Camino negro

27 dic. 2011 - en una batalla psíquica y física que desnuda paulatinamente los fines de .... Extraños en Mar del Plata. Esta noche sube a escena una de.
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ESPECTACULOS

I

Martes 27 de diciembre de 2011

TEATRO

((((( REGULAR

DRAMA

Camino negro El regreso de un texto con 30 años de historia AUTORES: OSCAR VIALE Y ALBERTO ALEJANDRO L DIRECCION GENERAL: RODOLFO RANNI INTERPRETES: LUCIANO CASTRO, RODOLFO RANNI, ROMINA RICCI L DISEÑO DE ESCENOGRAFIA: DANIEL FEIJOO L SALA: ROXY (MAR DEL PLATA) L DURACION: 100 MINUTOS. L L

Casi treinta años y marcadas diferencias conceptuales separan, alejan, a esta versión de Camino negro de aquella puesta de Laura Yusem protagonizada por Betiana Blum, Miguel Angel Solá y Juan Leyrado, representada en el Blanca Podestá en 1983. La pieza, a pesar del humor que la atraviesa, es un drama negro en el que la manipulación psicológica marca el desarrollo de las acciones en un ámbito de encierro suburbano y de cuyas interlíneas se desprenden nítidamente las connotaciones que el material expone como una radiografía de la Argentina de los años 80. De hecho, la obra sufrió demoras en su

estreno original debido a que no estaban dadas las condiciones políticas y sociales del país para que se llevara a escena un texto de clara denuncia de aquellos años de plomo, ostracismo y libertades cercenadas. En plena noche de lluvia y temporal, una ejecutiva formal, autoritaria y distante accede a ser llevada por un camionero de su empresa. Un inconveniente en los neumáticos impone una parada en una gomería a la vera del Camino Negro bonaerense, donde transcurre la acción. Aquí comienza un ida y vuelta verbal que detona en una batalla psíquica y física que desnuda paulatinamente los fines de

cada uno de los personajes. Ella, aliada del poder como una informante que denuncia empleados. El, por su parte, busca ajusticiar a muchos de los suyos que fueron víctimas de la mujer y de un sistema opresivo. En el medio, un hombre enigmático que suma misterio a la acción. Rodolfo Ranni, en tanto director responsable de esta puesta, acierta al conservar, en algunos pasajes, la atmósfera de violencia verbal y física y respetar la sordidez del ámbito. Pero, quizá dada su amplia trayectoria en el género de la comedia o bien buscando seducir a un público estival y festivo, imprime al material ciertos tópicos propios de un vodevil de consistencia más liviana. Y aquí reside el mayor escollo que limita los resultados. Determinados momentos, de connotación sexual, se transforman en pasos de comedia un tanto grotescos y vulgares. En cambio, cuando la pieza retoma la profundidad del resonar de sus palabras, Ranni gana como director. La marcación actoral es el punto más endeble que puede, en el caso de

Luciano Castro, ajustarse y superarse con el transcurso de las funciones. Pereyra, su personaje, grita permanentemente (se nota el esfuerzo vocal del actor por mantener ese tono altivo y exasperante), y cae en el lugar común de la caricatura errónea y prejuiciosa de su camionero, abusando de movimientos algo groseros y redundantes sin matices. Pero se intuyen en Castro su compromiso con el material y el convencimiento con el que lo interpreta. Mejor guiado desde la dirección hubiera convertido a su Pereyra en un personaje con una variada paleta de colores expresivos. En el caso de Romina Ricci, la macchietta conduce a resultados enclenques que no logran convencer. Rodofo Ranni, a su vez, encarna con oficio al tercer personaje signado por el misterio. En el marco de una lograda escenografía diseñada por Daniel Feijóo, el desnudo de Romina Ricci –en un entrepiso– está coreografiado de manera tal que ningún espectador se pierde detalle, y al personaje de Pereyra se le imponen movimientos

Castro, Ricci y Ranni, los protagonistas de esta pieza de Viale que permiten la exhibición física de Castro. Esta liviandad de recursos bastardea y diluye el peso dramático de un texto cuyas connotaciones políticas y sociales fueron, son, su pilar fundamental. La sala casi colmada celebra con énfasis cada momento de

humor, las espectadoras de todas las edades agradecen a viva voz (a los gritos) la presencia de Luciano Castro y sobre el final una parte mayoritaria de la platea aplaude de pie.

Pablo Mascareño

APUNTES Antes y durante la realización del Festival Internacional de Buenos Aires (que tuvo lugar del 24 de septiembre al 8 de octubre), muchos periodistas solicitamos a los organizadores el catálogo de esta movida que cada dos años organiza el gobierno de la ciudad. Pero el catálogo –elemento importante para el seguimiento de cualquier encuentro de este tipo y muy práctico tanto para la cartera de la dama como para el bolsillo del caballero– o no estaba, o nadie sabía de él, o nadie contestaba (a lo sumo, había respuestas vagas). Así fue que la octava edición del FIBA llegó a su fin y, como sucede con tantísimas cosas, el tema del catálogo pasó al territorio del olvido.

Pero he aquí que el viernes pasado, en medio de los típicos presentes de fin de año, apareció en la redacción una hermosa bolsa que enviaba la oficina de prensa del FIBA. Adentro, ¡glup!, estaba el catálogo del mayor encuentro escénico del país. Llegó a 76 días del cierre del festival, lo cual, hay que reconocerlo, es toda una singularidad. Hay otra cuestión a reconocer: el catálogo está bien bonito. El contenido fue coordinado por la periodista Carolina Prieto y en sus 184 páginas hay material sobre las obras y hasta incluye textos escritos por los responsables del Festival Internacional de Buenos Aires (textos que no estaban en la página oficial del encuentro). Así, a pocos días de cambiar de calendario, se develó uno de los (mini)misterios del año.

Alejandro Cruz

SINTESIS ESTRENO

Benzecry, por Dudamel La obra sinfónica Rituales amerindios, del compositor argentino Esteban Benzecry, será interpretada en Londres por la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela, que dirige Gustavo Dudamel, durante los Juegos Olímpicos de Londres. El concierto se realizará en el Royal Festival Hall dentro del marco del Festival London 2012. HOY

Extraños en Mar del Plata Esta noche sube a escena una de las obras más esperadas de la temporada de verano en Mar del Plata. Se trata de Extraños en un tren, de Craig Warner y Patricia Highsmith, basada en la película de Alfred Hitchcock. Así, Gabriel Goity, Ludovico Di Santo y elenco se adueñarán del escenario de Güemes entre miércoles y domingos, a las 21.30. EL BORDO, EN GROOVE

El Día del Inocente rockero El Bordo cerrará el año con un concierto especial en el Día de los Santos Inocentes. Mañana, a partir de las 19, y en el marco de la fiesta de fin de año de El bombardeo del demo, la banda de rock local se presentará en Groove, Santa Fe 4389. Como teloneros actuarán Brancaleone, Viejo Rastrero y los ganadores del concurso. Entradas, desde $ 40.