El amor se deletrea ‘T-I-E-M-P-O’, lo cual comunica la aceptación. La aceptación concede al cónyuge la libertad de fallar sin temer perder el amor de su pareja.9 La aceptación demostrada hacia nuestra pareja fomenta el sentido de la seguridad en nuestros hijos. IV.

Aceptación hacia nuestros hijos

Los hijos responden óptimamente a las reglas edificadas sobre una buena relación. El intento de imponer una lista de reglas que han de cumplir nuestros hijos, sin a la vez dedicarnos a desarrollar una buena relación con ellos, conducirá muchas veces a la obediencia meramente externa/superficial. Por fuera puede que estén cumpliendo, pero por dentro se estarán rebelando. Dios desea que padres ayuden a sus hijos a desarrollar un corazón dispuesto para con él. La mejor forma de lograrlo es mediante el establecimiento de un fundamento de aceptación incondicional. Los hijos necesitan saber que hay margen para fallar sin tener que temer perder nuestro afecto/amor.10

“Reglas sin relación personal” puede conducir a la rebelión.11 En Efesios 6:4 Dios dice: Vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en la disciplina e instrucción del Señor. “No provoquéis a ira a vuestros hijos” significa que los padres no han de fastidiar a sus hijos ni imponer su autoridad de forma arbitraria. Dios instruye a los padres “criarlos”, lo cual indica que la crianza ha de ser un proceso continuo. La combinación de disciplina e instrucción señala que ha de establecerse una relación interpersonal, una relación que sea “del Señor”. Por ello ha de ser en humildad y guiada por la palabra de Dios.

Los padres no son capaces de cambiar a sus hijos; sólo Dios puede. Los padres pueden cambiarse a sí mismos.12

A. Aceptando a los hijos, sea cual fuere su condición espiritual 1. Motivos para aceptar al hijo, a pesar de su condición espiritual Demostrando la aceptación hacia tu hijo, sea cual fuese su condición espiritual -a. es serle obediente a Dios y traerle gloria. b. crea el sentido de la seguridad al concederle a tu hijo la libertad de fallar sin temer perder el amor de su padre y/o madre. c. d. 2. Modos de aceptar al hijo, a pesar de su condición espiritual Puedes comunicarles un espíritu de no aceptación hacia tus hijos al – a. b. c. d.

someterles al “trato del silencio”. compararles a otros niños: “Jaimito no se porta así”. gritarles/chillarles. mostrar favoritismo/parcialidad a favor del niño obediente. Hay que saber entender la diferencia entre la disciplina justa (y permitir al hijo cosechar las consecuencias de su pecado) y el favoritismo injusto. Ejemplo: Véase el relato del “Hijo Pródigo”

e. f. 3. Modos de demostrar la aceptación, tomadas del ejemplo del padre del hijo pródigo en Lucas 15:11-32. a. El espíritu de la aceptación incondicional se demuestra cuando permitimos a nuestros hijos la oportunidad de tener éxito o de fracasar espiritual, intelectual, físicamente, etc., sin incurrir en el temor de perder nuestro afecto (Lucas 15:12-13). b. La aceptación incondicional proviene del corazón. El padre del hijo pródigo sintió compasión por él (Lucas 15:20). El padre sintió dolor por los trances que tuvo que sufrir su hijo aun antes que éste se arrepintiera. c. La aceptación se puede mostrar de forma no verbal. El padre del pródigo corrió hacia él; le abrazó y le besó a su hijo (Lucas 15:20). d. La aceptación no espera al arrepentimiento (Lucas 15:20). El padre actuó antes que el hijo le confesara su pecado. e. La aceptación incondicional se manifiesta en el perdón y en la restauración de la relación personal (Lucas 15:22-24). Perdona y no

vuelvas a comentar sobre la ofensa en futuras conversaciones (Efesios 4:32). Comunica de forma verbal a los hijos que les amáis, aun cuando fallan. f. La aceptación incondicional no exhibe actitud de favoritismo/parcialidad, aun cuando hay pecado de por medio (Lucas 15:31-32). El padre le había comunicado a su hijo mayor que le correspondía el resto de la herencia. El plan de la herencia no fue alterado por el hecho de haberse arrepentido el hijo menor. Ver también Hechos 10:34; Romanos 2:11.

Dile de viva voz a tu hijo o hija que tu le seguirás amando, aun cuando falle. 4. Otros modos de comunicar la aceptación a. Discrimina entre la disciplina y la aceptación al enseñar y explicar la razón para el acto disciplinario y al mostrarles la aceptación incondicional de forma verbal y no verbal, mediante tus palabras, expresión facial y tono de voz (Efesios 6:4; Proverbios 1:8). b. Guarda las confidencias. No comentes la ofensa a otras personas, al no ser que tengas el permiso del hijo, o si la ofensa involucró a otra persona (Mateo 18:15). c. El mantenimiento de un sentido prioritario de valores manifiesta la aceptación de otros. Por ejemplo: estar disponible para con otros, cumplir con los compromisos, etc. d. e. f.

Nuestras acciones reflejan la naturaleza de nuestro amor hacia Dios, mas nunca alteran su amor para con nosotros. B. Aceptando incondicionalmente a los hijos, sean cuales fuesen sus habilidades intelectuales 1. Motivos para aceptar al hijo, sean cuales fuesen sus habilidades intelectuales Demostrando la aceptación hacia tu hijo, sean cuales fuesen sus habilidades intelectuales --

a. es serle obediente a Dios y traerle gloria. b. crea el sentido de la seguridad al concederle a tu hijo la libertad de fallar sin temer perder el amor de su padre y/o madre. c. le estimulará a tu hijo a afrontar desafíos intelectuales nuevos y más grandes. d. e. 2. Modos de aceptar al hijo, sean cuales fuesen sus habilidades intelectuales Los padres pueden comunicarles a los hijos la no aceptación – a. etiquetando. Nunca utilices, ni permitas que los hijos utilicen términos como “tonto”, “estúpido, “idiota”, etc. Cuidado con decir que tu hijo tiene una discapacidad para el aprendizaje, ya que puede resultarle profecía que acarrea su propio cumplimiento. b. premiando. El premiar al hijo siempre que (y sólo cuando) trae buenas notas puede resultar en una dinámica interpersonal en la que prima el rendimiento como base de la aceptación, haciendo que se sienta el hijo desaprobado por sus padres las veces que no logra sus metas. c. castigando. El castigar al hijo cuando no trae buenas notas hará que acabe por desanimarse por completo. Ojo: descubre cual es el potencial del niño y ayúdale en alcanzarlo. d. comparando. Le harás un desfavor al hijo si andas comparando su capacidad intelectual con la de otros niños o jóvenes. 3. Maneras de comunicarles a los hijos la aceptación incondicional, sean cuales fuesen sus habilidades intelectuales – Los padres pueden comunicarles a los hijos la aceptación incondicional, sean cuales fuesen sus habilidades intelectuales – a. protegiendo. Busca evitar que sufran vergüenza en público innecesariamente. Ejemplo: Pídele al maestro de tu hijo no requerirle leer en voz alta ante su clase si el niño tiene dificultades con la lectura. b. elogiando. Alaba a los hijos por sus puntos fuertes intelectuales. Ejemplo: Por su éxito en el uso del sentido común, en matemáticas, ciencias, inglés, escritura, lectura, comprensión, cumplimiento de instrucciones, atención, perseverancia en la tarea hasta cumplirla, etc.

c. instruyendo. Enséñales a los hijos acerca del poder de Dios, y acerca de como él nos puede usar a pesar de nuestras debilidades (Éxodo 4:10-12; Hechos 4:13; 2 Corintios 12:5-10). d. premiando. Galardonando la honestidad, el esfuerzo, y la correcta actitud, por encima de los resultados de su esfuerzo, trae satisfacción al hijo (Colosenses 3:17, 23-24). e. comunicando. Que sepa tu hijo que siempre le amarás aun si sucediera que fracase en su empeño académico. f. g.

Galardona la honestidad, la actitud digna, y el esfuerzo invertido, no meramente el resultado del esfuerzo. C. Aceptando incondicionalmente a los hijos, sea cual fuere su apariencia/aspecto físico La juventud de hoy está sometida a una tremenda presión de parte de la industria de la moda, y de parte de sus compañeros, para conformarse en el atuendo y el vestido. Los avances en la cirugía estética/cosmética le ha permitido al interesado alterar su apariencia física en pocas sesiones con el cirujano. El sector multimillonario de la moda se aprovecha de la inseguridad de la gente. Se vale de dicho sentido de la inseguridad personal para suscitar el deseo de imitar a los estrellas de cine y a los personajes famosos, con el fin de sentirse bien y de ser aceptados por sus semejantes. Nuestros hijos, y la sociedad en general, han sido engañados con la idea de que cuanto mejor sea nuestra apariencia, tanto más seremos amados y aceptados por los demás. Los padres necesitan contrarrestar esta creencia antibíblica, demostrando la aceptación incondicional, virtud que se puede comunicar a nuestros hijos, sea cual fuese su apariencia y aspecto físico: si flacuchos o regordetes, o si adolecen de narices o dientes irregulares, o de cutis lleno de granos. 1. Motivos para aceptar al hijo, sea cual fuere su apariencia/aspecto físico Demostrando la aceptación hacia tu hijo, sea cual fuere su apariencia/aspecto físico -a. es serle obediente a Dios y traerle gloria. b. crea el sentido de la seguridad que le permite al hijo explorar los límites bíblicos y paternales en relación a su físico, y sobrellevar los cambios

físicos que experimentará en su etapa adolescente, sin tener que temer perder el amor y el apoyo de sus padres. c. le crea en torno al hijo/a un refugio seguro en el mundo hostil, irreal, y despectivo que promueve un concepto deformado de la perfección. d. e. 2. Modos de aceptar al hijo, sea cual fuere su apariencia/aspecto físico Los padres pueden comunicarles a los hijos la no aceptación – a. picándo. El señalar a los niños o jóvenes respecto de su apariencia puede fácilmente herirles. Si incurres en ello, de inmediato pide perdón sin buscar excusas. b. comparando. Evita hacer comparaciones entre tus hijos y otras personas. c. exponiendo. A veces se les crean añoranzas insalubres en los hijos e insatisfacción con su aspecto físico si le ponen mucha atención a las – “Zonas de Peligro”: • • • • •

Revistas de modelos o de culturismo. Programas de televisión que hacen ostentación del cuerpo. Muñecas “Barbie”.

Los padres pueden comunicarles a los hijos la aceptación incondicional, sea cual fuere su apariencia física – a. compartiendo. Habla a tus hijos acerca de como el Señor te ayudó superar tus propias penas y pesares físicos. b. defendiendo. Toma la parte de tu hijo si ocurre que alguien se mofe de sus rasgos físicos. c. dando ejemplo. Nunca des mal ejemplo burlándote de otros, y evita describir a otros en términos despectivos en cuanto a su aspecto físico. d. dando prioridad. Manifiesta tu aceptación a tu hijo en cuanto a su aspecto físico, pero pon mayor énfasis en la cualidad imperecedera de un corazón dispuesto para con Dios (1 Samuel 16:7; 1 Pedro 3:3-4). e. comunicando. Dile a tu hijo: “Fuiste creado a la imagen de Dios, y eres único en todo el mundo.” Dios nos ha hecho hermosos porque somos obra suya, y hemos sido creados a su imagen. f. siendo sinceros. Nunca niegues la existencia de cualquier problema que pudiera tener tu hijo ante su apariencia física. ¿Cómo responderías a tu hijo o hija si te preguntara si es él o ella guapo o guapa?

Nunca permitas que tus hijos se burlen el uno del otro, ni de los demás, en cuanto a su apariencia. ¿Hasta qué punto pudiera la búsqueda de una solución médica para un defecto físico comunicarle al hijo/hija la aceptación o la no aceptación? [1 Pedro 3:34; 1 Corintios 6:19]. 3. Pautas/directrices que puedan aconsejar una solución médica (por ej., la cirugía plástica para corregir alguna irregularidad de la fisonomía): a. Cuando se trata de un procedimiento médico de naturaleza preventiva. Ejemplos: 1a. Los aparatos ortopédicos dentales no sólo promueven la estética, sino que aumentan la longevidad de los dientes y ayudan a reducir las caries. 1b. Acudiendo al dermatólogo para resolver problemas de acne ayuda prevenir cicatrices permanentes u infección. b. Cuando no hay principios bíblicos que prohiban directa o indirectamente tal proceso médico. c. Cuando hayas orado y buscado consejo espiritual y, en consecuencia, no abrigas dudas sobre la solución médica en cuestión. [Proverbios 12:15; Romanos 14:22-23]. d. Cuando el defecto físico fue causa de un accidente o una enfermedad. e. Cuando se trata de un defecto de nacimiento. f. Cuando una solución médica se presta para un problema médico (Por ej., la elefantiasis, las varices). g. h. 4. Pautas/directrices que puedan no aconsejar una solución médica (por ej., la cirugía plástica para corregir alguna irregularidad de la fisonomía: a. Cuando es simplemente un intento de “volver atrás el reloj” en el proceso de envejecimiento (por ej., la arrugas, la calvicie, etc.). b. Cuando se trata de realzar alguna facción o miembro del cuerpo para granjearse las atenciones de miembros del sexo opuesto. Ejemplo: El procedimiento de cirugía estética que más se practica en Venezuela es sobre la nariz, y en Japón es sobre el ombligo.

c. Cuando buscas en el cambio físico tu base de aceptación con otros en vez de descansar en la realidad de tu total aceptación ante Dios. d. Cuando es parte de un intento de avance económico. Asegúrale a tu hijo/hija que le amarías aun si sufriera un accidente de auto y quedara con taras físicas. 5. Actividades en los que algunos padres permiten participar a sus hijos o hijas, que pudieran dañar la comprensión de lo que es la aceptación en relación a su aspecto físico: a. Concursos de belleza: para ganar tienes que tener ciertas características físicas. b. Trabajo de modelo: aun las modelos de mayor prestigio hacen retocar sus fotos para intentar mejorar su imagen. c. Concursos de culturismo: crea un excesivo culto al cuerpo, con la consiguiente arrogancia y menosprecio. d. e. ¿Se ha de entender que todas las áreas de competición sean dañinas al concepto bíblico de la aceptación incondicional que pueda tener el niño o joven? D. Aceptando incondicionalmente a los hijos, sean cuales fuesen sus capacidades/habilidades físicas 1. Motivos para aceptar al hijo, sean cuales fuesen sus capacidades/habilidades físicas Demostrando la aceptación hacia tu hijo, sean cuales fuesen sus capacidades/habilidades físicas -a. es serle obediente a Dios y traerle gloria. b. crea el sentido de la seguridad al concederle a tu hijo la libertad de fallar sin temer perder el amor de su padre y/o madre. c. facilita a tu hijo o hija a que disfrute de las habilidades con las que Dios de ha dotado. d. estimula a tu hijo o hija intentar actividades nuevas y difíciles. e. f. 2. Modos de aceptar al hijo, sean cuales fuesen sus capacidades/habilidades físicas Padres pueden comunicarles la no aceptación --

a. comparando habilidades, lo que establece una relación interpersonal basada en nivel de rendimiento. Esto condiciona a nuestros hijos a pensar que el grado de aceptación depende en su capacidad de rendimiento. Algunas frases que puedan indicar que se está empleando este condicionante a la aceptación -Ejemplos: El padre de Francisco dijo que el campamento de baloncesto en verano le ayudó a Francisco conseguir un puesto en el primer equipo. ¿Quieres tú inscribirte en el campamento de baloncesto? Juanita consiguió calificarse de finalista en el concurso provincial de banda musical. Tú también podrías conseguirlo, de ensayar más. Juegas como niña; o: Juegas bien, con todo y ser chica. b. predisponiendo a los hijos a expectativas poco realistas. c. alterando las funciones naturales del hijo; por ejemplo, intentando que el hijo zurdo se adapte preferentemente a la mano derecha. d. e. f. g. h. Padres pueden manifestarles la aceptación incondicional a sus hijos, aun a pesar de sus habilidades físicas limitadas -a. aprendiendo de memoria Colosenses 3:17, 23-24 como lema y meta familiar. b. asegurándoles de vuestro amor, aun cuando no rindan al nivel deseado. Ejemplo: “Yo te amaré aunque te ponches en béisbol, o aunque no metas gol en fútbol, etc.” “Te amaré aun cuando cometas fallos en una actuación musical.” c. premiando al hijo, aun cuando no haya tenido mucho éxito. Ejemplo: Dale a tu hijo o hija un gusto, un algo especial, aunque pierda en un partido, o cuando no le salga tan bien en la escuela, etc. d. orando con el hijo que el/ella y todos los que compiten puedan hacerlo bien.

e. recalcando que la honradez, la actitud buena, y el esfuerzo meritorio son de mayor importancia que el resultado de la competición. Quien haya ganado en la competición no se traerá a memoria en el cielo; en cambio, nuestra honradez, actitud buena, esfuerzo, y motivación de traer gloria a Dios sí vendrán a memoria en el cielo. f. colaborando con el hijo para cultivar sus habilidades físicas. g. h. i. j. Comunícale a tu hijo que tú le amarás siempre, aun si fracasara en cualquier actividad musical, atlética, o de cualquier índole física.

Galardona la honradez, la actitud digna, y el esfuerzo meritorio, por encima del resultado de la competición.

V.

Aceptación entre creyentes Los miembros de nuestra familia nos ven tales como somos; ven lo consecuente y lo inconsecuente en nosotros. Si demostramos anomalías en nuestro trato con los de afuera, los de nuestra propia familia pueden poner en duda el grado de aceptación que tenemos hacia ellos mismos. Por eso, nos incumbe manifestar aceptación de personas fuera del círculo familiar, como también dentro. A. Motivos para aceptar a los creyentes, sea cual fuese su condición espiritual, o sus habilidades intelectuales o físicas, o su apariencia física 1. Demostrando la aceptación hacia los creyentes -a. b. c. d. e. f.

es serle obediente a Dios y traerle gloria. edifica el cuerpo de Cristo. demuestra la aceptación de Dios hacia nosotros. es un ejemplo de piedad para otros.

B. Modos de aceptar a los creyentes, sea cual fuese su condición espiritual, o sus habilidades intelectuales o físicas, o su apariencia física 1. Podemos mostrar la aceptación hacia los creyentes -a. perdonando y pidiendo perdón. b. invitándoles a casa para tomar helados y galletas, para almorzar, o para cenar. c. mostrándoles el amor incondicional (Romanos 5:8). d. e. Un mandamiento nuevo os doy: que os améis los unos a los otros; que como yo os he amado, así también os améis los unos a los otros [Juan 13:34]. Así que entonces, hagamos bien a todos según tengamos oportunidad, y especialmente a los de la familia de la fe [Gálatas 6:10].

VI.

Aceptación hacia inconversos

A. Motivos para aceptar a los inconversos, sea cual fuese su condición espiritual, o sus habilidades intelectuales o físicas, o su apariencia física 1. Demostrando la aceptación hacia los inconversos -a. es serle obediente a Dios y traerle gloria. b. muestra la aceptación de Dios hacia nosotros. c. abre la puerta para la evangelización. d. e. B. Modos de aceptar a los inconversos, sea cual fuese su condición espiritual, o sus habilidades intelectuales o físicas, o su apariencia física 1. Podemos mostrar la aceptación hacia los inconversos -a. perdonando y pidiendo perdón. b. invitándoles a casa para tomar helados y galletas, para almorzar, o para cenar. c. mostrándoles el amor incondicional, sea cual fuese su apariencia física, o su condición espiritual, o sus habilidades intelectuales o físicas (Romanos 5:8). d. e. f.

Habéis oído que se dijo: “Amarás a tu prójomo, y odiarás a tu enemigo.” Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, y orad por los que os persiguen [Mateo 5:43-44]. Antes bien, amad a vuestros enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando nada a cambio, y vuestra recompensa será grande, y seréis hijos del Altísimo; porque El es bondadoso para con los ingratos y perversos [Lucas 6:35].

La demostración de aceptación hacia los de afuera ayudará a crear la mutua aceptación dentro de la familia.

9

McDowell y Day, pp. 61-66.

10

McDowell y Day, pp. 61-66.

11

McDowell y Day, pág. 28.

12

Dr. Howard Hendricks, Profesor en el Dallas Theological Seminary; Clase de Seminario, The Christian Home [El hogar cristiano], 1984.