Hoja informativa
Nº 59- noviembre de 2018
La levadura
«El Reino de los Cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer y la metió en tres medidas de harina, hasta que fermentó todo.»
29 N Día internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino
El 29 de noviembre se celebra el Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino. Es un día importante para ellos/as porque esa fecha se aprobó en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) un Estado judío y un Estado árabe, mediante la Resolución 181. Pese a ser tierra sagrada para las tres principales religiones monoteístas (musulmanes, judíos y cristianos), vemos cada día cómo los derechos humanos son quebrantados, la legitimidad de todo un pueblo es negada y la ley internacional es transgredida sistemáticamente. Entristece comprobar cómo el lugar donde brotaron las palabras paz, perdón, amor, esperanza, justicia y misericordia, sea uno de los rincones más violentos del planeta. La comunidad cristiana palestina nos ha hecho llegar su clamor desde la situación verdaderamente dramática que viven en su tierra. Desde el conocimiento cercano que tenemos de esta situación, en Cáritas Española y las Cáritas Diocesanas de Valencia, Alicante y Castellón, realizamos desde hace años un modesto acompañamiento a Cáritas Jerusalén. Esta solidaridad se concreta con el programa "Iniciativa por la Paz" en el que se realizan principalmente las siguientes acciones: 1) Información y seguimiento del conflicto y de los signos de esperanza; 2) anuncio y denuncia profética; 3) peregrinaciones solidarias; 4) implicación de voluntariado; 5) comercio solidario, y 6) proyectos de desarrollo.
En el texto se expresa como la comunidad cristiana de Palestina hace una lectura creyente de la presencia de Dios “acampado” entre ellos, compartiendo sus gozos y sombras. A la vez, se sienten parte de un pueblo oprimido, heredero de aquél que vivió la experiencia de la liberación y, sintiendo la amenaza de un nuevo éxodo –éste de su propia tierra. Además, manifiestan su firme voluntad de permanecer en paz en la Tierra de Jesús.
De otra parte, la voz de los cristianos de Tierra Santa, muchas veces silenciada en los medios, se expresa con claridad y esperanza profética en el documento "Kairós Palestina. Un momento de verdad". Este documento surge en diciembre de 2009, en un momento en que muchos palestinos y palestinas creen encontrarse ante un callejón sin salida tras décadas de conflicto y conversaciones de paz infructuosas. En la letra y el espíritu de este texto impresiona comprobar cómo en la tierra en la que vivió Jesús, en esa Tierra Santa, en la que el mismo Dios se encarnó, los cristianos, en medio del dolor y la permanente humillación, mantienen viva la llama de la fe, la esperanza y el amor. En el documento, altos representantes de las principales Iglesias cristianas piden con urgencia la paz y el final de la ocupación de Palestina por Israel a líderes religiosos judíos y musulmanes, al pueblo palestino e israelí, a la comunidad internacional, a las Iglesias del mundo y a nosotros, sus hermanos en la fe.
La fe les lleva a vivir en esperanza. Por eso mantienen una actitud pacífica de resistencia que afirma la dignidad humana ante los intentos de humillación; contra toda esperanza mantienen una actitud profética y se dirigen a la comunidad internacional, a los estados y gobernantes, a las religiones –también a nosotros– siendo testigos de un Dios de Vida y haciendo una llamada ecuménica a la reconciliación y la paz. Dios escuchó el clamor de su pueblo, se conmovió ante él y actuó. Así manifestó sus entrañas de misericordia (Ex 3, 7-9). Escuchemos nosotros este nuevo clamor que nos lleve a conmovernos y actuar. Que su voz llegue a nuestra Iglesia, a nuestras diócesis, parroquias y foros sociales, y así experimenten estos hermanos nuestra cercanía y ayuda misericordiosa. En este mes de noviembre reafirmemos nuestro compromiso por la paz con justicia entre Palestina e Israel.
La cita “Amar es ver el rostro de Dios en cada persona humana. Cada persona es mi hermano o mi hermana. No obstante, ver el rostro de Dios en todas las personas no significa aceptar el mal o la opresión de su parte. El amor consiste más bien en corregir el mal y frenar la agresión”.
Documento Kairós Palestina.
Testimonio, en primera persona
La voluntaria de Cáritas Lucía Castelló ha participado este verano en un campo de trabajo que Cáritas Española y algunas Cáritas Diocesanas del Estado y Cáritas Jerusalén realizan en Palestina en el marco de su trabajo en la denominada "Iniciativa por la Paz". Estos son algunos de los párrafos en los que ha sintetizado su experiencia en Tierra Santa. He estado reflexionando mucho en todo lo vivido en el campo de trabajo durante estos días. Mis sentimientos al volver eran una mezcla de tristeza y alegría, como un sentimiento agridulce. Tristeza por la realidad que se está viviendo y alegría por haber tenido la oportunidad de conocer un grupo de personas maravilloso, y una cultura que desconocía totalmente. Cuando llegué a la familia me acogieron con alegría, me ofrecieron todas las cosas que pensaban que podía necesitar o querer, comida, agua, sentarme, dormir, ducharme… Me sorprendió su hospitalidad y la forma tan familiar de hacer las cosas. A medida que pasaban los días y convivía más con ellos, podía ver cómo la familia para ellos era una unión muy fuerte, y también una manera de demostrar el amor. Esta unión tan fuerte fue una de los aspectos de su cultura que más me llamo la atención. Muchos de los ciudadanos israelís no son conscientes de lo que realmente se está llevando a cabo en nombre de su país, y en el suyo propio. Pero hay una gran parte de ellos que sabe perfectamente cómo se está oprimiendo a los palestinos y lo apoyan y defienden. En la actualidad, y estudiando el pasado, nos podemos dar cuenta de lo fácil que es manipular a toda una nación para que esté en contra de otra, que la vea como su "enemiga", una amenaza y que incluso llegue a sentir odio hacia todos los que forman parte del "enemigo". Y cuando pienso en ese aspecto de la sociedad, me doy cuenta de que muchos de los países que hoy en día son llamados de una forma, en un pasado fueron otros los ciudadanos, con otras costumbres, otra cultura e incluso otro idioma, muchos fueron conquistados tal como ahora se está conquistando Palestina. Cuando esto lo leemos en libros de historia, lo leemos como lo que es, historia. Nunca había llegado a empatizar y conocer el sufrimiento que realmente conlleva. El haber vivido esta experiencia me ha hecho ser consciente y, sobre todo, me ha hecho empatizar y me ha mostrado la forma en la que nos llega la información de este tipo de realidades. Y espero que Palestina no se convierta en historia nunca, pienso que el que se haya estado haciendo este tipo de masacres durante siglos no es excusa para seguir haciéndolas. A mi parecer, Palestina es un país muy rico en cultura y tradiciones, que son muy diferentes a las nuestras, y que a mí personalmente me cuesta entender, pero son suyas y es por eso que son tan bonitas. Por otra parte, la convivencia de religiones que está establecida allí es un privilegio, el poder respetar y ser respetado. Espero con todo mi corazón que eso no desaparezca a pesar de la minoría que pueda haber de una religión u otra. Ahora les une una causa y un sufrimiento, pero yo pienso que si algún día acaba todo este conflicto podrán llegar a convivir con el mismo respeto o más con el que están conviviendo ahora. Personalmente, ha sido duro para mi vivir esta experiencia, pero hubiera sido más duro no haber tenido la oportunidad de haberla vivido. Me causa mucho dolor la situación y me preocupa cómo pueda avanzar, pero se compensa por todo lo que me ha aportado estar viviendo allí durante un periodo corto, conociendo una cultura muy bonita, sintiendo el calor de una familia muy acogedora y abriendo los ojos a una realidad tan mal conocida. Lucía Castelló
Per a llegir i meditar
El documento "Kairos Palestina" está dividido en tres partes; una primera en la que se analiza la situación en la que vive el pueblo palestino por la ocupación israelí, la segunda en la que dan testimonio de su esperanza y una tercera parte donde ofrecen soluciones para llegar a una paz justa y duradera entre las dos naciones. Para cada uno de los tres apartados, se proponen textos y preguntas que ayuden a la reflexión. Te invitamos a trabajar este documento con tu comunidad.
Redacción y coordinación: Equipos de Cooperación Fraterna de Cáritas Comunidad Valenciana.