(High School Edition) — September 2017

Fuente: C.S. Dweck, “The Secret to Raising Smart Kids,” Scientific American. Los años de la secundaria son para explorar. TM. Cotulla Independent School ...
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Septiembre 2017

Cotulla Independent School District

Cambie la actitud de su joven para promover el éxito en la escuela Es probable que este nuevo año escolar, algunas cosas le resulten fáciles a su joven, mientras que otras tal vez no tanto. Los estudios revelan que la manera en que su joven percibe sus logros y los obstáculos que se le presentan afecta su desempeño no solo en la escuela, sino más adelante. Ayude a su joven a sustituir las ideas fijas que tiene respecto a su inteligencia o cuán bueno es (o no es) como estudiante, por una “mentalidad de superación”. Esto es la convicción de que siempre puede aprender más, desarrollar su inteligencia y mejorar su rendimiento. Para promover en su joven esta mentalidad de superación, tenga presente estos consejos: • Si su hijo tiene dificultades: sugiérale que pruebe diferentes estrategias para atacar el problema. Ayúdelo a ver un problema como una oportunidad de crecer intelectualmente. No se limite a decirle, “¡Esfuérzate más!” • Si su hijo tiene un buen rendimiento: hable con él y elogie lo que hizo que lo llevó a triunfar. ¿Estudió más tiempo? ¿Acaso aprendió un nuevo método para resolver un problema? No le diga que le fue bien porque es muy inteligente. • Si su hijo trae a casa una mala calificación: anímelo a analizar cómo se preparó y qué más podría hacer. Dígale que siempre puede mejorar la próxima vez. No se enoje. Cualquiera sea el desempeño de su joven en este momento, anímelo a subir el listón al trazarse nuevas metas para el aprendizaje y determinar maneras de alcanzarlas. Dígale que aprender es un proceso, y que está en camino a lograr sus metas. Fuente: C.S. Dweck, “The Secret to Raising Smart Kids,” Scientific American.

Los años de la secundaria son para explorar Cuando los jóvenes se toman el tiempo para descubrir qué les gusta hacer y en qué área se destacan, están dando un paso clave en su preparación para la universidad y la vida laboral. Para ayudar a su joven a descubrir sus fortalezas e intereses este año, anímelo a: • Leer. Leer una amplia gama de material expondrá a su joven a ideas y actividades nuevas. Sugiérale que lea una variedad de cosas, como el periódico, novelas, biografías, etc. • Hablar con la gente. Dígale a su joven que les pregunte a amigos y conocidos sobre sus trabajos. Puede averiguar qué es lo que más les gusta y cómo se prepararon. También puede preguntarles por sus intereses. ¿Podrían enseñarle algo nuevo?

• Probar cosas nuevas. La manera más fácil de descubrir si tiene aptitud para algo es intentarlo. Inste a su joven a inscribirse a un nuevo club u organización en la escuela. Además, podría tomar una clase en internet. • Investigar. Pídale a su joven que se informe en línea sobre posibles carreras que le parecen interesantes. ¿Qué clases debería cursar en la secundaria para tener la opción de desempeñarse en ellas en el futuro?

Lea lo que lee su joven En la escuela secundaria, la mayoría de los conocimientos se adquieren leyendo. Y mientras más lea su hijo, mejor serán sus destrezas de lectura. Para animar a su joven a leer, consiga usted una copia del libro que le han asignado a él y léalo también. De este modo, le demostrará que considera que lo que hace es importante. Además, tendrá varios temas sobre los cuales entablar estupendas conversaciones.

Programe tiempo para aprender En los años de la secundaria, la responsabilidad por completar las tareas a tiempo recae en su joven, no en usted. Para ayudarlo, pídale que haga un horario para hacer las tareas: • Use un calendario y pídale que programe, cada día, dos horas para hacer tareas, estudiar o empezar un nuevo proyecto. • Programe descansos con anticipación. Si sabe que tendrá un descanso pronto, le será más fácil seguir concentrado en su trabajo. Su joven debería planificar un descanso de cinco a 10 minutos por cada hora de trabajo.

Promueva la autodisciplina Muchos de los factores que contribuyen al éxito en la escuela, desde la asistencia hasta las notas o la puntuación en los exámenes, mejoran cuando los estudiantes exhiben autodisciplina. Para incularle autodisciplina a su hijo: • Deje que asuma las consecuencias. Si se olvida el libro de matemática, no se lo lleve a la escuela. Tendrá que ver cómo resuelve el problema. • No haga por él lo que él es capaz de hacer por sí mismo. Es posible que usted pueda hacerlo mejor, y más rápidamente, pero él tiene que aprender a hacerlo. • Anímelo a participar en actividades que promueven la autodisciplina, tal como practicar un deporte o tocar un instrumento. Fuente: D. Laitsch, “Research Brief: Self-Discipline and Student Academic Achievement,” ASCD, niswc.com/self-discipline.

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¿Cómo puedo lograr que mi hijo me cuente lo que le pasa? P: Mi joven nunca ha sido de mucho hablar. Cuando le pregunto de la escuela, siempre me dice que todo va “bien”. El año pasado, pues en realidad no fue así. Pero yo no me enteré que apenas estaba aprobando biología sino hasta poco antes de recibir la libreta de calificaciones. ¿Qué puedo hacer para que me hable de las cosas importantes? R: Acaba de comenzar el año escolar, y este el momento ideal para abrir aún más las líneas de comunicación, tanto con su joven como con la escuela. Los jóvenes no siempre tienen el criterio para determinar qué es importante y debe comunicarse a los padres. Pues entonces, anime a su joven a hablarle de cualquier cosa, ya sea que la considere importante o no. Para comenzar: • Elimine la presión. No es necesario que la conversación ocurra como una entrevista, cara a cara, en el momento que regresa de la escuela. Den una caminata. Hagan juntos un quehacer. Hablen de temas cotidianos. La conversación fluirá más fácilmente cuando estén pensando en otras cosas. • Escuche más de lo que habla. Pregúntele a su joven qué opina de algún tema. Deje que tome la iniciativa en la conversación. Si usted se molesta por algo que él le dice, deberá volver a calmarse antes de abordarlo nuevamente. • Dígale a su joven que usted se mantendrá en contacto con los maestros para verificar que siga encaminado para lograr sus objetivos. Confirme que los maestros sepan cómo comunicarse con usted.

¿Está su joven preparado para un empleo? Los trabajos a tiempo parcial pueden ayudar a los jóvenes a explorar sus intereses profesionales, adquirir experiencia y ganar algo de dinero. ¡Pero estos no deberían interferir con los deberes escolares! Su adolescente, ¿está preparado para encontrar el equilibrio entre la escuela y su empleo? Responda sí o no a las siguientes preguntas: ___1. ¿  Ha demostrado su joven que puede administrar su tiempo responsablemente? ___2. ¿  Ha establecido las reglas básicas antes de permitir que consiga un empleo? Si sus calificaciones bajan, deberá renunciar. ___3. ¿  Ha establecido un límite para el número de horas que le permitirá trabajar cada semana? ___4. ¿  Ha ayudado a su joven a elaborar un plan para ahorrar parte del dinero que ganará, como por ejemplo, para ir a la universidad? ___5. ¿  Ha hablado de las responsabilidades asociadas con la escuela y

un empleo, como la puntualidad y el compromiso? ¿Cómo le está yendo? Más respuestas sí significa que está preparando a su joven para las realidades de equilibrar el trabajo y la escuela. Para cada respuesta no, pruebe la idea correspondiente del cuestionario.

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Intente ser puntual Las escuelas recalcan la importancia de la asistencia porque esta puede marcar la diferencia entre graduarse y abandonar la escuela. Este mensaje es aún más eficaz cuando se lo refuerza en casa. Estas son algunas maneras de hacerlo: • Dé el ejemplo. Ya sea que esté yendo a la escuela, al trabajo o a una cita, llegue siempre a tiempo. Hable de lo importante que es ser puntual. • Establezca una meta para la asistencia de su joven y ofrézcale una pequeña recompensa cuando la alcance. • Solo permita que su joven falte a la escuela en casos de enfermedad o emergencia. Y si está enfermo, debería descansar y leer, no mirar la televisión o jugar con su móvil.

Descansar es la mejor medicina Para que su joven pueda concentrarse, tiene que mantenerse alerta. Los médicos señalan que establecer una rutina que incluya un horario regular y razonable para acostarse es “una de las mejores cosas que los jóvenes pueden hacer para su salud, su rendimiento escolar y su desempeño en el campo de juego”. Fije un horario para acostarse que le permita a su hijo dormir ocho horas por noche. Fuente: American Academy of Sleep Medicine, “Sleep is key to help teens recharge for success this school year,” niswc.com/ bedtime.

Los compañeros incitan a correr riesgos Los estudios revelan que cuando los jóvenes creen que sus amigos los están observando, la actividad en la parte del cerebro que procesa la sensación de gratificación aumenta marcadamente. Además, se arriesgan más de lo que lo harían si estuvieran solos. No suponga que su joven tomará la decisión correcta cuando esté con sus amigos. Antes de permitirle salir, revise las reglas que ha establecido y ayúdelo a analizar las consecuencias. Fuente: D. Albert y otros, “Peer Influences on Adolescent Decision Making,” Current Directions in Psychological Science, niswc.com/teenbrain.

Ayudando a los Estudiantes a AprenderTM Publicado en inglés y español, de septiembre a mayo. Editor Responsable: L. Andrew McLaughlin. Editor Emérito: John H. Wherry, Ed.D. Editora: Alison McLean. Editora de Traducciones: Victoria Gaviola. Editoras: Rebecca Miyares y Erika Beasley. Gerente de Producción: Sara Amon. Copyright © 2017, The Parent Institute®, una división de PaperClip Media, Inc. P.O. Box 7474, Fairfax Station, VA 22039-7474 1-800-756-5525 • www.parent-institute.com • ISSN 1527-1072 1526-9329

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