34 NEUROCIENCIAS

El bienestar es salud

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Lic. María Fernanda Giralt Font

Psicóloga - Directora de INECO Bienestar www.ineco.org.ar

n las últimas décadas, el bienestar se transformó en objeto de estudio de las neurociencias, que se dedicaron a poner el acento en las razones de la salud, y no sólo en las causas de la enfermedad. En esa línea, se empezaron a investigar los estados psicológicos positivos como factores protectores de la salud física y mental. Estos estudios han empezado a demostrar que, entre otras capacidades, la de mantenerse optimista y esperanzado puede contribuir a una vida más plena y saludable. El optimismo mejora nuestro sistema inmune, previene las enfermedades crónicas y ayuda a enfrentar los momentos difíciles con confianza. El estado de bienestar produce cambios en nuestro cerebro. Las emociones positivas repercuten beneficiosamente en la atención y en la flexibilidad cognitiva. Por el contrario, las emociones negativas reducen el campo atencional y la flexibilidad.

LOS CINCO ELEMENTOS

Establecer relaciones positivas: cultivar vínculos afectivos y sociales que otorgan sentido de pertenencia. Las personas que viven aisladas son más propensas a enfermarse. El apoyo social, igual que el optimismo, tiene gran impacto en el sistema inmunológico. Sentido: tener un propósito de vida claro y definido, de entrega, transitividad, y trascendencia. Llevar adelante una vida significativa. Logro: fijar objetivos alcanzables y comprometerse intensamente a alcanzarlos. Otras prácticas y cualidades que incrementan el bienestar: La música activa las áreas cerebrales del placer. ‒ Vivir en el presente. ‒ Practicar espiritualidad y meditación. ‒ Reducir la negatividad. ‒ Ejercitar la empatía. ‒ Cultivar la gratitud, la compasión, la aceptación y el perdón. Desarrollar estos aspectos aumenta la resiliencia, entendida como la capacidad de sobreponerse a un estímulo adverso y salir fortalecido de la situación. ‒ Adquirir hábitos saludables: comer sano, dormir lo suficiente, tener una buena postura y hacer ejercicio. ‒ El ejercicio físico, entre muchos otros beneficios, genera endorfinas en el cuerpo. Éstas son opioides naturalmente sintetizados por el organismo que calman dolores y nos hacen sentir bien. ‒ Desarrollar el altruismo: encontrar un sentido o propósito a la vida más allá de uno mismo. Diversas investigaciones han profundizado en el estudio del trabajo voluntario y el impacto en las personas que lo realizan. Las tasas de depresión disminuyen en los voluntarios. Poniendo en marcha estas cualidades, podremos vivir más y mejor.

“La capacidad de mantenerse optimista puede contribuir a una vida más saludable”.

¿Qué podemos hacer para cultivar el bienestar y la salud emocional? Un primer paso para lograrlo puede ser concentrarse en el desarrollo de los cinco elementos descriptos por Martín Seligman, psicólogo y escritor estadounidense: Generar emociones positivas: disfrutar de los momentos que nos producen comodidad y placer, como la comida, el sexo, el descanso o un buen baño de inmersión. Flow o compromiso: realizar tareas que nos apasionen (pintar, dibujar, conversar con un amigo, pescar o practicar deportes) para generar ese estado que hace que se pierda la noción del tiempo y de uno mismo, debido a que baja la ansiedad y el estado de alerta, permitiendo que uno fluya con toda su energía.

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