Apuntes sobre Isaías, pág. 58
ISAÍAS: Notas expositivas, 03 Por Gary Williams Usado con permiso
ISAÍAS: Notas expositivas, 03 B. Yahvé restaurará a su pueblo en Judá y Jerusalén (49:1-55:13) Los temas de estos capítulos son semejantes a los temas de los capítulos 40-48, pero ahora serán desarrollados más. En los capítulos 40-48 la obra de Yahvé a favor de Judá que más se recalca es la liberación de Babilonia; ahora se pondrá más énfasis en el paso siguiente, la restauración en la tierra prometida y la ciudad santa. En los capítulos 40-48 se introdujo la obra del siervo de Yahvé; ahora la revelación sobre el siervo se ampliará y se avanzará bastante. 1. Yahvé pondrá a su siervo para restaurar a Israel y salvar a las naciones (49:1-13). Los estudiosos modernos identifican este pasaje como el segundo de los cuatro “cánticos del Siervo” (ver nota sobre 42:1-7). 1.1. Israel anuncia a las naciones que Yahvé lo ha llamado, capacitado y protegido para ser su siervo quien lo glorificará (49:1-3). 1.2. El siervo relata a las naciones que no tuvo éxito en su misión, pero confiaba que Yahvé le recompensaría (49:4). 1.3. El siervo relata a las naciones que Yahvé le ha revelado que además de cumplir con su misión inicial de restaurar a Israel, también sería salvación para todas las naciones (49:5-6). 1.3.1. Parece contradictorio que el siervo se llame Israel (v. 3) y que su misión incluya restaurar a Israel (vss. 5-6). Aparentemente toda la nación fue llamada a ser siervo de Yahvé (cp. también 41:8), pero el mismo siervo necesitaba ser salvo por otro siervo (cp. 42:19-22), quien a la vez pertenece al primer siervo. Es decir, el siervo que es llamado a restaurar al siervo Israel será israelita. 1.3.2. El que Yahvé pondrá al siervo por “luz de las naciones” (49:6) sugiere que se trata del mismo siervo de Yahvé presentado en 42:1-7 (cp. 42:6). Ese siervo parecía ser un rey, aunque también podría ser un maestro o profeta. El pasaje aquí parece sugerir más la idea de un maestro o profeta. 1.4. En el tiempo planificado por Yahvé, él usará a su siervo despreciado de manera asombrosa para librar a Israel del cautiverio y llevarlos de regreso a su tierra (49:7-12). 1.4.1. Después que el siervo de Yahvé ha sido despreciado por tiranos, Yahvé obrará por medio de él de tal forma que los reyes se postrarán ante el siervo (49:7). 1.4.1.1. El verbo traducido “adorarán” es literalmente “se postrarán” (cp. BJ, RVA, DHH), aunque también puede significar “adorarán” Este versículo no dice que los reyes se postrarán ante Yahvé, sino ante el siervo, por causa de Yahvé. 1.4.1.2. En lugar de “las naciones”, tradúzcase “una nación” (de las versiones que he consultado, la única que traduce en singular es BDLA, la cual, sin embargo, traduce “la nación”, agregando un artículo que no está en el hebreo). Si el abominado por una nación es Israel, la nación abominadora sería Babilonia. Si el abominado es el siervo salvador (cp. v. 4), la nación abominadora podría ser Israel mismo. Como los versículos 4-6 y 8-9 se dirigen al siervo salvador, probablemente el v. 7 también se dirige a él. Por otro lado, como el siervo salvador es también Israel (cp. v. 3), es probable que la nación de Israel también será despreciada y luego exaltada por los reyes (cp. v. 23). 1.4.2. En el momento planificado por Yahvé, él responderá al clamor del siervo usándolo para librar a Israel del cautiverio y restaurarlo en su tierra (49:8-9a). El
Apuntes sobre Isaías, pág. 59
que Yahvé dará al siervo “por pacto al pueblo” confirma que se trata del mismo siervo presentado en 42:1-7 (cp. 42:6). El siervo será el medio para que Yahvé cumpla con Israel el pacto Abrahámico, específicamente con respecto a la tierra prometida. 1.4.3. Yahvé cuidará a Israel en su regreso a su tierra (42:9b-12). Regresarán no solo de Babilonia en el oriente, sino de todas partes (49:12). Probablemente “la tierra de Sinim” era la región que hoy se llama Asuán, en el sur de Egipto. 1.4.4. Isaías llama a toda la creación a regocijarse porque Yahvé restaurará a su pueblo (49:13). 2. Yahvé asegura a Jerusalén que volverá a ser gloriosamente habitada por sus hijos (49:1426). 2.1. Yahvé asegura al desanimado Sión que jamás se ha olvidado de él y jamás lo hará (49:14-16). Sión, el cerro en el noreste de Jerusalén donde estaba el templo y el palacio real, aquí, como frecuentemente en la Biblia, representa toda la ciudad de Jerusalén (cp. v. 16). Durante el cautiverio babilónico, Jerusalén quedó bastante despoblada, y el templo y el palacio en ruinas. 2.2. Yahvé asegura a Jerusalén que sus asoladores se alejarán de ella, y sus constructores y sus moradores la llenarían gloriosamente (49:17-20). En lugar de “hijos de tu orfandad” (49:20), tradúzcase “los hijos de los cuales fuiste privada” (BJ, RVA; cp. DHH). 2.3. La Jerusalén estéril preguntará de dónde vinieron sus hijos (49:21). En lugar de “estaba sola, peregrina y desterrada”, tradúzcase “estaba estéril, desterrada y apartada” (cp. BJ, RVA, DHH). 2.4. Yahvé responde que él haría lo imposible, librando a los hijos de Jerusalén cautivos de los tiranos y destruyendo a los mismo tiranos, así glorificándose a sí mismo ante toda la humanidad (49:22-26). 2.4.1. Yahvé haría que las naciones y sus reyes cariñosa y humildemente trajeran a los judíos de regreso a Jerusalén (49:22-23a). Así se cumpliría en parte la promesa al siervo de Yahvé en el v. 7. 2.4.2. Yahvé haría lo imposible, rescatando a los hijos de Jerusalén de naciones muy poderosas (49:24-25). 2.4.3. Yahvé haría que las naciones opresoras de Jerusalén se destruyeran a sí mismas (49:26a). 2.4.4. Como resultado de estas proezas de Yahvé, él sería glorificado (49:23b, 26b). 3. Yahvé asegura a los hijos de Jerusalén que pueden ser salvos, pero solo si imitan al siervo, sometiéndose en fe a Yahvé (50:1-11). 3.1. Yahvé entra en disputa con los hijos de Jerusalén (50:1-3). Estos versículos encierran varios problemas de interpretación. A continuación explico lo que pienso que significan. 3.1.1. Yahvé asegura a los hijos de Jerusalén que él no ha consumado el trámite de divorcio de su madre, ni fue incapaz de evitar el cautiverio de sus hijos, sino que los ha vendido al cautiverio por sus pecados, y ha despedido temporalmente a Jerusalén también por los pecados de sus hijos (50:1). 3.1.2. Yahvé acusa a los hijos de Jerusalén de no confiar en su poder para librarlos y restaurar a su madre (50:2a). 3.1.3. Yahvé asegura a los hijos de Jerusalén que él es poderoso para castigar aún los más poderosos y prósperos (50:2b-3). Parece que la implicación es que también puede revertir el castigo (cp. Sal. 107:33-38).
Apuntes sobre Isaías, pág. 60
3.2. Los hijos de Jerusalén deben imitar el ejemplo del siervo sufriente de Yahvé (50:4-11). Los estudiosos modernos identifican este pasaje como el tercero de los cuatro “cánticos del Siervo” (ver nota sobre 42:1-7). 3.2.1. El siervo de Yahvé anuncia que él se ha sometido a Yahvé como discípulo, y así ha aprendido a aguantar el castigo público, confiando que Yahvé lo reivindicará como justo (50:4-9). 3.2.1.1. El siervo de Yahvé se ha sometido a Yahvé como discípulo, y así ha aprendido un mensaje de aliento para los cansados (50:4). 3.2.1.1.1. En lugar de “sabios”, tradúzcase “discípulos” (cp. BJ). 3.2.1.1.2. La repetición del título “el Señor” (vss. 4, 5, 7, 9) sugiere que quien habla aquí es el siervo de Yahvé. Esa posibilidad se confirmará en el v. 10. 3.2.1.2. Ese mensaje de aliento es que el siervo ha aprendido a aguantar el castigo público, confiando que Yahvé lo reivindicará como justo (50:5-9). 3.2.2. Yahvé exhorta a los hijos de Jerusalén a que en su sufrimiento imiten el ejemplo del siervo de Yahvé (50:10). 3.2.3. Yahvé advierte a los hijos de Jerusalén que si en su sufrimiento no confíen en él, sino en sus propias ideas, morirán en angustia (50:11). 4. Yahvé consuela al remanente justo y a Sión con promesas de liberación y restauración (51:1-52:12). 4.1. Yahvé consuela al remanente justo con promesas de liberación y restauración (51:116). 4.1.1. Yahvé anima al remanente justo a recordar que él multiplicó a Abraham y Sara, y les promete que de semejante manera hará florecer de nuevo a Jerusalén (51:13). 4.1.2. Yahvé promete al remanente justo que pronto establecerá su gobierno justo sobre las naciones y salvará a los justos perseguidos (51:4-8). 4.1.2.1. Promete que pronto establecerá su gobierno justo sobre las naciones (51:4-5). 4.1.2.2. Asegura a los justos injuriados que las promesas de salvarlos y establecer su gobierno justo son seguras, y que desaparecerán aquellos que los injurian (51:6-8). 4.1.3. El profeta (o el remanente justo) pide a Yahvé obrar proezas a favor de su pueblo así como hizo en el éxodo y en el Mar Rojo, y luego expresa su confianza que Yahvé volverá a redimir a su pueblo y los llevará de regreso a Sión, donde disfrutarán gran gozo (51:9-11). Rahab (51:9) era un monstruo marino mitológico. Aquí puede representar a Egipto (cp. la nota sobre 30:7) o al Mar Rojo (cp. 51:10). 4.1.4. Yahvé anima al remanente justo a no temer a los perseguidores, sino a confiar en el poder divino y en las promesas divinas de liberación de la prisión, protección y bendición para Jerusalén (51:12-16). 4.1.4.1. Les anima a no temer a los perseguidores, sino a confiar en el poder divino (51:12-13). 4.1.4.2. Les promete librar a los presos (51:14). 4.1.4.3. Les promete usar su gran poder para protegerlos y restaurar a Jerusalén como capital de su pueblo (51:15-16).
Apuntes sobre Isaías, pág. 61
4.2. Yahvé consuela a Jerusalén con promesas de liberación y restauración (51:17-52:12). Las tres divisiones principales de esta porción del libro son marcadas por imperativos dobles dirigidos a Jerusalén al principio de 51:17; 52:1, 11. 4.2.1. Yahvé anima a Jerusalén con la noticia que ha quitado de su mano el cáliz de la ira divina y lo pondrá en la mano de sus opresores (51:17-23). 4.2.1.1. Yahvé llama a Jerusalén a animarse (51:17a). Los imperativos “despierta, despierta” son una respuesta de Yahvé a los mismos imperativos dirigidos a él en el v. 9. 4.2.1.2. Jerusalén ha bebido toda la copa de la ira de Yahvé (51:17). 4.2.1.3. A consecuencia de haber bebido la ira de Yahvé, Jerusalén ha quedado sin hijos (51:18-20). 4.2.1.3.1. Los hijos de Jerusalén son sus habitantes. 4.2.1.3.2. Jerusalén había sufrido dos cosas: destrucción de las construcciones y la muerte de sus habitantes por hambre y la espada (51:19-20). Esto sucedió durante el sitio y destrucción de Jerusalén por los babilonios en 587-586 a.C., casi 100 años después de la muerte de Isaías. 4.2.1.4. Yahvé ha quitado el cáliz de su ira de la mano de Jerusalén (51:21-22). 4.2.1.5. Yahvé pondrá el cáliz de su ira en la mano de los opresores de Jerusalén (51:23). 4.2.2. Yahvé anima a Jerusalén con la noticia que librará a su pueblo cautivo (52:1-10). 4.2.2.1. Yahvé llama a Israel a animarse y vestirse para una celebración (52:1a). En 51:9 el profeta (o el remanente justo) clama a Yahvé: “Despiértate, despiértate, vístete de poder”. Ahora él responde a Jerusalén con casi las mismas palabras, aunque él dice “tu poder” (así el hebreo, cp. BJ, BDLA, RVA). 4.2.2.2. Yahvé promete que los paganos no volverán a conquistar la ciudad santa (52:1b). En lugar de “vendrá a ti”, tradúzcase “entrará en ti” (cp. BJ, DHH, BDLA, RVA, NVI). 4.2.2.3. Yahvé promete rescatar a su pueblo del cautiverio (52:2-6). 4.2.2.3.1. Yahvé llama a Jerusalén a salir de su opresión (52:2a; cp. 51:23b) y de su cautiverio (52:2b). 4.2.2.3.2. Como Yahvé había vendido a Jerusalén a los babilonios sin cobrarles nada, ahora los judíos serían librados sin tener que pagar ningún rescate (52:3). Acerca del pago de rescates para librar a cautivos, cp. Nehemías 5:8. 4.2.2.3.3. Yahvé libraría a su pueblo así como lo había librado de Egipto y de Asiria (52:4). En lugar de “el asirio lo cautivó”, tradúzcase “Asiria lo oprimió” (cp. BJ, DHH, RVA). El versículo no menciona la liberación, sino que da por sentado que los lectores sabrán de la famosa liberación de Egipto y también de la destrucción del ejército de Senaquerib por el ángel de Yahvé que sirvió para librar a Jerusalén de Asiria (cp. los caps. 36-37, y esp. 37:36-37). 4.2.2.3.4. Yahvé rescatará a Judá del cautiverio babilónico motivado por la injusticia que sufre su pueblo y por el daño que sufre su reputación (52:5-6).
Apuntes sobre Isaías, pág. 62
4.2.2.4. Jerusalén se regocijará al recibir la noticia que Yahvé ha iniciado su reinado (52:7-10). 4.2.2.4.1. Los mensajeros correrán sobre la región montañosa alrededor de Jerusalén para traer a la ciudad la noticia grata que Yahvé ha comenzado a reinar (52:7). Aparentemente la liberación de Judá del cautiverio marca el inicio del reinado de Yahvé. 4.2.2.4.2. Los centinelas de Jerusalén con regocijo anunciarán que ven a Yahvé regresando a reinar en Sión (52:8; cp. 40:3-5). En lugar de “que Yahvé vuelve a traer a Sión”, tradúzcase “cuando Yahvé vuelva a Sión” (cp. RVA, BJ, DHH). 4.2.2.4.3. Se exhorta a las ruinas despobladas de Jerusalén a regocijarse porque Yahvé ha redimido a la ciudad y su pueblo (52:9). 4.2.2.5. Todas las naciones verán la obra impresionante de Yahvé para salvar a su pueblo del cautiverio (52:10). 4.2.3. Yahvé llama a los judíos a salir de Babilonia y llevar en procesión los utensilios del templo de regreso a Jerusalén (52:11-12). 4.2.3.1. Los llama a salir de Babilonia (52:11a; cp. 48:20). 4.2.3.2. En contraste con el éxodo de Egipto, no deben llevar los tesoros de los babilonios (cp. Ex. 11:2; 12:35-36), pues estos los contaminarán ceremonialmente (52:11a). 4.2.3.3. Tienen que evitar la contaminación para poder llevar los utensilios del templo de regreso a Jerusalén (52:11b). 4.2.3.4. A diferencia del éxodo de Egipto, no saldrán apresurados y huyendo (52:12a; cp. Ex. 12:11, 33-34; 14:5; Dt. 16:3). 4.2.3.5. Saldrán protegidos por Yahvé desde adelante y atrás (52:12b; para el paralelo en el éxodo de Egipto, cp. Ex. 14:19). La expresión traducida “os congregará” es un modismo que significa “será vuestra retaguardia” (cp. BJ, DHH, RVA, RV95 y la traducción de la misma expresión hebrea en el RV60 en Nm. 10:25; Jos. 6:9, 13). 5. El siervo de Yahvé, después de sufrir y morir, triunfará (52:13-53:12). Los estudiosos modernos identifican este pasaje como el último de los cuatro “cánticos del Siervo” (ver nota sobre 42:1-7). Es una de las profecías mesiánicas más importantes y más citadas, si no la más importante y más citada, en el Nuevo Testamento. Tiene una estructura de A (52:13-15) B (53:1-10) A (53:11-12): en 52:13-15 y 53:11-12 habla Yahvé, quien pone más énfasis en la exaltación del siervo, y en 53:1-10 habla el remanente convertido de Israel, poniendo más énfasis en el sufrimiento del siervo. 5.1. Yahvé anuncia que su siervo será prosperado y exaltado después de haber sido horriblemente desfigurado (52:13-15). Estos versículos resumen el mensaje que se expondrá desde otra perspectiva en el capítulo 53. 5.1.1. El siervo será prosperado y, como consecuencia, exaltado (52:13). La frase traducida “será engrandecido y exaltado” ya se ha usado de Yahvé en 6:1, donde está traducida “alto y sublime”. 5.1.2. Antes que el siervo sea exaltado, muchos se asombrarán de la desfiguración que habrá sufrido (52:14). Después de la palabra “muchos” se debe traducir más o menos como BJ: “pues tan desfigurado tenía el aspecto que no parecía hombre, ni su apariencia era humana” (cp. DHH, RV95). A la luz de 50:6 es natural suponer que la desfiguración fue resultado del castigo público que el siervo recibió.
Apuntes sobre Isaías, pág. 63
5.1.3. Luego hasta los reyes por respeto cerrarán la boca ante él al ver y entender cosas totalmente nuevas (52:15). Estas cosas nuevas se expondrán en 53:4-12. En Romanos 15:21 Pablo aplica la profecía sobre las nuevas cosas a su predicación del evangelio entre pueblos no alcanzados. 5.2. El remanente convertido de Israel recuerda el sufrimiento y muerte del siervo y afirma su confianza que el siervo será exaltado (53:1-11a). 5.2.1. El remanente recuerda su incredulidad frente al mensaje anunciado a ellos acerca del siervo (53:1). 5.2.1.1. Como se verá a continuación, quienes hablan en 53:1-10 son personas que despreciaban al siervo y no entendían lo que Yahvé hacía por medio de él, pero ahora sí lo entienden. Han de ser el remanente convertido de Israel. En los vss. 4 y 6 dicen que el siervo sufrió por “nuestros” pecados, y en el v. 8 uno de ellos, tal vez Isaías, dice que el siervo murió por los pecados de “mi pueblo”. De manera que quienes hablan en los vss. 1-6 han de pertenecer al pueblo de Isaías, o sea, a Israel. 5.2.1.2. La frase traducida “nuestro anuncio” puede significar “lo que anunciamos” o “lo que nos fue anunciado”. A la luz de los versículos siguientes, la segunda interpretación ha de ser la correcta aquí (cp. DHH). Israel no creyó lo que les fue anunciado acerca del siervo, porque Yahvé no había abierto sus ojos para ver que el brazo divino obraba a través del siervo. 5.2.1.3. Según Juan 12:38, Isaías 53:1 tiene un cumplimiento en la predicación y milagros de Jesús que no fueron creídos por los judíos, y en Romanos 10:16 Pablo interpreta Isaías 53:1a con referencia a los judíos que no creyeron la predicación de Isaías y de los predicadores cristianos. 5.2.2. El remanente recuerda que despreciaban al siervo (53:2-3). 5.2.2.1. Todos los verbos en estos dos versículos deben traducirse en tiempo pasado (cp. BJ, DHH). No es que estos eventos hubieran sucedido para los tiempos de Isaías, sino que, bajo inspiración divina, Isaías habla desde la perspectiva de un futuro posterior al sufrimiento y muerte del siervo. 5.2.2.2. En términos naturales, el siervo no tenía nada de atractivo para que fuera apreciado (53:2). 5.2.2.3. El remanente, como los demás seres humanos, despreciaron al siervo debido a sus sufrimientos (53:3). El vocablo traducido “quebranto” es literalmente “enfermedad”, pero también se usa metafóricamente del sufrimiento en general (cp. Jer. 10:19, donde está traducido “enfermedad”, pero obviamente en sentido metafórico). 5.2.3. El remanente recuerda que no se daban cuenta que el siervo sufrió no por sus propios pecados, sino vicariamente por los pecados de ellos (53:4-6). 5.2.3.1. El remanente suponía que lo que el siervo sufrió fue castigo divino (53:4b). Compartían la idea de muchos en Israel de que Dios siempre prospera a los justos y castiga a los impíos. 5.2.3.2. Ahora el remanente se da cuenta que en realidad lo que el siervo sufrió fue castigo divino por los pecados de ellos (53:4a, 5-6). 5.2.3.3. Ahora el remanente se da cuenta que el sufrimiento del siervo fue el medio para salvarlos de sus pecados (53:5b). “Castigo de nuestra paz” aquí significa “castigo que nos trajo paz” (cp. BJ, DHH, BDLA, RVA, RV95, NVI). El vocablo traducido “paz” es, como casi siempre, shalom “bienestar completo”. 5.2.3.4. Las enfermedades mencionadas en v. 4a son el sufrimiento del castigo que merecemos por nuestro pecado. El remanente reconoce que de ese
Apuntes sobre Isaías, pág. 64
sufrimiento y del pecado causante fueron curados por el sufrimiento del siervo. Si bien Mateo 8:17 afirma que el v. 4a se cumplió en la sanidad de enfermos por Jesús, Mateo no relaciona esa sanidad ni este pasaje con la muerte de Cristo, sino con su ministerio terrenal de echar fuera demonios y sanar a enfermos. En cambio, Pedro, al hablar de la sanidad que Jesús efectuó mediante su muerte, la interpreta como una sanidad espiritual, de pecados (1 P. 2:24). No hay ningún pasaje bíblico que enseñe que la muerte de Cristo provee sanidad física ahora a los que creen en él, si bien lo hará cuando los creyentes sean glorificados (1 Co. 15:52-53) y cuando Dios more con los seres humanos en la nueva tierra (Ap. 21:4). 5.2.3.5. El sufrimiento del siervo se describe en los vss. 3-5 como una enfermedad y también como una violencia física. Algunos estudiosos consideran que el sufrimiento es una enfermedad (los términos hebreos sugieren la lepra), y que las referencias a la violencia deben ser tomadas metafóricamente. Sin embargo, a la luz de 50:6, parece mejor interpretar que el sufrimiento fue por violencia, y que las referencias a la enfermedad son las que se deben tomar metafóricamente. 5.2.4. El remanente recuerda que el siervo sufrió sin oponerse resistencia (53:7). 5.2.4.1. El v. 6 compara a los israelitas a las ovejas: se descarriaron. El v. 7 ahora compara al siervo a las ovejas, pero en otro aspecto: él no opuso resistencia a la violencia que sufrió. 5.2.4.2. Los vss. 7-8 fueron el punto de partida para que Felipe expusiera el evangelio de Jesús al eunuco etíope (cp. Hechos 8:32-35). 5.2.5. El remanente (o el profeta) recuerda que el siervo murió, y fue por los pecados de su pueblo (53:8). La segunda mitad de este versículo es clara, pero el hebreo de la primera mitad es bastante oscuro. 5.2.5.1. La primera oración del v. 8 ha sido interpretada de muchas maneras: 5.2.5.1.1. Sin oposición y sin derecho fue ejecutado (cp. DHH). 5.2.5.1.2. Por medio de opresión y juicio fue ejecutado (cp. RVA, RV95). 5.2.5.1.3. De opresión y juicio fue quitado (es decir, librado mediante la muerte). 5.2.5.1.4. De la cárcel y del tribunal fue llevado (para ser ejecutado) (cp. BJ, NVI). 5.2.5.1.5. Sugiero una interpretación más, la cual no he visto en ninguna fuente: Por causa de la opresión (cometido por Israel) y el juicio (merecido por Israel) fue ejecutado (por Dios). Esta interpretación se basa principalmente en el paralelismo con la última oración del versículo. De hecho, las expresiones que aquí he traducido “por causa de la opresión” y “por causa del juicio” tienen la misma preposición hebrea que la frase traducida “por la rebelión” al final del versículo. 5.2.5.2. La segunda oración del v. 8 tampoco es muy clara. El verbo traducido “contará” probablemente significa más bien “considerará”. Es dudoso que “generación” puede ser el complemento directo del verbo. El vocablo “generación” nunca significa “descendencia”. Posiblemente se debe traducir: “Y de su generación, ¿quién considera (el significado de la muerte del siervo)?” (cp. BJ, DHH, BDLA, y ver vss. 3-4). 5.2.6. El remanente recuerda que el siervo fue asignado sepultura entre los malvados aunque fue inocente (53:9).
Apuntes sobre Isaías, pág. 65
5.2.6.1. En este versículo hay dudas sobre el texto traducido “mas con los ricos fue en su muerte”. El manuscrito 1QIsa hallado en Qumrán tal vez indique que en lugar de “en su muerte” se debe leer “su tumba” (BJ, cp. DHH), posibilidad que es apoyada por el paralelismo con “su sepultura”. En tal caso, probablemente “los ricos” debe entenderse como una referencia a los opresores. Todavía otra posibilidad, aunque más especulativa, es que el texto hebreo originalmente tenía “los hacedores de mal” en lugar de “los ricos” (cp. DHH y la nota en BJ); en el hebreo sin vocales (los manuscritos hebreos antiguos se escribieron sin vocales) la diferencia entre las dos lecturas es de solo una consonante. 5.2.6.2. En lugar de “nunca hizo maldad”, tradúzcase “no cometió violencia” (cp. RVA, BJ, DHH). El hebreo aquí y en la oración siguiente no significa que el siervo nunca pecó, sino que no cometió ningún delito. Por otro lado Pedro, al aplicar este texto a Jesús, utiliza la palabra “pecado” en lugar de “violencia” (cp. 1 Pedro 2:22). 5.2.7. El remanente expresa la confianza de que, habiendo muerto por los pecados de su pueblo conforme a la voluntad de Yahvé, el siervo tendrá descendencia, larga vida, éxito en la misión que Yahvé le ha encomendado y satisfacción (53:10-11a). 5.2.7.1. La misión que Yahvé ha encomendado al siervo es salvar a las naciones (cp. 49:6), establecer justicia en ellas (cp. 42:4) y hacer que Israel vuelva a Yahvé (cp. 49:5-6a). 5.2.7.2. Parece contradictorio que el siervo tendrá descendencia y larga vida después de su muerte a menos que ambas se entiendan metafóricamente o que se sobreentienda que el siervo va a ser resucitado después de su muerte. Aplicadas a Cristo, la promesa de descendencia ha de ser metafórica, pero la de larga vida se cumple literalmente mediante la resurrección. 5.3. Yahvé promete que él recompensará a su siervo ricamente porque este murió como malvado para que muchos malvados fueran declarados inocentes (53:11b-12). En Lucas 22:37 Jesús predice que él cumplirá la profecía “fue contado con los pecadores”. 6. Yahvé restaurará a su abandonada esposa, Israel (54:1-17). 6.1. Yahvé llama a Israel, la esposa sin hijos, a regocijarse porque tendrá muchísimo prole (54:1-3). 6.2. Yahvé restaurará permanentemente a Israel, la esposa que él había abandonado por un corto tiempo (54:4-10). 6.2.1. Restaurada por Yahvé, Israel no volvería a sufrir la vergüenza por los pecados de su juventud, ni la vergüenza por el castigo de viudez con que Yahvé le afligió (54:4-7). 6.2.2. El abandono fue por poco tiempo, pero la restauración será para siempre (54:810). En lugar de “con misericordia” (54:8) y “mi misericordia” (54:10), tradúzcase mejor “con fidelidad” y “mi fidelidad” (ninguna de las versiones que he consultado traducen así, pero el vocablo es jésed). En cambio en la última oración del v. 10 se usa el verbo rajam, que en efecto significa “tener misericordia” o “tener compasión” (así está traducido en v. 8; es el mismo verbo usado en el nombre Lo-rujama [escrito “Lo-ruhama” en RV60] en Os. 1:6). Yahvé tendrá misericordia (rajam) de Israel, y mantendrá esa misericordia eternamente debido a su fidelidad (jésed) a su pacto con su pueblo (54:10). Esa fidelidad es más firme que aun los montes (54:10). 6.3. Yahvé establecerá la afligida Israel en seguridad y justicia (54:11-17). 6.3.1. Establecerá a Israel como una ciudad construida de piedras preciosas (54:11-12). La figura puede indicar que “la pobrecita” a quien Yahvé se dirige aquí es específicamente Jerusalén. Por otro lado, el vocablo traducido “muralla” (54:12)
Apuntes sobre Isaías, pág. 66
es literalmente “frontera” (cp. BJ “término”) o “territorio”; se usa normalmente de una nación. De todas formas, la diferencia es poca, pues Jerusalén es la capital de Israel, y muchas veces se entiende como representante de la nación. 6.3.2. Israel será establecido en justicia y seguridad (54:13-14). En lugar de “adornada” (54:14), tradúzcase “establecida, afirmada” (cp. RVA, BJ, DHH). 6.3.3. Yahvé no permitirá prosperar ningún ataque contra Israel (54:15-17a). 6.3.3.1. Todo ataque contra Israel fracasará, pues no será enviado por Yahvé (54:15). En lugar de “conspirare”, tradúzcase “atacare” (cp. BJ, DHH, RVA). 6.3.3.2. Yahvé, el creador del herrero que forja el arma y del guerrero que la emplea para destruir, no permitirá que ninguna arma dañe a Israel (54:1617a). 6.3.3.3. Israel podrá refutar toda acusación presentada en su contra (54:17a). 6.3.4. Toda la justicia y seguridad que Israel disfruta será dada por Yahvé (54:17b). 7. Yahvé llama a Israel a volver a él en arrepentimiento para que él les cumpla las promesas del Pacto Davídico, liberación del cautiverio y prosperidad en su tierra (55:1-13). 7.1. Yahvé llama a Israel a venir a él en arrepentimiento para disfrutar de sus bendiciones y del cumplimiento del Pacto Davídico (55:1-7). Esta sección tiene una estructura de ABA: A (Yahvé llama a Israel a venir a él, 55:1-3a), B (Yahvé promete cumplir el pacto davídico, 55:3b-5), A (Isaías llama a Israel a buscar a Yahvé, 55:6-7). 7.1.1. Yahvé llama a Israel a acudir a él para recibir sus bendiciones gratuitas (55:1-3a). 7.1.2. Yahvé promete cumplir con Israel el pacto Davídico (55:3b-5). 7.1.2.1. El rey davídico prometido será testigo de las obras de Yahvé que demuestran que él es el único Dios verdadero (55:4a). De esta forma cumplirá con la tarea asignada a Israel (cp. 43:10-13). 7.1.2.2. El rey davídico prometido dominará a las naciones (55:4). En lugar de “maestro” (55:4), tradúzcase “mandante” o “mandatario” (cp. “jefe” en BDLA y NVI, y “soberano” en F. L. Moriarty, “Isaías”, en Juan Leal, ed., La Sagrada Escritura, vol. 5. 7.1.2.3. Cuando reine el rey prometido, las naciones llegarán a Jerusalén para adorar a Yahvé en el templo (55:5). 7.1.3. Isaías llama a los israelitas a buscar a Yahvé en arrepentimiento antes que sea demasiado tarde, para así recibir su perdón (55:6-7). 7.1.3.1. En este contexto, las frases “mientras puede ser hallado” y “en tanto que está cercano” (55:6) significan “antes que Yahvé ejecute su juicio”. 7.1.3.2. El v. 7a aclara que la invitación de venir a Yahvé en el v. 1 es un llamado al arrepentimiento (cp. también el v. 3). 7.2. Yahvé promete a Israel que indefectiblemente sus promesas de restauración se cumplirán (55:8-13). 7.2.1. Yahvé declara que sus planes son totalmente superiores a los de los seres humanos (55:8-9). Esta declaración tiene un doble significado. A la luz del contexto anterior, los pensamientos y planes de Yahvé son mucho más puros que los del hombre (cp. v. 8). A la luz del contexto siguiente, los planes de Yahvé son mucho más seguros que los del hombre (cp. vss. 10-11). 7.2.2. Yahvé declara que sus promesas indefectiblemente se cumplirán (55:10-11).
Apuntes sobre Isaías, pág. 67
7.2.2.1. La frase “mi palabra” se refiere en este contexto a las promesas de restauración expuestas a lo largo de Isaías 40-55. La afirmación que esa palabra de promesa se cumplirá hace eco de 40:8, y los dos pasajes similares forman una inclusión que enmarca los capítulos 40-55 como una unidad literaria. 7.2.2.2. Los evangélicos comúnmente interpretan 55:10-11 como una promesa de la eficacia del uso de las Escrituras en la evangelización. Sin embargo, este pasaje no habla de la evangelización, ni del poder de las Escrituras para convertir a la gente, sino de la seguridad del cumplimiento de las promesas de Yahvé. De hecho, sorprendería mucho que un profeta antiguotestamentario hablara del uso de las Escrituras en la tarea cristiana de evangelizar. Por otro lado, si bien es imprescindible utilizar las Escrituras al evangelizar, pues ellas registran el mensaje evangelizador y deseamos que la gente confíe en ellas, no en nuestra interpretación de ellas, se debe recordar que Jesús aclaró que la palabra de Dios muchas veces no produce fruto en la evangelización (cp. Lc. 8:5-15 y paralelos). 7.2.3. La liberación de Israel del cautiverio y su restauración con prosperidad en su tierra serán motivo de gran alegría para toda la creación y de gloria eterna para Yahvé (55:12-13). 7.2.3.1. La primera oración de 55:12 no se refiere a los que salen a evangelizar y luego regresan de esa tarea, sino a la salida del cautiverio y el retorno a la tierra prometida. 7.2.3.2. El regocijo de la naturaleza en 55:12b es metafórico, pero la fertilidad prometida en 55:13a ha de cumplirse literalmente en el Milenio. Para otras promesas de cambios radicales en la naturaleza, ver 11:6-8; 35:1-2; 41:1819; 44:3 (cp. Ro. 8:19-22). III. Profecías Escatológicas y Universalistas (56:1-66:24) En estos capítulos Isaías llama a Israel a arrepentirse y hacer justicia no solo frente al juicio y restauración inminentes de su pueblo, sino también ante el juicio y restauración escatológicas de todo el mundo. A. Yahvé llama a la justicia para recibir su salvación y señala el pecado de Judá como la causa de sus sufrimientos (56:1-59:21) 1. Yahvé anima a toda su comunidad a obedecerle, y particularmente a guardar el día de reposo, para participar en las bendiciones de su salvación (56:1-8). 1.1 Yahvé promete bendición en el tiempo de su salvación a los que lo obedecen (56:1-2). Esa obediencia debe manifestarse haciendo justicia (56:1), guardando el día de reposo y absteniéndose del mal (56:2). 1.2 A los extranjeros y eunucos que le obedecen Yahvé les promete que participarán en las bendiciones de su salvación (56:3-8). Esta estrofa tiene una estructura quiástica de ABBA: extranjeros (56:3a), eunucos (56:3b), eunucos (56:4-5), extranjeros (56:6-8). 1.2.1
Los prosélitos y eunucos no deben temer que Yahvé los excluya de las bendiciones de Israel en el tiempo de la restauración (56:3).
1.2.2
A los eunucos que lo obedecen Yahvé les promete que tendrán lugar en el templo y en Jerusalén y renombre perpetuo (56:4-5). 1.2.2.1 La obediencia a Yahvé incluye particularmente guardar los días de reposo y confiar en el pacto con Yahvé (56:4, 6). El que guardaba el día de reposo así daba evidencia que confiaba en las bendiciones
Apuntes sobre Isaías, pág. 68
del pacto, pues creía que Yahvé proveería por él aun cuando dejaba de trabajar un día por semana.
1.2.3
1.2.2.2
A los eunucos, excluidos de la congregación de Yahvé (cp. Dt. 23:1) Yahvé les promete un lugar en el templo y en Jerusalén (56:5a).
1.2.2.3
A los eunucos, que no tenían hijos para perpetuar su nombre (cp. 2 S. 18:18), Yahvé les promete renombre perpetuo (56:5b).
A los extranjeros que lo obedecen Yahvé les promete llevarlos a Sión donde lo podrán adorar mediante el culto en el templo (56:6-8). 1.2.3.1 Jesús citó la última oración del v. 7 cuando echó fuera del templo a los cambistas y los vendedores de animales (cp. Mr. 11:17 y paralelos). 1.2.3.2
2
Además de los israelitas, Yahvé reunirá a seguidores suyos de otros pueblos (56:8). La última oración del v. 8 se debe traducir: “Aun juntaré a otros además de sus reunidos”. Según algunos, los “otros” serán otros judíos desterrados, quizás fuera de Babilonia (cp. DHH), pero a la luz del v. 7 más bien han de ser personas de otras naciones.
Yahvé fustiga a los malvados e idólatras de Judá y amenaza castigarlos (56:9-57:21). Este mensaje tiene que ver con los pecados de Judá en los tiempos de Isaías. La idolatría no fue problema mayor para Judá después del Cautiverio Babilónico. 2.1 Yahvé llama a las naciones a devorar a Judá (56:9; cp. 5:5, 26-30). 2.2 Fustiga a los profetas que, en vez de advertir a Judá del mal que se acerca, dan mensajes populares de estabilidad y prosperidad (56:10-12; cp. Ez. 3:17-21; 13:10; 33:1-9). 2.3 Los habitantes de Judá no se dan cuenta que Yahvé recoge a los justos para que mueran en paz antes que venga la calamidad (57:1-2). El vocablo traducido “mueren” (57:1) es literalmente “son recogidos” y el vocablo traducido “es quitado” es “es recogido”. Como frecuentemente en la Biblia, aquí el agente de los verbos en voz pasiva ha de ser Dios. 2.4 Yahvé fustiga a los idólatras (57:3-13). 2.4.1
2.4.2
Yahvé tilda a los idólatras de ser hijos de hechicera, fornicarios, rebelión (o transgresión) y mentira (57:3-4). La implicación es que los idólatras son como sus padres. 2.4.1.1
Las frases traducidas “hijos rebeldes” y “generación mentirosa” (57:4) son literalmente “hijos de rebelión” (o “hijos de transgresión“, cp. BJ, DHH) y “simiente de mentira”.
2.4.1.2
Los idólatras, de ascendencia vergonzosa, se atrevían a mofarse de los justos que morían antes del tiempo (57:4a; cp. vss. 1-2).
Yahvé acusa a los idólatras de fornicar con sus dioses (57:5-10). Fornicaban porque abandonaban a su marido, Yahvé, para adorar a los dioses (cp. Oseas 1-3; Ezequiel 16 y 23). Que Judá aquí se presenta como una esposa infiel es claro en el hebreo, pues en los vss. 6-13 todas las formas que están en segunda persona singular (tú) están en el género femenino. Quizás la metáfora de la fornicación también implica que su adoración incluía la prostitución sagrada como rito de fertilidad. 2.4.2.1
Fornicaron con sus dioses debajo de los árboles (57:5a; cp. 1:29).
Apuntes sobre Isaías, pág. 69
2.4.2.2
Fornicaron con sus dioses en los arroyos (57:5b-6). En lugar de “valle”, tradúzcase “arroyo” (DHH; cp. BJ). En los arroyos sacrificaban sus hijos a los dioses paganos (57:5b).
2.4.2.3
Fornicaron con sus dioses en las cimas de los cerros (57:7).
2.4.3
2.4.2.4
Fornicaron con sus dioses en sus casas (57:8). En lugar de “dondequiera que la veías”, probablemente se debe traducir “viste su miembro viril” (cp. RVA y la nota de DHH).
2.4.2.5
Fornicaron con el dios Mélek “Rey” (57:9a). Este título fue aplicado a varios dioses semíticos (cp. BJ, DHH).
2.4.2.6
Enviaron embajadores lejos para buscar más dioses a quienes adorar (57:9b-10).
Yahvé señala a los idólatras que en vez de temer a los dioses paganos para prosperar, deberían haber temido a Yahvé (57:11-13). Temer a un dios significa no solamente tener miedo del mal que él puede hacer a quien no le agrada, sino también confiar que él puede dar bendición a quien sí le agrada.
2.5 Yahvé promete perdonar y restaurar a los abatidos de su pueblo (57:14-19). 2.5.1
Yahvé da la orden de allanar el camino para que su pueblo regrese a su tierra (57:14). En 40:3-5 se da la orden de allanar el camino para la venida de la gloria de Yahvé. Las dos venidas están relacionadas: la gloria de Yahvé se manifestará en el retorno de su pueblo.
2.5.2
Yahvé, el Dios altísimo, condesciende a socorrer a los más bajos (57:15; cp. Sal. 113:5-9).
2.5.3
Yahvé convertirá a los pecadores castigados de su pueblo, los perdonará y los restaurará en paz y prosperidad (57:16-19).
2.6 Sin embargo, Yahvé no dará paz a los malvados que no se arrepientan (57:2021). Estos son como el mar, pues no disfrutan la paz y prosperidad de Yahvé, y constantemente arrojan lodo (sus malas obras). En el hebreo el v. 21 es idéntico a 48:22, salvo que 48:22 tiene “Yahvé” en lugar de “mi Dios”. 3
Yahvé explica a Judá por qué no les bendice por sus ayunos y qué pueden hacer para que sí les bendiga (58:1-14). Para una exposición más detallada de este capítulo, ver Williams, “La justicia seguirás”: 152-60. 3.1 Yahvé ordena a Isaías gritarle a Judá su pecado (58:1). El énfasis en el volumen del anuncio sugiere que el pueblo no reconocía el pecado ni la seriedad de sus consecuencias. 3.2 Yahvé explica que los de Judá creían servirlo y así pedían que él ejecutara juicios a su favor, pero ellos no hacían justicia (58:2). 3.2.1
Los de Judá creían que servían a Yahvé (v. 2a). A la luz de los vss. 1 y 2b, el v. 2a debe ser irónico. En lugar de “quieren” en v. 2a, c, tradúzcase con más claridad “se deleitan en” (BDLA; cp. BJ, DHH, RVA). La forma en que los judíos suponían que buscaban a Yahvé y sus caminos se revelará en el v. 3.
3.2.2
El v. 2b insinúa que el pecado aludido en el v. 1 era la injusticia. Los vocablos traducidos “justicia” y “ley” son, respectivamente, tsedaqah y mishpat. Los dos términos, y especialmente en paralelismo el uno con el otro, como aquí, se refieren a la justicia social (ninguna de las versiones que he
Apuntes sobre Isaías, pág. 70
consultado muestran esto, salvo, tal vez, RV95). Los vss. 3-5, 6-7 confirmarán esta interpretación. 3.2.3
No reconociendo la seriedad de las injusticias y creyendo que hacían lo correcto ante Dios, los judíos confiadamente pedían justos juicios a su favor y en contra de las naciones que les afligían (58:2c; cp. Sal. 137:7-9; Zac. 1:11-17; Mal. 2:17). El v. 2b no se debe unir con el v. 2a, sino con el v. 2c. Una traducción literal sería: “Como una nación que lo recto hubiese hecho y la justicia de su Dios no la hubiese dejado, me piden justos juicios y en el acercamiento de Dios se deleitan”, cp. John N. Oswalt, The Book of Isaiah, Chapters 40-66 (1998), pág. 492. Traducir “acercarse a Dios” al final del v. 2 es posible (cp. Sal. 73:28), pero el paralelismo aquí apoya “el acercamiento de Dios” (cp. BDLA). Me piden Se deleitan en
justos juicios el acercamiento de Dios
Los judíos se emocionaban con la expectativa del pronto acercamiento de Yahvé para salvarlos y castigar a sus enemigos (cp. 56:1; Am. 5:18; Mal. 3:1). El título “Dios” aquí en vez del más común “Yahvé” también favorece esta interpretación, pues uno de sus usos es para referirse a Yahvé como juez (cp. Mal. 2:17; 3:14-15; Jue. 9:56-57). 3.3 Los de Judá se quejaban de que Yahvé no ejecutaba los “justos juicios” a su favor que ellos le pedían con ayuno (58:3a; cp. v. 2c; Mal. 3:14). 3.3.1
El v. 3a aclara que la forma en que los judíos creían que servían a Dios (v. 2a) era afligiéndose en múltiples ayunos (cp. v. 2a).
3.3.2
“Humillamos (o “afligimos”) nuestras almas” (v. 3) puede ser un modismo por “ayunamos” (cp. Lv. 16:31; 23:27, 32; Nm. 29:7; 30:13). Sin embargo, el v. 5 sugiere que la expresión también abarcaba actos ascéticos que acompañaban el ayuno; cp. 1 R. 21:27; Ne. 9:1; Est. 4:3; Mt. 6:16-17.
3.4 Yahvé les explica qué tipo de ayuno no acepta y a qué tipo sí responde (58:3b14). 3.4.1
Yahvé no ha respondido a sus ayunos, porque han sido ayunos egoístas, acompañados por explotación de los trabajadores y pleitos legales injustos (58:3b-4). 3.4.1.1
Lejos de “afligir sus almas”, ellos hallaban deleite en sus ayunos (58:3b; en lugar de “buscáis vuestro propio gusto”, tradúzcase “halláis deleite”).
3.4.1.1.1
Su ascetismo les tranquilizaba la conciencia mientras explotaban sus trabajadores. O tal vez el v. 3b quiere decir que hallaban deleite en la explotación misma.
3.4.1.1.2
El vocablo traducido “trabajadores” es literalmente “sufridos”, y el verbo traducido “oprimís” literalmente significa “apremiáis, exigís trabajo excesivo”. Entonces, se podría traducir “explotáis (cp. BJ, DHH, RVA, NVI) a todos vuestros sufridos peones”.
3.4.1.1.3
La repetición de la raíz “deleit-“ en vss. 2a, 2c y 3b indica que lejos de deleitarse en los verdaderos caminos de Yahvé, o sea la justicia (v. 2a-b), los judíos que tenían trabajadores hallaban deleite en explotarlos (v. 3b), y por lo tanto no deberían deleitarse en el acercamiento de Dios para ejecutar juicio (v. 2c).
Apuntes sobre Isaías, pág. 71
3.4.1.2
3.4.1.2.1
Más claro que “contiendas y debates” en este contexto sería “litigios y pleitos” (cp. BJ).
3.4.1.2.2
El paralelismo sugiere que litigios contra los débiles eran el medio de herir con puño inicuamente (cp. Job 31:21; 1 Co. 6:7-8; Stg. 5:6), o quizá las heridas con el puño ocasionaban litigios de los trabajadores contra sus patronos (cp. Job 31:13; Ex. 23:6; 2 S. 15:2-4).
3.4.1.3 3.4.2
3.4.3
En el día de su ayuno, los judíos emprendían pleitos legales injustos (58:4a).
Cuando los que ayunan cometen tales injusticias, Yahvé no presta atención a sus oraciones (58:4b).
El “ayuno” escogido por Yahvé no es la privación ascética (58:5), sino la privación económica involucrada en dejar la explotación (58:6, 9b) y en compartir con los necesitados (58:7, 10a). 3.4.2.1
Lógicamente las exhortaciones a liberar a los oprimidos (vss. 6, 9b) se dirigen particularmente a los opresores, pero la responsabilidad de compartir con los pobres (vss. 7, 10a) atañe a todos.
3.4.2.2
En vez de afligir su propia alma (vss. 3, 5), los judíos deberían saciar al alma afligida (v. 10). Lo que Yahvé más busca no es que su pueblo pase hambre, sino que socorre a los hambrientos.
Si los de Judá liberan a los oprimidos y comparten con los pobres Yahvé los bendecirá (58:8-12).
3.4.4
Si los de Judá guardan el día de reposo Yahvé los bendecirá (58:13-14). 3.4.4.1
Los vss. 13-14 parecen estar incongruentes con los vss. 2-12. Por lo tanto muchos críticos han opinado los vss. 13-14 fueron agregados tardíamente cuando el día de reposo había cobrado más importancia entre los judíos. No obstante, impresionantes vínculos lingüísticos unifican las dos secciones.
3.4.4.1.1
El orden exigencias-promesas se repite en los vss. 6-9a, 9b-12 y 13-14.
3.4.4.1.2
La repetición de “Jacob” en los vss. 1 y 14 forma una inclusión que enmarca todo el capítulo.
3.4.4.1.3
“Hallar deleite” aparece en 58:3 y 13 (traducido “buscáis vuestro propio gusto” en el v. 3 y “buscando tu voluntad” en el v. 13). “Deleitarse” se usa dos veces en el v. 2, “deleite” una vez en el v. 3 y dos veces en el v. 13, un sinónimo de “deleite” una vez en el v. 13, y un sinónimo de “deleitarse” una vez en el v. 14.
3.4.4.1.4
“Te daré a comer la heredad de Jacob” (v. 14), una figura rara, hace resonancia con las referencias al ayuno (vss. 3-6), las exhortaciones a alimentar a los hambrientos (vss. 7, 10) y la promesa de saciedad (v. 11).
3.4.4.2
Los vss. 13-14 muestran que el rechazo de los ayunos (vss. 1-5) no significa un rechazo absoluto de toda observancia religiosa. El mensaje del capítulo completo es que no se debe escoger el deleite egoísta, sino deleitarse en lo que agrada a Dios. La
Apuntes sobre Isaías, pág. 72
yuxtaposición de los vss. 2-12 y 13-14 también sugiere que una forma en que los judíos explotaban a sus trabajadores era negándoles el descanso en los días de reposo (cp. v. 3; Ex. 23:12; Dt. 5:14-15). 4
Debido a su pecado Judá no merece ser librado de sus opresores, pero Yahvé los librará por su propia justicia (59:1-21). 4.1 Yahvé no ha liberado a Judá de sus enemigos no porque él no sea capaz, ni porque él no oiga su clamor, sino por causa del pecado de su pueblo (59:1-8). 4.1.1
La razón por la cual Yahvé no ha liberado a Judá no es que él no sea capaz, ni que él no oiga su clamor (59:1).
4.1.2
La razón por la cual no ha librado a Judá es por sus pecados (59:2-8). 4.1.2.1
Los pecados enumerados tienen que ver con injusticias interhumanas, incluyendo homicidios (59:3a, 7), mentiras (59:3b) e injusticia en las cortes (59:4a).
4.1.2.2
Tanto sus obras como sus planes son malos (59:6b7).
4.1.2.3
Debido a sus pecados no pueden tener paz y prosperidad (59:5-6, 8).
4.1.2.3.1
Sus pecados producen huevos que no alimentan, sino que matan, y telas que no sirven para ropa, pues son telas de arañas (59:5-6).
4.1.2.3.2
Como no hay justicia en sus caminos, esos caminos no pueden ser de shalom, paz y prosperidad (59:8).
4.2 Isaías se identifica con su pueblo para confesar sus pecados y reconocer que por causa de ellos Yahvé no les hace justicia frente a sus enemigos (59:9-15). 4.2.1
Debido a sus pecados, Judá no recibe liberación de la opresión que sufre de parte de sus enemigos (59:9-11).
4.2.2
Isaías reconoce que Judá no ha recibido justicia frente a sus enemigos porque Judá mismo no ha actuado con justicia (59:12-15).
4.3 Aunque Judá no merecía liberación, Yahvé, debido a su propia justicia, los liberará de las injusticias que sufren de parte de las naciones (59:16-19). 4.4 Yahvé llegará a Jerusalén para redimir a los arrepentidos de Israel (59:20). 4.5 Yahvé hará un pacto con Israel, prometiendo transformarlos espiritualmente mediante su Espíritu para siempre (59:21; cp. Jer. 31:31-34 sobre el pacto nuevo). El que las palabras de Yahvé estarán en la boca de los judíos tal vez significa que creerán, obedecerán y enseñarán esas palabras (cp. Jer. 31:33-34; Ez. 36:27) y dejarán de hablar palabras inicuas (cp. v. 13; 6:5). B. Yahvé restaurará a Jerusalén e Israel con gloriosas bendiciones eternas y de alcance mundial (60:1-66:24) 1. Yahvé restaurará a Jerusalén en luz y gloria (60:1-22). 1.1 En un tiempo de tinieblas universales, la luz de Yahvé amanecerá sobre Jerusalén y será buscada por las naciones (60:1-3). 1.2 Las naciones llegarán a Jerusalén llevando los hijos de ella, ofrendando sus riquezas al templo y alabando a Yahvé (60:4-9).
Apuntes sobre Isaías, pág. 73
1.2.1
Las referencias a los hijos de Jerusalén en los vss. 4 y 9 forman una inclusión que enmarca esta estrofa.
1.2.2
Las naves traerán las riquezas de las naciones a Jerusalén (60:5, 8-9).
1.2.3
Los pueblos árabes traerán sus riquezas a Jerusalén (60:6-7).
1.2.4
Las naciones llegarán alabando a Yahvé (60:6b).
1.2.5
Las riquezas serán ofrendadas para la adoración de Yahvé en el templo (60:7b).
1.3 Las naciones servirán a Jerusalén y le llevarán sus riquezas para embellecer el templo de Yahvé (60:10-14). 1.4 Exaltada y recibiendo las riquezas de las naciones, Jerusalén reconocerá a Yahvé como su redentor (60:15-16). 1.5 Yahvé bendecirá eternamente a Jerusalén (60:17-22).
2
1.5.1
La bendición incluye riquezas (60:17), seguridad (60:18), la luz de Yahvé (60:19-20), justicia (60:21) y mucha descendencia (60:22).
1.5.2
La luz prometida en los vss. 19-20 parece ser un símbolo de las bendiciones divinas (cp. vss. 1-3), pero según Apocalipsis 21:23 esta promesa se cumplirá literalmente en la nueva Jerusalén que descenderá del cielo después del Milenio.
El abatido pueblo de Israel y Jerusalén será exaltado (61:1-11). 2.1 El siervo de Yahvé anuncia que ha sido enviado para librar a los afligidos de Jerusalén y llenarlos de gozo (61:1-3). 2.1.1
Muchos estudiosos opinan que quien habla en estos versículos es el profeta. Sin embargo, la persona que habla no solo predice los eventos, sino que tiene autoridad para ponerlos en marcha mediante su orden. Como la primera oración del v. 1 evoca una oración similar en 42:1, es probable que quien habla aquí es el mismo siervo de Yahvé presentado por primera vez allí.
2.1.2
El siervo ha sido ungido por Yahvé (61:1a). En el Antiguo Testamento se ungían por lo menos a algunos reyes, sacerdotes y profetas. Esta profecía tuvo un cumplimiento en el bautismo de Jesús.
2.1.3
El siervo ha sido enviado para ordenar liberación y gozo para los afligidos de Jerusalén (61:1b-3). 2.1.3.1
El siervo ha sido enviado para proclamar una especie de año de jubileo (61:1b-2a). La frase traducida “publicar libertad” (61:1b) es la misma que está vertida por “pregonaréis libertad” en Levítico 25:10, con respecto al año de jubileo. Luego la frase “año de la buena voluntad de Jehová” (61:2) viene a reforzar la idea de un año de jubileo. De manera que el año de jubileo resulta siendo un tipo de la liberación pregonada por el siervo.
2.1.3.2
El siervo ha sido enviado para ordenar la venganza de Yahvé contra los enemigos de Israel (61:2b).
2.1.3.3
El siervo ha sido enviado para dar gozo en lugar de sufrimiento a los habitantes de Jerusalén (61:3).
2.1.3.4
En Lucas 4:18-21 Jesús anunció que Isaías 61:1-2a se había cumplido en él. Lo que Jesús citó tenía que ver con su
Apuntes sobre Isaías, pág. 74
primera venida, pero no citó los vss. 2b-3, a partir de la frase “el día de venganza”, los cuales tienen más que ver con su segunda venida. 2.2 Yahvé derramará bendiciones de todo tipo sobre Israel (61:4-9). 2.2.1
Reconstruirán sus ciudades (61:4).
2.2.2
Los habitantes de las naciones los servirán (61:5).
2.2.3
Serán llamados sacerdotes de Yahvé (61:6a). Este versículo hace eco de una de las promesas de Exodo 19:6 (“me seréis un reino de sacerdotes”). Probablemente ambos pasajes se refieren al hecho que los sacerdotes son apartados para servir a Yahvé (cp. “ministros” [o “siervos”] de nuestro Dios” aquí en 61:6a).
2.2.4 2.2.5
Disfrutarán las riquezas de las naciones (61:6b). En lugar de la doble vergüenza, recibirán una doble herencia (61:7). La doble porción era lo que el primogénito recibía en herencia de su padre (cp. Dt. 21:17). La palabra “honra” no está en el hebreo.
2.2.6 2.2.7
Tendrán perpetuo gozo (61:7b). Yahvé hará justicia a Israel, quien ha sido oprimido por las naciones (61:8a). En lugar de “para holocausto”, léase con las versiones antiguas “en iniquidad” (cp. RVA, BJ, DHH y la nota en RV95). En el hebreo sin vocales “holocausto” e “iniquidad” se escribían exactamente igual.
2.2.8
Yahvé hará con ellos pacto eterno (61:8b).
2.2.9
Sus descendientes tendrán fama de ser bendecidos por Yahvé (61:9).
2.3 Isaías expresa el gozo y alabanza de Israel por la liberación divina (61:10-11). 3
Yahvé responderán al clamor de sus siervos regresando a Jerusalén para salvarla gloriosamente (62:1-63:6). 3.1 Isaías no callará hasta que Yahvé salve a Jerusalén de manera gloriosa (62:15). 3.1.1
Isaías no callará (62:1a). Algunos intérpretes opinan que quien habla aquí es Yahvé, pues él es el único que puede salvar a Jerusalén. Además Yahvé habla en el v. 11, prometiendo salvación a Jerusalén. Sin embargo, en los vss. 2-5 se habla de Yahvé en tercera persona, y a la luz de los vss. 6-7 es más probable que quien no callará ni descansará según el v. 1 es Isaías. El continuará llamando al pueblo al arrepentimiento y, sobre todo, intercediendo por ellos ante Yahvé hasta que él los salve.
3.1.2
Yahvé salvará a Jerusalén de manera gloriosa (62:1b-5). 3.1.2.1
La salvación de Jerusalén impresionará a las naciones (62:1b-2a). En estos versículos, como en muchos pasajes en Isaías, la “justicia” de Jerusalén no es la justicia que ella hace, sino la justicia que Yahvé le hace a ella, librándole de sus opresores.
3.1.2.2
Jerusalén recibirá un nuevo nombre (62:2b).
3.1.2.3
La salvación de Jerusalén glorificará a Yahvé (62:3).
3.1.2.4
Dos de los nuevos nombres que Jerusalén recibirá serán Hefzi-bá “Mi deleite está en ella” y Beula (“Casada”) (62:4). En lugar de “el amor de Jehová está en ti”, tradúzcase “Jehová se deleita en ti” (RVA; cp. BJ, DHH, BDLA, NVI), y en lugar de “desposada”,
Apuntes sobre Isaías, pág. 75
tradúzcase “casada” (cp. DHH; cp. NVI, BPT; la palabra es de la misma raíz que Beula, la cual literalmente significa “teniendo un señor”; varias versiones traducen “desposada”, traducción posible, pero en este contexto “casada” tiene mejor sentido). 3.1.2.5
Yahvé se casará con Jerusalén (62:5).
3.1.2.5.1
De nuevo, en lugar de “desposar”, tradúzcase “casar” (BJ, DHH, NVI, BPT; la raíz es la misma usada en el v. 4).
3.1.2.5.2
La idea que los hijos de Jerusalén se casarán o se desposarán con ella es rara, por no decir chocante. Quizá el hebreo original decía “se casará contigo tu edificador” (BJ, NVI; cp. DHH, BPT y la nota de RV95). En los tiempos de Isaías “tus hijos” y “tu edificador” probablemente se escribían igual en hebreo. El edificador de Jerusalén era Yahvé (cp. Sal. 147:2).
3.2 Los discípulos de Isaías no callarán hasta que Yahvé cumpla su promesa de salvar a Jerusalén de manera gloriosa (62:6-9). 3.2.1
Si Yahvé es quien habla en el v. 6a, los guardas han de ser sus profetas. Sin embargo, los vss. 6b-7 se refieren a Yahvé en tercera persona. Por eso, pienso que las guardas son los discípulos de Isaías (cp. 8:16), puestos para la defensa de Jerusalén.
3.2.2
Los discípulos no deben dejar de rogar a Yahvé que él salve a Jerusalén gloriosamente (62:6-7). En lugar de “los que os acordáis de Yahvé” (62:6), tradúzcase “los que hacéis que Yahvé recuerde” (BJ, RVA, cp. DHH).
3.2.3
El ruego se basa en el juramento de Yahvé de no permitir que Israel sufra otra invasión militar (62:8-9).
3.3 Se debe preparar el camino para el retorno de los judíos desterrados, pues Yahvé ha anunciado a Jerusalén que la salvación de ella viene (62:10-12). 3.3.1
En lugar de “tu Salvador” (62:11), tradúzcase “tu salvación” (BJ; cp. la nota en RVA).
3.3.2
Jerusalén recibirá otros dos nombres nuevos, y sus habitantes también recibirán dos nombres nuevos (62:12; cp. vss. 2, 4). En lugar de “Ciudad Deseada, no desamparada”, tradúzcase más literalmente “Buscada, Ciudad No Abandonada” (cp. BJ, RVA).
3.4 Yahvé viene a Jerusalén desde Edom, habiendo hollado las naciones para salvar a Israel (63:1-6). 3.4.1
Se le pregunta al que viene con vestidos rojos y gran poder quién es (63:1a).
3.4.2
El que viene responde que es el justo salvador (63:1b).
3.4.3
Se le pregunta al que viene por qué sus ropas están salpicadas de rojo (63:2).
3.4.4
4
El que viene responde que él solo, sin ayuda alguna, ha hollado las naciones y que la sangre de ellos se le ha salpicado (63:3-6). Apocalipsis 14:18-20 aplica la figura de las naciones holladas en el lagar a la batalla cuando Cristo regrese, y Apocalipsis 19:13 describe a Cristo como vestido de ropa teñida en sangre cuando regrese para pelear contra la bestia y sus ejércitos.
Asumiendo el papel de Israel en el cautiverio, Isaías pide a Yahvé liberación (63:7-64:12).
Apuntes sobre Isaías, pág. 76
4.1 Isaías alaba a Yahvé por las liberaciones que ha obrado a favor de su pueblo (63:7-14). 4.1.1
Isaías anuncia su intención de alabar a Yahvé por sus misericordias obradas a favor de Israel (63:7).
4.1.2
Isaías hace memoria de las liberaciones divinas a favor de Israel (63:8-14). 4.1.2.1
Yahvé salvó a Israel de su angustia (63:8-9). Probablemente Isaías tiene en mente específicamente el éxodo de Egipto (cp. vss. 11-14), y la última oración del v. 9 probablemente abarca también la conquista de Canaán.
4.1.2.2
Yahvé los castigó cuando se rebelaron contra él (63:10). Este versículo probablemente se refiere a los castigos durante el período de los jueces
4.1.2.3
Sin embargo, Yahvé los volvió a liberar cuando ellos clamaron a él, preguntando dónde está el Dios del éxodo (63:11-14). Aparentemente los vss. 11b-14 resumen las oraciones que Israel hacía cuando pedía a Yahvé liberación. Suprímase la palabra “diciendo” (64:11), la cual no está en el hebreo. Cuando el pueblo recordaba la liberación de Egipto y clamaba a Yahvé (64:11b-14), él también recordaba y los libraba (64:11a). Probablemente Isaías tiene en mente particularmente los clamores a Yahvé y las liberaciones durante el período de los jueces.
4.1.3
Israel pide liberación del cautiverio (63:15-64:12). 4.1.3.1
Israel en el cautiverio pide a Yahvé volver a tener misericordia de ellos (63:15-19).
4.1.3.1.1
Ahora Isaías claramente asume el papel de la nación, especialmente cuando, a partir del v. 16, habla en primera persona plural (“nosotros”).
4.1.3.1.2
Israel reconoce que su verdadero padre no es ni Abraham, ni Israel, sino Yahvé, porque es él único que les ayuda perpetuamente (63:16).
4.1.3.1.3
Pide a Yahvé convertir a Israel (63:17; cp. 6:9-10).
4.1.3.1.4
Israel hace su oración desde el cautiverio (63:18).
4.1.3.1.5 4.1.3.2
Yahvé trata a Israel como si no fuera su pueblo escogido (63:19).
Israel pide a Yahvé que venga a pelear contra sus enemigos (64:1-3).
4.1.3.3
Israel reconoce que Yahvé libera a los justos (64:45a).
4.1.3.4
Israel reconoce que sufre como castigo divino por su pecado (64:5b-7). En lugar de “por lo cual” (64:7), tradúzcase “porque” (cp. BJ); en el v. 7 Israel reconoce que no puede convertirse sin que Yahvé les ayude (cp. 63:17).
4.1.3.5
Israel ruega a Yahvé que mire la destrucción de sus ciudades y del templo y que deje de afligir a su pueblo por sus pecados (64:8-12).
Apuntes sobre Isaías, pág. 77
5
Yahvé responde a la oración de Israel anunciando castigo severo para los idólatras de la nación pero una restauración gozosa en la nueva tierra para sus siervos (65:1-66:24). 5.1 Yahvé siempre se ha mostrado dispuesto a ayudar a su pueblo, pero ellos se han rebelado contra él (65:1-5). 5.1.1
Yahvé siempre se ha mostrado dispuesto a ayudar a su pueblo, aun cuando ellos no han buscado su ayuda (65:1-2). 5.1.1.1
En lugar de “fui buscado” (65:1), sería más claro traducir “me dejé buscar” (RVA, RV95). Uno de los significados de “buscar” a un dios en el Antiguo Testamento es consultarlo acerca de lo que uno debe hacer en determinada situación. Ese ha de ser el significado aquí. Yahvé, a través de sus profetas como Isaías, ha revelado a Israel lo que debe hacer en muchas situaciones, aun cuando Israel no preguntaba (las palabras “por mí” no están en el hebreo; ninguna de las versiones que he consultado refleja esto, pero ver DHH, que en lugar de “no preguntaban por mí” tiene “no me habían pedido nada”).
5.1.1.2
En lugar de “fui hallado” (65:1), también sería más claro traducir “me dejé hallar” (cp. JB, RVA).
5.1.1.3
Irónicamente, el pueblo que debe extender sus manos a Yahvé lo ha ignorado cuando él ha extendido sus manos a ellos (65:2a; cp. 1:15).
5.1.2
Israel siempre se ha rebelado contra Yahvé, enojándolo (65:25). 5.1.2.1
Tanto sus acciones como sus pensamientos son malos (65:2).
5.1.3
5.1.2.2
Adoran a otros dioses (65:3; cp. 1:29).
5.1.2.3
Consultan a los muertos (65:4a).
5.1.2.4
Comen carne y caldo inmundos (65:4b). La carne de cerdo está prohibida en Levítico 11:7 y Deuteronomio 14:8.
5.1.2.5
Creen que sus ritos paganos los hacen santos a tal grado que nadie que no hubiera participado en esos ritos les debe tocar (65:5a; cp. 66:17).
5.1.2.6
Estos pecadores molestan a Yahvé (65:5b). En lugar de “humo en mi furor”, tradúzcase “humo en mis narices” (cp. BJ, DHH, RVA).
Yahvé destruirá a los pecadores de su pueblo, pero preservará y bendecirá a los que le sirven (65:6-16). 5.1.3.1
Yahvé dará a los israelitas pecadores su merecido (65:6-7).
5.1.3.2
Al remanente israelita que le ha servido (“mis siervos”) Yahvé le dará la tierra prometida (65:8-10). Sarón era terreno pantanoso y Acor era desierto; Yahvé convertirá ambos en tierras fértiles en pastos (65:10).
5.1.3.3
Yahvé anuncia a los idólatras de su pueblo que, en contraste con las bendiciones que derramará sobre el remanente que le sirve (“mis/sus siervos”), a ellos los matará (65:11-16). Fortuna y Destino (65:11) eran dioses paganos de la suerte.
Apuntes sobre Isaías, pág. 78
5.1.4
Yahvé hará una nueva creación, en la cual dará a su pueblo bendiciones increíbles de toda suerte (65:17-25). 5.1.4.1
Yahvé hará una nueva creación (65:17). Aquí la nueva creación se entiende como una transformación de la creación actual, la cual ha de suceder durante el Milenio. Sin embargo, el Nuevo Testamento amplía el concepto dado aquí para profetizar que después del milenio Dios destruirá por completo la creación existente para hacer otra (cp. 2 P. 3:10-13; Ap. 21:1-22:5).
5.1.4.2
En la nueva creación Yahvé dará a su pueblo alegría (65:18-19), larga vida (65:20), prosperidad (65:21) y seguridad (65:22-25).
5.1.5
Aunque Yahvé es tan grande que no cabe en ningún templo, él socorre al humilde que le teme (66:1-2).
5.1.6
Yahvé avergonzará a los que practican el sincretismo (66:3-6). 5.1.6.1
Muchos en Judá combinaban la adoración a Yahvé con adoración a los dioses falsos (66:3). En lugar de “el que sacrifica buey es como si matase a un hombre”, tradúzcase “el que sacrifica buey también mata a un hombre”, y así en las tres oraciones siguientes (cp. DHH, BJ). Cada oración primero menciona un acto de adoración a Yahvé, y luego un acto de culto pagano. Matar a un hombre es una referencia al sacrificio humano.
5.1.6.2
Yahvé los avergonzará (66:4-6). Los que practicaban el sincretismo perseguían a los que se mantenían fieles a Yahvé, y se burlaban de ellos (66:5). En lugar de “dijeron: Jehová sea glorificado. Pero él se mostrará para alegría vuestra”, tradúzcase “dijeron (en son de burla): Que Yahvé muestre su gloria, y veamos vuestra alegría” (cp. BJ, DHH, RVA, RV95).
5.1.7
Yahvé restaurará a Jerusalén súbita y gloriosamente (66:7-14). 5.1.7.1 5.1.7.2
5.1.8 5.1.9
Yahvé repoblará a Jerusalén súbitamente (66:7-9). El remanente justo de Israel se regocijará porque Yahvé restaurará a Jerusalén gloriosamente (66:10-14). Yahvé sustentará a Jerusalén con “la gloria de las naciones”, es decir, sus riquezas (66:11-12). Yahvé matará a los idólatras de su pueblo (66:15-17).
Yahvé convertirá a las naciones para que traigan a los judíos dispersos a Jerusalén, y para que allí adoren al Dios verdadero (66:18-24). El libro concluye con una advertencia final que los que se rebelan contra Yahvé serán destruidos (66:24). El lenguaje de este versículo, describiendo a cadáveres que nunca terminan de ser comidos por los gusanos ni de ser quemados, será empleado por Jesús para describir los sufrimientos eternos del infierno (cp. Mr. 9:43-44).
ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.