Año Global Contra el Dolor en las Mujeres Mujeres Verdaderas, Dolor Verdadero Violencia Contra las Mujeres (Violencia de Género) Según las Naciones Unidas, la violencia contra las mujeres, también conocida como violencia de género, se define como ‘cualquier acto que tenga o pueda tener como consecuencia un daño o un sufrimiento físico, sexual o psicológico en las mujeres, incluidas amenazas de cometer dichos actos, coerción o privaciones arbitrarias de la libertad, ya sea que se produzcan en público o en la vida privada’ (1). Por lo general, la violencia contra las mujeres es tanto una causa como una consecuencia de la discriminación contra las mujeres. La violencia contra las mujeres es un problema de salud importante, al tiempo que constituye una violación de los derechos humanos de las mujeres. Este tipo de violencia prevalece en todo el mundo, con alcances que impactan profundamente en la salud, la economía y la sociedad, y está arraigada a la desigualdad relacionada con el género (1, 2). La violencia contra las mujeres tiene consecuencias y costos significativos para las mujeres, sus familias y la sociedad en su totalidad. Es uno de los mayores causantes de enfermedad, muerte, dolor, sufrimiento, aislamiento social, pérdida del empleo y de la productividad, y restricción de la libertad. Existen muchos tipos de violencia contra las mujeres, y esta puede existir en diversos entornos, incluida la familia, la comunidad, la custodia del estado y los conflictos armados. La forma más común de violencia física que experimentan las mujeres de todo el mundo es la violencia física por parte de sus parejas, denominada también violencia doméstica. El sexo a la fuerza o por coacción, o violación, es un ejemplo de violencia. La violencia es un factor importante en el contagio de enfermedades de transmisión sexual, incluido el VIH, los embarazos no deseados y, con frecuencia, los abortos no seguros (13). Las normas sociales y las prácticas tradicionales discriminatorias de algunas regiones ponen a las mujeres en una posición de inferioridad y en mayor riesgo de peligros para la salud relacionados con la reproducción, incluso la incapacidad y la muerte. Estas prácticas nocivas incluyen: abortos por selección del sexo, infanticidio femenino, mutilación/corte de los genitales femeninos, descuido de las niñas, matrimonios tempranos y a la fuerza, herencia de esposas, violencia y discriminación contra las viudas, violencia relacionada con la obtención de dotes, prostitución, y tráfico de personas con el propósito principal de explotación sexual. El acoso sexual y la violencia son comunes en los lugares de trabajo, las instituciones educativas, las instituciones correccionales y también en los deportes. En áreas donde se producen conflictos armados y desastres naturales, las mujeres están en mayor riesgo de sufrir violencia física y sexual (1, 3) En algunas sociedades, la violencia contra las mujeres es tan común que las mujeres han aceptado que tales actos son ‘normales’ y ‘aceptables’ (13). Con frecuencia, las mujeres abusadas se muestran renuentes a buscar ayuda porque, por lo general, no se encuentran disponibles establecimientos seguros y que brinden apoyo. El miedo y la estigmatización pueden hacer que las mujeres se muestren renuentes a divulgar su dolor y sufrimiento (2). Se encuentran vigentes leyes y políticas internacionales establecidas para abordar y afrontar esta importante cuestión de salud pública y derechos humanos (13), pero el hecho de que el problema persiste indica que las leyes y la legislación, en los lugares donde existen, no se implementan de manera efectiva. Para controlar esta amenaza en forma efectiva, debe adoptarse un enfoque multisectorial que involucre servicios de salud, legales y sociales. Debe haber una muestra de compromiso político y disponibilidad de recursos adecuados para brindar estos servicios necesarios. La violencia de género solo puede erradicarse abordando la discriminación de género y promoviendo la igualdad de la mujer y el otorgamiento de poder a la mujer. La legislación debe penalizar todas las formas de violencia contra la mujer y debe implementarse en forma adecuada y efectiva. Copyright International Association for the Study of Pain, September 2007. References available at www.iasppain.org.