SOCIEDAD | 19

| Viernes 30 de enero de 2015

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Escorpiones En Santiago del Estero, ocho jovenes fueron atendidos por picaduras de escorpiones en distintas ciudades y las autoridades pidieron mantener limpios baldios y patios

Edición de hoy a cargo de José Crettaz www.lanacion.com/sociedad | @LNsociedad | Facebook.com/lanacion [email protected]

Nómades globales. Los nuevos ciudadanos del mundo Nacieron en un país, se criaron en otro y no temen volver a mudarse; hablan varios idiomas y son cada vez más Viene de tapa

Pero dos años y medio después, su familia se mudó a Suiza y un año más tarde, a Chile, donde Ernesto terminó la secundaria. Ahora vive y trabaja en Buenos Aires, pero antes de venir acá hace cuatro años, estudió en universidades de Francia y Dinamarca. “Fue más difícil volver que irme”, cuenta a la nacion. Hoy tiene 30 años y se siente “100% argentino en algunas cosas, con fuertes influencias en otras”. En cambio, Lara Proells, alemana de 26 años, hizo toda su carrera universitaria en la Argentina. Se recibió de politóloga en cuatro años y medio, con promedio 9. “En la UBA me dijeron que tenía que ser alemana para lograrlo en ese tiempo”, se ríe Lara, pero se acuerda muy bien de sus primeros seis meses del CBC llorando y pensando que no iba a poder. Antes de llegar al país, Lara vivió seis meses en Uruguay y un año en Ecuador. Curiosa por América latina, hace diez años abrió el mapa y apuntó a Uruguay. Encontró un programa de intercambio en su colegio (“algo muy común para los alemanes”, dice) y se fue a vivir con una familia al campo, con la cual sigue en contacto. “Me di cuenta de lo poco que sabía sobre América latina”, confiesa ahora. Viviendo en ese campo uruguayo, Lara ya supo que iba a volver lo más pronto posible. Lo logró y se quedó por años, sin descartar completamente la posibilidad de volver a Alemania. “Estos grupos suelen enfrentar algunos dilemas de identidad cultural, que es tan ambigua que los lleva a identificarse activamente con una variedad de culturas”, explica Marcelo Baudino, director y consultor de Iceberg Inteligencia Cultural, primera firma argentina especializada en el desarrollo de habilidades para trabajar efectivamente con personas de otras culturas. Según el estudio “Decoding a Global Talent”, de Boston Consulting Group y The Network, publicado en octubre

pasado, la Argentina es un país muy deseado para los expatriados de Brasil, México, Francia, Alemania e Italia (con un promedio de 10 en una escala de 0 a 20). A su vez, los argentinos consultados por el estudio eligieron Estados Unidos, Brasil, Italia, Francia, Canadá y Alemania, entre otros países del mundo. Otra investigación, elaborada por la red de expatriados Internations, coloca a la Argentina en el séptimo lugar en el ranking de países donde los expatriados se acomodan más fácilmente, y el tercero en facilidad para encontrar amigos. Denis Khorovodov tenía nueve años cuando llegó a Bariloche con toda su familia. Tres semanas después, el pequeño Denis ya se encontraba a las puertas de la primaria, aunque sin saber castellano. “Entonces, sólo podía responder a la pregunta: «¿Cómo te llamás?», y se me acercaron enseguida como 300 compañeros. Respondí casi a cada uno y así empezó mi nueva vida acá”, cuenta Denis en un perfecto castellano 15 años después de aquel episodio. “También vivimos en Canadá por dos años, pero luego volvimos a la Argentina, nuestro segundo hogar después de Rusia”, agrega Denis, que nunca perdió el contacto con su país natal. Para la surcoreana Jin Yi Hwang, el ingreso a la primaria argentina tampoco fue un momento fácil. “Tenía ocho años cuando llegamos al país y nadie en la familia hablaba castellano”, recuerda Jin Yi, cuya trayectoria profesional en la Argentina merecería una historia aparte. Una vez aprendida la lengua, como hija mayor acompañaba a los padres en sus reuniones de negocios como traductora. Se recibió con el mejor promedio del Instituto Superior de Enseñanza Radiofónica (ISER) y fue la primera locutora de origen oriental en Telefé a los 22 años. Después comenzó a estudiar abogacía en la UBA y terminó una maestría en Derecho en Nueva York con una beca.

Ernesto Luna nació en Buenos Aires, vivió en Japón, Suiza y Chile, y estudió en universidades de Francia y Dinamarca

Corea del Sur, Argentina y EE.UU. para Jin Yi Hwang

Denis Khorovodov, de Rusia a Bariloche con escala en Canadá

Una web que quiere reinventar la TV desde las redes sociales para atraer a la generación Y medios. FansWorld TV, un experimento que combina inmediatez y estética pop José Crettaz LA NACION

Tal vez sea el último intento de retener a la generación Y frente a la TV lineal o a algo que se le parezca. Con una estética pop que combina la inmediatez de la TV en vivo, abundantes estrellas teen invitadas, contenidos breves y fuerte interacción en las redes sociales, FansWorld TV (o FWTV) busca atraer “televidentes” frente a alguna de las pantallas para las que está disponible: PC, smartphone o tablet. El proyecto ocupa casi un edificio entero en Oro y Charcas, Palermo (donde varios departamentos se volvieron sets televisivos), y busca ingresos provenientes de la publicidad digital y algunos experimentos de marketing de grandes marcas que también están detrás de la fórmula para llegar a los sub 30 (algo en lo que también anda Vorterix, el proyecto digital de Mario Pergolini). Con una inversión declarada de alrededor de US$ 3 millones, el proyecto es impulsado por Marcelo Simonian, empresario que lideró el arribo al país de la informática Compaq en los 90 y es conocido por representar futbolistas con su empresa Dodici, y Gloria Vailati, que también tuvo cargos ejecutivos en Compaq y fue ge-

renta general para la región de Apple. En FWTV afirman que su audiencia alcanzó los 2,5 millones de usuarios únicos mensuales y tienen como objetivo terminar este año con 10 millones. El día que la actriz Martina Stoessel, protagonista de la exitosísima serie Violetta (de Disney Channel), visitó los estudios, el barrio se conmocionó por la enorme cantidad de fans que, alertados por las redes sociales, se juntaron frente a la puerta de FWTV. También pasaron por allí la DJ Lali Espósito, Maxi Espíndola (cantante de Aliados, el último trabajo televisivo de Cris Morena) y Agus Bernasconi (otro Aliados que surgió del programa “Soñando por cantar”), Ruggero Pasquarelli (actor italiano de Violetta), Katja Martínez (hija de Ciro, ex líder de Los Piojos) y Maite Lanata (jovencísima actriz que se destacó en El elegido, de Telefé), entre otras figuras de un universo desconocido para los mayores de... 35 años. De todas formas, la puerta se abre para algunos que cronológicamente superan esa edad, pero que han logrado mantenerse vigentes dentro del universo de la generación Y. “Nos definimos como un canal de televisión web con programación profesional, en vivo y con mucha interacción en las redes sociales”, explica

Tres figuras teen del “canal”

Dalma maraDona Actriz, hija de Diego Maradona, debutó a los 8 años en la tira Cebollitas

CoCo maggio Actor, empezó en Chiquititas y Rebelde Way

miCa Vázquez De la cantera de Cris Morena, pasó también por Floricienta

Vailati a la nacion. Dalma Maradona es una de las caras más reconocidas del “canal”, y conduce el envío central “FWTV en vivo”, junto con dos ex Chiquititas y Rebelde Way, Coco Maggio y Mica Vázquez. Pero otros llegaron a conductores gracias a la popularidad que ya habían cosechado en las redes sociales, como los polemistas de “Arroban”, el programa “sin periodistas” que conduce Diego Ripoll y en el que se divierten debatiendo de fútbol varios “tuiteros polemistas”: Juan de @enunabaldosa (que tiene 207.000 seguidores), Ernesto @ernestou, Alfre @alfremontes, Alexis @elalesi y @ NFLParaTodos (60.000 seguidores). La ficción tiene su lugar con un creciente catálogo de webseries, algunas producidas por realizadores con los que FWTV tiene acuerdos de revenue share (es decir, para compartir ganancias). Allí, entre otros títulos, están Necesito un tiempo, Policompañeros motorizados, Yo no soy virgen, Teatro x Wi-Fi o Combinaciones (producida originalmente para lanacion.com). Otro programa de la plataforma es CoCine, donde un invitado participa en la elaboración de un plato visto en la pantalla grande (allí se lo vio, entre otros, a Juan Campanella). El 60% de la programación –que en total incluye 21 programas– es originado por productores asociados.ß

“Está claro que aquellas personas que han vivido en más de una cultura a una temprana edad tienen menos apego por una cultura en particular, o, dicho de otra manera, se sienten más cómodos interactuando en contextos culturales diversos”, explica Baudino. La exigencia personal y profesional es otra característica que une a estos “ciudadanos del mundo”. Perfeccionistas y rígidos consigo mismos, se esfuerzan más para lograr sus objetivos. Olga Khamidulina nació en Uzbekistán (integrante de la Unión Soviética en aquel momento) y llegó a la Argentina cuando tenía ocho años. Como Denis y Jin Yi, no sabía ni una palabra de castellano y por eso tiene recuerdos borrosos de su primer año en el país. Si le hubieran dicho que iba a ingresar al Colegio Nacional de Buenos Aires y luego estudiar en la UBA no lo habría creído. Pero hoy, a los 26 años, asegura que incluso se siente más argentina. “Tuve que alejarme de mis raíces para adaptarme en una nueva sociedad”, confiesa. “Las personas que tienen que migrar enfrentan desafíos y situaciones que son específicas de comenzar a vivir en un país y una cultura diferente a la propia”, explica a la nacion Julia Taleisnik, coordinadora de capacitación en AFS Programas Interculturales. “Es importante cuando se migra a una nueva cultura (país o contexto), formar redes de apoyo, es decir, contactarse con otros ya sean locales o que están en una situación similar”, agrega Taleisnik, que es psicóloga. Aquellos que recién conocen a Adrián Bono, periodista y emprendedor, nunca logran definir su nacionalidad: cambia con mucha facilidad

aníbal greco

del inglés estadounidense al español con acento argentino o a su lengua materna, el español castizo. Hijo de madre argentina y padre español, Adrián nació en Mallorca y vino a vivir a la Argentina a los cinco años, y luego vivió en varios lugares de Europa y los Estados Unidos, donde adoptó la cultura del trabajo y aplicó en su emprendimiento más importante: The Bubble, un medio digital en inglés con las noticias de América latina. “En la Argentina me siento como en casa”, dice Adrián, pero asegura que es parte de la generación millennial: “Una generación de escépticos que cuestionan todo y tienen un nivel cultural muy diverso”. Baudino asegura: “La gente que ha tenido cierto grado de exposición internacional a edad temprana o ha vivido en más de una cultura por un tiempo prudente tiene más posibilidades de desarrollar características de tolerancia y adaptación”. De ciudadanos del mundo a “nómades globales”, como los llaman los profesionales de la inteligencia multicultural, también hay un grupo aún “más multicultural”: los chicos de la tercera cultura (TCK, por sus siglas en inglés). “Estos grupos suelen enfrentar algunos dilemas de identidad cultural, la cual es tan ambigua que los lleva a identificarse activamente con una variedad de culturas, pero también en ocasiones genera sentimientos de nunca estar realmente en «casa»”, dice Baudino. “La posibilidad de migración deja abierta nuevas oportunidades, pero siempre se debe recordar que todos tenemos una “mochila” de identidad cultural, experiencias previas, creencias, valores, etcétera, que no se dejan atrás”, agrega Taleisnik. ß

Un chef argentino, entre los 15 mejores RANKiNG. “Fue una experiencia única, sentía que estaba en el coliseo de la cocina mundial”, dijo emocionado el chef de Bariloche Emiliano Schobert, luego de que la delegación argentina finalizó en el puesto 15° del Bocuse d’Or, el campeonato mundial de gastronomía realizado en Lyon. El equipo integrado por el chef Emiliano Schobert, su ayudante Aixa Cardosio y el entrenador Fernando Orciani logró ubicarse como el mejor de los tres latinoamericanos. Chile fue 22° y Guatemala, 24°, entre los 24 participantes de la ronda final. El Bocuse d’Or es un evento creado en 1987 por Paul Bocuse, precursor de la nouvelle cuisine y considerado uno de los chefs más importantes de Francia y del mundo. Desde entonces, Francia se ha erigido como el país que más veces alzó el trofeo, que curiosamente personifica a un pequeño Paul Bocuse sobre un globo terráqueo. Anteayer, fueron los noruegos, por quinta vez, los que alzaron el pequeño Bocuse de oro. Estados Unidos y Suecia debieron conformarse con sus réplicas de plata y bronce, respectivamente, mientras que los anfitriones, máximos candidatos, terminaron en el séptimo puesto. Sin embargo, la gran perdedora fue España, que quedó penúltima, y fue el único país europeo dentro de los últimos ocho lugares.

Esta edición fue la sexta en que la Argentina alcanzó el tramo final de la competencia. Schobert tuvo 5 horas y 35 minutos para cocinar dos platos: una gallina de Guinea y una trucha, junto con tres guarniciones y una salsa por plato, como exigía la organización. Tras prepararse durante más de un año y medio, el chef argentino, oriundo de San Justo, educado en Córdoba y radicado en Bariloche, apostó por un menú inspirado en la estética del viento patagónico para representar al país. Ante la atenta mirada de los jueces y el público de la ruidosa tribuna (un clásico desde que en 1997 un grupo de mariachis alentó al equipó mexicano), Schobert y Cardosio buscaron tentar a los jueces con una combinación de sabores clásicos franceses, como el foie gras, y sabores típicamente argentinos, como las mollejas con manteca de chimichurri a la parrilla. La deliciosa presentación le valió a la Argentina 1315 puntos del jurado, que integró Mauro Colagreco, el argentino que tiene el honor de ser el único latinoamericano galardonado con dos estrellas de la guía Michelin y considerado uno de los mejores cocineros de Francia. El país también recibió el premio a la mejor campaña de promoción y el póster diseñado por Pablo Bernasconi obtuvo el segundo lugar.ß