181111 – Fr. Neal Longe

Traducción Nota: Este texto ha sido traducido mediante un traductor en línea automatizado. Pedimos disculpas por cualquier error. Si hay alguna manera de que podamos mejorar nuestra traducción, por favor háganoslo saber. Dejanos rezar. Amantísimo bondadoso Padre, te damos gracias y alabamos esta mañana. Oramos para que el Espíritu Santo estaría sobre nosotros a abrir el corazón, para escuchar su voz. Que tu palabra puede hablar y su palabra recibida en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Hay un tema que conecta todas nuestras lecturas, incluyendo la canción, y todos empiezan a preguntarnos dónde está nuestro corazón y ¿Dónde ponemos nuestra fe y nuestra confianza? Y como Jesús en el pasaje del Evangelio, se nos dice varias cosas están sucediendo aquí. Se da esta advertencia que ten cuidado con los maestros de la ley que le gusta caminar con sus túnicas y al ser recibidos en las plazas, y ocupar asientos en las sinagogas y los lugares de honor. Y la cautela no es donde está el corazón es la carga que Jesús hace en contra de los líderes religiosos que buscan su propio honor y su propia gloria en lugar del honor de Dios y la gloria de Dios. Y luego prosigue, como se nos dice que él se sienta frente al plato de la ofrenda en la que estaban poniendo su dinero en el tesoro del templo. Y oímos muchas personas ricas que lanzan en grandes cantidades de dinero, pero esta viuda pobre viene y se pone en estas dos monedas o es el único un centavo o un poco traducciones incluso decir una fracción de un centavo. Diríamos casi nada. Pero Jesús dice: Yo te digo la verdad. Esta pobre viuda ha echado en el tesoro más que todos los demás. Se dio lo que les sobraba, pero ella, de su pobreza, echó todo lo que tenía para vivir. Y lo que vemos aquí es entonces Jesús no ha centrado en el dinero. Está centrado en la diferencia en el corazón y la confianza de las personas que están haciendo estas diversas ofertas. Y Jesús llega a decir que debido a que vemos aquí en el pasaje del Evangelio en el que algunos diríamos quizá hecho algunas donaciones de su abundancia y algunos más con sacrificio dio como esta viuda. Pero es Jesús, que dio lugar, como Él dio su vida por nosotros. Y así como Jesús, como nuestro ejemplo de la entrega total del enfoque aquí no está en el dinero, sino en el corazón de la viuda y la declaración de fe thats de hecho como ella da todo lo que tiene. Bueno, ¿cómo se hace eso es sólo si confía en que Dios va a cuidar de ella y que su sacrificio a Dios es lo suficientemente importante, ya que de lo contrario se podría decir, bueno, wouldn' t sentido que esta viuda está dando a estos dos centavos o esta centavo, ella no debería hacer eso, diríamos. No tiene sentido en la matemática, sino en el corazón, que reconoce todo lo que Dios ha hecho por ella y su promesa de permanecer con ella para siempre y así lo hace el rendimiento que pueda. El ejemplo es con todo su ser todo lo que tiene, se ofrece ante el Señor, Pero cómo hacemos eso? Sólo podemos hacerlo si confiamos en que Jesús, que ha entrado en el lugar santísimo, no una copia como se dice en hebreo, sino que ha entrado en la presencia del Padre y que está a su lado para interceder en nuestro nombre y que tiene derramado su sangre por nosotros para que nuestros pecados sean perdonados y que tengamos vida. Luego, en vista de ello, podemos decir, lo que los retornos deberíamos hacer para eso? Todo lo que tenemos, todo lo que somos deberíamos regresar a los pies del Señor para la vida eterna y el perdón de los pecados que ha hecho posible en ya través de él. Y Su promesa es proporcionar para nosotros cuidar de nosotros, para ver a través. Y eso no quiere decir que todo lo que sólo va a ser de color de rosa aquí, ya que caminar en esta tierra. Esto significa que tendremos una gran cantidad de carreteras llenas de baches y vamos a tener un montón de grandes momentos y una gran cantidad de luchas. Y en medio de eso, Jesús es el Señor. En medio de esto, Jesús ha ganado la partida. En medio de esto, su lugar es seguro en el lado del padre. Así que podemos ir por la vida luego tratar de manejarlo por nuestra cuenta y yo diría que es inútil y frustrante cuando tratamos de manejarlo por nuestra cuenta. O en todo momento podemos ofrecer toda nuestra vida y nuestro ser entero y todo lo que somos y tenemos al Señor y confiar en que no importa qué, que no nos dejará ni nos abandonará. Eso es sin duda el ejemplo de la viuda aprendido

que no tenía nada, aceites ejecutan a cabo el fin está cerca. ¿Cómo vamos a comer? ¿Cómo vamos a hacer lo que Dios manda y el suministro ya lo largo de todo el aceite del jarro nunca se agota. Esa es la forma en que su obra presencia para nosotros el amor de Dios y su misericordia y su gracia y. Que no importa qué, usted no va a agotar de que no se puede. Él siempre está ahí. Siempre está disponible. Eso es lo que los salmos se refiere. ¿Dónde poner su confianza? Confianza, no en los gobernantes. Gobernantes van y vienen. La confianza no en las naciones, las naciones van y vienen. No confíen en su trabajo o sus amigos o su familia o sus pastores. Ellos van y vienen o denominaciones de iglesias van y vienen. Quiero decir, mira a todos estos lugares que tratamos de poner nuestra confianza, pero todos ellos escandalizaré, ninguno de ellos estará de pie, pero pensar en la cantidad de tiempo y la fe y la confianza que ponemos en esos y en un abrir y cerrar de ojo, que están todo el polvo. Pero Jesús permanece para siempre y es ahí donde nuestro corazón debe estar. Ahí es donde nuestra fe tiene que ser. Ahí es donde nuestra confianza se debe a que nunca nos fallará. Él no va a ninguna parte. Es la única cosa inmueble. El único inamovible que volverá de nuevo y de manera que las buenas noticias para cada uno de nosotros y espero que eso nos hace un poco menos ansioso a medida que avanzamos por la vida y vemos las cosas de arriba abajo y ve las noticias y esto está fallando y que está fallando y esto parece que está pasando, y ahora, ¿qué vamos a hacer? Y es suficiente con ver una emisión hasta que su ansiedad es a través del techo. Donde parece perdido toda esperanza. ¿Crees que deberíamos correr y gritar? ¿Qué vamos a hacer? Podemos tomar el ejemplo de todas las lecturas que tenemos aquí y podemos decir, hoy voy a poner mi fe en Jesús. Ahí es donde está el corazón. Y delante de sus pies hoy poner todo lo que tengo, todo lo que soy y no necesito que temer si va a venir a través. No necesito que temer si mi lugar está asegurado. No necesito que temer si un día Él sólo va a enojar conmigo y salir, él va a permanecer con nosotros para siempre. Así Puestos los ojos, fijemos nuestros corazones, fijamos nuestra mente, toda nuestra vida en Él, y Él nos verá a través. Y si Él es nuestra roca y nuestra fundación, que no importa lo que nos enfrentamos, que nunca será sacudido. Y Dios es fiel a su promesa y le entregará para usted y se entregará para mí. Y no necesitamos ser un pueblo de miedo, porque somos un pueblo de esperanza y la alegría y la paz y el confort y la victoria en el Señor Jesucristo. Y que podamos vivir plenamente en que hoy en día y todos los días por venir. Dejanos rezar. Señor Jesús, te damos gracias por lo que eres, que eres el Señor de nuestra vida y nos pida que su Espíritu Santo nos cortaría libre de cualquier miedo o la duda o la ansiedad o cualquier cosa que nos impide por el que nuestra vida entera a sus pies . Y con la gratitud y el agradecimiento que le ofrecemos todo nuestro ser, todo lo que somos y que tenemos. Que seamos fortalecidos por el Espíritu Santo para vivir en la plenitud de la vida que usted ha ganado para nosotros. Que podamos servir en esta vida, y para todo lo que hacemos y decimos ser a su honor y su gloria. En Jesús lo pedimos en el nombre precioso y santo. Amén.