Un momento de la charla de Pérez González con los alumnos del centro que dirigen los padres salesianos. CEDIDA
cial se pudo encontrar con los alumnos y profesores en los Departamentos de Mecánica, Electricidad-Electrónica, Gráficas y Carpintería. Estuvo acompañado por el director del colegio, Jorge Lanchas, y el director de la comunidad, Iñaki Lete. En las conversaciones con los
trabajadores del centro llevan adelante durante el curso escolar y en el deseo del propio arzobispo de encontrarse con los jóvenes y educadores del colegio salesiano en su propio ámbito escolar. También se quiso situar la visita en el marco del bicentenario del nacimiento de Don Bosco.
El colegio IrabiaIzaga celebra su 50 aniversario El oratorio fue el lugar elegido para la misa de acción de gracias en la que participaron familias y profesores S. V. Pamplona
Dentro de los actos conmemorativos del 50 aniversario que el colegio Irabia-Izaga celebra este año, el domingo 30 de noviembre tuvo lugar en el oratorio del colegio la celebración eucarística de acción de gracias presidida por el arzobispo Francisco Pérez. Con él, concelebraron el Vicario del Opus Dei en Pamplona y va-
rios antiguos capellanes del colegio. Actuó como diácono el joven Javier Domínguez, antiguo alumno de Irabia recientemente ordenado y como acólitos otros dos antiguos alumnos que realizan sus estudios en el Seminario de Pamplona. Pérez González agradeció a las familias, a los profesores y a los alumnos su entrega y generosidad y quiso destacar tres aspectos fundamentales que el colegio transmite como son “la formación humana, intelectual y comunitaria”. En el marco de la misma celebración eucarística dio comienzo la Novena a la Inmaculada que todos los años se celebra en Irabia-Izaga con asistencia de
A la celebración eucarística del pasado día 30 acudieron numerosas familias y personal del centro.
numerosas familias y que, en esta ocasión cada día será predicada por un sacerdote antiguo alumno del colegio. Este centro educativo surge en 1964 cuando un grupo de na-
varros acoge la propuesta de san Josemaría Escrivá de crear un centro educativo que estuviera abierto a personas de toda condición social. Desde entonces, por sus aulas del barrio de la
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Chantrea han pasado más de 4.500 alumnos. En la actualidad el colegio Irabia-Izaga escolariza a 1.700 chicos/as y cuenta con 940 familias y 200 profesionales de la educación.
EL QUE PUEDE MÁS QUE YO Mc 1, 1-8: Os bautizará en Espíritu Santo
A
SÍ empieza San Marcos su escrito: “Comienzo del Evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios.” La palabra “Jesucristo” es un credo en miniatura: “Jesús (es) el Cristo.” “Cristo” es la traducción al griego de la palabra hebrea “mesías”, que quiere decir “ungido”, “elegido.” En esta frase el evangelista nos está hablando de la humanidad plena de Jesús y, al mismo tiempo, del verdadero carácter de su mesianismo. No es un ungido más, como lo habían sido tantos reyes, sacerdotes y hasta algún profeta. Jesús es el Ungido por excelencia: el Hijo de Dios. El Evangelio, la Buena Noticia de Jesucristo es Él mismo: su vida, sus palabras, sus acciones, su Pasión, Muerte y Resurrección. De todo esto nos va a hablar el primer
evangelista en su libro. Juan Bautista se presenta en el desierto anunciando un bautismo de conversión para perdón de los pecados. Él tiene una viva conciencia de su papel de precursor. No es el Mesías sino su heraldo. Por eso dice: “Detrás de mí viene el que puede más que yo, y yo no merezco agacharme para desatarle las sandalias.” No se considera digno de prestarle el más humilde de los servicios, una tarea tan servil que ni siquiera se le podía exigir a un esclavo hebreo. ¡Qué admirable es el Bautista! Teniendo a la gente, como se dice coloquialmente, “en el bolsillo”, no cede a la tentación de aprovecharse de esa circunstancia. “Detrás de mí viene el que puede más que yo”, dice con claridad. No busca su bien, sino el de los que acuden a Él. No busca su gloria, sino la de Dios. Todo anuncio de la Buena Noticia ha de hacerse con este espíritu: “Yo
LA BUENA NOTICIA Juan Antonio Aznárez Cobo no soy el Mesías, yo no salvo a nadie, yo no convierto a nadie. El que viene detrás de mí, Jesús, ese sí que salva y cambia los corazones. ¡Poned en Él vuestra confianza.” “Yo os he bautizado con agua, pero Él os bautizará en Espíritu Santo.” La palabra “bautizar” significa, normalmente, “bañar.” El Bautista anuncia un baño muy especial: un baño capaz de limpiar por dentro, de lavar la mancha del pecado y, además, llenar de Espíritu Santo. Jesús es el que nos “baña en el Espíritu Santo”, es decir, quien nos sumerge en el Espíritu Santo para que quedemos impregnados, empapados de Él. Y nosotros ¿qué tenemos que hacer? Juan nos lo dice con palabras del profeta
Isaías: “Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos.” ¿Cómo? Escuchando la Palabra que el Señor nos dirige por medio de sus profetas, reconociendo a su luz nuestros pecados y volviéndonos humildemente al Señor para pedirle que nos perdone. La palabra “conversión” significa eso: `dar la vuelta.´ Dejar de mirar a los ídolos, darles la espalda y volvernos al Dios vivo. Dejar de pedir la vida a quienes no pueden darla y buscarla en su fuente. Es lo que pediremos al Padre en una de las oraciones de la Misa de este Domingo: “Señor todopoderoso, rico en misericordia, cuando salimos animosos al encuentro de tu Hijo, no permitas que lo impidan los afanes de este mundo; guíanos hasta él con sabiduría divina para que podamos participar plenamente de su vida”. Juan Antonio Aznárez Cobo es obispo auxiliar de Pamplona y Tudela