Todos aquellos que han vuelto a conectarse con el Dios Creador han recibido una autoridad general para poder comunicarle al mundo, que toda la gente puede ser restaurada, y para que pueden volver a conectarse con Dios, y que puedan recibir los beneficios de poder estar bajo la
Principios y ejemplos de autoridad S 417
garantía eterna de Dios, y de poder descubrir su propia autoridad personal.
Perfil de tu autoridad personal (Debes hacer una copia de esta muestra de perfil, y debes contestar todas las preguntas para qué te ayuden a evaluar y a resumir tu autoridad, tus . dones, y tu área de dominio personal).
Clave #1: ¿Cuál es mi deseo más profundo? (No aquellas cosas en las cuales tengo un interés general o pasajero, sino aquellas cosas en que tengo un deseo . profundo o una aspiración profunda . y que quiero realizar).
Clave #2: ¿Cuáles son las cosas por las que siento una verdadera pasión? (¿Cuáles son aquellas cosas que me interesan realmente? ¿Cuáles son los dones y habilidades que yo disfruto . en forma especial cuando los uso?).
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Clave #3: ¿Qué es lo que me hace enojar? (No nos estamos refiriendo al enojo destructivo, el cual es motivado en forma egoísta, sino que nos estamos refiriendo al enojo constructivo, que se encuentra basado en la compasión por los demás, y en un deseo de que toda la gente sea tratada correctamente, y este es un enojo que se lastima y sufre por medio de las injusticias, y que lleva a . una acción positiva para poder remediar diferentes . tipos de problemas).
Clave #4: ¿Qué tipo de ideas se mantienen persistentes en mi mente y en mi corazón? (¿Cuáles son aquellos sueños recurrentes que . tengo para mi vida? ¿Cuáles son aquellas ideas . que nunca se apartan de mí?).
Clave #5: ¿Qué es lo que yo me imagino haciendo todo el tiempo? (¿Qué es lo que yo sueño llegar a ser? ¿Cuáles dones o habilidades debo usar y desarrollar a fin de que yo pueda llegar a convertirme en esto?).
Perfil de tu autoridad personal S 421
Clave #6: ¿Qué es lo que yo quiero hacer por la humanidad? (¿Qué tipo de impacto me gustaría tener en mi comunidad? ¿Qué es aquello que yo quiero pasar y heredar a la siguiente generación? ¿Cuáles son aquellas cosas por las cuales a mí me gustaría ser recordado para siempre?).
Clave #7: ¿Qué es lo que me podría dar la máxima realización? (¿Cuáles son las tres tareas o desempeños que me han dado hasta esta fecha la mayor satisfacción y realización en la vida, y por qué? ¿Cuáles son aquellas cosas que me motivan y que me recompensan al máximo, y cómo puedo incorporarlas en mi estilo de vida como mi vocación o como el blanco de mi enfoque en la vida?).
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Clave #8: ¿Qué es aquello que yo puedo hacer sin esperar ningún tipo de ganancia monetaria o compensación? (¿Qué tipo de actividades en el tiempo presente me están dando satisfacción, sin que yo tenga que recibir ningún tipo de pago o compensación por ellas? ¿Cuáles son aquellas cosas a las cuales estoy tan dedicado, que yo podría seguir haciéndolas, aún si dejara de recibir dinero por ello? ¿Cuáles son aquellas cosas que yo haría sin tener que recibir ningún tipo de compensación?).
Clave #9: ¿Qué es lo que yo preferiría estar haciendo? (¿Cuáles son aquellas cosas que yo deseo estar haciendo mientras que me encuentro haciendo otras cosas? ¿Cuáles son aquellas cosas que me hacen sentir como si estuviera “en casa” cuando las estoy realizando?).
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Clave #10: ¿Qué es aquello que yo haría, si yo supiera que no voy a fracasar en ello? (¿Qué tipo de tareas, proyectos, actividades, obras creativas, o planes, podría yo realizar, si estos estuvieran libres de cualquier tipo de riesgo? ¿Y si el dinero no fuera la condición para realizarlos? ¿Y que cosas podría hacer yo, si yo no tuviera que preocuparme con relación a tener los antecedentes o pasado equivocados, la apariencia equivocada, la experiencia laboral equivocada, o cualquier otra cosa que parezca estar equivocada?).
Clave #11: ¿Cuál es la cosa más importante que yo puedo hacer con mi vida? (Por encima de todas las demás cosas, ¿Cuál es la cosa más importante que yo podría hacer con mi vida? ¿Qué es lo que yo quiero que ocurra en mi vida? ¿Cómo es que yo quiero vivir mi vida basado en mis valores y creencias?).
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Clave #12: ¿Qué tipo de tarea o de actividades me conectaría en la mejor manera con mi Dios Creador? (¿Cuáles son aquellas cosas que me acercan más a Dios?).
Resumen de declaraciones: Las razones por las cuales yo creo que fui colocado en esta tierra, y las cosas que debo realizar:
• Documentando tu autoridad personal: ¿En qué formas específicas he podido ejercitar esta autoridad en el pasado? ¿Cómo es que puedo edificar esto en el futuro?
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• Ejercitando y refinándolo tu autoridad personal: ¿En qué formas puedo desarrollar y aplicar mi autoridad personal, ahora que ya conozco cuál es?
• Poniendo en práctica tu autoridad personal: ¿Quién tiene el conocimiento, habilidades, y dedicación para ayudarme a poner en práctica mi autoridad? (Para mayor información sobre este tema, favor de ver el capítulo once).
Acerca del autor
E
l Dr. Myles Munroe es un orador internacional motivacional, autor de libros best sellers, maestro, educador, consultor gubernamental, consejero y hombre de negocios que toca temas críticos que afectan todas las áreas del desarrollo humano, social y espiritual. Viajando extensamente alrededor del mundo, el tema central de su mensaje es el desarrollo del liderazgo, así como el descubrimiento del destino y del propósito personal y la realización máxima del potencial del individuo, que es transformar a los seguidores en líderes, y a los líderes en agentes de cambio. El Dr. Munroe es fundador y presidente de Bahamas Faith Ministries International (BFMI), que es una red de ministerios con sus oficinas en Nassau, Bahamas. El también es presidente y director ejecutivo de la Asociación Internacional de Líderes del Tercer Mundo, y presidente del Instituto Internacional de Entrenamiento para Líderes. El Dr. Munroe también es el fundador, productor ejecutivo y anfitrión principal de un número de programas de radio y de televisión que están en el aire a través de todo el Caribe y el mundo. El Dr. Munroe es un autor y escritor que ha contribuido para varias ediciones de la Biblia, para revistas y para reportes. Es un popular autor de más de cuarenta libros, sus obras incluyen entre otras, Los Principios y Beneficios del Cambio, Convirtiéndose en un Líder, La Persona Más Importante Sobre la Tierra, El Espíritu de Liderazgo, Los Principios y el Poder de la Visión, Entendiendo el Propósito y el Poder de la Oración, Entendiendo el Propósito y el Poder de la Mujer, y Entendiendo el Propósito y el Poder de los Hombres. Por más de treinta años, él ha entrenado decenas de miles de líderes en los negocios, la industria, la educación, el gobierno, y la religión. Él personalmente alcanza a más de 427
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500,000 personas cada año en un nivel de desarrollo personal y profesional. Su mensaje y su llamamiento trascienden razas, edades, culturas, credos, y antecedentes económicos. El Dr. Munroe ha obtenido títulos y maestrías en la Universidad Oral Roberts y en la Universidad de Tulsa, en Tulsa, Oklahoma, EE.UU. y ha sido premiado con un número de distinciones honorables a nivel doctorado. Él también ha servido como profesor adjunto de la Escuela de Graduados de Teología de la Universidad Oral Roberts. El Dr. Munroe y su esposa Ruth, viajan en equipo, y son los padres orgullosos de dos hijos adultos, Charisa y Chairo (Myles Jr.).