Taller de Introducción a la Ingeniería en Alimentos APRENDIENDO A ESTUDIAR EN LA UNIVERSIDAD
APRENDIENDO A ESTUDIAR EN LA UNIVERSIDAD Ingresar a la Universidad implica, entre otras cosas, revisar tus hábitos de estudio y estar dispuesto(a) a modificarlos si es necesario. Una de las primeras cuestiones que te parecen imposibles de lograr es llegar a tiempo con la lectura del material de estudio: “Leer un libro entero para la siguiente clase”, “Prepararte para un examen sobre los primeros tres capítulos cuando el cuatrimestre acaba de comenzar”, “Traer resuelta, para dentro de una semana, las dos primeras guías de trabajos prácticos de 15 ejercicios cada una”, etc., etc. Para no entrar en crisis ante la cantidad de trabajo a realizar es necesario pensar en la universidad como un trabajo de tiempo completo en el que inviertes alrededor de cincuenta a sesenta horas semanales asistiendo a clases, laboratorios, grupos de estudio y haciendo las tareas encomendadas. Es por ello de suma importancia adquirir, mejorar y/o consolidar ciertos hábitos de estudio que te permitan optimizar tu rendimiento. Para ello es necesario comprender la importancia de estudiar con responsabilidad y el modo de acercarnos al estudio tratando de optimizar tus propias estrategias. Para aprender a estudiar es necesario tener en cuenta los recursos que dispones conforme a tu estilo personal. Aprender un tema requiere que te involucres personalmente en la tarea. Nadie podrá aprender por vos. Sos vos el que deberá entender, interpretar, reorganizar y relacionar la información. 1. Es importante diseñar un plan específico de dónde y cuándo vas a estudiar. Emplea cualquier tiempo libre de tu horario de clases. Además de utilizar los tiempos de transición durante el día, generalmente es una buena idea evitar estudiar demasiado tarde cuando tiendes a estar cansado(a), puesto que eres menos eficiente, y se te va a olvidar la mayor parte del material que estudies. 2. Selecciona el lugar para estudiar, considerando que debe tener:
Buena iluminación Una temperatura agradable Un buen espacio de escritorio
La decisión de dónde estudiar dependerá de dos factores: el ambiente en el que te puedas concentrar mejor y el tipo de trabajo que debas realizar (para algunas actividades es mejor trabajar en grupo, mientras que para otras es mejor hacerlo solo). 3. Es importante consolidar algunos buenos hábitos de estudio:
Mantener una rutina de dónde y cuándo estudiar.
Decidir por adelantado lo que vas a estudiar eligiendo metas razonables y específicas que puedan ser alcanzadas.
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Hacer las cosas más difíciles o que requieran de mucho razonamiento durante las primeras horas del día.
Tomar descansos para que puedas mantenerte despierto(a) y recuerda no desperdiciar tu tiempo leyendo el material sin procesarlo y entenderlo.
Utiliza el tiempo "muerto" justo antes y después de clase y durante los descansos entre actividades.
Conoce a los compañeros con los que puedes trabajar y estudiar mejor y a quienes puedas llamar para hacerles preguntas.
Mantente al día con los trabajos asignados como tarea y busca ayuda cuando la necesites. Aprovecha los horarios de consulta.
Lee el material que te han asignado antes de clase para que puedas hacer preguntas acerca del mismo y aproveches al máximo las clases. Pregunta, cuestiónate, relaciona lo que te explican con lo que ya sabes.
Estudia siempre con papel y lápiz. Haz apuntes de la lectura en vez de subrayar el texto. Esta es una forma de aprendizaje más activa, puesto que te requiere pensar y volver a reescribir los puntos claves. Más adelante puedes subrayar las ideas importantes de tus apuntes de lectura y de tus apuntes de clase. Tener apuntes para leer, además del texto, también puede ser de gran ayuda cuando llegue el momento de revisar el material para las evaluaciones.
Confecciona cuadros, esquemas, mapas conceptuales que te ayuden en la comprensión del tema y a establecer las interrelaciones con los otros temas.
No apliques fórmulas mecánicamente ni porque te “suene” el enunciado del problema con otro ya realizado. Debes tratar de comprender la situación y aplicar lógicamente los mecanismos de resolución disponibles (fórmulas, teoremas, leyes, principios, etc.).
Aprender en el nivel universitario es un proceso que implica participación activa y sistemática de quien aprende, requiere de una actitud personal frente a esta nueva etapa de estudio responsable. Conlleva una relación nueva con lo que tengo que estudiar, con los docentes y con mis propios compañeros. El aprender no es solo aprender más cosas, sino una verdadera experiencia de crecimiento personal, ya que necesariamente aparecen involucradas cuestiones intelectuales, afectivas y emocionales.
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