Flores marchitas en un jardín de Haedo

2 mar. 2013 - La autora de la columna Desde el jardín dejó un legado ... mas Cotidianos (con su columna Semillero) ... gatti un rosal la espera: una.
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propiedades & countries

| Sábado 2 de marzo de 2013

tributo a cristina bugatti

Flores marchitas en un jardín de Haedo

La autora de la columna Desde el jardín dejó un legado tras su paso por la nacion, donde colaboró por más de tres décadas. Reseña de su trayectoria Del otro lado de la verja las flores no lucen como antes; tampoco las plantas. Y hasta los coloridos picaflores extrañan su presencia cada mañana en el jardín de su casa de Haedo. Los lectores del suplemento Propiedades de la nacion ya no podrán leer esa esperada columna, Desde el jardín. La desaparición de Cristina Bugatti deja un gran vacío, pero trasciende a través de su legado, presente en cada nota. Desde siempre supo transmitir el amor por la botánica. Sus notas, que abundaban en información, abordaban todos los temas: desde el dato más sencillo para aprender básicamente los cuidados de una flor en la maceta de un balcón hasta los aspectos más complejos e intrincados de la botánica y del paisajismo que los transmitió con su pluma ágil, amena, certera, didáctica. Cada texto era una enseñanza -de hecho era docente y fue directora de una escuela- que abordó con dedicación y estilo inconfundibles. Desde hacía más de 16 años colaboraba con el suplemento Countries (hoy integrado al suplemento Propiedades), devenida lectura obligada de miles de lectores, tan apasionados como su autora por las flores, las plantas, los árboles y ese mundo mágico que lo incorporó como parte de su vida. Supo en sus textos enriquecerlos con citas históricas o literarias, con anécdotas y comentarios de especialistas, de científicos, ingenieros agrónomos o representantes de entidades vinculadas con el mundo de la botánica. Fue un privilegio para el suplemento Countries durante más de una década y media contar con sus inspiradores comen-

tarios. Pensando en el lector, Cristina Bugatti se informaba permanentemente de las novedades que surgían en ese campo infinito de conocimiento. Sabía añadir a la información un consejo, un recuerdo. En sus columnas también solía hacer referencia a su infancia, a ese universo que compartió con su familia en el vivero de su padre, en Lincoln, donde despertó ese amor por el cuidado y la comprensión de la naturaleza, el respeto por la ciencia y la investigación. No faltaron incluso los comentarios de las plantas aliadas de la medicina. Y desde luego mucho, mucho más... En estos días estaba trabajando en la elaboración de un libro, donde quería resumir la información que publicó durante años. Pero más allá de su legado, de su labor periodística, que comenzó hace más de tres décadas en este diario y que le permitió colaborar con el suplemento Infantil, luego Temas Cotidianos (con su columna Semillero) y más tarde en el suplemento Arquitectura, más allá de su escritura está presente en el recuerdo su personalidad, tan cálida como sencilla: era una mujer de gran sensibilidad, simpática, alegre, serena, de trato amable y afectuoso. Dejó su impronta y se ganó el cariño y el respeto de todo quien la haya conocido. Hoy, con estas sencillas palabras, el equipo Propiedades le rinde un afectuoso homenaje. Su imagen vuelve como siempre carismática, sonriente, de buen humor, rodeada de sus afectos y de su querido jardín, donde las flores se han marchitado.ß

La inolvidable Cristina por Alfredo Sabat

cartas de lectores Como parte del homenaje a Cristina Bugatti, se publican en esta página algunas cartas que los lectores enviaron a la nacion por su fallecimiento

Condolencias

“Deseo hacerle llegar mis expresiones de pesar por el fallecimiento de su columnista de tantos años en el suplemento Countries. “Quienes hemos seguido asiduamente su columna semanal Desde el jardín y hemos tenido el privilegio de tratarla durante algunos de los paseos botánicos organizados por la Sociedad Argentina de Horticultura que coordinaba Pancho

Leloir. No olvidaremos a esa sencilla mujer que supo transmitir en forma tan amena sus conocimientos de la botánica y en particular del arbolado urbano que supo abordar con tanta precisión en su última nota del sábado próxima pasado. “Me permito felicitar a la nacion por la merecida nota en la que sintetiza la inolvidable trayectoria de Cristina Lasagna de Bugatti rogándole quiera transmitir a sus deudos mis sentidas condolencias.” Lic. Manuel G. Vayo DNI 5.600.241 [email protected]

Cristina, mi suegra

“Muchos lectores de la nacion esperaban el sábado para leer su columna Desde el jardín. Cristina Bugatti era la Señora de las plantas, pero para mí además era mi suegra. Una mujer increíble, llena de vida, docente de alma, apasionada por su trabajo de periodista, con una enorme cultura e interés por todo, en especial las plantas. “Todas las personas que la conocieron la adoraban, era generosa con sus conocimientos y sumaba amigos todos los días de cualquier edad y condición. “Su talento especial: la

curiosidad. Todo la maravillaba, era como un niño que quiere saber, experimentar, conocer, descubrir. Veo todos los días en mis nietos Facundo y Paloma, sus bisnietos, la misma chispa de vida. Queda en nosotros esa chispa. La voy a extrañar mucho, todos la vamos a extrañar. “Sus familiares y amigos tuvimos la fortuna de quererla y disfrutar con ella su jardín, su paraíso en Haedo donde hoy nos dejó y partió al jardín definitivo, el jardín de Dios.” Lucía Carballo de Bugatti [email protected]

Agradecimiento

“Ante el deceso de la señora Cristina de Bugatti, el mayor homenaje sería agradecerle todo lo que nos regaló en vida. Sábado a sábado, que supo mantener su bien ganada columna. “Ella nos aportó conocimientos sobre ciencia y práctica apreciada para los muchos y simples aficionados. “En oportunidades hemos logrado prácticas que generan retoños y árboles. No debe haber un hueco en los esperados sábados. Los seguidores pensamos que debe ser mantenida, en lo que ella creó una función de belleza en el diario y para la ciudad y el país de sensibi-

lidad. No es para nada ampuloso decir que la señora Cristina de Bugatti nos hizo conocer más –y por tanto amar– lo nuestro e incorporar lo bueno de las especies. Nos aportó bibliografía y concretó lo que Anatole France idealizaba: Al educando, enciéndele la llama de la inquietud por saber. “A la señora Cristina Bugatti un rosal la espera: una oración por ella y para los suyos. Simples y entrañables gracias.” Alfredo O. Musitani DNI 4.255.364