ESCUELA Nº 3102 “EDMONDO DE AMICIS”

Es homo sapiens o animal con actividad racional, y. 3.- Tiene un carácter indeterminado con autoproyección. En la Grecia pre-clásica el término aethos ...
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ESCUELA Nº 3102 “EDMONDO DE AMICIS”

LENGUAS Y CULTURA GLOBAL CURSO: 5º Año HCS AÑO: 2013 PROFESORA: Lic. Prof. María Julia Solovitas

“El hombre no vive, como las bestias salvajes, en un mundo de cosas meramente físicas, sino en un mundo de signos y símbolos”.

Dino Segre

Cultura

La cultura es algo inherente al hombre. No se puede concebir la existencia de éste sin una cultura que lo defina como perteneciente a un grupo humano con su propia idiosincrasia. En este proceso de socialización, se articulan las instituciones, que desempeñan un papel fundamental al referirse a las costumbres, las creencias, las pautas culturales que definen a cada grupo y, por lo tanto, a cada cultura. Desde los comienzos de la humanidad, distintos grupos sociales han establecido sus propias pautas culturales, es decir, que cada sociedad desarrolla una cultura que le es propia y la misma varía de acuerdo con el contexto en el que está inmersa. Sin embargo, en las últimas décadas del siglo XX asistimos a un proceso de profundos y vertiginosos cambios en lo que a relaciones entre los pueblos y naciones se refiere. Este proceso, conocido como globalización, implica la pérdida de los rasgos culturales característicos de cada grupo y una homogeneización de las producciones culturales. Pero simultáneamente, también trae como consecuencia, lo opuesto: una revalorización de lo local. Así manifestaciones culturales antes desdeñadas por ser consideradas “bárbaras” comienzan a ser valoradas no sólo en el lugar de donde son oriundas, sino también en el mundo entero. Pensemos por caso, en la revalorización de los ritmos tribales africanos, el fado portugués, la música de los Balcanes, entre otras.

El origen del término cultura. En la historia de la humanidad, el concepto de cultura ha tenido muchas variaciones. Éstas han estado estrechamente relacionadas con la conceptualización de qué es el hombre y con las discusiones acerca de su esencia. El ser humano es un ser simbólico, cuya existencia cultural ha encontrado explicación en uno de los siguientes supuestos: 1.- Es una creación divina con actitudes espirituales. 2.- Es homo sapiens o animal con actividad racional, y 3.- Tiene un carácter indeterminado con autoproyección. En la Grecia pre-clásica el término aethos designaba el conjunto de costumbres o hábitos de los pueblos, percibidos como fortalezas y refugios donde moran los habitantes. La palabra griega paideia usada para significar la "crianza de los niños", tiene una estrecha relación con el concepto de cultura, entendiéndose como el cuidado o "cultivo" que se debe 1

tener por los niños en la adquisición de conocimientos, hábitos, costumbres, sentimientos, emociones, relaciones sociales y afectivas, gusto por las ciencias y las artes, etc. Las sociedades esclavistas tenían un concepto elitista de cultura, como por ejemplo, el conocimiento filosófico de los griegos. Según el trabajo de Espinoza y Pérez (1984), el término cultura apareció en la Roma antigua como la traducción de la palabra griega paideia. Texto extraído de http://www.eumed.net/libros/2007b/301/evolucion%20historica%20del%20concepto%20de %20cultura.htm , fecha de consulta febrero 2010. Así los antiguos romanos comienzan a utilizar el término colere, tanto para referirse al trabajo realizado a fin de preparar la tierra para su cultivo como para aludir al acto de rendir culto a los dioses propios de los pueblos agricultores. Siglos más tarde, la Europa medieval conoció la expresión cultura agri, que designaba la relación del hombre -en tanto productor- con la naturaleza, de acuerdo con el beneficio que obtenía de la tierra mediante su labor. Luego de la cultura agri, que señalaba un trabajo de tipo manual, nació la cultura mentis, para indicar el cultivo de la mente, dentro del dualismo “cuerpo/alma” o “materia/espíritu” imperante. Durante el Renacimiento (siglos XIV al XVI), el término cultura se usó para denominar el proceso formativo exclusivo de los artistas, los filósofos, los literatos y los que ejercían el poder, quienes formaban un grupo de elite. Este proceso incluía: a) el fomento y el aprecio de las artes y las técnicas (no su ejercicio); b) la “renacida” y reinterpretada visión del mundo (racionalismo, mercantilismo, etc); y c) y las exigencias del ejercicio del poder 1. Entonces, a modo de síntesis, se consideraba que sólo este conjunto de personasposeedor del conocimiento y capaz de apreciar las bellas artes y de reinterpretar la visión del mundo grecolatino- entraba dentro del proceso cultural. Pero esta forma de pensar cambió hacia el siglo XVIII. En efecto, en Francia, los filósofos Voltaire y Vauvernargues empezaron a concebir la cultura como el estado alcanzado por una persona después de un cierto proceso educativo. Durante éste, el individuo adquiría conocimientos intelectuales, buenos modales y la posibilidad de apreciar una obra de arte. A quien alcanzara ese estado, se lo denominaba persona culta. Este sentido aristocratizante de la cultura termina por escindir a los “cultivados” de sus comunidades de origen. En el siglo XIX, el término cultura tomó un significado antropológico, y así se la definió como la condición característica que comparte una sociedad o un grupo social en un momento determinado. Esta condición engloba los hábitos lingüísticos, las tradiciones populares, las costumbres, las creencias, las maneras de proceder, las formas de valoración y la visión del mundo de esa sociedad. Por lo tanto, de acuerdo con estos nuevos conceptos, todos los hombres están inmersos en una cultura específica que abarca todos los ámbitos en los cuales ellos son partícipes, desde la naturaleza hasta las organizaciones sociales.

Hacia una definición socioantropológica de cultura.

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Di Tella, Torcuato; Chumbita Hugo; Gamba Susana; Gajardo Paz. Diccionario de Ciencias Sociales y Políticas. Emecé Editores, Buenos Aires, Primera Edición, 2001, 151. 2

La acepción científica del término cultura, de acuerdo con el Diccionario de Ciencias Sociales (UNESCO, 1975) tuvo su origen a mediados del siglo XIX, en Alemania. Así, afirma Monsiváis (1992) la cultura se conceptualiza como "la actividad del espíritu, y sus cumbres son la erudición clásica, la veneración y el ejercicio de la poesía en distintos niveles, la escritura de la Historia, la creación artística, la prédica moral que instrumenta la divulgación del conocimiento." El discurso social que sirve de base a la ideología imperante durante el período del romanticismo, es rico en manifestaciones artísticas concebidas como formas de expresión popular, las cuales sustentan la conclusión de los autores Espinoza y Pérez (1991) hecha en el sentido de que "Serán los románticos los primeros que afirman que el único agente de la creación cultural efectiva es el pueblo y que las otras capas (burguesía y nobleza), lo único que hacen es aprovechar y refinar los esbozos de obras que él entrega". La responsabilidad en la creación y distribución de los productos culturales recaen como obligaciones de los gobiernos para con su pueblo. Edward Tylor (1975), antropólogo inglés, en su obra Primitive Culture, escrita en 1871, conceptualizó la cultura como "todo complejo que incluye el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, la costumbre y cualquier otra capacidad y hábito adquirido por el hombre en cuanto miembro de la sociedad" 2. Así, ya en pleno siglo XX, la cultura son ya modos y estilos de vida que implican el disfrute de excedentes de los satisfactores espirituales. En la investigación sociológica, el concepto de cultura es ampliamente usado como la "totalidad de lo que aprenden los individuos en tanto miembros de la sociedad; es una forma de vida, un modo de pensar, de actuar y de sentir." (Chinoy Ely, 1980). Esta conceptualización sobre la cultura es refrendada en la definición que elabora UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura); entendiendo por cultura todo lo que abarque los rasgos existenciales de una comunidad. O lo que es lo mismo, todo lo que abarque los rasgos concretos de los pueblos: modo de vida, creencias, modo de producción, opiniones, sistemas de valores, etc. 3 A modo de síntesis, podemos afirmar, que cultura es “todo lo que hacen los hombres cuando actúan y reflexionan acerca de su vivir comunitario e histórico” 4. Es una suerte de estado o condición que todas las personas y todas las sociedades disponen o comparten cualquiera que sean sus diferencias.

Características Universales de la Cultura Más que la singularidad de los individuos, lo que nos interesa es la repetición de los elementos de comportamiento de los hombres y del orden de estos elementos dentro de patrones. Estos patrones son lo que denominamos aspectos básicos de la cultura. Por tanto lo que es importante conocer son las características comunes a todos los hombres o a un grupo de hombres –tales como la necesidad de alimento, calor,

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http://www.eumed.net/libros/2007b/301/evolucion%20historica%20del%20concepto%20de%20cultur a.htm , fecha de consulta febrero 2010. 3 Di Tella, Torcuato; Chumbita Hugo; Gamba Susana; Gajardo Paz. Op. cit., 145. 4 Idem. 3

satisfacción sexual, intelectual o estética- y la forma de satisfacer estas necesidades que muchas veces se concreta en medios diferentes. Así, podemos mencionar las siguientes como características universales de la cultura5: a. Toda cultura está compuesta por categorías: las categorías y taxonomías (formas de clasificación de la realidad) ayudan a la gente a no confundirse dentro del grupo. b. La cultura es siempre un código simbólico: los de esa cultura comparten esos mismos símbolos (entre ellos la lengua) lo que les permite comunicarse eficazmente entre ellos. c. La cultura es un sistema arbitral: no hay reglas que obliguen a elegir un modelo; cada cultura ostenta su propio modelo de comportamiento cultural. d. La cultura es aprendida: no es genética, no es interiorizada por instinto; una persona es el profesor (enseñador) de otra (en muchos de los casos la madre, el padre, el tío, etc). e. Es compartida: es necesario que todos los miembros tengan los mismos patrones de cultura para poder vivir juntos, por eso se comparte la cultura a través de la infancia, cuando se está introduciendo a los niños en la sociedad (proceso de socialización). f. Es todo un sistema integrado: donde cada una de las partes de esa cultura está interrelacionada con, y afectando a las otras partes de la cultura. g. Tiene una gran capacidad de adaptabilidad: está siempre cambiando y dispuesta a acometer nuevos cambios. h. La primera y principal función de la cultura es adaptarse al grupo. Conseguir la continuidad a través de los individuos nuevos.

Dimensiones de la cultura: Cualquier cultura (u organización social) tiene varias dimensiones. Como las dimensiones físicas de anchura, altura, profundidad o tiempo, las dimensiones culturales pueden variar en tamaño, pero por definición, afectan a todo el conjunto. Aquí proponemos el grupo más lógico de seis dimensiones sociales o culturales: las que cuentan para cualquier sistema de valores aprendidos y comportamientos.

Las dimensiones de la cultura son:

5

Herrero José. http://www.sil.org/capacitar/antro/cultura.pdf , págs. 3 y 4, fecha de consulta febrero 2010. 4

1. Tecnológica: la dimensión tecnológica de la cultura es su capital, sus herramientas, sus conocimientos y su forma de tratar con el entorno físico. 2. Económica: distintas comunidades pueden tener diferentes sistemas económicos. 3. Política: comprende sus diversas formas y medios de asignar el poder y la toma de decisiones. 4. Institucional (o social): incluye las formas en que la gente actúa, se comporta en determinados momentos, se relaciona con los demás. 5. De valores estéticos: lo que cada sociedad considera bello, feo, objeto artístico, las artes, etc 6. Perceptual y de creencias: nuestros valores comprenden todo lo que consideramos como bueno frente a malo, lindo o feo, justo o injusto, entre otras dicotomías. Las distintas comunidades o sociedades tienen diferentes conjuntos de valores. Ahí donde difieren es donde puede surgir un conflicto de valores.

Todas estas dimensiones están basadas en comportamientos aprendidos, que trascienden a los individuos que han aprendido partes de ellas. Al igual que las dimensiones físicas de longitud o tiempo, si falta cualquier dimensión de la cultura, por definición, todas faltan. No se puede «ver» una dimensión cultural o social como se puede ver a una persona. Cada individuo manifiesta cada una de las seis dimensiones de la cultura. Para lograr una conciencia social, se debe ser capaz de analizar cada una de las seis dimensiones, y las relaciones entre ellas, aunque sólo se pueda ver individuos, y no estas dimensiones.

ACTIVIDAD Nº1 1) Elaborá una definición de cultura. 2) Completá el glosario: VOLTAIRE- VAUVERNARGUES- ANTROPOLOGÍA- IDIOSINCRASIA- ERUDICIÓNDICOTOMÍA 3) ¿Por qué actualmente se utiliza una definición socioantropológica de cultura? 4) Encontrá ejemplos concretos de cada una de las seis dimensiones de la cultura. ACTIVIDAD Nº2

Hablemos de la cultura (por Federico Roncal Martínez6)

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Roncal Martínez, Federico. Dimensión cultural. http://www.webpolygone.net/castellano/ponencias/roncal_esp.doc 5

“La cultura es la vida misma, un complejo de ideas, modos de vida (relaciones) y productos materiales de un grupo de personas. La cultura tiene que ver con la forma de vida de las personas: cómo dan sentido a esta vida, cómo la valoran o cómo la detestan. La cultura entonces abarca: nuestras ideas, sueños, pesadillas, cómo y qué comemos, cómo vemos el mundo, cómo nos ubicamos, lo que pensamos de nosotros mismos, cómo hacemos el amor y con quién, cómo enterramos a nuestros muertos, cómo celebramos la vida, nuestras contradicciones, nuestros valores y normas, nuestras dudas e inseguridades y las mentiras que llevamos con nosotros. La enumeración es infinita y es diferente para cada cultura. Debemos tener presente algunas de las características de la cultura: es compartida por un grupo, es un sistema en relativo equilibrio, cambia, pues es una construcción histórica (no hay culturas “puras”).

Podemos distinguir dos dimensiones de la cultura: la cultura real, conformada por las prácticas culturales (lo que hacemos, la vida que vivimos) y la cultura ideal (lo que pensamos que es una vida correcta y buena). En la mayoría de los casos estas dos dimensiones no coinciden completamente. La cultura tiene que ver con la identidad (sentimiento de pertenencia a un grupo), pero ésta no siempre es consecuente con la cultura real. Uno de los componentes fundamentales de la cultura es el de los significados. La cultura es un sistema de significación y como tal, casi siempre es inconsciente. Vivimos nuestra cultura todos los días, pero no estamos concientes de ella (¿por qué actuamos como actuamos?, ¿qué significado tienen las cosas que hacemos?).” 

En base a lo leído en el texto precedente y a la bibliografía consultada elabora un texto sobre las características culturales de nuestra sociedad.

“El concepto de cultura, junto con el de sociedad, es una de las nociones más ampliamente utilizadas en sociología. Hace referencia a los valores que comparten los integrantes de una sociedad, las regularidades normativas (usos, costumbres, normas y leyes) mediante las cuales se rigen sus vidas, así como a los significados sociales que las personas otorgan a los objetos, a las acciones y a las relaciones sociales que se establecen entre ellas. El concepto de cultura también incluye a los objetos producidos en cada sociedad. Cada cultura en su conjunto es una producción colectiva, anónima, creada a lo largo del tiempo, en estrecha relación con las circunstancias temporales, espaciales y sociales de la sociedad donde se realiza. En la actualidad, casi todas las culturas nacionales son altamente heterogéneas, porque, por lo general, los países están conformados por grupos de diversos orígenes y con estilos de vida diferentes, como sucede en la Argentina. A la heterogeneidad interna de cada país se debe agregar el dinamismo de las relaciones internacionales, acelerado en los últimos años como efecto de la globalización. La heterogeneidad interna de cada país y las constantes interacciones internacionales producen manifestaciones culturales muy diversas. 6

Por su parte, el concepto de sociedad alude a la red de relaciones sociales que se establecen entre los integrantes, grupos e instituciones de un conjunto de personas. Los conceptos de cultura y sociedad se diferencian teóricamente pero son inseparables; son las dos caras de una moneda. Toda sociedad tiene una cultura y toda cultura es puesta en práctica por individuos que se interrelacionan; es decir, la cultura se manifiesta en una sociedad. El mundo social es también un mundo cultural porque está pleno de significaciones. En él las personas actúan y se relacionan entre sí, comprenden sus acciones y las de otros, explican sus interacciones. Por eso, al mundo social también se lo denomina mundo socio-cultural. En el proceso de socialización, los individuos internalizan la cultura del mundo social en el que viven y el aprendizaje producto de sus propias experiencias. A través de este proceso van construyendo su visión del mundo. Ésta incluye tanto el conocimiento e interpretación que tienen las personas de sí mismas (su identidad personal) como los conceptos, las creencias, los valores y las opiniones que poseen sobre el mundo social y natural en el que desarrollan sus vidas (su contexto espacial, temporal y social). Por ejemplo, cuando una persona acompaña a un amigo que está triste, no lo hace sólo por el deseo de ayudarlo. También lo hace porque sabe cómo hay que comportarse frente a los amigos: la acción de acompañarlo está íntimamente vinculada a su concepto de amistad. Además, puede ser una persona que considera importante el valor de la solidaridad o que pertenece a un grupo en el que se aprecia ese valor. Aunque a primera vista parezca que esa acción está exclusivamente motivada por un sentimiento personal, se puede analizar en qué contexto socio-cultural se despierta y se expresa ese sentimiento” 7.

CIVILIZACIÓN Como con cultura, a lo largo de la historia, el significado del término civilización también fue cambiando. En principio, en la antigua Roma, el vocablo civilis –del cual proviene la palabra civilización- se refería a la vida política, al Estado, al conjunto de los ciudadanos.

A comienzos del siglo pasado, se afirmaron dos posturas con respecto al término. Así, por un lado, pasó a entenderse como sinónimo de cultura y de sociedad; por otro lado, se aplicó el concepto para designar el estado alcanzado por los pueblos más desarrollados. Pero ¿qué se entendía por “pueblos más avanzados”? La expresión señalaba a aquellos grupos numerosos con determinados adelantos técnicos, una gran concentración demográfica en las ciudades y un nivel al que todas las sociedades desearían alcanzar. De este modo, se legitimaba la dominación de un pueblo sobre otro, y se determinaba la existencia de culturas superiores e inferiores.

El concepto siguió evolucionando y, en la actualidad, se entiende por civilización al proceso que forma parte de un proceso mayor: la cultura. La civilización es el resultado histórico de las culturas urbanas; por eso, su centro se encuentra en las ciudades y se caracteriza por las relaciones sociales que se establecen en función de la técnica, la industrialización y la ciencia. 7

Falicov, Estela y Lifszyc Sara (Coord). Sociología. Aique Grupo Editor, Buenos Aires, 2008, 85-86. 7

CIVILIZACIÓN-BARBARIE. “Ambos términos deben ser considerados como una unidad, en el sentido de que "se necesitan" para ser entendidos en su singularidad. Constituyen contrarios que sólo se explican a través de la existencia mutua. El término CIVILIZACIÓN fue usado por primera vez por Adam Fergusson (1723-1816), historiador y filósofo escocés. En general se aplica a un período determinado de la historia universal, contrapuesto a las etapas anteriores de salvajismo y BARBARIE, conceptos que se refieren a la época de la comunidad primitiva. En tal sentido, la noción de civilización fundamenta toda una concepción de la historia originada en Occidente, a partir de una visión etnocéntrica que lleva a desconocer e inferiorizar a las otras culturas existentes. El significado de estas categorías, además, se ha ido modificando a lo largo del proceso histórico”8. “A partir del s. XV comienzan los viajes de descubrimiento, Europa empieza a tomar contacto con “nuevos mundos”. Los viajes se hacen cada vez más frecuentes, enriqueciendo el conocimiento sobre nuevos pueblos. Desde fines de la Edad Media y principios de la Edad Moderna, se producía un asombroso desarrollo económico a través de la industria, la minería y luego el auge del gran comercio. La relación, establecida entre América y España es la que caracteriza este período mercantilista. La burguesía comenzó a influir políticamente y a reclamar sus derechos. Esta nueva clase buscó el apoyo del rey para su surgimiento, y éste a su vez encontró en ella una forma de debilitar el poder de los señores feudales. Es así como fue desarrollándose en Europa (s. XVII-XVIII) un sistema político, cultural y económico basado en el absolutismo monárquico. Pero el malestar social iba en aumento ante la irritante desigualdad social. En toda Europa comienza a advertirse una reacción opuesta al sistema imperante. Surgen las "nuevas ideas" liberales, sostenidas sobre todo por la burguesía, que había hecho posible el triunfo del régimen y resultaba perjudicada por los privilegios mantenidos por la nobleza. Se niega el origen divino del rey atribuyéndolo al consentimiento de los ciudadanos (Locke), se critican las instituciones proponiendo una reforma total de la sociedad (Rousseau). Los filósofos de la ILUSTRACIÓN evocaban la humanidad en sus comienzos, el grado cero de la cultura, la última imagen del hombre naturalmente bueno. Nos dice Rousseau que el hombre de la Naturaleza era feliz y virtuoso; posteriormente, cuando reyes, legisladores y clérigos comenzaron a intervenir en su gobierno, sobrevino su decadencia. Se elabora así "el mito del Buen Salvaje", aquel ser que ha podido permanecer en armonía con la Naturaleza. La humanidad se habría desarrollado como un individuo obligado a recorrer eI camino que lo lleva de la infancia-salvajismo a la edad adulta-civilización. Y ese "Buen Salvaje" se encuentra en las tierras recién conquistadas. Así Occidente establecerá la forma de conocer a los habitantes de América, África, Oceanía, de acuerdo con una imagen que le es 8

Di Tella, Torcuato; Chumbita Hugo; Gamba Susana; Gajardo Paz. Op. cit., 89. 8

útil en la medida en que puede explicar su sociedad y reorganizarla. La modificación de las estructuras socioeconómicas ocurrida en Europa desde principios del s. XVIII sienta las bases para la REVOLUCIÓN INDUSTRIAL, y abre paso al liberalismo económico. Hubo un aumento de la población en toda Europa, que trajo consigo nuevos problemas sociales: éxodo rural y formación de un proletariado urbano. Se necesitaban mayores cantidades de materia prima y nuevos mercados para colocar el exceso de producción. La desocupación iba en aumento, constituyendo un gravísimo problema que se intenta solucionar mediante la ocupación de otras tierras. A mediados del s. XIX, las grandes potencias inician un gran movimiento de expansión hacia otros continentes, extendiendo su poderío y la influencia de la raza blanca por todo el mundo. Como dice Worsley: "El logro europeo de este período... marcó el alba de una nueva era de la historia humana, caracterizada por un imperialismo de nuevo tipo como respuesta a claras y nuevas presiones económicas y financieras en la propia Europa. Y tuvo lugar, como resultado, la unificación del globo en un solo sistema social". Como consecuencia de la penetración colonial, el interés por las sociedades exóticas se acrecienta y las misiones científicas se multiplican. Médicos, geógrafos y administradores coloniales producen informes que son mucho más que simples crónicas de viaje. Se trata de hacer un inventario de las sociedades humanas. La investigación de los orígenes del hombre llevó a las tentativas de reconstrucción de estadios anteriores de su historia. Las investigaciones efectuadas en el dominio de la biología y la publicación de la obra de Darwin colaboraron con esos intentos. Con el contacto real, los hombres comenzaron a conocerse. La relación que Europa había mantenido con sus colonias era de subordinación y sometimiento. Esta situación influye directamente en la visión que se tiene de los habitantes de las colonias, reconocidos como hombres pero ubicados en una etapa de evolución inferior con respecto a las sociedades occidentales. Los "salvajes" se convierten en “primitivos", testigos residuales de la infancia de la humanidad, punto fijo de la historia. Entre ellos y Occidente hay una serie de transformaciones y de estadios por los que la humanidad debe obligatoriamente pasar. Este sistema implantado por Europa se funda en la creencia de una sola cultura dividida en etapas a recorrer. La sociedad blanca ya habría llegado al máximo del recorrido: la Civilización sinónimo de superioridad y prepotencia. En Ancient Society (1877) el antropólogo estadounidense Morgan describe tres fases principales: salvajismo, barbarie y civilización y vincula a cada una de ellas realizaciones económicas e intelectuales. Estaba muy presente la idea de progreso continuo, de tal manera que resultaba inevitable una visión peyorativa de todas las formas anteriores a la civilización,

visión

que

era

más

negativa

cuanto

más

lejos

estuvieran

del

"perfeccionamiento y la complejidad de la civilización occidental". Así se designó a ciertas sociedades con el calificativo de "primitivas", usando como único criterio su bajo nivel 9

tecnológico y su escaso rendimiento económico, sin considerar que se estaba haciendo una valoración desde la propia escala de valores de Occidente, situando como verdadera e incuestionable la civilización europea. De esta manera, la Civilización concebida como sinónimo de cultura niega los valores del "otro", niega todo lo que es diferente. La base del contacto entre Europa (La Civilización) y las colonias (sociedades primitivas) se construye en esa negación del "otro". El hombre "blanco", representante de un sistema económico-social orientado hacia la explotación y dominación de lo extraeuropeo, es así portador de un argumento que justifica toda su empresa. Constituye el centro del universo, por lo tanto es él quien lo ordena. Todos aquellos que intenten modificar ese orden, o que simplemente sean diferentes, serán descalificados, "asimilados" a la sociedad blanca, y relegados al final de la escala. Se ha creado una división simple de la humanidad en civilizados y bárbaros, sobre la base de una selección autocentrada de criterios. La significación de tales términos y su uso ha perdurado a lo largo de los años hasta la actualidad. Sin embargo, a partir de principios del s. XX, los antropólogos, al tomar contacto directo con los colonizados y al convivir con ellos para "comprenderlos", fueron descubriendo diferentes formas de vida, viendo en esas manifestaciones sociales diferentes culturas y ya no grados de una misma cultura, reconociendo así la diversidad cultural. De todos modos, no se modificó la calificación de aquéllas cuando pasaron a formar parte, en el proceso de proletarización, de los estratos socioeconómicos menos favorecidos de la sociedad capitalista”9.

RELATIVISMO

CuLTURal Este nuevo concepto pone de relieve que cada conjunto social tiene manifestaciones culturales propias y que no existen culturas superiores a otras, sino que cada cultura debe ser estudiada e interpretada dentro de su propio contexto histórico, espacial y social.

LA TRANSMISIÓN DE LA CULTURA Desde el mismo momento de su nacimiento, el hombre incorpora formas de actuar, de pensar, un modo de vida particular; se convierte en un miembro activo de su grupo y es introducido en un proceso de aprendizaje que le va a permitir integrarse en una sociedad y, además, le facilitará relacionarse con los otros miembros que la componen.

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Ibídem, págs. 90 y 91 10

Los procesos por los cuales se logra este objetivo se denominan enculturación y endoculturación. Estos, a su vez, determinan las diversidades culturales dentro de un mismo grupo social.

La enculturación Se le llama enculturación al proceso por el cual los individuos asimilan, comparten, modifican y transmiten las pautas culturales elaboradas por las generaciones anteriores. La enculturación se extiende a lo largo de toda la vida del ser humano, aunque se centra y se define en la adultez, ya que es uno de los factores que permiten el desarrollo de la personalidad en el sentido de formación de conductas, relativamente durables, integradas en una totalidad. El proceso se desarrolla en dos direcciones: por un lado, la transmisión y, por otro, la incorporación activa de los bienes culturales, por la cual se asimilan las formas de vida propias del grupo. Este proceso continuo y dinámico le permite al hombre vivir en sociedad organizadamente y, además, le facilita el hecho de poder transmitirles a sus hijos la cultura que él recibió y, a su vez, modificó. Generalmente, todas las personas asimilan las pautas culturales de su familia en un primer momento y, más adelante, las de su grupo social. Por esto es importante la enculturación, ya que establece un contexto de límites y formas correctas que dictan que es apropiado y que no en el marco de una sociedad.

La endoculturación La endoculturación es el proceso que ocurre en los primeros años de la vida de un individuo. Se produce gracias a los adultos (padres, maestros, familiares, vecinos) que transmiten la cultura, a los niños, para que así estos vayan construyendo su primera visión del mundo. Estos primeros pasos resultan fundamentales, porque las pautas socioculturales asimiladas por un niño se fijan con mucha fuerza y estabilidad, ya que los pequeños establecen un vínculo emocional muy intenso con quienes les enseñan. De esta manera, los chicos hacen propios valores y normas que, junto con otros factores característicos del crecimiento, crearán la estructura de su personalidad. Este proceso de "internalización" posibilita separar al niño del grupo familiar para que áquel participe de grupos informales con individuos de la misma edad y, así, pueda crear conflictos entre lo recibido de su familia y las formas de ser y de pensar de sus compañeros; lo cual le permitirá, al niño, la integración en nuevas categorías sociales.

BIENES CULTURALES10 Toda herencia o patrimonio podemos decir que está compuesta por bienes, o sea, el conjunto de elementos que forman parte de esa herencia. Éstos pueden ser materiales o inmateriales.

Lo material se refiere a lo tangible, lo que podemos tocar y ver, entre ellos están bienes muebles y bienes inmuebles. Los bienes muebles son aquellos que por su naturaleza y tamaño pueden ser transportados fácilmente, por ejemplo una silla, una estatua, un cañón, un libro, joyas, etc. Mientras que los bienes inmuebles son aquellos que por su naturaleza y tamaño no pueden ser transportados, aunque se debe aclarar que gracias a la tecnología moderna pueden ser transportados de un sitio a otro, como fue el caso del Templo de Abu Simbel en Egipto que fue desmontado piedra, por piedra, hasta otro sitio más alto donde no pudiese ser alcanzado 10

http://www.mailxmail.com/curso-patrimonio-cultural/bienes-culturales 11

por las aguas de la represa de Asuán que estaba en construcción. Entre los bienes inmuebles podemos encontrar edificaciones como: casas, castillos, palacios, iglesias y cascos históricos de ciudades. Los bienes pueden ser nombrados monumentos por medio de procedimientos legales que propicia en un principio el pueblo, para luego ser el Estado quien se encargue de la viabilidad del procedimiento para promulgar el decreto que lo considere monumento. Estos bienes inmuebles responden a una legislación particular, a la vez que su conservación y preservación son especialmente dirigidas a la conservación de toda su estructura, además que muchos de ellos sirven de museos tanto de época, como también son sede de algunas instituciones de carácter cultural o académico. Los bienes muebles se pueden hallar en los bienes inmuebles formando parte de un conjunto total, a la vez que esos bienes inmuebles puede llegar el caso que se hallen en un sitio histórico, lo que hace que todo ese patrimonio tenga que generar una serie de normativas que rijan su uso. Con un estudio sistemático acerca de los mismos a través de la educación formal se podrá elevar el nivel de conciencia sobre la importancia de estos bienes; su protección, conservación y desarrollo, reafirmando su valor como Patrimonio Cultural y expresión tangible y testimonial de las raíces de los pueblos. Los bienes Culturales Inmateriales o Intangibles son el conjunto de elementos que forman parte de la herencia del pueblo y que por su naturaleza no podemos tocar, pero sabemos que se hallan presentes en nuestra vida cotidiana y que pasan de generación en generación, enriqueciéndose cada vez más con el dinamismo de nuestra cultura, ellos son tan numerosos que unos ejemplos no bastarán para contarlos: creencias mágico religiosas, nuestra tradición histórica, la música, los bailes, los relatos orales, ritos, oraciones, los modismos al hablar, las normas de comportamiento, etc. Estos también ameritan ser protegidos y conservados pues ellos tienen " tangibilidad " en el momento en que se materializan, por ejemplo, cuando ejecutamos un baile, o cuando narramos anécdotas de nuestra historia y más aún cuando un grupo de artesanos elaboran una cesta o un poncho, pues ese acervo de conocimientos y técnicas han pasado de generación en generación, como un legado que cada día va creciendo pero que debe guardarse para provecho y conocimiento de las nuevas generaciones, pues ellos son las que dan forma, como un conjunto de elementos entremezclados, a la tipificación y caracterización de nuestra cultura.

La diversidad cultural "En diversas partes del mundo, en las más espesas selvas y las islas más pequeñas, grupos de individuos, que diferían de sus vecinos en lenguajes y costumbres, fueron elaborando experiencias que permiten trabar conocimiento con su naturaleza íntima. La incansable imaginación de muchos hombres se manifestó trazando de diversos modos el pasado histórico de la especie inventando nuevas herramientas, nuevas formas de gobierno, nuevos y diferentes planteos del problema del bien y del mal, nuevos conceptos sobre la posición del hombre en el universo, [...] Mientras un pueblo alcanzaba los Iímites de una licencia ritual, otro imponía a todos sus miembros Ia abstinencia durante ciertas estaciones o durante años enteros. Mientras uno convertía a sus muertos en dioses, otro prefería ignorarlos, elaborando en cambio una filosofía de la vida para !a cual el hombre es como una hierba que nace al amanecer y que es arrancada para siempre a la hora del crepúsculo." 12

Margaret Mead11

¿Les parece útil analizar científicamente las costumbres de sociedades distintas de la nuestra, aplicando criterios vigentes en nuestra sociedad? Fundamenten su respuesta. ¿Qué beneficios personales y sociales proporciona conocer los estilos de vida, las costumbres y los valores de otras sociedades?

PROCESOS DE CAMBIO CULTURALES A partir de la creación de herramientas, de la división internacional del trabajo, del surgimiento del lenguaje y de otras muchas prácticas culturales, el hombre primitivo comenzó a transformar el medio ambiente y empezó a agruparse en sociedades.

Asimismo, dentro de cada sociedad, se fueron armando grupos que compartían códigos propios, además de los comunes a la sociedad en general; con lo cual se originó una diversidad de formas de vida, cada una con sus propias particularidades. Éstas últimas se han ido modificando continuamente, ya que la transmisión de la cultura entre los miembros de un mismo cuerpo social y los de otras sociedades implica una permanente recreación y un constante intercambio. Se construye, así, un proceso dinámico que varía de acuerdo con las distintas culturas comprometidas.

Los cambios socioculturales se producen a causa de distintos factores, desde el clima y las condiciones del ambiente hasta el nacimiento de nuevas ideas, el desarrollo de la tecnología, las formas de organización de los sistemas económicos, políticos y sociales, y la evolución de los modos de intercambio con otros grupos. Los factores que producen estos cambios socioculturales pueden ser:  Endógenos, es decir, generados dentro de un mismo pueblo o dentro de una misma sociedad, o  Exógenos, esto es, originados fuera de la propia cultura o fuera del propio contexto, como producto de los distintos contactos o situaciones entre los grupos. Ambos factores están íntimamente relacionados, ya que operan de manera conjunta. Por eso, es muy difícil establecer qué factor en particular produjo un determinado cambio cultural. Son los factores endógenos de cada pueblo los encargados de procesar, a su modo, los objetos culturales recibidos. Por ejemplo, la moda se propaga hoy a una velocidad increíble, gracias-básicamente- a la televisión. Pero la ropa de moda no es la misma para la clase alta de Nueva York que para los obreros de Hong Kong, sino que se transforma de

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Mead Margaret. Educación y cultura. Paidós, Buenos Aires, 1952 en Falicov, Estela y Lifszyc, Sara (Coord). Op. cit., 83. 13

acuerdo con las necesidades y con las posibilidades de cada país y de cada grupo social en particular. El dinamismo que se produce como resultado de la intervención de estos factores endógenos y exógenos permite que las sociedades crezcan y que formen una identidad cultural. A su vez, a partir de los conflictos entre los distintos componentes culturales, nacen diversos procesos, como la enculturación, la multiculturalidad o la aculturación.

La cultura, como un proceso continuo, interactúa entre los hombres y las diferentes sociedades. Pero a partir de los distintos intercambios entre los pueblos y sus culturas, surgen problemas de diversa índole. Para comprenderlos y resolverlos, se han ido estableciendo conceptos como etnocentrismo, aculturación, multiculturalidad y transculturación. Estos constituyen algunas de las muchas clasificaciones que permiten explicar los procesos de cambio en las diferentes culturas. El etnocentrismo Cuando alguien visita un país extranjero, inmediatamente nota la desigualdad que existe entre sus habitantes y esa persona que visita aquel país. La comida no tiene el mismo sabor; se habla otra lengua o, si ésta se comparte, presenta variaciones en el uso de algunas palabras o en su pronunciación; la vestimenta muestra ligeras o marcadas diferencias; las casas se decoran de distinto modo; y varían hasta los códigos de comunicación gestual. En muchos casos, estas costumbres extrañas al ámbito cultural del visitante son evaluadas por él como equivocadas e inferiores en relación con las de su cultura de origen. Esta actitud de apreciar la propia cultura, considerarla superior a las demás y creer que el propio grupo de pertenencia es el centro de todas las demás culturas se llama etnocentrismo. Cuándo este sentimiento de agrado hacia la propia cultura limita la comprensión de otras formas de vida diferentes y "lleva a juzgarlas inferiores, se produce un prejuicio cultural, o xenofobia. A lo largo de la historia de la humanidad, esta actitud ha provocado la dominación de unos pueblos sobre otros con la pretensión de imponerles las propias normas, hábitos y objetos culturales, y hasta ha conducido a unos a cuestionar la calidad de seres humanos de otros por su pertenencia a un ámbito distinto. Cuando los españoles conquistaron América, dudaban de si se debía considerar humanos o no a los "salvajes" que habitaban estas tierras. Hitler, por su parte, exterminó a los judíos porque consideraba que ellos no formaban parte de la cultura alemana, la cual él estimaba como "superior". Pero el desprecio por otra cultura no sólo existe entre diferentes sociedades, sino también entre los distintos grupos que integran una misma sociedad. Esto sucede cuando los poderosos presentan su propio sistema cultural como un orden natural, lo que les sirve para sustentar situaciones de privilegio y para explotar a los demás. Si bien estos grupos pueden llegar a compartir ciertos códigos comunes con otros, siguen manteniendo la idea de que la cultura propia es la mejor o la única.

EL MITO CHEROKEE SOBRE EL ORIGEN DE LA RAZA HUMANA "Los indios cherokees conocen a blancos y negros. Tienen la piel morena y consideran que los actos de los seres sobrenaturales una vez ejecutados son irrevocables. Como en la mayor parte de las mito14

logías, el hombre es la obra más perfecta del Creador, quien lo creó haciendo primero un horno y encendiéndolo, de la masa preparada dio forma a tres figuras humanas, colocó las figuras en el horno y esperó que se cocieran. Pero su impaciencia por ver el resultado del experimento, que coronaba su obra de creación, era tan grande, que retiró una figura demasiado pronto. Estaba lamentablemente a medio cocer, pálida, de color desagradable. Pero, buena o mala, ahí estaba y de ella desciende el hombre blanco. Su segunda figura salió bien, en el tiempo justo, y en la forma en que él la había pensado. Muy morena, le agradaba en todos los aspectos, y esta figura fue el antepasado de los indios. Tanto la contempló que se olvidó de sacar del horno la tercera forma, hasta que olió que se estaba tostando. Abrió la puerta rápidamente y encontró su última figura carbonizada y negra. Fue lamentable, pero no había nada que hacer; de aquella figura desciende el hombre negro." Herskovitz Melville. El hombre y sus obras. México. Fondo de Cultura Económica, 195212.

La aculturación. Cuando dos culturas entran en contacto y realizan intercambios de bienes culturales, se genera un proceso lineal por el cual modifican sus identidades, pero sin perder sus características originales. En cambio, cuando la relación que se establece entre dos grupos implica la dominación de uno sobre otro, se crea una relación asimétrica en la cual el grupo dominante impone sus normas y sus pautas culturales. Este proceso se denomina aculturación. La palabra proviene del latín, acculturatio, y se vincula a un prefijo privativo de origen griego "a-" que significa 'privar', 'quitar algo que le pertenece por naturaleza a un grupo'. En el proceso de aculturación, dos culturas con identidades diferenciadas se conectan y, luego de diversos conflictos y de enfrentamientos, una pasa a ser la "cultura dominante; y la otra, la dominada. Esta última suele sufrir la aniquilación de su universo cultural y, también, su modo de vida. Esto sucede porque la aculturación se origina a partir de situaciones de poder de una cultura sobre otra (poder tecnológico, poder económico, etcétera) y porque la cultura más fuerte puede utilizar la violencia para imponer nuevos códigos, como sucedió en las sociedades coloniales. El fenómeno presupone el reconocimiento de la superioridad de la cultura extraña por parte de sus integrantes y por parte, también, de los individuos aculturados, lo que hace que estos abandonen la cultura autóctona con mayor rapidez de lo que logran asimilarla nueva. Así, se crean nuevas pautas, que siguen una única dirección: la trazada por el grupo dominante. La dominación culturar se establece a partir del poder tecnológico y económico de una sociedad sobre otra. Por medio de ella, "la sociedad dominada puede modificar desde sus modos de vida hasta su lengua. Hoy en día, por ejemplo, en las conversaciones cotidianas de numerosos países del mundo, se emplean términos provenientes del inglés, como shopping por 'paseo de compras', o sold out por 'localidades agotadas'. Asimismo, la famosa fiesta de Halloween, costumbre de los Estados Unidos, ha sido llevada a lugares en los que se celebra sin comprender su objetivo ni su origen, ni tampoco su significado. Si bien los ejemplos expuestos indican una dominación muy pacífica, las prácticas mencionadas se encuentran dentro del fenómeno de aculturación, porque obligan a las personas a que modifiquen su modo de vida en función de pautas sociales extrañas que se estiman 12

Falicov, Estela y Lifszyc, Sara (Coord). Op. cit., 92.

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provenientes de una cultura dominante en el mundo y, en cierto sentido, considerada "superior": la norteamericana. La multiculturalidad La multiculturalidad es un fenómeno que acompaña el crecimiento de las grandes ciudades, a las que continuamente llegan contingentes de personas de los más diversos orígenes. En esos lugares, cada comunidad mantiene su cultura en coexistencia con las otras allí asentadas. La complejidad multicultural de las grandes urbes, como Buenos Aires o como el distrito federal de México es, en gran medida, el resultado de las migraciones. En el caso de Buenos Aires, el proceso comenzó a mediados del siglo XIX, cuando llegaron los primeros inmigrantes europeos (entre ellos, españoles, italianos, franceses, polacos e ingleses). Esto convirtió el lugar en una de las primeras ciudades multiculturales del Nuevo Mundo. En ese momento, la idiosincrasia local tendía a construir una identidad nacional con la aglutinación de los extranjeros. Sin embargo, la heterogeneidad cultural se convirtió en un rasgo característico de América Latina, rasgo que ha permitido que cada comunidad mantuviera su cultura de origen en coexistencia con las demás. El modelo de las culturas latinoamericanas le debe mucho a Europa, aunque, durante el siglo XX, las influencias europeas comienzan a combinarse con las diversas tradiciones nacionales. Por otra parte, desde mediados del mismo siglo, se intensifican los intercambios culturales entre América latina y los Estados Unidos, intercambios que dejaron su huella en las artes visuales, la informática, la industria editorial y en la televisión. Pero el concepto de multiculturalidad implica algo más que la sola presencia de distintas culturas en un mismo espacio. Así, en su estudio sobre México, el investigador Néstor García Canclini, se refiere a la presencia de diversas ciudades en una. En principio, Canclini comienza a narrar acerca del México histórico, habitado primero por las culturas precolombinas, que sigue presente en muchos monumentos conservados en la actualidad. El estudioso continúa, luego, con la conquista española, cuando aparece la ciudad colonial, que se edifica sobre la anterior -de la ciudad colonial se conserva, por ejemplo, la catedral de México, hecha sobre las ruinas de la cultura de Tenochtitlán (vieja capital del imperio azteca)-. Después, el investigador relata el crecimiento de la ciudad industrial, que se extendió a todo el conurbano. Por último, de acuerdo con Canclini, apareció la ciudad comunicacional, que desarrolló nuevos centros que, por distintas razones, se construyeron en sitios diferentes de la parte histórica. Esta ciudad se conecta con sus distintos barrios y con las demás ciudades extranjeras ya no sólo por los tradicionales transporte terrestres y aéreos, por el correo y por el teléfono, sino también por fibra óptica, Internet y por los satélites

La transculturación En la actualidad, la identidad cultural, aun en los más amplios sectores populares, está formada por elementos cruzados de varias culturas. La palabra transculturación se refiere a ese proceso por el cual dos o más culturas comparten y mezclan sus pautas, objetos y costumbres; con lo que se genera, finalmente, una nueva "cultura." El vocablo expresa las diferentes fases del proceso de transición de una cultura a otra, que no consiste en la mera adquisición de una cultura distinta (en ese caso, se denominaría aculturación) sino que se trata, también, de la pérdida o del desarraigo de una cultura a la que se pertenecía anteriormente. 16

Las teorías antropológicas sobre las culturas han estudiado los contrastes entre los grupos a partir de las diferencias existentes entre ellos. El problema reside en que la mayor parte de las relaciones entre culturas se configura hoy no sólo por las diferencias de las culturas desarrolladas separadamente, sino también, por las maneras desiguales en que los grupos se apropian de elementos de varias sociedades, los combinan y transforman. Cuando la participación de las personas en las ciudades se intensifica cada vez más y cuando se generan relaciones cotidianas con muchas culturas, la identidad no puede definirse sólo por la pertenencia excluyente a una única manifestación cultural. La música cubana es un buen ejemplo de transculturación. Cualquiera que la escuche reconoce hoy su identidad, hasta tal punto, que constituye uno de los objetos culturales cubanos más representativos en el mundo, además de los habanos. Sin embargo, ha resultado ser la confluencia de manifestaciones musicales provenientes de dos vertientes distintas: la del colono blanco, de origen europeo, y la del esclavo negro, de origen africano. Se trata, pues, de una música "mulata" nacida de la mezcla.

TEORÍA DE LOS CAMPOS CULTURALES La cultura se expresa en distintos niveles. Cada uno se relaciona con el estrato social al que se dirige y con el que se identifica. De esta manera, surgió una primera caracterización que opuso la cultura de elite a la cultura popular. Este primer binomio se amplió a partir de la aparición de los medios masivos de comunicación, que favorecieron el origen de la cultura de masas. Mediante estos tres niveles, se expresan las producciones culturales de las diversas sociedades. LA CULTURA DE ELITE El término elite designa al conjunto de personas sobresalientes y distinguidas dentro de un grupo. Se conoce de esta manera a quienes se hallan en una situación de privilegio con respecto a los otros integrantes del grupo, ya sea en el orden político, económico, religioso, educativo, intelectual o profesional. El concepto de cultura de elite se refiere a los fenómenos culturales producidos por los miembros de una elite. Esta cultura, por su origen, representa, en su ideología, la identidad de los grupos dominantes. La cultura de elite es utilizada, en muchos aspectos, como un instrumento de dominación. Para tal fin, sus expresiones se diferencian de las que pertenecen a las culturas popular o de masas y, además, proponen productos culturales que se alejan de la generalidad. La elite cultural propone una visión que presenta su modo de vida como un modelo por alcanzar. De esta manera, le otorga un valor cultural y positivo sólo a lo que pertenece al ámbito de las bellas artes, las letras, la filosofía, etc. En otras palabras, para la elite, la cultura pertenece a un campo restringido al que sólo una minoría selecta tiene acceso. Esta concepción sobre el valor positivo de ciertas manifestaciones culturales se opone al sentido antropológico de cultura, que no tiene apreciaciones valorativas y que engloba dentro del concepto de cultura todas las actividades del hombre sin distinción de grupos o de clases sociales.

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LA CULTURA POPULAR Si bien no existe una definición unánime de cultura popular, se considera que intervienen en ella, lo material, lo espiritual, lo intelectual y lo afectivo. La definición abarca, asimismo, pautas socioeconómicas, políticas, religiosas y artísticas. En sus orígenes, la cultura popular estaba integrada por todo lo que distinguía a las clases más humildes. La existencia de una clase social más alta y de una cultura que la identificaba había provocado una brecha respecto de los hábitos, costumbres, vestimentas y expresiones artísticas de la población. Entonces, en esos contextos, donde existe una fuerte dominación por parte de una cultura oficial, surgen expresiones de los grupos sociales subalternos. Por lo general, se considera que las culturas populares son manifestaciones que se oponen a la cultura oficial y, por lo tanto, no cuentan con el apoyo de las instituciones oficiales. Las producciones de la cultura popular, por lo general, son colectivas y su principal función es lograr la cohesión y fomentar la noción de identidad de un grupo humano. Existen, dentro de la cultura popular, manifestaciones artísticas que, en principio, están desarrolladas por individuos que no cuentan con un estudio o con una preparación específicos para dibujar, pintar o para ejecutar música. En consecuencia, los artistas populares- es decir, todo miembro de una comunidad que se exprese artísticamente- se diferencian de los artistas profesionales, que son dueños de un oficio o de un saber específicos. LA CULTURA DE MASAS La cultura occidental del siglo XX se caracteriza por la introducción de nuevos lenguajes en el arte, la alteración de los hábitos de comunicación y de escucha, la crisis de los cánones estéticos tradicionales y de la noción misma de “obra de arte. Simultáneamente, se produce un nuevo fenómeno: el consumo masivo de cultura, que fue posible gracias a la aparición de los medios de comunicación. El concepto de cultura de masas surgió en la década de 1930, con el advenimiento de los medios de comunicación. En esa época, en Europa, cobraron fuerza los regímenes dictatoriales en varios países, como Alemania, Italia y España, dirigidos por representantes de la pequeña burguesía. En estas circunstancias, los medios de comunicación sirvieron como vehículo de propaganda ideológica y como medio para sembrar el terror en los pueblos. La cultura en los siglos XX y XXI La explosión demográfica de los grandes centros urbanos durante el siglo XX, producto del abandono de las áreas rurales, reforzó todos los elementos de la cultura popular, como forma de conservar la identidad por parte de la población inmigrante. Además, en los últimos años, gracias al consumo masivo de diferentes objetos culturales, la cultura popular comenzó a relacionarse con aspectos de la sociedad de masas. A partir de ese momento, los grupos que ejercían el poder político y económico comenzaron a privilegiar estas manifestaciones culturales.

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En el siglo XX, muchos artistas profesionales produjeron expresiones de arte popular, con lo que se borró la mencionada separación entre este arte y el culto. De hecho, existe un notable incremento en el intercambio que se genera entre estas manifestaciones artísticas, lo que origina nuevas tendencias. Un caso de fusión y de intercambio se produjo con el tango. Esta expresión artística, de origen popular13, fue refinada y estilizada por músicos profesionales hasta convertirla en música para ser, sobre todo, escuchada y no tanto para que fuese bailada. Entonces, si bien el tango continúa siendo popular en cuanto a sus orígenes, se ha convertido en una manifestación cercana a la de cultura de elite.

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Algunos títulos de tangos de principios del siglo XX: “El Choclo”, “El serrucho” y “La Budinera” son metáforas de órganos corporales. Los siguientes son títulos picarescos o pornográficos: “Embadurnarme la persiana”, “Colgate del aeroplano”, “No me pisés la pollera”, “Aquí se vacuna”, “Golpiá que te van a abrir”, “Bronca con la percanta”, “Sacámele el molde”, “Soy tremendo”, “Chiflale que va a venir”, “Que rana para un charco”, “No empujés caramba”, entre otros. Información extraída de Letras y temas de los primeros tangos, en http://www.denorteasur.com/asp/articulo.asp?numero=320&id=7688 19

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