Parte 1

CARACTERES DE LAS ESPECIES

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Contenido: Caracteres culturales de las especies: Habitación. Estación. Temperamento. Crecimiento. Longevidad. Porte y enraizamiento. Modo de reproducción de las especies.

CARACTERES CULTURALES

• Donde vive ? • Limites de tolerancia • Comportamiento frente a la competencia. • Forma • Desarrollo • Cuanto vive ? y • Como se reproduce ?

Tratamientos

• Persistencia • Estabilidad de las masas • Introducción por reforestación

HABITACION. • Se llama así al área geográfica que ocupa una especie. Se puede distinguir entre área natural, área artificial y área de asilvestramiento. • Las especies se pueden clasificar, según este carácter, en linneanas y jordanianas. • La consecuencia de su estudio es permitir el diagnóstico de marginalidad geográfica, respecto de la distribución general y una primera aproximación a la selección de especies para la repoblación forestal.

CARACTERES CULTURALES: ESTACIÓN. • En terminología forestal, el término estación expresa 2 conceptos diferentes pero muy relacionados: es el efecto de la acción conjunta de los factores abióticos en un territorio concreto y es el territorio en el que los factores abióticos permanecen casi constantes. • Los factores referidos son: climáticos, edáficos y fisiográficos.

Porte Se denomina porte de una especie forestal a la descripción de la forma que adopta su parte aérea. Cada especie posee un porte específico o natural que es el que corresponde a un individuo que vive aislado, en condiciones normales de estación, dentro de su habitación, y sin que haya sido alterado por la acción del hombre u otros elementos (viento, nieve, granizo, rayo, plagas, enfermedades o animales).

Pies de pino silvestre con porte en bandera, acción del viento. foto San Miguel.

Los elementos de definición del porte son: forma de la copa; y longitud del fuste.

Porte específico de pino silvestre. Foto M. Serrada.

En muchas especies la forma de la copa cambia con la edad, tendiendo normalmente a formas más globosas, irregulares o asimétricas.

La forma de la copa varía con la especie y dentro de cada especie con la edad. Tejera Negra, 2005. Foto I. Otero.

Coniferas: porte piramidal.

Diferentes portes: columnar; piramidal, lobulado.

Álamos: porte piramidal en juventud.

Álamo: porte columnar.

Pino canario: porte irregular en la vejez. Pino de la Virgen, La Palma, 1990.

Porte semiesférico, posiblemente alterado por poda.

El porte cambia con la espesura. Hayas en Valle de Arán. 2003. Porte específico y porte forestal.

Porte forestal de haya y abeto. Valle de Arán, 2003.

El porte cambia con la edad y en la encina joven es irregular.

El porte cambia con la edad y en la encina tiende a semiesférico. Tamajón, 2007.

Eucaliptos jóvenes: porte piramidal.

Enebro adulto: porte llorón.

Enebro joven: porte piramidal.

Porte aparasolado del pino piñonero

La otra forma de definir el porte es la altura en coronación. Eucaliptos de más de 80 m en Chavín (Lugo), 2003.

En relación a la longitud que puede alcanzar el fuste Ramos (1986) propone la siguiente clasificación 1º magnitud: entre 35 y 45 m de altura 2º magnitud: entre 25 y 35 m de altura 3º magnitud: entre 15 y 25 m de altura 4º magnitud: entre 8 y 15 m de altura

CARACTERES CULTURALES: ENRAIZAMIENTO. • Es la descripción de la forma del sistema radical de la plantas que adoptan en función de su propia anatomía y fisiología, con importantes modificaciones por el tipo de suelo. Se pueden definir dos tipo: específico y

forestal.

CARACTERES CULTURALES: ENRAIZAMIENTO. • Se puede modificar por la profundidad y fertilidad del suelo, la competencia, la edad y las plagas o enfermedades. • Las consecuencias derivadas de su estudio se relacionan con el manejo de la espesura, la elección de la especie para repoblación y la elección del método de cultivo y trasplante.

Enraizamiento

Morfología y deformaciones del sistema radical de las especies arbóreas

Pino silvestre, latizal. Morfología ordinaria.

Pino silvestre, latizal. La raíz principal no puede penetrar, falla la estabilidad. Rascafría, 2004.

Pino silvestre, latizal. La raíz principal no puede penetrar, falla la estabilidad. Foto anterior con otra perspectiva.

Pino silvestre, fustal. La edad del árbol va modificando la forma del sistema radical, aumentando gradualmente su complejidad.

Pino silvestre, fustal.

Problemas de enraizamiento por impermeabilidad. Aldeanueva de Atienza, 2004.

Problemas de enraizamiento por impermeabilidad.

Pino silvestre, fustal. Cepa que se desarrolló sobre la calzada romana. Cercedilla, 2001. Plasticidad del sistema radical.

Pino rodeno, latizal alto. Arenas de San Pedro, 2005

Enraizamiento limitado por roca consistente. Plasticidad del sistema radical en pino rodeno.

Pino canario. La erosión deja al descubierto el sistema radical.

La erosión deja ver la morfología del enraizamiento de la encina. Tres Cantos, 2006. Foto Aguilar.

La erosión deja ver la morfología del enraizamiento de la encina. Es plástico, se puede adaptar al tipo de suelo. Tres Cantos, 2006. Foto Aguilar.

La erosión deja ver el enraizamiento secundario y superficial del pino silvestre. Benasque, 2007.

La escasa profundidad del perfil por pedregosidad limita el enraizamiento. El abeto no tiene un sistema radical plástico que se pueda adaptar a esta limitación. Benasque, 2007

Injertos de Raíz

Pino silvestre, fustal. Injerto de tallo.

Pino silvestre, fustal. Injerto de tallo. Cercedilla, 2003.

Pino silvestre, fustal. Injertos de raíz.

Pino silvestre, fustal. Injerto de raíz.

Raíz secundaria rodeando a la raíz principal. El autoinjerto puede resolver problemas de estrangulamiento. Rascafría, 2003.

Pino rodeno, latizal alto. Supervivencia del pie dominado gracias al injerto intraespecífico.

Tocón de pino vivo por estar injertado por su raíz con otros pies vivos.

Tocón de abeto con cicatrización por estar injertado por su raíz con otros pies vivos. Hay otro en fase de pudrición.

Tres raíces horizontales de pino carrasco injertadas en injerto paralelo.

Injerto cruzados en raíces de encina (izquierda) y de pino carrasco (abajo).

Injerto en forma de lazo en una cepa de pino rodeno.

Pino cortado a gran altura. Se produce secreción de resina que sólo puede proceder de conexión por injerto de raíz.

Pino carrasco cortado a gran altura. Se produce secreción de resina que Sólo puede proceder de conexión por injerto de raíz, incluso después de realizar la talla.