Burundanga, la droga de los violadores - Somaten

David Chapman para ordenarle que asesinara a John Lennon. Su uso criminal, muy habitual en Colombia, desde hace unos años se está instaurando en Es-.
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Burundanga

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La droga de los violadores Una de cada cinco violaciones se produce tras que la víctima sea narcotizada. La forma más habitual de los delincuentes sexuales para atacar a sus víctimas suele ser a través de bebidas o cigarrillos. Los lugares de elección son las discotecas, donde los agresores introducen en las bebidas de sus víctimas, sin que estas se den cuenta, productos como la Escopolamina, también conocida como “Burundanga”. Durante aproximadamente dos horas la víctima narcotizada se encuentra en un estado de insumisión química accediendo de forma sumisa y complaciente a todas las ordenes de su agresor. Sepa cómo actúan los agresores y, sobre todo, cómo prevenir ser drogado por ellos.

javier MORENO OLIVER

Los violadores aprovechan los descuidos de sus víctimas para introducir la droga en sus bebidas

Diversos estudios internacionales coinciden en que cada 6 minutos una mujer es violada en el mundo. Menos del 50 por ciento de estas violaciones son denunciadas y el 40% de las denuncias terminan sin la detención del agresor. Según el Ministerio del Interior, el 2012 en España fueron violadas 1.742 mujeres de las cuales 581 pertenecen a Cataluña. Cerca de cinco mujeres son violadas cada día en España, una cada cinco horas. Al parecer el 20% de estas violaciones se han realizado utilizando el método de la insumisión química.

Escopolamina, la droga de los violadores La escopolamina, conocida en Latinoamérica como “Burundanga”, es un anticolinérgico que se extrae de las solanáceas. Su uso es común por los médicos para la cinetosis o como antiesSETEMBRE | 2013

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pasmódico, entre otras prescripciones. Este alcaloide se ha utilizado a lo largo de la historia en los rituales y hechicerías de los chamanes y brujos de las diferentes tribus del

mundo. Se trata de unos de los “sueros de la verdad” más usados por los servicios de inteligencia. En los círculos conspiranoicos, se asegura que la escopolamina fue la droga que la CIA administró a Mark David Chapman para ordenarle que asesinara a John Lennon. Su uso criminal, muy habitual en Colombia, desde hace unos años se está instaurando en España, especialmente para violaciones y en menor escala, para robos. Los delincuentes que utilizan dicha droga en sus “modus operandi”, suelen obtenerla en el mercado negro de fármacos, a través de la venta ilegal de medicamentos por internet o por elaboración casera, utilizando plantas que forman parte de nuestra flora autóctona. Un centímetro cúbico de burundanga puede adquirirse de forma ilícita por unos 35 euros, cantidad suficiente para varias violaciones. La forma más habitual de los delincuentes para administrar la escopolamina a sus víctimas suele ser a través de bebidas o cigarrillos. Los lugares de elección son las discotecas, donde los agresores sexuales introducen en las bebidas de sus víctimas, sin que estas se den cuenta, el alcaloide en forma líquida. La escopolamina es inodora e insabora lo que hace imposible su detección al consumirla. Otro procedimiento utilizado SETEMBRE | 2013

La escopolamina se puede obtener de plantas autóctonas que crecen en solares y descampados.

por los violadores es aunarse al grupo de fumadores que se sitúan en la puerta de las discotecas e invitar a la víctima elegida con un cigarro que contienen en su interior escopolamina en polvo. Una vez que la victima ha tomado por vía oral o inhalada el alcaloide, en pocos minutos sufre los efectos de dicha droga.

Insumisión química A dosis muy concretas la escopolamina provoca sobre la víctima un estado inicial de confusión y embotamiento psíquico pasando rápidamente a un estado de semiinconsciencia en la que aparentemente la persona narcotizada se mantiene en estado de vigilia, con las capacidades cognitiva lentas pero conservadas aunque con la función volitiva alterada. La escopolamina produce alteraciones bioquímicas en las zonas corticales de los hemisferios cerebrales superiores desde donde se regula mayoritariamente la voluntad consciente de los seres humanos. A su vez, inhibe la recaptación de la acetilcolina, lo que provoca el borrado parcial de la memoria. Durante aproximadamente

dos horas la víctima narcotizada con escopolamina se encuentra en un estado de insumisión química accediendo de forma sumisa y complaciente a todas las ordenes de su agresor. Una vez eliminado el tóxico, la víctima recupera su función volitiva, pero presenta una amnesia lacunar que le imposibilita recordar las vivencias correspondientes al periodo de tiempo que ha estado bajo el efecto de la escopolamina, aunque podrá evocar sin dificultad los sucesos anteriores y posteriores a ese periodo. Normalmente la víctima al liberarse de los efectos de la escopolamina entra en una fase de confusión, al encontrase normalmente en un espacio diferente al que fue narcotizada, todo ello acompañado de un fuerte dolor de cabeza y una intensa sequedad de boca, así como la percepción de molestias de diferente índole en la zona genital en los casos de violación.Estado general incomprensible para la víctima y que por más que se esfuerce, sólo será capaz de recordar los momentos antes de haber sido drogada. En numerosas ocasiones, la víctima no sólo ha sido violada por uno o varios individuos, asimismo también ha sido robada al facilitar a su agresor el número secreto de sus tarjetas de crédito, sus joyas, dinero, etc. En el ámbito de la prostitución tanto masculina como femenina, la escopolamina también es utilizada para expoliar a los clientes, técnica conocida como el “beso del sueño”. En ambos casos, las víctimas suelen ser reticentes a denunciar los hechos o bien por falta de argumentos provocado por la amnesia lacunar o por vergüenza,

en el caso de la prostitución, a dar referencias del último lugar que recuerdan haber estado antes de ser narcotizados. Otro de los riesgos de la narcotización con escopolamina es que el agresor administre a la víctima una dosis superior a la necesaria para obtener los efectos descritos, en estos casos, pueden darse efectos adversos muy graves incluso llegar a provocar la muerte de la persona narcotizada.

“Date rape drug” Son las drogas conocidas como “violación en citas”, entre estas se encuentra la Burundanga. Si bien, actualmente la escopolomina es la droga elegida por los violadores que utilizan dicho “modus operandi”, también se están usando otro tipo de sustancias psicotrópicas para el mismo fin. Se calcula que, aproximadamente una de cada cuatro violaciones se lleva a cabo gracias a la introducción de alguna droga en el cuerpo de la víctima. El perfil de dichas víctimas son mujeres, sobre todo las jóvenes de entre 18 y 25 años. Además de la burundanga, las drogas más utilizadas en violaciones son las benzodiacepinas, hipnóticos o anestésicos no opiáceos cuyos nombres omitimos por motivos de seguridad. Todos estos fármacos, son depresores del sistema nervioso central y su administración en dosis inadecuadas puede provocar una depresión respiratoria que podría inducir la muerte de la víctima. La diferencia de las drogas citadas con respecto a la escopolamina, es que esta última mantie-

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¿Cómo prevenir que le droguen?

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Vaya acompañada con amigos y amigas de confianza a los locales de ocio.

No pierda el contacto visual con sus acompañantes. ne a la víctima en estado de vigilia y aparente normalidad externa, con diferencia de los psicofármacos citados que generan fuerte somnolencia a la persona narcotizada. Estas drogas, por lo general, también son introducidas sin que la víctima se dé cuenta, en su bebida, normalmente alcohólica, para enmascarar el sabor del fármaco. ¿Qué hacer en caso de ser narcotizada con una “Date rape drug”? En caso de percibir un sabor distinto al habitual en una consumición, se debe escupir la bebida y no seguir ingiriéndola. Inmediatamente hay que comunicar la sospecha de haber sido drogada a los amigos de confianza y al servicio de seguridad del local de ocio donde nos encontremos. Conviene colocarse en un lugar visible y de paso por si hay pérdida de conciencia. Ante la sospecha de haber sufrido una violación por insumisión química, no hay que cambiarse de ropa ni lavarse los genitales, si es posible, también hay que evitar orinar. Rápidamente se deberá llamar al teléfono de emergencias 112 para pedir una ambulancia y la asistencia de la policía. La orina servirá para determinar el tóxico administrado, conservar los genitales sin lavar puede ser clave para identificar a través de las pruebas de ADN el agresor o agresores, conservar la misma ropa del momento de la violación, será de gran utilidad para la policía científica a efectos de hallar fibras, cabellos u otro tipo de rastros para la investigación de los hechos.

No acepte cigarros, dulces o bebidas de terceras personas aunque los conozca.

No inhale colonias o perfumes que le ofrezcan oler.

Controle en todo momento sus consumiciones de forma visual, no las deje en ningún lugar mientras sale a fumar, va a bailar o al lavabo entre otros espacios. Si sospecha que le han podido introducir algún tipo de droga en la bebida no la consuma.

Antes de tomar cualquier consumición compruebe con un pequeño sorbo si el sabor de la bebida es el habitual.

Revise si en el interior de la base del vaso se han depositado restos sólidos.

Observe si la bebida ha cambiado sutilmente de color o de transparencia.

Lleve un test de drogas para bebidas tipo “Drink Detective” o 2LoveMyLips” para testar su bebida en caso de sospecha.

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