El imperio persa surgirá por obra de Ciro. Al revelarse contra el rey meda Astiages, consiguió la unidad de medos y persas (549).
CIRO se presenta en Babilonia como el elegido de Marduk, en Ur como el enviado de Sin, y ante los judíos como el ejecutor de las órdenes de YHWH. Las estatuas de los dioses pueden volver a sus antiguos santuarios a donde las había llevado Nabucodonosor. En su célebre edicto (Esd 6,3-5) Ciro restituye a Jerusalén no la estatua inexistente del dios judío, sino los vasos sagrados y el ajuar cultual que habían sido robados por Nabucodonosor.
Fue entonces cuando Ciro proclamó el estado de paz y desarrolló una política tolerante. Esta benevolencia de los persas, pueblo arios, contrasta con la crueldad de los semitas -asirios y babiloniosque habían fundado sus imperios precedentes sobre el exterminio, la tortura y las deportaciones.
Rollo del Edicto del Rey Ciro
Tras el edicto de Ciro los judíos son libres para regresar a su país y reconstruir el templo de Jerusalén. Así se realizaba lo que el Segundo Isaías había anunciado a los exiliados. ¡Eran libres de nuevo! Pero pronto se van a ver decepcionados y desilusionados. La nueva situación en poco se parecía al cuadro brillante que habían imaginado los profetas del destierro cuando soñaron con el regreso a Judá.
En el deutero-Isaías están escritas las cuatro piezas líricas: que describen a un discípulo perfecto que predica la fe verdadera, sufre para expiar los pecados del pueblo y es glorificado por Dios.
Isaías (Is 1-39) Deutero Isaías (Is 40-55)
Trito Isaías (Is 56-66)
El profeta condena severamente los pecados e infidelidades de Israel; para Isaías, el Señor era ante todo el Dios Santo de Israel, que pedía justicia en las relaciones y sinceridad en el culto. Antes del Exilio. Profeta anónimo del exilio, considerado por muchos el mayor profeta y el mejor poeta de Israel, no nos ha dejado ni un solo dato sobre su vida. En el Exilio y en el camino de regreso. La problemática es muy diversa (palabras de consuelo, denuncia de las autoridades, condena de la idolatría, etc.). Su redacción inspirada por Deutero Isaías. Ya en Sión.
Encontramos un grupo "liberal" que se adapta a la nueva situación desde el punto de vista de la lengua, las costumbres y la forma de vida. Este grupo está dispuesto a toda clase de pactos.
El otro grupo, los conservadores, herméticamente cerrado a todas las innovaciones y a todas las influencias extranjeras. Su única preocupación es salvar la herencia del pasado.
El templo es la institución que va a servir como lugar de reunión. La gran reforma de Esdras, cien años después del primer regreso, dio a la comunidad cúltica judía una forma que va a ser decisiva en los próximos siglos. El servicio divino del culto se convierte en un asunto propio del clero. Los sacrificios se multiplican y el clero aumenta.
Unos esperan que el ansiado regreso y re-construcción, aportará a Israel la grandeza y la felicidad, y a los paganos, el juicio y la aniquilación.
Para otros, en cambio, el objetivo salvífico último de Dios incluye también a los paganos.
El Templo fue reconstruido, pero las esperanzas de los profetas post-exílicos no se realizaron. No se reconstituyó un estado que tuviera al frente a un rey y un sumo sacerdote. Por tanto había que llenar este vacío de alguna forma.
A partir del año 515 a.C. en que se termina la construcción del templo apenas sabemos nada de los acontecimientos en la pequeña provincia de Judá. Este silencio de las fuentes se ve sólo interrumpido por el ministerio de Esdras y Nehemías sobre el cual tenemos una importante fuente de formación en los libros que llevan sus nombres. Son ellos realmente los que perfilarán las líneas maestras del judaísmo post-exílico.
Nehemías 8, 1-12
1 Entonces
todo el pueblo se reunió como un solo hombre en la plaza que se abre ante la Puerta del Agua, y pidió a Esdras, el letrado, que trajera el libro de la ley de Moisés, que Dios había dado a Israel. 2 El sacerdote Esdras trajo el libro de la ley ante la asamblea, compuesta de hombres, mujeres y todos los que tenían uso de razón. Era el día primero del mes séptimo [mediados de septiembre]. 3 En la plaza de la Puerta del Agua, desde el amanecer hasta el mediodía, estuvo leyendo el libro a los hombres, a las mujeres y a los que tenían uso de razón. Toda la gente seguía con atención la lectura de la ley. 4 Esdras, el letrado, estaba de pie en el púlpito de madera que había hecho para esta ocasión…
5
Esdras abrió el libro a la vista de todo el pueblo ya que se encontraba en un puesto elevado, y cuando lo abrió, toda la gente se puso en pie. 6 Esdras bendijo al Señor, Dios grande, y todo el pueblo, levantando las manos, respondió: Amén, amén. Después se inclinaron y adoraron al Señor, rostro en tierra. 7 Los levitas …explicaron la ley al pueblo, que se mantenía en sus puestos. 8 Leían el libro de la ley de Dios traduciéndolo y explicándolo para que se entendiese la lectura. 9 El gobernador Nehemías, el sacerdote y letrado Esdras y los levitas que instruían al pueblo, viendo que la gente lloraba al escuchar la lectura de la ley, le dijeron: Hoy es un día consagrado al Señor, vuestro Dios. No estéis tristes ni lloréis. 10 Después añadió: Id a casa, comed buenas tajadas, bebed vinos generosos y enviad porciones a los que no tienen nada, porque hoy es día consagrado a nuestro Dios. No ayunéis, que al Señor le gusta que estéis fuertes. 11 Los levitas acallaban al pueblo, diciendo: Silencio, que es un día santo; no estéis tristes.
La época de la historia que comienza va a estar determinada esencialmente por la Ley.
La ordenación religiosa en un momento en que Israel no existe como estado, se hacen tan importante que ejerce su influjo sobre toda la sociedad. El Judaísmo post-exílico es una comunidad religiosa estructurada en torno a la Ley.
El delicioso libro de Rut presenta a esta mujer, una extranjera, como digna de ser admitida en el pueblo elegido, dando a entender que el ser judío no depende de la tierra en que se ha nacido, sino de la orientación del corazón a Dios Toda la narración es un canto a la solidaridad y al amor que se arriesga.
El libro de Jonás, que hace gala de un saludable sentido del humor, subraya la universalidad de la misericordia de Dios (compadecido de los habitantes de Nínive, muy en contra de la visión teológica exclusivista de Esdras y Nehemías).
El libro de Job, por último, al ahondar en la problemática del justo sufriente, plantea de manera palpable, la insuficiencia de la teología de la retribución automática.