LOS ESCOGIDOS DE DIOS Por Jaime Bouchillon Introducción El 15 de enero Felipe nació en la ciudad de Dallas, Texas. Desde el primer dolor de parto de su madre hasta el momento de su nacimiento corrió un período de solamente cuatro horas. Jaime, su padre, tuvo el privilegio de presenciar el nacimiento físico de Felipe. Casi seis años después, Jaime tuvo otro privilegio: presenciar el nacimiento espiritual de Felipe. En aquellos días Jaime tenía la costumbre de leerles la Biblia a sus hijos y orar con ellos cada noche, antes de ponerlos en la cama. Felipe escuchaba atentamente y hacía muchas preguntas en esos momentos. Una noche, después de su lectura de la Biblia, Felipe le dijo a Jaime que quería aceptar a Jesús como su Salvador personal, pero que no sabía hacerlo. Jaime le dijo que él podía hablar con Dios como le hablaba a él. Felipe quería que orara por él, pero Jaime le convenció de que eso lo tenía que escuchar Dios de sus propios labios. Después de un corto tiempo en que estuvo pensativo, con sus sencillas palabras, el pequeño Felipe le dijo a Dios que aceptaba a Jesucristo como su Salvador personal.

Transición Aquella noche Felipe hizo una decisión firme y creyó de corazón en Jesucristo. Así nació espiritualmente en la familia de Dios. Podemos decir que aquella noche él llegó a ser semejante a todos los que el apóstol Pedro escribió su primera epístola. Pedro les dice que son linaje escogido, real sacerdocio, nación santa y pueblo adquirido por Dios. Leamos 1 Pedro 2:9-10.

Lección I. Todo el que cree en Jesucristo como su Salvador personal fue escogido y adquirido por Dios. A. 1 Pedro 2:5-7 dice. . . 1. “el que creyere en él (Jesucristo), no será avergonzado” vv.5-6 2. “Para vosotros, pues, los que creéis, él es precioso” v. 7 B.

La puerta del cielo está abierta todavía. Si tú no has aceptado a Jesucristo como tu Salvador personal todavía, tú puedes hacerlo ahora mismo. Dios te da la oportunidad de creer en Cristo en este momento.

C.

Juan 1:12 dice que a los creen en su nombre Dios les dio potestad de ser hechos hijos de Dios. 1. El nombre Jesús significa "Salvador". El que cree en Jesús como su Salvador, es hecho hijo de Dios. 2. Jesús también se llama Emanuel y este nombre significa "Dios con nosotros". El que cree que Dios Hijo se encarnó para poder redimirnos es el que cree en su nombre. 3. Juan 1:13 a las personas que se les considera hijos de Dios no se les considera así por ser hijos de los creyentes. “los cuales no son engendrados de sangre.” Felipe no es hijo de Dios (es decir, no tiene el título de creyente) por ser hijo de un creyente. Él tuvo que tomar una decisión personal, él creyó en Jesucristo porque Dios Padre lo había escogido. 4. Los que creen en Jesús como Salvador personal no lo hicieron para complacer a otros. Juan 1:13 dice que “no es por voluntad de carne.” Felipe creyó en Cristo porque era la voluntad de Dios Padre que Felipe creyera.

5.

Las personas que creen en Jesús como Salvador personal no lo hacen porque sus padres físicos, o el pastor de su iglesia, o su esposa, o cualquier persona lo quiera. Juan 1:13 dice que “no es por voluntad de varón.” Felipe creyó en Jesucristo como su Salvador personal porque Dios quería que creyera.

Transición Primeramente, entonces, el apóstol Pedro dice que todo el que cree en Jesucristo como su Salvador personal tiene fe porque ha sido escogido por Dios. Dios quería que Felipe creyera en Jesucristo y lo escogió. Pedro dice lo mismo con otras palabras en 1 Pedro 2:9-10.

II.

Los que creen en Jesucristo como su Salvador personal tienen esa fe porque han alcanzado misericordia. En otro tiempo no eran pueblo de Dios, pero ahora son pueblo de Dios. En otro tiempo no habían alcanzado misericordia, pero ahora han alcanzado misericordia. El apóstol Pablo explica esta frase de Pedro en Romanos 11. A. Romanos 11:1-7 1. La nación de Israel, los descendientes de Abraham, es el pueblo de Dios. 2. Dios no ha desechado a la nación de Israel como su pueblo escogido desde los tiempos de Abraham. 3. Pero, no toda la nación de Israel alcanzó lo que esperaba, sino solamente los escogidos de Israel, aquellos a quienes Dios había escogido desde antes de la creación del universo. ¿Qué pasó con la nación de Israel como la nación que Dios escogió? B.

Romanos 11:11, 17-20 1. Por la transgresión de la nación de Israel por ser una nación idólatra, los judíos merecieron el castigo de Dios. Él los sacó de la tierra prometida, tal como Moisés se los había anunciado. Deuteronomio 28 relata las maneras en las que Dios iba a castigar a los judíos si ellos se convertían en idolatras después de tomar posesión de la tierra prometida a Abraham, a Isaac, a Jacob y a sus descendientes. 2. Dios los sacó de su tierra durante 70 años, en el cautiverio Babilónico. Los judíos volvieron a su tierra en el año 536 a.C. y se quedaron allí hasta el año 135 d.C. 3. Los romanos sacaron a los judíos de la tierra prometida en 135 d.C. y los esparcieron por todo el Imperio Romano. 4. Este castigo de sacarlos de la tierra prometida fue por su incredulidad en cuanto a Jesucristo. Los líderes religiosos de Israel rechazaron a Jesús como el Mesías. “Por su incredulidad fueron desgajadas...” Ro. 11:20

C.

Romanos 11:25-26 1. Aunque el período parece largo, este castigo a los judíos es temporal. Será hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles a la comunión con Dios. El resto del Nuevo Testamento nos ayuda a entender los límites de este período, especialmente el libro del Apocalipsis. No tenemos tiempo ahora para leerlo todo. El tiempo de los gentiles llega hasta el fin de la Gran Tribulación, cuando el Señor Jesucristo regrese a la tierra para establecer su reino terrenal. 2. Los gentiles dominarán a la nación de Israel hasta el regreso de Jesús a la tierra.

D.

Romanos 11:30-32 a. Los judíos como nación desobedecieron a Dios: (1) fueron idólatras y (2) rechazaron a Jesús como el Mesías. b. Dios quitó a los judíos de su lugar de privilegio como nación escogida por Dios. c. Dios puso a todas las naciones gentiles en este lugar de privilegio. Fue un acto de misericordia, porque los gentiles mucho antes del tiempo de Abraham habían rechazado a Dios y se volvieron idólatras. Esto lo sabemos por la historia de los descendientes de Noé y sus hijos, quienes construyeron la torre de Babel. Dios los castigó; pero, ellos siguieron siendo idólatras. d. De entre todas aquellas personas idólatras, Dios escogió a Abraham, y él respondió con fe a la palabra de Dios. De los descendientes de Abraham, Dios escogió a Isaac en vez de Ismael, y de los Descendientes de Isaac, Jacob recibió la bendición en vez de Esaú. Isaac y Jacob también creyeron en Dios Jehová. Sus descendientes fueron los hebreos – los judíos. e. Pero, por la incredulidad de los judíos al no aceptar a Jesús como el Mesías, Dios temporalmente los ha quitado de su lugar de privilegio y les ha dado a los gentiles este lugar. f. Durante muchos siglos, las naciones gentiles no creyeron en el Dios de los cielos, sino en solamente sus ídolos. Pero ahora, desde el tiempo de la primera venida de Jesús hasta su regreso, los gentiles responden con fe en Jesús como el Salvador, el Redentor, el Señor, el Dios de los cielos. Los gentiles hemos alcanzado misericordia y creemos en Jesucristo.

Conclusión Pero esta es una decisión personal. Dios escogió a Felipe, a Rosita, y a Mari, y me ha escogido a mí. Y hasta que tú respondas a su llamado no sabremos si te ha escogido a ti. ¿Crees tú en Jesús como tu Salvador? Hoy es el tiempo de recibir esta bendición. Él puede regresar mañana. Usado con permiso.

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