La obra lucana Evangelio según San Lucas Libro de los Hechos de los Apóstoles
La obra de Lucas tiene una diferencia notable con respecto a los otros evangelistas: no termina con la muerte y resurrección del Señor sino que continua hasta la llegada de Pablo a Roma. Por lo tanto, ya se vislumbra una concepción teológica diferente, ya que su relato se extiende hasta la expansión de la Iglesia.
Por que de esta prolongación de los relatos? El pasaje de Lc 24,46-47 puede ser iluminador para intentar responder a esta pregunta:
“45 Y, entonces, abrió sus inteligencias para que comprendieran las Escrituras, 46 y les dijo: «Así está escrito que el Cristo padeciera y resucitara de entre los muertos al tercer día 47 y se predicara en su nombre la conversión para perdón de los pecados a todas las naciones, empezando desde Jerusalén»”
A los elementos tradicionales del “kerygma” cristiano –muerte y resurrección según las Escrituras– añade un tercer elemento: “y se predicara en su nombre la conversión para perdón de los pecados a todas las naciones, empezando desde Jerusalén”.
¿Por que esta acentuación?
La primera generación cristiana estaba constituida en su totalidad por judíos. Iban al Templo, ofrecían sacrificios, respetaban las leyes judías, se reunían en las sinagogas, etc. Y la “misión a los paganos” seguía las reglas misioneras judías: el “interesado” debía recorrer un largo camino hasta quedar impregnado de la forma de vivir judía, conforme a la Tora, y luego –si estaba dispuesto a circuncidarse– podía entrar al pueblo de Dios.
A estas personas procedentes del mundo de la gentilidad que se circuncidaban se las llamaba “prosélitos”. Si no daba ese paso, quedaba como mero simpatizante (“temeroso de Dios”).
Los primeros cristianos seguían ese procedimiento, y la tendencia misional quedaba circunscripta prácticamente al mundo judío. Esto va a cambiar de manera radical, gracias a la experiencia y férrea convicción de Pablo, quien, como miembro prominente de la comunidad de Antioquia, encabezó un movimiento misional que llevo el Evangelio a los paganos, sin exigirles la circuncisión para entrar en el pueblo de Dios.
Esto desató tremendas polémicas en el seno de la comunidad cristiana, y además acentuó la separación entre cristianos y judíos. Largas y duras polémicas enfrentaron a los diversos grupos eclesiales:
“judaizantes”
“paulinistas”
los mas “judaizantes” no estaban dispuestos a sentarse a la mesa con paganos (cf. Hch 10,27)
por mas bautizados que estuvieran
Los “paulinistas” exacerbados querían cortar de cuajo con la “Ley Antigua”.
Con el tiempo, la polémica fue aquietándose, y acabo prevaleciendo la actitud de “apertura”. A tal punto que, en tiempos de la obra lucana, la mayor parte de los miembros de la Iglesia provenían, no del judaísmo, sino del mundo no judío. Lucas asumirá el desafío de mostrar como se llego a esta realidad, tratando de conectar los sucesos sino explícitamente con la intención de Jesús, al menos con algunas de sus actitudes y, sobre todo, con el proyecto salvífico de Dios para todos los hombres.
Jesús y el Espíritu Santo son figuras decisivas tanto en la primera como en la segunda obra. También es fundamental el papel de los Doce, a quienes Lucas identifica con los Apóstoles, como mediadores no sólo de la vida, pasión y resurrección de Jesús, sino también de su enseñanza, el Reino de Dios. el Reino de Dios es el contenido prioritario tanto de la predicación de Jesús como también de los Apóstoles y de Pablo
El autor del tercer evangelio Los testimonios que señalan al “medico Lucas” –compañero de Pablo en alguno de sus viajes, que permaneció fielmente a su lado hasta el final – como autor del tercer evangelio; estas son tradiciones que provienen de la segunda mitad del siglo II.
FILEMON 24 (donde Lucas aparece como “colaborador” de Pablo): “Te saludan Épafras, mi compañero de cautiverio en Cristo Jesús. Marcos, Aristarco, Dimas y Lucas, mis colaboradores”. COLOSENSES 4,14 (donde se le llama el “querido medico”): “Los saluda Lucas, el médico querido y Dimas”.
“La tercera recensión evangélica es: según Lucas. Lucas era médico de profesión. Después de la ascensión de Cristo, Pablo lo tomó ¿consigo?, porque era ¿un buen literato?. Lucas escribió su narración ¿de oídas?, y la firmó con ¿su propio nombre?. Aunque no había tenido contacto personal con el Señor, empezó su relato por el nacimiento de Juan, según se lo permitían sus propias investigaciones” (Código de Muraturi)
Es importante notar que, si bien la autoridad de Pablo le da una cierta garantía apostólica al texto, no es suficiente, puesto que Pablo no fue testigo ocular de la vida de Jesús. Para subsanar este inconveniente, el texto alude a las “propias investigaciones” (cf. Lucas 1,1-4).
El testimonio seguro mas antiguo que poseemos es de San Ireneo: “Lucas, compañero de Pablo, escribió en un libro el evangelio, como él (Pablo) lo predicaba” (Adv. Haer. III, 1,1). Ireneo, a continuación, se funda en los pasajes en primera persona plural de Hechos para afirmar que es el propio Lucas quien con toda claridad confirma que fue inseparable de Pablo (16,8.9.10-11.13; 20,6). Ireneo, en realidad, no aporta nada sobre “Lucas” que no pueda deducirse de los escritos “lucanos” y de las cartas de Pablo.
La conexión Lucas-Pablo se fundamenta esencialmente en el Libro de los Hechos (en particular, en los pasajes de esa obra en la que el narrador habla en primera persona plural). Sin embargo, la exegesis critica de principios del siglo XX cuestiono esta atribución tradicional, particularmente al descubrir que la perspectiva de Lucas en los Hechos correspondía mas bien a la situación de finales de siglo I y reflejaba el punto de vista de (por lo menos) la segunda generación con relación a las fuentes de los Evangelios. Desde entonces, se comenzó a sospechar en forma creciente del valor de los datos de la tradición patrística que identificaba al autor de Hechos con un cristiano de la primera generación.
Teniendo en cuenta la perspectiva diferente se llego a considerar que: O bien el autor de Hechos no es el mismo que el del tercer Evangelio.
O bien que estas dos obras habrían sido escritas por el mismo autor…
…pero en momentos diferentes (ya sea como obras completamente independientes una de otra, ya sea como independientes en su origen, pero asimiladas ulteriormente mediante un proceso literario) …o bien, que la habría concebido como una obra única en su origen, que luego habría sido separada en dos, en el marco del proceso de “canonización” (lo que habría tenido como consecuencia una revisión de la conclusión del primer volumen y de la introducción del segundo).
La tesis según la cual un solo autor ideó y compuso una obra en dos volúmenes, tal como se ha conservado en el Nuevo Testamento, parece ser la que actualmente tiende a imponerse en la critica contemporánea (aunque la cuestión a propósito de la naturaleza de la relación que une ambos libros sigue planteándose)
El autor, ¿fue el “Lucas médico compañero de Pablo”? Hay quienes no encuentran importantes razones para cuestionar la atribución tradicional de esta obra al “Lucas medico compañero de Pablo”. Otros investigadores, mas escépticos, se contentan con reconocer que fue un autor de gran talento de escritor –lo que le permitió jugar con distintos estilos de griego– educado, impregnado de cultura helenística y a la vez, gran conocedor de las Escrituras (los LXX), con un experimentado arte de narrador.
Tal vez la objeción mas importante a la posición tradicional provenga del cuestionamiento del presunto estrecho contacto del autor de esta obra con Pablo. Se han señalado tantas y tan importantes diferencias (sino directamente contradicciones) entre Pablo y Hechos, tanto respecto a determinados datos históricos como a la perspectiva teológica que algunos investigadores afirman que el autor de Hechos no pudo haber sido un acompañante de Pablo.
Por ejemplo, Hechos menciona una segunda estancia de Pablo en
Jerusalén antes de la “asamblea” (Hechos 11,29s)
que –según Gálatas 1,18-24– no pudo haberse producido
O, por ejemplo, que Hechos
nunca mencione a Tito
Por ejemplo, Hechos pinta con insistencia al cristiano y al misionero Pablo como un fariseo convencido, que permanece fiel a la fe de sus padres hasta el final de su vida
(cf. Hechos 16,1-3; 18,18; 21,26s; 26,2-8)
El Pablo de las cartas,
especialmente conforme surge de Filipenses, consideró ese camino
como “pérdida”, ¡como “basura”! al encontrar a Cristo
Filipenses 3,4-11
kai,per evgw. e;cwn
3,4 aunque yo tengo
pepoi,qhsin kai. evn sarki,Å
motivos para confiar también en la carne.
Ei; tij dokei/ a;lloj Si algún otro cree poder pepoiqe,nai evn sarki,( confiar en la carne,
evgw. ma/llon\
más yo
Filipenses 3,5-11
peritomh/|
3,5 Circuncidado
ovktah,meroj( evk ge,nouj VIsrah,l( fulh/j Beniami,n(
el octavo día;
~Ebrai/oj evx ~Ebrai,wn(
hebreo e hijo de
kata. no,mon
en cuanto a la Ley,
Farisai/oj
fariseo;
del linaje de Israel; de la tribu de Benjamín; hebreos;
Filipenses 3,5-11
kata. zh/loj
3,6 en cuanto al celo,
diw,kwn th.n kv klhsi,an(
perseguidor de la Iglesia;
kata. dikaiosu,nhn
en cuanto a la justicia
th.n evn no,mw|
que procede de la Ley,
geno,menoj a;memptojÅ
Fui intachable
Filipenses 3,5-11
ÎVAlla.Ð a[tina
3,7 Pero todo lo que
h=n moi ke,rdh(
era para mí ganancia,
tau/ta h[ghmai
eso he considerado
dia. to.n Cristo.n
a causa de Cristo
zhmi,anÅ
pérdida
Filipenses 3,5-11
avlla. menou/nge kai.
3,8 Y más aún:
h`gou/mai pa,nta
juzgo que todo es
zhmi,an ei=nai
pérdida
dia. to. u`pere,con
ante la sublimidad
th/j gnw,sewj
del conocimiento
Cristou/ VIhsou/
de Cristo Jesús,
tou/ kuri,ou mou(
mi Señor…
Filipenses 3,5-11
diV o]n ta. pa,nta
…por quien todas las
evzhmiw,qhn(
cosas perdí,
kai. h`gou/mai sku,bala(
y las tengo por basura
i[na Cristo.n kerdh,sw
para ganar a Cristo,
Filipenses 3,5-11
kai. eu`reqw/ evn auvtw/|(
3,9 y ser hallado en él,
mh. e;cwn evmh.n
no con la justicia mía,
dikaiosu,nhn th.n evk no,mou la que viene de la Ley, avlla. th.n dia. pi,stewj
sino la que viene por la
Cristou/(
fe de Cristo,
th.n evk qeou/ dikaiosu,nhn
la justicia que viene de
evpi. th/| pi,stei(
Dios, apoyada en la fe,
Filipenses 3,5-11
tou/ gnw/nai auvto.n
3,10 y conocerle a él,
kai. th.n du,namin th/j
el poder de su
avnasta,sewj auvtou/
resurrección
kai. Îth.nÐ koinwni,an
y la comunión en sus
Îtw/nÐ paqhma,twn
padecimientos
auvtou/( summorfizo,menoj hasta hacerme semejante tw/| qana,tw| auvtou/(
a él en su muerte,
Filipenses 3,5-11
ei; pwj katanth,sw
3, 11 tratando de llegar
eivj th.n evxana,stasin a la resurrección th.n evk nekrw/nÅ
de entre los muertos
Compañero de Pablo o no, lo que parece claro es que el autor ha estado próximo a la corriente paulina, cada vez mas compleja y en plena expansión, en el seno de la cual, y en el marco de la Iglesia de fines de siglo I, procuro precisar su propia posición.
Materiales constitutivos Tiene ante sí el evangelio de Marcos Y la fuente Q, ambos son usados con más fidelidad que Mateo. Es decir, respeta mejor el orden de los anteriores. Posee también materiales propios que matiza con su propia calidad literaria y estilo teológico. Línea teológica Con un fuerte acento pro-gentiles. Prevalecen los pobres y las mujeres con mayor fuerza que en los demás evangelios.
D E S A F I O S
Lengua El Griego de Lucas es el más cuidadoso y elegante del N. T. Emplea con corrección literario del Koiné, de forma superior al vulgar pero no cayendo en un clasismo.
Tiene dominio de la lengua griega: - Prólogo (Griego Aticista) - Infancia (Griego Semiticista) - El corriente del resto del Evangelio igual que Mc. “Lucas es un verdadero historiador helenista menor, a veces elegante otras vulgar, que no llega a estar a la altura de los grandes literatos de su época”.
Estilo
Es el mejor del Nuevo Testamento
Para Lucas, la lengua está al servicio de la fe y solo teniendo en cuenta ésta pueden explicarse adecuadamente todos los recursos de su estilo. EMPLEA: •Escenas – Tipo (Lc 4,16-30; 5, 1-11; 9,51-55) •Personificaciones •Prólogo (Lc 1, 1-4) •Oraciones (Lc 1, 46-55; 1, 68-79; 2, 14; 2, 2932; 10, 21; 11, 2-4; 22, 42; 23, 46)
Estilo Ofrece rasgos psicológicos que evocan de forma maestra la presencia de lo divino: •Transfiguración (Lc 9, 28) •Vocación de Simón (Lc 5, 1-11) •Oración en el Huerto (Lc 22, 44)
Son frecuentes las metáforas, el estilo directo, los discursos y los sumarios
Lo que predica Jesús desde los inicios (cf. Lc 4,43) en los Hechos forma una inclusión entre lo que después de Pascua enseña el Resucitado a los Apóstoles (Hch 1,3; cf. 1,6) y lo que Pablo predica al final de Hechos en Roma, cuando enseña “todo lo que se refiere a Jesucristo, el Señor” (Hch 28,31).
EVANGELIO
HECHOS
PROLOGO [1,1-4]
PROLOGO [1,1-2]
PROEMIO NARRATIVO [1,5-4,44] 1. Primera parte del proemio narrativo [1,5-2,40] 2. Segunda parte del proemio narrativo [3,1-4,44]
PROEMIO NARRATIVO [1,3-26] 1. La ascensión [1,6-11] 2. El grupo de los apóstoles [1,12-14] 3. La sustitución de Judas [1,15-26]
PRIMERA PARTE: MINISTERO EN GALILEA [5,1-9,50] 1. La llamada a los primeros discípulos y los conflictos que siguen a la llamada [5,16,11] 2. La elección de los “doce” y el ministerios didáctico y taumaturgo de Jesús [6,128,56] 3. Misión e instrucción de los “doce” [9,1-50]
PRIMERA PARTE: LA MISION DE LA PRIMITIVA COMUNIDAD DE JERUSALEN Y SU IRRADIACION HASTA ANTIOQUIA [2,1-14,28] 1. La misión apostólica y la fundación de la Iglesia en Jerusalén [2,1-8,3] 2. La difusión de la comunidad cristiana en Samaría y en la Judea hasta Antioquía [8,412,24] 3. El primer viaje misionero a Cipre y a Asia menor, organizado por la comunidad de Antioquía y guiado por Pablo y Bernabé [13,1-14,28]
SEGUNDA PARTE: EN VIAJE HACIA JERUSALEN COMO CAMINO DE CUMPLIMIENTO [9,51-19,44] 1. Misión y enseñanza a los discípulos, confrontación con enemigos y amigos, unidos a la multitud [9,51-13,21] 2. Jesús enseña entre los discípulos y fariseos continuando el viaje hacia Jerusalén atravesando pueblos y ciudades [13,22-17,10] 3. Jesús continua el viaje hasta Jerusalén, instruyendo sobre el reino de Dios, presente y futuro [17,11-19,27] 4. Jesús llega a Jerusalén [19,28-47] TERCERA PARTE: JESÚS EN JERUSALÉN [20,1-24,53] 1. La enseñanza de Jesús en el Templo [19,45-21,38] 2. La pasión y muerte del Mesías siervo de Dios [22,1-23,54] 3. El día de la resurrección, da la misión y de la ascensión [23,55-24,53]
PARTE CENTRAL: EL CONCILIO DE JERUSALEN [15,1-35] 1. Prólogo [15,1-5] // Epílogo [15,3035] 2. El discurso de Pedro [15,7b-11] 3. Discurso de Bernabé y Pablo [15,12] 4. El discurso de Santiago [15,13-21] 5. Decreto apostólico [15,22-29] 6. Epílogo [15,30-35] // Prólogo [15,15]
SEGUNDA PARTE: LA MISION DE PABLO DE ASIA A EUROPA... A ROMA [15,36-28,31] 1. El segundo y tercer viaje de Pablo hasta Efeso [15,36-19,20] 2. El viaje de Pablo hacia Jerusalén... y Roma [19,21-23,11] 3. Pablo se escapa de la muerte, apela al César y viene invitado a Roma [23,12-28,31]
Algunas claves de lectura
Se trata de la empresa literaria
más ambiciosa del cristianismo primitivo,
que por vez primera intenta autocomprenderse
en el marco de la “Historia de la Salvación”
Lucas presenta la Historia de la Salvación como un “camino” recto, imparable e irreversible programado y dirigido por Dios Padre mediante el Espíritu, que Jesús mismo abre y recorre completamente y del que la Iglesia “apostólica”, con su vida filial y fraterna y su proclamación de la exaltación de Jesús, es “testigo” y “servidora” en cada “hoy”
Una narración en paralelos (“Syncrisis”)
La retórica antigua conocía y recomendaba el procedimiento de poner en paralelo a una figura a la que se quería elogiar con otra,
para destacar y valorar las cualidades de la primera Por ejemplo, dice Aristóteles en la “Retórica”
“Hay que situarlo en paralelo con los hombres ilustres pues la amplificación produce un hermoso efecto si la persona alabada tiene ventaja sobre gentes de valor”.
Plutarco utilizó este recurso en su obra ”Vidas Paralelas”,
componiendo “parejas” de vidas que asocian en cada ocasión
a un griego con un romano Por ejemplo, Teseo y Rómulo
Demóstenes y Cicerón, etc.
Una narración en paralelos (“Syncrisis”)
Se encuentran numerosos ejemplos de ello en la obra lucana
El más famoso lo constituye el paralelismo entre Jesús y Juan Bautista sobre todo en el así llamado “Evangelio de la Infancia” (Lucas 1-2)
Una narración en paralelos (“Syncrisis”) Paralelo entre Jesús y Juan Bautista
Anuncio a Zacarías del nacimiento de Juan 1,5-25
Anuncio a María del nacimiento de Jesús 1,26-38
Presentación de los lugares
Templo / Nazaret
Personajes
Zacarías / María / el ángel Gabriel
Diálogo con el ángel, que implica un anuncio, una pregunta y una respuesta del ángel
Anuncio del nacimiento de Juan y Jesús “¿Cómo sabré?” … quedó mudo “¿Cómo será esto?” …respuesta
Reacción final al anuncio
El pueblo afuera / “He aquí la esclava del Señor…”
Una narración en paralelos (“Syncrisis”) Paralelo entre Jesús y Juan Bautista
Nacimiento y Circuncisión de Juan Bautista 1,57-80
Nacimiento Circuncisión y Presentación en el Templo de Jesús 2,1-40
Benedictus (1,67-79)
Magnificat (1,46-56)
Sumario sobre el crecimiento de Juan 1,80
Sumario sobre el crecimiento de Jesús 2,40.51b-52
Algunas claves de lectura…
Si el conjunto “Lucas-Hechos” es un todo ¿hacemos el esfuerzo de leer un libro en función del otro?
La posición “lucana” dentro de una “tradición paulina” en plena expansión
El llamamiento a la conversión ¡también de la comunidad cristiana! que debe convertirse para poder recibir a “los conversos”
La unidad de Lucas-Hechos
Los dos prólogos: Lucas 1,1-4 y Hechos 1,1-3
Otras partes que contribuyen a dar coherencia: - Los dos finales: Lucas 24 y Hechos 28 - Los dos relatos de la “ascención”, que encadenan ambos volúmenes: Lucas 24,36.48-53 y Hechos 1,3-14
El comienzo y el final del conjunto: Lucas 1-4 y Hechos 28
El texto programático como eje unificador: Lucas 4,16-44
Los dos “prólogos”
(o los dos “pactos de lectura”)
Lucas 1,1-4
Hechos 1,1-3
Lucas 1,1
evpeidh,per polloi.
Puesto que muchos
evpecei,rhsan
pusieron mano
avnata,xasqai
a compilar
dih,ghsin peri. tw/n
un relato de las
peplhroforhme,nwn
cosas que se han
evn h`mi/n pragma,twn
cumplido entre nosotros…
Lucas 1,2
kaqw.j pare,dosan
…según lo que nos
h`mi/n
transmitieron
oi` avpV avrch/j
los que desde el principio
auvto,ptai
testigos oculares
kai. u`phre,tai
y servidores
geno,menoi
se hicieron
tou/ lo,gou(
de la palabra…
Lucas 1,3
e;doxe kavmoi
me pareció conveniente, también a mí,
parhkolouqhko,ti
habiendo investigado desde
a;nwqen pa/sin
los orígenes todo,
avkribw/j
cuidadosamente
kaqexh/j soi
ordenadamente
gra,yai(
escribirte
kra,tiste Qeo,file(
excelentísimo Teófilo,
Lucas 1,4
i[na evpignw/|j
para que reconozcas
peri. w-n kathch,qhj lo,gwn
acerca de las palabras con las que fuiste instruido
th.n avsfa,leianÅ
la certeza.
La construcción es cuidadosa
y el ritmo equilibrado; cada miembro de la frase tiene su correspondiente…
1,1 Muchos
se han propuesto
1,3 me
ha parecido también a mi
componer un relato
escribirte una exposición ordenada, ilustre Teófilo,
de los acontecimientos que se han cumplido entre nosotros
(de) todo lo sucedido
1,2 desde
desde el principio
el comienzo
según nos transmitieron
1,4
para que llegues a comprender
De esta manera,
en cuatro oraciones subordinadas dispuestas alrededor de la proposición principal
“me ha parecido también a mí escribirte…”, Lucas define sucesivamente…
El contexto en el que sitúa su obra…
“…muchos se han propuesto componer un relato…” “…las cosas que se han cumplido entre nosotros…” La materia que trata…
“…según nos los transmitieron desde el comienzo…” “…testigos oculares y ministros de la Palabra…” Las características de la obra…
…”después de haber investigado cuidadosamente todo desde el principio escribirte ordenadamente…” La finalidad…
...”para que llegues a comprender la autenticidad de la enseñanza…”
Un prólogo secundario Hechos 1,1-3
Lucas 1,1-4 Muchos han tratado de relatar ordenadamente los hechos que se han cumplido entre nosotros, 2 tal como nos fueron transmitidos por aquellos que han sido desde el comienzo testigos oculares y servidores de la Palabra. 3 Por eso, después de informarme cuidadosamente de todo desde los orígenes, yo también he decidido escribir para ti, excelentísimo Teófilo, un relato ordenado, 4 a fin de que conozcas bien la solidez de las enseñanzas que has recibido.
Hechos 1,1-3 En mi primer Libro, querido Teófilo, me referí a todo lo que hizo y enseñó Jesús, desde el comienzo, 2 hasta el día en que subió al cielo, después de haber dado, por medio del Espíritu Santo, sus últimas instrucciones a los Apóstoles que había elegido. 3 Después de su Pasión, Jesús se manifestó a ellos dándoles numerosas pruebas de que vivía, y durante cuarenta días se le apareció y les habló del Reino de Dios.
Los finales de ambas obras
Lucas 24: volver al punto de partida Hechos 28
28,16-22 . 23-28 . 30-31
Lucas 24 y el “arte de concluir un relato”
Lucas 24,1-12
Lucas 24,13-35
Lucas 24 36-49
Lucas 24,50-51
Lucas 24,51-53
Hechos 28,16-31 y la estancia final de Pablo en Roma
Hechos 28,16-22.23-28 Entrevista de Pablo con la comunidad judía de Roma
Hechos 28,30-31
Sumario que describe la actividad de Pablo durante dos años
Hechos 28,16-22 16Cuando
entramos en Roma se le permitió a Pablo permanecer en casa particular con un soldado que le custodiara. 17Tres días después convocó a los principales judíos. Una vez reunidos, les dijo: «Hermanos, yo, sin haber hecho nada contra el pueblo ni contra las costumbres de los padres, fui apresado en Jerusalén y entregado en manos de los romanos, 18que, después de haberme interrogado, querían dejarme en libertad porque no había en mí ningún motivo de muerte. 19Pero como los judíos se oponían, me vi forzado a apelar al César, sin pretender con eso acusar a los de mi nación. 20Por este motivo os llamé para veros y hablaros, pues precisamente por la esperanza de Israel llevo yo estas cadenas.» 21Ellos le respondieron: «Nosotros no hemos recibido de Judea ninguna carta que nos hable de ti, ni ninguno de los hermanos llegados aquí nos ha referido o hablado nada malo de ti. 22Pero deseamos oír de ti mismo lo que piensas, pues lo que de esa secta sabemos es que en todas partes se la contradice.»
Hechos 28,23-28 23Le
señalaron un día y vinieron en mayor número adonde se hospedaba. El les iba exponiendo el Reino de Dios, dando testimonio e intentando persuadirles acerca de Jesús, basándose en la Ley de Moisés y en los Profetas, desde la mañana hasta la tarde. 24Unos creían por sus palabras y otros en cambio permanecían incrédulos. 25Cuando, en desacuerdo entre sí mismos, ya se marchaban, Pablo dijo esta sola cosa: «Con razón habló el Espíritu Santo a vuestros padres por medio del profeta Isaías: 26Ve a encontrar a este pueblo y dile: Escucharéis bien, pero no entenderéis, miraréis bien, pero no veréis. 27Porque se ha embotado el corazón de este pueblo, han hecho duros sus oídos, y sus ojos han cerrado; no sea que vean con sus ojos, y con sus oídos oigan, y con su corazón entiendan y se conviertan, y yo los cure. 28«Sabed, pues, que esta salvación de Dios ha sido enviada a los gentiles; ellos sí que la oirán.» 29Cuando hubo dicho esto los judíos se fueron, discutiendo vivamente entre sí.
Hechos 28,30-31
30
Pablo permaneció dos años enteros en una casa que había alquilado y recibía a todos los que acudían a él; 31 predicaba el Reino de Dios y enseñaba lo referente al Señor Jesucristo con toda valentía, sin estorbo alguno.
Los dos relatos de “la ascensión”
Lucas 24,36-53 Hechos 1,3-14
Lucas 24,36-53 24,36 Estaban hablando de estas cosas, cuando él se presentó en medio de ellos y les dijo: «La paz con vosotros».
24,37 Sobresaltados y asustados, creían ver un espíritu. 24,38 Pero él les dijo: «¿Por qué os turbáis, y por qué se suscitan dudas en vuestro corazón? 24,39 Mirad mis manos y mis pies; soy yo mismo. Palpadme y ved que un espíritu no tiene carne y huesos como veis que yo tengo».
Lucas 24,36-53
24,40 Y, diciendo esto, los mostró las manos y los pies. 24,41 Como ellos no acabasen de creerlo a causa de la alegría y estuviesen asombrados, les dijo: «¿Tenéis aquí algo de comer?» 24,42 Ellos le ofrecieron parte de un pez asado.
24,43 Lo tomó y comió delante de ellos.
Lucas 24,36-53
24,44 Después les dijo: «Estas son aquellas palabras mías que os hablé cuando todavía estaba con vosotros: «Es necesario que se cumpla todo lo que está escrito en la Ley de Moisés, en los Profetas y en los Salmos acerca de mí.» 24,45 Y, entonces, abrió sus inteligencias para que comprendieran las Escrituras, 24,46 y les dijo: «Así está escrito que el Cristo
padeciera y resucitara de entre los muertos al tercer día…
Lucas 24,36-53
24,47 …y se predicara en su nombre la conversión para perdón de los pecados a todas las naciones, empezando desde Jerusalén. 24,48 Vosotros sois testigos de estas cosas. 24,49 «Mirad, y voy a enviar sobre vosotros la
Promesa de mi Padre. Por vuestra parte permaneced en la ciudad hasta que seáis revestidos de poder desde lo alto».
Lucas 24,50-53
24,50 24,51 24,52
24,53
Los sacó hasta cerca de Betania y, alzando sus manos, los bendijo. Y sucedió que, mientras los bendecía, se separó de ellos y fue llevado al cielo. Ellos, después de postrarse ante él, se volvieron a Jerusalén con gran gozo, y estaban siempre en el Templo bendiciendo a Dios.
Hechos 1,3-14 1,1
El primer libro lo escribí, Teófilo, sobre
todo lo que Jesús hizo y enseñó desde un principio
1,2
hasta el día en que, después de haber
dado instrucciones por medio del Espíritu Santo a los apóstoles que había elegido, fue llevado al cielo.
Hechos 1,3-14
1,3
A estos mismos, después de su pasión, se les presentó dándoles muchas pruebas de que vivía, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca de lo referente
al Reino de Dios. 1,4
Mientras estaba comiendo con ellos, les mandó que no se ausentasen de Jerusalén, sino que aguardasen la Promesa del Padre, «que oísteis de mí:
Hechos 1,3-14
1,5
Que Juan bautizó con agua, pero vosotros seréis bautizados en el Espíritu Santo dentro de pocos días».
1,6
Los que estaban reunidos le preguntaron:
«Señor, ¿es en este momento cuando vas a restablecer el Reino de Israel?» 1,7
El les contestó: «A vosotros no os toca conocer el tiempo y el momento que ha fijado el Padre con su autoridad,
Hechos 1,3-14
1,8
sino que recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros, y seréis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.»
1,9
Y dicho esto, fue levantado en presencia de ellos, y una nube le ocultó a sus ojos.
1,10 Estando ellos mirando fijamente al cielo mientras
se iba, se les aparecieron dos hombres vestidos de blanco …
Hechos 1,3-14
1,11
…que les dijeron: «Galileos, ¿qué hacéis ahí
mirando al cielo? Este que os ha sido llevado, este mismo Jesús, vendrá así tal como le habéis visto subir al cielo.» 1,12
Entonces se volvieron a Jerusalén desde el monte llamado de los Olivos, que dista poco de
Jerusalén, el espacio de un camino sabático.
Hechos 1,3-14
1,13
Y cuando llegaron subieron a la estancia superior, donde vivían, Pedro, Juan, Santiago y Andrés; Felipe y Tomás; Bartolomé y Mateo; Santiago de Alfeo, Simón el Zelotes
y Judas de Santiago. 1,14
Todos ellos perseveraban en la oración, con un mismo espíritu
en compañía de algunas mujeres, de María, la madre de Jesús, y de sus hermanos.
24,36 Todavía estaban hablando de esto, cuando Jesús se apareció en medio de ellos y les dijo: 48
Ustedes son testigos de todo esto. 49 Y yo les enviaré lo que mi Padre les ha prometido. Permanezcan en la ciudad, hasta que sean revestidos con la fuerza que viene de lo alto".
1,3 Después de su Pasión, Jesús se manifestó a ellos dándoles numerosas
pruebas de que vivía, y durante cuarenta días se le apareció y les habló del Reino de Dios. 4
6
En una ocasión, mientras estaba comiendo con ellos, les recomendó que no se alejaran de Jerusalén y esperaran la promesa del Padre: "La promesa, les dijo, que yo les he anunciado. 5 Porque Juan bautizó con agua, pero ustedes serán bautizados en el Espíritu Santo, dentro de pocos días".
Los que estaban reunidos le preguntaron: "Señor, ¿es ahora cuando vas a restaurar el reino de Israel?". 7 El les respondió: "No les corresponde a ustedes conocer el tiempo y el momento que el Padre ha establecido con su propia autoridad. 8 Pero recibirán la fuerza del Espíritu Santo que descenderá sobre ustedes, y serán mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaría, y hasta los confines de la tierra". 50 Después Jesús los llevó hasta las 9 Dicho esto, los Apóstoles lo vieron elevarse, y una nube lo ocultó de la proximidades de Betania y, elevando vista de ellos. 10 Como permanecían con la mirada puesta en el cielo sus manos, los bendijo. 51 Mientras mientras Jesús subía, se les aparecieron dos hombres vestidos de los bendecía, se separó de ellos y fue blanco, 11 que les dijeron: "Hombres de Galilea, ¿por qué siguen llevado al cielo. mirando al cielo? Este Jesús que les ha sido quitado y fue elevado al cielo, vendrá de la misma manera que lo han visto partir". 12 Los Apóstoles regresaron entonces del monte de los Olivos a Jerusalén: la distancia entre ambos sitios es la que está permitida recorrer en día sábado. 52 Los discípulos, que se habían postrado 13 Cuando llegaron a la ciudad, subieron a la sala donde solían reunirse. Eran Pedro, Juan, Santiago, Andrés, Felipe y Tomás, Bartolomé, delante de él, volvieron a Jerusalén 53 Mateo, Santiago, hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas, hijo de con gran alegría, y permanecían Santiago. continuamente en el Templo 14 Todos ellos, íntimamente unidos, se dedicaban a la oración, en alabando a Dios. compañía de algunas mujeres, de María, la madre de Jesús, y de sus
Elementos comunes
Están presentes los mismos personajes: Jesús y los Once
Se trata de la última aparición de Jesús a sus discípulos
Se encarga a los discípulos una misión de testimonio
Se invita a esperar el cumplimiento de la “promesa del Padre”
Diferencias En el nivel de la cronología
En el nivel de los lugares No hay diálogo entre Jesús y los discípulos
en Lucas 24, mientras que Hechos consiste en una pregunta y su respuesta Se separó de ellos / subió al cielo La nube y los hombres con vestiduras blancas
están ausentes de Lucas 24
El comienzo y el final de la historia Lucas 1-4
Hechos 28
El texto programático
Lucas 4,16-44
Lucas 4,16-30
4,16 Vino a Nazaret, donde se había criado y, según su costumbre, entró en la sinagoga el día de sábado,
y se levantó para hacer la lectura. 4,17
Le entregaron el volumen del profeta Isaías y desenrollando el volumen, halló el pasaje
donde estaba escrito: 4,18 El Espíritu del Señor sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la Buena Nueva,
me ha enviado a proclamar la liberación a los cautivos 4,19
y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor.
Lucas 4,16-30
4,20
Enrollando el volumen lo devolvió al ministro, y se sentó En la sinagoga todos los ojos estaban fijos en él.
4,21 Comenzó, pues, a decirles: «Esta Escritura, que acabáis de oír, se ha cumplido hoy». 4,22 Y todos daban testimonio de él y estaban admirados de
las palabras llenas de gracia que salían de su boca. Y decían: «¿No es éste el hijo de José?» 4,23
El les dijo: «Seguramente me vais a decir el refrán:
Médico, cúrate a ti mismo. Todo lo que hemos oído que ha sucedido en Cafarnaúm, hazlo también aquí en tu patria».
Lucas 4,16-30
4,24 Y añadió: «En verdad os digo que ningún profeta es bien recibido en su patria». 4,25
«Os digo de verdad: Muchas viudas había en Israel
en los días de Elías, cuando se cerró el cielo por tres años y seis meses, y hubo gran hambre en todo el país; 4,26
y a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda de Sarepta de Sidón.
4,27 Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del profeta Eliseo, y ninguno de ellos fue purificado sino Naamán, el sirio».
Lucas 4,16-30
4,28 Oyendo estas cosas, todos los de la sinagoga se llenaron de ira; 4,29 y, levantándose, le arrojaron fuera de la ciudad, y le llevaron a una altura escarpada del monte sobre el cual estaba edificada su ciudad, para despeñarle.
4,30 Pero él, pasando por medio de ellos, se marchó.
Lucas 4,31-44
4,31 Bajó a Cafarnaúm, ciudad de Galilea, y los sábados les enseñaba. 4,32 Quedaban asombrados de su doctrina,
porque hablaba con autoridad. 4,33 Había en la sinagoga un hombre que tenía el espíritu de un demonio inmundo,
y se puso a gritar a grandes voces: 4,34 «¡Ah! ¿Qué tenemos nosotros contigo, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos?
Sé quién eres tú: el Santo de Dios».
Lucas 4,31-44
4,35 Jesús entonces le conminó diciendo: «Cállate, y sal de él». Y el demonio, arrojándole en medio, salió de él sin hacerle ningún daño.
4,36 Quedaron todos pasmados, y se decían unos a otros: «¡Qué palabra ésta! Manda con autoridad y poder a los espíritus inmundos y salen».
4,37 Y su fama se extendió por todos los lugares de la región. 4,38 Saliendo de la sinagoga, entró en la casa de Simón.
La suegra de Simón estaba con mucha fiebre, y le rogaron por ella.
Lucas 4,31-44
4,39 Inclinándose sobre ella, conminó a la fiebre, y la fiebre la dejó; ella, levantándose al punto, se puso a servirles.
4,40 A la puesta del sol, todos cuantos tenían enfermos de diversas dolencias se los llevaban; y, poniendo él las manos sobre cada uno de ellos, los curaba.
4,41 Salían también demonios de muchos, gritando y diciendo: «Tú eres el Hijo de Dios». Pero él, conminaba y no les permitía hablar,
porque sabían que él era el Cristo. .
Lucas 4,31-44
4,42 Al hacerse de día, salió y se fue a un lugar solitario. La gente le andaba buscando y, llegando donde él, trataban de retenerle para que no les dejara. 4,43 Pero él les dijo: «También a otras ciudades tengo que anunciar la Buena Nueva del Reino de Dios, porque a esto he sido enviado». 4,44 E iba predicando por las sinagogas de Judea.
Otra forma de mirar la obra lucana
Clave TEMPORAL (Lc 16,16) La Ley y los profetas llegan hasta
Juan (Tiempo de Israel); desde ahí comienza a anunciarse la Buena Nueva del Reino de Dios (Tiempo de Cristo), y todos se esfuerzan por entrar en él (Tiempo de la Iglesia).
Historia de la Salvación: Tres tiempos (Lc 16,16)
Iglesia CRISTO Israel
El tiempo de Israel o el tiempo de la espera Representado por Zacarías e Isabel, el anciano Simeón, la profetisa Ana. Es el puente que une la historia de Israel como historia de la esperanza mesiánica, con su cumplimiento. Juan Bautista y la madre de Jesús son los lazos de unión entre este momento histórico y el siguiente: En el caso de Juan Bautista, se nota la intención de Lucas de considerar el tiempo de Jesús como una nueva etapa: inmediatamente antes del bautismo de Jesús en el Jordán, se narra el hecho de la prisión de Juan Bautista por Herodes a causa de Herodías (Lc 3, 19). En la versión de Lucas no queda claro quien ha bautizado a Jesús.
MARÍA CUMPLE LA FUNCIÓN DE PUENTE: aparece al comienzo del evangelio como madre de Jesús, lo acompaña en su vida “guardando la palabra en su corazón” (Lc 2,19; 2,51; cf. 8,15; cf. 8,21), y aparece, finalmente, al comienzo del tiempo de la Iglesia, reunida en la comunidad de Jerusalén (Hch 1,14).
EL TIEMPO DE JESÚS O EL “HOY” DE LA SALVACIÓN El evangelista califica desde el primer momento el “hoy” de Jesús como el tiempo de la salvación. Desde el anuncio del ángel a los pastores de que “hoy ha nacido el salvador del mundo” (Lc 2,11) hasta la promesa de Jesús al buen ladrón “hoy estarás conmigo en el paraíso” (Lc 23,43), la actividad de Jesús hace real y presente la salvación de Dios para todos los hombres, especialmente para aquellos mas alejados, como en el caso de Zaqueo, el cobrador de impuestos (19,5-9).
EL TIEMPO DE LA IGLESIA Lo desarrolla en el Libro de Hechos: el autor narra nuevamente el episodio de la ascensión al cielo de Jesús, colocado, claramente, cuarenta días después de la resurrección. Después de este periodo se completa el numero de los apóstoles con la elección de Matías (Hch 1,21-26). La reconstitución del grupo de los “Doce” después de la traición de Judas es la condición para la venida del Espíritu Santo, cincuenta días después de la Pascua. La hora del nacimiento de la Iglesia esta señalada por el don del Espíritu, que en adelante guiara su camino y animara su crecimiento en toda la tierra habitada.
Lucas presenta una disposición geografica que muestra peculiaridades respecto a la de los otros “sinópticos”, y que responde a una intención teológica propia: a partir de 9,51 introduce el motivo del “viaje a Jerusalén”
L í n e a G e o g r á f i c a
A partir de aquí, los restantes episodios de la vida pública de Jesus quedarán enmarcados en esta especie de “peregrinación” a Jerusalén, el lugar por antonomasia del “cumplimiento” de las Escrituras: Lc 18,31 “Tomando consigo a los Doce, les dijo: «Miren que subimos a Jerusalén, y se cumplirá todo lo que los profetas escribieron para el Hijo del hombre“ Luc 13,22
Luc 17,11
Luc 19,11
Luc 19,28
Luc 24,49
Hch 1,4-5
Lc 24,6 =/= Mc 16,7 y Mt 28,7
Tras la “entrada mesiánica” en Jerusalén, en 19,28ss, Jesús, en la versión lucana, no vuelve a salir de la ciudad [comparar Mt 21,17 y Mc 11,19 con Lc 19,47-48 –tras la escena de la “expulsión de los vendedores del Templo”–) y cf. Lc 21,37-38]. También falta la escena de “la unción en Betania”: Mt 26,6-13 // Mc 14,3-9 // Jn 12,1-8.
TRAS “PENTECOSTES”, LA DIRECCION SE INVIERTE Si hasta entonces los movimientos apuntaban hacia Jerusalén, donde se cumple plenamente el misterio pascual, una vez que el Espíritu Santo se derrama sobre la Iglesia fundada en “los doce”, se desencadena un movimiento inverso: desde Jerusalén hacia “los confines de la tierra”:
Luc 24,47
Hch 1,8
Clave ESPACIAL (Hch 1,8) Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, y seréis mis testigos en JERUSALÉN, en toda Judea y SAMARIA, y hasta los CONFINES de la tierra
Tres Pentecostés Hch 1,8 Testigos
Jerusalén
Samaría
Confines
Pentecostés
Hch 2 Judíos
Hch 8 Samaritanos
Hch 10 Paganos
Discursos
Hch 2 Pedro
Hch 7 Esteban
Hch 10 Pedro
Primeros Eventos 1. Anuncio del ángel a Zacarías en el templo de Jersualén, del nacimiento de Juan el Bautista (1,5-22)
♦ Cesarea de Filipos
Galilea
2. El anuncio del ángel Gabriel a María en Nazaret y su posterior visita a Isabel Magdala ♦
3. Nacimiento de Juan en Judá
2
4. José y María van a Belén a ser empadronados por el censo. Jesús nace en Belén
6 Decápolis
5. Llevan al recién nacido a ser presentado en el templo de Jerusalén; encuentro con Simeón y Ana. 6. Niñez de Jesús en Nazaret (1,39-40) 7. Relato de Jesús en el templo de Jerusalén a los 12 años.
8. Crecimiento de Jesús en Nazaret, sujeto a sus padres (1,51-52) 9. Bautismo y tentación de Jesús en el Jordán y luego en el desierto del Mar Muerto (3,21-22; 4,1-13)
Perea Judea
3
15
9
4 Geografía narrada por Lucas
Ministerio en Galilea (4,14 – 9,50) 10. Lucas inicia el ministerio en Galilea relatando el evento de la sinagoga en Nazaret (4,16-30) 11. Capernaum (4,31-42) 12. Ciudades alrededor de Galilea (4,43-44 hasta 9,50)
12 11
Camino a Jerusalén (9,51 – 19,27) 13. En Samaria (9,51 – 10,37) * No reciben a Jesús en una aldea (9,51) * Envía a los 70 (10,1-24) * Parábola del buen samaritano (10,25) 14. Betania y Judea (10,38 - 13,35) 15. Perea a Jerusalén (14,1 – 19,27) Ministerio final en Jerusalén (19,28 – 23,56) 16. La entrada triunfal a Jerusalén, inicio de la semana de la pasión: juicio, muerte y resurrección. 17. Camino a Emaús (24,13-45) 18. Ascención en el Monte de los Olivos en Betania. (24,46-53)
♦ Cesarea de Filipos
Galilea
10 Decápolis
13
Judea
17
16
Perea
15 14
Geografía del Ministerio de Jesús según Lucas
Es considerado el evangelio de la Misericordia donde presentan materiales inigualables, exclusivos, como las parábolas de la misericordia (Lc 15)
T e o l o g í a
El Jesús de Lucas aparecerá fuertemente vinculado, sino a los paganos, al menos a los “marginados” por las elites religiosas, mostrando, con gestos y palabras, esta misericordia de Dios. Su acercamiento a los grandes pecadores convertidos y perdonados: la mujer del capitulo 7, Zaqueo, el buen ladrón. Hay mayor mención de paganos en el evangelio: el buen samaritano, el leproso samaritano que se vuelve a dar gracias, la escena en la sinagoga de Nazareth.
Jesús es visto como un problema entre judíos, desmarcándose del imperio romano, donde estaban gran parte de los destinatarios de este evangelio.
La alusión al Espíritu es lo que le permite a
Lucas presentar la apertura de la Iglesia a los paganos como un acontecimiento orgánico y armónico, en el que no hay mayores tensiones, porque el Espíritu ilumina en el momento oportuno a todos los creyentes y les muestra el camino a seguir (Hch 15, 28).
Veamos algunos números...
Espíritu (τὸ πνεῦμα) Lc 36x
Mt 19x
Mc 23x
Jn 24x
Espíritu Santo (τὸ πνεῦμα τὸ ἅγιον)
Lc 15x
Mt 5x
Mc 4x
Jn 4x
Espíritu en Hechos
Espíritu 70x
Espíritu Santo 44x
La oración En cada evento importante que marca el progreso de la vida de Jesús, el evangelio lo muestra en actitud orante en el momento del bautismo (3,21) siendo el único evangelio que presenta esta característica teológica en ese evento; antes de tomar decisión crucial de seleccionar los 12 apóstoles, Jesús debe orar (6,12); él ora antes de preguntar a sus discípulos sobre su identidad (9,18); la Transfiguración ocurre cuando Jesús está orando al Padre (9,29). Las instrucciones de Jesús sobre la oración son más frecuentes y extensas en el evangelio de Lucas que en los otros sinópticos: Lc 11,1-13; 18,1-14.
Antes de comenzar la actividad misionera la comunidad de fe se manifiesta en permanente actitud de oración, al igual que los líderes de la misma, Hechos 1,14.24-26; 8,15; 10,1-16.
Los marginados El Jesús lucano muestra una sensibilidad extraordinaria hacia la gente vulnerable o los marginados de la sociedad, por este motivo es recurrente las expresiones que afirman de Jesús que es amigo de los recolectores de impuestos y pecadores (7,34). Por este motivo es criticado por los escribas y fariseos quienes lo llaman "glotón y bebedor", ya que Jesús rehúsa hacer distinción entre los invitados a la mesa (7,29-34; 15,1-2).
Lc 6:20 / Mt 5:3
Bienaventurados ustedes los pobres, porque vuestro es el reino de Dios.
Bienaventurados los pobres en espíritu, pues de ellos es el reino de los cielos.
Dimensión universal de la fe La fe cristiana no puede ser limitada a un grupo de hebreos creyentes. Es un mensaje que por su propia naturaleza debe expandirse hasta los confines de la tierra.
El mensaje lucano ya desde el inicio anuncia que el mensaje cristiano ilumina a todas las naciones (Lc 2,32)
La genealogía (Lc 3,23-38)
"recibiréis poder cuando el Espíritu Santo venga sobre vosotros; y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra" (Hechos 1,8).