El Bululú: tiempo de revancha

10 jul. 2010 - que su programación transita no sólo las propuesta ligadas al clown sino que, también, indaga en obras de malabares y acrobacia. De hecho,.
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Espectáculos

Sábado 10 de julio de 2010

LA NACION/Página 7

TEATRO De Alejandro Mateo

Segundo Encuentro de Clown/Payaso El ángel de Osqui Guzmán logra transmitir la capacidad de mutación del recordado José María Vilches, en El Bululú

Hoy comienza la segunda parte de una trilogía

En el Parque Avellaneda, Directorio y Escalada, hoy y mañana se realizará el Segundo Encuentro de Clown/Payaso que organiza el ministerio de Cultura Porteño. La movida abarca una variedad de espectáculos para toda la familia y varios talleres que apuntan a promover este lenguaje artístico de tanta llegada popular que también sirve de soporte para varios espectáculos de la escena alternativa porteña. El festival incluye la presencia de dos grupos extranjeros que hoy, a las 15 y a las 17, se presentarán en el Complejo Cultural Chacra de los Remedios, ubicado casi en el centro del enorme parque. La primera propuesta viene

Puto, obra de alto impacto, en el Payró Esta noche, a las 23, sube a escena en el Payró Puto, una obra escrita y dirigida por Alejandro Mateo que toma las voces de algunas historias particulares que intentan preguntarse sobre los mecanismos de rechazo y repulsa hacia lo distinto, tomado como amenazante. En continuidad, y como segundo movimiento, de la trilogía que este autor y director teaPARA AGENDAR tral comenzó en Puto, nueva 2007 con Un judío obra escrita polaco, surge este y dirigida por nuevo montaje. Alejandro Puto es una hisMateo. toria de travestis Payró, San que roban enfrenMartín 766. tándose a los dicSábados, a támenes de la ley, las 23. Ende la ciencia y del tradas: $ 30; “buen decir” de estudiantes y jubilados, $ una sociedad que 15. Informes, los condena. 4312-5922. “La idea surgió a partir de una nota periodística que aludía a otra aparecida en la revista Fray Mocho, de 1912, sobre una banda de «Evas hombrunas» que delinquía travistiéndose. A la que luego se sumó la lectura del expediente policial de una joven travesti que, allá por los años cuarenta, robaba. Seres que se encontraban en exclusión por partida doble para la sociedad. Esos «otros» eran judicializados, medicalizados, rotulados, más que por delinquir, por su condición sexual que se volvía el mayor agravante para su condena: eran putos”, comenta el autor en el material de prensa. En esta puesta –en la que Mateo también se hace cargo del diseño de escenografía y vestuario– actúan Mariano Caligaris, Rafael Lavin, Nicolás Mateo, Enzo Ordeig, Walter Rosenzwit y Héctor Segura.

Las narices rojas no siempre implican resfrío

El Bululú: tiempo de revancha Osqui Guzmán da vida a la obra que José María Vilches convirtió en leyenda Muy buena ((((

El Bululú De José María Vilches. Versión de Osqui Guzmán y Leticia González de Lellis. Con interpretación de Osqui Guzmán. Dirección: Mauricio Dayub. Iluminación y escenografía: Graciela Galán. Vestuario: Gabriela Aurora Fernández. Música original: Javier López del Carril. En el Salón Dorado del Teatro Nacional Cervantes. Sábados, a las 19; y domingos, a las 18.30. Duración: 60 minutos.

El Bululú era, según cita Agustín de Rojas en Viaje entretenido, el actor que iba por los pueblos representando él solo todos los personajes de una comedia, loa o entremés. A esa actividad se volcó en los últimos años de su carrera en la Argentina el actor español José María Vilches, un dotado que había ya brillado en distintos papeles en las compañías de Margarita Xirgu y Lola Membrives, pero que creyó que la trashumancia –como en el antiguo teatro español y universal– y la metamorfosis múlti-

ple en un solo espectáculo tenían otra magia. Y lo hizo de una manera absorbente, al punto que llegó a realizar 4500 funciones de su Bululú y no sólo en distintas provincias argentinas, sino también en Chile, Uruguay, Paraguay y otros lugares. Murió en un accidente automovilístico viajando a Las Flores, provincia de Buenos Aires, mientras se dirigía a concretar otra de esas realizaciones que mucha gente todavía recuerda como un ejemplo de devoción profunda por el teatro. Por esos azares propios de la vida, una grabación de ese espectáculo cayó en manos de un joven hijo de inmigrantes bolivianos y futuro actor, que se deleitaba oyéndolo mientras trabajaba en un taller de costura de sus padres. En la escucha y memoria de los distintos fragmentos de aquel Bululú, está la raíz de esta nueva propuesta escénica, tan desbordante de encanto y emoción genuina. Decimos nueva porque el teatro

es ese prodigio de la memoria en continua mutación y Osqui Guzmán y el director Mauricio Dayub logran que varios retazos del clásico de Vilches –con sus ingeniosos textos de Cervantes, Lope de Vega o Quevedo– se mezclen y renueven sin disonancias con otros de la historia del intérprete argentino mediante la fórmula de evocar y homenajear el pasado mirándolo desde el presente. El “ángel” de Osqui Guzmán, que es tan evidente ni bien se conecta con el público, sumado a su absoluta preparación para la labor escénica, se encargan de casi todo el resto. Casi, porque es cierto que la puntillosidad de las marcaciones de Dayub, el delicado y colorido vestuario que usa el protagonista y el sugerente ámbito creado por Graciela Galán, aportan su necesaria y talentosa contribución para que este pequeño y contundente espectáculo sea tan recomendable.

Alberto Catena

de Colombia (Chupayasas) y, la segunda, de Chile (Ojos y sonrisas). Tanto hoy como mañana la oferta clownesca comienza a las 14 y concluye a las 17.30. El cierre de hoy, por ejemplo, será con Los Aguafiestas, un montaje de rock para chicos, y, mañana, será el turno de Los cuatro payasos muertos, otro propuesta que mezcla el rock con las narices rojas. Vale aclarar que toda la movida es con entrada libre y a la gorra y que su programación transita no sólo las propuesta ligadas al clown sino que, también, indaga en obras de malabares y acrobacia. De hecho, unos de los dos talleres está ligado a estas disciplinas.