Cuando nadie te ve, madre Por Bryan Smith Usado con permiso Introducción *Mostrar el video de la Mujer Invisible. (http://www.youtube.com/watch?v=_548u0TVYbc) ¿Cuántas mamás aquí hoy se sienten como la mujer invisible a veces? Horas y horas en la cocina, lavando la ropa, cuidando a los bebes, yendo al trabajo, a menudo desvelándote, y parece que nadie lo ve. Nadie dice “¡Gracias!” o “¿Te puedo ayudar?” Quizás una vez al año te honren en el Día de la Madre, pero en muy pocas ocasiones el resto del año. Yo quiero que sepas que lo que haces, aunque no parece ser muy glorioso a valioso es de gran estima y valor delante de Dios. ¡Lo que haces tiene importancia! ¡No te desanimes! Quiero brevemente compartir unos pasajes y principios bíblicos que espero sean de ánimo en tu labor como madre. 1. Cuando nadie más te ve, ¡Dios si! Mateo 6:3-4, 5-6, 16-18 2 Corintios 15:58 2. Todo lo que haces debe ser para Dios, no para los hombres Gálatas 1:10 Efesios 6:5-8 Colosenses 3:22-24 1 de Tesalonicenses 2:4 3. Cuando haces algo para alguien que no te puede recompensar, realmente lo haces para Cristo Mateo 25:31-46 4. Tu recompensa viene de Dios Mateo 6:3-4, 5-6, 16-18 Mateo 25:14-21 Mateo 25:34 5. Todo lo que haces puede tener un gran impacto, aunque por ahora no lo veas 2 Timoteo 1:3-5

*El ejemplo de las catedrales 6. Lo que haces como madre y/o esposa tiene gran valor Proverbios 31:10-31 (Especialmente v. 10 y 28-31)

Ahora, esposos e hijos, debemos procurar agradecer lo que hace nuestra esposa y/o mamá, y no solamente una vez al año. Les comparto partes de un artículo titulado Día de la Madre por Charles R. Swindoll: “Si hay una actitud de la cual las familias son culpables más que cualquier otra cuando se trate de madres, es la presunción… dando por sentado… siendo casi ciegos a la carga que las mamás aguantan. Esto fue reforzado en mi mente la semana pasada cuando estaba viendo algunas tarjetas locas en una tienda. Vez tras vez el chiste de la tarjeta tomó su humor de esta actitud obvia que domina en el hogar: Olvídate de los quehaceres de la casa, Mama. ¡Es tu día! ¡Además, podrás hacer el doble de trabajo y ponerte al día mañana!...Yo sugiero que los que hemos sido culpables de la presunción reflexionemos sobre cuánto le debemos a nuestra madre. Considera el valor incalculable de la mujer que hizo posible tu vida – tu madre. Piensa en su ejemplo, su apoyo, su humor, sus consejos, su humildad, su hospitalidad, su perspicacia, su paciencia, su sacrificio. Su fe. Su esperanza. Su amor. … Mamás, este Día de la Madre nos levantamos y te llamamos bienaventurada….El Día de la Madre no debe ser únicamente un día al año.” Hagamos un hábito de decir GRACIAS a estas mujeres tan valiosas que Dios nos ha dado. Si no fuera por nuestras madres, ¿Dónde estaríamos? *Compartir poema/acróstico y dar una copia a cada mamá:

F ueron creadas con propósitos Divinos E n el desarrollo de la vida han dejado sus huellas L uchando tenazmente por lo que aman I nfunden a otras aliento a seguir sus pisadas C omo las aguas de los ríos abastecen el inmenso mar I gualmente su amor alimenta nuestras vidas

D an todos sus esfuerzos y energías para su familia A un a expensas de su propia existencia, Aunque D ías negros y tiempos de crisis asedien en derredor E nfrentan con sabiduría y tesón, las adversidades S aliendo victoriosas, emulando al Soberano Creador M adres de todo el orbe alrededor! A labadas y ¡bienaventuradas sean por su amor! D amos gracias a Dios y deseamos con todo el corazón R econocer por este acróstico su loable labor E n cada hogar donde hay una madre con dedicación S alud y ¡gracia Divina reciban en su corazón!

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